N°521-CHICLAYO, 19 DE DICIEMBRE DE 2014-LAMBAYEQUE-PERÚ REPORTAJE A LA TEMPRANA PARTIDA DE LUIS A. SALAZAR DÍAZ EDITORIAL ¡TRISTE TU PARTIDA COMPADRE LUCHITO! Cuando en el mundo existe comprensión, amistad, paz, alegría, preocupación por los más débiles, cariño, entrega, generosidad, o cuando, entre los hombres vivimos con todas esas lindas virtudes y valores que la humanidad debe vivirlas. Vemos y sentimos, en carne propia, que el mundo es otro, o que el mundo sería otro. ¡Qué momentos desesperantes y agarradores hemos vivido, en estos días, desde que supimos la noticia de la temprana partida del amigo, del hermano, del padre, del compadre! ¡Qué momentos tristes vive el ser humano al ver la partida de la persona que era consuelo para nuestras vidas, al amigo que siempre nos acompañaba en servir, al hermano que dejaba caer unas monedas para aplacar el hambre, al padre que siempre estaba dispuesto a poner orden donde no lo había, al compadre aconsejando ir por el camino correcto y no por los caminos que siempre el hombre está acostumbrado a caminar! En su establecimiento comercial de Saéz Peña, de todos los días de mi compadre Luchito, mi comadre Anita Sánchez, al instante de la fatal noticia, mandó a colocar una capilla ardiente, y desde ese instante Luchito ha estado acompañado de niños, jóvenes, adultos, autoridades, amigos, ricos, pobres, colegas de su institución, familiares, en fin, muchos desfilaban incrédulos sin saber qué hacer, sólo con la resignación que ya nos dejó, que no más estará con nosotros, que ya no habrá quien extienda esa mano generosa y bendita que lo hacía con cariño y que lo daba como un padre da a su hijo que lo necesita, ya sea para calmar el dolor, el hambre o la sed de justicia. A su llegada el miércoles 17 a su querido Chiclayo desde Corea que fue a despedirse de sus amigos, el ambiente era desolador. Los carros que había vendido dando facilidades a sus clientes, hacían largas caravanas y sus bocinas dejaban escuchar su tristeza y desolación. La tarde de su velatorio, impresionante, como también la Misa de cuerpo presente y su despedida final en el cementerio de los Jardines de la Paz. Todas éstas escenas de tristeza, de desolación, de llanto, de angustia, de resignación, se han podido vivir desde el día 10 del presente mes, hasta el día de ayer, cerca de las cinco de la tarde en que, en el Cementerio Jardines de la Paz, antes de colocar su cuerpo inerte debajo de la tierra, se dejaron sentir palabras de despedida de sus amigos, de sus familiares, de las personas que más lo conocieron a Luchito, expresando su sentimiento, su pesar, su a Dios, y que sea el Todo Poderoso que juzgue sus acciones realizadas en éste mundo. Por nuestra parte, nos sentimos de valor y nos colocamos frente a su ataúd, para decirle: “Luchito, en nombre de tu Grupo Scout Chiclayo 38 “Juan Tomis Stack” y de los miles y miles de niños que hacías sonreír con un juguete, en cada Navidad pasada; en éste momento vengo a decirte gracias, gracias porque no todos los hombres hacemos lo que tú has hecho con ellos; no todos extendemos la mano generosa como tú lo extendiste; no todos sentimos el sufrimiento, la angustia, el dolor de un niño, como tú lo sentiste siendo niño; no todos extendemos los brazos para dar una caricia al pobre, al inválido, a la viuda, al anciano, al necesitado, como tú siempre lo hacías. ¡Qué ejemplo de servicio nos dejas amigo, hermano, compadre!, sin temor a equivocarme puedo decirte: Luchito, tus acciones que has realizado en ésta tierra, han permitido que dejes éste mundo en mejores condiciones de cómo la encontraste. ¡Descansa en paz compadre! EL DIRECTOR
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