Edición 172 by Semanario La RED

El amor de la familia es la fuerza que supera los obstáculos

Danilo y Ana María Zanzucchi son un matrimonio italiano que está pronto a cumplir 50 años de casados. Hace unos días se les informó que el Papa Benedicto XVI los escogió para escribir las meditaciones del Vía Crucis que el Viernes Santo presidió el Pontífice en el Coliseo de Roma. Para ellos, el amor de la familia es la fuerza que supera los obstáculos. Danilo tiene 92 años, mientras que Ana María ha cumplido ya 83. Se conocieron en 1952 y solo un día después de conocerse él le propuso matrimonio. Ella dijo sí y se casaron en la primavera siguiente. Ahora tienen 5 hijos. Los Zanzucchi contaron que pudieron escribir las reflexiones del Vía Crucis, dedicado este año a la familia, gracias a las oraciones, al Espíritu Santo y a su propia experiencia familiar. “En todos los momentos del Vía Crucis, hemos tenido ocasiones especiales para nuestra familia. Las estaciones nos han sido dadas por Jesús para redimir a la familia, y eso ha sido lo más fuerte que hemos confrontado, y el camino que siempre hemos seguido para iluminarnos con la gracia de cada estación”, afirmó Anna Maria Zanzucchi. Por su parte, Danilo dijo que si las familias “tienen esa disposición de estar listas para amarse unos a otros, con el amor de Dios, entonces ponen en práctica las palabras de Jesús sobre que cuando dos o más están reunidos en su nombre, allí está con ellos”. Esto, dijo, “es un recurso formidable para sanar y ayudar a la gente, sin juzgar a nadie porque todos somos pobre gente”. Ana María indicó luego que “la familia necesita renovarse, reforzarse, unirse. La unidad es ese amor que enlaza, el ímpetu que forma a las familias, pero no debemos olvidar que con la humanidad –y todos sabemos que eso puede pasar– tenemos peleas, malos entendidos y las pequeñas cosas se pueden convertir en grandes”. Todos estos obstáculos, precisó, “pueden superarse con amor, que sirve para que renovemos el amor que todos llevamos dentro”. “Es como dijo Danilo, se trata de renovarnos y que podamos ayudar a otros”. “Es Dios que ayuda a la familia y la sociedad para reconstruirse, para vivir como verdaderos hombres”, concluye Danilo.

Año 4

No. 172

Semana del 27 de mayo al 02 de junio de 2012

Cálida visita de Don Carlos al Corazón de la Diócesis

NO HAY QUE PERDER LO ESENCIAL, POR LO CIRCUNSTANCIAL

Las emociones momentáneas nos hacen perder la cabeza. El hombre puede tomar el manejo de su vida, cuando él así lo decida...

EXCESO DE MEMORIA

Conocí una vez a cierta dama aquejada de una enfermedad terrible y peligrosa: padecía de exceso de memoria. Todo lo recordaba la pobre mujer con una precisión atroz, y nada...

SILENCIO Y PALABRA

En este 2012, el Santo Padre nos presenta, a través de su mensaje, elementos vitales del proceso comunicativo, que son ver, sentir y escuchar, mismos que no se obtendrían si no se hace ...

MAYO 27 DE 2012

Impulsados por el espíritu

Editorial

entecostés cierra el ciclo Pascual. Pentecostés abre nuestro tiempo ordinario, el tiempo que se vive en la fe y para la Misión. Para lograrlo se necesita: la fe en la presencia del Espíritu de Dios, que transforma la vida de los humanos, para hacer de la humanidad EL REINO. Los textos que leemos este domingo hacen referencia al Espíritu, pero de muy diversa manera. El relato de Lucas nos muestra como el Espíritu les da unidad, y todos hablan un mismo lenguaje: el del amor. Pero la clave es el Espíritu. Pablo aporta una idea genial al hablar de los órganos al servicio del cuerpo. Un ejemplo de que todos formamos una unidad mayor y más fuerte. Cuando en el organismo todos trabajan en armonía y en comunión, experimentamos la salud, pero cuando un órgano o un grupo pequeño de células trabaja al margen (como el Cáncer), se rompe la armonía y la comunión, provocando la muerte de ese órgano y de todo el organismo. Así nos pasa en los diferentes niveles de nuestra humanidad. El evangelio de Juan escenifica también otra venida del Espíritu, pero mucho más sencilla que la de Lucas: Jesús se hace presente en medio de ellos. El mismo Jesús, el de carne y hueso, el crucificado: su presencia produce la paz y la alegría. Sopla sobre ellos: El Espíritu y les envía con el mensaje del perdón. El Espíritu de Jesús es el que da vida a la comunidad: es como una nueva creación. Ese Espíritu de Jesús no es solo para ellos, es para que lo extiendan por todo el mundo. Por eso el Espíritu está siempre en nosotros, debemos descubrirlo y vivirlo. El Espíritu es una realidad tan importante en nuestra vida espiritual, que nada podemos hacer ni decir si no es por él. La fiesta de Pentecostés es una invitación a mirar el mundo y sentir el Espíritu de Dios, presente, activo, irresistible. Muchas veces contemplamos la presencia de Dios en los esplendores de la naturaleza. Es necesario contemplar al Espíritu en los humanos. Esto nos hace reflexionar una vez más sobre la presencia de Dios en nuestra vida, sobre “el espíritu de vida”. ¿Con qué espíritu vive la humanidad, y vivimos nosotros? Los hombres suelen vivir con un espíritu de mera supervivencia, o de mero disfrute del mundo. El Espíritu que nos anima es más ambicioso y más generoso, nos hace ser Hijos, y nos compromete en la Misión de compartir ese Espíritu.

Por Pacco Magaña

Jesús en oración Queridos hermanos y hermanas:

Jesús es bautizado en el Jordán; en este gesto él anticipa la cruz, da inicio a su actividad ocupando el lugar de los pecadores, asumiendo sobre sus hombros el peso de la culpa de toda la humanidad, cumpliendo la voluntad del Padre. Recogiéndose en oración, Jesús muestra la íntima relación con el Padre que está en el cielo, experimenta su paternidad, capta la belleza exigente de su amor, y en el diálogo con el Padre recibe la confirmación de su misión. En las palabras que resuenan desde el cielo (cf. Lc 3, 22) está la referencia anticipada al misterio pascual, a la cruz y a la resurrección. La voz divina lo define «mi Hijo, el amado», refiriéndose a Isaac, el hijo amado que el padre Abraham estaba dispuesto a sacrificar, según el mandato de Dios (cf. Gn 22, 1-14). Jesús no es sólo el Hijo de David descendiente mesiánico regio, o el Siervo en quien Dios se complace, sino también el Hijo unigénito, el amado, semejante a Isaac, que Dios Padre dona para la salvación del mundo. En el momento en que, a través de la oración, Jesús vive en profundidad su filiación y la experiencia de la paternidad de Dios (cf. Lc 3, 22b), desciende el Espíritu Santo (cf. Lc 3, 22a), que lo guía en su misión y que él derramará después de ser elevado en la cruz (cf. Jn 1, 32-34; 7, 37-39), para que ilumine la obra de la Iglesia. En la oración, Jesús vive un contacto ininterrumpido con el Padre para realizar hasta las últimas consecuencias el proyecto de amor por los hombres. En el trasfondo de esta extraordinaria oración está toda la existencia de Jesús vivida en una familia profundamente vinculada a la tradición religiosa del pueblo de Israel. Lo muestran las referencias que encontramos en los Evangelios: su circuncisión (cf. Lc 2, 21) y su presentación en el templo (cf. Lc 2, 22-24), como también la

La RED no necesariamente apoya la publicidad de nuestros anunciantes.

(Primera de tres partes)

educación y la formación en Nazaret, en la santa casa (cf. Lc 2, 39-40 y 2, 51-52). Se trata de «unos treinta años» (Lc 3, 23), un largo tiempo de vida oculta y ordinaria, aunque también con experiencias de participación en momentos de expresión religiosa comunitaria, como las peregrinaciones a Jerusalén (cf. Lc 2, 41). Narrándonos el episodio de Jesús a los doce años en el templo, sentado entre los doctores (cf. Lc 2, 42-52), el evangelista san Lucas deja entrever que Jesús, que ora después del bautismo en el Jordán, tiene un profundo hábito de oración íntima con Dios Padre, arraigada en las tradiciones, en el estilo de su familia, en las experiencias decisivas vividas en ella. La respuesta del muchacho de doce años a María y a José ya indica aquella filiación divina, que la voz celestial manifiesta después del bautismo: «¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que yo debía estar en las cosas de mi Padre?» (Lc 2, 49). Al salir de las aguas del Jordán, Jesús no inaugura su oración, sino que continúa su relación constante, habitual, con el Padre; y en esta unión íntima con él realiza el paso de la vida oculta de Nazaret a su ministerio público. La enseñanza de Jesús sobre la oración viene ciertamente de su modo de orar aprendido en la familia, pero tiene su origen profundo y esencial en su ser el Hijo de Dios, en su relación única con Dios Padre. El Compendio del Catecismo de la Iglesia Católica responde así a la pregunta: ¿De quién aprendió Jesús a orar?: «Conforme a su corazón de hombre, Jesús aprendió a orar de su madre y de la tradición judía. Pero su oración brota de una fuente más secreta, puesto que es el Hijo eterno de Dios que, en su humanidad santa, dirige a su Padre la oración filial perfecta» (541).

MAYO 27 DE 2012

Un espacio de amor auténtico Por Pbro. Tomás Cruz Perales

na ocasión en la que coincidí con unos de mis sobrinos en casa de mis papás, comencé a curiosear algunas cosas que quedaron reducidas a “tiliches”, su ya notada y bien ponderada capa de polvo hacía ver no solo su inutilidad sino también su abandono en el tiempo. No sé si les ha pasado a algunos de ustedes, después de que ha fallecido un ser querido: nos negamos a que transcurra el tiempo; queremos detenerlo en el espacio que ellos tuvieron, por lo que nos aferramos a dejar las cosas como han quedado. Mientras veía algo que no buscaba, me impresionó la reacción de mi sobrino ante un hallazgo, que para él, le era completamente desconocido, no era para menos. Un adolescente que solamente sabe que la mejor manera de escuchar música es retenerla en formatos comprimidos para que, la mayor cantidad de sus melodías preferidas sean archivadas en esos pequeños reproductores o en los sofisticados teléfonos celulares. Era uno de esos discos “LP”, esos acetatos que no albergaban más de diez o doce canciones: ¿Qué es esto?, me preguntó sacando uno de ellos de una caja que contenía, eso sí, la música que gustábamos escuchar en familia en torno aquella “consola”, todo un mueble, que hoy sería incómodo en los reducidos espacios de nuestras casas. Tal vez, observando aquello que encontramos en nuestros hogares, podemos darnos cuenta de las cosas que han quedado en el tiempo y que, ahora son consideradas inútiles o han quedado en el abandono. Podemos enumerar algunas, pero qué lamentable sería cuando éstas pudieran ser aquellas que han marcado o que han cultivado los valores, tanto humano como cristianos.

Me conmociona escuchar a muchos padres de familia lamentarse de las dificultades que tienen en la educación de sus hijos. Muchos de ellos han tenido que pasar por alto el dejar al “cuidado” del Internet, de la TV, y de los videojuegos a sus hijos: es el fenómeno de las “nuevas guarderías”; que aparentemente pudieran insinuar lejano lo nocivo o a lo arriesgado sin salir de casa. Son los nuevos tiempos y son los nuevos signos. Y parece ser que la pregunta sigue siendo la misma ¿qué es esto?: Cuando el padre o la madre de familia pretende pasar un tiempo con sus hijos o por lo menos, jugar con ellos; cuando un padre de familia pide cooperación en las faenas de casa; cuando una madre busca inculcar la fe…y no encuentran mas que reproches de un hijo que ha sido interrumpido en su programación favorita o “distraído” en su aguerrido juego del “Xbox”. En sus reflexiones sobre la vocación al matrimonio y a la familia, el Papa Benedicto XVI invita a que como iglesia doméstica se atienda la responsabilidad de evangelizar. “Cristo está con nosotros ahora, hoy, perseverando pacientemente en nuestro camino, haciendo el futuro presente.” La “iglesia doméstica,” “el lugar primario de la evangelización,” debe fomentar la conciencia de la presencia de Cristo con nosotros en el mundo y la importancia de tratar de buscar y establecer una relación con El en la oración, el sacrificio y en el servicio a los demás. No siempre es fácil vivir una realidad como la que ahora experimentamos, especialmente cuando cada miembro de la familia está inmerso en oportunidades que nos ofrecen gratificación inmediata y el ambiente nos presiona a ello. Los padres sienten las presiones de la so-

ciedad consumista mientras que los hijos experimentan la presión de adaptarse a la “norma” de los que son de su edad. Tal vez haga falta desempolvar ese amor auténtico, y que sea conocido por todos, como dice San Pablo, que nos ayude a cre-

cer hacia Aquél, que es Cristo. De tal manera que nos de cohesión entre cada unos de los miembros, en este caso de la familia, para que cada uno con su actividad propia crezca y se construya a sí mismo en el amor.” (Efesios 4).

