¡Envía tu Espíritu,
Año 11
No. 532
Semana del 09 al 15 de junio de 2019
Señor,
para renovar la tierra!
L
a Solemnidad de Pentecostés, se distingue por su importancia porque en ella se realiza lo que Jesús había anunciado que era el objetivo de toda su misión en la tierra; el verdadero fuego, el Espíritu Santo, ha sido traído a la tierra por Cristo, quien se ha hecho mediador del ‘don de Dios’ obteniéndonoslo con el mayor acto de amor de la historia: su muerte en la cruz”. En cambio, parece que no hay dificultad para habituarse “a muchos productos contaminantes para la mente y el corazón que circulan en nuestra sociedad –por ejemplo, imágenes que hacen un espectáculo del placer, la violencia o el desprecio hacia el hombre o la mujer. Se dice también que esto es libertad, sin reconocer que todo ello contamina, intoxica el alma, sobre todo de las nuevas generaciones, y acaba por condicionar la libertad misma. Ante esto, el viento impetuoso de Pentecostés remite a lo precioso que es respirar aire limpio, tanto con los pulmones –el aire físico- como con el corazón –el aire espiritual-, ¡el aire saludable del espíritu que es amor! Un aspecto característico del hombre moderno que, posesionándose de las energías del cosmos, hoy parece auto-afirmarse como dios y querer transformar el mundo excluyendo, dejando de lado o incluso rechazando al Creador del universo. La Solemnidad de Pentecostés se centra en Jesucristo, que ha traído a la tierra el Espíritu Santo, el amor de Dios que renueva la faz de la tierra purificándola del mal y liberándola del dominio de la muerte. Dios quiere seguir donando este ‘fuego’ del Espíritu Santo a cada generación humana, y naturalmente es libre de hacerlo como y cuando quiera; pero existe una “vía
normal”: Jesús, su Hijo Unigénito encarnado, muerto y resucitado, que ha constituido la Iglesia como su Cuerpo místico para que prolongue su misión en la historia. ¿Cómo debe ser la comunidad, para recibir el don del Espíritu Santo? Revivamos la experiencia en el Cenáculo, donde los discípulos “perseveraban todos unidos en la oración; así que la unidad de los discípulos es la condición para que venga el Espíritu Santo; y presupuesto de la concordia es la oración. Se trata de que Pentecostés no se reduzca a un simple rito o a una sugestiva conmemoración, sino que sea un evento actual de salvación. Para ello es necesaria la espera del don de Dios mediante una escucha humilde y silenciosa de Su Palabra. El Espíritu Santo, “el más fuerte”, donde entra expulsa el miedo; nos permite conocer y sentir que estamos en las manos de una Omnipotencia de amor: pase lo que pase, su amor infinito no nos abandona. Demostración de ello es el testimonio de los mártires, la valentía de los confesores de la fe, el intrépido impulso de los misioneros, la franqueza de los predicadores, el ejemplo de todos los santos, algunos incluso adolescentes y niños. Así mismo lo demuestra la existencia misma de la Iglesia, que, a pesar de sus límites y las culpas de los hombres, sigue atravesando el océano de la historia, empujada por el soplo de Dios y animada por su fuego purificante y purificador. Es la fe y la esperanza con la que repetimos hoy, por intercesión de María: ¡Envía tu Espíritu, Señor, para renovar la tierra!
De pañuelo verde al azul provida
L
a joven argentina Aneley Torrico, muestra un antes y un después en su posición frente al aborto. ¿Qué hizo a esta millennial de 19 años cambiar el pañuelo verde por el celeste provida? El 1 de marzo Aneley publicó en su cuenta de Instagram una imagen dividida en dos: a la izquierda se muestra ella posando con el pañuelo verde característico de la Campaña por el Aborto Legal; mientras que a la derecha se le ve con el pañuelo celeste que usan las agrupaciones provida. “Como verán en una foto estoy a favor del aborto, y en la otra ya no.” Confesó que “aunque en la foto que tengo el pañuelo verde estaba sonriendo y ‘feliz’ porque estaba luchando por el derecho a las mujeres, dentro mío sentía un enorme vacío, dentro mío me sentía la peor persona del mundo, había miles de complejos e inseguridades, me sentía cada vez peor”. “Iba a las marchas y me sentía la mujer más empoderada del mundo, leía sobre el feminismo y sentía que podía hacerlo todo. Pero cuando llegaba a mi casa y me quedaba sola en mi cama, ese vacío volvía”. En medio de esta situación, la joven relató que “algo en mi vida cambió, un día me levanté y me veía hermosa tanto por dentro como por fuera, un día me levanté y todos esos complejos se habían ido, un día me levanté y era realmente feliz y plena”. “Y no fue por mi voluntad humana, sino porque lo conocí a Él, porque conocí a Dios y desde ese día soy una persona nueva. Desde ese día entiendo lo importante que es mi vida, desde ese día entiendo lo importante que es la vida de cada uno de nosotros”, escribió Aneley. La joven explicó si bien creció en una familia religiosa, “con el pasar del tiempo me aparté porque sentía que no era para mí y tampoco sentía nada”. Esto hasta noviembre de 2018 cuando la invitaron a un campamento en San Carlos de Bariloche. Al principio se negó porque “estaba muy en contra sobre lo que la ‘iglesia establecía’, pero después de pensarlo dije que no me tendría por qué perder un viaje por tener pensamientos distintos”. La joven recordó que la primera noche les hablaron sobre el “alma fragmentada” y que eso le impactó. “Cuando la escuchaba no podía parar de llorar, sentía algo dentro mío muy difícil de explicar, cuando me di cuenta estaba de rodillas llorando. Al otro día tuvimos otra reunión y también me encontré con una experiencia similar”. Respecto a su posición frente al aborto, Aneley explicó que cuando estaba a favor “pensaba más que nada en el derecho de la mujer, no me enfocaba tanto en el niño, sino en la decisión que quería tomar la mamá, porque sentía que ella tenía la libertad de decidir cuándo era el tiempo de tener un bebé, y que si ella sentía que no entonces estaba bien”. “Ahora entiendo que cuando Dios te manda un hijo es una bendición, que no son tus tiempos sino sus tiempos, que todos somos propósito de Él sin importar la circunstancia en que te encuentres, sea económica, o con un padre ausente”, sostuvo.