1 minute read
Condecorando una admirable carrera
Con edificaciones a lo largo y ancho del planeta, y sedes de su firma arquitectónica David Chipperfield Architects en ciudades como Londres, Berlín y Milán, Chipperfield hoy destaca por una carrera digna de admirarse, con un estilo evidente de modernidad altamente adaptable y al servicio del usuario y el entorno urbano, principios que este año le han hecho el merecedor del premio Pritzker. El miembro de la Orden del Imperio Británico gracias a su labor arquitectónica fue condecorado en marzo pasado en el Ágora de Atenas con el galardón arquitectónico, premio otorgado por su “compromiso con una arquitectura cívica discreta pero transformadora” ya fuese en el ámbito público o privado.
Su abstención siempre presente de alejarse de tendencias y modas arquitectónicas y seguir un estilo minimalista al servicio del entorno urbano y del usuario final fue un factor determinante para ser acreedor de este reconocimiento, destacando la aplicación de la sustentabilidad real en sus proyectos, eliminando recurso, elementos y ornamentos innecesarios para un funcionamiento arquitectónico óptimo.
Advertisement
Solo basta con echar un vistazo al amplio acervo de edificaciones que forman parte del portafolio y carrera de este increíble arquitecto para entender y corroborar los porqués de este reconocimiento más que merecido. La arquitectura contemporánea debe buscar una funcionalidad y sustentabilidad antes que la apariencia estética lujosa y costosa que muchos buscan en nuestra era. Si bien un diseño agradable a la vista es crucial en esta profesión, equilibrar las necesidades, recursos y la estética para concebir edificaciones modernas es algo que todo profesional debe buscar en esta industria, y para entenderlo, el acervo de Sir David Chipperfield está ahí para ilustrarnos mejor sobre lo que es necesario para llevar a cabo la arquitectura contemporánea.