La Red... social

Por Eduardo Gloria

Nuestra historia

Fray Toribio de Benavente «Motolinía»

De los doce primeros evangelizadores llegados a la Nueva España, el llamado «padre de los pobres», Motolinía, se distinguió por su celo pastoral, su auténtica vocación al servicio del Evangelio: vivió y murió pobre, haciendo vida el espíritu del pobrecillo de Asís. Hombre de basta cultura que tanto bien trajo al Nuevo Mundo. Por Pbro. Lic. Rubén Pérez Ortíz

l hombre de la orden de los frailes menores (Franciscanos) Toribio de Benavente, mejor conocido como Motolinía. Nació en lo que ahora se conoce como Zamora, España a finales del siglo XV y murió en México, mas su muerte en dicho país no fue en vano pues su vida fue una plena y ardua labor evangelizadora de suma importancia.

Toribio tomó el nombre de Motolinía, al enterarse de su significado. Ese nombre sería su plan de vida: pobre habría de ser hasta el final de su existencia como lo eran franciscanos en esa época. El fraile era un hombre enérgico que no rehuía de la lucha cuando la creía necesaria fue promovido como Obispo de Yucatán, nombramiento que rechazó. El testimonio de pobreza a diferencia de los conquistadores atrajo la atención de los nativos pues Motolinía vestía hábitos rotos hechos de sayal, dormía en el piso y comía los mismos alimentos que los naturales pues sentía gran compasión por los más necesitados comprometiendo con ellos en todo su entorno. El 19 de octubre de 1529 realizó su primer viaje a Guatemala y otros sitios de Centroamérica en estos lugares ofició Misa y bautizó. Nada ni nadie pudo detener a aquel hombre de pobreza material y gran riqueza espiritual, un hombre de Dios que, junto con otros frailes, caminó valles, montañas, cañadas, con el único objetivo de administrar los sacramentos y enseñar a nuestros antepasados el Evangelio, todo esto con el esfuerzo y la voluntad sostenida en el ejemplo de Jesucristo. Motolinía estuvo en nuestro país en el tiempo en que al indio se le juzgaba incapaz intelectualmente y se le trataba como animal de carga, algunas veces cuestionando su condición Humana. Bajo este contexto y a diferencia de las ideas de los Conquistadores, el fraile afirmaba que esos hombres eran seres de gran ingenio y habilidad para aprender todo tipo de ciencias, artes y oficios. Esos hombres con solo mirar lograban entender de forma viva y sosegada todo tipo de labor sin caer en el orgullo como en otras naciones, sostenía Motolinía.

Por Pbro. Lic. Salvador González Vásquez

as emociones momentáneas nos hacen perder la cabeza. El hombre puede tomar el manejo de su vida cuando él así lo decida. Pero tiene que ir adquiriendo la destreza para dominar sus cambiantes estados de ánimo. Decía Ortega y Gasset, que lo más valioso que tenemos es muy frágil, y siempre está en peligro de perderse. Y él consideraba que la inteligencia es lo más valioso que tiene el hombre. Pero aquella es muy frágil y ante cualquier emoción se puede perder la inteligencia. En cualquier instante se nubla la claridad del pensamiento.

Después de navegar por los océanos por mas de tres meses el 13 de mayo de 1524, llegó a las costas de Veracruz un grupo de doce misioneros franciscanos, éstos traían la encomienda de evangelizar lo que hoy es nuestro país y parte de Centroamérica. Fieles a la regla de San francisco los frailes, no traían dinero alguno en los bolsillos; ni joyas, ni dos túnicas. Uno de los llegados a la Nueva España con el grupo que popularmente se le conoce como “los doce apóstoles mexicanos” era Motolinía. Motolinía es quizá el más brillante de los doce franciscanos que llegaron de España. Éste tenía la encomienda de Carlos V de evangelizar al Continente. Misionero infatigable, catequizó y predicó casi la totalidad de la Nueva España y parte de Centroamérica. Aprendió el Náhuatl y se empeñó en conocer la cultura del lugar, por otra parte, fray Toribio se interesó de preponderantemente por las condiciones de vida de los indios en la época.

No hay que perder lo esencial por lo circunstancial

El hombre necesita aprender a manejar sus emociones. Porque un mal manejo de las mismas, lo puede desviar de su camino. Es decir, el hombre puede perder de vista las metas que ha trazado. Porque la euforia provocada por las circunstancias, le puede llevar por un camino equivocado. Puede tomar decisiones muy emotivas, pero poco razonadas y nada razonables. La vida esta hecha de lo esencial y de lo circunstancial. Lo esencial perdura y fundamenta nuestros actos; es la razón de lo que hacemos. En cambio las variadas circunstancias, pueden llevarnos a perder el fundamento de nuestras acciones. La convicción de la capacidad de nuestros antepasados entre otras cuestiones impulso a fray Toribio a realizar obras de suma importancia como la fundación de Puebla en 1531. Motolinía defendió a los nativos de la impasible voluntad de los conquistadores. El fraile estaba convencido de que Dios intervendría a favor de los más necesitados. Intervino en el problema de los diezmos de los indios. Los franciscanos se oponían a que los naturales pagaran este precepto de la Iglesia. Fue ministro provincial de su Orden. Se retiró de las labores misioneras, pero aún fundó varios conventos, de los que fue guardián. Residió los últimos años de su vida en la capital, donde falleció en 1565. Había consagrado toda su vida a los indios, a los que amó hondamente, los comprendió y defendió en el terreno de las realidades y de modo práctico, dejando fama de uno de los más celosos y piadosos misioneros de los primeros tiempos. Buen conocedor del idioma, costumbres y pasado indígena, le encomendó la Orden, en 1536, escribiera el relato de las antigüedades mexicanas y la historia de la conversión, lo que efectuó Motolinía en los años siguientes; permaneció inédita la obra, conocida con el título convencional de Historia de los indios de la Nueva España, hasta que se publicó fragmentariamente en 1848, y completa García Icazbalceta en la Colección de documentos para la Historia de México, en 1858. La precede una Epístola proemial al conde de Benavente, sobre la historia azteca. En lenguaje castizo y con mucho escrúpulo crítico refiere Motolinía simultáneamente la historia de la conversión y las costumbres y modo de vivir, ritos y cultura de los indios, por lo que su obra es una de las fuentes más importantes para el conocimiento de la etnografía y del estado de la civilización de México en la época de la conquista. Si defiende la Conquista no deja de censurar duramente los abusos de los colonos, y expresa admiración por la naturaleza mexicana.

Lo circunstancial es muy cambiante, nunca perdura. Sin embargo, lo pasajero puede llegar a marcar la existencia. El corazón humano es muy vacilante, y tiende a apegarse a lo que es cambiante. Es importante distinguir lo esencial de lo circunstancial. Lo esencial no se puede ni se debe cambiar. Aunque es cierto que las circunstancias forman parte de la vida, esas variaciones no deben hacernos perder lo fundamental. A fin de cuentas, solo Dios sabe de lo que estamos hechos, y para que fuimos hechos. Solo él conoce el corazón, y ve nuestras intenciones. El nos hizo y conoce lo más íntimo de nuestro ser; el sabe cual es el fin de nuestra existencia. Hay que vivir de acuerdo a lo que somos, y no confundirlo con lo que hacemos. Lo que hagamos, tiene que ir de acuerdo a lo que somos. En el médico que no cura, el profesor que no enseña, y el cura que no sana el espíritu, no se corresponde el ser con su quehacer. Realicemos pues lo que nos toca hacer para que estemos en paz, y así gozar de bienestar.

¿Matrimonios gay? Pulsó a más de uno

Por P. Kino

ace unos días en un periódico local apareció una noticia que se titulaba “Sacerdote apoya matrimonios gay”. La redacción de nuestro semanario La Red, me pidió que se escribiera al respecto y con gusto lo hago. Primeramente me di a la tarea de conocer a través del internet al sacerdote, y me di cuenta que por obvias razones ha sido amonestado por la Iglesia católica por sus “ideas de avanzada”.

El sacramento de la penitencia Por Pbro. Lic. Héctor Colunga Rodríguez colunga46561@hotmail.com.

Una golondrina no hace verano, así como un sacerdote no puede movernos toda la Tradición, Magisterio y Sagrada Escritura que, la Iglesia tiene en su historia. Ser sacerdote no da infalibilidad, solo manifestó su opinión, no la doctrina de la Iglesia. Pero ¿Qué dice la Iglesia sobre el matrimonio? Primeramente, el matrimonio siempre ha existido sobre la tierra desde que existe el hombre y la mujer. El matrimonio es de origen natural. Jesucristo, eleva el matrimonio a la dignidad de Sacramento, es decir, algo sagrado que debe durar hasta la muerte. Las fuentes de la teología, (Sagrada Escritura, Tradición y Magisterio), siempre han visto el matrimonio como la unión del hombre y la mujer. Así que, por obvias razones no podemos aceptar, la unión de dos personas del mismo sexo, porque desdice la voluntad de Dios, y “primero obedecer a Dios antes que a los hombres” (Hech 5, 29). Esto no es un rechazo a las personas que tienen tendencias homosexuales, ellas pueden acercarse a la comunión, a la confesión, siempre y cuando vivan acorde al evangelio, y por ende, evitando el ejercicio de su homosexualidad. Así que no solo en este campo, sino en muchos otros, si un sacerdote, religios@, dice algo que está en contra de la doctrina de nuestra amada Iglesia, con toda sencillez, caridad y respeto, díganle: “ya ni la @&%#...”, pues cuando eso lo dice cualquier feligrés no es correcto, pero cuando lo dice un ministro de culto, que se supone tiene más conocimientos, que profesó amor y respeto a la doctrina de la Iglesia, hace mucho mal a la misma con esas afirmaciones, además, si no le gusta la doctrina de Cristo ¿Por qué optó por él? La doctrina de Cristo sobre el matrimonio es clara. Si a alguien no le gusta, pues en oración, en reflexión, conozca y profundice la doctrina y verá que Dios no rechaza a nadie, pero tiene un plan en cada uno. Para concluir, simplemente me limité a poner la doctrina de Jesucristo, y si a alguien no le convence, pues peléese con Jesús que fue él quien nos la dejó.

Queridos lectores: Hace tiempo abordé cada uno de los sacramentos por este medio y se me hace muy importante hablar de nuevo sobre la reconciliación. El sacramento de la penitencia es el sacramento en el que los fieles, reconociendo su arrepentimiento por los pecados cometidos después del bautismo y con el deseo de reformar sus vidas obtienen el perdón de Dios por medio de la confesión de sus pecados a un sacerdote. Por medio de este sacramento, los que confiesan sus pecados se reconcilian con la Iglesia (c. 959). La confesión individual e íntegra de los pecados y la absolución son el único camino ordinario por el que un miembro de la Iglesia, consciente de pecado grave, se reconcilia con Dios (c. 960). Sólo el sacerdote es el ministro del sacramento de la reconciliación. Los sacerdotes tienen la facultad de oír confesiones en su diócesis, y pueden ejercerla en todas partes, a no ser que el ordinario de ese lugar lo niegue, mediante un caso particular. El secreto de la confesión es inviolable. Es un crimen para un sacerdote descubrir al penitente de cualquier modo, de palabra o de cualquier otra manera por cualquier razón (c. 965, 967, 976, 983). Hay sacerdotes que en las homilías ponen de “ejemplo” algún comentario que les hizo un penitente en la confesión. Deberes de los fieles: - Confesarse por lo menos una vez al año. - Hacerlo en número y especie. - Decir los pecados que previamente no han sido confesados (c.988-989). Problemas actuales por parte de los fieles: - Prácticamente los fieles ya no se confiesan. - No se valora el sacramento como la restauración de la vida y la amistad perdida. - No distinguen lo que es pecado venial o mortal. - Le dan más importancia a otras cosas que no lo son y lo consideran grave, como no haber tomado la ceniza al iniciar la cuaresma, y no así una infidelidad. - No se preparan debidamente. - Confiesan pecados que no son suyos (hablan de todo o de todos menos de sus faltas). - Lo toman como requisito porque van a ser padrinos de algún sacramento y no porque quieran reconciliarse con Dios y porque les piden comprobante. Problemas actuales por parte de los sacerdotes: - Los sacerdotes no tenemos tiempo para confesar. - Ponemos horarios y días. - No preguntamos con prudencia y con discreción. - Le damos más importancia a otras actividades pastorales. Aunque lo mínimo es una vez al año para recibir este sacramento, hagámoslo lo más frecuente posible, para estar en gracia de Dios y continuar en la amistad que Él nos ofrece. Hasta la próxima.

