Sacrificios humanos

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Sacrificios humanos. Era precolumbiana

Del latín sacrificĭum, un sacrificio humano es la ofrenda de un ser humano a una deidad en señal de homenaje o expiación. En sentido amplio, es toda muerte ritual de una o muchas personas a manos de un tercero o de una institución. Buluc Chabtan, dios de la muerte violenta y de los sacrificios humanos


Los sacrificios humanos fueron practicados en muchas culturas antiguas. Se mataba a las vĂ­ctimas ritualmente de una forma que pretendĂ­a apaciguar a los dioses

templo Huitzilopochtli


Religion Olmeca Una religión politeísta,

Altar 4 La Venta. Aunque el registro arqueológico no incluye representación explícita de la sangría olmeca, los investigadores han encontrado otras evidencias que los Olmecas practicaban ritualmente. Señor de Las Limas


Toltecs

Tezcatlipoca. Es el señor del cielo y de la tierra, fuente de vida, tutela y amparo del hombre, origen del poder y la felicidad, dueño de las batallas, omnipresente, fuerte e invisible.

Los toltecas asociaban la práctica de sacrificios humanos a la veneración de Tezcatlipoca. En la mitología mexica, a partir de las reformas de Tlacaélel el sacrificio era el recurso humano para salvar al universo de su destrucción, asegurando la supervivencia del sol, y con ello la vida misma. Un ciclo de 18,980 días se repetía cada 52 años, al término del cual el «Quinto Sol» (Nahui Ollin) corría el riesgo de extinguirse para siempre, y la tierra de ser dominada por seres de la noche. Un enemigo debía entonces ser sacrificado en el monte Huixachtépetl para hacer brotar el fuego nuevo, después de lo cual sangre y corazones humanos debían, periódicamente, nutrir al dios en los siguientes 52 años. La práctica servía también a una estrategia de dominación: garantizar los privilegios de las clases dominantes.


Sacrificios aztecas

Upurēšana a i=dziļu nozīmi, šovs, mūzika, rits

La practica de los sacrificios humanos en el acto ritual más sencillo de acción de gracias los Aztecas creían que el ofrecer la misma vida de un cautivo mantenía la prosperidad de su pueblo tener prisioneros para ofrecerlos a los dioses Los prisioneros de guerra eran sin lugar a dudas, la ofrenda más apreciada en raras ocasiones se mataban niños y mujeres en los ritos de fertilidad para asegurar el crecimiento y prosperidad de el pueblo.



Los rituales del calendario mexica


Maya

El sacrificio de prisioneros recreaba el mito cósmico y fue clave en la ideología de los señoríos mayas.


Durante la ĂŠpoca precolombina, del sacrificio humano en la cultura Maya fue la ofrenda ritual de alimento a los dioses. La sangre fue visto como una potente fuente de alimento para los dioses mayas y el sacrificio de un ser viviente es una poderosa sangre que ofrece


Sangre y por extensión el corazón, es el elemento central de la etnografía y la iconografía de sacrificio, y su uso a través de ritual establecido o renovado para los mayas una conexión con lo sagrado que es para ellos es esencial para la existencia misma del orden natural La sangre y sacrificios humanos eran omnipresentes en todas las culturas de Mesoamérica precolombina, pero más allá de algunas generalizaciones indiscutibles no hay ningún consenso entre los eruditos en las cuestiones más amplias (y los misterios específicos) se plantea. Mayoría de los eruditos están de acuerdo que ambas prácticas se presentaron entre los Olmecas hace por lo menos 3.000 años y han sido transmitidas a las culturas posteriores, incluyendo la Maya


Inca

Los Incas practicaron la capacocha, una inmolación ritual de niños que puede traducirse como “Obligación real”. Según documentación histórica, se realizó la ceremonia de la capacocha en la celebración de eventos clave como la muerte del emperador, el nacimiento de un hijo real, una gran victoria en la batalla o un evento anual o Bienal en el calendario incaico. También se realizó para detener o prevenir las sequías, terremotos, erupciones volcánicas y las epidemias.


Los sacrificios eran parte esencial de las practicas religiosas incaicas. Las grandes ocasiones requerían sacrificios animales o humanos, pero lo más casual era que consistieran en ofrendas de flores, bebidas, o vestidos que eran arrojados al fuego sagrado. También como ofrenda estaba la coca. Esta no solo se ofrendaba a los dioses, sino que también la tomaban los sacerdotes en determinadas ceremonias, la cual les provocaba visiones.


Los sacrificios a seres humanos sucedían solamente en épocas de terribles dificultades. Aquellos que eran elegidos, para ser sacrificados se consideraban altamente honrados; tal honor recaía por lo general sobre los niños y jóvenes mas hermosos, de cualquiera de los dos sexos, y la víctima marchaba al sacrificio esperando una vida placentera en el otro mundo.


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