19 DE OCTUBRE DE 2008 โ ข Nยบ 422
Carta del Director
Tensión Misionera EDITA: OBISPADO DE JAÉN VICARÍA de COMUNICACIÓN DIRECTOR: Antonio Garrido de la Torre COLABORADORES: Manuel Carmona Manuel López Alberto Molinero Juan Raya Ildefonso Rueda José Antonio Sánchez Julio Segurado Seminario Diocesano de Jaén. CORREO ELECTRÓNICO: iglesiaenjaen@diocesisdejaen.es MAQUETACIÓN: José Carlos Ruiz Mariscal SUSCRIPCIONES: Jesús Jiménez. Plaza Santa María, 2. Apartado 039 - 23080 Jaén. Teléfono 953.230.036 Fax 953.230.039. Depósito Legal J-121-1990.
El mes de octubre nos trae el recuerdo del compromiso misionero de la Iglesia. A través de la campaña del DOMUND, nuestras comunidades cristianas sienten la urgente llamada a la evangelización. Una evangelización que es cada vez más necesaria tanto en los países en donde trabajan los misioneros como en nuestra propia sociedad jienense, en donde la indiferencia hacia lo religioso cada vez es más abundante. Nuestra Iglesia de Jaén siempre tiene una respuesta generosa cuando se trata de ayudar a los necesitados. No en vano, las colectas que se realizan con motivo del DOMUND son de las más altas que se recogen a lo largo del año. Y no sólo en el apartado económico. En nuestra diócesis han nacido 175 misioneros que están predicando el Evangelio y ayudando a los que lo necesitan en una admirable tarea que desarrollan en 36 países. Estos hermanos nuestros, que son los mejores exponentes de una Iglesia viva y evangelizadora, han respondido a la llamada del Señor y, dejando tantas comodidades y cosas como nosotros aquí creemos que son importantes, están entregando su vida por los demás en el nombre de Jesús. Por ellos, siempre, pero especialmente en este mes de las misiones, debemos dar gracias a Dios y tenerlos presentes en nuestras oraciones. Los cristianos de Jaén debemos, con nuestra plegaria y con nuestra generosidad, respaldar a estos hermanos nuestros que realizan su vocación misionera en medio de no pocas dificultades. Y, como ejemplo cercano de esta preocupación por la misión ad gentes, podrán encontrar en este número una amplia información sobre la misión diocesana de Jaén en Ecuador, que el Sr. Obispo visitó el pasado mes de agosto. También en nuestra página web, www.diocesisdejaen.es, que por cierto, lleva un excelente número de visitas, podrán ver todo el reportaje fotográfico de este viaje de D. Ramón a Ecuador. Desde «Iglesia en Jaén» queremos agradecer a los misioneros su gran trabajo a la par de impulsar lo que el Papa Benedicto XVI define como «la tensión misionera en las Iglesias locales». • Antonio Garrido de la Torre vicariodecomunicacion@diocesisdejaen.es
IMPRESIÓN Gráficas La Paz de Torredonjimeno, s.l.
Para reflexionar... EL INGENIO DE UNA HORMIGA Hace un tiempo me puse a observar detenidamente la vida de las hormigas, y confieso que quedé asombrado al verlas trabajar con tanto orden y empeño. Pero una hormiga en particular atrajo mi atención. Negra y de tamaño mediano, la hormiga llevaba como carga una pajita que era seis veces más larga que ella misma. Después de avanzar casi un metro con semejante carga, llegó a una especie de grieta, estrecha pero profunda, formada entre dos grandes piedras. Probó a cruzar de una manera y de otra, pero todo su esfuerzo fue en vano. Hasta que por fin la hormiguita hizo lo insólito. Con toda habilidad apoyó los extremos de la pajita en un borde y otro de la grieta, y así se construyó su propio puente, sobre el cual pudo atravesar el abismo. Al llegar al otro lado, tomó nuevamente su carga y continuó su esforzado viaje sin inconvenientes. La hormiga supo convertir su carga en un puente, y así pudo continuar su viaje. De no haber tenido esa carga, que bien pesada era para ella, no habría podido avanzar en su camino... ¿Captamos la moraleja? ¡Cuántas veces nos quejamos por los problemas, las cargas y las pruebas que debemos soportar! Pero sin darnos cuenta, esas mismas cargas -bien tomadaspueden convertirse en puentes y peldaños que nos ayudan a triunfar. Una deficiencia cardiaca hizo de un médico un famoso cardiólogo; el impedimento físico convirtió a un joven en un gran escritor; la timidez de un estudiante lo llevó a ser un destacado investigador. ¡Cuántos otros ejemplos podríamos mencionar! Todos para mostrar la misma verdad: que con frecuencia debemos padecer males para disfrutar luego de los bienes mayores; que debemos llevar con valor nuestras cargas para luego convertirlas en puentes de éxito y prosperidad. ¿Estás soportando en este momento algún problema o adversidad? Recuerda que nada conseguirás quejándote o angustiándote. Confía en Dios, Él no permitirá que la prueba te aniquile, más bien te dará fuerzas para seguir con valor y lograr mayores alturas.
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LA VOZ DEL OBISPO
Misioneros como San Pablo La Jornada Mundial de las Misiones, el DOMUND, que celebraremos junto a todas las Iglesias el próximo domingo, 19 de octubre, nos propone a San Pablo como modelo de respuesta misionera a la llamada y envío de Jesucristo. Tenía tan claro este Apóstol lo que le pedía el Señor que hasta llegó a escribir: «¡Ay de mí, si no predicara el Evangelio!» (1 Co 15, 16). 1. Misión esencial de la Iglesia: evangelizar Nuestro Santo Padre el Papa Benedicto XVI ha enviado, para todos los fieles de la Iglesia, un maravilloso Mensaje con esta ocasión, que os invito a leer y meditar pausadamente. «Es necesario insistir, nos dice, en que aun en medio de dificultades crecientes, el mandato de Cristo de evangelizar a todas las gentes continúa siendo una prioridad. Ninguna razón puede justificar una ralentización o un estancamiento.» Y cita seguidamente estas palabras del Papa Pablo VI: «La tarea de la evangelización de todos los hombres constituye la misión esencial de la Iglesia.» (Exhort. Ap. Evangelii Nuntiandi, 14). 2. La misión es cuestión de amor El Papa nos invita por ello, como «deber urgente: anunciar a Cristo y su mensaje salvífico», y a pensar en el Apóstol Pablo, cuando en el camino de Damasco experimentó y comprendió «que la redención y la misión son obra de Dios». Por eso, escribe más adelante el Santo Padre, «la actividad misionera es respuesta al amor con el que Dios nos ama. Su amor nos redime y nos empuja a la «misión ad gentes»» (cf. n. 2). Como vemos, Su Santidad Benedicto XVI se refiere a la urgencia de la evangelización de quienes no conocen a Jesucristo, pero no sólo en los países a donde no han llegado a oír el Evangelio, sino también a cuantos, en países anteriormente evangelizados, han llegado desde otras procedencias o no están bautizados. Se ha ampliado, por tanto, el campo de la misión ad gentes. Se incluye nuestra Diócesis también, aunque sea en menor escala que en otros
territorios. La Iglesia de Jaén ha enviado a 175 misioneros, nacidos en su geografía, a 36 países. Los últimos son dos sacerdotes jóvenes que han iniciado su tarea misionera en el Vicariato Apostólico de Esmeraldas, en Ecuador, durante el presente año. También en nuestra Diócesis iniciamos en este curso la preparación catecumenal de adultos que soliciten bautizarse, con una programación común de dos años de preparación. Forma parte, asimismo, de nuestra preocupación apoyar otros proyectos misioneros a través de la Delegación diocesana de Misiones y, sobre todo, orar y procurar el despertar misionero especialmente en los niños y jóvenes, así como trabajar en el nuevo proyecto sobre catecumenado de adultos en orden a la nueva evangelización. 3. Tarea de todos En el Mensaje del Papa para esta Jornada, se propone a los obispos, presbíteros, consagrados y fieles laicos seguir la invitación de Jesús de echar «sin miedo las redes en las aguas profundas del vasto mar del mundo», cada uno desde su parcela y situación. Nos recuerda que las Obras Misionales Pontificias, destinatarias de la colecta especial del Domund, «alimentan la comunión de bienes y de personas entre las diferentes partes del Cuerpo Místico de Cristo… y son signo de comunión y de solicitud recíproca entre las Iglesias.» (cf. nn. 4 y 5). A todos nos insta también, finalmente, a intensificar cada vez más «la oración, remedio espiritual indispensable para difundir entre todos los pueblos la Luz de Cristo» y a manifestar nuestra «comunión y solicitud por todas las Iglesias» mediante nuestras aportaciones a la colecta de la jornada. Así se lo pedimos a la que es Reina de las Misiones en el día de la Virgen del Rosario. Les saluda y bendice en el Señor, muy agradecido por su generosa colaboración.