Mira a las estrellas, pero no te olvides de encender la lumbre en el

¿Cómo se elige al Papa?

hogar

Por Pbro. José Antonio Martínez Ortiz

Proverbio alemán

espués de un día arduo de trabajo, del calor terrible y un transito vehicular atroz, llegar a la acogedora morada, abrir la puerta, y experimentar el poder de las palabras que trasforman todo ese día de calamidad: “Hogar dulce hogar”, no tiene precio. Parece no ser mas que un sinónimo de: casa, vivienda, domicilio; o familia, intimidad. Una chimenea, una lumbre para calentar la comida, una llama que intensifica y reactiva el ánimo. Hogar es más que una construcción.

a elección papal en los primeros siglos de la Iglesia fue hecha por el clero de Roma, en especial por los obispos. El pueblo se limitaba a aclamarlos. Pero esto causó muchos trastornos, como la elección de antipapas. El primero de ellos, Ursino, fue elegido por el pueblo de Roma y una parte del clero, en el año 396, para oponerlo a San Dámaso, que acababa de ser electo por los obispos. Los partidarios del Papa riñeron con los del antipapa en una Iglesia, y hubo graves incidentes relacionados con esto. El emperador Valentiniano entonces intervino por medio del exarca de Roma, poniéndose de parte del verdadero Papa, afortunadamente, que era San Dámaso. Así comenzó, con laudable propósito inicial, la ingerencia de los emperadores, que luego tendría tan funestos resultados. Los emperadores de Oriente, que reinaban en Bizancio, y los de Occidente, tuvieron a gran honra llamarse protectores de la Iglesia contra infieles, herejes, cismáticos y sediciosos. Pero su protección se transformó en tutela intolerable de la autoridad civil sobre la eclesiástica. Los Papas jamás lo consintieron, ya que la política de la Iglesia durante veinte siglos ha sido afirmar enérgicamente que lo que es de Dios no puede darse al César. El Sumo Pontífice se elige de entre aquellos miembros del colegio cardenalicio que tiene menos de ochenta años. A la muerte del Papa, se reúnen todos en un Consistorio (nombre oficial de la reunión) en la Capilla Sixtina. Nadie, excepto ellos puede entrar en este lugar.

Durante varios días realizan consultas y escrutinios entre ellos para decidir quién será el siguiente Papa. El cónclave que tiene lugar entonces puede variar mucho en su duración. Hubo el que duró treinta y seis días, como el de Pío VIII, y cincuenta, como el de Gregorio XVI, y más aún, tres meses y medio, como el de Pío VII, y hasta seis meses, como el de Benedicto XIV. Las papeletas que utilizan en las votaciones indican el nombre del candidato que cada Cardenal propone como futuro Papa. Si ningún cardenal alcanza los dos tercios del número de votantes, más uno, se recogen las papeletas y son quemadas junto con una sustancia que produce humo negro. Este humo negro puede verse desde la Plaza de San Pedro y nos indica que la votación efectuada no alcanzó la mayoría antes descrita. Cuando en la votación se consigue que un cardenal haya obtenido los dos tercios del número de los votantes más uno, entonces las papeletas se queman con una sustancia que produce humo blanco. Este humo es la señal que la Iglesia Católica tiene ya un nuevo Pontífice. Antiguamente se usaba paja seca o paja mojada para dar al humo la coloración negra o blanca, según el caso. Sin embargo, como esto se prestaba a confusión por el color del humo producido, se ha optado desde la última votación por utilizar sustancias químicas que aseguren el color deseado.

En latín se tenía designada una palabra propia de origen indoeuropea que se traslada como fuego, ignis, pero no un fuego cualquiera, era un brillo, un rubor, una llama de ardor, de una pasión amorosa, que surgía de la comprensión del entenderse mutuamente. Como esta palabra se inclinaba a la representación de luz, fue cambiada por focus, pira, hogar. Se decía, luego de una embestida en Roma: repetere focos, regresar a su hogares. Focus, es el hogar doméstico, opuesto a ara, que era de la divinidad. Recordemos que al caste-

llanizar el latín hubo traslaciones de algunas letras, entre las que se encuentra la sustitución de la /f/ por la /h/, entonces tenemos /fogar/ /hogar/ deviniendo esta palabra de fuego. Pero este concepto de hogar, por extensión también llega a utilizarse como sinónimo de lar, vr.g −por estos lares casi no se ama− en estos hogares no se enseña amar. Y Lar, responde a la mitología que menciona Ovidio, sobre la ninfa Lara, que luego de toda una aventura entre dioses le disponen resguardar las encrucijadas, Los Lares, de origen etrusco protegen y velan a la vez los recintos domésticos. Haciendo un clima de hogar, dulce hogar. Aunque, según Pío Baroja (novelista español) el hogar es el lugar donde las peleas jamás admiten tregua, ni es sencillo encontrar una respuesta a tanto caos; o eso se entiende a grandes rasgos, en su cuento que lleva como titulo: Hogar triste.

Las rosas del Tepeyac Can. José Ma. Ortega Robles

uan Diego es para nosotros otro maestro de la fe, una luz en nuestro camino. Va a Tlatelolco a cumplir un deber de todo buen cristiano, a oír la Santa Misa.

En su camino le sale a su paso la madre de Dios, la Virgen de Guadalupe. Le habla y le dice: “quiero que seas mi mensajero. Ve con el Obispo de México y dile: la Reina del cielo me manda a decirle : quiero que en este lugar se me construya un templo”. Puesto que el Señor Obispo Fray Juan de Zumarraga no conoce ni la fe ni el privilegio de Juan Diego, lo somete a prueba, pero, la Virgen hace el milagro de las rosas que aparecen en la tilda del indio junto con su imagen para darle la prueba que el Obispo necesita y lo deja con la boca abierta al recibir el milagro de las rosas y la imagen de la Santísima Virgen. Milagro que ha despertado tanta fe y amor para ella. Papas, sacerdotes y cristianos de muchas naciones acuden a pedirle bendiciones a la Guadalupana. Madrecita, cuando tengamos que partir de este mundo muéstranos el milagro de tus rosas, para alcanzar el perdón de Dios.

Los libros y sus autores

Por Mtro. Luis Marino Moreno F.

El regreso del hijo pródigo Meditaciones ante un cuadro de Rembrandt

“U

Henry J. M. Houwen Madrid PPC Editorial 1999

n encuentro aparentemente insignificante con un cartel representando un detalle de El regreso del hijo pródigo de Rembrandt, hizo que comenzara una larga aventura que me llevaría a entender mejor mi vocación y obtener nueva fuerza para vivirla. “Me acerqué al cuadro de Rembrandt como si se tratara de mi propia obra, que contenía no solo lo esencial de la historia que Dios quería que contara a los demás, sino también lo que yo mismo quería contar a los hombres y mujeres de Dios. En él está todo el evangelio. En él está toda mi vida y la de mis amigos”. Son las palabras textuales del prólogo y donde se nos describe a los protagonistas de tal aventura. Para Houwen, un cuadro del siglo XVII y su autor, una parábola del siglo I y su autor, y un hombre del siglo XX, en este caso Henry Jean Marie en busca de significado de la vida. Por otro lado, se han escrito innumerables interpretaciones de la parábola del hijo pródigo, en la que enjuiciamos de manera severa al hijo menor que derrocha su herencia en otro país, pero todos podríamos reconocernos en cualquier personaje plasmado en dicha representación e incluso en el hijo mayor. También la Iglesia Católica eligió para 1999, el Padre Misericordioso a dicha pintura de Rembrandt Van Rhin. Henri Jean Marie Nouwen (1932-1996) Sacerdote de origen holandés, enseñó en diversas universidades norteamericanas. Más tarde se trasladó a la comunidad de El Arca en Daybreak (Toronto) es uno de los escritores de espiritualidad más leído de nuestro tiempo. De entre sus numerosas obras: Compasión; Con el corazón en ascuas; Caminar con Jesús; El camino hacia la paz; ¿Podréis beber el cáliz? Y Escritos esenciales.

Iglesia Universal VATICANO.- En sus palabras previas al rezo del Regina Caeli, el pasado domingo en la Plaza de San Pedro, el Papa Benedicto XVI animó a confiar plenamente en la oración al Señor para alcanzar nuestros anhelos. Benedicto XVI subrayó que “para alcanzar las peticiones que tenemos en nuestro corazón, no hay mejor medio que poner la fuerza de nuestra oración en aquella cosa que agrada más a Dios”. “Entonces, no sólo dará lo que le pedimos, que es la salvación sino que todavía más, lo que Él ve que nos conviene y es bueno aunque no se lo pidamos”. CIUDAD DEL VATICANO.- El Papa Benedicto XVI alentó a dar testimonio de Dios mediante la entrega a los demás, desafiando las injusticias y promoviendo la dignidad humana a través de la cultura, el voluntariado y en el trabajo. Para los cristianos, la acción “debe estar animada por la caridad, es decir, aprender a ver con los ojos de Cristo y dar al otro más que cualquier cosa externamente necesaria, donarle esa mirada y gesto de amor que necesita”, señaló el Santo Padre. “Esto nace del amor que proviene de Dios, que fue el primero en amarnos. Nace del encuentro íntimo con Él. Se es más beato en el dar que en el recibir”, dijo. ROMA.- Es en el año de 1967, el día de la Ascensión del Señor, cuando el Papa Pablo VI emite el primer mensaje para celebrar en toda la Iglesia la Jornada de las Comunicaciones Sociales (JMCS). Esta Jornada, de carácter mundial, tiene su origen en 1963 con la aprobación del Decreto conciliar “Inter Mirifica”, por lo que esta celebración fue creada en el estudio, reflexión y decisiones del Concilio Vaticano II. A partir de esta fecha, los Sumos Pontífices Pablo VI, Juan Pablo II y Benedicto XVI, han anunciado el tema del mensaje, mismo que en la actualidad, desde el Pontificado de Juan Pablo II en 1986 entregó a la Iglesia los días 24 de enero, durante la fiesta de San Francisco de Sales, patrono de los periodistas, y así se ha conservado hasta ahora. Además de los mensajes para la Jornada de las Comunicaciones, el magisterio de la comunicación de la Iglesia cuenta con otros documentos Pontificios, redacción bajo la responsabilidad del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, entre los que destacan: “Communio et progresio” de 1971, y “Aetatis Novae” de 1992.

