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SERIE: LA CIUDAD DE DIOS “LA NUEVA JERUSALÉN” / 4 Pst. Dr. David Campos Carrillo. Texto Bíblico: Apocalipsis 21:9-27; 22:1-6
Samborondón, Noviembre 22/2015 shalom_alehem45@hotmail.com
Los dos verbos que más se repiten en el libro de Apocalipsis son: Mirar y Oír en sus respectivos tiempos. La persona que repite estas palabras es el Apóstol San Juan. Se repite unas 60 veces la palabra “Mirar” y otras tantas la palabra “Oír.” Ambos verbos son activos y tienen que ver con los sentidos de la vista y el oído. Claramente nos dice también que todo lo vio Juan en Espíritu. Siempre ha existido entre los cristianos la pregunta de ¿Cómo será el cielo? ¿Será algo real, tangible, visible? o ¿Sólo espiritual? Personalmente y apoyándome en las Sagradas Escrituras, creo firmemente que todo será real, tangible y visible. Lo que hará la diferencia entre esta vida y la vida eterna, la BIBLIA claramente lo señala.
1.
CUERPOS TRANSFORMADOS. 1° Corintios 15:42-50.
Esta porción bíblica hace una diferencia muy marcada entre esta vida y la vida con CRISTO. Hay un contraste muy claro entre una cosa y otra. Se habla de la vida en esta tierra en la que hay corrupción, deshonra, debilidad, cuerpo animal, Adán. Todo indica decadencia, todo indica un constante deterioro. Pero la otra cara de la moneda es incorruptible, gloria RESURRECCIÓN, poder, cuerpo espiritual, postrer Adán o un hombre trasformado. Nadie podrá entrar al cielo si no es transformado primeramente por CRISTO. Nadie se debe hacer ilusiones sobre este asunto. El único camino es CRISTO. Al cielo no irá nadie sin haber primero aceptado a CRISTO como su único, suficiente y personal SALVADOR. Cuando el SEÑOR estuvo entre nosotros en persona, ÉL nos dijo: “Toma tu cruz cada día” queriéndonos decir que siempre tendremos problemas que sobrellevar mientras estemos en la Tierra, pero esos problemas son de toda índole donde la parte espiritual, sentimental, afectiva y material se unen. Pero también dijo: “En la casa de mi Padre, muchas moradas hay” (Juan 14:2) ¿Serán estas moradas algo real o algo espiritual? ¿Se las podrá habitar, o no? ¿Qué haremos allí? Veamos lo que nos señala la BIBLIA y usted podrá darse cuenta si es algo tangible o no.
2.
EL TRONO DE DIOS. Apocalipsis 21:9-27; 22:1-5
Esta porción es preciosa. Juan el apóstol, ve como un ángel comienza a mostrarle la Ciudad de DIOS. La descripción es por demás hermosa. Se ve una ciudad preciosísima con puertas, muros, con medidas, piedras preciosas, adornos, oro, un río limpio, árboles, sin sol, ni luna, sin contaminación, sin pecado. Pero lo más hermoso es el vr. 4 que dice: “Y verán SU ROSTRO.” El vr. 6 dice: “Estas palabras son fieles y verdaderas.” ¿Es todo eso espiritual o real? ¿Es literal o imaginario? Juan vio y eso es muy claro. El oro es oro. Eso es un metal y no un espíritu, las piedras preciosas, ríos, árboles, calles, no son cosas espirituales sino materiales. Tenemos que aceptar que la BIBLIA es un Libro en el que podemos confiar porque es la Palabra de DIOS.
3.
LOS HABITANTES DE LA CIUDAD SANTA. Apocalipsis 3:12,22.
La tierra es un planeta enfermo, como enfermos son sus habitantes. Todo está contaminado. Desde los niños hasta los ancianos. Todos sufrimos de angustias, penas, desengaños, tristezas, amarguras. A ratos, tenemos pequeñísimos destellos de alegría que se esfuman tan pronto llegan. El hombre en la tierra es pobre desde todo punto de vista. La Tierra se sigue desgastando y ya estamos en los albores de la Segunda gloriosa Venida de Nuestro Salvador JESUCRISTO. Entonces todo esto cambiará. Pasaremos de una ciudad sucia, a una ciudad limpia, de un mundo sucio a un mundo limpio, de un universo inmundo a un cielo santo, de un sitio donde tener comunión con DIOS es una lucha, a un sitio donde tener comunión con DIOS es un descanso. Allí se cumplirá a plenitud 1° Corintios 13:12 “Mas veremos cara a cara.” Allí veremos al SEÑOR y estaremos con ÉL (Juan 14:3). Allí seremos semejantes a ÉL en gloria (1° Juan 3:2). Esto es algo Literal. Allí tendremos descanso, pero no el descanso de los muertos, sino el descanso del pecado. Todo nuestro trabajo se ve dañado por el pecado Pero en el cielo, habrá mucho trabajo sin pecado, huelgas, sindicatos, gerentes déspotas y ladrones que se roban el dinero de los trabajadores. Eso no habrá en el cielo. Descansaremos de tanto pecado (Apocalipsis 14:13). Allí no habrá luto, funerarias, llanto, cementerios, cruces, féretros, salas de velaciones, porque todo eso se habrá acabado (Apocalipsis 21:4). Allí los habitantes del Cielo reiremos, gozaremos, jugaremos, alabaremos, nos divertiremos trabajando para la honra y gloria de DIOS. Allí le serviremos al SEÑOR (Apocalipsis 22:3). “Y sus siervos le servirán” nos dice la Palabra. Nuestra ciudadanía en el cielo será de servicio, una vida de plena gloria, felicidad, totalmente incomprendida a la mente humana.