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CARTAS AL DIRECTOR
Carta al director de «IGLESIA EN JAÉN» Purificación García Peal de Becerro (Jaén) Estimado hermano en Cristo: He leído su articulo-reflexión del viaje diocesano a Tierra Santa. Yo también estuve allí hace muchos años. Concluye su escrito diciendo «algo tendremos que hacer los cristianos del mundo para que en la tierra de Jesús siga habiendo discípulos suyos». Se ha preguntado alguna vez qué pasará en nuestra sociedad cuando la persecución que ahora existe disfrazada, quizá disfrazada incluso de derechos de otros (como por ejemplo el derecho de la madre a no caer en depresión psicológica a costa de la vida del hijo que nunca verá la luz para que ella pueda vivir en equilibrio psicológico), se ha preguntado, decía yo, alguna vez que pasará cuando la persecución deje el disfraz y actúe como tal. ¿Cree usted que todos los que nos llamamos cristianos lo somos hasta el punto de soportar mucho, por no decir todo, en el nombre del Cristo? Creo que es hora, siempre lo es, de fortalecer nuestro espíritu en armonía y equilibrio. Los instrumentos para ello los tenemos los cristianos desde hace algo más de dos mil años. Tenemos la oración, siempre la hemos tenido, que nos hace sintonizar con la con el mismo Dios. Tenemos la Eucaristía, verdadera oración de amor, genuinamente eclesial, porque el mismo Señor quiso regalarla a su Iglesia. Tenemos la Sagrada Escritura y en ella la voz de los padres en la fe, la voz, para algunos irritante, de los profetas. Tenemos los testimonios de los santos como San Juan de la Cruz, Santa Teresa de Jesús, San Agustín, San Francisco de Asís y tantos… Tenemos las instrucciones de la Iglesia, nuestra auténtica gran familia. Ya sé que decimos, porque es así, que es santa pero también es pecadora. No olvidemos que el pecado siempre los hemos puesto los hombres cuando hemos querido caminar sin Dios. Tenemos el Evangelio, verdadera instrucción para que, caminando en Él, lleguemos a la verdadera unión con Dios, que no es otra cosa que la fusión total con el Creador. Tenemos tanto, se nos ha regalado tanto, que quizá ese sea el punto que no sabemos aceptar. Parece ser que lo que es gratuito no es valorado en una sociedad en la que el hombre todo lo compra. Pues bien, la Eucaristía es un don totalmente gratuito, sólo y exclusivamente por amor de Cristo a los hombres. Y Él, Cristo, sí sabe de precios. Sabe de darse por entero, sabe de entregar hasta la última gota de su sangre, sangre inocente, sabe de dolor humano, sabe de espinas y de clavos traspasando sus manos, sabe de burlas y de vacíos, sabe de negaciones, sabe de traiciones, sabe de bofetadas, sabe de tentaciones, sabe... de todo porque todo lo ha padecido Él sin necesidad de hacerlo, bueno, mejor dicho, por una necesidad imperiosa de amar al hombre.
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Tenemos, como decía antes, todo para poder vivir en armonía. Y la propuesta es: yo también quiero cambiar la sociedad, como muchísimos otros. Pero, y este es mi pensamiento, la sociedad no se cambia desde fuera hacia dentro. Es justamente al contrario hay que empezar por nosotros mismos, cada uno por sí mismo. Si yo ordeno mi interior y pongo paz en las voces que hablan dentro y hago callar las voces internas que son mías, que son del yo, y dejo hablar a la esencia, al Dios que todos llevamos dentro, entonces ya habré cambiado la parte de la sociedad que me corresponde a mí. Si todos hacemos esto, si todos trabajamos en esto, llegará un día en que despertará un mundo lleno de paz y equilibrio, de amor y misericordia, lleno de las cualidades de Cristo. Pero antes ha de haber un despertar de la conciencia. No caigamos en el error de creer, nosotros los cristianos, que esto es un sueño irrealizable, porque esa es la postura, totalmente anticristiana, del que no quiere arreglar su casa y se pasa el tiempo queriendo arreglar la del prójimo. Nadie puede dar lo que no tiene. Y el que tiene guerra dentro no puede sembrar la paz fuera porque el ser humano es como la vasija de arcilla que transpira y rezuma. Y si dentro de la vasija hay amor, rezumará todo lo inherente al amor: misericordia, paciencia, paz, caridad, buenas obras, amabilidad, y todos los dones que nos regala el Espíritu de amor habita en nosotros. Si en nuestro interior hay guerra, u odio nuestro ser rezumará lo que emana de esta fuerza y como ejemplo de esto propongo echar una mirada al mundo. Así que, querido hermano en Cristo, es cierto, algo tendremos que hacer los cristianos para arreglar situaciones o aprender a interpretar los signos de los tiempos, pero siempre, siempre, hemos de empezar por nuestro interior. Y, ya sabemos, si cerca de mí hay uno que odia... yo tengo que amar por dos.