Iglesia en México TEPIC.- La Diócesis de Tepic tiene un nuevo Pastor en la persona de Mons. Luis Artemio Flores Calzada. A la toma de posesión canónica asistieron 25 obispos, 275 sacerdotes 130 religiosas y más de cinco mil católicos. El viernes 18 de mayo de 2012, como estaba programado llegó al Monumento Solidaridad, en la autopista Guadalajara–Tepic, donde, el aún electo Obispo de Tepic, expresó que “es necesario buscar las causas por las cuales han sido provocados los actuales problemas que aquejan a los municipios de Nayarit y Jalisco, que componen esta diócesis”. Con su llegada a la Diócesis mencionó que retomará el Plan Diocesano de Pastoral de su antecesor el Obispo Ricardo Watty Urquidi, para “lograr que la Iglesia viva en Comunión”. MÉXICO.- Hace tres años CÁRITAS presentó el libro “Los pobres no pueden esperar” ofreciendo una herramienta para el diálogo y para la discusión sobre la pobreza en nuestro país, propuso continuar la reflexión relacionando la realidad de la pobreza, con los temas que le son transversales. El drama de la creación que gime, expresando un dolor, que se percibe y siente, aunado al dolor de los pobres, que claman por justicia y por condiciones de vida digna no puede dejarnos indiferentes cuando somos testigos cómo son precisamente ellos las primeras víctimas de los impactos sociales del cambio climático. Por ello, se presenta un nuevo instrumento para el diálogo que trata de Pobreza, desigualdad y Cambio Climático: Dolor de la tierra, Dolor de los pobres ¡Actuemos ya! SAN LUIS POTOSÍ.- A pocos días de haber llegado Mons. Jesús Carlos Cabrero, nuestro nuevo Arzobispo, ha comenzado a encontrarse con los sectores de la Iglesia Potosina. Los encuentros se han dado en un espíritu de calidez, entre los que destacan ha sido el de más de 2000 catequistas que lo recibieron en el auditorio Miguel Barragán a quienes agradeció su trabajo y su espíritu de apostolado; el encuentro con el presbiterio, que aunque muchos tienen mucha familiaridad con él, por haber sido uno de sus miembros, no dejó de ser emotivo tanto para el Sr. Arzobispo como para los mismos sacerdotes.

¿Has comprendido la redención?

Para el mal aliento... E

Por. Ing. Humberto Aguilera Aldana

spero que después de haber leído este pequeño artículo, ya no tendrás prisa por abandonar la Iglesia al término de la misa; que estarás motivado a regresar y participar, para deleitarte una vez más con todo su contenido y significado y sobre todo satisfacer ese deseo de recibir el cuerpo, la sangre, el alma y la divinidad de Nuestro Señor Jesucristo nuestro Redentor y Salvador en la Sagrada Familia Eucaristía. El Ser que te da la vida y te sostiene y te iluminará para prepararte para tu confesión.

Por Pbro. Darío Martín Torres

n muchos sentidos el Cuarto Evangelio es un nuevo Génesis y, de esa manera, presenta la obra de Jesús como una nueva creación. No sólo el solemne Prólogo refleja las páginas de la creación, sino también la última página del Evangelio, la cual parece entender la acción de Jesús como una nueva creación del hombre. El Génesis describe la acción de Dios que insufla el aliento de vida en la nariz del hombre de barro; así, Jesús resucitado, después de su saludo de paz, sopla sobre sus discípulos y les dice “reciban el Espíritu Santo”. La acción de Jesús, así presentada por el Cuarto Evangelio parece indicar una nueva creación obrada por Dios en Cristo Jesús, no tanto porque la primera hubiera estado defectuosa, sino porque era necesario reconstituir al hombre desde lo más vital, donándole su mismo Espíritu. El acto más novedoso, después de su resurrección, lo realiza Jesús cuando dona su propio Espíritu. En San Lucas el Espíritu es la promesa del Padre. En San Juan el Espíritu es el mismo aliento de Jesucristo, ante todo es vida. Jesús describe la obra del Espíritu en varias direcciones y también habla de su venida, pero ante todo destaca la común unión del Espíritu con el Padre y consigo mismo y, en el momento desvivo, es Él directamente quien lo participa a sus discípulos. Es decir el Espíritu no llega en su turno propio, ni enviado por el Padre en un momento distinto al Hijo, sino que forma parte de la obra del Hijo, su momento llega en el momento más intenso de la obra del Hijo: su Resurrección, pues es en el día de la resurrección cuando Jesús lo concede a sus discípulos. Es tan estrecha la unión del Hijo con el Espíritu, que este último se identifica con su propio aliento. Es el buen aliento de Jesucristo que cambia el mal aliento del mundo y de los hombres.

Ese aliento de su propio Espíritu que Jesús otorga a sus discípulos, lo concede con el fin de que sus discípulos lleven adelante la misión que el Padre ha puesto en sus manos: “como el Padre me ha enviado, así los envío yo, reciban el Espíritu Santo”.

El problema es la falta de fe, fervor y perseverancia en acercarte a Cristo. Da la impresión de que no sabemos realmente quien es Cristo y que es lo que ha hecho por nosotros. Se percibe una gran ignorancia e indiferencia entre nosotros hacia las cosas de Cristo, de su Iglesia… No lo hemos sabido valorar. Lo que si hay que entender, es que Cristo, Dios y Hombre verdadero, por el infinito amor a los hombres, a pesar del inmenso sufrimiento que esto significara, cargando con todos los pecados del mundo, tuvo la delicadeza de hacerse uno de nosotros, menos en el pecado, para que conociéramos la verdad que encierra su doctrina.

Así, la Iglesia retoma el evangelio de San Juan para explicar el último día de la cincuentena Pascual, no como el día del Espíritu sino como el día en que Jesús nos donó su Espíritu, cuando al atardecer del mismo día de la resurrección Jesús dona su espíritu, para que ellos también puedan dar vida en abundancia. Así, en base a la página final del Evangelio de San Juan, podemos entender que Pentecostés es Pascua en su momento culminante. Pentecostés es Cristo Resucitado al atardecer del día de su resurrección. Pentecostés es Jesucristo dando su buen aliento de vida a sus íntimos amigos. Pentecostés es el encuentro de Jesús con sus discípulos llenos de miedo y escondidos, para darles la vida que es su Espíritu. Pentecostés es respirar el mismo aliento de Cristo. Pentecostés es poseer el mismo aliento que condujo a Cristo a vencer el mundo. Es recomendable tener como trasfondo el relato evangélico de Juan y el contexto de la propia obra de san Lucas para no desvincular de Jesús el evento narrado por el tercer evangelista en el capítulo 2 del libro de los Hechos de los Apóstoles, el cual, con su distintiva visión histórica de la salvación, presenta la efusión del Espíritu Santo cincuenta días después de la Pascua, señalando el cumplimiento de la Promesa del Padre, que reviste a los discípulos del poder de lo alto, marcando igualmente el inicio de su predicación como testigos del acontecimiento Pascual de Jesucristo para la conversión de los hombres a Dios.

Lo que si hay que entender, es que Dios nos concedió el PRIVILEGIO de ser sus hijos, y por el amor infinito de Cristo, recuperamos esa maravillosa condición a través de su pasión, muerte y resurrección. Por su amor infinito existes, eres creación de Él, tu no eres hijo del Big Bang, la nueva teoría de los científicos ateos de la aparición del universo, que le dan muchas teorías pero no te dicen quién HIZO QUE SE PRODUJERA LA VIDA EN EL BIG BANG, si así fuera, alguien tiene que haber provocado ese fenómeno, nada es por si mismo. Las pasiones, las tentaciones, las ambiciones, los enemigos de la iglesia psicológicamente preparados, están tratando de tomar la delantera para desviarnos de nuestro caminar a la salvación. Es más, no tenemos claro ese término. Se nos hace algo etéreo, algo fantasioso, no le hemos dado la atención que nos merece como el asunto más importante a lograr en nuestra vida. Pensamos, ya llegará el momento de preocuparnos, ¿y si no llega ese momento? En cambio ahora , el hombre es un experto en: la nueva tecnología, la electrónica, la “música chida”, en los autos, las estrellas de cine más famosas, los chismes, las telenovelas, las “series” americanas, el futbol del mundo, en cultivar el cuerpo, en verse sexy, hacer buenos negocios, leer a muchos psicólogos o psiquiatras” charlatanes que “inventan teorías nuevas para vivir mejor”, para tener más éxito”, “explicar la existencia”, “solucionar los problemas”, que muchas veces ni siquiera entiende. Ahí es donde estamos siendo amenazados, por todos esos “atractivos y distracciones” que hemos mencionado. Sin sentido, o por lo “atractivo” de sus tácticas, nos están apartando de la verdadera fe. Nos están alejando de la Verdad, de la verdadera realidad, no entendemos que todo lo que ofrece el mundo es ficticio, que deja un vacío interno, es ilusorio, todo termina, siempre hay algo “nuevo”, pero como dijo Santa Teresa… sólo Dios basta … y Cristo dijo que todo lo demás vendrá por añadidura; en El debemos ser expertos, buscarlo, conocerlo, amarlo, servirlo y hacer su santa voluntad, ponernos en sus brazos y seguir sus huellas con alegría y sin temor alguno. Rechazando firmemente las atracciones pasajeras del mundo. El es el camino, la verdad y la vida. Lo que si hay que entender, es que la salvación se logra con fe y con obras y la gracia de Dios, y que requiere una lucha constante del hombre contra el mundo, el demonio y la carne, los grandes enemigos del hombre creado por Dios para la felicidad eterna. Así está el gran reto, darle la mano a Cristo para que te de el valor, la decisión que nos falta para dejar lo que nos ata al pecado, a la idolatría de la modernidad”. Te aseguro que tendrás una vida serena, tranquila, llena de verdadera paz, que te permita crecer como hijo de Dios y como persona. Espíritu Santo Santificador has que volvamos nuestros corazones a Cristo Redentor.

… “Yo les diré, recibe el Espíritu Santo” Nuestra Señora del Rosario de Fátima, colonia Foresta

l párroco Gladimir Isaac, pastor y guía de los parroquianos de Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en la colonia Foresta, concelebró en unión fraterna el día 12 de mayo de 2012 con el arzobispo emérito Don Luis Morales. En la eucaristía se administró por manos de Morales Reyes, el sacramento de la confirmación a 75 fieles, que después de haber sido preparados por el trabajo de adoctrinamiento de sus catequistas; renovaron su fe y confirmaron su amor por el credo católico. Luis Morales, invitó a que escucharan la voz y acción del Espíritu Santo, “Yo les diré, recibe el Espíritu Santo, pero estas palabras no son toda la acción, sino también se hacen reales en el alma del quien pide los dones y la asistencia del Espíritu de Dios”, −señaló don Luis Morales. Al finalizar la celebración, los feligreses otorgaron calurosos y agradecidos aplausos don Luis Morales Reyes, por haber llevado el mensaje de Cristo.

Confirmaciones en Villa de Pozos

Por Carlos Cuéllar

l viernes 11 de mayo vestidos de blanco y con un rostro iluminado, provenientes de varias comunidades, se congregaron cientos de niños y jóvenes que a manos de nuestro arzobispo emérito, Luis Morales Reyes, recibieron el sacramento de la confirmación en la parroquia de San Francisco de Asís en la delegación de Villa de Pozos. El párroco, Pbro. Juan Martínez Vega y su equipo de catequistas, con gran tiempo de dedicación prepararon a todos los confirmados para semejante regalo en nuestra vida sacramental. Por medio de dos tandas de confirmaciones, D. Luis Morales les recordó la bendición al recibir este santo crisma, regalo del Espíritu Santo. Los invitó a

Fiesta en honor al “Señor del Santo Entierro”

encomendarse a Él, a pedirle su fortaleza, sabiduría, a perirle aumente en nosotros el temor de Dios. Invitó a los padrinos de los jóvenes que recibieron el sacramento, a acompañarlos en el caminar en su vida de fe.

El Granjenal pide la intercesión de San Isidro Labrador

n la Parroquia del “Señor de la Expiración”, en El Granjenal, Mpio. de Villa Juárez, SLP, las comunidades de Ojo de Agua y El Colorado, tienen como Patrón a San Isidro Labrador, a quien festejaron este 15 de mayo. También en la cabecera parroquial se pidió la intercesión del santo de los agricultores para pedir la bendición de la lluvia, una buena cosecha y sobre todo porque reine el amor de Dios en los habitantes de esta comunidad y del mundo entero.

a comunidad de Puestecitos, Cd. Fernández, SLP, tuvo su fiesta patronal este jueves 17 de mayo, honrando y festejando una bella imagen de Cristo bajo la advocación de “Señor del Santo Entierro”, en la fiesta solemnidad de la Ascensión del Señor. Esta capilla pertenece a la Parroquia del “Dulce Nombre de Jesús” y para honrar esta bella imagen se tuvo una novena de misas, a donde los fieles de la comunidad y de comunidades vecinas se dieron cita para participar de la Sagrada Eucaristía.

El jueves, día de la fiesta, varios niños y niñas hicieron su Primera Comunión, por la tarde, varias comunidades hicieron una peregrinación para ofrecer al Señor del Santo Entierro, cera, flores, música y cohetes, y también participar de la Misa que al recibirlos se llevó a cabo. Después de haberse alimentado de la Palabra del Señor, alegremente se participó de la berbena y se deleitaron con la música de banda, no sin antes encomendarse al “Señor del Santo Entierro” para pedir su protección y bendición.

