“Historia de libertad” Václav Havel
Año 4
No. 153
Semana del 15 al 21de enero de 2012
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Ante un año de cambios,
que reine la unidad y la reconciliación
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PLEITOS CON EL TODOPODEROSO
Describiendo las costumbres de un pueblecito judío de la Europa oriental, Joseph Roth (1894-1939), el famoso novelista, dice lo siguiente a propósito de la oración de sus sufridos moradores: «No hacen a Dios una visita solemne, pero tres veces al día se recogen en torno ...
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¿PARA QUÉ VOTAMOS?
CUANDO EL NIÑO ENCARGADO NO ES EL QUE SE RECIBE
La pregunta que sirve de título a este escrito no tiene un sentido irónico o peyorativo, que sugiriera que el voto es inútil, como cuándo uno dice “¿Para qué te hablo si no me haces caso?”. De hecho, esa pregunta se la hacen muchos mexicanos precisamente con ese sentido de frustración ....
Imagínese mirando a su niño y declarando con frialdad: “Tú nunca debiste haber nacido”. Los padres están haciendo exactamente eso en los tribunales de todo el mundo, ya que presentan demandas por una “vida indebida” ....
Falleció el domingo 18 de diciembre a la edad de 75 años, el intelectual católico, dramaturgo y expresidente checo, Václav Havel, de quien el conocido escritor Milan Kundera dijo que su vida “se asemeja a una obra de arte”. Václav Havel fue el último presidente de Checoslovaquia, primer presidente de la República Checa y el principal gestor de la llamada “Revolución de terciopelo” de 1989 que logró vencer pacíficamente al partido comunista que tenía el monopolio del poder político. Uno de los hitos en la vida del también autor de diversas obras de teatro fue la llamada “Carta 77”, firmada con otros intelectuales y que constituía “uno de los documentos más conocidos de disenso con el régimen comunista que lo hizo pasar cinco años de prisión”. Havel era el “primer representante moral” de su país. “Era el intelectual que se hacía político a la fuerza y que asumía la responsabilidad política y espiritual de construir un régimen de libertad tras haber contribuido a abatir un régimen dictatorial que por decenios había negado la libertad; este mismo régimen al que tuvo el coraje de escribirle una larguísima carta el 8 de abril de 1975”. En aquella carta, Havel condenaba a “la omnipresente y omnipotente policía del Estado”, “la castración intelectual”, “el conformismo exterior” del régimen y la búsqueda del orden social “a costa de la crisis espiritual y moral de la sociedad”. Después de que Havel juró fidelidad a la nueva República en la sala Vladislao del castillo de Praga, en la misma sala donde coronaban a los reyes de Bohemia y donde en 1935 nació la primera república. La asunción de mando no terminó ahí sino que siguió en la Catedral con el Te Deum que no se cantaba desde 1948: “Havel atravesó la Puerta de Oro y entró a la iglesia acompañado de su mujer Olga (…) con quien se casó en 1964”. Antes de llegar a la capilla de San Venceslao donde lo esperaba el Obispo Jan Lebeda, “Havel se arrodilló haciendo el signo de la cruz ante la tumba de los reyes bohemios y ante las reliquias de Santa Inés que había sido recientemente canonizada por Juan Pablo II” en noviembre de 1989 en la Basílica de San Pedro. Esa ceremonia, “no constituyó solamente el redescubrimiento de una antigua liturgia que unía política y tradición, cultura y religión sino que representó el inicio de una nueva historia. Una historia de libertad de la que Václav Havel era el emblema más importante”.
ENERO 15 DE 2012
Propuesta para el Año Nuevo desde la óptica del Papa Benedicto Editorial
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l Papa Benedicto es consciente de que el año que concluye aumentó el sentimiento de frustración por la crisis que agobia a la sociedad, al mundo del trabajo y a la economía. El Papa constata que las raíces de ese mal radican en los criterios, los valores, conductas y mecanismos con que nosotros estamos organizando nuestra sociedad de hoy. Nos hace una invitación a afrontar el nuevo año con una actitud de esperanza. Y aquí inicia la particularidad de su Mensaje: “El corazón del hombre no se cansa de esperar, pero es, sobre todo, en el corazón de los jóvenes donde esa actitud se percibe de manera especialmente viva y visible. Es por ello que el Papa es incisivo cuando sostiene: “Me dirijo a los jóvenes, porque caracterizándose precisamente por su entusiasmo e impulso hacia grandes y nobles ideales son ellos quienes pueden y deben ofrecer al mundo una nueva esperanza de grandes y efectivas aportaciones”.
Por Pacco Magaña
Oración con el salmo 23
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También nosotros, como el salmista, si caminamos detrás del «Pastor bueno», aunque los caminos de nuestra vida resulten difíciles, tortuosos o largos, con frecuencia incluso por zonas espiritualmente desérticas, sin agua y con un sol de racionalismo ardiente, bajo la guía del pastor bueno, Cristo, debemos estar seguros de ir por los senderos «justos», y que el Señor nos guía, está siempre cerca de nosotros y no nos faltará nada. Por ello el salmista puede declarar una tranquilidad y una seguridad sin incertidumbres ni temores:
Su mensaje anual, lo declara el Papa, es una propuesta en perspectiva educativa cuando dice: “Unamos nuestras fuerzas espirituales, morales y materiales para educar a los jóvenes en la justicia y la paz”. Este es el llamamiento que lanza Benedicto XVI en su Mensaje para la Jornada mundial de la paz del 1º. de enero del 2012. Más aún, señala el Papa que los lugares de educación para la paz de las jóvenes generaciones son: los Padres de Familia, las diferentes instituciones responsables de la vida religiosa, social, política, económica, cultural y de la comunicación a quienes exhorta a que presten atención al mundo juvenil, le escuchen y le valoren con vistas a la construcción de un futuro de justicia y de paz.
«Aunque camine por cañadas oscuras, nada temo, porque tu vas conmigo: tu vara y tu cayado me sosiegan» (v. 4). Quien va con el Señor, incluso en los valles oscuros del sufrimiento, de la incertidumbre y de todos los problemas humanos, se siente seguro. Tú estás conmigo: esta es nuestra certeza, la certeza que nos sostiene. La oscuridad de la noche da miedo, con sus sombras cam-
Y el Papa, como máximo representante del mundo católico, puntualiza: “La Iglesia, mira a los jóvenes con esperanza, confía en ellos y los anima a buscar la verdad, a defender el bien común, a tener una perspectiva abierta sobre el mundo y ojos capaces de ver cosas nuevas”. Tomando en cuenta el momento que ya vive México, quiero subrayar lo que en su mensaje dice el Papa a los responsables políticos: “Políticos, ofrezcan a los jóvenes una imagen límpida de la política como verdadero servicio al bien de todos”. Y sabiendo que “el cuarto poder” en México son los medios de comunicación social oral y escrita, hago eco a la solicitud del Papa: “No puedo dejar de hacer un llamamiento al mundo de los medios, para que den su aportación educativa. Los medios de comunicación de masa no solo informan sino que también forman el espíritu de sus destinatarios y, por lo tanto, pueden dar una aportación notable a la educación de los jóvenes”. Termino este comentario al Mensaje Papal citando no tan sólo las palabras de reconocimiento a los jóvenes, sino también la demanda al mundo joven cuando les dice: “Jóvenes, tengan el valor de vivir, ante todo, lo que ustedes mismos piden a quienes están en su entorno. Les corresponde una gran responsabilidad: Usen bien y conscientemente la libertad. También ustedes son responsables de la propia educación y formación en la justicia y la paz”. Ojalá que este hacer eco a algunos aspectos del Mensaje del Papa sea también una provocación para que busques en Internet y leas el texto íntegro del Mensaje con motivo de la Jornada Mundial para la Paz correspondiente al presente año.
(Segunda de cuatro partes)
ueridos hermanos y hermanas:
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La RED no necesariamente apoya la publicidad de nuestros anunciantes.
biantes, la dificultad para distinguir los peligros, su silencio lleno de ruidos indescifrables. Si el rebaño se mueve después de la caída del sol, cuando la visibilidad se hace incierta, es normal que las ovejas se inquieten, existe el riesgo de tropezar, de alejarse o de perderse, y existe también el temor de que posibles agresores se escondan en la oscuridad. Para hablar del valle «oscuro», el salmista usa una expresión hebrea que evoca las tinieblas de la muerte, por lo cual el valle que hay que atravesar es un lugar de angustia, de amenazas terribles, de peligro de muerte. Sin embargo, el orante avanza seguro, sin miedo, porque sabe que el Señor está con él. Aquel «tú vas conmigo» es una proclamación de confianza inquebrantable, y sintetiza una experiencia de fe radical; la cercanía de Dios transforma la realidad, el valle oscuro pierde toda peligrosidad. El rebaño puede ahora caminar tranquilo, acompañado por el sonido familiar del bastón que golpea sobre el terreno e indica la presencia tranquilizadora del pastor.
ENERO 15 DE 2012
AMÉRICA LATINA, LA PATRIA GRANDE
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s evidente que en América Latina y el Caribe predominan aún condiciones de empobrecimiento, exclusión e injusticia. Los retrasos en la integración de los países que conforman este continente profundizan la pobreza y la desigualdad. América Latina es la casa común, la Patria Grande, de distintos pueblos “a quienes la misma geografía, la fe cristiana, la lengua y la cultura han unido definitivamente en el camino de la historia” (Juan Pablo II, 12 oct. 1992). Esta unidad no está basada en tratados diplomáticos o comerciales, nace de una común identidad. La Iglesia en América Latina afirma que el Proyecto del Reino está presente y es posible en nuestras tierras. Es importante conservar y promover el sueño de ser una América Latina y el Caribe donde reine la unidad, la reconciliación y la integración. Esta integración es indispensable para poder solucionar los múltiples problemas que aquejan a nuestras naciones. El Continente de la esperanza debe lograr su integración sobre los cimientos de la vida, el amor y la paz. Aún siendo diversos en algunos aspectos, predomina en los pueblos de América Latina y el Caribe el sentimiento de formar una sola familia, hay un fuerte sentido de proximidad, fraternidad y solidaridad. Este sentimiento de unidad es a la vez una exigencia de mayor justicia para todos. La Iglesia refleja, vive y comunica la unidad que nace del misterio de la Santísima Trinidad. En la medida en que es fiel a esta vocación, la Iglesia en América Latina puede ser sujeto de reconciliación y comunión de vida de nuestros pueblos. Es un compromiso para esta Iglesia reconocer y acompañar las tradiciones y culturas indígenas, su identidad, su organización propia, la defensa de sus territorios, su derecho a la educación bilingüe y la defensa de sus derechos. Es indispensable seguir ofreciendo a los pueblos indígenas y afroamericanos la riqueza del Evangelio, contrarrestando los intentos que algunos hacen para despojarlos de su tradición cristiana, bajo el pretexto de liberarlos, sólo para volverlos más vulnerables con respecto a ideologías que pretenden manipularlos. La Iglesia está en contra de la discriminación y el racismo y apoya decididamente el diálogo entre cultura negra y fe cristiana, así como también sus luchas por una mayor justicia social. Vivamos con entusiasmo esta dimensión latinoamericana acogiendo a los hermanos de otros países que viven o pasan por nuestras comunidades. Este intercambio nos enriquece a todos. NOTA: Te invito a leer los párrafos 520-533 del Documento de Aparecida.