NUESTROS PUEBLOS Y PARROQUIAS
DELEGACIONES EPISCOPALES
«Como Pablo, misionero por vocación» Miguel Lendínez Talavera Delegado Episcopal de Misiones Somos embajadores de Cristo (2 Cor 5,20). Estas palabras de San Pablo han de ser un estímulo para nuestra vida cristiana en medio de nuestra sociedad. Como dice el Papa Benedicto XVI en el mensaje para la Jornada Mundial de las Misiones de este año, Cristo es nuestro futuro y, su Evangelio es la comunicación que «cambia la vida», da la esperanza, abre de par en par la puerta oscura del tiempo e ilumina el futuro de la humanidad y del universo. Es así como el mandato misionero de Cristo a los Apóstoles debe seguir resonando en nosotros: «Id, pues , y haced discípulos a todas las gentes»(Mt 28,19). Un año más la Iglesia celebra el Domingo Mundial de las Misiones (DOMUND) esta jornada nació como coronación del esfuerzo de animación misionera de todo el año y, sobre todo, del mes de octubre, dedicado de manera especial a tomar conciencia de la responsabilidad misionera de cada bautizado. Fue en Francia donde nació la Obra de Propagación de la Fe, a comienzos del siglo XIX, y fue el Papa Pío XI, casi un siglo después, quien la convirtió en el cauce oficial de toda la Iglesia católica para ayudar espiritualmente y económicamente a la actividad misionera de la Iglesia. La Obra de la Propagación de la Fe ayuda, a todas y cada una de las 1.078 diócesis y territorios de misión en su pastoral: anunciar el mensaje
evangélico, celebrar el misterio de la fe y vivir el mandamiento de la caridad. Así como suscitar el interés y la responsabilidad universal por las misiones en las familias, en las comunidades cristianas, en las parroquias, en los centros docentes, en los movimientos eclesiales y en las asociaciones apostólicas. Las aportaciones económicas recogidas para el DOMUND en España se ingresan en el Fondo Universal de Solidaridad que gestiona las colectas realizadas en todo el mundo, de forma que adquiera el carácter universal de la cooperación misionera y se haga efectivo el compromiso común de todas las Iglesias del mundo con la evangelización de los pueblos. Este año para la campaña se ha elegido un lema en consonancia con el año jubilar paulino, es: «Como Pablo, misionero por vocación». «Como Pablo... La figura de San Pablo se ofrece a quienes trabajan en la misión como paradigma del testigo de la fe para lo que aún no ha conocido el Evangelio. ... misionero... Palabra clave y esencial. Hace referencia a quien «sale» de su tierra y parte a otros lugares para anunciar el Evangelio, entregando toda la persona y toda la vida, «con una donación sin límites de fuerzas y de tiempo» (Redemptoris Missio, 65). ... por vocación» Pablo se presenta al inicio de sus cartas como el llamado por Dios para anunciar el Evangelio. Se trata de una «vocación especial, que tiene como modelo la de los apóstoles: se manifiesta en el compromiso total al servicio de la evangelización»(RM, 65). Termino estas líneas con palabras del Papa Benedicto XVI y San Pablo que nos animan para que la Jornada Misionera Mundial sea un estímulo para todos a tomar conciencia renovada de la urgente necesidad de anunciar el Evangelio, pues es más bien un deber que nos incumbe... entregándolo gratuitamente... para ganar a los más que pueda.
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LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR
LA MISIÓN DIOCESANA DE JAÉN EN ECUADOR:
«Un horizonte abierto y esperanzador que nos llama al compromiso» Antonio Garrido de la Torre El año pasado, el obispo del vicariato apostólico de Esmeraldas, en Ecuador, D. Eugenio Arellano, visitó Jaén y se entrevistó con nuestro obispo, D. Ramón del Hoyo, y con sacerdotes y seglares que integran la delegación episcopal de misiones. El obispo de Esmeraldas manifestó en esta reunión, y ante los medios de comunicación de Jaén, la necesidad que tiene su vicariato de sacerdotes y seglares para proyectos de evangelización. Respondiendo a esta llamada, a principios de este año 2008, nuestro obispo D. Ramón envió a Ecuador al sacerdote diocesano D. Luís Fernando Criado Reca, para que comenzara los trabajos evangelizadores en esta nueva misión de la diócesis de Jaén. El pasado mes de julio, otro sacerdote diocesano, D. Emilio Samaniego Guzmán, también fue enviado al vicariato de Esmeraldas para trabajar en la misión diocesana de Jaén.
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Geografía La zona donde trabajan actualmente estos dos sacerdotes está situada en la localidad de Rocafuerte. La parroquia «María, Madre de Gracia» de Rocafuerte se encuentra en la costa norte de la provincia de Esmeraldas, al norte del Ecuador, a unos cien kilómetros de distancia con la frontera colombiana. El territorio que abarca la parroquia eclesiástica coincide con el cantón civil de Rioverde. El cantón está dividido en varios pueblos: Rioverde, Rocafuerte, Montalvo, Lagarto, Chontaduro y Chumundé, que son los núcleos de población más numerosos. Estos municipios cuentan aproximadamente con unos cinco mil habitantes cada uno y con unos sesenta kilómetros de distancia al pueblo más lejano. De cada uno de estos núcleos dependen otras comunidades más pequeñas, de diez a veinte, por cada uno de ellos, que están dispersas por el campo. Estas aldeas más pequeñas suelen disponer de capilla, un guía de la comunidad parroquial y un grupo de catequistas. Entre localidades y aldeas puede
LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR haber unas cien comunidades en todo el territorio encomendado a la misión diocesana de Jaén. Algunos de estos núcleos sólo recibían la visita del sacerdote una vez por año. Proyecto Para desarrollar este proyecto de misión diocesana, el obispo de Jaén ha consultado con el presidente de la comisión pontificia para América Latina, el cardenal Giovanni Battista Re, quien contestó a la propuesta favorablemente. Monseñor del Hoyo cree que la Iglesia de Jaén debe «abrirse a la misión y colaborar con otras Iglesias necesitadas. Así nos lo pide el Señor y nuestra Madre la Iglesia. Nuestra Diócesis, como todas, ha de abrir sus brazos a la universalidad» y recuerda el mandato misionero de Jesucristo de ir por todo el mundo anunciando el evangelio. Uno de los sacerdotes enviado a esta zona de Ecuador, D. Luís Fernando Criado, en una carta enviada desde Rocafuerte, afirma: «comenzamos el intento de abrir una ventanita para nuestra Iglesia de Jaén en otro horizonte que desarrolle nuestra vocación misionera de llevar la Buena Nueva de Jesús a todos. Amanece la posibilidad de llevar esta parroquia de Rocafuerte junto al océano Pacífico con clero jiennense y con la colaboración de nuestra Iglesia también desde los laicos». En su carta, D. Luís Fernando Criado dice: «mirando al mar desde el balcón de la casa parroquial, puedo contemplar el pueblo sencillo de pescadores que lucha a diario por superar su situación de postración, ya que esta localidad está situada en una provincia, que por diversas circunstancias históricas, se ha encontrado bastante aislada». Nuestro misionero apunta
también las necesidades que detecta en esta zona: «esta parroquia necesita de una pastoral misionera, en muchos casos casi de primer anuncio, y en todos los casos, de formación básica en la fe y de compromiso y acompañamiento en sus procesos de desarrollo y dignificación de la vida». Visita del Sr. Obispo Sobre el proyecto misionero de la diócesis, D. Luís Fernando Criado dice que «las numerosas comunidades en la costa y en el interior requieren de una gran dedicación. Los habitantes, en su gran mayoría jóvenes, son acogedores y en la medida en que las comunidades han recibido el evangelio demandan más la formación, la Eucaristía y la presencia de los sacerdotes y catequistas». Asimismo afirma que la misión diocesana de Jaén en Ecuador es «un horizonte abierto y esperanzador que nos llama al compromiso». Y lanza una invitación a sacerdotes y seglares de Jaén: «Yo os invito desde aquí a conocer esta tierra y os ofrezco por mi parte toda la información que os interese, ya que solo se aprecia lo que es conocido». Nuestro obispo D. Ramón visitó el pasado mes de agosto esta zona de Esmeraldas, en Ecuador, encomendada a la diócesis de Jaén. Allí visitó al sacerdote diocesano D. Manuel Ruiz Carrero y conoció el Seminario de San Pedro, en Portoviejo. En la puesta en marcha y en el funcionamiento de este Seminario han trabajado durante varios años un grupo de sacerdotes de Jaén. El obispo también visitó a los misioneros seglares Antonio García y Ana Cruz, que trabajan en el «hogar de Belén», dentro del centro «Cardenal Wetter». La labor de estos misioneros se centra en la atención a niños con 7 / 19 OCTUBRE 2008
LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR dificultades familiares y a hijos de presos. En las páginas centrales de este número de «Iglesia en Jaén» tienen nuestros lectores unas fotografías de esta visita del Sr. obispo de Jaén. Este reportaje está completo en nuestra web, www.diocesisdejaen.es. Los sacerdotes D. Luís Fernando y D. Emilio, han enviado hace unos días una carta a nuestro obispo D. Ramón del Hoyo en la que le agradecen su visita, que ha supuesto «un gran estímulo y apoyo en el inicio de esta misión diocesana. La comunidad de Rocafuerte quedó muy contenta por su estancia y sus palabras. Agradecemos mucho que se haya hecho presente para conocer de cerca esta realidad». Los misioneros también comentan sus actividades: «En la medida en que la época de lluvias va cesando, iniciamos nuestra actividad en los lugares más lejanos a los que durante el resto del año se hace imposible acceder. A las comunidades que habitualmente atendemos en las seis parroquias civiles, se añaden ahora muchas a las que hace tiempo, a veces años, no se ha acercado un sacerdote. Estamos trabajando en la pastoral juvenil con los grupos de la zona y en la pastoral de enfermos. La formación de los catequistas es una prioridad, con los más cercanos realizamos un encuentro mensual». Necesidades D. Emilio y D. Luís Fernando se dirigen a nuestro obispo comentándole las necesidades más apremiantes que tienen para poder desarrollar mejor su labor pastoral: «Como pudo comprobar en su estancia con nosotros, el medio de transporte para el sacerdote es una de las necesidades fundamentales. Otra de las prioridades que conversamos con usted es la rehabilitación del Centro Pastoral en que se realizan los cursos de formación para guías y catequistas de la zona, algo
fundamental si queremos que nuestra labor se haga llegar a la mayor parte de estas comunidades. Los mismos guías nos piden retomar estos cursos que hace años ya no se realizan. Ellos necesitan la formación y la animación constante para continuar en su labor. El centro requiere de algunas mejoras en su estructura y mobiliario que poco a poco iremos implementando». Nuestro obispo, en una carta que ha enviado al clero diocesano con motivo del DOMUND, ha lanzado una propuesta con el nombre de «Misión Esmeraldas», que consiste en una campaña de captación de fondos para ayudar a nuestra misión diocesana. Esta campaña, coordinada por la delegación de misiones, tiene como objetivo apoyar los proyectos de nuestros misioneros que ahora se centran en la compra de un vehículo todo terreno y en ayuda para arreglos urgentes en la vivienda y en los salones parroquiales. Como dice D. Ramón, «a modo de aguinaldo navideño», se abrirá una cuenta bancaria para apoyar estos proyectos. Por último, D. Luís Fernando y D. Emilio, en su carta se despiden de nuestro obispo D. Ramón manifestando el deseo de una colaboración estrecha con nuestra diócesis: «Quisiéramos mantenernos en contacto continuo con la diócesis de Jaén y que puedan sentir la misión como algo propio. Esperamos poder comunicar satisfactoriamente las experiencias y necesidades como vayan surgiendo. Sin más por nuestra parte nos despedimos deseándole un nuevo curso lleno de bendiciones». En este mes de octubre, dentro de la campaña del DOMUND, la gran jornada de las misiones, queden las palabras de nuestros sacerdotes en la misión diocesana de Jaén en Ecuador, como compromiso de nuestra Iglesia en el campo de las misiones y como llamada a todos para colaborar con ellos en su labor evangelizadora.
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LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR
Viaje del Sr. Obispo a la Misión Diocesana de Ecuador «Hace unos meses informaba al presbiterio diocesano sobre la situación del proyecto misionero en las lejanas tierras de Esmeraldas, en Ecuador. Enviamos por delante a nuestro hermano D. Luís Fernando Criado Reca, y en el pasado mes de agosto, acompañé a D. Emilio Samaniego Guzmán. Juntos y de la mano del Obispo de aquel extenso Vicariato Apostólico, D. Eugenio, y su presbiterio, continúan y afianzan la sementera del Evangelio en aquellas tierras junto al Pacífico». (De la carta pastoral a los sacerdotes con motivo del DOMUND de D. Ramón del HoyoLópez)
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LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR
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LA MISIÓN DIOCESANA EN ECUADOR
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VIDA DIOCESANA
Aportaciones en el Consejo Diocesano de Pastoral Francisco Rosales Fernández Vicario de Evangelización El pasado día 13 de septiembre, iniciando el nuevo curso, se reunió en Jaén el Consejo Diocesano de Pastoral, cuyos componentes en su mayoría son laicos, para reflexionar sobre diversos aspectos de la evangelización en nuestra diócesis en estos tiempos cruciales que corren. Una de las actividades de toda la mañana que duró la sesión, fue concretar y animar en las tareas que propone para este curso el Plan Diocesano, centrado en la Comunión y en la Corresponsabilidad dentro de la Iglesia. En esta reflexión preocupó bastante el modo cómo se podría dignificar el domingo como Día del Señor, y dentro de él, la Eucaristía. En todo esto existió una especial sensibilidad por parte de los asistentes que pedían que se animara en la toma de conciencia ya desde edades infantiles y juveniles. Respecto a la Misa, se apuntó a que de forma natural se hicieran breves moniciones que sirvieran de explicación de los diversos gestos y momentos de la celebración; que se revisaran los horarios para dar oportunidad a todo tipo de trabajos, y sobre todo que se retomara la importancia de las homilías; que se llevara a cabo un trabajo para conseguir buenos lectores proclamadores de la Palabra de Dios; que se recupere el canto de toda la asamblea; que se tenga especial cuidado en impartir la comunión a personas en situación irregular que producen escándalos en las comunidades; y sobre todo, que exista un clima de verdadera acogida afectiva en las celebraciones. Para que todo esto sea una realidad bien vertebrada, se valoró la necesidad de que en cada parroquia funcione un equipo de liturgia, verdadero animador de la asamblea que celebra la fe. Allí donde ya exista, que se supere la rutina, que haga oír su voz en el Consejo Parroquial, que sepa integrar a los jóvenes, que dedique tiempo a la formación de sus componentes, y que prepare con ilusión cada semana la Eucaristía dominical. A la Delegación Diocesana de Liturgia se pidió, dentro de sus posibilidades, que pusiera a disposición de unos materiales adecuados a nuestra realidad, para que los equipos puedan llevar su labor de animación: elaborar carteles, hojas dominicales, selección de cantos, etc… Si hubo un tema de especial sensibilidad fue el de las homilías. Se sabe que ellas son en muchos casos los únicos cauces de formación y propuesta 12 / 19 OCTUBRE 2008
