Edición 66

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Necesaria es la veracidad, pero la

“más grande de todas es la caridad” Pier Giordano Cabra, primer editor en Italia del teólogo Hans Küng –quien desde 1980 carece de licencia para enseñar teología católica– le escribió una carta abierta en la que responde y critica la misiva que enviara el segundo a los obispos del mundo instándolos a rebelarse contra el Papa. En la carta a Küng, Cabra expresa primeramente que está de acuerdo en el hecho de renovar la Iglesia en todos sus ámbitos. El editor comenta luego que “la renovación ha sido de hecho emprendida en estos años de muchos modos, de acuerdo a las preferencias culturales y personales, partiendo de aquella del cambio de las estructuras y la de la conversión personal y comunitaria”.

Año 2 No.66 Semana del 02 al 08 de mayo de 2010

La verdad

no es resultado de miles, . ni siquiera de millones de opiniones Pág. 02

El editor critica luego a Küng por no tener en cuenta en su carta el “escándalo” de la Cruz de Cristo que constituye un llamado a la “penitencia y la humildad”. Tras cuestionarlo sobre por qué “no rinde homenaje a Quien (el Papa) lleva adelante la renovación evangélica de los corazones antes y por encima de las estructuras”, Cabra le explica al teólogo disidente que por encima de todo está siempre la caridad, que es muy importante en la Iglesia y que no se aprecia en su carta a los obispos. “Necesaria es la veracidad, pero la ‘más grande de todas es la caridad’ que reconoce generosamente el trabajo de otros, que no opone ni divide, que no agrande las culpas, que es consciente de que toda profecía es imperfecta”, pro-sigue. “Tal vez si tu carta hubiera respirado un poco más del himno a la caridad, hubiera resultado un augurio más elegantemente evangélico al antiguo Colega, el Papa Benedicto XVI, en ocasión de sus aniversarios, y una contribución más fructífera para la Iglesia que está sufriendo por la debilidad de sus hijos”, precisa Cabra a Küng. “Espero no haber faltado a la caridad al decirte esto, porque sin la caridad no sería nada”, añade. “Sin considerarme una persona particularmente pía o seria, pido la comprensión de tu caridad”, concluye.

Somos vanidosos Pág. 16

Dale con lo mismo Pág. 04

“-¡Que no, que no soy yo!-” Pág. 15


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La verdad nos hace libres A

MAYO 02 DE 2010

Editorial

todos nos gusta conocer la verdad de las cosas, aun cuando para ello tengamos que preguntar aquí y allá cómo fueron exactamente aquellos acontecimientos que nos interesan; por ejemplo qué sucedió con nuestro equipo favorito, qué dijo en su más reciente entrevista el político o la artista que admiramos. En la jungla de nuestro mundo democrático uno puede encontrar miles de opiniones sobre un mismo hecho; pero la verdad no es resultado de miles, ni siquiera de millones de opiniones. Somos buscadores de la verdad y sólo cuando la encontramos tenemos paz en el corazón. Nos molesta profundamente que nos engañen; odiamos la hipocresía, el fingimiento y la mentira. Amamos y buscamos la verdad, quizá sin saber exactamente qué sea la verdad. Suele distinguirse entre la verdad científica, religiosa y filosófica, se habla de la verdad lógica y ontológica. Hay muchas definiciones de la verdad, por ejemplo, y simplificando las cosas, Aristóteles afirma que la verdad: “es decir aquello que es y negar aquello que no es”. Otros dicen que la verdad es la adecuación del entendimiento con las cosas y que esta adecuación se expresa en las palabras. El amor a la verdad lo encontramos en todos los pueblos y culturas, así por ejemplo entre los antiguos griegos Aristóteles llegó a comentar: Platón es mi amigo, pero es más mi amiga la verdad; y entre los romanos de los primeros siglos encontramos esta frase: “hay que decir la verdad, aún cuando a causa de ello quien la diga pierda todas las cosas”. Jesucristo viene a nosotros como la Verdad, es decir como Aquél que ilumina y manifiesta el significado de la vida de cada uno de los humanos. En Él, se descubre el sentido de todo lo que existe. Él es la verdad que tomó nuestra condición y puso su tienda entre nosotros. De esta verdad tenemos necesidad todos. Él es la Verdad de la que la Iglesia en medio de penurias, sufrimientos y fragilidad, es testigo el día de hoy, aun cuando alguno de sus miembros con su conducta la oscurezca. Cristo es la verdad hermosa y espléndida que realizó una metamorfosis en aquél inquieto buscador, maestro de retórica, es decir en Agustín de Hipona. Ese joven a quien hoy conocemos como San Agustín se encontró un día con la verdad que es Cristo y desde entonces fue cambiando cada día su existencia hasta llegar a ser el santo que hoy veneramos y quien al experimentar que el esplendor de la verdad, iba penetrando a cada momento a lo más recóndito de su corazón llega a exclamar: “tarde te ame hermosura, tan antigua y tan nueva, tarde te amé…” Así pues, en Jesucristo descubrimos la verdad de cada persona. Todos somos imagen de Dios y estamos llamados a ser sus hijos, y a seguir a Jesucristo como el único camino que nos libra incluso del pecado y de la muerte. En Cristo que es la verdad la Iglesia encuentra la luz y la fuerza para purificarse humildemente, mediante la penitencia, de todo aquello que le oscurece su rostro. En Cristo resplandece la verdad que nos abre el camino para superar toda simulación e hipocresía. La Iglesia sólo puede ser sacramento de Cristo en la medida que cada uno de los que nos declaramos católicos renunciemos a cualquier clase de mentira, hipocresía, simulación, y transitemos por el sendero de Jesucristo, pues Él es la única Verdad que nos hace libres.

San Antonio de Padua Por Pacco Magaña

Primera de tres partes

Queridos hermanos y hermanas: Hoy quiero hablarles de otro santo perteneciente a la primera generación de los Frailes Menores: san Antonio de Padua o, como también se le suele llamar, de Lisboa, refiriéndose a su ciudad natal. Se trata de uno de los santos más populares de toda la Iglesia católica, venerado no sólo en Padua, donde se erigió una basílica espléndida que recoge sus restos mortales, sino en todo el mundo. Los fieles estiman las imágenes y las estatuas que lo representan con el lirio, símbolo de su pureza, o con el Niño Jesús en brazos, recordando una milagrosa aparición mencionada por algunas fuentes literarias. San Antonio contribuyó de modo significativo al desarrollo de la espiritualidad franciscana, con sus extraordinarias dotes de inteligencia, de equilibrio, de celo apostólico y, principalmente, de fervor místico. Nació en Lisboa, en una familia noble, alrededor de 1195, y fue bautizado con el nombre de Fernando. Entró en los Canónigos que seguían la regla monástica de san Agustín, primero en el monasterio de San Vicente en Lisboa y, sucesivamente, en el de la Santa Cruz en Coímbra, célebre centro cultural de Portugal. Se dedicó con interés y solicitud al estudio de la Biblia y de los Padres de la Iglesia, adquiriendo la ciencia teológica que utilizó en la actividad de enseñanza y de predicación. En Coimbra tuvo lugar el episodio que imprimió un viraje

decisivo a su vida: allí, en 1220 se expusieron las reliquias de los primeros cinco misioneros franciscanos, que habían ido a Marruecos, donde habían sufrido el martirio. Su testimonio hizo nacer en el joven Fernando el deseo de imitarlos y de avanzar por el camino de la perfección cristiana: pidió dejar los Canónigos agustinos y ha-cerse Fraile Menor. Su petición fue acogida y, tomó el nombre de Antonio. En 1221, participó en el famoso “Capítulo de las esteras” en Asís, donde se encontró también

Por circunstancias completamente casuales, fue invitado a predicar con ocasión de una ordenación sacerdotal, y demostró que estaba dotado de tanta ciencia y elocuencia, que los superiores lo destinaron a la predicación.

con san Francisco. Luego vivió durante algún tiempo totalmente retirado en un convento de Forlí, en el norte de Italia, donde el Señor lo llamó a otra misión. Comenzó así, en Italia y en Francia, una actividad apostólica tan intensa y eficaz que indujo a volver a la Iglesia a no pocas personas que se habían alejado de ella. Asimismo, fue uno de los primeros maestros de teología de los Frailes Menores, tal vez incluso el primero. Comenzó su enseñanza en Bolonia, con la bendición de san Francisco. Antonio sentó las bases de la teología franciscana que, cultivada por otras insignes figuras de pensadores, alcanzaría su culmen con san Buenaventura de Bagnoregio y el beato Duns Scoto. Elegido superior provincial de los Frailes Menores del norte de Italia, continuó el ministerio de la predicación, alternándolo con las funciones de gobierno. Cuando concluyó su cargo de provincial, se retiró cerca de Padua, donde ya había estado otras veces. Apenas un año después, el 13 de junio de 1231, murió a las puertas de la ciudad. Padua, que en vida lo había acogido con afecto y veneración, le tributó para siempre honor y devoción. El propio Papa Gregorio IX, que después de haberlo escuchado predicar lo había definido “Arca del Testamento”, lo canonizó apenas un año después de su muerte, en 1232, también a consecuencia de los milagros acontecidos por su


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4 POLÍTICA Y EDUCACIÓN Por Pbro. Lic. Juan José Torres Galván

Los Obispos de América Latina, al recoger los retos y desafíos que enfrentan hoy los jóvenes nos dicen que:“Están muy afectados por una educación de baja calidad, que los deja por debajo de los niveles necesarios de competitividad... Se ve ausencia de jóvenes en lo político debido a la desconfianza que generan las situaciones de corrupción, el desprestigio de los políticos y la búsqueda de intereses personales frente al bien común”. (Documento de Aparecida, 445)