Apreciados lectores y lectoras: ECOS DE LA NAVIDAD. Ecos del anuncio de Belén. Eso es lo que les ofrezco en esta ocasión. La Navidad pasa tan rápido que no logramos saborearla completamente. La vivimos con mucha prisa, ocupados en muchos detalles. No logramos dejar que el gozoso mensaje de salvación que Dios nos da toque lo más hondo de nuestra alma. El corazón se queda vacío. Lamentablemente para muchos la Navidad es compra y venta, comida y bebida, cansancio y hastío. En un creyente, la Navidad debe dejar una huella profunda, una esperanza sólida y una alegría que nada ni nadie puede arrebatarle. Esos frutos se recogen si contemplamos serena y sencillamente la escena del pesebre donde yace recostado el Dios Niño. Para lograrlo, nos puede ayudar esta bella historia que contaba mi Obispo antecesor en la Diócesis de Tacámbaro: Sucedió que un párroco, que todas las tardes hacía su oración ante el “nacimiento” de su templo, notó que una ancianita hacía lo mismo y se quedaba extasiada ante el pesebre por largo rato. Una tarde se le acercó el sacerdote y le preguntó si le gustaba el “nacimiento”. Le dijo: “¿Se ha fijado usted en la belleza de las imágenes? ¿Ha visto qué hermosa es la imagen de la Virgen Santísima, con su ternura de madre? ¿Ya vio la imagen de S. José, asombrado ante el misterio? ¿Ya se fijó en los pastores? Pero, sobre todo, se ha detenido Ud. ante la bellísima imagen del Niño Dios, con su mirada de amor y la sonrisa de Dios en sus labios?”. Ella le contestó un poco apenada: “Perdóneme, Padre, pero en todas estas tardes no he podido pasar de las pajas. No dejo de mirarlas una y otra vez. Y me preguntó: ¿Por qué quiso Dios nacer entre las pajas?”. ¡Qué admirable ejemplo de fe sencilla y contemplativa! No sé si ustedes tuvieron la dicha de vivir un momento de contemplación y de fe, al estilo de esa ancianita. El tiempo de Navidad ya terminó. Pero podemos seguir dándole vueltas a ese gran misterio de amor, repasando algunos pensamientos que les ofrezco hoy y que he podido espigar en medio de una abundante sabiduría cristiana, fruto de siglos de reflexión, santidad y amor a Dios por el misterio de su encarnación. Ojalá les ayuden para provocar un eco de la Navidad en su interior y sacar algún fruto. “Qué cosa manifiesta tanto la misericordia de Dios como el hecho de haber asumido nuestra miseria? ¿Qué amor puede ser más grande que el del Verbo de Dios, que por nosotros se ha hecho como la hierba débil del campo? … ¡Qué grande y qué manifiesta es esta misericordia y este amor de Dios a los hombres! Nos ha dado una prueba de su amor al querer que el nombre de Dios fuera añadido al título de hombre” (S. Bernardo). “Dios se hizo hombre, para que el hombre se hiciera Dios. El hombre pecó y se convirtió en reo:
nació el Dios hombre, para que fuera liberado el reo. El hombre cayó, pero Dios descendió. Cayó el hombre miserablemente, bajó Dios misericordiosamente; cayó el hombre por la soberbia, bajó Dios con su gracia” (S. Agustín) “Dios se ha hecho hombre para que el hombre se haga Dios” (S. Ireneo); “Se ha hecho lo que somos para hacernos partícipes de lo que él es” (S. Cirilo de Alejandría); “Al adorar el nacimiento de nuestro Salvador, celebramos nuestra misma generación” (S. León Magno). “Seguro que la mayoría de nosotros experimentó la dicha de la Navidad. Pero el cielo y la tierra aún no se han convertido en una sola cosa. La estrella de Belén es una estrella que todavía hoy continúa brillando en una noche oscura. ¿Dónde está el júbilo de los ejércitos celestes, dónde la felicidad callada de la santa noche? ¿Dónde está la paz en la tierra?” (Santa Edith Stein). “El Niño en el pesebre tiende sus manitas y parece querer decirnos ya con su sonrisa las palabras que brotarán un día de sus labios de adulto: “Vengan a mí todos los que están cansados y agobiados…” Si ponemos nuestras manos entre las del Niño Divino y le respondemos con un “sí” incondicional, entonces somos suyos y está libre el camino para que su vida divina pueda derramarse sobre nosotros. (Santa Edith Stein). “Dios ha aparecido. Se ha mostrado. Ha salido de la luz inaccesible en la que habita. Él mismo ha venido entre nosotros. Para la Iglesia antigua, esta era la gran alegría de Navidad: Dios se ha manifestado. Ya no es sólo una idea, algo que se ha de intuir a partir de las palabras. “Ha aparecido la bondad de Dios y su amor al hombre”. Ésta es una nueva y consoladora certidumbre que se nos da en Navidad” (Benedicto XVI). “Dios se ha manifestado. Lo ha hecho como niño. Precisamente así se contrapone a toda violencia y lleva un mensaje que es paz… En el niño del establo de Belén, se puede, por decirlo así, tocar a Dios y acariciarlo” (Benedicto XVI). ¿Qué nos dejó la Navidad? ¿Nos llegó al corazón su mensaje? ¿Qué fruto nos quedó? (NOTA: Agradezco las palabras de felicitación y aliento que me hizo María Torres y su comentario sobre la posibilidad de que escriba mi biografía. Lo veo un poco difícil, pero prometo pensarlo. ¡Gracias!)
“Y, hasta que nos volvamos a encontrar, que el Señor los guarde en la palma de su mano”. +Luis, Arzobispo de S. Luis P.
Nuestra historia
El Cisma de Oriente y Occidente Por Pbro. Rubén Pérez Ortiz
(Segunda parte)
Si compartes las alegrías, también podrás compartir tus penas
Miguel I Cerulario y la separación definitiva
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iguel I Cerulario (1000 - 1059) fue hombre altivo, prepotente y ambicioso, de poca formación intelectual, pero lleno de odio contra la Iglesia romana. Elevado a la Sede Patriarcal de Constantinopla en 1043, su ministerio coincidiría con el del papa León IX, y ambos consumarían el cisma que se venía gestando entre ambas Iglesias. Su enfrentamiento con Roma se inicia en 1051, cuando, tras acusar de herejía judaica a la Iglesia romana por utilizar pan ácimo en la Eucaristía, ordena que se cerrasen todas las iglesias de rito latino en Constantinopla que no adoptaran el rito griego, se apodera de todos los monasterios dependientes de Roma y arroja de ellos a todos los monjes que obedecían al Papa, y dirige una carta al clero en la que renovaba todas las antiguas acusaciones contra las dignidades eclesiásticas occidentales. En el año 1054, el papa León IX envió a Constantinopla una legación encabezada por el Cardenal Humberto de Silva y los arzobispos Federico de Lorena y Pedro de Amalfi, portando un escrito en el que se conminaba a Cerulario a la retractación de algunos aspectos en conflicto y un decreto de excomunión en caso de que éste se negase a ello, pero el patriarca se negó a recibirlos y tratar con ellos. Ante esta actitud, los legados papales publicaron su “Diálogo entre un romano y un constantinopolitano”, plagado de burlas contra las costumbres griegas, y, el 16 de julio de 1054, depositaron la bula de excomunión en el altar mayor de la iglesia de Santa Sofía, en Bizancio (antes Constantinopla), y abandonaron la ciudad de inmediato. Unos días después, el 24 de julio, el patriarca Miguel I Cerulario quemaba públicamente la bula papal y excomulgaba al cardenal Humberto y a su séquito. El cisma entre ambas Iglesias, que aún se perpetúa, se había consumado. Con todo, aunque el inicio del Gran Cisma queda fechado en la Historia a partir del papado de León IX, no son pocos los investigadores que cuestionan la trascendencia de estos hechos en la efectiva separación de ambas Iglesias, pues, por una parte, cuando la excomunión recíproca tuvo lugar, León IX ya había muerto, lo que implica que cualquier actuación llevada a cabo por el cardenal Humberto carecía ya de validez como legado papal, y, por
otra, las excomuniones afectaban a individuos, no a las Iglesias. El Gran Cisma, hoy Desde aquel instante hasta la actualidad, ambas Iglesias se denominan a sí mismas: Iglesia Católica Romana e Iglesia Católica Ortodoxa y reivindican también la exclusividad de la fórmula “Una, Santa, Católica y Apostólica”. Sea como fuere, la Historia nos deja constancia de una suerte de intención latente de acercamiento entre ambas Iglesias. Así, en 1274 tuvo lugar una primera voluntad de aproximación con motivo del II Concilio de Lyon y, en 1439, volvieron a reunirse en el Concilio de Basilea, pero las dos ocasiones se vieron avocadas al fracaso por la recíproca intransigencia en algunos aspectos doctrinales y disciplinarios. Más recientemente, algunas Iglesias orientales decidieron aceptar la primacía absoluta del papa y ahora se denomina Iglesias Orientales Católicas. Y, a raíz del Concilio Vaticano II, convocado en 1962 por el papa Juan XXIII y clausurado en 1965 por Pablo VI, la Iglesia Católica Romana emprendió una serie de iniciativas que han contribuido al acercamiento entre ambas Iglesias, entre las que puede contarse la declaración conjunta de 7 de diciembre de 1965, en la que el papa Pablo VI y el patriarca Ecuménico Atenágoras I decidían “cancelar de la memoria de la Iglesia la sentencia de excomunión que había sido pronunciada”. Desde entonces hasta la fecha, muy importantes pasos se han ido dando principalmente con el pontificado de Juan Pablo II y Benedicto XVI, buscando la ansiada unidad de la Iglesia.
L
a vida es inevitablemente problemática, porque esta compuesta de seres humanos libres. Con libertad para hacer el bien, pero también para cometer el mal. No podemos apartar de la existencia su parte conflictiva. Y por tanto, tenemos que aceptar que así es la vida. Hay veces que ya no podemos con el peso de los problemas, y al buscar un consejo se nos recomienda abandonarnos en Dios. Pero a la mayoría le cuesta trabajo hacerlo, porque es difícil desprenderse de un problema personal. Por desgracia, solo nos acordamos de Dios cuando es imposible salir del enredo en que estamos atrapados. Porque en esos momentos la mente esta bloqueada; y que trabajo cuesta ver con claridad los problemas y encontrarles la solución. Para vivir en la alegría, es decir, para aligerar la carga de la vida, se necesita compartir lo que somos y tenemos. Para no tener que cargar solos con el peso de la propia existencia. Es imposible que alguien deje sus problemas en manos de Dios, cuando jamás ha compartido sus triunfos con él. En tiempos de prosperidad es muy fácil olvidarse de Dios. Porque el hombre no sabe compartir sus triunfos y menos el poder. Prefiere ignorar que sus logros se realizan con la ayuda de Dios y también de los demás. El sabio, en la prosperidad se arrodilla ante Dios. Porque es consciente de que nada se logra sin la ayuda divina. Un artista se vuelve un ídolo, cuando olvida que más allá de si mismo está Dios y que sin él nada puede ser posible. Un hombre sabio, es consciente de que el triunfo es compartido. Y cuando llega la adversidad, no sufre tanto. Porque esta acostumbrado a compartir el éxito y no le será difícil compartir el fracaso. En la vida todo es compartido. Se comparte lo bueno y también lo adverso. Vivir de ese modo es estar en equilibrio. Y así, es como la existencia resulta sencilla y fácil de ser vivida.
y la familia
¿Cuál es tu capacidad de ayuda y solidaridad frente a los demás? II Por P. Kino
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Construyendo un hogar 1 parte
Por Pbro. Lic. Héctor Colunga Rodríguez colunga46561@hotmail.com.
Queridos lectores: Le pedí al director de este medio, que mi sección se llame Derecho Canónico y la familia; porque mis temas abarcan problemas o situaciones familiares, como la que voy a presentar a continuación. Desde hace diez años que inicié como capellán de un asilo de ancianos, me surgió la inquietud de formar por mi propia cuenta un hogar para los adultos mayores. Quiero algo diferente, que se sientan en casa, que reciban cariño, que se consideren personas útiles con todos sus derechos y prerrogativas. Me he encontrado con cinco realidades: por un lado, hay hijos que por sus trabajos o circunstancias de la vida, no pueden cuidar de sus padres, cuando éstos ya son de edad avanzada y enfermos y tienen aunque no quieran, buscar una casa hogar para ellos. El problema de esta situación, es que a veces los hijos lo desean pero los padres no, porque su casa es un baúl lleno de recuerdos, es su espacio, su vida y su mundo. Por otro lado, hay abuelos que tienen todo en su casa, son bien atendidos por su hijos, pero quieren irse a una casa hogar porque no quieren dar molestias.
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ace una semana se publicó en este periódico La Red un pequeñísimo test para darnos cuenta de nuestra capacidad de ayuda, y hoy ofrezco los resultados. Debo aclarar una vez más que el test lo tomé de un libro que tengo, (al final escribo la ficha bibliográfica para dar crédito a quien lo merece). Así pues estos son los resultados: Si las respuestas a son mayoría: Sabes que ayudar a otros es una forma de sentirte vivo, útil y eso te da felicidad. Eres capaz de asumir responsabilidades para hacer más llevadera la convivencia, y en tu familia, el apoyo mutuo es una actitud natural que reflejas en otros espacios de tu vida. Si las respuestas b son mayoría: Eres capaz de brindar tu apoyo, pero esperas a que otros te busquen para pedírtelo; no sientes un impulso natural de tender tu mano, y más bien esperas a que sean otros quienes lo hagan. Tu actitud puede rayar en el egoísmo, ya que primero piensas en tu propio bienestar. Trata de salir un poco de ti mismo y usa toda tu riqueza interior para ayudar a otros. Si las respuestas c son mayoría: Quizá la manera en que fuiste educado reforzó en ti un excesivo sentido de independencia y no te sientes llamado a ayudar a otros ni a pedir colaboración cuando te encuentras en
dificultades. Esta actitud puede contribuir a que te sientas seguro y confiado de ti mismo, pero trata de ser un poco más sensible y menos orgulloso; los seres humanos nos necesitamos y somos interdependientes. Por tal razón, ofrecer y aceptar ayuda no significa perder el control. Una vez que has descubierto tu tendencia ante esta capacidad de ayuda, los especialistas recomiendan que en el hogar se distribuyan las tareas entre los miembros de la familia, tomando en cuenta la edad y la situación de cada uno de los que ahí habita. Además, dentro de la organización del tiempo, no debemos olvidar establecer uno para la ayuda de las tareas del hogar. Jesucristo en su doctrina nos dice que el que quiera ser el mayor se convierta en el servidor de los demás (Mt 20,20 – 21), y Él nos lo demostró en todos los momentos de su vida, siempre estuvo al pendiente de los más necesitados. Quien no vive para servir, no sirve para vivir (Anónimo). Test tomado de: AA:VV. Biblioteca de formación integral. Plan educacional para el desarrollo de futuros líderes. Tomo 2 La familia. Ed. ECISA, Colombia 2004. Pp.13 – 15.
