La xilografía es una antigua forma de imprimir que sigue vigente, tras una vida de muchos siglos. Consiste en tallar una placa de madera para obtener una matriz de grabado. Con las matrices se pueden reproducir imágenes e imprimir muchas copias. Hoy día son bien diversos los usos que se le da a las impresiones de xilografías, las encontramos en muchos formatos (estampas de grabado, fanzines, ropa, libros, publicaciones de todo tipo). La xilografía y la imprenta transformaron el mundo visual, combi nadas podían reproducir textos e imágenes. Como había mayoría analfabeta, las imágenes se prestaron para la comunicación de las ideas (las estampas religiosas, los libros antiguos). El mun do comenzaba su aceleramiento. La xilografía vive una serie de transformaciones porque había sido reemplazada en cuanto a su uso en la industria de la impresión, llegan nuevas tecnologías gráficas a la imprenta (el grabado en metal, la litografía, hasta la imprenta moderna, si pasamos rápido la historia de la imagen impresa) y la xilografía queda disponible, revive debido al uso en cuanto expresión propia (lenguaje). En los talleres de grabado se desarrolla esta historia. Saltamos al siglo XX. Se imprimen sen das imágenes sobre las luchas sociales y las miserias a las que era sometido el pueblo –lo que no ha cambiado tanto-. Después aparecen métodos experimentales que inciden hasta nuestros días. Se acostumbraba que las xilografías fueran impresas con tinta negra, estrictamente, y luego vino el múltiple uso de las tin tas de colores. Si la tradición era imprimir pleno sin “errores”, se empieza a imprimir lo gastado, las marcas de la madera, los nu dos y las vetas. Se amplían los lenguajes gráficos. Se imprimen todo tipo de imágenes. La xilografía participa de las prácticas experimentales de lo editable. A veces denuncia. Los oficios nos sirven en los tiempos difíciles. En el siglo XXI, la xilografía tiene la dimensión humana de lo hecho a mano, de juntarse a imprimir para la expresión directa. Pasadas décadas de agite impreso, cre ce el interés, se multiplican los festivales, ferias gráficas, mues tras, talleres, recopilaciones de grabados y más. Las impresiones en las calles conviven con los graffitis y las demás pegatinas. Se pueden ver xilografías de todo el mundo, por internet. Muchas impresiones participan del total de las imágenes en circulación. Muchos jóvenes conocen lo que es la xilografía. Invitamos a pro bar su poder, su énfasis gráfico y a participar del futuro que hay que imaginarse, según tengamos ánimo experimental para eso.
Las maderas que más usamos son placas de contrachapado (terciado) y los tableros MDF (sustituto de madera). En el cono sur de Lati noamérica, la industria forestal reemplaza los bosques naturales por monocultivos de pino y eucaliptus -causan estragos en el medio am biente-. Acabaron con la diversidad de maderas, en las tiendas de madera venden casi puro pino. Debemos usar lo que tengamos disponible. Re ciclar es una buena alternativa para conseguir maderas. Hay que tener ganas de experimentar. También hay materiales alternativos de sopor te: linóleo, piso vinílico o pvc flexible.
Una placa de madera común se empieza a transformar en un objeto cuidado. Lijamos la superficie. Se debe usar lijas de grano fino (ma yor a 500), porque las lijas gruesas dejan raspadas. No queremos dejar marcas en la madera, por ahora. Se lija suave para que la superficie quede bien lisa y preparada para recibir la tinta. En adelante, cualquier alteración de la superfi cie de la madera, que interrumpa lo liso, ya sig nifica una marca grabada. Cortes, rasgaduras, tallado, diversas hendiduras, agujeros, etc. Todo graba y sale en la impresión. En las impresiones salen las marcas de las vetas de la madera (se recomienda lijar en esa dirección, las vetas son profundas y no se borran cuando lijamos). Si usamos tableros MDF, también se lija la superfi cie para evitar las porosidades (estas placas no tienen vetas porque son de material prensado). Si se usa linóleo o materiales similares, no se lija, porque la superficie viene lista.
