Alternativas para el Manejo Reproductivo. Introducción: El objetivo de toda empresa pecuaria, sea lechería especializada, producción de becerros o de doble propósito, es lograr un intervalo entre partos de 365 días, una cría y un ciclo de lactación por año. Para lograr este objetivo es muy importante considerar que existen muchos factores involucrados en el proceso productivo, tales como genética, alimentación, reproducción, sanidad, etcétera. No existe un solo factor al que pueda atribuirse el éxito o el fracaso de la empresa ganadera. Debe haber una integración de conceptos y manejo específico, buscando el equilibrio entre cada uno de los factores involucrados.
3.1 Producción eficiente de becerras La crianza eficiente de becerras constituye uno de los propósitos fundamentales de la empresa pecuaria, porque son el futuro de la explotación. La crianza de becerras, depende estrictamente de un programa adecuado de alimentación, que incluya la satisfacción de todos sus requerimientos nutricionales, así como un programa de sanidad que ayude a preservar la salud y permita su óptimo desarrollo. 3.1.1 Importancia del balance Fósforo-Calcio. La crianza óptima de la becerra, no inicia cuando nace o es destetada. La crianza inicia desde el momento que se encuentra en vida intrauterina, pues aún cuando la economía nutricional de la vaca, aporta preferentemente los requerimientos nutricionales para el adecuado
desarrollo embrionario, la vaca que padece de algún tipo de estrés alimentario, indudablemente, lo reflejará al momento del parto e inicio de la lactación. Manifestándose como partos prolongados, retención de placenta, problemas metabólicos como cetosis o hipocalcemia, paresia posparto e incluso problemas de inicio de lactación. La vaca tiene tres momentos críticos de demanda de Calcio: -Durante la última etapa de la gestación; debido a los requerimientos de Calcio para la osificación del becerro. -Durante el momento del parto; debido a que el Calcio tiene una participación importante en el proceso de contracción de músculo liso. Se requiere para el trabajo de parto y para la expulsión de placenta. -Durante el inicio de la lactación; dado que el Calcio forma parte de los componentes químicos de la leche. Es muy importante que exista una óptima biodisponibilidad de Calcio al momento del parto. Es decir que la vaca pueda tener acceso a este, dado que aún cuando la vaca haya tenido un aporte adecuado en la dieta durante la etapa de gestación, es muy probable que durante el parto no pueda ser removido oportunamente y este es un momento crítico en el que existen altas demandas de Calcio. En el ganado de doble propósito, los desbalances de Calcio se deben básicamente, a que existe un problema en la asimilación de Calcio a nivel intestinal, debido a la formación de sales con otros elementos y a otros factores como la deficiencia de Fósforo en el suelo, dada la íntima relación que existe entre ambos minerales. 3.1.2 Control endocrino del metabolismo del Calcio-Fósforo Los niveles normales de Calcio en el bovino son de 9-11 mg/100 ml. Estos valores permanecen constantes y guardan una íntima relación con la concentración de Fósforo sanguíneo que son de 4-7 mg/100 ml. La
proporción entre Calcio y Fósforo es aproximadamente 2:1 y el mecanismo endocrino del animal tiende a conservar esta proporción. Cuando una vaca durante el periodo seco o la última etapa de la gestación es alimentada con una dieta adecuada o alta en Calcio, los niveles sanguíneos se mantienen en equilibrio, dado que los excedentes son depositados en el lecho óseo para establecer un depósito de reserva corporal. Este mecanismo es mediado por la hormona Calcitonina, producida por la glándula Tiroides y que también tiene como función regular los niveles de Fósforo, promoviendo su depósito a nivel óseo y la excreción de Fósforo y de Calcio a nivel renal. El metabolismo del Calcio también está mediado por acción de la hormona Paratiroidea, producida por la glándula Paratiroides, que tiene la función de remover el Calcio óseo ante demandas elevadas de Calcio, generalmente al momento del parto y al inicio de la lactación. El metabolismo del Calcio y el Fósforo, también está mediado por la presencia del 1,25-dihidroxicolecalciferol, metabolito activo de la vitamina D3, que se produce por fotosíntesis en la piel del animal y cuyo efecto es favorecer la absorción de Calcio y Fósforo a nivel intestinal. En el ganado de doble propósito, sometido a sistema de alimentación en pastoreo, es muy común, sobre todo en la zona costera del golfo, que exista una deficiencia de Fósforo en el pasto, debido a que el exceso de lluvias arrastra por lixiviación las sales de Fósforo hacia los lechos profundos de la corteza terrestre. De tal forma que al existir un estado de hipofosfatemia, exista como consecuencia un estado de hipocalcemia subclínica que se manifiesta hasta el momento del parto. Los niveles elevados de Calcio y Fósforo por tiempo prolongado, inhiben la síntesis de hormona Paratiroidea y del 1,25dihidrocolecalciferol, lo que trae como consecuencia que ante demandas
altas de Calcio, no pueda ser removido a partir del hueso ni pueda ser absorbido a partir del intestino. La dosis externa de Vitamina D, no es eficiente dado que su efecto suele presentarse hasta 10 días después de su aplicación.
