N°728-CHICLAYO, 20 DE MAYO DE 2016-LAMBAYEQUE-PERÚ EDITORIAL ¡SUBLIME AMOR DE HIJOS! Sorprendente y halagador es ver cómo nuestros pequeños y jóvenes integrantes de nuestro Grupo Scout Chiclayo 38 “Juan Tomis Stack” van creciendo, y en su camino, van poniendo en práctica todo lo que vienen recibiendo y aprendiendo de sus hermanos los mayores, los sanos y nobles principios que el fundador del escultismo mundial, Baden Powell, nos legara. Al visitar a los abuelitos y abuelitas del Asilo de Ancianos “San José” de la ciudad de Chiclayo, el domingo 15 del presente mes, hemos visto sorprendidos actitudes que, de repente, no se dan en cada uno de sus hogares, por equis motivos, y que, en hogares ajenos, como el del Asilo de Ancianos, sin embargo, sí se dieron. Cuando íbamos en el bus rumbo al hogar de nuestros hermanos los ancianitos íbamos dando una serie de recomendaciones para tenerlos en cuenta al momento de llegar al ambiente, y lo impartíamos a todos, desde el más pequeñito hasta el más adulto: por favor entreguémonos a ellos; los abuelitos necesitan mucho amor, cariño, comprensión; no quiero ver a ninguno sentado esperando que sean servidos; piensen que pueden ser nuestros abuelitos y que los vemos de tiempo y tenemos que escucharlos; no les tengamos miedo, ellos son tan humanos como tú y yo; van a ver muchos cuadros desgarradores y es allí donde tienes que poner todo de ti; háganlos bailar, cantar, reír y que sientan que están con sus hijos o nietos. Desde nuestra llegada al asilo entramos cantando a viva voz, como anunciando a nuestros hermanos, los ancianitos, que ya nos encontrábamos en su hogar y era hora de disfrutar de la vida, junto a nuestros apasionados griteríos y locuras que, no es más que hacerlos olvidar esos momentos tristes de soledad y vivir el hermoso momento que Dios nos da para vivirlo con dulzura plena, pensando que sería el último momento de nuestras vidas. Al encontrarnos en el amplio y flamante salón de actuaciones que sirve para concentrarlos a todos los abuelitos y abuelitas y desarrollar diferentes programas por las instituciones generosas, del medio, que ofrecen programas amenos, dimos la última recomendación: ir por los comedores y dormitorios y traigan a los abuelitos y abuelitas que la fiesta va a empezar. A los pocos minutos veíamos a nuestros Lobatos, Scouts, Caminantes y a los pocos Dirigentes Scouts que nos acompañaron, ese día, que venían de la mano y a paso lento con alguno de nuestros hermanos los ancianitos, unos. Otros venían empujando la silla de ruedas de aquellos hermanitos que las piernas ya se cansaron de tanto caminar por los años de la vida. Y todos, uno a uno, iban llegando y llenando el escenario de los grandes espectáculos, como aquellos escenarios del mundo que se llenan para ver a nuestros artistas favoritos, pero éste escenario era diferente, es el escenario más grande y hermoso, los artistas son ellos, los homenajeados son nuestros ancianitos que merecen todo el cariño y ternura del mundo. Las fotos que verán más adelante son tiernas y con gran sentimiento humano que, al final de la jornada y a pesar del esfuerzo desplegado, daban ganas de no terminarla y seguir con la fiesta, lamentablemente, era la hora de sus alimentos del medio día y teníamos que decirles, cantando nuestra canción de despedida, en un círculo impresionante, “No es más que un hasta luego, no es más que un breve adiós, muy pronto aquí de nuevo, nos reunirá el Señor”. Caricias, recuerdos, abrazos, besos, entrega, amor, cariño, generosidad, desprendimiento, sudor, lágrimas, alegrías, quedan grabados en cada uno de nuestros corazones, de ésta visita. No sabemos si llegaremos para el próximo año, pero sí sabemos que en el presente año, un pedacito de nuestro corazón ha quedado en todos y cada uno de nuestros abuelitos y abuelitas del asilo San José de Chiclayo. EL DIRECTOR
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