Nacho Ca単ete 2012
patchwork
端bermench
Ombligo, umbilicus, ómphalos, cicatriz del nacimiento, rastro físico de un hecho d emocional, en relaciones de dependencia más o menos prolongada con el hogar sidiario de una realidad mayor y más compleja. En el individuo se genera otro pr El sufrimiento surge de las diferencias entre la realidad interior y la exterior: el co Esta relación de poder está en la base del crecimiento emocional; cortar estas d las cosas.1 Rompamos el cordón umbilical. Debe ser un corte consciente, con un cuchillo afil del hogar cómodo de los padres, primer baluarte del poder espiritual y terrenal. cional que consume el espíritu con el fuego de la represión y el caos incontrolad a caminar.
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McEVILLEY, Thomas, Anselm Kiefer. Let a thousand flowers Bloom. An
doloroso de separación de la madre. El cordón umbilical permanece en su forma r paterno. El principio de realidad primero es aquel generado en el hogar, subrincipio de realidad, hijo del anterior. ordón umbilical es la conexión entre realidades, el dominio de una sobre otra. dependencias son necesarias para entrar en sociedad conscientes del orden de
lado a base de pensamiento. El cuchillo de la negación escindirá mente y cuerpo . Anulará la separación de mente y cuerpo, el exceso de poder racional e irrado. Solo cuando nos negemos a nosotros mismos seremos capaces de empezar
nthony d’Offay, London, 2000 P. 12
En la antigua Grecia el Ómphalos de Delfos era el centro del universo. Era lugar de regeneración, fuente de poder, de nueva vida. En él confluían antiguas religiones ofídicas con el panteón helenístico. Se reciclaba el poder espiritual con una piedra que sellaba la unión de lo antiguo con lo nuevo. Era un huevo fálico, un símbolo andrógino que daba transición de un poder terrenal anímico-animal al poder etéreo del patriarcado. Júpiter, Zeus, rayo, era el poder aéreo, intangible. Una forma de dominio invisible y racional. Con Grecia surgen las ciudades estado primitivas, ancestros de las metrópolis modernas. Umbilicus Urbi Romae, ómphalos etrusco, era una suerte de monumento romano. Recordaba tres días al año la existencia de una realidad subterránea, poblada de muertos. Una serie de estructuras bajo la ciudad simbolizaban un poder subyacente. Aquello que no entendemos, bajo la piel de la ciudad, cuerpo del padre. En Constantinopla, Agia Sophia conserva un Omphalion, piedra redonda donde el Basilio recibía la corona del poder religioso y terrenal. La cripta de las catedrales y sus catacumbas llenas de muertos son desplazadas en el siglo XIX por un nuevo poder. De carácter tecnológico, éste tiene la capacidad de perforar las entrañas de Gea, racionalizando sus grutas con mecanismos capaces de transportar masas de gente. Son auténticos vasos sanguíneos, el individuo-célulacelda oxigena el cuerpo del padre, manteniendo con vida la metrópolis sistema. Julio Verne señala en un libro el acceso al centro del mundo, reducto de toda la mitología primitiva. Darwin va al mono, Gauguin a la Polinesia. Walter Benjamin busca en la ciudad el ómphalos, la fuente de energía mitológica, dentro de la modernidad. Con el psicoanálisis se racionaliza la parte oculta del ser humano. Leer psicoanálisis puede ser hasta nocivo, te encuentras con laberintos ajenos en los cuales se proyectan mecanismos de identificación. ¿Cómo vas a entender sino lo que te están contando? Comienzas a cargar con lastres lejanos en el tiempo y en el espacio.
El hombre llega a las estrellas y descubre el ruso que no hay dios allá arriba. Allí está la nada infinita, lo desconocido. La última frontera convierte al planeta madre en una esfera azul flotando en lo negro. No hay arriba ni abajo. Para llegar hasta allí, el hombre cabalga sobre un motor basado en la destrucción atómica, con nombre de sol naciente, Vostok, amanecer. Lo sostienen los sueños de millones de seres humanos que sentían la importancia del evento. Un paladín de la humanidad carga no solo con el peso de una misión propagandística sino con la esperanza del mundo.
“Y la recompensa a nuestros esfuerzos fue que, habiendo triunfado sobre la opresión y la oscuridad, hemos forjado las alas de fuego para nuestra nación… ¡y nuestro siglo!” 1 ¿Qué espacio queda para la sugestión de lo incomprensible? Todo está plagado de luces eléctricas que alejan la sombra, y de sombras chinescas que nos alejan de la verdadera oscuridad.
