Tomas y Letras

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TOMAS Y LETRAS

HUGO JOSÉ SUÁREZ

México D.F.


La construcción de una mirada

Quiérase o no, el lenguaje fotográfico está sujeto a procedimientos artísticos rigurosos. Procedimientos de una mirada que el fotógrafo adopta, o inventa, por cuenta propia. Al situarnos frente a una fotografía sentimos hasta qué punto se puede acortar la distancia con lo impenetrable de un objeto, de un ser viviente, de un paisaje o de un recoveco, partes constituyentes de un “habitar”. Esos sutiles y preciosos hallazgos que una imagen nos ofrece, revelan las posibilidades de lo inventivo. “Las mejores fotos se sacan sin cámara”, me decía alguna vez Hugo José Suárez, mostrando uno de los requisitos para la magia, es decir, un caminar con las cejas en arco, un cielo de verano o un cielo de invierno y algo de luz que hace que se multipliquen las innúmeras puertas del fragmento y el detalle, de la detención, en otras palabras. Con certeza, después de una mirada acostumbrada a sorprenderse, queda aún mucho por fotografiar y por caminar. En el curso de los diálogos entablados con este entrañable fotógrafo, en el acto mismo del silabeo y el bisbeo, ante puntos de vista, opiniones, tendencias, actitudes, simpatías y diferencias; he ido aprendiendo y vislumbrando cómo se construye una mirada. Aprendí a comprender –y eso puede llevar años de años–, que la fotografía no es un mero acompañante del texto a manera de ornamento refinado y menos la sonrisa ante la torta de cumpleaños o el saludo desde el aeropuerto de partida o de llegada. Aprendí el papel de la contemplación, la vivencia, la apropiación de ese maremágnum que bulle en calles y caminos, desplegándose en las varias y contrapuestas apariencias esenciales. Un mundo en el que conviven codo a codo, belleza y miseria, esplendor y tiniebla, espejo y bicicleta... Allí, contemplando las instantáneas de Hugo José, por algún profundo motivo se puede establecer un antes de las descripciones y relatos de lo que se ha visto. Esas imágenes son el alcance formal, el logro material del flujo humano dentro del cual se convive, es para sentirse encandilado. Una instantánea desde esta mirada, fija de modo inmediato, preciso podría decirse para algunos casos, la impronta reveladora de algo, que inmerso en la duración, va a dar el salto hacia el atisbo de eternidad. Ante esto, sólo cabe callar, mirar, y descubrir. Omar Rocha Velasco


1 La foto del otro es una mirada hacia uno mismo. Detrás de cada imagen está el fotógrafo, con su mundo puesto en juego en el momento de la toma. La foto del otro es un autorretrato. Por eso mostrar una foto es desnudarse, es contar lo que se ha deseado, es compartir algo íntimo. Exponer, dicen, es exponerse. Así nace Tomas y letras, como un espacio de diálogo entre mirada y textos de distintos orígenes, donde se pueda ver al fotógrafo a través de su lente y el encuentro con palabras que en conjunto forman un todo compuesto por letras y por luz.

México D.F., 1992


2

Puebla, MĂŠxico, 1991

En la espera, cobijados en el silencio y la quietud, conquistamos la soledad compartida Oscar Vega C.


3

Lago Titikaka, Bolivia, 2000

Mimetismo y trayectoria repasar con los aros y grabar en las piedras –si se dejansosegada forma de enredarse en el transcurso de desenredarse luego en el avenir espeso de las nubes... Elizabeth Scott


4

Potosí, Bolivia, 2000

Soldados de frontera ¿Cuántas vidas vale una patria? Hugo José Suárez


5

Santiago, Chile, 2002

¿Quién lleva la cuenta de los mundos que se desploman cada tarde sobre una plaza? Martín Hopenhayn


6

Bruselas, BĂŠlgica, 1998

Los secretos del saber, del poder, y del sexo: ver, oĂ­r y callar; querer y osar. Omar Rocha


7

Osaka, Jap贸n, 2000

Todo punto de vista es la vista de un punto Leonardo Boff


8

La Paz, Bolivia, 1993

Entre el fútbol, la soledad, la vejez y el domingo. Un festejo que no espera. Hugo José Suárez


9

La Paz, Bolivia, 1999

¡Verso, nos hablan de un Dios Adónde van los difuntos: Verso, o nos condenan juntos, O nos salvamos los dos! José Martí


10

Puerto P茅rez, Bolivia, 2000

Esa confusi贸n de duplicados que genera el viento, esa inevitabilidad de las sombras. Movimientos de un pasado y un presente. Esa obligaci贸n de seguir la trayectoria, los bordes de las prendas ondeando, dej谩ndose llevar ya sin dependencia corporal. Omar Rocha


11

Londres, Inglaterra, 1998

Se単or, replica Sancho, yo imagino que es bueno mandar, aunque sea a un hato de ganado. Miguel de Cervantes. Don Quijote de la Mancha


12

Buenos Aires, Argentina, 2003

‌y no olvides que una vez, tú fuiste sol. Augusto Blanca


13

Bruselas, Bélgica, 1997

... y fue en aquel preciso instante cuando las tres por separado se preguntaron algo como ¿desde qué estación partieron los años? ¿hacia dónde? Y qué les deparaba ahora un andén repleto con su vacío de tres memorias. Elizabeth Scott


14

Bruselas, Bélgica, 1997

El único encanto del matrimonio es que exige de ambas partes practicar asiduamente el engaño Oscar Wilde


15

Santiago, Chile, 2002

Hay que estar premunido de inocencia para jugar en las patas de los caballos. MartĂ­n Hopenhay


16

México D.F., 1992

Por suerte, los patios interiores nunca terminan de revelar sus misterios. Hugo José Suárez


17

BĂŠlgica, 1998.

