EDITORIAL
Humo Latino Journal César Salinas Chávez
T
enía 19 años, trabajaba de 16:00 a 22:00 horas, cursaba el quinto semestre de la carrera; entré de corrector de estilo junto con uno de mis mejores amigos de la vida; el periódico se llamó Milenio El Portal, y amé ese trabajo, el día a día en el área de información, situada en el último piso de un edificio con fachada de cristal, fue fantástico y revelador.
cubrí mi amor al periodismo.
Un día normal comenzaba al llegar a Recepción, tomar la edición del día, saludar a los de imprenta, subir a Contabilidad con sus pilas y pilas de carpetas, luego pasar por el elegante piso donde el Director tenía su oficina junto con el área de Ventas; luego subir a Edición, donde estaban los formadores, diseñadores, fotógrafos y el área de Informática, y finalmente llegar a la Redacción, ir a la mesa en la que había platos, pilas de tazas… y ceniceros, saludar a todos, servirte café, encender un cigarrillo y leer el periódico para revisar si se me había ido algo sin corregir o celebrar la edición impecable del día, mientras llegaban los textos para corregir.
¿Pero qué es Humo Latino Journal? La versión abreviada, en papel y a color, de nuestra edición digital Humo Latino Magazine, que estará disponible en distintas tabaquerías, cigar lounge, restaurantes, hoteles y algunos otros negocios de Estados Unidos, España, México, Chile, Argentina, República Dominicana, Nicaragua, Colombia, Venezuela, Honduras y Puerto Rico.
Disfrutaba sobre manera las charlas, y el lugar mismo, una gran área común alfombrada, y la única oficina era la del subdirector, con divisiones de cristal, por donde muchas veces lo veía fumar sus cigarros y habanos. Me gustaba estar ahí, me sentía orgulloso de pertenecer; no se sentía un trabajo ordinario como los que tuve de adolescente. Justo en ese edificio des-
Cuando hace unos días llegó la camioneta y comenzó a descargar la primera edición de Humo Latino Journal recordé esos días y caí en la cuenta de que este proyecto me ha hecho sentir la emoción, la pertenencia, las ganas, el orgullo y los sueños de entonces.
Claro, esto no hubiera sido posible sin el magnífico equipo con el que contamos, la gran mujer que llevamos en portada, Leo Abzaradel, Cigar Blindie “CB”, así como a nuestros patrocinadores por confiar y apoyar este proyecto que hoy nace con ocho planas, pero que pronto, lo sabemos muy bien, crecerá a 16, para llevar más contenido, historias y reseñas para las lectoras y los lectores latinos en el mundo. Nuevo año, nuevas metas, nuevos sueños. Gracias a todas y a todos por su preferencia, disfruten la lectura. ¡Buenas fumadas!