de vida para los cristianos. En este tema se apuntaron ideas muy concretas como las que siguen: mayor preparación, claridad, brevedad, actualización y valentía; que sean contenedoras de mensajes concretos y propuestas para la conversión; que tengan una organización, con un principio y un final. Se les echa en falta actualmente un lenguaje cercano y el calor humano, el convencimiento del que la pronuncia, y la inclusión de mensajes dirigidos a los niños y a los jóvenes. Fue opinión común la necesidad de mejora que presentan las homilías de nuestros domingos. Sobre el valor que se les otorga, y el ritmo que vienen desarrollando los Consejos de Pastoral Parroquial y Arciprestal, se señalaban como instrumentos válidos para el momento oportuno por el que atraviesa hoy la Iglesia, y su necesidad como caminos de comunión y corresponsabilidad. Pero se notaba un cierto cansancio y rutina pasados ya unos años desde su constitución. La ausencia de renovación en muchos casos, debe llevar a la búsqueda de caminos de formación para sus miembros, igual que la necesidad de encontrar nuevas metodologías de trabajo que elimine la sensación de inutilidad y de tiempo perdido. También hay que valorar el espíritu de iniciativa y la necesidad de reflexión y de planificación en común, cada día con mayor urgencia. Otra gran preocupación entre los asistentes fue la Pastoral Juvenil. En un diálogo claro y sincero, se hizo un diagnóstico de lo que en este campo está fallando, más que diseñar con nitidez el camino a seguir entre todos, cosa que hoy por hoy no parece emerger con claridad. Se apuntó, con dolor, la lejanía con que viven las parroquias y los sacerdotes de los jóvenes, la distancia en cuanto a su lenguaje y a su
VIDA DIOCESANA cultura. La falta de dedicación y de tiempo «perdido» aparentemente, en este campo pastoral. Por todo ello se pedía un replanteamiento del tema, la potenciación de «lo diocesano» para provocar en los jóvenes una mirada en amplitud con otros grupos, promover las asociaciones, integrar a los jóvenes cristianos en los órganos de decisión, y nuevamente, la acogida afectiva como camino imprescindible. Aunque estaba prevista la reflexión de otros temas también de interés para la pastoral diocesana, la mañana no dio cabida a todos ellos. Algunos miembros del Consejo que traían sus reflexiones escritas, las entregaron. Este material no abundó en riqueza porque, por un lado no fueron las aportaciones muy numerosas, y además porque no venían arropadas del siempre necesario contraste de opiniones fruto del diálogo. En él se puede destacar, entre otros temas: la necesidad de hacer nuevos planteamientos de los llamados «cursillos prematrimoniales», de los que algunos apuntaban su conveniencia, y otros sin embargo su inutilidad si
siguen como están, algo puntual donde destaca la obligatoriedad y sin proyección a un seguimiento; se anima a que se les introduzca en el testimonio de la familia creyente dentro de la sociedad; la búsqueda de buenos equipos encargados de esta catequesis tan específica. Sobre la economía de la Iglesia, se pide un trabajo basado en la responsabilidad y no en la sensiblería. También se apuntó la necesidad de formación del pueblo cristiano en la Doctrina Social de la Iglesia, sin descender a mayor precisión. La reflexión sobre cómo llevar a cabo el Plan de Pastoral hizo aflorar la preocupación que el pueblo cristiano de nuestra diócesis tiene sobre la nueva evangelización, y la implicación que empieza a tener de forma corresponsable. Una experiencia concreta de unidad, tan necesaria «para que el mundo crea».
Encuentro de seminaristas andaluces Los pasados días 11, 12 y 13 de Octubre tuvo lugar en Jaén el encuentro anual de seminaristas andaluces. Asistieron los seminaristas y formadores de Córdoba, Granada, Guadix, Málaga, Sevilla y Cádiz. El encuentro tuvo su comienzo el día 11 con la acogida de los asistentes por parte del Seminario de Jaén a partir de las 13 horas con la entrega de algunos obsequios de bienvenida. Tras la acogida y acomodación de los asistentes se dio paso a la comida sobre las 14:15 y tras ésta los seminaristas pudieron visitar el edificio del Seminario de Jaén. La presentación del encuentro tuvo lugar a las 16:30 y seguidamente D. Antonio Rodríguez Carmona dio una ponencia titulada «La Palabra de Dios en la vida de la Iglesia». A las 9:00 se celebró la Eucaristía en el altar mayor de la Catedral de Jaén y seguidamente los invitados al encuentro pudieron visitarla acompañados de las interesantísimas explicaciones del señor deán D. Francisco Juan Martínez Rojas, después de lo cual fue la cena y, por último, una breve visita a los alrededores del seminario antes de ir a dormir. El día 12, tras el rezo de Laudes y el desayuno, los asistentes al encuentro se dirigieron a la ciudad de Úbeda, donde pudieron visitar las parroquias de El Salvador y Santa María. Tras esto se dirigieron al convento de San Juan de la Cruz, lugar en el que tuvieron ocasión de visitar y venerar las reliquias del santo y escuchar seguidamente una excelente ponencia titulada «San Juan de la Cruz, un místico hoy» a cargo del P. Delfín Villa, carmelita perteneciente al
mencionado convento. El encuentro prosiguió con la visita a la parroquia de San Pablo, la comida en la casa diocesana de espiritualidad La Yedra y un breve descanso para recuperar fuerzas y continuar ahora en Baeza, donde se pudieron visitar numerosos templos, entre ellos la Catedral de Baeza, lugar en el que el señor Obispo de Jaén, D. Ramón del Hoyo, presidió la Eucaristía. El señor deán, D. Francisco Juan, explicó la historia del templo y aclaró la razón histórica por la cual ambas catedrales comparten un único cabildo. Después de la cena en La Yedra se regresó a Jaén para descansar. El día 13, tras la Eucaristía y el desayuno, los seminaristas y formadores invitados al encuentro se despidieron muy felices y agradecidos por la acogida y sin duda conociendo mucho mejor nuestra tierra de Jaén.
13 / 19 OCTUBRE 2008
VIDA DIOCESANA
«El Señor me dio hermanos»: XII Encuentro de Jóvenes Franciscanos en Lopera Carmen Molins, ofs. Fraternidad «Santa Ángela de la Cruz» de Lopera Durante los días 19 al 21 de septiembre, se ha celebrado en la localidad de Lopera el XII Encuentro de Jóvenes Franciscanos, organizado por la Orden Franciscana Seglar «Santa Ángela de la Cruz» de Lopera y su Grupo de Jóvenes Franciscanos. El que fue en otros tiempos convento de las Hermanas de la Cruz que albergaba un colegio y una Ermita consagrada a «Nuestro Padre Jesús Nazareno» y convertido ahora en Centro Parroquial ha sido el lugar en el que hemos acogido a nuestros hermanos con un gran patio que nos ofrecía la posibilidad de estar al aire libre en todas nuestras actividades. El lema del encuentro fue «Con solo dos o tres «. Y, ¿por qué ese lema? Pues cuando lo estábamos organizando pensábamos «y ¿si no viene nadie?». «Pues con que vengan 2 ó 3 el encuentro se hace», nos decíamos. Pero también con solo 2 ó 3 que nos reunamos en nombre de Cristo podemos hacer que algunas cosas cambien a nuestro alrededor. Sobre las 7 de la tarde empezaron a llegar los participantes venidos de Estepa, Cádiz, Chipiona, Porcuna, Arjona, La Puebla de Cazalla, Granada, Ronda, Martos y por supuesto los de Lopera. Se entregó el diferente material que usaríamos y unas cruces de San Damián de cartulina de colores para poner el nombre y la localidad de procedencia, se hicieron 8 grupos que se distinguían por su color y los integraban participantes de las distintas localidades, por lo tanto en cada grupo estábamos personas que nos conocimos en ese momento. A continuación se instalaron en las habitaciones y empezamos con la dinámica de presentación para empezar a conocernos un poco más. Acto seguido tuvimos la cena, que como viene siendo habitual era para compartir entre hermanos lo que cada uno traía. Y después de la cena llego el momento de la oración, preparada con mucho cariño en un marco incomparable, el patio de armas del Castillo-Fortaleza de la Orden de Calatrava del S.XIII, una oración muy especial con antorchas y exposición de fragmentos de una película de la vida de S. Francisco, en la que se llegó a respirar la paz y el recogimiento, así como la interiorización de Nuestro Señor.