CONSIGA UNA MADERA. LIJAR CON LEVE PRESIÓN HASTA DEJAR LA SUPERFICIE SUAVE. ASÍ VA A IMPRIMIR MÁS PLENO DE TINTA.Podemos dibujar sobre la superficie de la madera, calcar dibujos o fotos, impresiones, etc. Se pueden usar to dos los recursos. Tenemos que conse guir hacer un boceto, una imagen nue va en estado preliminar, que sea una guía para después tallar. Se pueden usar lápices, marcadores, pinceles. Se recomienda usar tinta negra. Se puede usar lápiz mina primero, luego se va incrementando paulatinamente lo ne gro, se dibujan figuras, líneas, puntos. Se hace visible una idea. Si me paso de negro, se puede pintar con blanco para redibujar en este código blanco-negro, reversible. Algunxs grabadorxs cuan do terminan sus dibujos sobre la ma dera, pintan toda la superficie con tinta rojo trasparente (se continúa viendo el dibujo) para que sea más visible el proceso de grabado. Cuando se talla, la marca que dejamos se ve clara, al descubrir la madera (su tono más cla ro) bajo la pintura superficial. También se puede empezar al revés, pintando toda la placa de negro y luego dibujar añadiendo blanco (marcadores, lápi ces, acrílico blanco).
Se recomienda que las primeras pruebas sean imágenes en las que predomine el negro, así se talla menos, lo que es más conveniente.
Tengamos en cuenta que, si se imprime la madera sin tallar, resulta un plano lleno de tinta en la impresión. Este es el primer estado del proceso (fig.1). Si solo se dibuja líneas de contorno que definan una figura sobre fondo blanco, en la xilografía equivale a tallar gran parte de la madera. Siempre se debe recor dar que lo que se talla es lo blanco de la imagen (fig.2). Pero si probamos tallar la misma línea de contorno, vamos a tallar una míni ma porción de la madera y obtenemos una figura de líneas blancas sobre el fondo negro (fig.3). Este ejemplo doble sirve para pensar la cantidad de tallado que es necesario para hacer visible una figura. En la xilografía se aprovecha el contraste figura –fondo, figuras negras sobre fondo blanco (fig.4) o figuras blancas sobre fondo negro (fig.5). Se practica un juego visual de oposiciones y diferencias en blanco y negro. Debemos organizar la in formación grafica. Podemos dividir nuestra imagen (fig.6).
Pensamos la xilografía en blanco y negro (zonas sin tinta y con tinta del impreso) pero aparecen más tonos intermedios por el efec to visual de las tramas (como si hubiera gri ses). Pequeños grafismos que se acumulan o se disipan (cruces, puntos, rayas). La imagen está llena de pasajes de lo claro a lo oscuro. Ya sean cambios graduales o abruptos. Con la xilografía obtenemos un rango de lo visible que reconocemos como nuestras imágenes. La sugerencia es probar diferentes tallados y ver como las diferentes marcas pueden in teractuar, dentro de las imágenes.
Para tallar la madera usamos gubias, que son unas herramientas con punta filosa, de diferentes formas, de filo cóncavo (ver cua dro). Se acostumbra el uso combinado de distintos tipos de surcos, según la forma de los filos y su tamaño. También se usa buril, que es una herramienta que tiene un pequeño filo de punta, que hace líneas muy finas. Recomendamos cualquier elemento que pueda alterar la superficie de la madera, lo que deja una huella, un hundimiento, cuchi llos, clavos, elementos cortantes, cepillos metálicos, taladros, etc. Se consiguen formas de la imagen propias de las diferentes herra mientas y la variedad de usos personales. Incluyendo las formas accidentales de tratar con la resistencia (la dureza) de la superfi cie. El boceto sirve como una guía abierta. No quedamos obligadxs a un tallado que copia. El tallado deriva en información visible im presa. Aparece lo que no se esperaba y toma importancia. Las zonas gráficas de nuestra imagen son el relieve mismo de la madera, las partes que quedan sin tallar. El tallado es un proceso de reducción de la superficie de la madera, selectivo, que dibuja. Del boceto a las gubias, hay que tomar decisiones.