También, hay personas, que no merecen llamarse hijos de familia, que con engaños hacen que sus padres vayan a una casa hogar, les dicen que luego regresan por ellos y jamás se sabe de su paradero. Una viejecita me contaba que su hijo le dijo: “Mamá ahorita vengo, voy a la Cruz Roja, al rato vuelvo por ti”, él jamás regresó y ella murió esperándolo. Además, hay adultos mayores que viven en total soledad, que no tienen quien los vea, ya sea porque toda su parentela ha muerto, o quizá vivan en otra ciudad y no se pueden desplazar, o simplemente no quieren hacerlo, sabiendo que su familiar cercano o lejano vive en total abandono. Y por último, hay padres de familia que en vida les dan la herencia a sus hijos, y muy concretamente su casa la ponen a nombre del hijo que más ha visto por ellos; el diablo mete su “cuchara” y ese hijo empieza a maquinar y logra que sus padres se vayan de la que ahora es su casa, y los pobres ancianos, andan buscando un hogar porque fueron despojados del suyo. Por eso, para poder cubrir las necesidades de cada una de las personas de avanzada edad, he formando con un grupo de amigos una Asociación Civil denominada “Grupo Fraternidad Héctor Colunga Rodríguez”. Aclaro que el nombre fue propuesto y aprobado por la Secretaría de Relaciones Exteriores. En la próxima semana les explico los proyectos que tenemos y los invitamos a que se unan a esta noble labor.
TEMAS DE REFLEXIÓN PARA LOS RETIROS PARROQUIALES
Deseamos mostrar a Jesús Por Pbro. José Antonio Martínez Ortiz
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ueremos ver a Jesús” (Jn 12,21). Esta petición que hicieron los griegos a Felipe es el ruego que hacen muchas personas a quienes nos decimos discípulos misioneros de Jesucristo. En la catequesis anterior se presentaron las diversas formas en las que el Señor puede ser percibido junto con algunas consecuencias y exigencias. Ahora deseamos reflexionar sobre las actitudes básicas que debe tener todo discípulo o comunidad de fe que desee realmente mostrar a Jesucristo. Necesitamos atender adecuadamente a quienes quieren ver a Jesús No hay nada más cristiano que el amor manifestado en el trato digno a las personas; y si son diferentes a nosotros en lo que creen o piensan merecen más respeto todavía. Quienes quieren ver a Jesús necesitan un trato adecuado de parte nuestra pues si en algún espacio nos jugamos la credibilidad, es precisamente en las relaciones humanas, en el trato adecuado. Ahí se nota en qué Dios creemos, qué principios fomentamos y qué imagen de dignidad promovemos. Hasta podríamos decir que es en la manera de tratar las personas donde nos jugamos, en gran parte, el futuro del cristianismo. Las personas que desean ver a Jesús requieren que las acojamos como hermanos, no como jueces; no son ellos los malos y nosotros los buenos. Todos, sin excepción,
estamos en la misma búsqueda, en el mismo esfuerzo por ir haciendo la voluntad de Dios. Necesitamos dar respuestas profundas a quienes desean ver a Jesús Aclaremos desde ahora que no se trata de responder preguntas teóricas; Para dar respuestas profundas lo primero que debemos tener quienes nos decimos seguidores de Jesucristo es una compasión al estilo del Señor; y desde ahí entender la enseñanza no como instrucción sino como la toma de conciencia de algo importante para la existencia que nos conduzca a compartir. Sin compasión no podemos dar respuestas (6, 30-34) La enseñanza de Jesús está ligada a una especial sensibilidad a la situación que vive la gente más desprotegida. Así, en 6,34: “y al desembarcar, vio mucha gente, sintió compasión de ellos, pues estaban como ovejas que no tienen pastor; y se puso a enseñarles muchas cosas”.
La inocencia ¡Q
ué hermosa es la inocencia! En sus ojos los niños revelan todo lo que dicen.
En la edad de la inocencia todo se ve claro, todo se ve bonito. Así era la mirada del Niño Jesús y la mirada de Santa Teresita del Niño Jesús. Lástima que la malicia y el pecado lo cambian todo. El niño goza lo que ve. Para un niño todo cariño es la gloria. Cristo nos invita a hacernos como niños para estar en el Reino de los Cielos. Es provechosísimo meditar esta frase de Cristo. Por el contrario, la malicia y el pecado son los que hacen que el hombre busque los deleites en las cosas del mundo, en todos los placeres… pero lamentablemente la dicha del mundo es transitoria, dura un momento; es como paja que arrebata el viento. Las riquezas y los placeres del mundo son efímeros, duran un momento. El que posea a Dios, empieza desde esta vida a gozar de la gloria.
Todo encuentro con Jesús es un proceso La Biblia, especialmente los evangelios, abunda en ejemplos. Todos necesitamos procesos; si nosotros mismos los hemos vivido y seguimos viviendo en un constante proceso, debemos ser comprensivos con los procesos de las demás personas.
¡Mira te dejó una nota!
¡A
h qué las notas!, cuántas habremos visto, sentido y escuchado. Sí, las notas pueden manifestarse en todos nuestros sentidos. Pues es definida como una señal, una marca, observación. Características, rasgos, (en la escritura). Nota viene del latín nota. Y de este significado ya mencionado derivan muchas palabras como, notabilis (señalado, notable), notarius (estenógrafo, amanuense), notaría (lugar del notario), notitia = noticia (que sea conocido algo). En fin muchas más. Pero estas palabras, tienen una médula, una raíz: notio = nocio: facultad de conocer, conocimiento o idea de algún suceso o evento y también es traducida como significación o idea de una palabra. Nota bene, dice la locución latina, es decir fíjate bien (su uso es más común en los trabajos escritos). Así que si alguien te dejó una nota en algún lugar (físicamente o internamente), la intención es que conocieras esa idea o información, que recodaras algo. Tal vez que te quieren, que pagues. Las notas son muy comunes en las esquelas para avisar sobre un evento o hay también las notas de comercios, pero las notas que no nos gustan son las notas de las calificaciones cuando no son aprobatorias.
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Los libros y sus autores Rüdiger Safranski Por Mtro. Luis Marino Moreno F.
Tusquets, 2004 128 páginas.
¿Cuánta globalización podemos soportar?
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ste ensayo aborda de forma provocativa un fenómeno al que nos guste o no, debemos hacer frente: ¿hasta qué punto puede el individuo dejarse absorber por la globalización? La globalización nos obliga a asistir a una vertiginosa transformación de nuestra forma de pensar y vivir. Cada día somos testigos de alguna nueva amenaza medioambiental o catástrofe bélica; el capitalismo desregulado desplaza dinero, empresas y trabajadores de unos países a otros sin ningún tipo de escrúpulos. Además, las nuevas tecnologías nos ponen en contacto en tiempo real, con el último rincón del planeta, pero también crean nuevas dependencias y acrecientan la fragilidad del sistema global. Safranski defiende aquí la necesidad de un sujeto autónomo y moralmente responsable de sus actos que a menudo se ve superado ante las exigencias de un todo –social, económico y simbólico- que amenaza con devorarlo. Rüdiger Safranski Nació en 1945 en Rottwell, Bade-Württenberg (Alemania). Filósofo, ensayista y autor de biografías. Entre 1965 y 1972 estudió filosofía, historia, germanística e historia del arte en Frankfurt del Meno y Berlín.
Es miembro de la academia alemana de Lengua y Poesía y de la sección alemana del Pen-Club. Desde 2002 modera, junto al filósofo Peter Sleterdijk Das Philophische Quarter Sus ensayos y biografías le han valido numerosos premios y distinciones como el Fiedrich Marker 1995, el Erns Robert Curtius 1998 y el Friedrich Nietzsche 2000. Sus obras: Un maestro de Alemania, Heidegger y su tiempo, Nietzsche, Historia de una amistad Goethe y Schiller. Schopenhauer y los años salvajes de la filosofía.
Iglesia Universal CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI alentó a que el compromiso del Bautismo, que hace a la persona hijo de Dios, no deje de resonar en los corazones y en las voces de todos. El Señor, dijo el Papa, “está en el origen de la existencia de toda criatura, y es Padre de modo singular de cada ser humano: tiene con él o con ella una relación única, personal. Cada uno de nosotros es querido, es amado por Dios”. “Y también en esta relación con Dios nosotros podemos, por decirlo de alguna manera, ‘renacer’, es decir, convertirnos en lo que somos. Esto sucede mediante la fe, mediante un ‘sí’ profundo y personal a Dios como origen y fundamento de nuestra existencia”. CIUDAD DEL VATICANO.- La Congregación para la Doctrina de la Fe publicó en el Vaticano una “Nota con indicaciones pastorales para el Año de la Fe” querido y decretado por el Papa Benedicto XVI, en la que se resalta la centralidad del Catecismo de la Iglesia Católica y los documentos del Concilio Vaticano II para esta importante celebración. Ese Año, explica la nota, “será una ocasión propicia para que todos los fieles comprendan con mayor profundidad que el fundamento de la fe cristiana es ‘el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y, con ello, una orientación decisiva’”.
Iglesia en México MÉXICO.- En este año 2012 los jóvenes mexicanos quieren comprometerse a ser constructores de Paz y saben que sólo con la fuerza de la gracia que Dios brinda a través de Cristo Rey, podrán renovarse y actuar para alcanzar la Paz que ha perdido, y construir una Civilización de Amor. De esta forma y atendiendo también al llamado que hacen los Obispos de luchar por la paz en Cristo para que México tenga vida Digna, el lema que ha adoptado para la XXIX Peregrinación Nacional a la Montaña de Cristo Rey es: CRISTO NUESTRA PAZ. Esta peregrinación, en esta ocasión está programada para el sábado 28 de enero, a partir de las 6:00 hrs. MÉXICO.- Mons. Rodrigo Aguilar Martínez, llamó a los fieles a educar a los jóvenes en los valores y de la justicia y la paz para así restaurar el tejido social. “El Papa también se dirige a los responsables de la educación de los jóvenes, por ejemplo: los padres de familia, los profesores, los profesionistas, los sacerdotes, quienes debemos ser testigos auténticos, y no simples dispensadores de reglas o informaciones (…), testigos que sepamos ver más lejos que los demás, porque nuestra vida abarca espacios más amplios”, afirmó en un mensaje enviado a la sociedad en general para trabajar en 2012 por la paz en México. ACAPULCO, GRO.- En medio de la violencia que existe en Acapulco, feligreses católicos realizaron sendas marchas que partieron en distintos puntos de esta ciudad en exigencia de que se detenga el clima de inseguridad y que haya paz. La marcha fue convocada por la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Acapulco que esta semana realizó un foro en el que se definió que el origen de la violencia se encuentran en la falta de oportunidades, la violación a los derechos humanos y la falta de educación. SAN LUIS POTOSÍ.- Con el propósito de definir los proyectos Decanales y Parroquiales para la Gran Misión, recogiendo la experiencia de itinerario misionero ya recorrido, y recibiendo una oportuna iluminación pastoral, se llevará a cabo la XXVI Asamblea Diocesana de Pastoral, que tendrá lugar el 24 y 25 de enero de 2012, en la Casa de la Acción Católica. El objetivo de ésta asamblea es introducir ya en la Misión. Dicha asamblea es el primer paso de la segunda etapa del itinerario, etapa que se ha llamado “LA MISIÓN”. Al ser el primer paso, esta asamblea no solo será de definición de los proyectos sino también de un emocionante envío de misioneros.
