EDICIÓN GRATUITA A NIVEL LOCAL, NACIONAL E INTERNACIONAL N°1309-CHICLAYO, 21 DE ENERO DE 2022-LAMBAYEQUE-PERÚ EDITORIAL
¡49 AÑOS CUMPLE CHACHI! La mujer en el escultismo mundial jugo un rol trascendental desde sus orígenes. Baden Powell, fundador del escultismo, eleva la importancia de la mujer desde cuando su madre, Henrietta, se quedó viuda cuando él tenía tres años. Solo una mujer excepcional, luchadora, con singular dedicación y cariño podría criar a sus siete hijos pequeños (de 1 mes a 13 años) forjando su carácter y enviándolos a colegios con becas parciales que su modesto presupuesto familiar le permitía. Sobre su madre Baden Powell escribió en 1933 “Todo el secreto de mi formación está en la persona de mi madre. Cómo esta maravillosa mujer fue capaz de educarnos a todos sin descarrilar y no murió de fatiga o aburrimiento, es algo que ignoro y nunca entenderé”. El tiempo pasa y Baden Powell, pocos años después de fundar el escultismo, que en esa época era solo para muchachos a partir de los 11 años, necesitó la apreciada ayuda de su hermana Agnes para fundar el Guidismo, ya que miles de chicas también querían formar parte de su movimiento. Cuando se casó en 1912, su esposa Olave, con su simpatía indudable y un gran carisma, dos años después comenzó a acompañar el Movimiento de las Guías. Años más tarde, acompañó a Baden Powell en sus viajes alrededor del mundo expandiendo el Movimiento Scout. Faltaban los niños menores de 11 años. Fue entonces cuando Baden Powell necesitó la ayuda de otra mujer competente y adecuada para los más pequeños, es cuando se contacta con Vera Barclay, una escritora inglesa, quien sugirió que la base pedagógica para esta nueva rama del escultismo se basase en las Historietas de Mowgli y sus amigos. Nos preguntamos ¿Cuántas Henriettas, Agnes, Olaves y Veras existen hoy en el escultismo mundial? Incalculables, por cierto, que han dado y siguen dando vida y fuerza al Movimiento Scout. Pero, sin ir muy lejos, en el Escultismo Lambayecano han sido muchas mujeres que han enaltecido a la institución juvenil, entregando su tiempo, esfuerzo, cariño, en la formación de las nuevas generaciones. Muchas de ellas, lamentablemente, ya no se encuentran entre nosotros, viajaron al campamento celestial, sin embargo, muchas otras aún siguen derramando dulzura, alegría y encanto, como el caso que nos ocupa hoy, nuestra amiga y hermana scout ROSALIAANA SENMACHE SARMIENTO, más conocida como CHACHI que vio nacer a B.P. CHACHI que, en el presente año, cumple cuarenta y nueve años en el Escultismo Lambayecano y que el próximo año estaremos invitados, ojalá, a celebrar sus Bodas de Oro Escultistas. Recuerdo como si fuera ayer que, a mediados del año de 1973 junto con todos sus hermanos y apoyados por sus señores padres que tuve la suerte de conocerlos y compartir sanos momentos en su hogar, acudían presurosos a enrolarse en las filas de su primer GRUPO SCOUT CHICLAYO 178, grupo que se había formado, el año anterior, en la Parroquia “La Consolación” de la Urb. Santa Victoria, gracias al entusiasmo del Scouter Walter Garay y el apoyo de su Párroco, de ese entonces, el Padre Juan Cuña, siendo su primer Presidente del Grupo el Prof. Arturo Vigil Chávez, y que, en el presente año, estarán celebrando sus Bodas de Oro. Chachi la más entusiasta y entregada al escultismo, profesora de carrera, ocupó diferentes cargos en la organización de eventos scouts locales, regionales y nacionales que se desarrollaron en nuestro medio, en esos tiempos de oro del escultismo lambayecano. Hoy la vemos caminar en el GRUPO SCOUT CHICLAYO 65, igualita como ayer, con esa chispa y espíritu scout que la caracteriza. Incansable, alegre y derrochando toda su energía por dejar este mundo mejor que lo encontró. Mi respeto Chachi. EL DIRECTOR