En general, el pueblo potosino experimenta una gran desilusión provocada por la corrupción y falta de ética en aquellos que han llegado al poder gracias al voto de los ciudadanos. Es muy común que en tiempo de elecciones abunden los discursos que prometen maravillas que, todos sabemos, nunca se van a cumplir. La falta de participación ciudadana en la política, hace cada vez más difícil construir entre todos una verdadera democracia. Una de las primeras repercusiones de una sociedad con una democracia deficiente, es el descuido de las necesidades básicas del pueblo. Pensemos especialmente en la necesidad de educación. Un pueblo no educado tiende a ser un pueblo conformista, pasivo e indefenso ante cualquier atropello que amenace su vida. En el Estado de San Luis Potosí, 20 de cada 100 alumnos que ingresan a la Secundaria desertan antes de terminarla. El índice de analfabetismo es de 9.5%, es decir, de cada 100 potosinos, casi 10 no saben leer ni escribir. Recientemente el gobierno federal autorizó un millonario apoyo extra a la educación que viene a sumarse a la enorme inversión económica que se destina a este fin, pero dentro del marco de un sistema educativo ineficiente. Hay en el pueblo potosino la percepción de que falta formación y actualización en los docentes. En los niños, adolescentes y jóvenes falta educación cívica, formación humana en valores y una adecuada educación sexual. Falta supervisar el desempeño de los docentes. Hay quejas de ausentismo en los educadores, sobre todo en el área rural. Otro gran obstáculo es la falta de diálogo e interacción entre maestros, padres y alumnos. Se busca contrarrestar estas carencias con la participación de las escuelas particulares, pero en muchos casos son bastante costosas y quedan fuera del alcance de muchas familias. Dentro de esas instituciones, también algunos colegios católicos han caído en ese inconveniente, ahondando más el clasismo de nuestra sociedad potosina y dando un mal testimonio por la falta de fraternidad. Mención aparte merecen las instituciones que han promovido “colegios de extensión”, promoviendo una educación de calidad en sectores sociales más necesitados. Es importante que cada uno de nosotros, desde nuestro lugar en la sociedad y en la Iglesia, aportemos lo mejor de nosotros para construir una sociedad que tenga como primer valor en su actuar la búsqueda del bien común, que es el fin por excelencia de la política. NOTA: Podemos ampliar esta reflexión leyendo el IV Plan Diocesano de Pastoral, 87-96

Apreciados lectores y lectoras: EL MIEDO, LA ANSIEDAD Y LA ANGUSTIA pa-ralizan al ser humano, frenan la vida y el dinamismo de la sociedad. Todos, alguna vez, hemos sentido esa perturbación de ánimo, ese sentimiento de inquietud o de incertidumbre, ese recelo de un daño futuro por un riesgo o un mal que realmente amenaza o que la imaginación finge. Me viene a la mente este pensamiento por lo que escuché a un grupo de personas cuando les pregunté, hace más de un año, qué temas podría tratar en mi colaboración en “LA RED”. Lo primero que dijeron fue: el miedo, el temor por la realidad que vivimos en el país. También toco este tema porque me impresionó esta pregunta que leí en una revista electrónica: “¿Cómo vivir en un país con miedo, con enojo, con desconfianza?”. “El estado de ánimo, seguía diciendo el autor del artículo, es de angustia, de ansiedad. Los mexicanos tenemos que someternos a un prolongado tratamiento para salir de la profunda depresión colectiva que nos tiene secuestrado el ánimo”.

del amor”; hay que promover el cambio de estructuras injustas “para disminuir la hi-riente desigualdad que hay en el país”; hay que hacer de la Iglesia una comunidad eficazmente evangelizadora; hay que dignificar la política; hay que elevar la calidad de la educación; hay que hablar y actuar con la verdad; hay que recomenzar desde la familia para que sea, de verdad, comunidad educadora, transmisora de valores humanos y cristianos: fe en Dios, amor, respeto a las personas, unidad, laboriosidad, respon-sabilidad…; hay que acompañar a los jóvenes y valorar su gran aporte a la familia y a la sociedad; a ellos se dirige, sobre todo, la delincuencia para involucrarlos, desde temprana edad, como actores o víctimas.

Los Obispos de México nos invitan a encontrar la salida a la situación de miedo e incertidumbre que vivimos, recorriendo el camino de la paz: “Difundir pensamientos de paz, fomentar sentimientos de paz, impulsar gestos de paz, promover un lenguaje de paz, desarrollar acciones de paz, educar para la legalidad, y que los medios de comunicación social estén al Este punto de vista puede ser cuestio- servicio de la paz”. nable por la generalización que hace pero no deja de asistirle la razón, en parte. Ustedes Junto a todo esto, alentemos la virtud de la esjuzguen. Lo que importa es preguntarse: ¿Cómo peranza. Esta es el mejor antídoto, es decir, la estoy yo, tú, el vecino? ¿Cómo está realmente medicina indispensable frente a un país “ateMéxico? Pero también importa ser conscientes morizado por el futuro y agobiado por la violende que hay una salida, hay un camino. cia y el odio”. Una esperanza y resistencia espiritual que se apoyan en Jesucristo resucitado Como salida y camino, se propone la reconci- que ha vencido la muerte y el pecado. Quien liación y la unidad nacional así como el com- cree en Él nunca será defraudado. promiso de cada uno y de todos. Alguien, como un eco a la afirmación de la revista, comentó: La esperanza cristiana no es una pasiva espe“Existe más gente honesta y buena que la per- ra de un futuro mejor, es más bien una procversa, dañina y negativa; el problema es que lamación activa y comprometida que afirma la los primeros hacen menos ruido, como el arco necesidad de una fidelidad mantenida diariairis junto a una tormenta. Difundamos más lo mente en la obediencia a Dios y en el amor positivo para revertir lo malo; eso nos haría y servicio a los demás. El verdadero creyente mucho bien a todos, y es un tratamiento más es activo constructor de un mundo renovado rápido y efectivo”. porque no pierde de vista la meta final y tiene motivaciones sólidas y profundas para el esEl camino y la salida es el compromiso de to- fuerzo cotidiano de la transformación de la dos por la justicia, por la paz, por el amor. Para realidad para hacerla conforme al proyecto de reconstruir el tejido social, para recomponer la Dios; para Él, “ni la muerte ni el mal son para el vida social, para cambiar el estado de ánimo hombre, su destino, su última verdad”. colectivo, para promover la seguridad pública, hay que recorrer los caminos necesarios para +Luis, Arzobispo de S. Luis P. que se abra paso entre nosotros “la civilización

Queremos conocer su opinión, escríbanos a: semanariolared@iglesiapotosina.org semanariolared@hotmail.com


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Los medios de comunicación y los abusos sexuales

de sacerdotes

Por Pbro. Lic. Héctor Colunga Rodríguez colunga46561@hotmail.com

Como preámbulo, quiero darles un ejemplo: En una ocasión fui a la feria con mi familia y mi sobrinito quería una pizza; mientras ésta llegaba se quitó el hambre con otra cosa; llegó la pizza y obviamente el niño no se la comió; yo le dije ¿Por qué no te comes la pizza? y la respuesta fue inmediata: “¡Porque no tengo hambre!”. A la media hora después, todavía en el pabellón de gastronomía le volví a preguntar ¿Hijo, por qué no te comiste la pizza? y su respuesta fue la misma. “No tengo hambre, ya no la quiero”. Dos horas después, estando en el pabellón industrial, le volví a preguntar ¿Por qué no te comiste la pizza? Y ya fastidiado me dice: “¿Y dale con la pizza?”, o sea, “dale con lo mismo”.

periodistas y de todos los que trabajaban en los medios de comunicación, ya que así se puede dar un trato fraternal y caritativo; además, se tendrá la posibilidad de orientarlos y de alentarlos para que la información que den sea verdadera, salvando la justicia y la caridad y que su modo de proceder sea honesto y conveniente, ya que esto les dará prestigio.

Por eso, esta vez hablaré del papel que tienen los medios de comunicación al dar noticias de los abusos sexuales de sacerdotes. Quiero dedicar este espacio para dar mi punto de vista sobre este tema, el cual considero que ha sido sumamente “bombardeado” por los medios de comunicación. Ya que al salir este tipo de noticias, alguien podría decir: “y dale con lo mismo”.

Cuando un sacerdote es acusado ante el obispo, éste debe manejar la situación con imparcialidad y pedir a los medios de comunicación el tiempo necesario para que las autoridades competentes puedan responder y que se actúe conforme a derecho.

Generalmente los reporteros hacen preguntas directas, si tal sacerdote cometió o no un delito de tipo sexual. El entrevistado, no puede responder “sí” o “no”, porque en realidad no le consta. Su respuesta tiene que ser sabia y prudente y sobre todo basada en el Evangelio y más que nada en la caridad. El secreto de tratar a los medios es tenerles un gran respeto pero nunca decirles lo que ellos quieren oír para luego, como vulgarmente se dice, “amarrar navajas”. Tenemos que ser amigos de los

El Clero Potosino y la Independencia

última parte

Por Pbro. Lic. Rubén Pérez Ortiz

¿Quiénes participaron en la lucha armada?

D

Muy estimados lectores:

Los medios de comunicación tienen mucho peso y fuerza en la sociedad; pueden ser formativos o informativos, pero también enajenantes, manipuladores y amari-llistas y hay que saber manejarlos. La radio, la televisión, la prensa escrita y la Internet suelen influir grandemente en la opinión pública.

Nuestra historia

Todos los sacerdotes y también los laicos, (incluyendo los periodistas) debemos de llevar una vida recta conforme a las enseñanzas del Evangelio, ya que cualquier situación irregular y de escándalo, será noticia para los “cazafantasmas” que en general no son comunicadores honestos.

No se les olvide a los medios de comunicación, que cuando alguien es demandado, está en calidad de “presunto”, incluso el procesado; pero la prensa maneja la información como un hecho, cuando apenas se está elaborando una investigación previa o un proceso. La noticia debe darse cuando ya haya una sentencia, porque ya es cosa juzgada. Los medios se toman el papel de jueces y determinan quién es culpable o no antes de hacerse un proceso. A los medios de comunicación les interesa la noticia que se vende y no publican la vida de quienes sí cumplen fielmente su ministerio sacerdotal, y algo todavía más grave, no hay una disculpa pública en el caso de que un sacerdote haya sido acusado falsamente. Los medios de comunicación tienen la obligación de restituir la fama de la persona y de manejar la noticia de una forma veraz y objetiva, cuando les conste. Hasta la próxima.