“¿Qué buscan?” “A
l día siguiente”, después de haber dado testimonio frente a sus cuestionadores, Juan señala a Jesús diciendo “Este es el cordero de Dios que quita el pecado del mundo”. Esto da lugar a que dos de sus discípulos lo reemplacen por Jesús. Es decir, abandonan a Juan para ir tras Jesús. En dos días seguidos Jesús se hace de cinco discípulos, primero tres y luego dos. Cuatro son nombrados y el otro queda sin nombre. Ellos son: el discípulo sin nombre, Andrés, Pedro, Felipe y Natanael. Cualquier lector notará la diferencia con los relatos vocacionales que narran los otros evangelios, tanto por el número de discípulos iniciales como por los nombres de ellos, así como en el orden. San Marcos, seguido por San Mateo, menciona a cuatro como los primeros discípulos, San Lucas únicamente nombra a tres. En los sinópticos Pedro siempre es el primer llamado, mientras que en el Cuarto Evangelio, Pedro es llamado después de los dos primeros quedando, como así como tercero (después de Andrés y del discípulo no nombrado). Asimismo, hay uno que no conocen los evangelios sinópticos: Natanael, el cual es descrito como un verdadero Israelita sin dobléz. Estos discípulos representan al grupo de judíos que se adhirieron a Jesús, son judíos de expectativas mesiánicas clásicas. Son los judíos tradicionales, esto lo delata su manera de hablar: “Hemos encontrado al Mesías”, “Hemos hallado a aquél de quien se habla en la Ley de Moisés y en los Profetas”. Además, representan a dos corrientes judías: a los discípulos de Juan y a otros judíos con esperanzas mesiánicas tradicionales que se hicieron discípulos de Jesús. Entre ellos está un discípulo sin nombre, que probablemente se identifique con el que más tarde será llamado “discípulo amado”. El cual, junto con Andrés, es el primer llamado y tiene un papel
fundamental en la transmisión de este Evangelio. En este relato aparecen las primeras palabras de Jesús. Se trata de una pregunta que hace a los discípulos de Juan que habían comenzado a seguirlo: “¿Qué buscan?”. Esta se convierte en la pregunta inicial y fundamental al lector de este Evangelio, la cual está muy distante del romanticismo de los relatos vocacionales de los sinópticos, en los cuales Jesús ve y llama diciendo “ven y sígueme”. Al preguntar qué buscan, Jesús confronta a sus seguidores y toca el objetivo fundamental del seguimiento. Su pregunta podría tener relación con 5,39-40, donde les dice a los judíos: “Ustedes examinan las escrituras, ya que creen tener en ellas vida eterna; ellas son las que dan testimonio de mí; y ustedes no quieren venir a mí para tener vida”.
En este texto parece revelarse el objetivo fundamental de ir tras Jesús:
tener vida eterna.
Esa es la manera como Jesús hace a sus primeros amigos, confrontándolos y mostrándoles su espacio. Cuando ellos le manifiestan su deseo de saber dónde mora, él no les da información, no les da la dirección de un espacio físico, sino que los lleva consigo para que constaten, los conduce a que tengan la experiencia de estar en su propia morada. Este detalle coincide con la nota del Evangelista Marcos en la elección de los doce: “los llamó para que estuvieran con él”. Este relato vocacional se ubica en la primera escena en la que aparece Jesús. Este es un rasgo clave, dado que cuando Jesús comienza su obra, sus discípulos aparecen asociados a ella desde el principio. Esto es un elemento común a los cuatro evangelios.
Catequesis para adultos en la parroquia de Jesús Divino Maestro
L
a parroquia de Jesús Divino Maestro, como lo ha venido haciendo anualmente desde hace ya once años, ofrece a los fieles una vez más la oportunidad de participar en su catequesis para adultos. Lo de “catequesis para adultos” podría llevar a alguien a pensar que se trata de cursos sobre doctrina cristiana para aquellas personas que no habiendo podido prepararse adecuadamente para la primera comunión en su infancia, sienten que les caería bien más información sobre algunos aspectos de la doctrina católica. En realidad, estas catequesis consisten en lo que el documento de Aparecida, y otros documentos semejantes de la Iglesia, establecen como primer paso para la nueva evangelización: el anuncio del kerygma, el poner a la persona frente a la buena nueva de Jesucristo; frente a Cristo vivo. En su discurso inaugural de la reunión episcopal de Aparecida, el Papa hizo énfasis en la necesidad de recomenzar desde Cristo, y esto mismo está en el corazón del nuevo Plan Diocesano de Pastoral. Benedicto XVI explicó por qué la necesidad de recomenzar desde Cristo: “No se comienza a ser cristiano por una decisión ética o una gran idea, sino por el encuentro con un acontecimiento, con una Persona, que da un nuevo horizonte a la vida y con ello, una orientación decisiva”. Sólo un adulto puede encontrarse con la persona de Jesucristo de tal modo que descubra nuevos horizontes para su vida, que pueda darle una nueva y decisiva orientación. Durante dos meses, en dos sesiones semanales, la Buena Noticia de Jesús es presentada por la comunidad neocatecumenal de la parroquia ante los participantes siguiendo un esquema aprobado por la Santa Sede y que explícita paulatinamente ante cada fiel la invitación a la conversión, a aceptar a Jesús como Señor de la propia vida, y a vivir de acuerdo a ello. Los efectos de estas catequesis, observados en miles de parroquias en todo el mundo, son, ante todo, una maduración patente de la vida cristiana con todo lo que va unido a eso: revitalización total de la vida cristiana personal y familiar, amor a la Iglesia, incremento de vocaciones sacerdotales y religiosas, apostolado. Muchísimas personas que ya no encontraban sentido en la vida o en sus matrimonios han vuelto a descubrir el valor del amor, del sacrificio por el otro, la riqueza de la paternidad, el valor del trabajo. La Iglesia vuelve a tomar en sus vidas un valor determinante. Las catequesis se llevarán a cabo en el templo parroquial a partir del martes 3 de enero, los martes y jueves, a las 20:30 horas. Todo mundo está invitado, a partir de los 14 años de edad. No importan las circunstancias en las que uno viva en relación a la religión en general, o a la Iglesia Católica, ni el estado civil, ni la profesión. Lo único que se requiere es el firme deseo de escuchar y estar atento para encontrar a Cristo.
Celebrando al Fiesta Patronal en Estanzuela Señor de la Conquista Por Carlos Cuéllar
Fiesta Patronal en la comunidad de Ojo de Gato
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ue de manera sorprendente que la estructura y empeño de toda la comunidad de Estanzuela, en conjunto con su párroco, Pbro. David Orta, nos hicieran vivir de una manera diferente y espiritual su hermosa fiesta patronal. Fueron mas de quinientos los niños y jóvenes que recibieron el sacramento de la confirmación. Los cientos de feligreses provenientes de todas las comunidades se acercaron alegremente para recibir este sacramento que les fue impuesto por nuestro Arzobispo Luis Morales Reyes.
Por Seminarista José Abdías Martínez Martínez Año de Pastoral y Espiritualidad
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l día primero de enero, como ya es tradición, los fieles de la comunidad de Ojo de Gato, Villa de Reyes y perteneciente a la Parroquia de la Pila, iniciaron el Año Nuevo celebrando a su Santo Patrono Nuestro Señor Jesucristo bajo la advocación del “Señor de la Conquista”. Comenzaron cantando las tradicionales mañanitas al Santo Patrono. Por la tarde se tuvo la entrada de cera con la participación de algunas comunidades y grupos de apostolado pertenecientes a la Parroquia, en donde desfilaron algunos carros alegóricos. La solemne Eucaristía fue presidida por el Arzobispo Emérito Don Arturo Szymanski y concelebrada por el párroco José Antonio Torres Moreno. Durante la homilía, Don Arturo enfatizó sobre el mensaje del Papa Benedicto XVI para la Jornada Mundial de la Paz, en donde relaciona el tema de la paz con los jóvenes, y nos invita a dirigir y educar las mentes y los corazones de los jóvenes para justicia y la paz. Se terminó con una verbena popular, en donde la gente convivió sanamente al son de la música de viento, disfrutando de la danza y los fuegos pirotécnicos. El culto al Señor de la Conquista surgió con la llegada de los Franciscanos que vinieron a evangelizar las nuevas tierras conquistadas por el Imperio Español, hacia el año 1570. La devoción y veneración hacia esta advocación de Cristo está muy arraigada en la zona norte del Estado de Guanajuato, ubicándose la imagen original en la Parroquia de San Felipe, en San Felipe Torresmochas. Que el Señor de la Conquista siga conquistando los corazones de esta comunidad hacia su rebaño y los bendiga abundantemente en su caminar en este año que comienza.
Una notable sonrisa estaba en cada uno de los asistentes quienes en su fiesta patronal mostraban sincero agradecimiento a nuestra Señora de Guadalupe, patrona de esta parroquia; En su honor se hicieron marchas, peregrinaciones y danzas en las cuales se veía el mismo amor que un hijo siente por su madre. Aplausos, sonrisas, música y espiritualidad, fueron parte importante de esta fiesta en honor a nuestra madre que fue invocada por medio de oraciones para que nos cubriera con su santo manto protec-
tor y nos encaminara por el camino de nuestra vida D. Luis Morales se dirigió a los fieles alentándolos: “Son tiempos difíciles, pero más aún son tiempos de bendiciones, alegrémonos por que Cristo está entre nosotros, porque vive en cada uno, aceptémoslo, abramos nuestro corazón para que de luz y esta luz sea eterna”.
Fiesta Patronal en honor al Santo Niño de Atocha Por Carlos Cuéllar
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on una gran alegría espiritual la comunidad parroquial del Santo Niño de Atocha de la colonia Praderas del Maurel, de nuestra ciudad capital, vivió su fiesta patronal el pasado 6 de enero. Los fieles, junto con su párroco, Pbro. Gilberto Alvarado Martínez, se congregaron para vivir esta fiesta de una forma extraordinaria elevando una oración al cielo y recordando el nacimiento del niño Jesús. Los fieles dejaban entrever esa alegría que caracteriza esta fiesta, En la que se lleavron a cabo confirmaciones a niños y jóvenes que tuvieron una catequesis profunda durante meses y las que nuestro Arzobispo D. Luis Morales Reyes les administró. Con hermosas palabras el Arzobispo se dirigió a todos los presentes, quienes fueron exhortados a seguir viviendo con lucha y fe y ser misioneros de la buena palabra.
Cien Años de la Adoración Nocturna “Nunca dejemos de doblar la rodilla para Adorar a Cristo Eucaristía”
Por LCC Angélica Maldonado Morales
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n las instalaciones de la Casa Acción Católica se celebró el 1er. Centenario de la Adoración Nocturna en nuestra querida Arquidiócesis Potosina, con un programa por demás completo e interesante con el que se le rindió adoración a Jesús Eucaristía “Pan partido para un mundo dividido”. Primeramente se hizo una Reseña Histórica de cómo fue la fundación de la Adoración Nocturna. Posteriormente el R.P. Oscar Anaya Pérez L.C. impartió la conferencia “Eucaristía y Familia”. Después el obispo de la Diócesis de Zacatecas, Mons. Carlos Cabrero Romero impartió la conferencia “Eucaristía Alimento en la Fe”.
Nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, presidió la solemne Concelebración Eucarística acompañado del Obispo de la Diócesis de Matehuala, Mons. Lucas Martínez Lara y del Obispo de Zacatecas, Mons. Carlos Cabrero Romero, del Sr. Canónigo, Pbro. Carlos Medina López, asesor y Director Espiritual de la Adoración Nocturna, del Vicepresidente, Pbro. Sixto López Tapia, y de un numeroso grupo de Sacerdotes que se unieron a esta magna celebración del Centenario de la Adoración Nocturna. Después de la Santa Misa que se presenció con profundo fervor, hubo un sencillo pero ameno convivio, concluyéndose con una Vigilar solemne a Jesús Sacramentado. Todos unidos le dieron gracias a Dios por permitirles arribar a sus 100 años de fundación y es-
cucharon atentos el mensaje que les emitió nuestro Pastor quien les dijo: “Vamos a dejar que Jesús Eucaristía venga a PERDONARNOS, CONSOLARNOS Y FORTALECERNOS, pues hay motivos para alegrarnos y darles gracias por este primer centenario de la Adoración Nocturna, pero también hay motivos para pedirle perdón porque muchos lo han dejado a veces solo en el Sagrario, por tantas ofensas y faltas de fe a Jesús en su Sagrada Forma”. “Ustedes han creado un OCÉANO DE ADORACIÓN ante la presencia amorosa de Dios. Ustedes hacen SACRIFICIO, EXPIACIÓN Y ALABANZA para llegar a la eterna adoración. Gracias por sus noches de desvelo, por sus noches de adoración y por sus noches
de gran ayuda a la Iglesia Universal y Particular”. “En realidad, se trata de vivir y redescubrir el culto de adoración y alabanza en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía, tributándole amor, sacrificio y expiación. Se trata de hacer guardia por los pecados de la humanidad y en expiación por los pecados de México y el mundo entero, y desde luego por los pecados de uno mismo”. “Hay gente que sólo se inclina un poco, pero no hacen la genuflexión completa arrodillándose humildemente ante la presencia de Dios mismo, cuando deben saber que adoramos al Dios tres veces Santo, e incándonos reconocemos nuestra pequeñez ante la magnificencia de Cristo Sacramentado”.
Al igual que los Magos de Oriente, busquemos a Jesús incansablemente Se celebró la solemnidad de la “Epifanía del Señor Jesús”
Por LCC Angélica Maldonado Morales
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risto vino a las tinieblas de este mundo y las tinieblas no recibieron su luz, así lo dice la cita Bíblica, pero nosotros si dejémonos iluminar e inundar por su amor, levantémonos, sigamos la “Estrella de oriente”, pues la “Epifanía o Manifestación del Señor” es ponerse en camino, es buscar esa estrella que nos orienta y guía, busquemos a Cristo como los Reyes Magos se dedicaron a buscarlo con ahínco incansable”.