Desobedecer una orden era empezar a sentir miedo. Miedo a la represalia y empezar a sentir miedo era empezar a morir El Eternauta, HĂŠctor Oesterheld


18

México D.F., 1992

Nació llorando, abriendo la boca, arrugando la cara y moviendo las manos. Su madre lo miró; volteó hacia la matrona y estirando los brazos en un acto casi natural dijo: “no te preocupes, yo te daré de beber”... Omar Rocha


19

Fleurus, Bélgica, 1998

TOMPETISTA DIXI… “Mis hijos serán corredores de la bolsa o no serán nada...” Juan Carlos Baglietto Jr. Elizabeth Scott


20

Praga, República Checa, 1998

Hay fotos que no se ven, se escuchan. Hugo José Suárez


21

Santiago, Chile, 2002

A un paso del apocalipsis el codicioso encuentra su paraĂ­so. MartĂ­n Hopenhayn


22

La Paz, Bolivia 2004

Pero quĂŠ valen las dudas frente a unas cuantas certezas... Carlos MonsivĂĄis


23

Praga, RepĂşblica Checa, 1998

Es tan frĂĄgil la tela que une los sentidos a la realidad Alvar Mayor. E. Breccia y C. Trillo


24

México D.F., 1994

…en el zapatismo caben todos, todos los que quieran cruzar de un lado a otro. Cada quien tiene su uno y otro lado. No hay recetas, líneas, estrategias, tácticas, leyes, reglamentos o consignas universales. Sólo hay un anhelo: construir un mundo mejor, es decir, nuevo. EZLN, junio 1996


25

Yungas, Bolivia, 2004

Cambiando, reposa. Herรกclito


26

Bruselas, Bélgica, 2000

Pensándolo bien, es muy posible que fotografiar sea una artimaña del diablo y cada disparo, un pecado. Gérard Castello


27

La Paz, Bolivia, 2002

El estado amoroso es la irrupci贸n de la eternidad en el tiempo Leonardo Boff


28

Santiago, Chile, 2002.

Lo mĂĄs apetecible siempre va en sentido contrario. MartĂ­n Hopenhayn


29

La Paz, Bolivia 2003

Cuando hasta las paredes perdieron la esperanza. Hugo JosĂŠ SuĂĄrez


30

Beni, Bolivia, 2000

Me da miedo la enormidad donde nadie oye mi voz Nacha Pop


31

Oruro, Bolivia, 2003

...les hacemos cantar, les hacemos bailar, pero nuestras penas nunca nadie sabe... Canci贸n de Morenada Mejillones (Oruro-Bolivia)


32

Cusco, Perú, 2003

Si un hombre, en un sueño, atraviesa un jardín y arranca una flor, y al despertar tiene la flor en la mano: entonces qué? Alvar Mayor. E. Breccia y C. Trillo


33

La Paz, Bolivia, 2003

Creemos ser país y apenas somos paisaje Graffiti en la ciudad de La Paz – Bolivia.


34

Sapaqui, Bolivia, 2002

ÂżUsted tiene pesadillas? No, me basta con la realidad Rompecabezas, Pablo de SantĂ­s y Max Cachimba


35

Santiago, Chile, 2002

Cada desierto con su oasis, cada niĂąo con su grifo. MartĂ­n Hopenhayn


36

México D.F., 2000

Los sueños, bien diría Álvarez Bravo, han de creerse. Hugo José Suárez


37

Chiquitanía, Bolivia, 2003

Sólo la mitad de las cosas se me aparece, y la otra mitad desaparece. Un espacio se cierra, y otro se abre, un mundo se enciende y otro se apaga. Recuerdo y no recuerdo; siento y no siento; miro y no miro. Pero, ello no obstante, todo está. Yo estoy allá, mirando una mirada. Y también estoy aquí, mirando no sé qué. Mirándome a mí, en realidad. Jaime Sáenz


38

テ[sterdam, Holanda, 1998

...porque tambiテゥn somos lo que hemos perdido Amores Perros


39

MĂŠxico D.F., 2000

Baila, baila baila hasta salir de tu cuerpo Danza, danza somos animales en celo La Portuaria


40

Bruselas, Bélgica, 1998

Ninguna prisión encarcela la mirada. Hugo José Suárez


41

Luxemburgo, 1997.

Los cuentos estĂĄn tomados de la realidad, pero son tomados como espejos. Por eso la muestran al revĂŠs Alvar Mayor. E. Breccia y C. Trillo


42

MĂŠxico D.F. septiembre, 2005

El mexicano no tiene sentido‌ pero tiene sentimientos Roger Bartra


43

Yungas, Bolivia, 1999

Alguien nace. Duerme sobre el campo de batalla. Detiene, sordo, el filo que lo liber贸 de su anterior morada. Inmovilidad y despu茅s hechura. Permanecer es una vocaci贸n, volver, dicen las cosas, es permanecer. Omar Rocha


44

París, Francia, 1998.

... si me hieren, tendré quien me cuide. Si me matan, tendré a quien esperar en la eternidad. Si vuelvo, tengo a quien volver... Saint-Exupéry, el último vuelo, Hugo Pratt


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