1 Monumento a los conquistadores del cosmos, Moscú, 1964. “Este monumento fue construido para conmemorar los extraordinarios logros del Pueblo Soviético en la exploración espacial”
El ocio es templo, templo de aire y dudosos conocimientos, depositario de los mitos iniciáticos, dirigidos a mantener a digado; cada vez más etéreo, muerto y consumido, mantenido con vida artificialmente, chupando energía de la tierra cada vez más tecnología y energía para llegar al espíritu de la gente y más mano de obra de individuos-célula-celda p trono de cemento y silicio. Su moral se extiende de forma enfermiza a través de virus, nanomáquinas y nuevas creen moral, hilo de Ariadna, cordón umbilical, está podrida.1
Nihil acepta La Nada Y en la Nada Nihild adora a Nihil En altares de fuego. ¿Hasta dónde? Mejor apagarse Que adorar a otro.
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DELEUZE, Gilles, Crítica y Clínica. Misterio de Ariadna según Nietzsche. Anagrama, Barcelona. 1996
analfabetos a los individuos-célula-celda, manteniendo el cuerpo desmembrado de un padre despera y el universo. A la Cucaracha Cuántica, mantener la ilusión le es cada vez más caro. El poder requiere para generar y regenerar la tecnología de dominio. El hombre superior asienta sus posaderas sobre su ncias. Mantener vivo al padre le sirve en sus propósitos de dominio. Sabe que su moral es la mejor. Su
Negra leche del amanecer la bebemos de tarde la bebemos a mediodía de mañana la bebemos de noche bebemos y bebemos cavamos la fosa en los aires allí no hay estrechez Vive un hombre en la casa que juega con las serpientes que escribe que escribe al oscurecer a Alemania tu cabello de oro Margarete escribe y sale de la casa y brillan las estrellas silba a sus mastines silba a sus judíos hace cavar una fosa en la tierra nos ordena tocad a danzar Paul Celant, Todesfuge, 1952
¿dónde está la piedra filosofal? En el tiempo, en un desdoblamiento del tiempo. El tiempo de nuestra interioridad. 1Un punto búsqueda constante de nosotros mismos basada en la ruptura con una imagen ajena, heredada por suma de ideologías, con tarias de lata.
La identificación con el elegido profundiza la herida del individualismo. El mito del poder personal queda tan lastrado que co oscura del fondo de la mente. El individuo carga entonces con un peso-culpa-mito externo a él. El hilo de otro, la Ariadna de adentrarse en el laberinto, pero cada uno precisa un hilo concreto. Una línea de vida, de flotación. Sino, no comprenderá al m laberinto standard, conduce a un monstruo standard, identificable y por ello, terrible en su aspecto al haber acumulado en to tantos individuos. El monstruo personal es, sin embargo, hermoso; esconde a la propia Ánima-animal, nuestra naturaleza. D poder, nuestra capacidad y resolución para enfrentarnos a aquello que se interponga entre lo que somos y lo que podemos del paraíso, el camino del superhombre, senda dorada, león. Al final, espera la niñez en la vejez, la eterna juventud de la de muescas, golpes y perseverancia. Es la tecnología del yo, entrando en la lucha entre civilización y naturaleza a un nivel personal.
Toda promesa de redención va cargada sin embargo de una dosis de dominio: de sumisión a una propuesta. La duda debe como método de proyección y ejercicio de pensamiento. La memoria es la herramienta de nuestras otras vidas, donde yoes encia. La inteligencia es la capacidad de extrapolar la memoria de una experiencia a una situación nueva con características El corazón debe ser padre de la duda en el laberinto de la mente. Sensaciones y presentimientos hablan del malestar incons
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DELEUZE, Gilles. Cuatro lecciones sobre Kant. Edición electrónica de http://www.philosophia.cl/ P. 21
o de inflexión en nuestra vida, una nstruida a base de imágenes identi-
onfunde genio y locura en una miseria e otro. Si, el hilo es necesario para monstruo. El hilo standard, en un orno a sí el aura de los monstruos de De ella extraeremos parte de nuestro s llegar a ser. Aquí está la promesa esinhibición pulida y afilada a base de
yacer en el poso de cada decisión anteriores nos hablan desde la expericomunes. sciente, del engaño a uno mismo.
La promesa de la felicidad está en la base del dominio: el estado del bienestar.
La energía requerida para mantenerlo es enorme, tanto a nivel planetario como individual, proporcional a la masa de ind El estado del bienestar ofrece un nivel de vida standard, básico, con una vida espiritual y material de diseño. La vía del crecimiento, requiere sin embargo salirse del diseño para ser dueño del propio dominio y crecer. Si la vida es sueño, mejor vivir el sueño propio que no el sueño ajeno.
dividuos adscritos a ĂŠl.