Cálida fusión: Mumis

CÁLIDA FUSIÓN: MUMIS

En pleno corazón de Arequipa, lo mejor de la cocina italiana se fusiona con la arequipeña en una propuesta atrevida, de enorme atractivo. Así, a la imponente arquitectura del centro histórico y al innegable calor humano, Mumis, añade un motivo más, de gran valor, para tu visita: la más grata experiencia culinaria.

Hace casi dos años, Mumis vio la luz por primera vez y, desde entonces, su propuesta cosecha más y más éxitos. La sencillez y calidad de insumos, base de la mejor cocina italiana, se fusiona aquí con la complejidad y sofisticación peruana, todo con un toque muy de casa, lo que da lugar a platos innovadores y cautivantes. Además, la bella casona en que se ubica, el ambiente cálido y familiar, convierten cada visita en un momento especial como pocos.

Paula Castañeda, la chef e imagen de Mumis, se encarga de la cocina con verdadera pasión: desde el primero hasta el último detalle. Conversamos con ella y su equipo para descubrir más encantos del restaurante.

En Mumis, se enorgullecen de ofrecer una experiencia culinaria única, que parte del cultivo de algunos de los ingredientes en su propio huerto, donde hierbas y frutas frescas crecen sanas y plenas de sabor; las flores, ricas de aroma, y todo es aprovechado en la mesa. La carta de Mumis, en su estilo tan propio, luce una sorprendente variedad: Desde deliciosos Sorrentinos, todo suavidad y equilibrio, de sabor delicado e intenso, al Agnolotti, delicia cremosa en base a zapallo arequipeño horneado, pasando por los estupendos Ravioles de asado de hongos, receta de la abuela, joya culinaria de mágica complejidad, y el Risotto de chupe de camarón.

Pero hay mucho más. Mumis cuenta con su propio pan de masa madre de cuatro años de vida. Y, por otra parte, excelentes tablas de quesos. Aquí, lo mejor de la casa se luce con quesos internacionales, como el Brie Danés y el Manchego Español. Y, acompañando a esta deliciosa selección, tenemos la tradicional mermelada de membrillo, con el toque único de la familia Mumis.

En cuanto a pizzas, aquí lo más clásico de Italia cobra nueva vida con ingredientes de la más alta calidad. La Margherita combina perfectamente ingredientes básicos, pero exquisitos, y la hawaiana, habitualmente contraria a los puristas, aquí cobra carácter propio y original; por otra parte, la estrella: la Mumis de pera y queso de cabra, es toda una sensación con sus sabores dulces y ácidos, una experiencia gastronómica equilibrada y sorprendente. Además, aquí las pastas merecen mención aparte.

En Mumis encontrarás una especial de rocoto relleno, así como los ravioles de adobo, ambas, recetas familiares, auténticos deleites.

Y están, también, los postres: La Tarta de queso quemada es un tesoro, una delicia irresistible inspirada en el reconocido restaurante de la Viña de San Sebastián, con ingredientes y sabores propios de Arequipa, que le brindan un encanto singular. El affogato, el helado de vainilla artesanal, ahogado en un delicioso espresso, y el Bonet con galletas amaretti de la casa, cosa seria.

Por último, la barra, en que los mejores licores y destilados nacionales, frutas, hierbas y demás ingredientes, gracias a una preparación experta, garantizan el valor de la experiencia Mumis con una amplia y variada carta.

Aquí te esperan bebidas propias, de excelente sabor, como el Puchito (de Gin arequipeño, con Matacuy, además de hierbas y especias en balance perfecto, servido en una copa Martini) y el Fraile (una singular reversión del Negroni clásico, hecho con pisco, vermut y absenta, cacao blanco y naranja, servido en vaso de whisky), que una vez los pruebas, te serán inolvidables; y, además, los clásicos: con un Manhattan o un Zombie, no hay pierde.

Todas estas delicias y la excelente atención, que aquí suma a la calidez de casa, el consejo experto del personal, le vienen mereciendo a Mumis el reconocimiento de la más exigente clientela, local e internacional.

Visítalos en Calle Sucre 202 o encuéntralos a través de su página web mumis.pe. En suma, sobran motivos para ir y volver a este estupendo restaurante. ¡Bienvenidos!