“Esta es la fiesta del Camino de Jesús, porque ellos abrieron la brecha de la humanidad para buscar a Cristo”, así lo señaló en su homilía nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, quien presidió la solemne concelebración Eucarística en la Santa Iglesia Catedral Metropolitana Potosina, el pasado domingo 8 de enero, acompañado del Rector del Santo recinto, Pbro. Darío Martín Torres Sánchez. Nuestra Catedral lució a su máxima capacidad en esta magna solemnidad en que celebramos la “Epi-
fanía del Señor Jesús”, volvimos a revivir, aquel momento en que los Magos de Oriente se postraron ante DIOS, COMO HOMBRE Y COMO REY”. Nuestro Pastor y el H. Cabildo Catedralicio adoraron al Niño Dios y exhortó a los fieles a adorar al Niño Dios con su vida, ya que a veces la estrella se nos esconde, pues aparecen los días adversos, sin estrella, pero hay otros días de nuestro camino hacia Cristo que están más luminosos”.
ENERO 15 DE 2012
Ciudad Fernández honró al
Dulce Nombre de Jesús Por Luz Elena González
“J
esús, Hijo de Dios, ten piedad de mí, que en este año que inicia sean las palabras con las que nos encomendemos a Jesucristo Nuestro Señor, para que este año sea abundante en bendiciones para el mundo entero”. Con estas bellas palabras el Sr. Arzobispo Don Luis Morales Reyes, deseó que este año nuevo, Año de la Fe, sea rico en bendiciones, y que se incremente la fe en la comunidad Fernandense. Celebramos este 4 de Enero la primera fiesta patronal de la Diócesis, honrando al “DULCE NOMBRE DE JESÚS”, hermosa imagen de Jesús niño, que guarda y protege a la Parroquia de Cd. Fernández, SLP. La Eucaristía fue concelebrada y presidida por nuestro Pastor, y por varios Sacerdotes que acompañaron al Sr. Cura Francisco Correa, párroco de este lugar.
Previo a esta fiesta se tuvo un novenario de misas, con sus respectivas entradas de cera, tradicionales en este lugar, en donde fieles de la parroquia, grupos y movimiento parroquiales, comunidades, charros, camioneros, taxistas y comerciantes, llevaron su ofrenda de cera, flores y carros alegóricos, acompañados de danzas y música de banda a nuestro Santo Patrón. Por la noche se tuvo una bonita serenata con banda en el Atrio parroquial así como un castillo de pólvora. LA PARROQUIA DEL “DULCE NOMBRE DE JESÚS” LES DESEA UN MUY FELIZ AÑO NUEVO Y QUE NO OLVIDEN INVOCAR EL SANTO NOMBRE DE JESÚS.
Hemos visto su estrella y venimos a adorarlo Por Luz Elena González
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ónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo”. Con estas hermosas palabras los Reyes Magos se presentaron a adorar al Niño Jesús y le presentaron ofrendas que consistían en ORO, porque es Rey; INCIENSO, porque es Dios y MIRRA porque es Hombre: y nosotros, ¿qué le vamos a ofrecer a Jesús?, nuestro corazón, con todas nuestras alegrías, tristezas, miedos, angustias, pero pongamos en manos de nuestro Señor Jesús un corazón sincero y pidámosle que incremente nuestra FE, en este año que inicia”. Con estas palabras el Decano Pbro. Francisco Correa, se dirigió a los fieles en la Misa Concelebrada en la Parroquia de Nuestra Sra. de Guadalupe y Santuario del Santo Niño de la Salud en Atotonilco, Cd. Fernández, SLP.
Y así como los Reyes de Oriente buscaron a Jesús para adorarlo, este 6 de enero, se postraron multitudes de peregrinos provenientes de distintas partes de la República para adorar al Santo Niño de la Salud; devoción que data desde el año de 1957 cuando el Sr. Cura Antonio Zaizar, lo dio a conocer en diferentes partes del país y que a la fecha vienen a presentar su ofrenda y a hacer la adoración a Jesús Niño. Gran entusiasmo y devoción se vio en los fieles durante la novena quienes de diferentes comunidades de la parroquia se dieron cita para adorar a Jesús durante la novena que se realizó en su honor. Después de la Eucaristía Concelebrada en la que varios sacerdotes acompañaron al Sr. Cura J, Guadalupe Alfaro, Párroco del lugar, se compartieron los alimentos y por la noche se tuvo la tradicional quema de pólvora.
Las puertas de la Basílica de San Pedro Por Pbro. Efraín Moreno Aguirre
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l acceso a la Basílica de San Pedro, ubicado desde el pórtico, se realiza a través de cinco puertas, que de izquierda a derecha son: «Puerta de la Muerte», «Puerta del Bien y del Mal», «Puerta de Filarete», «Puerta de los Sacramentos» y «Puerta Santa». Puerta de la Muerte La «Puerta de la Muerte» fue encargada por Juan XXIII y toma su nombre por ser la puerta de salida de los cortejos fúnebres de los Papas. Se presentan cuatro paneles: en el primero hay una representación de la Deposición de Cristo y la Asunción de María. En el segundo se representan los símbolos de la Eucaristía, el pan y el vino. En el tercer cuadro aparece el tema de la muerte, representa el asesinato de Abel, la muerte de José, el martirio de San Pedro, la muerte de Juan XXIII (en una esquina aparece el título de la encíclica «Pacem in terris»), la muerte en el exilio de Gregorio VII y seis
“A
animales en el acto de la muerte. En la cara interna de la puerta se encuentra la huella de la mano del escultor y un momento del Concilio Vaticano II en el que el primer cardenal africano, Laurean Rugambwa, rinde homenaje al papa. Puerta del Bien y del Mal La «Puerta del Bien y del Mal» es obra de Luciano Minguzzi, realizada entre 1970 y 1977. Puerta de Filarete La «Puerta de Filarete» o «puerta central» fue mandada construir por el papa Eugenio IV a Antonio Averulino Filarete, que la realizó entre 1439 y 1445. Está hecha de bronce y dividida en dos hojas, cada una de las cuales presenta tres cuadros superpuestos. En los cuadros en la parte superior se representan a la izquierda a Cristo entronizado y a la derecha a la Virgen entronizada, en los paneles centrales están representados San Pedro entregando las llaves al papa Eugenio IV, y San Pablo con una
espada y un jarrón de flores. Los cuadros inferiores presentan el martirio de los dos santos: a la izquierda la decapitación de San Pablo, y a la derecha la crucifixión de San Pedro. Los paneles están enmarcados por medallones con los perfiles de los emperadores, y entre ellos frisos con episodios del pontificado de Eugenio IV. En la parte interna se encuentra la inusual firma del autor. Puerta de los Sacramentos La «Puerta de los Sacramentos» fue construida por Venanzo Crocetti e inaugurada por Pablo VI el 12 de septiembre de 1965. En ella aparece un ángel anunciando los siete sacramentos. Puerta Santa La puerta de la derecha es la «Puerta Santa» está realizada en bronce por Vico Consorti en 1950 y fue donada al papa Pío XII por los católicos suizos para el jubileo de ese año. En dos placas existentes a ambos lados de la
puerta se encuentran el escudo de Pío XII y la bula de Bonifacio VIII que convocó el primer jubileo en 1300. En el entablamento del arco sobre la puerta aparece la inscripción: PAVLVS V PONT MAX AÑO XIII. Justo encima de la puerta se encuentra la inscripción: GREGORIVS XIII PONT MAX. En el año jubilar de 1983-1984 por la Redención humana, el ahora Beato Juan Pablo II, abrió y cerró la Puerta Santa, que había sido cerrada y sellada por el Papa Pablo VI en 1976. Nuevamente, Juan Pablo II abrió y cerró la Puerta Santa el año del Magno Jubileo de la Encarnación del Señor 2000-2001. Esta puerta permanece cerrada y tapada con cemento por su parte interior. Solamente el Papa puede abrirla y cerrarla en los Años Santos, permaneciendo todo ese año abierta para el acceso de los fieles que pueden ganar indulgencias.
ALGUIEN TIENE QUE CEDER
lguien tiene que ceder” no solo es una moderna comedia romántica. Es un relato divertido y fresco que nos dice que para el amor definitivamente no hay edad. Harry Sanborn ( Jack Nicholson) es un eterno solterón al que sólo le gusta tener aventuras con mujeres que estén por debajo de los treinta años. Durante el transcurso de un romántico fin de semana con su más reciente conquista, Marin ( Amanda Peet ), Harry va a dar al hospital y la madre de Marin, Erica Barry ( Diane Keaton ), quien es una exitosa escritora, se ofrece a regañadientes para atender a Harry mientras se recupera. Una vez que Harry y Erica se quedan solos y se van conociendo con el paso de los días, ambos se sorprenden de que empiece a surgir
entre ellos el amor. Las complicaciones y enredos aparecen cuando el doctor de Harry, Julian Mercer ( Keanu Reeves) se sienta también atraído por Erica. Cuando Harry logra recuperarse, vuelve a su vida normal, pero sus sentimientos le obligarán a someterse a un verdadero cambio interior si quiere ganarse el corazón de Erica y que ésta permanezca a su lado. En “esta ocasión, su directora Nancy Meyers, nos deleita con una historia escrita por ella misma donde nuevamente le da su lugar a las mujeres de manera justa y delicada. Mediante argumentos con mucha chispa, novedosos y con mucho ingenio, la directora es capaz de atrapar al espectador desde el inicio de la cinta. Meyers aprovecha al 100% a sus dos figuras protagónicas, Jack Nicholson y Diane Keaton y los hace brillar en pantalla, obteniendo resultados magníficos e incluso lográndo que la pareja brinde una de sus mejores actuaciones en el género de la comedia. La pareja Nicholson-Keaton es irresistible y personalmente creo que con este trabajo se convierten en una de las parejas clásicas
de comedia romántica. A d e m á s de ser una excelente comedia romántica, la cinta contiene muchas lecturas: el amor a cualquier edad, la falta de compromiso que puede tener un hombre en cualquier relación amorosa, la soledad que enfrentan las personas que rebasan los 50 años de edad y que no tienen alguien a quien amar y por supuesto, el amor a primera vista. Lo mejor de esto es que todos estos temas son tratados sin cursilerías, sin falsas poses ni grandes pretensiones y sí con mucha inteligencia y dulce encanto. “Alguien tiene que ceder”, una deliciosa y pícara comedia. Hasta la próxima. Espero sus comentarios, aplausos o rechiflas En Facebook: Poncho Aranda L. ponchoaranda@hotmail.com
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ENERO 15 DE 2012
Pleitos con el todopoderoso
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escribiendo las costumbres de un pueblecito judío de la Europa oriental, Joseph Roth (1894-1939), el famoso novelista, dice lo siguiente a propósito de la oración de sus sufridos moradores: «No hacen a Dios una visita solemne, pero tres veces al día se recogen en torno a su rica o pobre santa mesa. Cuando dicen sus oraciones se rebelan, imprecan contra el cielo, se quejan de su severidad y celebran un proceso contra Dios mismo para después admitir que han pecado, que todos sus castigos son justos y que quieren ser mejores. ¡Es un pueblo antiguo que conoce a Dios desde hace mucho! Ha probado su gran bondad y su implacable justicia; a menudo ha pecado y duramente expiado, y sabe que podrá ser castigado, pero jamás abandonado». A más de alguno podrá parecerle que la oración de aquellos judíos no era muy edificante que digamos. ¡Imprecar contra el cielo! ¡Como si tuvieran derecho! ¿De cuándo acá los patos tiran a las escopetas? Sin embargo, a riesgo de equivocarme, me parece que también esto es oración. Si el creyente no se queja con Dios de la dureza de la vida, de las dificultades de su existencia, ¿con quién va a ir quejarse: con la pared? Si el creyente no puede ser sincero ni siquiera ante Dios, ¿con quién podrá mostrarse como es? Hay quienes piensan que a la oración hay que ir como se va a una fiesta de gala, es decir, vestidos de etiqueta y maquillados para parecer más bellos de lo que en realidad somos; pero la oración es exactamente el único lugar donde no son necesarios los maquillajes ni las etiquetas. ¡Como si Dios no conociera nuestros pensamientos, sentimientos, rencores y rebeldías! Decía Santa Teresa de Jesús (1515-1582): «No es otra cosa oración mental, a mi parecer, sino tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama» (Vida, 8, 2). Sí, sin duda, pero mucho me temo que un hombre malherido difícilmente
podría hacer suya tan bella definición; la plegaria no siempre es un diálogo sabroso, sino a veces un proceso (como el que entabló Job) y un pleito. Escribió Martín Buber (1878-1965) en uno de sus libros: «Todos los pueblos practican la oración, pero sólo Israel ha convertido la plegaria en un pleito con el Todopoderoso, una sucesión de preguntas y respuestas en las que el hombre interroga y Dios contesta». La oración como una lucha, como el combate de Jacob con el Altísimo: «No te soltaré hasta que no me bendigas, hasta que no me des la paz, o hasta que me dejes en paz». Otro gran judío, Elie Wiesel, solía decir: «A menudo estoy a favor de Dios, a veces contra él, pero nunca sin él». Sí, hay que quejarse, hay que clamar al cielo cuando la severidad de Dios nos parezca desmedida; hay que celebrar incluso un proceso contra Dios mismo, para luego admitir que hemos pecado, que no hemos sido buenos, que queremos ser mejores. Que Dios prefiere una oración de este tipo (lo que llamaríamos una oración rebelde) a una desesperación resignada es algo sabido desde los tiempos de Job. Según cuenta Luca Ghiselli en su Diario (¡qué suerte habérmelo encontrado en una bancarella de libros usados, en Roma!), había una vez en un pueblo de Italia una anciana que a causa de la muerte repentina de una de sus hijas, andaba llorando por el vecindario, lamentándose e imprecando: «¡Oh, Señor! ¡Me has dado el último golpe! ¡Ándate con cuidado, ándate con cuidado, que ya estoy cansada de ser tu burla!». ¿Oración blasfema? Nada de eso: así hablaba Job, y fue justificado. También él decía: «Siento asco de mi vida, voy a dar curso libre a mis quejas, voy a hablar henchido de amargura. Diré a Dios: no me condenes,
explícame por qué me atacas. ¿Te parece bien oprimirme, despreciar la obra de tus manos?... Tus manos me formaron y me hicieron, ¿y ahora, en arrebato, me destruyes?... Con la furia de un león me das caza, renuevas tus ataques contra mí. ¿Por qué me sacaste del vientre? ¡Qué breves los días de mi vida! Aléjate de mí, déjame gozar un poco antes de que marche y no vuelva al país de las tinieblas y las sombras, al país oscuro y en desorden, donde la misma claridad parece sombra» (Job 10, 1-22). Sheila Cassidy, una teóloga que se ha pasado la vida entre las camas y los gemidos de los enfermos terminales en un hospital inglés, escribió hace poco: «Es importante que veamos claramente un asunto, que es el concerniente a la ira ante Dios. Debido a que estamos atemorizados frente a la majestad y poder de Dios, existe una tendencia natural a pensar que es blasfemo sentirse airado con él... Sin embargo, Dios prefiere la furia de Job a la meliflua sumisión de los Reconfortadores (cuatro hombres piadosos que le dicen a Job que Dios le está castigando y
que debe cuidar su lenguaje). Y aún más, Dios, de hecho, escucha sus quejas, aunque su respuesta no sea exactamente la que Job esperaba».
