EDICIÓN GRATUITA A NIVEL LOCAL, NACIONAL E INTERNACIONAL N°1268-CHICLAYO, 27 DE AGOSTO DE 2021-LAMBAYEQUE-PERÚ EDITORIAL
SEMBRANDO ESPERANZA Caminar por las comunidades polvorientas y olvidadas de nuestro alicaído país, es una manera de estar en el mundo. Hacer las cosas con cariño tiene que ver con la generosidad, con el desprendimiento, con la caridad, por aquellas familias que luchan día a día por sobrevivir. Cuando las cosas se hacen con cariño, con ilusión, con ganas de ayudar, con corazón, con empatía… el resultado va mucho más allá de un trabajo bien hecho y se convierte en ese algo tan especial que llega al alma y emociona de tanta felicidad al finalizar una jornada de trabajo y desprendimiento. Es increíble y satisfactorio, como a lo largo de estos más de cincuenta años caminando de la mano con la institución juvenil más importante del planeta, el escultismo, hemos podido llegar al corazón de miles y miles de hermanos nuestros de los pueblos, lamentablemente, dejados de lado por su estado, por su pobreza, por su desencanto, por los gobiernos de turno, con pequeños cariños entre manos, sembrando esperanza y consuelo. Estos pequeños encantos y cariños entregados a lo largo de todos estos años, han sido un poco de útiles escolares para esos niños indefensos al inicio de su nuevo año escolar; unos pequeños paquetes de víveres para saciar el hambre de hombres y mujeres castigados por la indiferencia y la marginación; ropita usada, pero en buen estado, recogiéndolos por calles y avenidas de personas generosas para abrigar a otras personas que mueren de frio en las partes altas de la región lambayecana; entregando juguetes y chocolatadas a los niños en su fiesta de fin de año; entre otras buenas acciones. Es increíble y satisfactorio, también, indicar que, todos estos cariños y encantos que venimos entregando a todas las familias menesterosas de nuestros pueblos olvidados, ha sido y seguirá siendo, gracias a los buenos amigos, familias chiclayanas y familiares, que hemos podido convencerlos a lo largo y ancho de todos estos años, que dar sin recibir es lo más preciado que uno puede hacer en este mundo. No contamos con el apoyo económico de nuestras autoridades, que les hace falta para sus apetitos personales, peor del gobierno central, ni somos una ONG que, muy bien, lo podríamos ser para tener toda la ayuda del mundo, pero mejor es así, con nuestros propios recursos y las tremendas limitaciones que tenemos en cada uno de nuestros proyectos de bien social, que nos hacen más fuertes, más generosos, más serviciales, para que nuestras manos no sean manchadas. Todos los Lobatos, Lobeznas, Scouts, Caminantes, Scouters y Padres de Familia del GRUPO JUVENIL SCOUT CHICLAYO 38 “JUAN TOMIS STACK”, al iniciar una campaña solidaria como la campaña escolar; la campaña del abrigo; la campaña de víveres o la campaña navideña, se convierten en una pieza vital en cada uno de estos proyectos solidarios. Son las únicas manos limpias que tenemos, y ellos lo saben que, muchas veces, lo piden cuando los mayores, por diferentes circunstancias de la vida, se olvidan o se hacen de la mirada gorda. Son estas jornadas de bien social que ha hecho que el GRUPO JUVENIL SCOUT CHICLAYO 38 “JUAN TOMIS STACK”, a lo largo de estos hermosos treinta y siete años de vida, al servicio de la comunidad, se mantenga viva y con la antorcha encendida, haciendo escultismo, no importa con una serie de limitaciones por esta cruel pandemia, pero lo venimos realizando con todas las recomendaciones sanitarias de seguridad y con la ayuda y bendición del recordado Padre Juan Tomis Stack, quien nos incentivó y nos enseñó el camino del servicio. EL DIRECTOR