on Manuel Muro en su Historia de San Luis Potosí nos habla del franciscano Fr. José Ramos, religioso lego, quien fue aprehendido por el Ejército Realista a causa de «haber capitaneado una compañía de insurgentes y teniendo parte en los formidables saqueos de esta ciudad». El R.P. Fr. Antonio Otahagui, cuya cabeza fue colocada en un nicho para escarmiento en la ciudad, tal como lo apunta Don Lucas Alamán. Fr. Miguel Ornoz, quien sirvió en las filas insurgentes como capitán del ejército. En la batalla del 9 de mayo de 1811, en el sitio llamado Estanque Colorado murió otro religioso franciscano –cuyo nombre se ignora, pero el cual lo señala Bravo Ugarte. La orden de los Juaninos vio surgir de entre sus integrantes el espíritu insurgente; el que encabeza dicha lista es Fr. Luis Herrera, Mariscal, iniciador de la independencia en la capital potosina, El jesuita Bravo Ugarte lo señala como cruel y sanguinario. Murió fusilado en Aguayo (Cd. Victoria) por Arredondo el 6 de abril de 1811 ahí mismo muere Fr. Ildefonso Blancas, lego, segundo de Herrera. Juan de Villerías es el tercero juanino participante, capitán general, murió en la acción de Real de Catorce el 13 de mayo de 1811. Del clero diocesano, o llamado secular, participaron: el P. Fernando Zamarripa, Vicario de San Luis Potosí, el cual fue preso en Aculco, fue reaprendido en la acción de la Hacienda de Villela, muriendo en el combate. El P. José Francisco Álvarez, cura de Matehuala, el cual fue enviado por Calleja con una división de tropas de Provincias internas contra los insurgentes de Colotlán, fue rechazado y herido, más tarde se encuentra en la acción de Garabatos, cercano a Jeréz, Zacatecas. El P. José Mateo Braceras, clérigo organizador y jefe en la compañía de realistas de San Sebastián y Tlaxcala, en la misma capital potosina. El Cura de Mexquitic P. J. Ignacio Lozano el cual formó un cuerpo de 400 hombres. El Cura de Catorce, el P. José María Semper, quien dirigió las tropas de su curato contra el ataque de Villerías. El cura de Tampamolón, S.L.P., el P. José Ignacio López Aguado quien aprendió personalmente a un coronel insurgente, militando en las tropas realistas. El agustino Pedro de Alcántara Villaverde, comandante realista del pueblo de Huehuetlán, en la Huasteca potosina y luego de Valles donde con su división de realistas de varios pueblos y de indígenas, recobró el territorio perdido y restableció la tranquilidad de la región, fusilando prisioneros y concediendo el indulto a los que lo pedían. De la familia Mercedaria nos encontramos participando a Fr. Pedro Bustamante, conventual de San Luis el cual fue fusilado en la Hacienda de San Juan de Dios en Durango el 17 de julio de 1812. De la orden carmelita ya hemos dedicado ampliamente en artículos anteriores la destacada participación de Fray Gregorio de la Concepción, hombre clave en el inicio y desarrollo de la lucha independentista en San Luis Potosí, ya que como prior de dicho Convento, tuvo gran facilidad para moverse entre los conventos de San Juan de Dios, el Franciscano y el de la Merced y así, entablar diálogo de primer nivel con prisioneros y responsables de los mismos. Como primera conclusión podemos decir: Es necesario conmemorar los hechos históricos. Guardar la memoria, no es sólo un ejercicio mental, sino como lo sugiere el verbo «recordar» es ver con serenidad y con el corazón el legado que nos han dejado nuestros antepasados, en este caso, clérigos y legos quienes en su momento tuvieron frente así un gran desafío y, que contribuyeron con su esfuerzo a forjar patria. Así viendo con mirada de fe, aún estos hechos tan complejos y sangrientos, ya que así es como se van realizando de manera sorprendente y misteriosa los designios de Dios con la cooperación y la no cooperación humana. De esta manera, la historia de la salvación refleja la fidelidad del Señor por encima de todas nuestras infidelidades y pecados. Es por ello que, al conmemorar las efemérides y a todos estos hombres en el Bicentenario de la Independencia nos debe llevar, a la humildad en el reconocimiento de los errores de los que no podemos estar exentos los humanos. La Iglesia Santa está formada por pecadores y santos. Aun aquellos a quienes reconocemos como héroes, eran hombres de carne y hueso, con virtudes y debilidades. La sabiduría que debemos buscar al repasar la historia nos ha de llevar a la sensatez de no repetir los mismos conflictos con la violencia que desgarra y que divide. ¿Cuándo aprenderemos a dialogar con serenidad, a ver los hechos de manera más objetiva y a construir desde nuestras diferencias? como herederos de quienes nos dieron patria, tenemos en el hoy una dolorosa realidad que necesita ser asumida con valentía y audacia tal y como lo hicieron en el pasado hombres valientes que buscaron dar una respuesta con su vida a los desafíos de su tiempo.


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Esta novia mía, va a ser mi tormento

2ª. parte

Cuando un hombre quiere establecer una relación de noviazgo, busca canciones, frases, poemas etc. para decírselas a quien quiere que sea su novia. Existen diversos tipos de frases y piropos, desde los más vulgares y agresivos como “que curvas y yo sin frenos”, hasta los más románticos que hacen sentir bien a la joven como “¿que habría en el cielo que me encontré un ángel en la tierra?”.

P

ero de esas frases no me referiré en este artículo, sino de frases engañosas, que

hacen que se desvirtúe la relación de noviazgo o de matrimonio, pues son una falacia, trata de convencer a una persona. “Si te casas conmigo, dejaré de beber vino en exceso” o lo que es lo mismo “se

dignidad. Esta frase lamentablemente puede

me quita lo borracho”, El alcoholismo no es

ser interpretada como ya podemos tener rela-

cuestión de casarse o no casarse, es cuestión

ciones, ya eres exclusiva para mí, y lamentable-

de voluntad para erradicar de nuestra vida la

mente va unida a otras frases subsiguientes:

bebida en exceso, es enfermedad, es mejor

“si nos amamos ¿cuál es el problema?”, “todos

ser más realistas y decir que entrará a un

lo hacen”, “ya no somos niños”, “Iglesia retro-

grupo de AA, pero eso de que se le quite esta

grada” bla, bla, bla, CUIDADO, Dios tiene un

verde. Abstenerse de bebidas o de otro tipo

plan para cada uno de nosotros, con estas

de drogas no es sólo porque el ser que ama

frases que no te engañen, no nos alejemos

diga que sí, es algo más de fondo. Así que no

de nuestro creador que nos dice que nuestro

te engañen, y si la respuesta es negativa y

cuerpo es sagrado, que es templo del Espíri-

este sujeto sigue en el vicio, no te sientas cul-

tu Santo, y nosotros no nos pertenecemos,

pable porque de seguro casada con él iba de

porque fuimos comprados ¡y a que precio!

todos modos a caer, además el matrimonio

Hay que glorificar a Dios con el cuerpo 1Cor

es en libertad y no con chantajes de este tipo.

6,19-20.

2

Una frase de novios jovencitos es: “Ya

El cuerpo, el noviazgo, el matrimonio, tiene

eres mía y yo soy tuyo”, el noviazgo no

un por qué, un sentido trascendente que no

es posesión, ¿cuánto te costo?, la persona

lo podemos olvidar cuando el hombre se cie-

que se ama no es un objeto que puedes usar

ga por el enamoramiento.

como te dé la gana, es un ser humano con

l filósofo francés de origen tunesino e hijo E de padres judíos, Fabrice Hadjadj, explica en un interesante artículo que el “linchamiento

mediático” que sufre el Papa Benedicto XVI no hace sino favorecerlo, pues reconoce así su importancia moral en medio del mundo, incluso para los no creyentes, y permite que los católicos puedan admirarlo cada vez más por su solidez espiritual a la cabeza de la Iglesia Católica. En el artículo titulado “La última bienaventuranza”, publicado en L’Osservatore Romano, este filósofo que en su juventud viviera en medio del anarquismo y el nihilismo, comenta que el Santo Padre es un valiente testigo de aquello que dijo Jesús en el Sermón de la Montaña: “Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos”. El ahora profesor de literatura en Toulon, Francia, tras recordar la tolerancia cero de Benedicto XVI ante los casos de abuso sexual, se refiera a su carta a los católicos de Irlanda y comenta que los católicos “pueden alegrarse por el linchamiento mediático” del que actualmente es objeto”. “Los medios más antipapistas –explica Hadjadj– se convierten sin querer en apologistas de la fe. Que se vean obligados a deformar los hechos, a poner y falsificar información para atacar al Papa y enlodar a todo el clero, es la prueba de que en realidad no tienen mucho que desaprobarles”. “Si fuese en realidad una controversia lúcida y racional, los ataques podrían firmarse. Pero la irracionalidad de sus reacciones no juega a su favor y le da a la mente racional razones para creer en la verdad del magisterio pontificio. Después de todo, cuando el Papa habla, el no creyente no debería preocuparse”. El no creyente, prosigue el filósofo, “debería decir que la cosa sólo tiene que ver con los católicos, inmersos en el oscurantismo y la rigidez. Ahora, por el contrario, lo tenemos temblando, nervioso, inquieto, como si la voz del Santo Padre lo tocase personalmente”.

es decir, una mentira o engaño con el que se

1

Linchamiento mediático “sólo favorece” al Papa Benedicto XVI, dice filósofo francés

Con una reacción similar, continúa Fabrice Hadjadj, “un observador externo puede fácilmente deducir esto: este no creyente no lo es en realidad, entonces podría decirse que tiene el instinto del magisterio, de la paternidad espiritual del Sumo Pontífice”. Si los no creyentes, “se escandalizan especialmente por el hecho de que los abusos sean cometidos por sacerdotes es porque tienen el instinto de la dignidad especial del sacerdocio. Sus ataques son así una contribución involunta-ria al Año Sacerdotal y un homenaje a la altísima vocación de pureza del sacerdote”. El profesor universitario explica luego la necesidad de recomponer la paternidad de quienes están a cargo de menores, especialmente de los sacerdotes, considerando siempre que “la verdadera justicia no puede sino ordenarse a la esperanza”. Junto a esta tarea queda siempre el esfuerzo pendiente de atender espiritualmente a los pequeños que han sufrido los abusos pues sobre eso “también se nos habrá de juzgar”. Al concluir su artículo, el filósofo francés explica que la vulnerabilidad del Papado “es necesaria para mostrar que el cristianismo no se reduce a la inteligencia anónima de un sistema moral, sino que nace de un encuentro libre y dramático con una Persona. Así entonces, los ataques que Benedicto XVI está sufriendo no hacen sino conformarlo mejor a Cristo y permiten al creyente admirarlo todavía más como su inesperado Vi-


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Este hogar es católico

Hablemos de Misa

La aspersión con agua bendita Por P. Efraín Moreno Aguirre

E

l agua da vida, el agua lava, limpia, refresca, es indispensable para la existencia. En la Iglesia el agua es símbolo de vida.

Por ello en domingos y fiestas –sobre todo durante el tiempo de Pascua– se puede sustituir el Acto Penitencial por la aspersión con agua bendita. En la Misa, especialmente los Domingos de Pascua,

somos

rocia-

dos con Agua Bendita para recordar el día de nuestro Bautismo; el día cuando fuimos purificados y morimos al pecado para renacer como hijos de Dios. Es un momento gozoso. Hemos de vivirlo pidiendo a Dios que renueve la gracia de nuestro Bautismo, haciendo nuestras las palabras del Salmista: “Oh Dios crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu firme…rocíame con el hisopo, quedaré limpio, lávame, quedaré más banco que la nieve” (Sal 51,12).

APOLOGÉTICA: Defendiendo mi fe

La Iglesia Católica es la Iglesia de Cristo Por Pbro. José Antonio Martínez Ortiz.