3.1.3 Papel del Fósforo en los problemas metabólicos. El Fósforo exógeno, puede ser usado con el propósito de prevenir los problemas metabólicos, que normalmente se desencadenan en el momento del parto. Una dosis de Fósforo 5-10 días antes del parto, tiene como efecto inicial, provocar un “desbalance controlado” entre la relación CalcioFósforo sanguíneo. Lo que se busca con esta dosis, es elevar los niveles plasmáticos de Fósforo. El organismo de la vaca, interpreta esto como un desbalance entre la relación Ca-P y a través del Sistema Endocrino, tenderá a equilibrar la proporción entre ambos minerales. La respuesta inicial será elevar los niveles de Calcio. Para este efecto existen dos rutas; Una incrementar la absorción de Calcio a nivel Intestinal, que no se da por falta del 1,25 dihidrocolecalciferol y otra; promover la remoción de Calcio óseo mediante la acción de la hormona Paratiroidea, que se encuentra inhibida y que gracias a este estímulo iniciará su síntesis. Los niveles adecuados de hormona Paratiroidea, con el propósito de ser funcionales, se alcanzan aproximadamente 5 días después de la aplicación de Fósforo, de tal forma que al momento del parto, ante una demanda real de Calcio, exista ya el mecanismo para la remoción efectiva del Calcio óseo. Esto evitará la presentación de desordenes clínicos y metabólicos postparto consecuencia de un estado de hipocalcemia clínica o subclínica.
3.1.4 Participación del Fósforo en el desarrollo físico de las becerras. El Fósforo igual que el Calcio, constituye la fracción iónica del mineral óseo. También participa en diversos procesos metabólicos. No obstante, los síntomas de carencia se reflejan solamente en el esqueleto y corren paralelos a la deficiencia de Calcio. La deficiencia de Fósforo, puede presentarse por carencia primaria de la dieta, en animales que pastan sobre potreros pobres en Fósforo o por déficit secundario, por exceso de cationes como calcio, hierro y aluminio, que forman complejos insolubles no utilizables por los fosfatos. El Fósforo en los pastos, es proporcional al que contienen los suelos, pero las cantidades se modifican considerablemente, tanto por la composición de los forrajes como por su desarrollo. Algunas plantas concentran el Fósforo con mayor facilidad que otras. Las hojas tiernas tienen alta proporción de Fósforo que disminuye conforme madura. El nivel de Fósforo disminuye del tallo y las hojas y se concentra en la semilla. Los pastos pobres en Fósforo, suelen ser también pobres en proteína y otros elementos como la Vitamina A. Los bovinos con hipofosfatemia, muestran además otros signos como problemas de infertilidad. Cuando la deficiencia se da durante la gestación, el becerro nace en condiciones normales, a expensas de la vaca que suele sufrir, paresia posparto. El proceso de la lactación es anormal, pero el crecimiento de la becerra es deficiente y esto se acentúa durante el destete. La becerra se ven demacrada, delgada y el con pelo áspero e hirsuto que mudan muy lentamente. Cuando la carencia de Fósforo se hace crónica, se pueden desarrollar síndromes de osteodistrofia, dado que el Fósforo, igual que el Calcio, participa en la síntesis de la matriz ósea y en su mineralización. Los
síndromes que presenta la becerra afectada crónicamente por la deficiencia de Fósforo, varían entre si según la edad. Las becerras en desarrollo pueden presentar cuadros de raquitismo; en animales maduros cuadros de osteomalacia y en adultos o viejos problemas de osteoporosis. En la presentación de estos síndromes, están involucrados tanto la deficiencia de Vitamina D, como del Calcio. Los animales cuya dieta depende exclusivamente del pastoreo sufren en mayor o menor grado carencia de Fósforo. En vacas adultas, el síndrome de deficiencia fosfórica, puede ir acompañado por el cuadro clásico de hipofosfatemia, caracterizado por paresia posparto, hemoglobinuria puerperal y anemia. El Fósforo además de su importante participación en el desarrollo del becerro y su importante participación en el proceso reproductivo, también participa activamente en varios procesos metabólicos, específicamente aquellos en los que participa el Adenosina Trifosfato (ATP), como mediador de la liberación de energía, la transferencia de energía biológica, procesos de fosforilación oxidativa y el efecto buferante para equilibrar pH metabólico. El Fósforo también tiene una participación importante en la formación de elementos estructurales, mediante la formación de puentes fosfóricos en triglicéridos y ácidos grasos que forman la estructura de células grasas.
Conclusión: El Fósforo es indispensable para el desarrollo eficiente y rentable de los becerros y becerras. Los cuadros de Hipofosfatemia en becerras, no necesariamente presentan el cuadro clínico tradicional de vacas adultas. La deficiencia de fósforo se da tanto en animales en desarrollo como en animales adultos.
Las becerras requieren de un adecuado aporte de fósforo dado que estas, pueden padecer hipofosfatemia desde su vida intrauterina. El síndrome de hipofosfatemia, puede ser tratado y controlado y prevenido mediante el uso de fósforo inyectable. Phospho 20 : Es un reconstituyente y estimulante del metabolismo elaborado a base de Fósforo orgánico al 20 % en solución acuosa. La dosis recomendada es de 1 ml por cada 40 kg de peso vía I.M. o S.C. 10-15 ml en bovinos adultos y 3-5 ml en becerras. Obras consultadas: (Ver al final del capítulo)