EDICIÓN GRATUITA A NIVEL LOCAL, NACIONAL E INTERNACIONAL N°986-CHICLAYO, 07 DE DICIEMBRE DE 2018-LAMBAYEQUE-PERÚ EDITORIAL
¡MUCHACHOS AYER, HOY HOMBRES DE BIEN! Recordar los inicios de aquellos muchachos de ayer que, uno a uno iba llegando a conformar la primera Tropa Scout del Grupo Chiclayo 32 en la Parroquia San Juan María Vianney, en los primeros meses del año de mil novecientos sesenta y ocho, es la verdad hermoso y gratificante para uno que también llegaba con esa ilusión de conocer de qué se trataba. El suscrito, por ese tiempo, andaba con otra vocación de servicio y me preparaba para ser Sacerdote. Me encontraba, en ese entonces, en la llamada Academia Santo Toribio de Mogrovejo que, el recordado Mons. Luis Sánchez Moreno Lira había creado para formar a los nuevos sacerdotes de la Diócesis de Chiclayo y puso como Rector de la indicada Academia al recordado Padre Hilarión Rubio. Una hermosa mañana de abril de 1968, alguien tocaba la puerta de nuestra recinto lleno de espiritualidad y entrega al Señor, como presagiando lo que me iba a ocurrir, salgo presuroso a atender el llamado del hermano, sin saber de quién se trataba, al abrir la puerta me encuentro con la sorpresa que era el Padre Juan Tomis Stack, con quien ya nos conocíamos desde mi infancia, en mi tierra natal de Santa Cruz y fue, precisamente el Padre Juan que vio en mi persona, pasta para seguir al Señor y me encaminó a entrar al Seminario de San Carlos y San Marcelo de Trujillo, donde estudié mi secundaria en el Seminario Menor de Trujillo, luego al culminar mis estudios en Trujillo llegué a Chiclayo a formar parte del grupo de los Seminaristas e iniciar mis estudios de Filosofía, y claro, en todo ese tiempo que me encontraba en Chiclayo, ya tenía mucho contacto con el Padre Juan Tomis, así que, al ver al Padre Juan, ya me era familiar. Luego de saludarlo lo hice pasar, preguntándome por el Padre Hilarión Rubio. Mientras tomaba asiento en la salita de espera, fui en busca del Padre Hilarión a comunicarle que el Padre Juan Tomis había llegado y deseaba conversar con él. Luego de unos minutos de su amena conversación, en la sala de espera, escuchamos que el Padre Hilarión nos hace llamar a todos a la sala principal y junto con el Padre Juan nos comunica que el Padre Juan nos visitaba para proponernos un nuevo programa para trabajar con los niños y los jóvenes que lo necesitaríamos cuando seamos sacerdotes. Así fue, el Padre Juan Tomis nos invitaba a unas charlas que iban a comenzar en su Parroquia para jóvenes que se desempeñarían como dirigentes trabajando con los niños, el programa nuevo era el Movimiento Scout y que, los que desearíamos, acudiéramos a su Parroquia. Sin saber a dónde nos metíamos, se inscribieron Emigdio Sandoval Guevara, Hugo Cuadra, Luis Santa María Acosta y el suscrito. Las charlas iban y venían en la Parroquia San Juan María Vianney a cargo de John Abba, Voluntario Scout Británico que había llegado de Lima con la misión de formar grupos scouts. Luego de algunos meses de estas charlas se inició la convocatoria de los niños que deseen ser scouts, y en éste sentido el Padre Juan tenía mucho carisma con sus convocatorias que, al poco tiempo, rebalsó el llamado, y la presencia de niños, tanto de su Parroquia como de todo Chiclayo acudían en busca de la novedad que el Padre Juan ofrecía a todas las familias chiclayanas. Primero se formó el Grupo Scout Chiclayo 32 con el amigo Francisco Pezo Panduro a la cabeza como Jefe de Grupo, por ser uno de los que, junto con el Padre Juan recibieron, por primera vez al amigo John Abba y era el brazo derecho del Padre Juan. El Grupo 32 se inició con dos Unidades los Lobatos, niños de 7 a 10 años de edad y los Scouts de 11 a 15 años de edad, iniciándose Rosita Polo como Jefe de Manada y Emigdio Sandoval como Jefe de la Tropa Scout y el suscrito como Sub Jefe de Tropa, pero Emigdio tenía que ir a Lima a continuar sus estudios de Teología y tuvo que abandonar la Tropa y el suscrito se hizo cargo de la indicada Tropa Scout. Historia es historia. Como el Grupo 32 tenía demasiados niños tanto en Manada como en la Tropa, el Padre Juan decidió formar otro Grupo Scout y se formó la 48, de ésta manera nacía la 48 que, llegó el momento de inscribir a los dos grupos scouts ante la Oficina Nacional, siendo reconocidos oficialmente, con la entrega de sus credenciales scouts, un 13 de diciembre de 1968 en las instalaciones del Instituto Cultural Peruano Norteamericano (ICPNA) que, en el presente año, un grupo de esos muchachos de ayer, hoy hombres de bien, celebrarán sus Bodas de Oro el Jueves 13 de diciembre del presente año, en el mismo lugar y fecha que recibieron sus primeras credenciales scouts. Acontecimiento histórico inolvidable. EL DIRECTOR