El dibujo previo pasa por el filtro de la xilo grafía y resto de información queda en el ca mino. Y ocurren las improvisaciones. La ima gen xilográfica es una imagen resumen. Hay que explorar las posibilidades del proceso de tallado. Ambas manos se ayudan para ha cer ajustados movimiento cuando toca tallar. Se necesita que las gubias tengan buen filo, sino es más peligroso, porque se hace fuerza demás y nos podemos cortar –a manejarse con cuidado-. Para tallar giramos las pla cas de madera constantemente, se acomoda la posición cuanto sea necesario según nos convenga, para encarar un buen nuevo corte. Nuestras manos tienen la doble función de cortar con las gubias, y servir de apoyo para fijar la madera a la mesa mientras se corta.
Formas de las puntas de las gubias
Para imprimir vamos a usar tintas gráficas, que son las tintas de las imprentas. Las mis mas que imprimen los diarios, los libros, las revistas y más. Es tinta espesa y grasa -tipo cremosa-, lista para hacer mezclas, funciona como concentrado de color porque tiñe abun dante. Hay de los colores básicos: Cyan (Azul), Magenta (rojo-rosa) y Amarillo, también hay tinta negra y dos tipos de blanco. Se combi nan para obtener una amplia gama de colo res. Las tintas son de principio trasparentes, los colores obtienen su luminosidad dejando ver el papel (por ejemplo, si se imprime rojo sobre papel negro, no se nota la impresión, debido a la trasparencia de la tinta). La tin ta blanco trasparente se usa en las mezclas de tinta, para manipular la trasparencia (au mentarla), para combinar colores por sobre impresión (donde 2 colores pueden resultar más colores cuando se combinan en el im preso, en las intersecciones entre las dos capas de impresión). Por otra parte, si añadimos blanco cubriente a nuestros colores, se puede imprimir claro sobre oscuro, porque tapa lo que queda abajo, sea el papel u otros colores impresos. Cubre incluso sobre negro. Dentro del ámbito del grabado, también hay tintas al agua, metalizadas, flúor, barnices trasparentes, toda una variedad.
La tinta se debe poner primero sobre un vi drio. Luego de varias pasadas de rodillo, se consigue una zona del vidrio entintada con una capa pareja de tinta, que no debe tener excesos visibles (si hay exceso de tinta, las líneas delgadas, los pequeños detalles de la imagen se pueden perder, cubiertos de tinta desaparecen de la impresión). El rodillo se carga de tinta al mismo tiempo que pasa so bre el vidrio. Y luego lleva la tinta a la madera. Se debe practicar cómo conseguir la medida justa de tinta, a contraprueba, mirando las impresiones que nos resultan, así revisamos el proceso de entintado. Se tiene que apren der a evitar que nos queden impresiones gastadas (por falta de tinta) o reventadas (por ex ceso). Un rodillo en buen estado nos permite de forma precisa poner tinta a todo el relieve de la superficie de la madera. Siempre sin tocar las zonas talladas (bajo-relieve), debi do a que son rodillos de gomas semiduras y también que se aplica tinta de a poca cantidad (una delgada capa de tinta cubre el rodillo) en sucesivas pasadas, durante las que el rodillo cada tanto vuelve al vidrio a tomar tinta, y lue go vuelve a la madera.
Recomendamos el uso de todo tipo de pape les. Los resultados de la impresión varían se gún el papel en que se imprima. Sugerimos que se considere el papel según el uso de las impresiones. Los papeles delgados son más adecuados para la impresión a mano. Con prensa de grabado –como hace cantidad de presión- podemos imprimir papeles gruesos, incluso cartones.
Para la impresión a mano se pone más tin ta que si usamos prensa, debido a las dife rencias de presión. Conviene imprimir sobre papeles baratos si vamos a hacer pegatinas en las calles. También se pueden probar los papeles de buena calidad (con porcentajes de algodón, sin tanto químico). Se puede im primir sobre papel artesanal. Se puede imprimir sobre tela, para eso debemos cargar mas tinta a la madera -darle más pasadas de rodillo-. Son hartas las condiciones que se ajustan y que determinan las futuras im presiones. Alentamos a aprender haciendo pruebas de impresión.