14 / 19 OCTUBRE 2008
En la mañana del sábado, después de la oración, el desayuno y un tema de formación, comenzamos las actividades que denominamos misiones, cada uno teníamos una misión: unos se encargaron de la limpieza de la ermita de Jesús, otros de la limpieza de los baños y el recinto (comedor, patio, etc.), otros se quedaron en la cocina ayudando a pelar patatas o fregar, otros fueron a la ermita de San Roque, patrón de Lopera, y rezaron la Corona Franciscana, otro grupo se encargó de ir por las calles saludando a los transeúntes y explicándole lo que hacían, otro grupo se encargó de visitar a los enfermos y llevarles la comunión y finalmente el último grupo se desplazo a la residencia de ancianos Jesús Nazareno a visitar a las personas ingresadas en este centro. Ya de regreso, nuestro querido Fray Salva y Jesús - Ministro de la Fraternidad de Lopera-, lavaron los pies a algunos de nosotros rememorando cuando San Francisco lo hacía con sus hermanos al volver de trabajar y cada grupo expuso ante todos sus impresiones de las distintas misiones. Cuando terminamos la puesta en común, llego la hora de la comida y después de un descansito empezaron las Olimpiadas Franciscanas, en las que participamos todos los equipos. Estas Olimpiadas consistían en realizar diferentes pruebas que estaban relacionadas con las «Florecillas de San Francisco», cada equipo en una cartulina escribimos el nombre de un país imaginario y diseñamos una bandera que nos representara. La verdad es que fue muy divertido y al final a los 3 primeros equipos se les concedieron sus medallas de oro, plata y bronce y al resto de los participantes sus diplomas olímpicos. El resto de la tarde la empleamos en el aseo, ya que por desgracia las duchas no estaban en el mismo recinto, sino que nos habían sido cedidas amablemente por parte de la Directora del I.E.S. «Gamonares», y en preparar la velada de la noche. Después de la cena empezó la velada, ésta consistía en que cada grupo tenía que preparar un programa de televisión, unos hicieron informativos, otros concursos como «con 2 ó 3 responda otra vez», otros una telenovela, otros la parte de la publicidad, la verdad es que pasamos un rato muy agradable en el intermedio tomamos unos aperitivillos con refresquitos, sangría, chuches, etc. Al final acabamos
VIDA DIOCESANA agotados después de un día tan intenso y era necesario descansar para seguir con la marcha del día siguiente. Antes del desayuno del domingo la oración nos la ofrecieron el grupo de los más pequeñitos que asisten a la formación cristiana y franciscana que les imparten el grupo de jóvenes y que estuvo muy bonita y ellos encantados con su participación. Y llegaba el gran momento, a las doce de la mañana en la Parroquia de la Inmaculada Concepción se iba a celebrar la Eucaristía, ese momento esperado por todos los cristianos para, en fraternidad, escuchar la Palabra y recibir el cuerpo de Nuestro Señor que nos dará fuerza para seguir con nuestra vida cotidiana. Teníamos que repartir las camisetas con el lema del Encuentro para ir todos iguales y era todo un hervidero de gente buscando tallas y acelerando para no llegar tarde. La ceremonia estuvo presidida por el Padre Provincial de la Provincia Franciscana de Granada, Fray Severino Calderón, nuestro Párroco D. Luís de la Coba y 3 Hermanos Menores que quisieron acompañarnos en este momento. Desgraciadamente Fray Salvador sufrió una pequeña indisposición y no pudo estar con nosotros. Personalmente me gusto mucho la misa, con la participación de toda nuestra parroquia, y los cánticos acompañados de palmas y alegría que solemos imprimir en nuestras celebraciones. La Homilía de Fray Severino fue muy clara y concisa sobre todo para la juventud que en estos tiempos tiene tanto a su alcance y algunas veces deja de lado lo que los cristianos tenemos como lo más grande: Dios. Después de misa tuvimos un ratito para dar un paseo y hacer lo que nos apeteciera y a las 2 teníamos que estar en el Centro para comer y recoger sus cosas los que tenían que marchar. Bueno, como podréis comprender las despedidas siempre son tristes, en estos días, aunque son pocos, la convivencia es muy intensa, sobre todo cuando hay gente que ya se conoce de otros encuentros y
cada vez tienen más cosas en común. Luego, a los que nos quedamos nos tocó recoger todo, tanto trabajo para preparar y luego todo pasa muy rápido y enseguida tienes que recoger y limpiarlo todo para que estos Salones Parroquiales puedan ser utilizados por las siguientes actividades que en ellos se desarrollen. Nosotros, los que organizamos todo esto, hemos pasado varias semanas pintando, limpiando, cocinando y ha sido una experiencia, aunque cansada, ya que algunos trabajamos por las mañanas fuera de casa y también en nuestros hogares, muy constructiva, ya que hemos vivido también nuestra convivencia particular. Cada uno queríamos hacer las cosas a nuestra manera, hasta que al final se decide cual es la mejor, pelearnos (pero no en serio por supuesto) y reconciliarnos. Toda una serie de cosas, que sumadas a los tres días del Encuentro dan como resultado en primer lugar un baño de paz, amor a Dios y a nuestros hermanos y espiritualidad, que realmente es lo que en definitiva tenemos que buscar en estas reuniones, aunque también está muy bien divertirse y pasárselo bien, pero cuando nos vamos a casa por muy cansados que estemos y sobre todo al día siguiente, que fue el lunes, echamos de menos el estar todo el grupo junto después de tantos días diciendo: «¿qué tenemos que hacer ahora? ¿Te ayudo a fregar?». Aunque por supuesto tenemos a nuestras familias, es como si nos faltara algo. Nosotros creemos que ha sido muy positivo y el trabajo muy gratificante, esperamos que la gran mayoría que ha estado en este encuentro opine lo mismo.
Presentada una web de los Tribunales Eclesiásticos Los Tribunales de la Provincia Eclesiástica de Granada (formada por las Diócesis de Granada, Guadix, Almería, Málaga, Cartagena-Murcia y Jaén) acaban de presentar una web (www.tribunaleseclesiasticos.com) que pretende ser un servicio de información y apoyo a los agentes de pastoral familiar, a los profesionales del foro y a todos aquellos que estén interesados en los procesos canónicos de nulidad matrimonial. En esta web se explica de modo asequible qué es un Tribunal Eclesiástico, qué es una nulidad eclesiástica de matrimonio (quién la puede solicitar, los motivos de nulidad, los pasos a seguir, etc.)... También se puede contactar con el Tribunal Eclesiástico de cada diócesis. Hay enlaces a webs de interés, y diferentes recursos pastorales como el documento «Matrimonios en dificultad», legislación sobre matrimonio y sobre otras cuestiones jurídicas... Como dato curioso, en la carpeta de recursos se puede descargar un powerpoint sobre el proceso de nulidad matrimonial, que aunque sea sólo por curiosidad, merece la pena ver.