E

l día de hoy hablaremos brevemente sobre un hecho muy importante: el fundamento de la Iglesia católica. Pues ante los constantes ataques que dicen que el único que salva es Jesucristo y que la Iglesia no tiene importancia, ya que todas son iguales; es necesario demostrar que Jesucristo no anduvo fundando muchas Iglesias, sino que la única Iglesia que se fundamenta en Cristo es la Católica. No podemos negar que Jesús mismo fundó su Iglesia sobre la piedra o roca que es Pedro, y además Jesús entregó las llaves del Reino de los cielos al apóstol Pedro para atar y desatar aquí en la tierra. Esto no lo invento yo, sino que está claramente escrito en la Biblia. Y Para que no quede duda podemos leer el texto del Evangelio de San Mateo 16, 13-19. Es el pasaje bíblico en el que el apóstol Simón Pedro proclama que «Jesús es el Cristo, el

Hijo del Dios vivo.» Y Jesús felicitó a Pedro por esta proclamación de fe, porque realmente esta fe viene de Dios. Luego Jesús dijo algo muy importante a Simón Pedro: «Y ahora, yo te digo: Tú eres Pedro, o sea, piedra, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia y las fuerzas del infierno no la podrán vencer. Yo te daré las llaves del Reino de los cielos. Todo lo que ates en la tierra será atado en el cielo, y lo que desates en la tierra será desatado en los cielos». ¿Qué quiso decir Jesús a Simón Pedro?: 1) Jesús da al apóstol Simón un nuevo nombre: «Pedro» (En el texto original griego está escrito «Petra» que significa en castellano: piedra, roca). Quiere decir que el apóstol Simón tendrá la función de ser la «piedra» o «roca» sobre la que Cristo fundará su Iglesia. Así Pedro fue señalado por Jesús para ser como la base visible de su Iglesia en la tierra.

2) Jesús da también a Pedro la autoridad de ´atar´ y ´desatar´. Para los judíos ´atar y desatar´ significa declarar lo que es prohibido y lo que es permitido. Por tanto le corresponde a Pedro declarar lo que es permitido y lo que no es permitido en la Iglesia de Cristo. 3) Las fuerzas del demonio no podrán vencer a la Iglesia de Cristo, y por más que intenten no lo lograran. Esto nos deja claro que Jesús es la Roca espiritual, es la Piedra de base para los que creen, es la Piedra angular del templo espiritual. Pero cuando Jesús escoge a Pedro como piedra de su Iglesia, no se refiere a una piedra espiritual, sino a la piedra visible de su Iglesia en la tierra. Esta es la diferencia. Pero, ¿Quién es hoy Pedro? Ahora bien, Jesús eligió a Pedro para que sea para siempre la base vi-sible de su Iglesia. Pero Pedro tenía que morir. Entonces, en adelante, los sucesores de Pedro -los Papas- serán, uno tras otro, cabeza visible de la Iglesia. Lo mismo que Pedro fue la cabeza visible para los apóstoles y para la Iglesia primitiva, así el Papa es hoy la cabeza visible de la Iglesia: “Dios, el Señor, le hará rey como a su antepasado David para que gobierne a Israel por siempre. Y su gobierno nunca terminará”

(Lc 1, 32-33). Jesús sabía muy bien que para mantener su Iglesia a lo largo de los siglos se necesitaba una autoridad visible que pudiera determinar quiénes pertenecen y quiénes no pertenecen al grupo de los creyentes y cómo se debe comprender la fe en Cristo y las exigencias del Evangelio. Si no hubiera esta autoridad visible, la Iglesia de Cristo caería fácilmente en un sin fin de pequeñas iglesias y eso no es la voluntad de Jesús. Esto es precisamente lo que les ha pasado a las Iglesias protestantes y las sectas. Mientras nosotros los católicos somos una sola Iglesia, ellos tienen un sin fin de denominaciones. El Señor fundó una sola Iglesia y pidió con fervor por la unidad de los creyentes. Esta fue la oración de Jesús: “Padre Santo, cuida con tu poder a los que me diste, para que estén completamente unidos como tú y yo” (Jn 17, 11). Además Jesús dijo también que nunca abandonaría a sus apóstoles y a su Iglesia: “Yo estaré con ustedes todos los días hasta que termine este mundo” (Mt 28, 20). Aquí hay claramente un compromiso de Jesucristo con su Iglesia en forma definitiva. Todos los católicos debemos de sentir con humildad, un legítimo y verdadero orgullo por pertenecer a la única Iglesia que fundó Jesucristo.


07

Los libros y sus autores

Miedo líquido Zygmunt Bauman BArceloa Paidós 2007 228 páginas Por Luis Marino Moreno

H

asta ahora se creía que la modernidad iba a ser aquel periodo de la humanidad en el que por fin, quedarían atrás los temores que amenazaban la vida social del pasado. Y los seres humanos podríamos controlar nuestras vidas y dominar las imprevisibles fuerzas del mundo social y natural. Y en cambio en los albores del siglo XXI volvemos a vivir una época de miedo. Tanto si nos referimos al miedo de las catástrofes naturales y medio ambientales, o al miedo a los terroristas indiscriminados. En la actualidad experimentamos una ansiedad constante con los peligros que pueden azotarnos sin previo aviso en cualquier momento. “Miedo” es el tema que empleamos para descubrir la incertidumbre que caracteriza nuestra era moderna líquida; nuestra ignorancia sobre la amenaza concreta que se cierne sobre nosotros y nuestra incapacidad para determinar qué podemos hacer ( y qué no) para contrarrestarla. El libro al que está aludiendo, pertenece a la tetralogía de lo líquido: modernidad líquida, tiempos líquidos, amor líquido y precisamente el miedo líquido. Zygmunt Bauman, uno de los pensadores más influyentes de nuestra época nos presenta un inventario exhaustivo de los temores de la modernidad líquida y nos explica cómo podemos desactivarnos o hacer que se vuelvan inofensivos. Acerca del autor Zygmunt Bauman nació en Poznan (Polonia). Huye de los nazis a la Unión Soviética, para regresar luego a Polonia, fue profesor de filosofía, sociología en la Universidad de Varsovia. Desde 1971 reside en Inglaterra. Profesor de la Universidad de Leeds en ese país. Desde 1990 es profesor emérito. Su obra comienza en los años 50´s , y se ocupa entre otras cosas de cuestiones tales como, las clases sociales, socialismo, holocausto, hermenéutica, modernidad y postmodernidad, consumismo, globalización y la nueva pobreza entre otros.

Iglesia Universal CIUDAD DEL VATICANO.- Al finalizar la Audiencia General, del pasado miércoles, el Papa Benedicto XVI agradeció de manera especial a los miles de sacerdotes que en todo el mundo se entregan cotidianamente al servicio del pueblo de Dios, dando testimonio de la caridad de Cristo. En sus palabras a los párrocos y sacerdotes de la diócesis de Roma que habían regresado de una peregrinación a Ars, Francia, ciudad natal de San Juan María Vianney con motivo del Año Sacerdotal, el Santo Padre dijo: “agradezco su presencia, que es un signo de afecto y cercanía espiritual y aprovecho esta oportunidad para expresar mi estima y reconocimiento tanto a ustedes como a los sacerdotes que en todo el mundo se dedican con entrega apostólica al servicio del Pueblo de Dios, dando testimonio de la caridad de Cristo”. CIUDAD DEL VATICANO.- Benedicto XVI dirigió este domingo un “especial saludo” a la Asociación Meter, comprometida en defender a los niños de la violencia. En las palabras que pronunció tras la oración mariana del Regina Caeli, el Papa recordó que la Asociación “desde hace 14 años promueve la Jornada nacional para los niños víctimas de la violencia, de la explotación y de la indiferencia”. “En esta ocasión, quiero sobre todo agradecer y alentar a todos los que se dedican a la prevención y a la educación”, afirmó el Pontífice. Don Fortunato Di Noto, fundador de la Asociación Meter (www.associazionemeter. org), afirmó: “El Papa es un padre para mí, pero para los niños del mundo es seguramente un abuelo bueno y afectuoso al que todos miramos con confianza y esperanza”. “Que haya recordado y saludado, de manera especial, hoy el inicio de la Jornada y haya puesto el acento en la educación de los niños confirma”. “Gracias, Santo Padre”.

Iglesia en México HERMOSILLO.- Ante los casos de “secuestro, extorsiones y ejecuciones” que vive México especialmente en las regiones de Chihuahua y Ciudad Juárez donde la situación ya ha llegado a un estado crítico, el Arzobispo Emérito de Hermosillo, Mons. Carlos Quintero Arce, llamó a los ciudadanos a mantener la esperanza y “educar para la paz, formando actitudes de respeto y de aprecio a la dignidad humana”. Tras recordar el documento “Que en Cristo, nuestra paz, México tenga vida digna” que dirigieron los obispos del país a los fieles, el Prelado señaló que “a la luz del Evangelio y de la Doctrina Social de la Iglesia cada uno de los cristianos debemos ser constructores de la paz”. “Nuestra misión es la de saber construir la paz sobre todo insistiendo en la prevención y así acompañar a todos los ciudadanos responsables de nuestra sociedad civil en su trabajo por la paz”, agregó. CIUDAD DE MÉXICO.- El Arzobispo de Antequera-Oaxaca, Mons. José Luis Chávez Botello, advirtió que “en la ilegalidad nunca tendremos paz, ni justicia, ni desarrollo, ni democracia”; y recordó que “las bases de la legalidad se ponen en la familia sembrando y cultivando motivos y convicciones sobre la necesidad de normas para el respeto mutuo, el orden y la colaboración como indispensables para convivir en paz”. “Con la ilegalidad pronto viene la falta de credibilidad, se deteriora el sentido de las leyes y se desvía su finalidad, se daña la convivencia social y se cae en la corrupción. La ilegalidad siempre propicia y alimenta la violencia y el mismo crimen; es un síntoma que muestra decadencia de la calidad humana de personas y de la sociedad”, expresó en un mensaje. Por ello, el Prelado alentó a “promover la cultura de la legalidad” como una tarea prioritaria y urgente. Dijo que para esto “se requiere de los legisladores una mejor fundamentación y precisión de leyes para llenar vacíos que están propiciando variadas interpretaciones que paralizan o evaden la justicia”.