4.
EL ARQUITECTO DE LA CIUDAD SANTA. Hebreos 11:10.
Una de las cosas más feas de este mundo es el desorden y si de ciudades se trata, la cosa llega a lo horroroso. Las ciudades tienen una contaminación increíble porque casi siempre se
iniciaron con invasiones. Pero la Ciudad de DIOS ha sido hecha con fundamentos con el mejor Arquitecto que existe y DIOS mismo ha sido el constructor, por lo tanto, todo es bello, todo es correcto, todo está en su lugar, todo ha sido planificado a la perfección y ejecutándose al más alto grado de excelencia. Pero otro de los graves asuntos de la humanidad es que si en verdad hay ciudades bonitas en la tierra, estas resultan muy caras para vivir y en algunas se nota que hay falta de trabajo o también hay mucho racismo. Eso hace que los habitantes de una ciudad emigren a otra en busca de trabajo o estudios o para salir de los peligros o deudas. Pero la Ciudad celestial es una CIUDAD PERMANENTE (Hebreos 11:16) porque DIOS ha preparado una ciudad de donde nadie nos sacará jamás. Esa es la ciudad palpable y literal en donde tendremos la compañía de millares de ángeles y sólo estaremos los inscritos en el Libro de la Vida (Hebreos 12:22-23). 5.
LA CIUDAD DE LOS PREMIOS. Salmo 58:11.
Una de las asombrosas cosas de DIOS es que no solamente nos llevará al cielo, sino que después, además, nos recompensará. Lea 1° Corintios 3:8. ¿Cómo se ganan los premios? Primero, por agradar a DIOS. Segundo, por nada más que hacer un pequeño favor (Mateo 10:42). Tercero, por dar de comer al hambriento, por dar agua al sediento, por recibir al forastero, por vestir al desvalido, por visitar al enfermo, por ayudar al que está en la cárcel (Mateo 25:34-40). Hay mucho por hacer para llegar a la Ciudad de DIOS. Solamente nos queda prepararnos para ir al más hermoso lugar. 6. LA NUEVA JERUSALÉN. Apocalipsis 21:9.
LA BIBLIA llama al cielo con un nombre muy lindo. La llama LA NUEVA JERUSALÉN. Así dice Hebreos 12:22-24. Uno de los más graves problemas que existe en el mundo es la inmigración. La Inmigración trae separación, tristeza, abandono, despedidas, lágrimas. Pero la NUEVA JERUSALÉN dice algo diferente (Hebreos 13:14). Pero ¿Cómo es esa ciudad? Lo más hermoso es la palabra NUEVA. En el idioma griego tenemos dos palabras para decir NUEVO: NEOS: significa NUEVO, pero el concepto es de NUEVO a VIEJO. Pero hay otra palabra que es KAINOS y significa de VIEJO a NUEVO. La palabra KAINOS aparece en Apocalipsis 2:17 “Un Nombre NUEVO” 2° Corintios 5:17. NUEVA criatura. Efesios 4:24 “Vestíos del NUEVO hombre.” Revestido del NUEVO. Colosenses 3:10; “Cielo NUEVO y TIERRA NUEVA.” 2° Pedro 3:13, NUEVO PACTO Hebreos 8:13. NUEVA JERUSALÉN Apocalipsis 21:2, y TODAS LAS COSAS NUEVAS. Apocalipsis 21:5. Ahora observe LA CIUDAD DE DIOS, LA NUEVA JERUSALÉN (Apocalipsis 21:9-27; 22:15). Esa ciudad te está esperando. La decisión es solamente tuya. Tú escoges el precioso regalo de DIOS o irte a vivir en el infierno. La decisión es solamente tuya.
Amén.