COMENTARIO PARA GRUPOS PEQUEÑOS ÉXODO 7
para que ellos entregaran sus dioses falsos y adoraran a Jehová. (Éxodo 7:4) El Plan de Dios no sólo era libertar a los israelitas, sino que también en el proceso quería darles la oportunidad a los egipcios para que conocieran al Señor. (Éxodo 7:5) Y sabrán los egipcios que yo soy Jehová, cuando extienda mi mano sobre Egipto, y saque a los hijos de Israel de en medio de ellos. EN FORMA PROGRESIVA
(Éxodo 7:1-2) Leer el versículo 1 del capítulo 7 de Éxodo nos permitirá entender la relación de Cristo con el Padre: Hay DOS Mediadores en toda la Escritura, y en toda la historia: Moisés, y más tarde Jesús el Cristo, y generalmente hablando, la relación entre Moisés y el Señor, la diferencia obvia, es que Moisés NO era Dios, pero Yeshua sí lo era. Las palabras de los versos 1 y 2 son estas: “Jehová le dijo a Moisés, ves YO te pongo en el papel de “Eloah” (dios/poderoso) a Faraón, con tu hermano Aarón como tu “navi” (Profeta)”. El Padre puso a Moisés, como el Mediador, en el papel de un ser divino (un dios), con Aarón siendo el portavoz terrenal para lo divino. Navi es la palabra hebrea que traducimos como profeta. ¿Acaso no vemos el mismo patrón con Cristo? El Padre pone a Jesús/Yeshua en el papel de Dios y Mediador, y también envía a un profeta como portavoz para preparar el camino para el Mesías, Juan el Bautista. Dios, Mediador, profeta; esta fue la situación de Moisés, una sombra de lo que habría de venir, (Deuteromonio 18). Esto era perfectamente entendible para el Faraón. Después de todo, Faraón era considerado divino, y ahora Moisés seria el negociador divino para Jehová. Claro que Faraón no era más dios de lo que era Moisés; la diferencia era que el Faraón era una farsa, mientras que Moisés era ciertamente lleno con el poder de Dios. (Éxodo 7:3) Dios no quería que los israelitas salieran de Egipto “por la bondad del rey”, sino por la mano poderosa de Dios. Y para hacerlo evidente, el Señor tenía planeado usar señales y juicios. Dios le dice a Moisés que ÉL va a endurecer el ya endurecido y rebelde corazón de Faraón con el sólo propósito de mostrarle a Egipto “sus señales y sus maravillas”, que Egipto sepa que “Yo soy Jehová”. Dios quería que en Egipto, millones de personas conocieran Su poder y gloria. Los egipcios conocerán al Dios vivo y su poder ¿Por qué? Indudablemente
Las diferentes plagas llevarán a los egipcios a reconocer quién es Jehová, el Dios de Israel. Y este reconocimiento les llegará en forma progresiva… Al principio, el rey de Egipto niega conocer al Dios de Israel (Exo. 5:2). Pero conforme van avanzando las plagas, Faraón comenzará a conocer quién es Jehová (Exo. 7:17). Luego irá reconociendo que Jehová tiene poder, aún sobre los dioses de Egipto (Exo. 8:10, 18-19; 9:14). Como veremos más adelante, los temas de muchas plagas están vinculados a los poderes que los egipcios les atribuían a sus principales dioses. Al final, el rey llegará a admitir que no hay nadie como Jehová, Dios de Israel, y pedirá su bendición (Exo. 12:31-32). En el siguiente esquema podemos ver el progreso del Faraón según las señales y plagas: Etapa
Señal/Plaga
Reconocimiento:
I
Vara en serpiente Río de sangre Ranas Piojos
Existencia de Jehová, el Dios de Israel Tiene poder, similar al que le atribuyen a los dioses egipcios.
II
Moscas Muerte de ganado Úlceras
El Dios de Israel tiene más poder que los dioses egipcios Y hace distinción entre egipcios e israelitas.
III
Granizo con fuego Langostas Tinieblas Primogénito
Jehová es superior a toda autoridad y deidad, y tiene soberanía sobre toda la Tierra.
La palabra hebrea típicamente traducida como “plaga”, es “nega”. “Nega” es una palabra genérica que indica ser golpeado por, como en un tipo de estallido ocasionado por algo o alguien, usualmente con la idea de que es un castigo debido a una ofensa. Estos “golpes” causados sobre Egipto eran, por lo tanto, realmente 3 conjuntos de 3 y no 10, todos progresivos en su naturaleza. El primer conjunto de tres implica toda la tierra de Egipto y todo el mundo allí: egipcios, hebreos, visitantes, todos fueron afectados. Y, ellos eran generalmente suaves en su naturaleza, causando un poco más que un malestar. Los próximos 2 conjuntos de 3, eso es, los próximos 6 “golpes” fueron solo para los egipcios; Dios de esta manera dividió y separó Su pueblo de los otros en la tierra de Egipto; EL hizo una distinción entre Israel y todos los demás. De igual forma será en los tiempos finales; los juicios irán en incremento dando la oportunidad para arrepentirse. Antes de comenzar las plagas, Dios manda una advertencia acompañada de una señal. Este es un patrón que se mira a lo largo de toda la Biblia, ya que Dios nunca envía juicio sin antes hacer una advertencia (Amos 3:6-7). La primera señal que Dios hizo delante del Faraón es la que le enseñó a Moisés delante de la zarza ardiente. Esta señal fue en respuesta a la demanda del rey, quien pidió una señal: (Éxodo 7:8-10) Un dato curioso es que en hebreo no se utiliza la palabra común para serpiente: Najash, sino que usa la palabra: Tannim, que también se puede traducir como: monstruo marino, serpiente marina, dragón, chacal. Algunas versiones bíblicas lo traducen como: cocodrilo. Esto nos lleva a pensar que esta señal puede estar vinculada con el dios cocodrilo, llamado Sobek, que era considerado como el dios creador del mundo y del orden cósmico. La transformación de la vara en una serpiente marina impresionó a todos, pero pronto el rey lo desestimó cuando vio que los magos de Egipto también podían hacer lo mismo. (Éxodo 7:11) Aún así, Dios no dejó pasar la oportunidad para mostrar su poder y superioridad… (Éxodo 7:12) pues echó cada uno su vara, las cuales se volvieron culebras; mas la vara de Aarón devoró las varas de ellos. A pesar de eso, el Faraón no cedió ante esta muestra de poder. (Éxodo 7:13) “Y el corazón de Faraón se endureció, y no los escuchó, como Jehová lo había dicho.” Este es un patrón al que debemos poner atención, si no escuchamos a Dios y eso significa obedecerle, nuestro corazón se hace de piedra: Zac. 7:12 “y pusieron su corazón como diamante, para no oír la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su Espíritu, por medio de los profetas primeros; vino, por tanto, gran enojo de parte de Jehová de los ejércitos.” 1° PLAGA: Sangre (Exo. 7:14-25) Dado que el Faraón no creyó ante la señal de la vara, el Señor