Se tuvo un novenario de misas en diferentes parcelas a donde acudieron en peregrinación cada día, rezando el Santo Rosario, entonando cantos y lanzando cohetes, los devotos de San Isidro a pedir que reine el amor a Dios, haya armonía en las familias, el respeto a la naturaleza, amor a la tierra y buenas cosechas. Que la vida de San Isidro Labrador, vida de fe, llena del amor de Dios, y del amor a la Eucaristía, sea ejemplo para las familias de nuestro tiempo en esta Parroquia. “San Isidro bendito: ruega por nuestros campos y por nuestros agricultores.”

Encuentro Diocesano de Catequistas con Nuestro Nuevo Pastor, Mons. Jesús Carlos Cabrero Romero

Primera Misa en Catedral de nuestro Nuevo Pastor, Mons. Carlos Cabrero Romero

Por LCC Angélica Maldonado Morales

an Agustín nos dice en la Liturgia de las horas de hoy, que Jesús del Cielo descendió solo y al subir o ascender ya no va solo porque estamos unidos a Él, lo cual lo lograremos si cumplimos nosotros con nuestra tarea hoy, la cual es acudir a Jesús para celebrarlo, vivirlo y el día de mañana ascender con Él al Cielo, subir al Cielo a gozar de la paz eterna”. “Debemos por eso tener una profunda fe en Jesucristo vivo, en su Palabra, pero sobre todo en la Eucaristía, alimentándonos de su cuerpo y de su Sangre, porque no podemos ser Catequistas y Evangelizadores sino nos alimentamos de Él; tenemos que responderle a Él para formar una comunidad de fe, esperanza y caridad”. Así lo señaló a las Catequistas el pasado domingo 20 de mayo, nuestro nuevo Pastor, Mons. Jesús Carlos Cabrero Romero, durante el Encuentro Diocesano de Catequistas y Evangelizadores que se realizó en el auditorio “Miguel Barragán”, donde estuvo acompañado del Padre, José de Jesús López Castillo, titular de la Dimensión de Pastoral de Catequesis y responsable diocesano de la Escuela de Ministerios Laicales, así como de la Escuela Arquidiocesana de Teología para Laicos, así como de otros Sacerdotes invitados. Don Carlos dijo a las Catequistas y Evangelizadores: “Deben creer y tener una profunda vida de fe que se manifieste en la comunidad. Cada vez que preparamos nuestra catequesis es la ocasión de que la fe en Jesucristo nos confirme en su llamado y nos lleve a nuestros hermanos viviendo ante ellos no como extraños sino como amigos y vivir la dignidad de nuestra vocación cristiana”. “Debemos consagrar la vida al Señor a través de un sacramento, la familia se convierte pues, en un lugar y en un espacio para servir al Señor para que los suyos se conviertan en Don para el Señor. Ser catequista es vivir la comunión por medio de la gracia, enriquecida con la Palabra y la Eucaristía en la que nos alimentamos con su cuerpo y con su sangre. De nada sirve que seamos Catequistas sino participamos de la gracia y bondad de Dios, apoyados en la su gracia que nos da en la Eucaristía, trataremos de hacer las cosas lo mejor que se pueda de nuestra parte. Por eso todas nuestras acciones deben estar de la mano del Señor”. “Traten con cariño y delicadeza a quienes el Señor les confía, tanto a los niños como a los Padres de Familias Cristianas, para que les anunciemos a Cristo vivo, que se manifiesta en la Caridad”. “Podemos llegar con Cristo vivo, y nos estaremos preparando para que el día de mañana lo anunciemos, que venga a acogernos diciéndonos: “Tuve

hambre y me diste de comer, sed y me diste de beber”. “No son conceptos o ideas o simple aprendizaje, es prepararnos para transformar nuestra vida. Que nuestras acciones acojan al más necesitado, dejemos un sello vivo de la presencia de Jesús a través de ustedes. Él dejará huella en nuestros corazones. ¿Cómo recuerda uno las enseñanzas de sus catequistas?, siempre las recordaremos con cariño y agradecimiento y sin duda Dios nunca las dejará sin recompensa”. “Ser Catequista es vivir como Discípulo del Señor, no es un desconocido para el Señor”. “Él ha subido al Cielo pero está con nosotros. Está en su gracia, en sus dones está con nosotros. Ser Catequista es ser fiel Discípulo en discernimiento y en aprender más a conocernos en nuestra vida personal y social, ayudando a dar un buen testimonio con nuestra propia vida, no sólo con la palabra, sino también siendo un signo vivo de bendiciones y de alegría para nuestras comunidades, familias y a través de nuestros quehaceres y compromisos cotidianos”, concluyó.

l domingo 20 de mayo del 2012, Mons. Jesús Carlos Cabrero Romero, celebró su primera Misa en la S.I. Catedral Metropolitana Potosina, después de haber tomado posesión el pasado 16 de mayo como tercer Arzobispo y treceavo Obispo de San Luis Potosí. Inició la que fue su primera misa dominical en la que es su sede: la bellísima Catedral diciendo: “Quiero iniciar manifestando mi cariño, mi alta estima y gratitud a los sacerdotes que hoy me acompañan en esta santa misa, por la gran fe que expresan, ellos son: Mons. Antonio Torres Herrera, Vicario General de nuestra querida Arquidiócesis, el Rector de la S.I. Catedral, Pbro. Lic. Darío Martín Torres Sánchez (quien le dio la más cordial bienvenida por ser su primera misa oficiada en este recinto, agradeciendo a la vez su presencia como nuestro nuevo Pastor, Padre y guía); el Ceremoniero y Liturgo: P. Juan Flores Díaz, y P. Rubén Omar Villegas Hernández, quien ayuda en las tareas pastorales que implica la Iglesia Catedral. ¡Muchas gracias queridos hermanos Sacerdotes!”. Afirmó: “Me edifico con su fe, veo que Padre Dios me bendice con ustedes porque me ayudan a sostener nuestra iglesia en esa roca firme que es Jesucristo nuestro Señor, y con el ministerio que ustedes realizan y del que hoy nos ha hablado la Segunda Lectura –como Sacerdotes y Pastores-- me ayudan especialmente a conducir esta Iglesia particular que el Señor me ha y nos ha encomendado. Muchas gracias y que nuestro Padre Dios les premie la humildad de su fe y siga edificándome ayudándome”. “También saludo a nuestras muy queridas religiosas que hoy nos acompañan y a todas y todos ustedes queridos hermanos que hoy me acompañan. Me da mucho gusto encontrarme con ustedes y juntos celebrar el Día de la Ascensión del Señor”. “Para mí es muy significativo este Domingo de la Ascensión del Señor. Estamos empezando un nuevo tiempo a partir de mi llegada como nuevo Pastor de esta Iglesia y quiero hacer vida, esa frase hermosa que decía San Agustín: “Con ustedes soy cristiano y para ustedes soy Obispo”, pero ampliándole más a ese texto puedo decirles: “Con ustedes soy hermano, amigo, uno de los suyos”.

MAYO 27 DE 2012

“Hermanos menores” El Obispo visita al Seminario

l arzobispo de nuestra diócesis, Carlos Cabrero, como primer lugar de visita eligió el Seminario Mayor, allí se congregaron las tres casas de formación presbiteral para recibir y celebrar la eucaristía con el arzobispo.

“Hermanos menores”, fue así como se dirigió a los seminaristas, y secundaba siempre esta expresión con alguna exhortación a la buena vida de formación; como la fidelidad, el amor en comunidad, la sencillez, el ánimo y la confianza en Dios. Mons. Carlos Cabrero, hacia reiterante la conformación de la comunidad desde la contemplación Trinitaria, − así como las tres divinas Personas son Uno, de esa manera la vida en comunidad, Dios y la Iglesia de la comunidad deben ser uno−. En este evento estuvieron presentes los Presbíteros formadores de las tres casas: Seminario Menor, Curso Introductorio Potosino y Seminario Mayor. En la ceremonia de recepción, el rector del Seminario Mayor, Pbro. Erasmo Valero, volvió a hacer eco las palabras que el Arzobispo Carlos dijo en la misa de recibimiento: “déjenme ser su padre”. Mismas palabras que parecen sí hacer redoble en el corazón de los formadores y seminaristas. El Arzobispo Carlos Cabrero, concluyó su visita al seminario con el banquete Eucarístico y la convivencia en comunidad con sus hermanos menores en una cena con aroma a Bienvenida.

Mons. Cabrero se encuentra con sus colaboradores cercanos

Dimensión de Pastoral Social

Dimensión de la Pastoral Familiar

Miembros de la Curia Diocesana

Dimensión de Medios de Comunicación

Dimensión de Evangelización y Catequesis

Miembros del Departamento Jurídico

Fiesta patronal en Rancho Nuevo Por Carlos Cuéllar

n el templo de Nuestro Señor de Burgos, en Rancho Nuevo, Soledad de Graciano Sánchez, se llevó a cabo la fiesta en honor a su Santo patrono, en donde la comunidad entera se vistió de alegría para vivir estas semanas de una forma plena. El jueves 17 de mayo día de la fiesta, el templo lucía adornado de hermosos arreglos florales, luz, y la sonrisa de las personas que entraron al templo para vivir la palabra de Dios, el padre Carlos Delgado Vargas estuvo acompañado de sacerdotes de nuestra Diocesis en todo momento para enaltecer esta hermosa fiesta. Para los habitantes de la comunidad de Rancho Nuevo su fiesta patronal es una oportunidad más para acercarse de una manera más comprometida a la Iglesia que por medio de algún sacramento todos se comprometen una vez más para seguir por el camino de la fe y la esperanza.

Por las calles de la comunidad los antojitos, el festival, los juegos, la pirotecnia vinieron a ponerle un extra a esta tradición. Los asistentes agradecieron al padre Carlos Delgado, el trabajo que ha venido realizando.

A propósito del Mes del Seminario, en rueda de prensa, el equipo formador, como cada año, exhortó a los fieles a orar por las vocaciones sacerdotales, así como apelando a su generosidad para el cuidado y manutención de nuestros seminaristas.

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LOS VENGADORES

na película más que ambiciosa y uno de los proyectos más complicados de realizarse en cuanto al universo de los cómics adaptado al cine se refiere, se ha estrenado ya en cines después de años de rumores y especulaciones. Una cinta que era esperada por muchos desde hace tiempo y que se ha presentado con auténtico bombo y platillo. A decir verdad, los fieles seguidores ansiában sobremanera que esta cinta fuera ya una realidad y cumpliera con su principal objetivo: mostrar una amplia galería de superhéroes clásicos y legendarios, juntos en acción y que responden al unísono como “Vengadores, Unidos”. “Los Vengadores” (The Aven-gers 2012) es un filme impresionante, espectacular, asombroso y que representa un festín narrativo y visual de héroes icónicos de la llamada cultura pop. Ver juntos en pantalla grande al Capitán América, Iron Man, Thor, Hulk, Viuda Negra, Halcón y al cabal Nick Fury, es un regalo excepcional y un blockbuster taquillero como sólo los estudios Marvel lo podían hacer.“Los Vengadores” es dirigida por Joss Whedon y protagonizada por un reparto estelar encabezado por Robert Downey Jr., Chris Evans, Chris Hemsworth, Mark Ruffalo, Scarlett Johansson, Jeremy Renner, Samuel L.Jackson, Tom Hiddleston, Gwyneth Paltrow, Clark Gregg y Cobie Smulders. Loki, hermano traidor de Thor, amenaza al mundo con una guerra interestelar sin precedentes. El equipo S.H.I.E.L.D. está en el mejor momento de comenzar la iniciativa de los Vengadores. Sólo ellos podrían salvaguardar la paz y derrotar a Loki. Aunque primero, tendrán que solucionar sus conflictos de ego y liderazgo en un grupo tan especial como Avengers. El director Joss Whedon es un realizador valiente y arrojado. En sus hombros tenía enorme responsabilidad de hacerle justicia a tan fundamental grupo de héroes, creado por los artistas Stan Lee y Jack Kirby en el año de 1963. Whedon arma y conjunta perfectamente todas las piezas del rompecabezas que iniciaron con las cintas antecesoras de “Iron Man” y “Iron Man 2” (en los años 2008 y 2010, respectivamente) , “El Increíble Hulk” (2008), “Thor” (2011) y “Capitán América” (2011). El director equilibra en buena medida, la historia y relato personal de cada personaje, dotándole a cada uno su momento de brillo, coraje – no sólo Hulk hace pucheros - y lucimiento. Los diálogos y secuencias brillan por su astucia, técnica y con un excelente humor que seguramente es deleite de los espectadores. Sobre qué personaje sobresale en particular en toda la cinta, puedo asegurar que todos están en plena frecuencia y todos pueden ser amplios favoritos. Algo puedo confirmar: Iron Man sigue con ese fino sarcasmo y Hulk nunca había sido mostrado tal como debe ser: rabia, poderío y corazón. Esta cinta lo muestra así, un Hulk definitivo. “Los Vengadores” es un memorable espectáculo fílmico de acción, aventura y pirotecnia. Hasta la próxima. Sigan enviando sus comentarios, aplausos o rechiflas: ponchoaranda@hotmail.com En Facebook: Poncho Aranda L.