15 / 19 OCTUBRE 2008
VIDA DIOCESANA
Apertura de Curso de los Equipos de Nuestra Señora Mª Félix y Pedro F. Criado. Hogar ENS Días pasados, en Linares y Huelma, se ha iniciado el nuevo curso de los Equipos de Nuestra Señora de Jaén, movimiento de matrimonios cristianos, que se iniciara en París en 1.947 y que está implantado en varios pueblos y ciudades de nuestra geografía diocesana. Comienza un nuevo caminar enmarcado en este Año Jubilar de S. Pablo que el Papa Benedicto XVI ha proclamado con motivo del bimilenario del nacimiento de Pablo de Tarso, apóstol de los gentiles. Este curso es el tercero que seguiremos profundizando en la Orientación: “Equipos de Nuestra Señora, comunidades vivas de matrimonios, reflejos del amor de Cristo” y concretamente durante este año reflexionaremos sobre la tercera parte “reflejos del amor de Cristo”. Crecer en el amor a Dios es el quehacer de toda la vida. Los ENS como movimiento eclesial nos ofrecen unos medios como la escucha de la palabra, la oración personal , conyugal, familiar, la sentada, la regla de vida, la participación en los sacramentos, la formación... para crecer en esta dirección. Todos estos medios nos irán conformando con Jesús de
Nazaret para que como nos dice san Pablo en su carta a los Filipenses 2,5 “tengamos entre nosotros los mismos sentimientos de Cristo” y así testimoniar amor al estilo del Señor como nos indica el lema del presente curso “CRISTO, NUESTRO MODELO DE AMOR”. Este año en el que la Iglesia nos exhorta a leer y meditar los escritos del apóstol Pablo, columna fundamental de la Iglesia, también tendremos como tema de estudio “Jesucristo, centro de la vida del cristiano”,nos adentraremos en la persona de Jesús, su humanidad, su divinidad, su mensaje, su donación y entrega hasta la promesa de su presencia real entre nosotros siempre que nos reunimos en su nombre. Bajo la protección de Nuestra Señora comenzamos un nuevo periodo recordando las palabras de nuestro fundador Henri Caffarel “¿Somos conscientes, en efecto de la misión que nos incumbe en el mundo actual de ser... testimonios del amor conyugal, del amor paternal, del maternal, del amor filiar y del amor fraternal?”.
Acercarnos a nuestra Catedral Pepi y Alberto. La sacristía, es la obra cumbre de Andrés de Vandelvira. En total son 72 columnas corintias (las 36 exteriores de una sola pieza de piedra), y 16 arcos que se repiten en el ático, dando forma a un gran rectángulo de 22 por 11 metros. Dicen que a Vandelvira, le gustaron mucho las columnas pareadas de la Alambra de Granada y la idea la trasladó a nuestra sacristía, lo mismo le ocurrió con la doble arcada de la Mezquita de Córdoba y las reprodujo también en nuestra Catedral, aunque no las presenta tan cerradas. De ésta forma las dos ciudades andaluzas, están presentes en nuestro primer templo. La sacristía de nuestra catedral no necesita ornamentación porque al contemplarla te maravilla, destacaríamos la existencia al fondo, de un precioso relicario de Alfonso Mena. Refería nuestro querido y recordado canónigo D. Fernando Gallardo, que de las decenas de sacristías contempladas por él, como la nuestra de bonita agradable a la vista y bien terminada, ninguna.
16 / 19 OCTUBRE 2008
VIDA DIOCESANA
Vida Ascendente: Homenaje a Dª Ángeles Calvo Rodríguez El pasado 18 de junio tuvo lugar la clausura del curso 07-08 del movimiento «Vida Ascendente» de Jaén. Comenzó con la celebración de la Eucaristía en la Iglesia de San Ildefonso; al finalizar la Misa, oficiada por el Consiliario D. Carlos Martínez, se ofreció un ramo de flores a la Santísima Virgen de la Capilla, patrona de Jaén y se cantó la Salve. Más tarde, en el Seminario Diocesano, los asistentes (casi 150) compartieron una comida de hermandad y, para finalizar el día de convivencia, se celebró la Asamblea General. En el transcurso de la misma se presentó a los miembros de Vida Ascendente, venidos de los grupos de toda la provincia, la nueva presidenta Dª María Dolores Núñez García y se entregó, por la Comisión Diocesana, una placa a la presidenta saliente Dª Ángeles Calvo Rodríguez en reconocimiento a los ocho años que, con gran dedicación, estuvo al frente de la misma.
La web de la Diócesis de Jaén alcanza las 30.000 visitas en el primer mes desde su renovación El pasado 16 de septiembre se presentaba la renovada página web del Obispado de Jaén, que gestiona la Vicaría de Comunicación. Un mes más tarde son más de 30.000 las visitas que ha registrado esta página. La media de 1.000 visitas diarias supone un gran apoyo al actual diseño de esta página y a su constante actualización. En la página, además del organigrama de la curia diocesana, de los enlaces y de los escritos y actividades del Obispo D. Ramón del Hoyo, aparecen diversas informaciones sobre parroquias, delegaciones, seminario diocesano, campañas institucionales y las actividades más representativas de la diócesis. Desde esta página se pretende ofrecer a los internautas la actualidad de la Iglesia de Jaén. También se han incorporado a algunas de las noticias una galería de fotografías, como es el caso de la peregrinación diocesana a Tierra Santa o el viaje del Sr. Obispo a la misión diocesana de Ecuador. Desde esta página web también se pueden descargar materiales para la pastoral, los documentos y decretos del obispado y los materiales de las campañas institucionales. La revista diocesana «Iglesia en Jaén», de publicación quincenal, también se ofrece en esta web. Además, los programas que la Vicaria de Comunicación del Obispado de Jaén realiza en la cadena COPE en Jaén también se pueden escuchar desde esta web. Se trata de «El espejo», emitido todos los viernes a partir de las 3’05 de la tarde y «Gloria», los domingos a las 9’45 de la mañana. La Vicaría de Comunicación agradece a los internautas su interés por seguir la vida de la Iglesia de Jaén a través de las numerosas visitas en su web.
