ORAR EN EL MUNDO OBRERO
4º Domingo del Tiempo Ordinario (28 enero 2018) Comisión Permanente HOAC
El signo del vivir actual es la incoherencia. Todo se hace, incluso cosas grandiosas, sin ton ni son (Rovirosa, OC, T.VI. 242).
Toda la vida de Jesús, su forma de tratar a los pobres, sus gestos, su coherencia, su generosidad cotidiana y sencilla, y finalmente su entrega total, todo es precioso y le habla a la propia vida (EG 265). Una mirada a la vida
Nuestra vida dice algo de Jesús cuando es una vida coherente con nuestra fe, cuando vamos creciendo en el sentir, pensar, y vivir de Jesús de Nazaret. La verdad de nuestra vida es esa coherencia con lo que estamos llamados a ser. Nuestras prácticas y actitudes si van por otro lado distinto, manifiestan lo que aún nos queda por convertirnos. Repasa tu vida de esta semana. ¿Cómo andas de coherencia personal? Palabras de vida
Las palabras de los políticos pronuncian promesas vanas. Sus discursos son capciosos. Con elocuentes palabras ocultan sus ambiciones personales. Ensayan lo que tienen que decir para convencernos. Son palabras vacías y muertas. Las tuyas, Señor, son Buena Noticia. Las palabras de la publicidad no dicen la verdad de las cosas. Susd anuncios están pensados para seducirnos, para incitarnos a un consumo ciego. Por los oídos y los ojos martillean nuestra sensibilidad y llegan a nuestra cartera. Son palabras ilusorias y engañosas. Las tuyas, Señor, son Buena Noticia. … Mientras unos y otros utilizan las palabras para esconderse tras ellas, para disimular sus intenciones, para halagar los oídos,
para disfrazar sus intereses, para camuflar mentiras… Tú, Señor, te revelas en tu Palabra, tú mismo te haces Palabra viva en el tiempo. Por eso las tuyas, Señor, son Buenas Noticias. 1