Hablar, quejarse, confesar la propia amargura es ya una forma de consuelo. ¡Pobre del que en su dolor ha preferido quedarse callado incluso ante su Dios! Temo los dolores demasiado silenciosos, los temo mucho, pues es en medio de estas brumas donde se gesta la desesperación y se fraguan los suicidios.
¿Para qué votamos? Por qué
México
Por Federico Lombardi SJ
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l primer día del nuevo año, los obispos de México y de Cuba han anunciado el programa del viaje del Papa a ambos países. No hay mucha necesidad de llamar la atención sobre la etapa cubana, ya que el jubileo de la Virgen de la Caridad del Cobre se inserta en la singular situación histórica y política de la gran isla caribeña, mientras es justo mencionar los múltiples motivos y el significado continental de la etapa mexicana, no en vano la primera del viaje. El 12 de diciembre celebrando en San Pedro la solemnidad de Nuestra Señora de Guadalupe, el Papa ha indicado su voluntad de participar del Bicentenario de la independencia de los países de América Latina, y ha hablado con intensidad del “camino de integración” de este “querido continente” y “de su nuevo protagonismo emergente en el concierto mundial”, indicando los horizontes de un crecimiento plenamente humano y de la “misión continental” de “nueva evangelización”.
Por Lic. Javier Algara
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a pregunta que sirve de título a este escrito no tiene un sentido irónico o peyorativo, que sugiriera que el voto es inútil, como cuándo uno dice “¿Para qué te hablo si no me haces caso?”. De hecho, esa pregunta se la hacen muchos mexicanos precisamente con ese sentido de frustración, al ver que elecciones van y elecciones vienen y nada parece cambiar en el país. Muchos compatriotas ya ni siquiera están interesados en la próxima jornada electoral, o en ejercer su derecho al voto. Pero si tratamos de responder a la pregunta con un análisis cristiano de los objetos del voto, seguramente que nuestra actitud respecto al voto, y a todo lo que está relacionado con la selección del mejor candidato cambiará. Lo primero que tenemos que hacer es reflexionar sobre la conducta cristiana frente a los procesos electorales. Nos iluminarán en esta tarea los números del 1913 al 1916 del Catecismo de la Iglesia católica (CIC). La promoción del bien común exige del ciudadano su participación voluntaria y generosa. ¿Por qué? Por nuestra misma dignidad como personas. Esa participación, obviamente, no se reduce a salir a votar el día señalado por la ley, sino que abarca todas aquellas actividades donde nuestra presencia es necesaria para el bien común: familia, trabajo, equipo deportivo, parroquia, etc. Benedicto XVI explica en la encíclica Caritas in veritate: “El bien común no es un bien que se busca por sí mismo, sino para las personas que forman parte de la comunidad social, y que solo en ella pueden conseguir su bien realmente y de modo más eficaz. Desear el bien común y esforzarse por él es exigencia de justicia y caridad”. O sea,
nuestra dignidad como personas no será plenamente reconocida, ni podremos alcanzar nuestras metas como personas, si no es en una comunidad humana que garantice el ejercicio de los derechos inherentes a nuestro ser personas. No estará de más repasar también los números del 1928 al 1942 del CIC. Lo que está en juego en la simple convivencia humana, pero de un modo especial en las actividades ciudadanas, incluidas las electorales, es nada menos que nuestra propia dignidad. Y si eso se puede decir de todo ser humano, en cuanto que la obligación de participar en la búsqueda del bien común es universal, de un modo especial se aplica al cristiano, por la exigencia de caridad y justicia que son connaturales a la respuesta personal al Evangelio. No olvidemos que, para que la humanidad reconozca en nosotros unos testigos creíbles de la presencia de Dios en la Iglesia, Cristo pide que nos amemos mutuamente como Él nos amó. La Caritas in veritate nos recuerda: “La «ciudad del hombre» no se promueve sólo con relaciones de derechos y deberes sino, antes y más aún, con relaciones de gratuidad, de misericordia y de comunión. La caridad manifiesta siempre el amor de Dios también en las relaciones humanas, otorgando valor teologal y salvífico a todo compromiso por la justicia en el mundo.” En la enseñanza social de la Iglesia encontramos la respuesta a la pregunta planteada al inicio. Ahora nos toca a los cristianos católicos la tarea de obedecer la voluntad de Dios sobre nosotros respecto al bien común de México.
De esta manera ha querido dirigirse al más populoso de los países hispanos, para allí continuar las celebraciones, junto a los representantes de los episcopados latinoamericanos, justamente en aquel “Parque del Bicentenario” construido recientemente en el preciso centro geográfico de México, a los pies del Cerro del Cubilete, donde se levanta el Santuario nacional de Cristo Rey, desde el que se abraza espiritualmente al entero País. ¿Quién no se conmueve con el afecto de los mexicanos por el Papa? ¿De su entusiasmo cuando vienen a Roma a encontrarlo? ¿Quién no recuerda la triunfal acogida que ofrecieron a Juan Pablo II en sus cinco viajes en vida, y también en los últimos meses, a su reliquia peregrina por sus tierras? Hace veinte años, estableciendo relaciones diplomáticas con la Santa Sede, el País ha reconocido la profunda alma católica de su pueblo. El Papa Benedicto sabía que tenía que ir a México, y ha elegido una localidad a la que su Predecesor no había podido llegar. Porque es la misma misión que continúa y se desarrolla. Que su viaje pueda ser un impulso para la superación de la pobreza y de la violencia, de esperanza y de paz para México y para toda América Latina.
Fe y política
Todos necesitamos que nazca un redentor Por Lic. Fil. Rafael Gómez
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ontinuando con el tema de la necesidad que tenemos de un redentor, hemos de recordar lo que ocurrió con Moisés que se libró de la muerte a manos de un Faraón que sentía amenazado su reino y que “le dijo a su pueblo: Miren, el pueblo Israelita es más numeroso y más poderoso que nosotros…” (Ex. 1, 9) y por eso mandó matar a todos los recién nacidos. ¿Cómo es que un reino menor al mismo tiempo temía y oprimía a uno mayor: más fuerte y más numeroso? ¿Cuál era la fuerza de los Israelitas que hacía que el Faraón y los egipcios les temieran tanto y al mismo tiempo los sometieran y por qué llegó el nuevo rey a la conclusión de que matando a los recién nacidos conseguiría debilitarlos? “El Faraón y su pueblo ignoraron que la fuerza del pueblo Israelita no era de origen humano sino divino y el humano que dispone de la vida humana, que es de origen divino, no debilita a quien mata sino a quien dispone de ella.” En nuestra sociedad moderna, el deleite, tan importante y tan presente en la vida humana, nunca nos debe llevar ni al cautiverio ni a la distorsión ni a matar la vida sometiéndola al deleite. Los hombres y mujeres de hoy no pueden sostener su propia vida sin enfermarla de muerte sometiéndola, toda, a la tiranía de sus propios deleites, ni pueden, para vivir sometidos a ellos, distorsionar el sentido de la vida y esperar de sus legisladores, como si la ley sin la ética fuera la responsable, otra definición de la vida humana. Ya tenemos dos definiciones distintas de ella: la que define la vida hasta las doce semanas de gestación y otra, muy distinta, a partir de las doce semanas y un día. “Así como no se puede criminalizar” con todo el rigor a quien aborta por haber sufrido una violación o por salvar y elegir su propia vida en el caso de embarazo de alto riesgo, respecto de la del hijo, “tampoco se puede despenalizar”, así nada mas, a quien separa los principios inseparables del amor y de la vida humana y se queda solo con “el que considera mas apetecible: el del placer”. Es decir que a todas luces es impropio que alguien se estimule y se recompense consiguiendo placer y, al mismo tiempo, se deshaga de aquello por lo que se recompensa. “Es tanto como olvidarse de la esencia de la propia acción: el amor y la vida”. Por eso no debe conseguir excusas legales para, inmediatamente después y hasta las doce semanas, despreciar el amor, que es todo compromiso, para terminar deshaciéndose de la vida. Sabemos que el acto íntimo de los
(segunda parte) esposos está orientado a conseguir un amor mas profundo, “que es lo que los fortalece”, y pueden así lograr una nueva vida a favor de esta importantísima realidad necesaria para la convivencia y para la vida humana, de manera que el placer se convierte en un importante estímulo y recompensa que aporta enormemente a la difícil entrega del amor y a la exigente, pero gozosa, disciplina de transmitir y de sostener la propia vida, la del cónyuge y la de los hijos. Lo mismo ocurre con el alimento que nos sirve para sostener la vida: producirlo, ganarlo y procesarlo implica tan importante esfuerzo que, de no ser por el deleite que nos produce, muchos no trabajarían por conseguirlo. En México se ha hecho una intensa campaña para abatir la creciente obesidad en la población y cambiar la mentalidad de quienes piensan que la esencia de la alimentación es el deleite y no la vida y para que los mexicanos busquemos la alimentación hacia una vida sana y, “sin renunciar al placer de comer, éste quede subordinado a lo mas importante que es la vida misma, convencidos de que es necesario comer para vivir y, de ninguna manera, vivir para comer”. En una sociedad el debate por el aborto solo desgasta a los contendientes que debaten en lenguajes distintos. Quienes anunciamos, celebramos y servimos al Evangelio de la vida hemos de trabajar por formar sociedades con alma anunciando el Evangelio de salvación “porque los no creyentes recibirán la misma herencia que los creyentes, pues son miembros del mismo cuerpo y tienen parte de la misma promesa que Dios hizo en Cristo Jesús” (Ef. 3, 6). Nos toca a los creyentes la tarea incansable que desgaste nuestras vidas por estar siempre en camino para encontrarnos con Jesús y llevar a “todos” a su encuentro y, por Él, al Padre con la emoción y la vitalidad que nos viene del Espíritu Santo. Un constante caminar como el de Moisés que salvó su vida, solo para desgastarla, yendo a la cabeza de un pueblo de dura cerviz hasta dejarlo a los pies de su Dios libertador. Nos toca con los Reyes Magos dejar toda práctica pagana y toda comodidad en la propia y lejana tierra para el siempre caminar de quien descubre en el cielo las señales de un reino que no promete ni bienes ni poder para hacer justicia, pero sí un corazón justo que descubre en el Niño que, apenas nacido, ya su propio gobernante lo quiere matar y que, salvarse de la muerte, es solo para dar su Vida por la Vida de todos.
