BREVES PROCESO DE COMUNICACIONES - HOGAR DE CRISTO
Padre Eduardo Vega, S.J. UN “SEMBRADOR DE LA PALABRA” “La misión de un sacerdote es sembrar la palabra y que èsta sea escuchada, aceptada y dé frutos. La palabra debe de ser viva y eficaz; viva, por quien la oye y eficaz porque hace lo que dice. Una palabra que no nos lleva a la acción y a la transformación es una mala palabra” La misa para conmemorar el aniversario 50 en la Compañía de Jesús
del Padre Eduardo Vega, S.J, director de Hogar de Cristo, arrancó con la Parábola del Sembrador y un proceso de reflexión impulsado por el Arzobispo de Guayaquil, Monseñor Luis Cabrera, quien presidió el acto religioso en una concelebración con integrantes de la comunidad jesuita, encabezados por el Provincial Gustavo Calderón S.J y por el Delegado de Educación de la Compañía, Fabricio Aldaña, S.J.
Padre Fabricio Alaña:“Diosidencias”: “50 años del Secretariado Social y Ecológico, 50 años de Hogar de Cristo, 50 años de jesuita del Padre Eduardo: “No son coincidencias, son Diosidencias (Dios). Las 3 oportunidades se entrecruzan en el momento histórico de Hogar de Cristo, hoy, para mí que con Fe y Alegría son las obras sociales de mayor impacto e influjo en el mundo de los pobres de nuestro país; el mejor legado de los jesuitas que han hecho esta Provincia, y el mayor desafío que hoy se tienen para estar a la altura de los tiempos y retos que se plantea la sociedad y el mundo roto que vivimos”
La máxima autoridad de la Iglesia, quien calificó de “oportuna” la celebración, aprovechó este momento para preguntar al padre Vega cómo la palabra se encarnó en su vida y cómo el sacerdocio se convirtió en palabra. Entonces, a partir de este momento, la cita promovida por los miembros del Directorio y apoyada por la Asamblea de la organización, contó con espacios llenos de bellezas inesperadas, en donde se dieron intervenciones por parte de su familia jesuita y los presentes. Sobre las bancas integrantes del Directorio y algunos representantes de los colaboradores abrigaban con la oración al Padre Eduardo. El acto se realizó en las instalaciones de la Unidad Educativa Javier.
Roger Arosemena, Presidente del Directorio: “Yo he tenido la suerte que
por mi vida han pasado tres personas de corazón grande y de alma limpia, dos están en la morada del Señor, gozando de su contemplación; la otra persona es Eduardo: Ellos me enseñaron lo que predicó San Juan Crisóstomo en los años 400: Si quieres honrar el cuerpo de Cristo, no lo descuides cuando se encuentra desnudo, no lo honres aquí en la Iglesia con ropas de seda para descuidarlo fuera donde tiene frío y está desnudo. ¡Muchas gracias por tus silenciosas enseñanzas y gracias a nombre de todos lo que hacemos HC por tu entrega incondicional a los sin rostros!”
María
“Fui un pedazo de barro en las manos del alfarero” Voy a resumir los 50 años en la Compañía de Jesús con imágenes bíblicas. Desde el 7 de enero de 1970 hasta la ordenación sacerdotal, el 10 de octubre de 1982. “Fui un pedazo de barro en las manos del alfarero. El alfarero es Dios y trabajaron los formadores de la Compañía de Jesús. Me había graduado en un colegio jesuita, entré con una fe sencilla y rudimentaria. -Imagen de mi Formación.Después comencé a ejercer el Ministerio Sacerdotal: imagen de la multitud que clama a Jesús. Jesús sálvanos, Jesús, ayúdame, límpiame…es el clamor, dolor y sufrimiento que me llama a servir. Yo llegué a través del Magisterio de la Iglesia, de las Conferencias Episcopales, que invitaban a caminar junto a los más pobres. Gracias por acompañarnos, a la Compañía de Jesús a la Iglesia, Asamblea. Caminando caminando y celebrando juntos”.
años
50
Sirviendo a los pobres
Josefa
Coronel
(Directorio):
“Amigo querido de pocas palabras y de largas reflexiones; de perfil bajo y de una resistencia que no entiendo; amigo querido que nunca ha buscado la gloria y la fama y se ha preocupado siempre por los demás”. No son palabras de regalo, es un acto de justicia”.