MAYO 27 DE 2012

Exceso de memoria C

onocí una vez a cierta dama aquejada de una enfermedad terrible y peligrosa: padecía de exceso de memoria. Todo lo recordaba la pobre mujer con una precisión atroz, y nada, por pasado que fuese, podía escapar de ese laberíntico sistema de mallas que había construido en su cabeza a base de ir acumulando pacientemente un recuerdo tras otro. Su memoria era como una de esas redes para atrapar mariposas con que solían jugar los niños de mi edad en el tiempo de la primavera. «Hace cinco años mi esposo dijo de mí que yo era esto y lo otro. ¿Y sabe usted lo que eso significa? Muy sencillo: que ya ha dejado de quererme». Reuniendo palabras acaso dichas al desgaire, ella elaboraba una teoría acerca de sí misma que ninguna otra palabra dicha después podía corregir o atemperar. «¿Cree usted que cinco años, o incluso diez, son suficientes para olvidar? ¡Pero por quién me toma usted, estimado señor!». «Van ya cuarenta y tres veces desde que nos casamos que mi marido llega a casa después de la medianoche –me seguía diciendo-. Cuarenta y tres; se las he contado todas. Y, por lo demás, ya se imaginará usted el estado en que hacía su aparición en el marco de la puerta: con la corbata echada hacia atrás y un tufo alcohólico que provocaba en mi estómago una revolución». Asimismo, recordaba las veces que su hija, al salir de casa, se había olvidado de pedirle permiso (108 desde que aprendió a caminar); las veces en que el hijo menor había fumado a escondidas en su dormitorio (44); las veces en que su cuñada había conspirado contra ella llamándola «enferma» (12 desde el día de su boda) y otras muchas otras cosas de las que, según ella, no quería hablarme por ser más o menos inconfesables.

«Nadie como ella recordaba tantos escándalos y miserias. Su memoria nada descuidaba; de los cientos de particulares fútiles espigados cada día a derecha e izquierda, todo le parecía precioso, todo le podía servir». He aquí la descripción que Julien Green (1900-1998) hace de la señora Londe en su novela Leviatán. Todo le podía servir..., para luego echarlo en cara. ¡Cuánto se parece la señora Londe a mi pobre amiga! Como ya hemos hecho ver en otra ocasión, sin memoria no habría progreso, pues es ésta la que permite ir acumulando saberes y experiencias gracias a los cuales ya no será necesario partir de cero cada vez que necesitemos hacer o aprender algo. Si hoy hablamos y escribimos con cierta soltura es sólo porque ayer balbuceábamos frases y dibujábamos garabatos: frases y garabatos que la memoria, después, se encargó de corregir y perfeccionar convirtiéndola en una elegante escritura. Ahora bien, si la falta de memoria crea seres infantilizados (es decir, sin experiencia, sin pasado), el exceso de ella crea justamente lo contrario, es decir, seres avejentados. Difícilmente un hombre aquejado de hipermnesia, de memoria excesiva, podrá descubrir los matices que hacen distinto un día de otro, un ser de otro, o

un instante del que ya pasó. Para el hipermnésico nada nuevo hay bajo el sol: todo le parece igual, repetitivo, viejo. Todo lo ha visto ya, o por lo menos así lo dice. Puesto que le es imposible olvidar nada, su atención se entretiene con los mismos pensamientos de siempre: les da vueltas, los mira desde diversos ángulos, los disecciona, y, por supuesto, se obsesiona. Su memoria es tan potente, que si padeció ayer un mareo en la calle, hoy lo volverá a sentir, y no porque esté enfermo (acaso lo que sufrió fue un inofensivo descenso en los niveles de glucosa causado por su excesivo estrés), sino porque su memoria prodigiosa es capaz de traer lo pasado y hacerlo parecer presente. El hipermnésico no vive, re-vive: vive de lo que vivió. «No, mamá no olvida nunca nada. Mamá es terrible», dice la pequeña Osmonde en Un Homme de Dieu, el drama de Gabriel Marcel (1889-1973). Un ser que no olvida nunca nada es terrible, y vivir con él o cerca de él puede ser casi lo mismo que estar en el infierno. Por lo tanto, lo que yo aconsejaría a un hijo de esta raza para hacer la vida más llevadera a los que viven en sus cercanías físicas o afectivas, son cuatro cosas que si bien

son muy sencillas podrían darle a la larga resultados sorprendentes: 1) Dedíquese a pensar cosas mejores, evitando caer en la tentación de sentirse el centro del mundo o de los cuchicheos ajenos: los otros tienen cosas más importantes que estar hablando constantemente de usted; 2) aprenda a callar, es decir, reprímase a la hora de lanzar una invectiva o un reproche; 3) niéguese obstinadamente a traer a colación cosas ya pasadas y perdonadas; si ya habló del asunto en días anteriores y llegó a un acuerdo con su ofensor, por favor, se lo suplico, no lo saque ya a relucir nunca jamás. Y, por último: 4) Tómese en serio, como si de un mandamiento se tratara, este consejo que Jean Guitton (19011999) dio una vez a un amigo suyo en una de sus bellísimas Lettres ouvertes: «Sobre todo por la mañana, cuando te despiertes, maravíllate como si el sol estuviese surgiendo por primera vez, como si fuese la primera vez que sales del lecho para vivir. Imagina que cuanto ahora estás viendo ayer no existía, como si estuvieses asistiendo al nacimiento del sol, al principio del mundo». La hipermnesia es una enfermedad, y como a tal es preciso combatirla con todos los medios que estén a nuestro alcance.

Crimen bajo los arcos de las casas reales, hoy Palacio municipal de San Luis Potosí Por Mtro. José Ricardo García López

(segunda parte)

espués, el juez mandó al médico (legista) al hospital de San Juan de Dios que estaba al lado del templo que todavía lleva el nombre de San Juan de Dios y Nuestra Señora del Rosario, donde se ubica el museo Federico Silva, para que examinara al herido. Cumpliendo con la orden el médico declaró lo siguiente: Declaración del cirujano. El alcalde mayor, para dar inicio a las diligencias de ésta causa, hizo llamar al maestro Andrés Ibáñez de Villanueva, vecino de esta ciudad, maestro cirujano, aprobado, examinado y boticario para efecto de que reconozca la calidad y estado de la herida que se le dio a Juan Romero mestizo, y para efecto de que le cure de ella. Siendo preguntado por el estado y calidad de la herida dijo: que la herida que tiene el dicho Juan Romero, es penetrante, hecha con instrumento cortante, cuchillo, machete u otro tal en la parte baja del vientre, inclinante al lado derecho, comparte del omento redaño, fuera en que manifiesta haber salido parte de este miembro, que la herida es penetrante y no carece de peligro. Y que esto es lo que siente en su conciencia y alcanza su leal saber y entender y la verdad para el juramento que tiene hecho.

Posteriormente comparecieron ante el juez 12 personas, algunos de ellos fueron testigos oculares y otros fueron patrones, es decir que Sotelo fue su empleado. Algunos de los testigos dicen que en el momento del crimen pasaba por ese lugar un fraile de la Merced con su hábito blanco y que era de avanzada edad, pelo cano y de abundante barba también cana, por ello es que dijo Pascual Sotelo que por ahí pasó el Padre Eterno. El testimonio que se consigna a continuación es semejante al de los once testigos restantes, con algunas variantes que en nada cambian el sentido de los hechos, aunque hay que aclarar que los que habían sido sus patrones declararon que era un hombre responsable y cumplido con su deber en forma puntal. A continuación se transcribe la declaración: Testigo Diego Rodríguez de Valencia En la ciudad de San Luis Potosí en 31 de julio de 1695 años el alcalde mayor en prosecución de las diligencias de esta causa, hizo parecer ante si a Diego Rodríguez de Valencia preso en la cárcel pública de esta ciudad del cual se recibió juramento y lo hizo por Dios Nuestro Señor y la señal de la Cruz en forma de derecho bajo cuyo cargo prometió decir verdad y siendo preguntado si conoce a un mulato prieto alto de cuerpo mocetón que no tiene pelo de barba, el cual esta preso en la cárcel pública de esta ciudad, como se llama y de donde es natural. Dijo que no conoce al mulato por quien se le pregunta ni de donde es natural, que tres veces en distintos días ha llegado a la ventana de la cárcel pública de esta ciudad y hablando delante de este testigo con Nicolás de Sotelo tratándole de tío y el dicho Sotelo que esta preso lo trata de sobrino al mulato y que él le ha oído decir al dicho Sotelo que el heridor se nombra Pascual y con este nombre le ha oído este testigo llamar. Preguntado si las veces que ha llegado hablar con el dicho Sotelo delante de este testigo, Pascual ha hablado en su juicio o le reconoció alguna cosa de loco o dementado. Dijo que las veces que ha hablado Nicolás Sotelo con el mulato Pascual, ha sido concertadamente respondiendo siempre a propósito de lo que se le habla sin dar muestras de locura, pero que ayer sábado como a las nueve poco más o menos vino el dicho Pascual a la ventanilla de la cárcel que cae a los portales de las casas reales y empezó a hablar con Nicolás Sotelo, su tío, que estaba en la ventanilla en mi compañía venía enojado porque un chichimeco le sacó al monte a pelear y arranco y lo dejó allí, luego le dijo al dicho Nicolás Sotelo: ¿tío no te han quitado los grillos? y Sotelo le dijo no, dame un peso para que me los quiten y entonces le dijo toma y anda que te los quiten y le dio un peso de plata y porfiando a que se los quitaran le dije yo: hombre anda que a la tarde se los quitarán y entonces porfió y dijo: no, que se los han de quitar ahora y enseguida ganó para el oficio y a poco rato dio vuelta a entrar en los portales de las casas reales como que venía de la otra calle y encontró con el portero que es José de Baena y le dijo: que le quiten los grillos a Sotelo y el portero le dijo ¿quien lo manda? Y el dicho mulato respondió: yo, el rey y la Virgen, y diciéndole el portero que entrase y se los quitase, no le hizo caso y ganó otra vez para la dicha ventanilla a donde estuvo instando con el dicho su tío a que le habían de quitar los grillos y luego paso un religioso de la merced y dijo que era el Padre Eterno y acabando de decir esto volvió la cara y vido a Juan Diego

Romero, pobre mendigo y dijo: hay viene ese chichimeco come caballo, y se fue hacia él sacando un cuchillo y desde la dicha ventanilla vido este testigo que dio una estocada y dejándole caído al dicho Juan Diego Romero, volvió a la ventanilla con el cuchillo en la mano y metió el cuchillo por la dicha ventanilla haciendo acometimiento de herir a este testigo y al dicho su tío, lo cual hubiera conseguido si no nos dejamos caer de dicha ventanilla para adentro y viendo que se habían quitado de la ventana se quedo el mulato parado con el cuchillo en la mano mirando a un lado y a otro y saliendo el dicho portero José de Baena con un garrote en la mano diciendo que lo cogieran porque había muerto al dicho Juan Diego Romero así que vido al dicho portero arrancó a correr para la iglesia y que esto es lo que sabe y pasa y la verdad para el juramento que fecho tiene en que se afirmó y ratificó y declaró que es de edad de veinte y siete años y lo firmó con su merced dicho señor general Diego Rodríguez Valencia= Don Francisco Eusebio del Castillo y Saavedra= ante mí Francisco de Pastrana escribano público y real=.

