Pescadores -Territorios y herbarios costeros marinos
Hay numerosas iniciativas Mediterráneas de conservación, ampliación y mejor uso de los herbarios de Posidonia. Una de ellas es la utilización de las hierbas muertas que el mar desecha y quedan depositadas en las orillas de las playas, donde juegan un rol clave contra la erosión. Estas hierbas se descomponen al sol generando malestar a los bañistas/turistas, quienes durante el período junio/ septiembre -en el Mediterráneo- aportan hasta el 80% de los recursos monetarios anuales que reciben los pueblos costeros.
Una iniciativa notable de cooperación público privada en el uso de estos “desechos” la realiza el municipio de Polica (Región Campania, zona de Cilento), los pescadores, una empresa privada -que instaló un biodigestor- , y varios actores del ecosistema: escuelas, hoteles, restaurantes, etc. Las hierbas muertas son retiradas parcialmente de las playas, lavadas en la planta de tratamiento de las aguas negras/ servidas de la ciudad, la arena retirada es devuelta a la orilla y las hierbas son usadas para producir biogás que genera electricidad para 500 familias. El residuo restante se usa como compost con los agricultores locales (desde hace miles de años los agricultores ya la venían usando con este propósito) .
La división de roles entre los actores del ecosistema económico es particularmente valiosa. La alcaldía se ocupa de la “ingeniería social” de todo el proceso: desde la sensibilización, la convergencia de intereses parciales de diferentes actores, la contabilidad social y económica de los beneficios. Así como de conseguir apoyos financieros e institucionales necesarios. La empresa privada: de todos los procesos tecnológicos incorporando continuas innovaciones.
La gente de mar - quien estuvo al origen de la iniciativa- controla el manejo del territorio costero donde el mantenimiento y ampliación de la Posidonia viva es la condición fundamental.
Ello requiere de múltiples acciones como, por ejemplo la de impedir los anclajes de embarcaciones de turismo en los herbarios submarinos y proveer sistemas de boyas alternativas para el atraque en acuerdo con la capitanía de puerto. Otra iniciativa es la del recojo continuo de plásticos y otras basuras y su separación y reciclaje por empresas adecuadas. Para ello los pescadores cuentan con el apoyo de científicos de las Universidades de Genova (Italia) y de Toulon (Francia) en un programa común con financiamiento europeo (Interrereg) que se focaliza crecientemente en los daños de los micro plásticos, usando varias tecnologías y en particular estudiando las lisas/mugine (pescado “come basura” de todos los puertos) que ingieren enormes cantidades de estos micro plásticos (al igual que los moluscos que luego de filtrarlos del agua los devuelven dentro de sus desechos orgánicos).
El rol protagónico de los pescadores continúa creciendo desde que se derogó la ley que originalmente preveía que la basura marina (capturada en las redes) debía ser recogida y tratada por los pescadores a su propio costo. Lo que hacía que estos la devolvieran al mar. Se cambió la ley que define ahora esos desechos como urbanos y por tanto no son responsabilidad de los pescadores. Esta ley, aprobada en 2022 , por unanimidad en el Parlamento tiene sin embargo un largo camino para su verdadera aplicación (https://lexambiente.it/materie/sviluppo-sostenibile/182-dottrina182/16923-legge-sallvamare.html)
En el puerto de desembarque se han establecido “Eco islas” de recojo y tratamiento conectadas a Internet de los objetos y en formatos muy estéticos que valorizan (con fotos e historias) a los pescadores protagonistas. Los pescadores obtienen ingresos de su actividad principal de extracción pesquera responsable y crecientemente de actividades de pesca-turismo que incluyen formación ambiental a los turistas y cocina en la propia embarcación del producto pescado. Son remunerados también por su rol de extracción, clasificación y reciclaje de desechos.
Así, como por su trabajo en ayuda a la recolección de datos científicos, protección del ambiente y se espera también poder remunerarles por su trabajo de protección a especies (tortugas, delfines) que -aunque fuera con montos pequeñospueden ser un ingreso parcialmente compensatorio. En especial durante los periodos de veda o no pesca.
Este es un claro ejemplo de nuevas formas inteligentes y distintas de manejar integralmente áreas marinas independientemente que tengan el status legal de “protegidas”. La clave es: con los pescadores al centro. Esto es operar durablemente con los actores locales en ecosistemas biológicos y económicos específicos y dejar de pensar y actuar a través de la corta óptica proyecto/ financiador /ejecutor/ intermediarios. Hay más por hacer, como establecer premios monetarios y compensaciones a Municipalidades con innovaciones y resultados y a pescadores virtuosos.
Un sueño del alcalde es “Hagamos como Japón donde casi no hay basureros en la calle porque la gente lleva a su casa la propia basura. Empecemos por ser japoneses en todas las áreas que deben ser protegidas”
Una demanda de muchos participantes para evitar encontrar tantos desechos urbanos en el mar: apliquemos el sistema de devolución con pago a los clientes en los supermercados de los envases de vidrio, metal y plásticos que se emplea en Finlandia y países escandinavos. El cliente llega con sus envases separados, los mete en máquinas y recibe un ticket de caja que puede hacer efectivo o usarlo por sus compras en el super.
A titulo de mi experiencia propia, una botella grande de Coca Cola, devuelta en Helsinki, permite recuperar 1.30€ . Para la anécdota hace unos 2600 años en esa región vivió el filósofo griego Parmenides y se ve que sus coterráneos sigen pensando/ creando.
Este articulo es un resumen comentado de la presentación hecha por los actores de Polica en un encuentro público en Genova (04 de junio 2023 ) en el marco de la feria anual de Slow Fish.
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