JEHOVÁ ESTABA CON JOSÉ
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EN EL PRINCIPIO
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(Gen 39:2) En el capítulo 39 se repite tres veces esta frase: “Jehová estaba con José”.
El Dios sustentador y dueño de todas las cosas, estaba particularmente con un hombre, en un determinado EL ¿ESTÁS LISTO PARA EL VIAJE? O C momento de la historia. Una de las DOMINGOS 11:30 AM preguntas que podrían aparecer, si conocemos un poco de esta historia, es: Si Dios estaba con el ¿Por qué no impidió los momentos trágicos de su vida? ¿Por qué no impidió que sus COMENTARIO PARA GRUPOS PEQUEÑOS hermanos lo vendieran, o que una Génesis 39 mujer lo tentara sexualmente, o que fuera a la cárcel siendo inocente? ¿Por qué no impidió que alguien lo utilizara y después lo olvidara, como En el capítulo 39 de Génesis, la narrativa vuelve a enfocarse en la lo hizo el copero? ¿Acaso Dios no tenía el poder para hacerlo? Claro vida de José, quien ahora está en Egipto. que lo tenía... pero a veces, por curiosas razones, Dios no actúa como queremos, deseamos o razonamos. Creo que una de las razones es José llegó a Egipto en las peores condiciones: como esclavo. porque Sus pensamientos son mas grandes, amplios, altos y buenos Pero veremos cómo la historia dará una vuelta sorprendente, y de que los nuestros. El tiene propósitos que exceden nuestro entendimiento esclavo pasará a ocupar una de las posiciones más privilegiadas y nuestras dificultades presentes. Dios no impidió los acontecimientos en la sociedad egipcia. difíciles en la vida de José. Pero obro a través de ellos, y a través de su vida en otras personas. De hecho José pudo reconocer que Dios le hizo La fecha exacta de la llegada de José a Egipto no se sabe. dar frutos en medio de su aflicción, en Génesis 41:52. Muchos eruditos creen que llegó durante el período de los reyes hicsos. Los hicsos eran extranjeros que llegaron de la región de El Señor estaba perfeccionando a José. Además lo utilizaba para hacer Canaán. Invadieron Egipto y gobernaron el país durante casi bien a las personas con las que se relacionaba. Y ni hablar de que su ciento cincuenta años. Si José llegó en el período de los hicsos, vida testificaba por si sola, que Dios estaba a su lado. En la casa de se entiende por qué pudo ascender por la escalera real. Como los Potifar, en la cárcel, junto a Faraón, a toda una nación, y finalmente a su hicsos eran extranjeros, no les importaba la estirpe de aquel joven familia. Esa es la gracia, y Dios no tiene que cambiar tus circunstancias y brillante extranjero. para mostrar que está contigo, en medio de la crisis económica, de la enfermedad, Dios puede mostrar que está a tu lado al punto que los Faraón era el título que se daba a todos los reyes de Egipto. Era demás aún se den cuenta de esto. un título como "Rey" o "Presidente" utilizado para designar al líder del país. Los faraones que se mencionan en Génesis y Éxodo (Gen. 39:2-6) Uno podría pensar que no había peor situación que esa. eran personas diferentes. Pero aún en medio de circunstancias adversas, José siempre daba lo mejor de sí. Esa buena actitud lo ayudó a salir adelante y prosperar. A ILUSIÓN FRUSTRADA veces o muchas veces seremos usados para bendecir a otros, y eso es Dadas las circunstancias de la venta de José como esclavo, es la bendición de Dios, no siempre se trata de nosotros. muy probable que él creyera que pronto iba a ser rescatado por su padre. Pero él no contaba con que sus hermanos dirían que (Gen. 39: 3) Potifar fue lo suficientemente sabio como para darse cuenta estaba “muerto”. Seguramente José esperó el día de su de que todo lo que encomendaba a José prosperaba en su mano . En liberación, pero éste nunca llegó. Lo que es admirable es que estas culturas antiguas la gente buscaba a hombres llenos de poder José tomó la decisión de no amargarse, sino de sacar el mejor divino como José. provecho de cada situación en donde se encontraba. (Gen. 39:6) Del pan que comía: José fue excluido de supervisar las AL LLEGAR A EGIPTO comidas posiblemente a causa del prejuicio egipcio contra la práctica de (Gen. 39:1) Cuando llegó a Egipto, los ismaelitas vendieron a comer con asiáticos (43.32). José como esclavo a un oficial del Faraón. COMPLICACIONES I g l e s i a B í b l i c a
(Gen. 39:7) Cuando las cosas iban mejorando para José, inesperadamente se complicaron. (Gen. 39:8-10) José pudo haber caído ante la tentación, y dejarlo todo en oculto. Pero José no sólo respetaba a su amo, sino que temía a Jehová. Él hizo lo correcto ante Dios y ante los hombres. Lo que comenzó como una propuesta indecente se convirtió en acoso. Pero José siguió firme. Lamentablemente, la esposa de Potifar tomó mal el rechazo; se sintió ofendida y planificó vengarse de él y humillarlo. La esposa de Potifar fracasó en seducir a José, el que resistió esta tentación al decir que sería un pecado contra Dios. José no dijo: "Te estaría haciendo daño", ni "estaría pecando contra Potifar", ni "estaría pecando contra mí mismo". Cuando estamos bajo presión, uno fácilmente puede racionalizar esas excusas. Recuerde que el pecado sexual no es simplemente un acto realizado por consentimiento mutuo entre dos adultos. Es un acto de desobediencia a Dios. Podemos no pecar por temor a las consecuencias, pero evitar el pecado por temor a fallarle a Dios, ese es el espíritu de la ley, obedecer por amor a Dios, no porque me fue impuesto, no por lo que dirán lo demás, sino porque amo a Dios y su nombre, y mi relación con Él es lo más importante. No obedecemos a Dios para ser salvos, le obedecemos porque somos salvos, porque al hacerlo recibimos la bendición de la obediencia y simplemente le decimos, que le amamos. (Jn. 14:21) (Gen. 39:11-18) Pero sucedió un día que él entró en casa para hacer su trabajo, y no había ninguno de los hombres de la casa allí dentro; (12) entonces ella lo asió de la ropa, diciendo: ¡Acuéstate conmigo! Mas él le dejó su ropa en la mano, y salió huyendo afuera. (13) Y cuando ella vio que él había dejado su ropa en sus manos y había huido afuera, (14) llamó a los hombres de su casa y les dijo: Mirad, nos ha traído un hebreo para que se burle de nosotros; vino a mí para acostarse conmigo, pero yo grité a gran voz. (15) Y sucedió que cuando él oyó que yo alzaba la voz y gritaba, dejó su ropa junto a mí y salió huyendo afuera. (16) Y ella dejó junto a sí la ropa de él hasta que su señor vino a casa. (17) Entonces ella le habló con estas palabras, diciendo: Vino a mí el esclavo hebreo que nos trajiste, para burlarse de mí; (18) y cuando levanté la voz y grité, él dejó su ropa junto a mí y huyó afuera. José evadía a la esposa de Potifar lo más posible. Pero un día tuvo que huir de ella. Algunas veces tratar de evadir la tentación no es suficiente; debemos voltearnos y huir, especialmente cuando las tentaciones son sexuales. La honorable conducta de José fue devuelta con injusticia. No obstante, Dios contempla, recuerda y prospera a José en medio de lo que sin duda es una prueba enviada por él (Sal. 105:19). Nuevamente una sombra de nuestro Mesías, quien será tratado como reo, siendo inocente.