El juez mandó a otro médico para que examinara al homicida para saber si estaba loco o en su sano juicio, el médico lo declaró sano y que se había fingido loco para evadir su responsabilidad. Por lo tanto el juez declaró culpable a Pascual Sotelo, lo condenó a prisión perpetua y pérdida de todos sus bienes. Comenté este caso con un médico psiquiatra y dijo que se trataba de un paranóico, pero como entonces se desconocía este padecimiento, su condena fue injusta.

Fe y política

Indignación humanitaria E

Tráfico de seres humanos P. Federico Lombardi (Octava Dies)

(www.siame.mx)

n las últimas semanas, la sociedad mexicana se ha enterado de tres masacres cargadas de una espantosa crueldad e inhumanidad. Estos trágicos acontecimientos tuvieron lugar en los estados de Jalisco, Veracruz y Nuevo León. En lo que respecta a la última entidad federativa, estamos hablando del asesinato masivo e indignante de 49 personas. Sin embargo, a estos crímenes abominables se añaden muchos otros, cometidos con las mismas características, en los últimos años. Pero lo más sorprendente es que, después de la noticia inicial y cierto estupor general, todo pasa a segundo plano sin mayor relevancia, como si nada hubiera sucedido. Las autoridades saben la parte del guión que les corresponde y se limitan a informar que buscarán hacer justicia hasta sus últimas consecuencias, pero todo queda en declaraciones. La sociedad poco sabe de la identidad de los ejecutados y menos de los verdugos, mientras que las autoridades de los distintos niveles evaden sus responsabilidades. Lo más grave es que los mexicanos comenzamos a acostumbrarnos, perdiendo toda capacidad de indignación y su exigencia de justicia. Las declaraciones frente a la última masacre llegaron al colmo cuando el coordinador de campaña de uno de los candidatos presidenciales, señaló, con cinismo, que estos hechos no afectaban en nada la trayectoria de campaña. No puede haber mayor falta de sensibilidad; no puede haber mayor expresión de desprecio para la realidad que está viviendo nuestro país. Por si fuera poco, a nadie pareció importarle el tono de estas declaraciones que se sumaron al silencio de todos los demás.

Debemos entender que lo más importante no es si se trata o no de una lucha entre bandas rivales del crimen organizado. Lo verdaderamente grave es que estamos ante el asesinato de personas que han perdido todo sentido de humanidad y que son parte de nuestra sociedad. La pregunta de fondo que debería preocuparnos a todos, comenzando por quienes buscan un puesto de elección popular, y con mayor razón por quienes quieren alcanzar la Presidencia de República, es ¿por qué hemos llegado a este extremo? ¿qué es lo que nos ha sucedido para alcanzar estos niveles de decadencia moral? ¿dónde están los analistas, los sociólogos, los politólogos para explicarnos estas barbaries? Y, finalmente, ¿quiénes son los que están provocando estas acciones de inhumanidad y por qué? Debemos comenzar por reconocer que vivimos en una cultura de violencia que ha perdido el respeto a la vida humana, desde los videojuegos infantiles hasta las leyes injustas que, con toda solemnidad, aprueban desde la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y provocan la agresión a la vida humana considerada “un producto”, un simple producto carente de dignidad y de valor. Cuando no respetamos como sociedad la “ecología humana” –dice el Papa Benedicto XVI–, tarde o temprano llegan las consecuencias. Conviene recordar las palabras expresadas por nuestros obispos mexicanos al conmemorar el bicentenario del inicio de nuestra Independencia: “Ante aquellos que hoy buscan sembrar un estado de miedo y de muerte… poniendo en riesgo todo lo que hemos alcanzado en nuestro camino histórico…

debemos decir que la auténtica sociedad mexicana los repudia y la Iglesia los llama a una conversión que los haga reencontrar los caminos del bien y de la justicia” .

l tráfico de los seres humanos, entre los dramas de nuestro mundo es uno de los más horribles. ¿Cómo se puede llegar a tanta degradación moral hasta el punto de considerar a las demás personas como puros objetos a las que explotar, reducirlas a la esclavitud y abusar sistemáticamente de ellas para recaudar dinero? Es un misterio. No sólo toda sombra de respeto por la dignidad del otro desaparece, sino también toda mínima huella de sensibilidad humana. Dicen que por volumen de negocios, sólo el tráfico de armas supera el de los seres humanos. Y las nuevas tecnologías de comunicación son ampliamente usadas para favorecerlo a nivel internacional. Por esto ha hecho bien el Consejo Pontificio Justicia y Paz a hospedar un encuentro en el que la Conferencia Episcopal Inglesa ha discutido con un público más amplio de organizaciones eclesiales su experiencia de empeño contra esta plaga terrible, en colaboración con las instituciones públicas de policía y lucha contra el crimen, bien representadas también ellas. El testimonio de una joven arrastrada con el engaño a la prostitución ha turbado a muchos de los presentes y ha confirmado –como en el caso de los abusos contra menores– que el empeño concreto de quien quiere verdaderamente luchar contra las raíces del mal debe partir de la participación personal, profunda, en el sufrimiento de las víctimas. Precisamente en el encontrar las vías de una relación personal que reconozca y haga revivir la presencia y la dignidad del alma en los cuerpos violentados está la contribución de los creyentes, una contribución de la que también las fuerzas de policía sienten la absoluta necesidad para que su lucha logre, al fin, el resultado de la liberación y del renacimiento de las víctimas a nueva vida. Las religiosas están, necesariamente, en primera fila en este empeño, porque son mujeres y más libres de asumirse los riesgos altísimos de este servicio. La Iglesia debe poner a disposición su experiencia en humanidad y curación espiritual y su presencia internacional para colaborar con quien combate las batallas más difíciles contra el mal en el mundo.

El reino de Dios se parece a las palomitas de maíz

Una voz por la mañana H C Por Pbro. Margarito de la Torre

uando el ambiente de la calle no se ha saturado aún por los ruidos de las máquinas, las voces de los comerciantes, los sonidos de estéreos y el claxon de los coches, en el silencio de la mañana se escucha … no sé si es grito, queja o lamento; dice algo así como: soooooool. No creo que anuncie la llegada del astro rey, tal vez sea el voceador de un diario de San Luis Potosí. Al menos eso es lo que parece. No lo he visto. Por el timbre de voz pudiera ser un adolescente, tal vez una mujer o quizá un adulto con voz de niño. Pareciera que el grito lastimara sus cuerdas bucales, tal vez el abdomen o quizá el alma o a toda su persona. Por más que me empeño en prestar atención no alcanzo a entender lo que dice, no le puedo escuchar con claridad; seguro quiere que se le atienda y ni siquiera sé quién es; no sé a ciencia cierta lo que expresa esa voz. Además, una voz puede decir algo y expresar muchas cosas a la vez. ¿Quién puede interpretar ese clamor, esa voz doliente? ¿Y a quién pudiera importarle? En los años remotos de la infancia me iba con don Nato a cuidar las cabras y, cuando una se extraviaba de la majada… balaba. Esa voz parece un balido. Seguro anda vendiendo noticias para ganarse el pan; tal vez otros dependan de su voz y él de otros. Ese grito también se parece al nooooooo de alguno cuando se siente amenazado; es prolongado pero sin fuerza; parece que la persona no hubiera comido en varios días, o como si no tuviera ganas de anunciar lo que dice, como si no fuera de voluntad. ¿Y por qué anunciar algo a esa hora, cuando casi no hay quién le pueda escuchar? Será porque en las horas de mayor bullicio menos habrá quién se interese por oírlo, cada quien estará metido en sus ocupaciones, en sus intereses. Pero no sé si quiera ser escuchado, tal vez solamente quiere anunciar algo; porque tampoco creo que hable sólo por hablar. Cuando escucho esa voz viene a mi mente la imagen de Pito Pérez, de José Rubén Romero. Seguro el autor de ese libro conoció al protagonista de su obra, por eso lo describe tan bien, que aún con palabras elabora un retrato a través del cual quien lo lee puede verlo; pero yo no he visto a esta persona, sólo escucho su voz. Contemplar a Pito Pérez o escuchar la voz desconocida puede ser el principio para ver la voz de uno que ante los demás carece de valor, teniendo el mismo valor que yo. Debería identificarme con él para en él reivindicar mi condición de transeúnte por el camino de la vida. Oír con los ojos, ver con los oídos y escuchar con el corazón, principios fundamentales para descubrir el mensaje del otro; mejor aún, encontrarme con el otro, que es también encontrarme conmigo. No es fácil escucharme. Cuando oigo una grabación de mi voz me niego a reconocerme. Sé, además, que en el otro me reconozco. De manera semejante al que ve su imagen en un espejo, el otro es un eco en donde me puedo reconocer. ¿Puedo acaso conocerme sin el otro? Es mi referente y le puedo decir: en ti me conozco.

ace algunas semanas una hermana mía prometió a su hijo tener un fin de semana de películas en casa con palomitas de maíz. Fueron a rentar al multivideo, y también fueron de compras. El niño nunca vio que su madre comprara palomitas. Pero en el mercado sí que compró solamente un poco de maíz, medio raro, para él, pequeñas semillitas. Y regresaron a casa, dispusieron la comida. Y por la tarde, a ver películas de superhéroes, qué maravilla. Sirvieron refrescos gaseosos con mucho hielo y dijo la mamá: oh sí, faltan las palomitas. El pequeño buscaba en la alacena los famosos sobres modernos de palomitas instantáneas, esos pequeños sobres que colocan en el horno de microondas unos minutos y como por arte de magia aparece la enorme bolsa de palomitas toda inflada y caliente. Pero no los encontraba por ningún lado. La mamá le dijo: ven hijito, ayúdame a preparar las palomitas. Y el pequeño respondiendo: eso quiero, pero no hay, necesitamos comprarlas, las olvidamos. La mamá le dijo: a ver, tráeme esa olla (una gran olla de aluminio). Búscame la tapa. Y allá va el pequeño en busca de la tapa para esa gran olla; él se preguntaba por dentro para qué sería esa olla, si lo que se necesitaba eran palomitas, no caldo de palomas; en fin, llegó con la tapa. Para entonces la mamá ya tenía la olla con mantequilla, con sal; pero, las palomitas por ningún lado. Dijo entonces aquella mamá: hijo, acércame ese maíz. Y el chico obedeciendo: ¿para qué lo quieres? – para hacer las palomitas. A estas alturas el niño ya estaba botado de la risa, pues su madre insistía en las palomitas que no se veían por ningún lado. Vio a su madre poner el maíz en aquella olla. Ya sólo faltaba que le pusiera agua para hacer caldo de palomas. Ahora verás palomitas de verdad. Y el niño muerto de risa, su mamá se había vuelto loca. En pocos minutos, cerrada la olla, comenzó la orquesta maravillosa del maíz reventando. Y aquellos olores fantásticos que él conocía muy bien. ¡Órale! ¿Era cierto? No, qué va, esto no puede estar ocurriendo; él corrió al microondas a ver donde estaban aquellas palomitas de maíz, pero el horno estaba vacío. Regresa la vista a la olla, que la madre ya había retirado de la estufa mientras decía al hijo: acércate; el niño expectante, con los ojos cargados de misterio mira la olla y la madre dice: ¡taraaaaánn!; y, al abrir la olla, el chico se queda estupefacto, con los ojos del tamaño de las ventanas mirando sorprendido aquella olla antes vacía, llena hasta el borde de blancas palomitas, como jamás las había visto; ¡y enormes!

¿Ya viste hijo? ¿A poco no sabías que se pueden hacer así en casa? En mi infancia esto era lo normal. Las palomitas que hacen hoy día no se parecen a estas. Esto es verdadero. Aquella tarde de cine familiar fue fabulosa. Mágica, inolvidable. Lo que puede hacer una mamá. Ahora de vez en cuando se compran palomitas en el súper, pero generalmente las preparan en casa, son más baratas, muchísimas más, son grandes, y tienen caja de música. Muchos de nosotros hemos crecido con cosas como estas; no sé si son mejores o no lo son; estas son tan fáciles de preparar como las otras, pero para mí tienen la magia del recuerdo, me traen un buen sabor al alma y me recuerdan que las pequeñas cosas, a veces rudimentarias, son las que han traído al hombre a ser lo que es hoy: un ser lleno de inventos o mejor, de cosas reinventadas, que al parecer le facilitan la vida, en algunos aspectos, pero también lo hacen dependiente de la modernidad y esclavo del consumismo; si contamos las cosas nuevas, nos damos cuenta de que no lo son tanto; antes existían ya, de otra manera. Yo quisiera que la Misión permanente hiciera algo como esto, que, siendo el mensaje del evangelio algo tan antiguo, fuera al mismo tiempo algo maravillosamente nuevo, gracias a la predicación y a la sencillez de quienes lo anunciamos; que pudiéramos volver a las raíces de nuestra fe y encontráramos la novedad y frescura del mensaje del Reino de los Cielos. Anunciémoslo como lo hacían los primeros cristianos, que vivían también en misión permanente; la Iglesia, a través de los siglos ha estado en una continua misión; y que pudiéramos darnos cuenta de que el reino de Dios es como un puñado de maíz pequeñito, que, con el tratamiento correcto, se convierte en una olla de palomitas de maíz con mantequilla.