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¿Quién es este? M

ientras los Doce están ausentes, realizando la misión encomendada, se nos dice que Herodes decapitó a Juan Bautista. Lucas omite el relato del banquete de Herodes y el baile de Herodías, reflejando quizá un disgusto por lo sensacional. El punto principal para San Lucas es la curiosidad del tetrarca por querer conocer a Jesús: “¿Quién es, pues, éste de quien oigo tales cosas? Y buscaba verle” (preparando así 23,8; cf. 13,31). El tema de la identidad de Jesús marcará las escenas siguientes. Con la multiplicación de los panes se da la primera res-puesta al tetrarca Herodes, en ella Jesús aparece como lo presenta Hch 2,22 “hombre acreditado por Dios con milagros, prodigios y señales”. Éste es el único milagro relatado en los cuatro Evangelios, e incluso por dos ocasiones en Marcos y Mateo; San Lucas lo narra siguiendo la secuencia de Marcos, pero omitirá todo lo que le sigue, hasta la así llamada “segunda multiplicación de los panes”. Es una gran omisión que incluye la caminata sobre las aguas, la discusión sobre lo que contamina al hombre, la

súplica de la sirofenicia por su hija, la curación del sordomudo, la segunda multiplicación de los panes y también la curación del ciego por etapas. En algunos puntos San Lucas simplifica el relato de Marcos, y coincide con San Juan, al menos en la mención de los cinco mil hombres antes de la realización del milagro, pero sigue a Marcos en los elementos principales, conservando la sorpresiva respuesta de Jesús a los Doce: “denles ustedes de comer”. San Lucas, que emplea el término técnico: “la fracción del Pan”, para referirse a la Eucaristía, debió haber encontrado en este milagro una manera de ilustrar algunos aspectos de la cena del Señor, como los de abundancia y saciedad. Enseguida Lucas introduce la confesión de fe de Pedro haciendo notar que Jesús estaba orando, pero omitiendo toda referencia geográfica a Cesaréa de Filipo. Esto parece tener dos efectos, por una lado centra más la atención en la respuesta de Pedro, pero también contribuye a concentrar el ministerio de Jesús únicamente en Galilea. A la pregunta de Jesús: ¿Quién

dicen los hombres que soy yo? Pedro responde: “el Cristo de Dios”, es decir, “el ungido de Dios, el agente o instrumento de Dios”. Ésta es, asimismo, la principal respuesta a la pregunta de Herodes. En el primer anuncio de la Pasión, a diferencia de los otros dos sinópticos, Lucas no presenta el malentendido de Pedro ni la corrección que le hace Jesús. San Lucas recoge también las condiciones del seguimiento, si el Hijo del Hombre debe sufrir, así también han de sufrir sus seguidores si desean compartir su gloria. Un rasgo propio de Lucas es que la cruz que se ha de tomar para seguir a Jesús, ha de asumirse “cada día”, poniendo así el énfasis en el desafío diario y en la fidelidad constante. La Transfiguración, sucedida también mientras Jesús oraba, describe la gloria de Jesús como algo ya presente en el ministerio del Jesús terreno. Sin embargo,

también afirma el aspecto sufriente del Hijo del Hombre, puesto que Jesús habla con Moisés y Elías sobre su “éxodo”, es decir, sobre su partida a Dios por su muerte en Jerusalén. Así como se habla de un éxodo o partida de Jesús, también Lucas se referirá a su entrada o inicio en Hch 13,24. Al descender del monte de la transfiguración, en el relato del muchacho endemoniado, San Lucas atenúa el énfasis marcado de la incapacidad de los discípulos para sanar al muchacho, interesándose más en el milagro como manifestación de la “majestad de Dios.” Antes de partir hacia Jerusalén, Jesús anuncia por segunda ocasión su Pasión y les instruye sobre la verdadera grandeza, así como el tener un espíritu muy abierto, pues “el que no está contra vosotros, está por vosotros” (9,50).


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Bendición de la Casa Sacerdotal en Villa de Reyes

Un centenar de personas, especialmente bienhechoras, participaron en la Bendición de la Casa Sacerdotal

Un signo de la bendición, es la aspersión con agua bendita sobre los asistentes

La casa Sacerdotal en la parroquia de Villa de Reyes, tiene una pequeña pero acogedora capilla para la oración de los sacerdotes

El Sr. Arzobispo, explica el sentido de una casa sacerdotal, también agradeció a todas las personas que colaboraron con ellos, especialmente a los Guadalupanos y a la paciencia y perseverancia del P. Gabriel

Felices los sacerdotes de la Parroquia de Villa por estrenar su casa sacerdotal, aquí con Don Luis el Padre Gabriel y de pie el Padre Omar, vicario de esta comunidad.

CURSO ALFA: Un nuevo método de evangelización L

Por Carlos Cuéllar

a Secretaría de Pastoral Juvenil busca llevar a los jóvenes la palabra de Cristo hasta sus corazones, pero ésta es una tarea difícil, pues ahora la vida ofrece muchas alternativas que a la mayoría de ellos los llega a confundir y guiarlos por un camino incorrecto. Es así como se buscan nuevos métodos de evangelización, lo más sencillos posibles pero al mismo tiempo eficaces para lograr el objetivo, es así como a San Luis Potosí llegan los llamados cursos Alfa, un método sencillo que sirve como herramienta para encausar no sólo a jóvenes si no a familias completas al camino de la salvación en Cristo. Este método se desarrolla por me-

dio de una invitación a una cena y posteriormente se dá una pequeña charla sobre los valores evangélicos. Este método ha sido adoptado en muchos países y se a aplicado en cárceles, con indígenas, clínicas etc. El viernes, sábado y domingo 16, 17 y 18 de abril en la casa ICHTHUS se hizo un pequeño entrenamiento para que las personas lo puedan aplicar en sus parroquias. Este curso fue ofrecido por 6 personas que venían de la ciudad de México y las personas que lo vivieron, salieron muy contentas al conocer este método de evangelización. Estos cursos se darán posteriormente en algunas de las parroquias de nuestra Arquidiocesis.


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Por Carlos Cuéllar

U

na auténtica fiesta se

ñada por el parroco J. Marcos

vivió el pasado domingo

Manuel Segura Mtz.

18 de abril en la parroquia de la Virgen de Guadalupe ubica-

El Arzobispo presidió la mag-

da en Corte Pimero, Mexqui-

na Eucaristía mencionando

tic. El motivo fue bendecir la

los datos historicos de esta

imagen restaurada de la Vir-

imagen así como la gran

gen protectora y patrona de

trayectoria por la que ha pa-

esa comunidad: La Guada-

sado y es por eso que la gente

lupana, por el Arzobispo Don

tiene tanta fe, “que hermoso

Luis Morales Reyes.

ahora se ve este templo parroquial, pero más hermoso

Una imagen resplandeciente

se ve el templo de tu corazón

en belleza y adornada por la

al dejar entrar a la gran Se-

fe de los feligreses que era de

ñora a tu vida, a tus días, yo

pólvora clausuraron esta fies-

esperarse al convocar a todas

te pido que la dejes entrar y

ta, donde los niños vestidos

las

cercanas

también a su hijo Jesucristo

de San Juan Diego no dejaban

reuniendo más de tres cen-

quien siempre toca la puerta

de reír y jugar mientras sus

tenares de personas quienes

de tu alma y no se cansa de

madres se acercaban al tem-

hicieron una gran peregri-

tocar, déjalos entrar, dejen

plo a ofrecer una flor acom-

nación hasta la parroquia, al

que reinen en tu corazón.”

pañada de un agradecimiento

frente de este grupo de perso-

Comentó el Arzobispo.

y una petición a la Virgencita

comunidades

morena.

nas se encontraba la imagen de la Guadalupana acompa-

Los tradicionales danzantes y


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Nuestro Pastor con Sacerdotes que trabajan arduamente en pro de las actividades que realiza el Movimiento Familiar Cristiano

Reunión del

Movimiento Familiar Cristiano

con nuestro Pastor Por LCC Angélica Maldonado Morales

“A

veces en este tipo de movimientos, aflora lo superficial de las relaciones humanas, y no aparece la profundidad de la fe que exige COHERENCIA Y COMPROMISO en nuestro actuar como verdaderos o auténticos cristianos”.Así lo señaló nuestro Pastor, Mons. Luis Morales Reyes, el pasado martes 20 de Abril, día en que tuvo una Reunión con los integrantes del Movimiento Familiar Cristiano. La cita fue en el auditorio “Ignacio Montes de Oca” de la Acción Católica, donde Don Luis respondió a las preguntas e inquietudes que le hacían algunos laicos. El MFC en la Diócesis de San Luis Potosí, es dirigido por un equipo coordinador conformado por 11 matrimonios y un joven, con un apostolado espe-

La Iglesia Potosina ha caminado en su compañía, por un sendero lleno de luz y bendición.

Agradecemos a Dios por su XXXIV Aniversario Episcopal. Muchas gracias Don Luis por su guía, fuerza y todo el corazón que ha puesto en nuestra Iglesia Potosina.

¡Muchas felicidades!

cífico y es encabezado para el trienio 2010-2013 por Arturo y Minerva Castro Granados como matrimonio presidente diocesano, quienes al dirigirse a Don Luis para darle la bienvenida al inicio de la reunión, le dijeron: “ Nos sentimos muy honrados de recibirlo en este recinto, ya que su presencia constituye un gran aliento y un poderoso impulso para el crecimiento espiritual y desarrollo humano de los matrimonios y jóvenes emefecistas comprometidos en el trabajo a favor de las familias para el engrandecimiento del Reino de Dios en nuestra Diócesis”. En la parte culminante de la reunión se mostró al Sr Arzobispo las 18 parroquias locales donde está presente el MFC, las 5 foráneas en tres municipios y las que están en proceso de integrarse que son una local y tres foráneas. Así mismo se le presentó

Los del MFC externaron sus dudas y propuestas, felicitaciones y agradecimientos al Sr. Arz., así como al P. Pedro Sánchez Solís y su equipo

a los matrimonios integrantes del equipo coordinador diocesano y el apostolado que desempeña cada uno en pro de las casi 800 familias , miembros del MFC en la Diócesis. Luego en una fraternal convivencia el Sr. Arzobispo compartió los alimentos con las familias asistentes. Finalmente fue el Pbro. Pedro Sánchez, Asesor Eclesial Diocesano del MFC, quien dirigió un mensaje de agradecimiento a Don Luis Morales. El MFC tiene como objetivo “Promover los valores humanos y cristianos en la familia, para que esta sea formadora de personas, educadora en la Fe y defensora de la vida” por lo que se invita a todos aquellos matrimonios interesados en fortalecer su familia, a integrarse a este movimiento que en San Luis Potosí existe desde hace 51 años y que tiene presencia en toda la república y muchos países en el mundo.