Cuando el niño encargado no es el que se recibe Por Denise Hunnell –Zenit-
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magínese mirando a su niño y declarando con frialdad: “Tú nunca debiste haber nacido”. Los padres están haciendo exactamente eso en los tribunales de todo el mundo, ya que presentan demandas por una “vida indebida” , en contra de médicos y clínicas de fertilidad. Estos penosos casos son una variación de las clásicas demandas de “homicidio culposo” por negligencia médica. El hecho es que los demandantes no están satisfechos porque el paciente --en este caso un niño--, vivió en vez de morir. Por lo general, estos niños sufren de una discapacidad grave o enfermedad genética. En el caso de un “nacimiento indebido”, los padres alegan que si se les hubiera dado un diagnóstico prenatal de la enfermedad del niño, podrían haber abortado a su hijo. Ellos buscan una compensación para ocuparse de sus hijos, así como por daños y perjuicios al tener que vivir con un niño discapacitado. Los casos de “vida indebida” se presentan en nombre del niño, alegando que la no existencia sería preferible a vivir en una condición de enfermedad. En 1998, Amos Shapira argumentó en el Journal of Medical Ethics: “... que sería factible y deseable la compensación para respaldar las acciones de ‘vida indebida’. El consejero de genética debió tener un cuidado profesional hacia el recién nacido con discapacidad que ahora reclama, pues sin tal negligencia, él o ella no habría nacido de ninguna manera. La vida defectuosa del demandante (donde una vida sana nunca fue una opción), constituye una lesión indemnizable.” En todo el mundo, los niños son deshumanizados y tratados como accesorios en la vida de los adultos. Con la anticoncepción, los niños son concebidos cuando son convenientes para sus padres. El aborto es permitido para destruir a un niño “defectuoso”, a fin de que sus padres no tengan que lidiar con enfermedades y discapacidades. De hecho, un titular de un diario danés, anunció a principios de este año un avance médico que cura el síndrome de Down. En realidad, el anuncio informaba de que las exhaustivas pruebas prenatales y el aborto posterior de los niños no nacidos con síndrome de Down, eliminarían los nacimientos de esos niños. El advenimiento de técnicas de reproducción asistida ha permitido seleccionar aún con más precisión la venida de un niño. Los embriones son revisados antes de su implantación. Aquellos que no son del sexo
deseado o los que no son óptimos genéticamente, se descartan. En 2009, los médicos británicos anunciaron con entusiasmo el nacimiento de la primera bebé que había sido examinada desde que era un embrión, con el fin de asegurar de que no fuera portadora del gen BRCA1 del cáncer de mama. Al hacerlo, implícitamente reprueban la vida de todas las mujeres que portan el gen BRCA1. Para estos médicos, habría sido mejor que estas mujeres nunca hubiesen nacido. Cuando tener un bebé se convierte en una suerte de consumismo, no es de extrañar que los padres deseen algún tipo de garantía de devolución de su dinero. Cuando un producto adquirido no cumple las especificaciones con que se encargó, lo enviamos de regreso y pedimos un reembolso. Las demandas por “nacimiento indebido” se convierten en una compensación por una compra “defectuosa”. Con las demandas por una “vida indebida”, se alega que los niños discapacitados son errores de fabricación. Para empezar, ellos jamás debieron haber nacido. Esa forma de pensar despoja a los niños de su dignidad humana y degrada a sus padres. La cultura secular juzga a los menores por la utilidad que tienen para sus padres. El amor condicionado genera desconfianza e inseguridad. Este punto de vista socialmente destructivo debe ser contrarrestado con una cultura de la vida, que acepte la vocación natural hacia la paternidad. Los padres son llamados por Dios para ser custodios de una vida humana específica que Él les da. Todos los niños, sin importar el estado de salud, son concebidos a imagen de Dios. Cada niño viene con su propia serie de desafíos y no se puede negar que algunos de estos desafíos son enormes. Sin embargo, si Dios nos llama a una tarea, Él no nos abandonará. Nos dará su gracia, si tenemos la fe suficiente para confiar.
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Estén alegres en el Señor
Por Pbro. Margarito de la Torre
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a época de Navidad y año nuevo que acabamos de pasar, se caracteriza por la alegría, pero a veces también llega la nostalgia, la tristeza, ya sea al final del año o al inicio del siguiente; ¿cuál es la razón? Podemos argumentar muchas cosas, pero la causa es una: la falta de amor. San Pablo en su primera carta a los habitantes de Tesalónica les dice que “vivan siempre alegres” (1 Tes 5,16); la frase está en imperativo, es una orden. ¿Puede alguno recibir una orden sin disponer de lo necesario para ejecutarla? Si carece de lo necesario no puede cumplirla; por eso San Pablo les dice a continuación lo que deben hacer: “Oren sin cesar, den gracias en toda ocasión” (5,17-18). Recordemos que el amor viene de Dios y que el ser humano es feliz en la medida en que es capaz de amar; y como la oración nos une a Dios, orando nos disponemos para alimentamos de su amor. “Oren sin cesar, den gracias en toda ocasión”. ¿También debemos dar gracias cuando nos va mal? ¿San Pablo daría gracias cuando lo golpeaban sus hermanos de raza? Tal vez en ese momento no, pero seguramente después lo haría y tal vez por eso escribió: “Todo lo puedo en Aquél que me conforta”. Dice más adelante: “No impidan la acción del Espíritu Santo” (5,19); es el Espíritu Santo quien produce la alegría, mientras que el espíritu del mal provoca la tristeza, la nostalgia y la depresión, en cuanto males del espíritu. El espíritu del mal no actúa directamente en la persona sino que busca sus debilidades y se vale de ellas para atacarla, por eso San Pablo había dicho anteriormente, en el verso 15: “Nadie devuelva a otro mal por mal, busquen
el bien mutuo y el de todos”. Así que cuando llegue la tristeza o alguno de estos males, habrá que buscar las causas y encontraremos la carencia de amor en alguna de nuestras acciones, de donde se valió el enemigo para provocarnos el mal. San Ignacio de Loyola descubrió que cuando se detenía en las novelas de caballería, cosas mundanas, sentía en su momento placer, pero luego lo invadía el vacío; en cambio cuando se dedicaba a las cosas de Dios permanecía en él la paz. Este es el principio para descubrir de dónde provienen las mociones que nos llevan a realizar nuestros actos, si del Espíritu Santo o del mal. Se requiere perseverancia en la vida de oración. Recordemos lo que nos enseña Nuestro Señor Jesucristo: “oren sin cesar, el espíritu está pronto pero la carne es débil”. Tal vez no sea conveniente, sobre todo al inicio de la práctica de la oración, valernos de largos rezos sino de oraciones cortas pero frecuentes. Recordemos el ejemplo de la lluvia, si cae un fuerte aguacero en un lugar seco y luego vuelve a salir el sol, poco se aprovecha del agua, pero si llueve suave por varias horas o por días se aprovecha mejor. Pongamos otro ejemplo; pensemos en un grupo de adolescentes amantes del futbol que son llamados a entrenar para un equipo profesional de primera división; la ilusión de todos es llegar al equipo grande, pero no todos lo conseguirán y no siempre los de mejores cualidades físicas o mayor talento, sino los perseverantes y mejor disciplinados. También en la vida, viviremos en plenitud en la medida en que nos ejercitemos en el amor. Habrá muchas atracciones que nos jalen, que nos arrastren; dependerá de nuestra fuerza de voluntad; y la voluntad también se fortalece con la oración.
uánto se quejan algunos del deber que es necesario cumplir. Les parece algo exageradamente injusto. Pienso en los niños, por ejemplo, a los que mamá pide ayuda en cualquier necesidad doméstica; pienso en los jóvenes estudiantes y en las dificultades para salir adelante en la escuela, me imagino los montones de materias reprobadas acumuladas de semestre en semestre. Pero, en realidad he pensado lo fácil que eso debería ser el cumplimiento de cualquier deber. Y es que los deberes casi nunca sobrepasan nuestras posibilidades en cuanto a destreza, inteligencia o fuerza. Vamos a ver. No cualquiera es buena ama de casa, por ejemplo; las amas de casa tienen infinidad de labores, ellas se ocupan casi todo el día y aun así les queda siempre trabajo pendiente. Pero las tareas son fáciles: preparar comida, asear la casa, lavar la ropa, los trastos, llevar a los hijos a la escuela, administrar el dinero del gasto, y un sinfín de cosas más. Son tareas fáciles todas ellas, pero son muchas. El que estas sean fáciles no significa que se hagan por sí solas. Si a una ama de casa le pedimos que nos haga un cálculo de cuánto tiempo tarda un satélite en sobrevolar en torno al planeta, entonces sí que tiene una labor difícil, pues no es deber de ellas saberlo ni averiguarlo, ellas pueden calcular si el gasto podrá alcanzar para superar la quincena, teniendo en cuenta las alzas de los precios en el inicio del año, ellas piensan en el costo de los tomates, las papas, las tortillas, el azúcar y el café, pero no se detienen, porque no les interesa, en el sistema planetario y satelital. Igualmente, si a un estudiante de preparatoria le encargamos que nos haga una declaración anual de impuestos, no podrá hacerlo, puesto que en la escuela solamente le han hablado de cierta introducción a la contabilidad; lo mismo que no podrá llevar un caso de derecho procesal, cuando en la escuela apenas está aprendiendo nociones del derecho en general, además de no estar capacitado no está calificado o acreditado para llevar a cabo ese proceso legal. A un astronauta no le podemos exigir que enceste un tiro de tres en baloncesto, puesto que su vida no es el deporte, tal vez lo haga, pero él prefiere pasar horas o días ensayándose en la gravedad y clima del espacio y la navegación aérea. Así podrá pensarse en las diferentes tareas que cada cual hace día con día. Todo cuanto hace está dentro de sus capacidades o por lo menos debería de estarlo. Si se trata del deber, es algo que se debe, y si se debe es porque es posible su realización. Cada uno tiene algo que cumplir para que funcione su vida y sus relaciones humanas, estudiantiles, laborales o de recreación.
Es cierto que no todos hacemos lo que en realidad nos gusta, pero aun con eso, las tareas que realizamos, por complicadas que parezcan son fáciles, solo exigen de nuestro esfuerzo por realizarlas y de nuestro compromiso, ya que lo que hacemos o dejamos de hacer afecta, para bien o para mal a nuestra persona, a nuestros semejantes, a nuestro entorno y a nuestro desarrollo. Y en el cumplimiento de nuestros deberes está gran parte de nuestro éxito o de nuestro fracaso como personas en diversos ámbitos. Si cada uno de nosotros, desde el más pequeño hasta el más grande, dejara de cumplir el deber tan solo por un día, el mundo entero entraría en un estado de caos terrible y difícilmente remediable. Si los presidentes de las naciones, si los médicos o paramédicos, los maestros, los fabricantes y comerciantes, los recogedores de basura, las amas de casa, los niños y los jóvenes dejaran de cumplir el deber tendríamos en poco tiempo una situación financiera mundial pésima, enfermos de muerte sin atender, accidentados sin posibilidad de rehabilitación, nuestras comunidades y ciudades serían un desastre total, sin sumar las catástrofes porque los meteorólogos no advirtieran posibles fenómenos naturales que si bien no se pueden evitar, sí que nos ponen en guardia para salvar el pellejo. El cumplimiento del deber es fácil, aunque en ocasiones laborioso y pesado. Sin embargo, no está por encima de nuestras fuerzas. El cumplimiento del deber mantiene relaciones saludables, fraternas, vitales. El cumplimiento del deber no es otra cosa que lo que ya hacemos, sin embargo es necesario exigirnos un tanto para realizarlo con la mayor perfección posible. Y es que la mayoría de las cosas que hacemos, tiene una dimensión social, que a veces ni siquiera percibimos. Por ejemplo, si vamos al registro civil a dar de alta un nacimiento y este lugar está cerrado, pensamos: “no hay derecho” “¿cómo es posible que esté cerrado?” “¿qué vamos a hacer?” “¿en qué país vivimos?”. Si vamos a una clínica por algún padecimiento y no nos atienden porque no hay médico de guardia pensamos: debería haber un médico residente” “esto es injusto, no hay derecho”: cuando algunos no cumplen sus deberes, otros lo padecen. De lo cual deducimos que, si el trabajo, el deber tiene una dimensión social, entonces no hay ninguno que haga lo que a mí me toca y lo haga tanto bien como lo hago o lo debería hacer yo. El cumplimiento del deber nos hace más humanos, el cumplimiento del deber nos hace héroes de los demás, el cumplimiento del deber nos hace santos.