Palabra de Dios A los que les perdonen los pecados , les quedarán perdonados Evangelio según San Juan 20, 19-23

Al anochecer del día de la resurrección, estando cerradas las puertas de la casa donde se hallaban los discípulos, por miedo a los judíos, se presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: “La paz esté con ustedes”. Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Cuando los discípulos vieron al Señor, se llenaron de alegría.

Y ¿por qué tantos años?

José Rafael Quintá Méndez, I Teología Escribe tus comentarios a: ecos_seminarioslp@hotmail.com Sé nuestro amigo en facebook: Seminario Guadalupano Josefino

n muchas ocasiones la gente cuando ve a un seminarista, después de preguntarle su nombre, la pregunta obligada es: ¿Cuántos años te faltan para ser sacerdote? Y la respuesta puede causar diferentes reacciones. Por ejemplo, si un seminarista contesta que está en tercero o cuarto año de teología, eso indica que le falta poco, pero si dice que está estudiando filosofía o iniciando el estudio teológico, la respuesta puede llegar a causar decepción, puesto que quien interroga pudiera decir que aún le faltan muchos años. El tiempo de la formación sacerdotal abarca cerca de doce años: tres años de bachillerato que se cursan en el Seminario Menor; un año de Curso Introductorio; tres años de Filosofía; cuatro años de Teología, que se cursan en el Seminario Mayor, y un año de servicio de pastoral específica. Sin embargo, quien desea ingresar al Seminario y cuenta con bachillerato o equivalente, ya no será necesario cursar el Seminario Menor. Podemos pensar que el Seminario es una carrera universitaria, sin embargo, no es así, lo que sí es, es que es un camino de preparación para un Sacramento, vivir una vocación y no el ejercer una profesión. Lo que le espera al futuro sacerdote es toda una vida de servicio, animar y formar la vida cristiana y sacramental de su parroquia. Eso no es todo, aún queda mucho por seguir aprendiendo y profundizar en la fe, y es por ello que los sacerdotes están en

formación permanente. Dios nos sigue hablando en nuestro tiempo, en nuestra historia, y la Iglesia desde el Magisterio y la Tradición sigue interpretando la voluntad y el plan salvífico de Dios, no olvidemos que la Iglesia es la depositaria de la fe y por ello es Madre y Maestra. En fin, puede ser que a unos seminaristas nos falte mucho, a otros menos tiempo, pero en realidad, el tiempo es lo de menos, por así decirlo. El estar en el Seminario es UNA RESPUESTA DE FE, ES ANTE TODO UNA VIDA CONFIADA A DIOS. El Seminario es la etapa de formación en la que el candidato se prepara, profundiza su vida, asume su historia personal y familiar y la ofrenda para Dios y su Iglesia. Diariamente participamos de la Eucaristía, la cual alimenta nuestra vocación; rezamos la liturgia de las horas, que es el santificar el tiempo; nos unimos al rezo del santo rosario y tenemos espacios de tiempo para la oración personal. Tal vez no estamos los mejores, pero estamos los que Dios ha querido llamar para formarnos y santificarnos, para estar con Él y después ser enviados (cf. Mc 3, 14-16). Dios no elige a los preparados, prepara a los elegidos, de allí que sean “tantos” años de formación. Así pues, es la manera en que confiamos la vida a Dios y le pedimos nos revele su voluntad, y a ustedes queridas familias y amigos que oren por las vocaciones sacerdotales, para que respondamos libre y alegremente a la llamada de Jesús.

De nuevo les dijo Jesús: “La paz esté con ustedes. Como el Padre me ha enviado, así también los envío yo”. Después de decir esto, sopló sobre ellos y les dijo: “Reciban el Espíritu Santo. A los que les perdonen los pecados , les quedarán perdonados; y a los que no se los perdonen, les quedarán sin perdonar”. Palabra del Señor Gloria a ti Señor Jesús

Un Nuevo Pentecostés Hace muchos años, un día como hoy llamado Pentecostés, gente de diversos pueblos, idiomas, clases sociales y razas, se sintieron estrechamente unidos por una extraodinaria manifestación de Dios. Aquellos hombres, de tan diversa índole escucharon la palabra de los apóstoles que les hablaron de Jesús como el Salvador y Mesías, y recibieron el Espíritu Santo. Así comenzó a caminar la Iglesia de Jesucristo, la comunidad creyente, el nuevo y amado pueblo de Dios. Hasta ahora Jesús vive con los apóstoles. Desde ahora caminarán solos, el Espíritu Santo será su fuerza y su luz; su tarea sigilosa y constante será la valentía de sus vidas. El Espíritu Santo viene, abre las puertas del miedo y de la inseguridad, suelta las lenguas de sus amigos para que hablen de Él; abre los corazones de quienes escuchan para que crean en Él; hace de una iglesia encerrada y temerosa, un ejército valiente y audaz de misioneros que por el mundo anunciarán la alegría de su Señor Resucitado. Con justa razón, la iglesia de América en el documento de Aparecida, nos pide un nuevo Pentecostés, que aquel acontecimiento se repita cada día en la vida de nuestra Iglesia. Urge que abramos el corazón al Espíritu Santo para que con su trabajo nos haga portadores de este nuevo Pentecostés.

Por Pbro. Jose de Jesús Cruz Rodríguez

MAYO 27 DE 2012

Dedicación del altar en la parroquia de Pardo

Por Por Carlos Cuéllar

na verdadera fiesta en gozo y alegría fue la dedicación del altar llevada a cabo en la comunidad de pardo en la Parroquia de San Rafael Guizar Obispo. Durante 18 meses con gran apoyo de la gente el párroco el padre Miguel Ángel Carvajal Morales, se encargaron de levantar este hermoso templo parroquial que luce bello en toda su construcción. D. Luis Morales Reyes, Arzobispo Emérito de Nuestra Iglesia Potosina, dedicó este altar el día viernes 11 de mayo al medio día, cientos de feligreses provenientes de las comunidades cercanas a Pardo se reunieron para que entre aplausos felicitaran al párroco y a todos los colaboradores por este gran esfuerzo que valió la pena. Con un rito solemne y unas plegarias de felicitación y agradecimiento D. Luis Morales Reyes se despidió de esta comunidad parroquial exhortándolos a continuar trabajando en la misión permanente y que no se den por vencidos nunca en esta tarea.

a comunidad de Fracción Sánchez, en Santa María del Río, se llenó de una gran alegría pascual al celebrar las bodas de oro de la Hna. Religiosa Ma. Elena Hernández Ramírez, hija de esta comunidad, que ha sido un semillero de vocaciones a la vida consagrada y sacerdotal. La celebración la presidió Mons. Lucas Martínez Lara Obispo de Matehuala, y se conto también con la presencia de los sacerdotes Ernesto Huerta, Roger Méndez, Gerardo Torres, Rubén Pérez y José de la Cruz.

Silencio y Palabra En jornada mundial de las comunicaciones sociales

n este 2012, el Santo Padre nos presenta, a través de su mensaje, elementos vitales del proceso comunicativo, que son: ver, sentir y escuchar, mismos que no se obtendrían si no se hace el silencio necesario para que por medio de la escucha activa, abierta, atenta y dedicada y de la disposición sensorial para observar y hasta contemplar el diálogo que se va construyendo, tomando en cuenta incluso los gestos y la postura corporal. La importancia de la palabra se adquiere en el preciso momento de quien la recibe y de quien calla para vivir la experiencia de la reciprocidad, producto del diálogo auténtico. El Papa nos dice que cuando la palabra y el silencio “se integran recíprocamente, la comunicación adquiere valor y significado”.

las respuestas de aspectos que no se buscan ni se han preguntado, experiencia que puede llegar a modificar necesidades que ni siquiera se han sentido. Por lo que el Santo Padre nos lanza la invitación a abrir la posibilidad del diálogo profundo; “hecho de palabras, de intercambio, pero también de una invitación a la reflexión y al silencio que, a veces, puede ser más elocuente que una respuesta apresurada y que permite a quien se interroga entrar en lo más recóndito de sí mismo y abrirse al camino de respuesta que Dios ha escrito en el corazón humano”. El Papa nos habla de que las personas se acerquen a la vivencia verdadera de compartir “su visión del mundo, sus esperanzas, sus ideales”.

Para enfatizar la relevancia de este binomio en cuestión, Benedicto XVI señala: “Allí donde los mensajes y la información son abundantes, el silencio se hace esencial para discernir lo que es importante de lo que es inútil y superficial”. Habla de crear un ambiente propicio, dice, “una especie de “ecosistema”, que sepa equilibrar silencio, palabra, imágenes y sonidos”. El Papa nos habla de equilibrio en la comunicación, a partir de la conjugación de la palabra y el silencio.

En la necesidad de encontrar a Dios, el silencio es la clave para emprender este camino de búsqueda, y es “en el Misterio de Cristo”, donde la humanidad encuentra sentido y obtiene la respuesta que es “capaz de dar paz a la inquietud del corazón humano”. Porque: “Es de este Misterio de donde nace la misión de la Iglesia, y es este Misterio el que impulsa a los cristianos a ser mensajeros de esperanza y de salvación, testigos de aquel amor que promueve la dignidad del hombre y que construye la justicia y la paz”.

Afirma también que en el vasto mundo del internet se obtienen tan rápido

Al final de su mensaje nos asegura que “aprender a comunicar quiere decir

aprender a escuchar, a contemplar, además de hablar, y esto es especialmente importante para los agentes de la evangelización: silencio y palabra son elementos esenciales e integrantes de la acción comunicativa de la Iglesia, para un renovado anuncio de Cristo en el mundo contemporáneo”. En oración pide a “María, cuyo silencio “escucha y hace florecer la Palabra”, confío toda la obra de evangelización que la Iglesia realiza a través de los

medios de comunicación social”. Para la Iglesia de México y de América Latina, silencio y palabra, deberá ser la determinación renovada de la comunicación que los agentes de pastoral, discípulos misioneros de Jesús, deberán aprender y experimentar, para continuar la marcha de la Misión Continental; y más aún, los que tienen la responsabilidad de colaborar de lleno en el trabajo de la comunicación de la Iglesia.

MAYO 27 DE 2012

Los siete dones del Espíritu Santo: Estos dones son regalos de Dios y sólo con nuestro esfuerzo no podemos hacer que crezcan o se desarrollen. Necesitan de la acción directa del Espíritu Santo. SABIDURÍA: Nos permite entender, experimentar y saborear las cosas divinas, para poder juzgarlas rectamente. ENTENDIMIENTO: Nos ayuda a entender el por qué de las cosas que nos manda Dios. CIENCIA: Hace capaz a nuestra inteligencia de juzgar rectamente las cosas creadas de acuerdo con su fin sobrenatural. Nos ayuda a pensar bien y a entender con fe las cosas del mundo. CONSEJO: Permite que el alma intuya rectamente lo que debe de hacer en una circunstancia determinada. Nos ayuda a ser buenos consejeros de los demás, guiándolos por el camino del bien. FORTALEZA: Fortalece al alma para practicar toda clase de virtudes heroicas con invencible confianza en superar los mayores peligros o dificultades que puedan surgir. Nos ayuda a no caer en las tentaciones que nos ponga el demonio. PIEDAD: Es un regalo que le da Dios al alma para ayudarle a amar a Dios como Padre y a los hombres como hermanos, ayudándolos y respetándolos. TEMOR DE DIOS: Le da al alma la docilidad para apartarse del pecado por temor a disgustar a Dios que es su supremo bien. Nos ayuda a respetar a Dios, a darle su lugar como la persona más importante y buena del mundo, a nunca decir nada contra Él.

¿Le duelen mucho las rodillas?

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