La Historia de mi Clasico

A principio del año 2012 decidí comprar un fiat 128 iava Se lo comenté a mi gran amigo Miguel Lavena, el es socio fundador del club Fiat Clásicos de Argentina, y en algunas oportunidades me invitaba a participar en los eventos realizados por el club. De ahí que comencé a sentir ganas de poder ser parte del grupo y para poder asociarme debía conseguir una unidad Fiat. Por el modelo no tenía dudas debido a que en mi adolescencia me gustaban muchísimo los 128 Iava en consecuencia ese era el auto a buscar. Por eso le pedí a Miguel que me de una mano para poder encontrar el indicado dentro de mis posibilidades. Pasaron unos meses, y luego de ver algunos ejemplares que no terminaban de convencerme, me comenta Miguel de un 128 CL 1.300 año 1980 (No Iava) de primera mano en estado inmaculado . Recuerdo que en reiteradas oportunidades mi amigo me insistía por ese auto y yo me negaba una y otra vez, claro yo buscaba un 128 versión deportiva y no quería un modelo standard. Pero una tarde creo que era un sábado del mes de Marzo ó Abril, Miguel vino a buscarme en su moto y no recuerdo cómo pero terminé subido en ella y me llevó a ver el auto que en definitiva compraría, digo compraría porque luego de verlo no tenía dudas de ello. Tuve la suerte de que el dueño nunca lo publicó, solamente le había dicho a un amigo suyo agenciero de la localidad de Mercedes, que quería venderlo y que no se lo llevaría a su agencia y que tampoco quería que figurara en avisos ni en redes sociales. El hijo del agenciero había sido compañero de trabajo de Miguel , recordaba que estaba en el club Fiat Clasicos y le pasó la data para encontrarle un nuevo dueño al auto del amigo de su padre. No fue fácil terminar de completar la operación debido a que para esa época, lo recuerdo muy bien, empezaba a desandar la situación cambiaria que hasta el día de hoy nos aqueja. Para resumir un poco todo, terminé siendo el dueño del Fiat 128 luego de pasados tres meses con muchas altos y bajos por la incertidumbre que le ocasionaba al antiguo dueño del vehículo. Por suerte y luego de una larga espera se pudo lograr y siempre que puedo trato de disfrutarlo , y compartir salidas y encuentros con el grupo conformado de excelentes personas que integran el Club Fiat Clásicos de Argentina. Desde que lo tengo solamente tuve que hacerle mantenimiento básico y normal al auto. Eterno agradecimiento a mi querido gran amigo del alma, Miguel Lavena…!!!