Los integrantes del Movimiento Familiar Cristiano en abierto diálogo con Don Luis, con quien platicaron con toda confianza


Un circo sin carpa para fabricantes de sueños Por Ricardo Gromero

L

a fábula es uno de los géneros literarios más antiguos, su primera aparición fue en la India, luego en China y así en el resto del oriente, más tarde en Roma y Grecia, con personajes fantásticos; dragones, seres gigantes que en lugar de pies tienen patas o ruedas; haciendo actividades que el hombre común nunca haría, sin embargo hoy por hoy, se pueden observar fabulísticas personas por las calles de nuestra ciudad, como los actores de los circos. Casi al término de la tarde en variedad de camellones y plazas, podemos ver el ya clásico e histórico payasito, el inigualable hombre de fuego, los hábiles malabaristas y uno que otro danzarín, sin dejar de mencionar a los simpáticos monociclistas. Ellos todos trabajan para un fin, una meta, un objetivo: sobrevivir, y obtener del público vehicular la aceptación, la sonrisa y la moneda. Moneda con la cual calmamos la conciencia, menguamos el efímero sentimiento de “compasión”. Pero ellos, hermanos nuestros,

no requieren compasión, ni lástima, ni monedas de las que nos sobran, (aunque peor es nada), más bien nos piden otra cosa, ¿qué cosa?; Jesús nos lo dice bien en aquel pasaje bíblico donde la viuda que no tenía en abundancia, dió frente a los ojos del Padre, todo lo que tenía. ¿Cuál Padre? El Padre que les ha servido de carpa, de protección, de providencia al “otro” que eligió o le eligieron ese tipo de vida urbano-cirquista. No podemos soslayar que algunos de estos trabajadores, tergiversan la honestidad de esta labor usando lo poco que ganan en falsas puertas, - falsas sí- pero no dejan de ser puertas para algunos de ellos (aunque este asunto es más complejo). Lo que nos queda es sabernos cristianos que lejos de todo prejuicio, tenemos la obligación de hacerlos respetar y respetarlos, si hacemos que esta fantasía, a ellos los ayude a vivir y a nosotros sensibilizarnos frente a una realidad dolorosa, pero inevitable.


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Templo Parroquial de

Por LCC Angélica Maldonado Morales

L

San José

as Fiesta Patronal de esta hermosa Parroquia se celebra cada 19 de Marzo y tiene por Santo Patrono, -como su nombre lo indica- a Nuestro Patriarca San José.

En 1878, Villa Hidalgo, según datos proporcionados por Rafael Zapata, Al descubrirse este territorio, le tocó al conquistador Ambrosio Martínez, darle el nombre de “Jaguey de Ambrosio Martínez”. En 1654 el sargento mayor de don Antonio Maldonado Zapata dueño de la hacienda de Peotillos, compró este sitio a Juan e Isabel, herederos de Martínez. El mismo año, el dicho señor Maldonado donó el lugar a María Méndez de Luna, “de quien resultaron Antonio, José y Nicolás Zapata que fueron los primeros pobladores y fundadores del lugar, dándole el nombre de San José de los Picachos por 1710. Los descendientes de estos Zapata, en 1857 solicitaron el título de villa para su pueblo, lo que se les concedió el 24 de Diciembre del mismo año; aunque la instalación del primer ayuntamiento tuvo lugar hasta el 14 de Agosto de 1858, que fue cuando le impusieron el nombre que hoy

en Villa Hidalgo, SLP última parte

lleva”. En 1803 los habitantes de San José de Picachos, pidieron al intendente de San Luis Potosí levantar una capilla, misma que fue sustituida por la actual que data de la primera mitad de siglo XIX. La comunidad había crecido considerablemente, y ante la ausencia de los carmelitas, que hasta entonces habían atendido la comarca, en el mes de abril de 1850 se obtuvo el nombramiento de Vicaría Fija con un sacerdote nombrado, la vicaría pertenecía aun a la Parroquia de Santa Isabel de Armadillo, algunos de los sacerdotes de esta época: P. Miguel Bear, P. Antonio García, P. Clemente Martínez y en 1887 el P. Augusto García. “Villa Hidalgo, hasta entonces sujeta a la parroquia de Armadillo, progresaba rápidamente; más que San Nicolás, razón por la que el ilustrísimo Sr. Montes de Oca la erigió Parroquia por decreto del 28 de Agosto de 1906, quedando formada por todos los ranchos que pertenecían al municipio de Villa Hidalgo, y cuyos límites son los mismos que tiene en lo civil”.


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¿N

o es verdad que hay fotografías en las que sinceramente no podemos reconocernos? Aunque las veamos desde todos los ángulos, no logramos salir de nuestra perplejidad. ¿Somos realmente nosotros? Pareciera que se trata más bien de extraterrestres venidos de quién sabe qué planeta. ¡Y pensar que habíamos ido al centro de revelado a recogerlas con anticipada emoción! «En ésta salí demasiado moreno –decimos al repasarlas con lentitud-, en aquélla con demasiados cachetes, y en esta otra mucho más inflado y gordo de lo que pensaba estar».

nieve. No fue menor mi indignación tras esta segunda fotografía; desde entonces jamás me interesaron las pruebas fotográficas, siempre me pareció que no había por qué sacar fotografías». ¡Sí, no hay para qué hacerlas: son tan engañosas! Y concluye así la experiencia de Walter Fendrich: «Mi padre, entonces, intentó calmarme diciéndome que sólo había una copia buena de todo aquello y que estaba en una cámara oscura desconocida por nosotros: la memoria de Dios».

Y cuando alguien nos pide que se las mostremos, ¡con qué artificios retóricos queremos convencerlos de que la experiencia no vale la pena! Y cuando ya las tiene en sus manos, ¡con qué brusquedad se las arrebatamos para que no las vea! ¿Cuál es la razón que nos impulsa a obrar así? ¿Por qué, en tales ocasiones, procedemos como verdaderos energúmenos? Lo que pasa es muy sencillo: sucede, para decirlo ya, que el espejo nos tenía acostumbrados a otra imagen, a una imagen mucho más benévola; pero he aquí que esta fotografía –esta fotografía, precisamente- ha venido a deteriorar la imagen que teníamos de nosotros mismos. «No pensé que tuviera las entradas tan grandes, ni que estuviera tan chato y tan acabado», gemimos llenos de dolor. Y rechazamos la fotografía, la rechazamos con vehemencia, diciendo en voz alta, casi gritando: -¡Pues ese que sale ahí no soy yo! Según nosotros, hay en ella algo que falta o algo que sobra, algo que quitó o no hizo ver suficientemente la luz al impresionar el negativo. Nos sentimos, para decirlo ya, como agraviados por los rayos del sol. Los amigos nos dicen con cierto sadismo: -¡Pues sí que eres tú, mírate bien! ¡Claro que eres tú! Y nosotros: -¡Que no, que no, que no soy yo! Ahora bien, nuestra indignación es justa. Una fotografía, por ser la imagen de un solo momento de nuestra vida –imagen determinada o deformada por mil circunstancias- no es nunca capaz de dar razón de nuestro misterio personal, de nuestro rostro verdadero. ¿No es verdad que se habla de fotogenia para referirse a ese extraño fenómeno que hace que unos salgan siempre bien en las

fotos, y de falta de ella para refe-rirse al hecho que otros salgan siempre mal? Que una fotografía no retrate nunca la imagen verdadera de las personas puede probarse mediante la siguiente experiencia: seres que en una fotografía nos parecieron excepcionales, ya en la vida de todos los días nos parecen de lo más ordinarios, mientras que quienes no destacaron gran cosa al ser fotografiados, ya en la vida nos parecen como rodeados de una aura casi mágica. No, la fotografía no dice lo esencial; en todo caso, no descorre el velo del misterio. En una novela de Heinrich Böll (1917-1985), El pan de los años mozos, hay una página bellísima acerca de la fotografía y sus misterios –mejor dicho, de la fotografía y sus engaños- que me permitiré citar por entero; en ella está hablando el protagonista de la historia, un tal Walter Fendrich, para contar la siguiente experiencia, acaecida tiempo atrás: «Pensé en la indignación que sentí cuando estuve un invierno en los Alpes con mis padres. Mi padre había fotografiado a mi madre ante un fondo de cumbres nevadas; ella tenía el pelo oscuro y llevaba un abrigo claro. Yo estaba al lado de papá cuando éste sacaba la foto; todo era blanco, excepto el pelo de mamá… Pero en casa, cuando papá me enseñó el negativo, parecía como si

una negra de pelo blanco estuviera situada ante enormes montones de carbón. Yo me indigné, y no me satisfizo la explicación química, que no era nada complicada. Siempre creí, y así lo seguía creyendo hasta entonces, que unas cuantas fórmulas químicas, con soluciones y sales, no bastaban para explicar el fenómeno. Más tarde, para tranquilizarme, papá fotografió a mamá con un abrigo negro ante unos montones de carbón en las afueras de nuestra ciudad; después, en el ne-gativo, vi a una negra de pelo blanco ante unas enormes montañas nevadas; sólo quedaba oscuro lo que era claro en la persona de mamá: su cara. En cambio su abrigo negro y los montones de carbón aparecían tan claros, tan resplandecientes, como si mamá estuviese sonriendo en medio de la

¡Excelente pedagogía! Sí, sólo en la memoria de Dios, en sus ojos, aparecemos como somos en realidad. Allí no hay fotogenia ni falta de ella: allí existimos en nuestra más pura verdad, pues los ojos de las cámaras se equivocan y siempre se equivocarán. Nuestra profunda verdad sólo hay uno que la conoce: Dios, y con saber esto debería bastarnos. El maquillaje que se ha puesto podrá hacernos creer que una persona es más bella de lo que es; una fotografía podrá hacernos creer que es incluso más fea de lo que nosotros creíamos: bien, todo esto no es más que apariencia. Dios sabe quiénes somos. Sólo Él nos conoce. Y esto nos tranquiliza porque entonces ya podemos ser nosotros mismos sin fingir y sin tratar de engañar adoptando extrañas poses frente a un flash que relampaguea. Cuando sabemos esto, ya no nos cuesta ser naturales, que es, por lo demás, la única condición de la


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¿N

o es verdad que hay fotografías en las que sinceramente no podemos reconocernos? Aunque las veamos desde todos los ángulos, no logramos salir de nuestra perplejidad. ¿Somos realmente nosotros? Pareciera que se trata más bien de extraterrestres venidos de quién sabe qué planeta. ¡Y pensar que habíamos ido al centro de revelado a recogerlas con anticipada emoción! «En ésta salí demasiado moreno –decimos al repasarlas con lentitud-, en aquélla con demasiados cachetes, y en esta otra mucho más inflado y gordo de lo que pensaba estar».

nieve. No fue menor mi indignación tras esta segunda fotografía; desde entonces jamás me interesaron las pruebas fotográficas, siempre me pareció que no había por qué sacar fotografías». ¡Sí, no hay para qué hacerlas: son tan engañosas! Y concluye así la experiencia de Walter Fendrich: «Mi padre, entonces, intentó calmarme diciéndome que sólo había una copia buena de todo aquello y que estaba en una cámara oscura desconocida por nosotros: la memoria de Dios».

