EL SORPRENDENTE HOMBRE ARAÑA
T
odos sabemos la historia de El hombre araña. Existe desde el conocimiento primario: un chico que es picado por una araña radioactiva y adquire poderes arácnidos. Hasta el experto que sabe sobre su amor incondicional hacia Mary Jane, la relación que existe con sus enemigos/amigos, su trabajo en el Daily Bugle como fotógrafo y más. La combinación que logró Sam Raimi (El despertar del diablo) fue un trabajo que se ve reflejado en pantalla. Desde la humanidad e imperfección de Peter Parker (Tobey Maguire) hasta la locura que existe en El duende verde (William Dafoe), todo ello en una adaptación que deja tanto a los hardcore fans satisfechos y los no tan expertos con una sola esparanza: esperar la secuela. Con voz en off comienza El hombre araña, Peter Parker desea que su vida fuera diferente y que sus aventuras y su destino comienzan como toda historia de cualquier personaje ficticio o no: una chica. El primer acto de la cinta busca desarrollar el más básico origen del héroe, deslizandose entre la emoción de aceptar sus nuevos poderes, la terrible pérdida del tío Ben y que un gran poder conlleva una gran responsabilidad. Raimi atormenta a Peter Parker como lo hiciera Stan Lee en tinta y papel, y a la vez le otorga momentos de hilaridad y una que otra torpeza.
El sello del director está ahí presente: el Oldsmobile Delta amarillo 1978, su hermano Ted, veloces close up hacia el rostro e inclusive el ojo del protagonista evocando sorpresa o terror y el mismo Bruce Campbell como el presentador de la lucha que le da el nombre a Spider-Man. Por otro lado, el reparto secundario es igual de sólido que el principal. Un James Franco que va del mejor amigo de Peter Parker pero llevado que llevado por la belleza e interès de Mary Jane se relaciona con ella, aunque siempre a la sombra de la aceptación de su padre. El tío Ben y la tía May ofrecen la figura paterna y materna que necesita Parker y lo hacen de una manera natural, misma que resulta en un interés por los personajes y la vulnerabilidad ante los problemas que les lleva estar muy cerca de Spider-Man. Punta y aparte es la participación de J.K. Simmons como J. Jonah Jameson quien parece haber nacido para el papel del dueño del Daily Bugle. La música de Danny Elfman goza de algunas tonalidades obscuras que podemos escuchar en el Batman de Tim Burton, pero a la vez ritmos que buscan ser épicos en el tema principal.