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Palabra de Dios
Síndrome del buen samaritano Por Noé Agustín Hernández, Filosofía II Escríbenos: ecos_seminarioslp@hotmail.com Se nuestro amigo en Facebook: Seminario Guadalupano Josefino
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l actuar del ser humano en nuestros días está marcado por los acontecimientos que él mismo ha sido capaz de crear. En este mismo caminar del hombre surgen cosas positivas y negativas que lo conducen a un rumbo en el que él mismo se desvía y se va perdiendo dentro del mundo. Así la importancia ya no radica en el otro, sino en sí mismo: el hombre ha olvidado que es un «ser en relación con otros sujetos humanos» (M. Buber). En consecuencia, ya no se recobra la necesidad de mirar al otro. Se ha perdido la capacidad de ir al encuentro con el que lo conduce a su felicidad, pues, aparte de que es un ser personal, necesita al otro para realizarse. «La existencia está orientada hacia los demás, vinculada hacia los demás, en comunión con los demás. La existencia personal se desarrolla y realiza junto con los demás» . El hombre se encuentra en el mundo, vive dentro de él, pero está ausente. Este ausentismo produce perder el sentido de aquél que está a su lado, de estar cegado o simplemente no querer aceptar al otro. El sufrimiento o la propia necesidad del otro ya no son del interés del hombre. El hacer el bien es algo sin sentido, de ahí que se juzga al otro no por lo que es, sino por lo que tiene. La indiferencia por lo que le suceda al otro está a la orden del día. Recuerdo las palabras de Jesús cuando cuestionado, responde con gran sabiduría acerca de lo que es el prójimo. Jesús estando con un maestro de la ley explica cuáles son los dos mandamientos más importantes. Del segundo, que es amar al prójimo como uno mismo, surge la interrogante ¿Quién es mi prójimo? Él responde que es aquél que es semejante a mí, con la misma condición de hijo de Dios, que vale más que una palomilla, pero ante todo que se reconoce en aquél que está necesitado, en el más pequeño e insignificante. Más aún, es necesario descubrirlo en mí mismo para poder amarlo, quitando las vendas de los ojos y verle con el corazón. Ésta es la actitud de un buen samaritano, y muchos queremos ser buenos
“Hemos encontrado al Mesías” Evangelio según San Lucas 2, 1-14 En aquel tiempo, estaba Juan el Bautista con dos de sus discípulos, y fijando los ojos en Jesús, que pasaba, dijo: “Este es el Cordero de Dios”. Los dos discípulos, al oír estas palabras, siguieron a Jesús. Él se volvió hacia ellos, y viendo que lo seguían, les preguntó: “¿Qué buscan?” Ellos le contestaron: “¿Dónde vives, Rabí?” (Rabí significa ‘maestro’). Él les dijo: “Vengan a ver”. Fueron, pues, vieron dónde vivía y se quedaron con él ese día. Eran como las cuatro de la tarde. Andrés, hermano de Simón Pedro, era uno de los dos que oyeron lo que Juan el Bautista decía y siguieron a Jesús. El primero a quien encontró Andrés, fue a su hermano Simón, y le dijo: “Hemos encontrado al Mesías” (que quiere decir ‘el Ungido’) Lo llevó a donde estaba Jesús y éste, fijando en él la mirada, le dijo: “Tú eres Simón, hijo de Juan. Tú te llamarás Kefás” (que significa Pedro, es decir, ‘roca’). Palabra del Señor Gloria a ti Señor Jesús
samaritanos, anhelamos el síndrome del buen samaritano. El síndrome del buen samaritano… para poder entenderlo hay que entrar en el contexto del otro, pero para ello está la necesidad de ir paso a paso. Un síndrome, si lo definimos, es un conjunto de síntomas o “signos” de algo. Un ejemplo muy claro es cuando estamos enfermos, manifestamos muchas características de lo que tenemos. Muchos de nosotros mostramos los síntomas de la enfermedad, pero en este caso no nos estamos refiriendo a una enfermedad, sino que el síndrome del buen samaritano es un síntoma tomado como actitud, convertido como algo vivencial. Padecer el síndrome del buen samaritano es estar enfermos de ayudar al otro y no tener miedo de contagiarlo, de hacerle ver que vale como persona, es ayudarlo en cualquier necesidad a la cual se está enfrentando, es curar sus heridas tanto interiores como exteriores. Lo importante radica en querer al otro y aceptarlo; en hacerlo notar tomando conciencia de la necesidad de hacer el bien y hacer presencia de ese Reino que buscamos y anhelamos, en el que existe la paz, no marcado por la individualidad sino por la comunión con los otros. El síndrome del buen samaritano no es otra cosa que buscar hacer el bien al otro, contagiarlo y llevarlo a la práctica. «El propio sentido de la existencia está ligado a la llamada del otro que quiere ser alguien ante mí, o que me invita a ser alguien ante él, amándonos y construyendo un mundo justo y humano. Al mismo tiempo se trata de recuperar la conciencia primaria de que el hombre es un sujeto personal que existe en el mundo con otros sujetos humanos» . Ante la realidad de lo que vive el hombre la respuesta es clara: no dejarse caer, sino actuar constantemente ante el sufrimiento, saliendo al encuentro del otro que lo pide y viviendo esa actitud de padecer el síndrome del buen samaritano, respondiendo así a lo que Jesús pide ante el prójimo: “…ve y haz tú lo mismo” (Lc 10,37).
La alegría de ser discípulos misioneros Hemos llegado al final de las fiestas de la Navidad que culminó con la Epifanía del Señor. Iniciamos, el mismo lunes, día 9 con el bautismo de Cristo , el tiempo ordinario que, en su primer tramo nos llevará a la Cuaresma, que iniciaremos el 22 de febrero con el Miércoles de Ceniza. El Evangelio de hoy recoge la vocación de los primeros discípulos de Jesús. El contexto es la llamada de los primeros discípulos y los testimonios a favor de Jesús. En el texto Juan presenta a Jesús a dos discípulos suyos y lo hace sirviéndose de una imagen figurada: el cordero de Dios. El autor presenta el discipulado como una dinámica de encuentro con Jesús y proclamación de este encuentro a otros En realidad, el autor presenta en síntesis el proceso formativo de la comunidad cristiana. Es muy interesante el itinerario del discípulo que describe San Juan mediante el recurso de los verbos fijar la vista; oír-escuchar; ver y oír; buscar-encontrar; seguir-permanecer. Quedarse con Jesús no será un acto conceptual, sino una experiencia existencial transformante. Es de notar que el anuncio no es del todo efectivo hasta que la misma persona no se encuentre personalmente con Jesús y experimente que es elegido y amado de forma única por Jesús. 1.- El llamamiento. Dios nos llama a participar de su vida y de su gloria. Cristo nos invita a encontrarnos con Él y a vincularnos con Él, porque el es fuente de vida. DA. 129131. 2.- Ser discípulos. Ser cristiano es tener un encuentro con la persona de Cristo, que da un horizonte diferente y una nueva orientación a la vida. El encuentro con Jesús deja al discípulo fascinado y lleno de estupor. DA. 243246. 3.- La misión. Ser discípulo es compartir la experiencia del encuentro con Cristo, es testimoniarlo y anunciarlo. La misión es parte integrante de la identidad cristiana. DA. 144-146. Discipulado y misión son dos caras de una misma medalla. Por P. Pedro S.S.
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El servicio al altar es la realización de nuestra misión
Por Alfonso Roque Ortiz Moctezuma SLP
¡Amemos a nuestros hermanos!
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ste lema marcó la realización del Encuentro Diocesano de Monaguillos, el pasado 28 de diciembre en el Seminario Mayor, teniendo como marco la fiesta de los Santos Inocentes. La Dimensión de Pastoral Vocacional convocó a los grupos de monaguillos de todas las parroquias de nuestra diócesis para este encuentro que seguramente dará muchos frutos en las comunidades, pero también en cada uno de los niños y niñas que tuvieron la oportunidad de vivirlo. El objetivo del encuentro es la promoción de la vocación sacerdotal, religiosa y misionera en los niños y niñas servidores del altar, impulsándoles a fortalecer la fe y el llamado en la familia y en la parroquia, para que ofrezcan una respuesta generosa en el tiempo y espacio que Dios les otorgue. Este año tuvo la particularidad del tema de la Misión, para estar en sintonía con el caminar de nuestra diócesis. Las actividades que se realizaron repartidas en 4 módulos, hicieron referencia a esta misión a la cual hemos sido llamados desde nuestro bautismo. En este año tuvimos la representación de 56 parroquias con una asistencia de 580 niños y niñas, que fueron acompañados por sus coordinadores de grupos y algunos otros por sus propios papás. Hacia las 10 de la mañana comenzaron a llegar los grupos llenos de alegría y entusiasmo, quienes fueron recibidos por el equipo coordinador de seminaristas y el promotor vocacional. Dimos comienzo con la presentación del equipo y por supuesto con la oración, encomendando a Dios nuestra jornada.
Después del lonche, se dio paso a las actividades, haciendo cuatro grupos y cada uno con una actividad diferente, y así tener la posibilidad de que todos tuvieran la oportunidad de participar en todo. Las actividades que se realizaron fueron: La proyección de un video, la realización de un Rally, el tema de la misión y por último una manualidad. Posterior a estas actividades dimos paso a compartir nuestros alimentos que agradecemos profundamente a las parroquias de la Pila y de la Garita por apoyarnos en ello. Para concluir nuestro encuentro cerramos con broche de oro con la celebración eucarística, en la cual nos acompañaron los padres Rubén Omar de catedral y Goyito, vicario de Villa de Arriaga, además de otros sacerdotes que durante la jornada nos acompañaron, a ellos nuestra gratitud por su apoyo y por su testimonio para con los monaguillos.
onsidera que no se ama al prójimo, por que no se ama a Dios. El amor de Dios es el principio y la medida del amor a nuestros hermanos. “Si alguno dice que ama a Dios y aborrece a su hermano es mentiroso y no hay verdad en el, dice San Juan; porque el que no ama a su prójimo, ¿Cómo puede amar a Dios? Este es un mandamiento que nos viene de Dios, concluye el apóstol: “El que tiene amor a Dios, le tiene también a su hermano” El amado discípulo de Jesucristo aprendió esta doctrina. Este amor eficaz y verdadero es el que caracteriza a los verdaderos cristianos. Considera que el precepto de amar al prójimo es semejante al de amar a Dios, y, por consiguiente, tan indispensable el uno como el otro. Son estos dos preceptos la base de la ley y el cimiento de la religión. Y aunque tus hermanos fueran tan negros y tan malvados como te los pinta la pasión, ¿No era menester amarlos, pues al fin son hermanos tuyos? Y este amor, no te debería mover a excusarlos, o a lo menos a no desacreditarlos, para no hacerles cada día mas daño. No hay cosa más precisa ni más clara que el precepto de amar a nuestro prójimo. Ama a tus hermanos, pero no se quede tu amor en palabras, acredítalo con las obras, muéstrate generoso ante las miserias de todo el mundo, compadécete de sus males, de sus flaquezas y hasta de sus mismos defectos asístelos con tus obras, con tus consejos, y con tus buenos oficios. Si no eres capaz de manifestar tu amor al prójimo con buenas obras, muéstraselo al menos con tu conducta, recibe y trata a todo el mundo con semblante risueño usando con todos modales cortesanos. Habla siempre bien de todo mundo; la verdadera caridad todo lo excusa y esta siempre ansiosa de hacer el bien a todos.
De esta manera concluímos nuestro encuentro y queremos agradecer profundamente a nuestro Seminario, por las facilidades que nos otorgan para hacer uso de sus instalaciones, a los párrocos y vicarios por su apoyo a esta dimensión, a todas las personas que de una manera muy discreta colaboran con esta dimensión y al grupo de seminaristas que estuvieron participando en el encuentro. Seguimos invitando a los grupos a los encuentros próximos que tendremos por zona.
ENERO 15 DE 2012
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Un programa de liberación interior, un intensivo proyecto de santificación, y todo ello promovido por el dinamismo de la oración
TRIBUNAL ECLESIÁSTICO ARQUIDIÓCESIS DE SAN LUIS POTOSÍ MADERO 300. COL. CENTRO TEL. (444) 812-45-55 SAN LUIS POTOSÍ, SLP. (15 de enero de 2012) 968l 21, 2011
Una nueva Evangelización
INICIAMOS EL MES DE ENERO TERMINAMOS EN MAYO DEL 2012. NORTE Comunícate con Manuela Hernández Tel. 812.79.69 y 813.08.70 SUR Comunícate con Teresa Arriaga Tel. 833.18.24 y Cel. (44) 13.57.87
COMUNICACIÓN El Tribunal Eclesiástico, por este medio se notifica a Oswaldo Jonathan Álvarez Espinal y Erika María Elena Alanís Ramírez que con Decreto del día 11 de octubre de 2011, el suscrito Pbro. Lic. Héctor Colunga Rodríguez, Juez Único, en virtud de las facultades ordinarias de que goza, declaró NULO E INVALIDO su matrimonio religioso efectuado en la parroquia de La Santa Cruz de San Luis Potosí, el 20 de noviembre de 2009, por falsificación de la boleta de bautismo y por presunción de atentado matrimonial por existencia de impedimento dirimente de ligamen por el matrimonio que contrajo Jorge Enrique Álvarez Espinal y/u Oswaldo Jonathan Álvarez Espinal con Ma. Guadalupe Hernández Galindo, el 9 de septiembre de 1995 en la Parroquia Catedral de San Buenaventura en Cuautitlán, Méx. Asimismo, se les informa que se ha pedido hacer las anotaciones pertinentes en los archivos eclesiásticos de la Arquidiócesis de San Luis Potosí y de la Diócesis de Cuautitlán. N.B.: Se usa este medio informativo porque se han rehusado a recibir correspondencia los interesados.
¿Le duelen mucho las rodillas?
¿Le han dicho que el único tratamiento es la cirugía?
El padecimiento en donde se desgasta el cartílago se llama artrosis Homeopatia y productos naturales
Aquí tenemos la solución a su problema hasta desaparecer esos dolores y regenerar (volver a formar) el cartílago. Con un tratamiento natural, además de curar osteoporosis, artritis y otros problemas de huesos y músculos.
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