Y cuando alguien nos pide que se las mostremos, ¡con qué artificios retóricos queremos convencerlos de que la experiencia no vale la pena! Y cuando ya las tiene en sus manos, ¡con qué brusquedad se las arrebatamos para que no las vea! ¿Cuál es la razón que nos impulsa a obrar así? ¿Por qué, en tales ocasiones, procedemos como verdaderos energúmenos? Lo que pasa es muy sencillo: sucede, para decirlo ya, que el espejo nos tenía acostumbrados a otra imagen, a una imagen mucho más benévola; pero he aquí que esta fotografía –esta fotografía, precisamente- ha venido a deteriorar la imagen que teníamos de nosotros mismos. «No pensé que tuviera las entradas tan grandes, ni que estuviera tan chato y tan acabado», gemimos llenos de dolor. Y rechazamos la fotografía, la rechazamos con vehemencia, diciendo en voz alta, casi gritando: -¡Pues ese que sale ahí no soy yo! Según nosotros, hay en ella algo que falta o algo que sobra, algo que quitó o no hizo ver suficientemente la luz al impresionar el negativo. Nos sentimos, para decirlo ya, como agraviados por los rayos del sol. Los amigos nos dicen con cierto sadismo: -¡Pues sí que eres tú, mírate bien! ¡Claro que eres tú! Y nosotros: -¡Que no, que no, que no soy yo! Ahora bien, nuestra indignación es justa. Una fotografía, por ser la imagen de un solo momento de nuestra vida –imagen determinada o deformada por mil circunstancias- no es nunca capaz de dar razón de nuestro misterio personal, de nuestro rostro verdadero. ¿No es verdad que se habla de fotogenia para referirse a ese extraño fenómeno que hace que unos salgan siempre bien en las

fotos, y de falta de ella para refe-rirse al hecho que otros salgan siempre mal? Que una fotografía no retrate nunca la imagen verdadera de las personas puede probarse mediante la siguiente experiencia: seres que en una fotografía nos parecieron excepcionales, ya en la vida de todos los días nos parecen de lo más ordinarios, mientras que quienes no destacaron gran cosa al ser fotografiados, ya en la vida nos parecen como rodeados de una aura casi mágica. No, la fotografía no dice lo esencial; en todo caso, no descorre el velo del misterio. En una novela de Heinrich Böll (1917-1985), El pan de los años mozos, hay una página bellísima acerca de la fotografía y sus misterios –mejor dicho, de la fotografía y sus engaños- que me permitiré citar por entero; en ella está hablando el protagonista de la historia, un tal Walter Fendrich, para contar la siguiente experiencia, acaecida tiempo atrás: «Pensé en la indignación que sentí cuando estuve un invierno en los Alpes con mis padres. Mi padre había fotografiado a mi madre ante un fondo de cumbres nevadas; ella tenía el pelo oscuro y llevaba un abrigo claro. Yo estaba al lado de papá cuando éste sacaba la foto; todo era blanco, excepto el pelo de mamá… Pero en casa, cuando papá me enseñó el negativo, parecía como si

una negra de pelo blanco estuviera situada ante enormes montones de carbón. Yo me indigné, y no me satisfizo la explicación química, que no era nada complicada. Siempre creí, y así lo seguía creyendo hasta entonces, que unas cuantas fórmulas químicas, con soluciones y sales, no bastaban para explicar el fenómeno. Más tarde, para tranquilizarme, papá fotografió a mamá con un abrigo negro ante unos montones de carbón en las afueras de nuestra ciudad; después, en el ne-gativo, vi a una negra de pelo blanco ante unas enormes montañas nevadas; sólo quedaba oscuro lo que era claro en la persona de mamá: su cara. En cambio su abrigo negro y los montones de carbón aparecían tan claros, tan resplandecientes, como si mamá estuviese sonriendo en medio de la

¡Excelente pedagogía! Sí, sólo en la memoria de Dios, en sus ojos, aparecemos como somos en realidad. Allí no hay fotogenia ni falta de ella: allí existimos en nuestra más pura verdad, pues los ojos de las cámaras se equivocan y siempre se equivocarán. Nuestra profunda verdad sólo hay uno que la conoce: Dios, y con saber esto debería bastarnos. El maquillaje que se ha puesto podrá hacernos creer que una persona es más bella de lo que es; una fotografía podrá hacernos creer que es incluso más fea de lo que nosotros creíamos: bien, todo esto no es más que apariencia. Dios sabe quiénes somos. Sólo Él nos conoce. Y esto nos tranquiliza porque entonces ya podemos ser nosotros mismos sin fingir y sin tratar de engañar adoptando extrañas poses frente a un flash que relampaguea. Cuando sabemos esto, ya no nos cuesta ser naturales, que es, por lo demás, la única condición de la


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Contrapunto

La grandeza de los hijos de Dios hay seres humanos grandes ni pequeños, en todo caso el ser humano es pequeño y frágil, es de abajo, de aquí, de la tierra, ¿qué es un gigante en el cementerio? Lo mismo baja el coloso que el microscópico; pero, el que es pequeño cuando menos se queda en su lugar, queda en donde pertenece. Pero ¡que pena me dan los que caen de las alturas, los que después de estar en las cumbres o parecer estarlo descienden terriblemente a las bajuras!

“Cuando alguno se siente demasiado grande significa que su mundo es demasiado pequeño”

E

n verdad que los seres humanos pensamos al revés de Dios. Él prefiere a los pequeños, para hacerlos grandes; a los que se creen grandes Él los empequeñece, porque el único verdaderamente grande es Él. Nos amargamos la vida esperando ser alguien en ella. Vivimos a la espera de oportunidades de ser mejores, de destacar, de ocupar buenos puestos; queremos ser admirados por muchos o por pocos, cuando menos por los que comparten nuestro entorno, profesión, credo, trabajo, queremos ser bien vistos por los demás, parece que vivimos de su aprobación. Si no hablan bien de nosotros nos sentimos vacíos, pequeños, insignificantes; por eso nos esforzamos en ser triunfadores, en ser aplaudidos; el fracaso no debería existir, para nosotros; sí para los demás, pues, mientras otros sean los fracasados, nosotros seremos triunfadores. Nos fascina que nos

saluden por las calles, en las oficinas, en los juzgados, en las aulas, en las plazas, y nos encanta pensar que los demás tienen una buena opinión acerca de nosotros, o al menos sienten envidia por lo bien que nos va, y que consideren que somos como un ejemplo a seguir en cuanto a logros, esfuerzos y ascensos. Somos vanidosos. Y cuando escalamos altas cimas de prestigio personal y de reconocimiento ajeno, no tenemos la madurez para el triunfo y entonces nos llenamos de orgullo propio, consideramos que nuestra gloria es merecida por nuestro tesón ante las adversidades, o por el trabajo difícil y sacrificado que hemos realizado para llegar a ocupar altos niveles en la sociedad y en nuestro pequeño mundo. Entonces, cuando nos sabemos enormes, por nuestra falta de adultez, creemos ser la norma, el canon, el paradigma,

(Pinjás Continxo)

nos sentimos colosales, nos consideramos guías, maestros o padres, de tal suerte que hasta podemos sugerir a otras personas diversos caminos para alcanzar el éxito, la perfección, la fama o la gloria; no faltará quien desee imitar nuestro ejemplo para tener también ciertos ascensos en la vida, en la política, en la educación, en la cultura, en los negocios, en el juego, en las relaciones humanas; y nos dejamos saludar por ellos, y permitimos que nos llamen maestros, que se quiten el sombrero cuando nos ven, pero ellos no son nuestros discípulos, son nuestros admiradores; en realidad son iguales a nosotros, pero nuestro gigantismo nos impide ver hacia abajo; somos admirados y parece ser lo único que importa; somos los poderosos, los sabios, los fuertes, los amos, los intocables, los buenos, los perfectos... los inalcanzables.

Sin embargo, en realidad no

Es laudable vivir una vida de esfuerzo por permanecer en un buen lugar de alturas, siempre y cuando ese lugar sea digno de una persona, de un hijo de Dios, pues el ser humano está llamado a las alturas; pero, para ir allí es preciso saber vivir en lo que está abajo, ahí está la verdad; ahí nos identificamos como pobres y débiles seres humanos, necesitados de ascender, de rebelarnos ante la condición de pequeñez, pero también es ahí donde se asoma constantemente Dios, el creador nuestro, que nos llama constantemente a la grandeza y a las alturas... conviene pues, querer subir alto, pero en dignidad, en santidad, en perfección, en no subir a punta de pisotones, dejando a otros por debajo; es oportuno vivir deseando las alturas, pero no las de este mundo, no las de la gloria efímera, no las del gigantismo, sino las de la verdadera grandeza, las alturas de Aquel que siendo rico se hizo pobre; las de Aquel que nos enseña que la tierra puede subir al cielo; las alturas del que siendo Dios se hizo hombre; las de Aquel que no quiere que nadie se sienta demasiado alto, porque no le gusta humillar a nadie: Él prefiere a los que se saben diminutos, últimos, pequeños, porque si algo le fascina es enaltecerlos, porque es el Padre, el Maestro, el Guía. ¿Alguno desea llegar muy alto? Agáchese ante el Señor, déjese guiar por Él.


