¡El Pacificador!

Page 1

¡PRESIDENTE SANTOS! El sueño de la Cena de la paz, se ha cumplido dos veces; y se seguirá cumpliendo; el primero, cuando un fuerte ventarrón volteo la bandeja y se rego la ensalada; (El secuestro del General,) el segundo, cuando tropezó en el sardinel y se volvió a voltear la bandeja; y muchas personas estaban animándolo, y otras lo estaban abucheando; (La masacre de la Esperanza,) Y El resto se seguirá cumpliendo con un mejor perfil, Presidente Santos, El “Dios”


de los dioses, respalda protege y ayuda, a los pacificadores; Mateo, 5:9. Presidente, la hora más oscura es justo antes del amanecer, cuando parece que hemos tocado fondo, todavía sigue brillando una luz de esperanza, y al despuntar de un nuevo día, en el filo del horizonte, resplandecerá el sol muy sonriente, y aplaudiendo por el triunfo de esa paz que tanto anhelan los Colombianos. Presidente, si el rio tiene mucha turbulencia y es difícil de pasarlo a nado; pase el puente sin mirar atrás, y derríbelo, porque lo que queda atrás, es una tierra estéril que ya no da buen fruto, y la tierra que está al otro lado del puente es una tierra fértil, y dispuesta a dar buen fruto; riegue mucha semilla en el valle, y suba a la montaña, y podrá ver una gran variedad de flora primaveral, que disfrutaran con mucho entusiasmo y alegría todo el pueblo colombiano. ¡Presidente, su tarea no ha sido muy fácil de realizar! Pero el que tiene fe, y coraje, de subir hasta la cima de la montaña; cuando lo ha logrado, tiene todo el derecho y la libertad de gritar con todas sus fuerzas, ¡eh, triunfado!


Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas ellas le librara el Señor. Salmos. 34:19. Presidente Santos, que bueno sería que en bolsillo de su camisa mantenga siempre Salmo 91, el Señor nunca te fallara; siempre está de nuestro lado cuando somos leales con él. Podemos ver y escuchar su voz, diciéndonos aquí estoy para ayudarte. Cuando despierto en la mañana, veo un resplandor en mi ventana, se que eres tu Señor, que estás ahí, para ayudarme, a empezar un nuevo día. Cuando miro a la montaña, veo que el sol está saliendo, se que eres tu Señor, que estas ahí, para ayudarme a empezar un nuevo día. En medio del arboleda, escucho el trinar de un ruiseñor, se que eres tu Señor, que estas ahí, para ayudarme, a empezar un nuevo día. Cuando voy caminando, el viento juega con mi cuerpo, se que eres tu Señor, que estas ahí, para ayudarme, a empezar la jornada. Cuando paso por el puente, escucho el murmullo del rio, se que eres tu Señor, que estas ahí, para ayudarme, a continuar mi jornada.


En el umbral de la noche, veo las estrellas brillando, se que eres tu Señor, que estas ahí, para cuidarme, en el trascurso de la noche. Que seria, de mí sin ti Señor, sin la esperanza y la fe que me da, Que sería, de mí sin ti Señor, sin la fuerza y el poder que me da. Que seria, de mí sin ti Señor, sin la sabiduría y el amor que me da.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.