17 / 19 OCTUBRE 2008
LA VOZ DEL OBISPO
CARTA PASTORAL DEL SR. OBISPO DE JAÉN A LOS NIÑOS Y NIÑAS CON MOTIVO DEL DOMUND
«El Domingo misionero de los niños y niñas» Muy queridos amigos: Hace tiempo que no os escribo, pero me acuerdo todos los días de vosotros. Ya sé que habéis comenzado un nuevo curso en el colegio y la catequesis y que habéis pasado unas vacaciones muy felices. ¡Qué suerte, tener muy cerca a tantas personas que os quieren y ayudan a crecer por dentro y por fuera! ¿Sabéis quiénes son, para rezar por ellos a Jesús y a la Virgen María? Esta vez quiero escribir a los misioneros más importantes de Jaén: son los más pequeños. Ya sé que sois muchos y, seguro, que tú eres o vas a ser como ellos. No es tan difícil, pero es muy importante. Piensa en esto que te escribo y responde, por dentro, a las preguntas que te hago para saber si eres ya misionero o misionera: ¿Le rezas a Jesús y quieres parecerte a Él? ¿Quieres llevar alegría a los que están tristes? ¿Quieres ser amigo o amiga de todos y no sólo de los que te quieren a ti? ¿Les has dicho alguna vez a tus hermanos, amigos… quién es Jesús y lo que nos quiere a todos? ¿Alguna vez has regalado a los pobres alguna cosa tuya? ¿Rezas alguna vez por los que no tienen casa, vestidos, colegio, comida, libros, juguetes…? ¿Conoces a algún misionero o misionera de Jaén? Siempre en este mes de octubre, ¡tan precioso! en que se caen las hojas y maduran las aceitunas, celebramos la gran fiesta de las misiones, el DOMUND. El Papa nos ha invitado especialmente en este año a parecernos a un gran misionero que nació ya hace dos mil años. Se llamaba San Pablo. Se encontró a Jesús después de resucitar. Seguro que en tu casa, en la catequesis o en el colegio te habrán enseñado más cosas de este Apóstol de Jesús. Sólo os diré que un día, después de encontrarse con Jesús, se bautizó y, en vez de perseguir a los cristianos, se hizo misionero y predicó el Evangelio de Jesucristo por cientos de sitios. Hasta pudo venir también a España. A los que ya estamos bautizados como San Pablo, Jesús nos invita a ser misioneros también, cada vez un poco más según vamos creciendo. Seguro que Jesús te ha puesto ya en la lista de los misioneros y misioneras de Jaén. Algunos se han ido muy lejos a predicar el Evangelio. Están en 36 países de todo el mundo. Los últimos han sido dos sacerdotes jóvenes que hemos enviado a Esmeraldas, en Ecuador. Les voy a pedir que os escriban una carta para que os cuenten cómo están y cómo son los niños y niñas de allí. Ya me despido. Ha sido un poco larga la carta. Perdona. Te animo para que no faltes a la catequesis y que se note en casa y en el colegio que eres ya un poco misionero o misionera. Os bendice vuestro Obispo y amigo,
18 / 19 OCTUBRE 2008
+ RAMÓN DEL HOYO LÓPEZ OBISPO DE JAÉN
LAS LECCIONES DEL SEÑOR MANUEL CARMONA GARCÍA
Domingo XXX del Tiempo Ordinario (A)
Conmemoración de Todos los Fieles Difuntos
Lejos de una moral reducida a las exigencias personales para con Dios, la Ley que por medio de Moisés ya estableció prescribía más sobre el trato a los demás, que sobre lo debido a Él como Dios. En esta dimensión social, donde se verifica si de verdad hacemos lo que quiere Dios, nos da hoy su orientación básica el Señor. En la primera Lectura escuchamos unas cuantas normas puestas por Dios en orden a la justicia social: cómo tratar a los inmigrantes y forasteros; a los pobres y más débiles; o a los que tenemos que prestar. Y siempre con la seria advertencia de que escuchará y considerará dirigido a él el trato que dimos al que se le pueda quejar: «Si grita a mí –nos reitera– yo lo escucharé y os lo haré pagar, porque yo soy compasivo». De ahí que el Salmo proclame a Dios como la roca y el baluarte del que se encuentra en peligro o siente necesidad. En el Evangelio es Jesús quien hoy nos quiere aclarar qué es para la Dios lo más importante, ante la pregunta de un fariseo sobre cuál era el mandamiento principal. Se le pregunta por uno y Jesús le contesta con dos: «el primero» –le dice– «amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser»; pero «semejante a él es el segundo: amarás a tu prójimo como a ti mismo». Y es que no se puede amar a Dios sobre todas las cosas, sin amar lo que sobre todo ama Él. De ahí que no se pueda separar el amor al prójimo del que a Él se le profesa. El segundo mandamiento viene a ser así el criterio para saber si el primero y principal se cumplió. Y por eso le termina Jesús por decir al fariseo –y a nosotros hoy también– que son «estos dos mandamientos» los que sostienen la ley entera y los profetas». Fue San Agustín quien lo explicó del modo quizás más bello que se podía expresar. Al comentar precisamente la afirmación del Señor de que «su carga es ligera», la compara a las alas para volar y termina por decir: «un ala es «amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todo tu ser». Pero no la tendrás, si no tienes la otra también: «amarás a tu prójimo como a ti mismo». Porque, «si no amas a tu hermano, a quien ves, ¿cómo podrás amar a Dios, a quien no ves?» (1Jn 4,20). Añade, pues, esa otra ala y así podrás volar, apartándote de la codicia de las cosas terrenas y adhiriéndote a los bienes del cielo con la caridad. Mientras te apoyes en estas dos alas, tendrás en alto tu corazón, para que, cuando llegue el momento, lleve tu cuerpo a lo alto también» (Discurso 68). Es lo que Pablo en la segunda Lectura también muestra, al expresar a los Tesalonicenses el motivo de su satisfacción: «cómo abandonando los ídolos, os volvisteis a Dios, para servir al Dios vivo y verdadero, y vivir aguardando la vuelta de su Hijo Jesús desde el cielo».
Hoy la Iglesia se une a la intercesión del Señor Resucitado por todos los difuntos, aquellos hermanos nuestros que compartieron nuestra existencia y su muerte también, para que sean llevados a la gloria de Dios que ya brilla en su rostro. Esta oración seguro será escuchada, por ser la del mismo Cristo a la que su Iglesia se siente hoy tan asociada y responder al interés primordial mostrado por Dios en cualquiera de las lecturas para las misas por los difuntos que podamos escuchar. En la cumbre de su creación material, Dios situó al hombre. Formado de cuerpo caduco y mortal, fue sin embargo alentado por ese espíritu que es capaz de aferrarse a lo eterno. Siendo pues de naturaleza mortal, el hombre, apegado al Dios vivo y fuente de toda vida, no quedaba destinado a la muerte. Con su determinación a vivir según sus apetencias, sin tener ya para nada en cuenta el querer de Dios, el hombre quedó a merced del dolor y la muerte tan propios de su naturaleza. Dios, que es Señor de vida, no se resignó. Y, por eso, no solo prometió la salvación, sino que Él mismo fue despertando la esperanza en la redención de la muerte, en todos los que se lamentaban de que ésta pudiese interrumpir para siempre su amistad con Él. Y así, en el Antiguo Testamento se escuchaba cada vez con más fuerza y convicción el anhelo de los justos por ver y gozar de Dios después de la muerte. Los Salmos son elocuente reflejo de esta esperanza por llegar a contemplar definitivamente el rostro de Dios, que en Jesús obtuvo ya respuesta; en él se cumplió por fin esa promesa. El Hijo que de Él procedía, viviendo su misma vida, tomó nuestra misma naturaleza en la condición mortal en que Adán la dejó: se solidarizó con la humanidad dominada por la muerte, para revestirla en Él de la gloria inmortal a la que Dios la destinó. Pero ese tránsito le costó. Sí, le costó crecer, no sin sufrimiento; le costó morir para lograr la vida. Fue su venida del ámbito del Padre al seno de María; del seno virginal al ámbito de la vida terrena; hasta lograr con su obediencia y adhesión total al querer de Dios, frente a todos los que le quisieron apartar, ese tránsito pascual hacia la plenitud. La plenitud del hombre en la plenitud de Dios. En este tránsito del Cristo, del que el domingo es celebración, se nos desvela el itinerario del hombre para alcanzar la Vida. Esa vida que perdió y ahora ya puede en Él recuperar. Primero, nos desarrollamos para este mundo en el seno materno, cálido pero estrecho. No sin dolor nacemos a esta vida, a esta existencia terrenal donde han de crecer y madurar los hijos de Dios. Aquellos que por la fe y el bautismo ya son de Cristo, pero que han de perfeccionarse como Él que, aún siendo el Hijo, aprendió sufriendo a obedecer para convertirse en modelo de todos los que le sigan, hasta hacerlos partícipes de su resurrección. De modo que, al igual que nacemos a esta vida no sin dolor, pero a un ámbito mejor y de más plenitud, así también, mediante el esfuerzo de la obediencia a Dios y el dolor de la muerte, llegamos a la altura y profundidad, a la anchura y la inmensidad de la vida de Dios, que es nuestro destino. Por si algo quedó que padecer para despegarnos de todo lo que de Dios nos pudo apartar, queda en pie todavía la intercesión y los méritos de Cristo con toda su Iglesia, para acceder por fin al Reino.
19 / 19 OCTUBRE 2008