Palabra de Dios

Desde el Corazón de la Diócesis

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Fiesta de San José, Fiesta del Seminario

Que se amen

los unos a los otros como yo los he amado

Por Víctor Javier Morales Soldevilla. 3° de Teología

Evangelio según San Juan (13, 31-33. 34-35)

C

uando Judas salió del cenáculo, Jesús dijo: “Ahora ha sido glorificado el Hijo del hombre y Dios ha sido glorificado en Él. Si Dios ha sido glorificado en Él, también Dios lo glorificará en sí mismo y pronto lo glorificará. Hijitos, todavía estaré un poco con ustedes. Les doy un mandamiento nuevo: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado; y por este amor reconocerán todos que ustedes son mis discípulos”. Palabra del Señor

Nuestra tarea es amar El Señor Jesús en el Evangelio de este quinto domingo de Pascua, lanza nuestro cristianismo al extremo, nos da la tarea más importante de la vida, tarea por la que tiene sentido todo: “Les doy un mandamiento nuevo que se amen los unos a los otros como yo los he amado…” Quedando claro que la tarea más importante del cristiano es amar, amar como Dios nos ama; porque las propuestas que el mundo nos ofrece son muchas y muy confusas, la manera como en ocasiones la vida nos presenta el amor, nada tienen que ver con el amor auténtico. Porque amar no nada mas es sentir bonito, suspirar mirando al cielo, ver la vida color de rosa, los abrazos y los besos, esto es lo romántico del amor, que tal vez en algún momento de la vida es lo importante. Pero amar va mas allá, amar nos enseña el Señor Jesús es: dar la vida, entregar todo mi ser, como el lo hizo en la cruz; amar es derramar hasta la última gota de sangre. Con justa razón la beata madre Teresa de Calcuta decía: “hay que amar hasta duela…” San Juan nos dirá: en esto consiste el amor, no en lo que nosotros hayamos amado a Dios, sino en el que nos amó primero. Nos amó dándonos lo más valioso y lo único que el tenía: a su Hijo, para que muriera en la cruz y salvarnos, es gracias a este amor por el que hombres y mujeres somos capaces de amar. Además dice el Señor: en esto conocerás que son mis discípulos, en que se aman, como Dios los ama. Y Dios nos ama con una amor desinteresado, acogedor, servicial, tierno y fiel. Sólo el amor hace que la vida merezca la pena ser vivida y sólo desde el verdadero amor es posible experimentar la gran alegría de vivir. Esta es la tarea gozosa del creyente en esta sociedad donde se falsifica tanto el amor. Por José de Jesús Cruz Rodríguez

C

ada año el Señor nos concede celebrar la fiesta de San José, a cuyo patrocinio, junto con Santa María de Guadalupe, ha sido encomendado nuestro Seminario Diocesano. Uno de los motivos por los cuales el Seminario ha sido encomendado al amparo e intercesión de San José es, sin lugar a dudas, el ofrecer a los futuros pastores, un modelo de amor ejemplar e incondicional al Señor, como el que vivió José el Carpintero de Nazaret, un amor tal que le llevó a poner sus planes personales en orden al Plan que Dios le tenía preparado y le invitaba a vivir.

delante es misión del propio Señor, quien, por el Espíritu Santo les asistirá para llevarla a cabo. • Pureza. San José fue llamado por Dios para ser el guardián de la pureza del Verbo Encarnado, y de la pureza de la Madre de Dios. Del mismo modo el seminarista ha de amar la pureza como virtud que lo va configurando con el mismo Jesucristo, por ello ha de invocar a San José para que le ayude a buscar la pureza del corazón para acercarse sinceramente a Jesucristo y, habiéndolo encontrado, lleve al pueblo de Dios a acercarse al mismo tesoro que él ha decubierto.

• Obediencia. El ángel dijo a José: “Levántate, toma contigo al niño y a su madre y huye a Egipto; allí estarás hasta que te avise… Él se levantó, tomó de noche al niño y a su madre, y se retiró a Egipto” (Cfr. Mt.2, 13-14). “El verdadero obediente no pone tiempo en medio” . San José, en cuanto descubre la voluntad de Dios, se levanta y se pone en marcha, sin buscar excusas ni pretextos, confiando plenamente en la providencia de Dios. La obediencia, en el seminarista, ha de ser, como lo fue en San José, un acto de amor y donación de la propia voluntad a Dios, para hacer propia la voluntad divina. Humildad y la pureza de corazón han de llevar a vivir la obediencia, como expresión de la vivencia de Así como San José es venerado las virtudes a semejanza de José, como patrono de los trabajos, esposo de María y custodio del también es reconocido por las Señor Jesús. virtudes que encarnó en su vida, esas virtudes que los futuros San José, además de ser patrono sacerdotes han de intentar vivir del Seminario Diocesano, es paa semejanza de él, para ser ver- trono del mundo obrero, de los daderos pastores en quienes se hogares cristianos, de los niños cumpla el Plan de Dios. De estas y los jóvenes, quienes encuentran virtudes no podemos dejar de en él a un padre valiente para mencionar las siguientes: acompañarlos en las difíciles luchas que día con día van librando • Humildad. Entre todos los fa- en el mundo hedonista y materiavores que Dios concedió a San lista, en el que nos encontramos José decimos, que esta virtud, es inmersos la más preciosa, de ella se derraman las demás. Se debe a su hu- Debemos concluir dando gracias mildad y el reconocimiento de su a Dios porque nuestro Seminario pequeñez al misterio de Dios, que se encuentra bajo la protección el Señor Jesús lo escogió como de San José Obrero, quien nos ha padre singular y guía . A seme- enseñado a amar a Jesús sobre janza de san José los seminaris- todas las cosas, y a elegir el celitas han de vivir la humildad como bato y la virginidad por amor al virtud primordial, reconociendo Reino de los Cielos. que toda la obra que tienen por No es leyenda honrar a San José como patrono de los trabajos. La Sagrada Escritura acentuó el oficio por el que José se ganaba la vida, era, como bien sabemos, carpintero. En oriente antiguo, la artesanía, carpintería eran oficios distinguidos (a pesar de que en el Evangelio se trataba de humillar al Señor aludiendo al oficio de su padre, llamándole el “hijo del carpintero”). José fue pobre, pero tenía lo suficiente para vivir con modestia como fruto de su trabajo de carpintero. Los rabinos ponderaban por igual el trabajo manual y el intelectual y recordaban a los padres que educarán a sus hijos haciéndoles aprender un oficio.


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Dimensiones

roles profesionales son temporales. Algún día dejaremos de ser vendedores, contadores, maestros o arquitectos. Otra persona, más joven, nos reemplazará cuando nos retiremos. La compañía a la que dedicamos tantas “horas extra” continuará sin nosotros. En el trabajo, nadie es imprescindible. Por el contrario, nuestro lugar en la familia es un “ROL DE POR VIDA”: lo desempeñamos desde que nacemos hasta que dejamos de existir. Cada uno de los miembros son imprescindibles. Uno de los peores sentimientos es cuando nos damos cuenta de que cosas importantes de nuestra vida, como la FAMILIA, están en segundo o tercer lugar en nuestras prioridades... cuando no en el último. ¿Vivir con menos dinero? Un popular refrán dice “el dinero va y viene”. El tiempo no.

La familia no es negociable Por Zayda Flores.

S

i realizáramos una encuesta entre la población adulta, la mayoría diría que la familia es su principal prioridad. La pondrían incluso por encima de su propia salud y hasta algunos llegarían a decir que morirían por ella. Sin embargo, si observamos de cerca nuestro estilo de vida -y particularmente en dónde invertimos nuestro tiempo- veremos que la familia está subordinada a otros valores como el trabajo, el desarrollo de una carrera, el dinero y otros pasatiempos. La mayoría observamos una “brecha” entre lo que realmente sentimos como importante y el modo en que vivimos. Cuando reconocemos esta brecha, inmediatamente nos justificamos... “En mi empresa la competencia es feroz. Si no me esfuerzo, me des-

pedirán y buscarán alguien más comprometido. Entonces, ¿quién alimentará a mi familia?” “¿De qué me sirve tener la tarde libre para jugar con los chicos si no puedo pagarles distracciones o llevarlos de paseo porque el sueldo no me alcanza?” “Con mi esposa ya compartí bastante tiempo cuando éramos novios. Ya llevamos cinco años de casados y las prioridades cambiaron. Entendemos que es normal no tener tiempo para nosotros. A todos nuestros amigos les sucede” Pero “demos vuelta al juego” y cambiemos de óptica: no comencemos pensando que el trabajo no es negociable y la familia si lo es. Al contrario: LA FAMILIA ES LO VERDADERAMENTE IMPORTANTE Y NO ES NEGOCIABLE. Nuestros

Tener menos dinero y más tiempo podría incrementar su calidad de vida familiar. Desde luego, muchas familias no pueden encontrar en esta elección su solución: enfrentan problemas más acuciantes que les impiden renunciar a una parte de sus ingresos. Pero hacer de la familia una prioridad real les llevará a explorar sus propias alternativas. Nada se compara con la felicidad de hacer de la familia la más alta prioridad. Con tantas presiones no siempre es fácil hacerlo. Pero es mucho más difícil no hacerlo: cuando no invertimos tiempo en nuestra familia, para unirla y fortalecerla, después tendremos que pagar un costo mucho más elevado reparando relaciones rotas, salvando un matrimonio, o recuperando el tiempo perdido con nuestros hijos. ¿Es necesario reaccionar YA y no tan tarde? Será triste llegar a viejos y decir ¿Por qué no lo hice antes? ¡Ah!, pero lo olvidé…….estuvimos ocupados, muy ocupados...

Reunión de

evaluación y seguimiento

Parroquia Santa Cruz Salitral de Carrera, SLP Domingo 18 de abril de 2010

L

a Dimensión de Pastoral Familiar acompañó este domingo 18 de abril al equipo de Pastoral Familiar Parroquial de la comunidad de Santa Cruz del Salitral, a su celebración Eucarística y a la Hora Santa, que presidió el Pbro. Pedro Sánchez Solis, ambos oficios por las familias de la comunidad. Posteriormente se llevó a cabo la reunión de evaluación y seguimiento de los trabajos que se están desarrollando por este equipo en el Salitral de Carrera y las otras comunidades que pertenecen a la Parroquia. Fue un encuentro que se vivió con alegría al saber que se está trabajando en pro de las familias acorde a nuestro Plan Diocesano de Pastoral en su numeral 312-4.


MAYO 02 DE 2010

SANTO CURA DE Pasada la emoción...

Son favores de Santa Filomena, a quien siempre pido que interceda por mi ante el Señor. En verdad, el Santo Cura de Ars, tenía una capilla consagrada a Santa Filomena, con algunas reliquias de ella.. No sé cómo puede lograr tantos prodigios... El pueblo de Ars ha cambiado mucho gracias a usted Cierta vez, ocurrió un episodio muy gracioso... unas señoras ricas murmuraban... La caridad debe ser pareja...

Jesusito de mi vida, eres niño como yo por eso te quiero tanto y te doy mi corazón tómalo, tuyo es y mío no.

Se debe convidar lo que se tiene, sin pensar si lo necesita o no, quien lo recibe...

¿Qué quieres decir Eugenia?

Colección Vidas Ejemplares, Buena Prensa.

Encuentra el camino, para llegar hasta Jesús que te llama

Que si el Señor Cura lo reparte todo entre los pobres, bien podría dar algo a los que no lo son. Le diré que nos invite a comer.

CONTINUARÁ…


MAYO 02 DE 2010

Cinco Jueves, a partir del 29 de abril al Jueves 27 de mayo, 2010 CÁLIZ COPONES CUSTODIAS CANDELEROS FLOREROS IMÁGENES EN BULTO RELICARIOS CRISMERAS LAVABOS SAGRARIOS VINAJERAS RECLINATORIOS INCIENSARIOS ALCANCÍAS MANTELES ORNAMENTOS

Lugar: Damián Carmona 115, Zona Centro, S.L.P. Horario de 7:30 pm a 9:00 pm Expositor: Pbro. Elías Rangel Salazar

Salvador González Guzmán

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¿Le duelen mucho las rodillas?

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¿Le han dicho que el único tratamiento es la cirugía?

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