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Avivamiento Universidad

Fuente: Protestante Digital

Parecía una jornada habitual en la

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Universidad de Asbury, en Kentucky, Estados Unidos. Como cada mañana de miércoles, la capilla acogía el culto semanal. Esa reunión de febrero, sin embargo, no terminó en su hora planeada.

Desde entonces, miles de personas llegaron hasta la capilla de Asbury para participar en lo que muchos definieron como un «avivamiento». En tiempos de redes sociales, pronto se convirtió en uno de los temas más comentados entre cristianos que siguieron con curiosidad, y también con emoción, lo que ocurría en esta universidad.

En la universidad recuerdan que, en 1970, hubo también un movimiento espiritual que marcó a una generación. Algo más de cincuenta años después, otra vez miles de personas, la mayoría jóvenes, se congregaron para adorar, orar, compartir la Palabra, animarse unos a otros con testimonios y «llenarse de la presencia de Dios».

El culto que no terminaba estuvo marcado por la sencillez. Música suave, orden, sin figuras destacadas ni e s t r i d e n c i a s . L o s q u e a s i s t í a n transmitieron la sensación de estar «viviendo algo sagrado».

Ese miércoles por la mañana tomó la palabra uno de los pastores, Zach Meerkreebs, para exponer sobre Romanos 12:9-21, un sermón de unos 25 minutos que se centró en el llamado al amor que expone el apóstol Pablo. El predicador invitaba a los presentes a reconsiderar el amor, una palabra tan manoseada en la cultura actual, para recuperar su sentido bíblico, que implica mucho más que una emoción.

Durante la enseñanza, enfatizó la necesidad de que el Espíritu Santo sea quien produzca este fruto en el creyente. «Nos sentimos hipócritas, nos sentimos dolidos al darnos cuenta de que no damos la talla. Espíritu Santo, muévete, sánanos, muéstranos tu verdadero amor», oraba Meerkrebs.

«No puedes amar hasta que eres amado por Jesús. Deja de esforzarte o de llevar esta carga. Tú has sido amado. Descansa en Jesús para ser amado y que de esta forma puedas amar a otros», decía el pastor «En la medida que experimentes el amor de Dios, podrás perdonar y amar a otros. Necesitamos este amor en este país, Jesús, reavívanos por tu amor».

Tras terminar el sermón, muchos siguieron cantando, orando. Profesores y estudiantes comenzaron a sentir «que ocurría algo especial».

«Nadie esperaba que esto sucediera. No en un miércoles al azar seguro. Sin embargo, nos sentamos y cantamos sobre el amor de Dios que se derrama y su bondad», explica un estudiante.

«Ha habido momentos de testimonio, lectura de las Escrituras y oración, en privado y en público, lo que sea que el Espíritu haya querido hacer Diferentes líderes trabajaron para que el día t ra n s c u r r i e ra m i e n t ra s Di o s l o dispusiera».

La información corrió con velocidad. A través de las redes sociales, los jóvenes comenzaron a contar lo que estaban viviendo. El día siguiente comenzaron a llegar estudiantes de otras ciudades para unirse. Cada día, desde entonces, han ido llegando más y más personas a Asbury

A pesar de la afluencia masiva, los participantes explican que todo transcurre con paz y emoción. Pastores de distintas tendencias se han acercado también y se fueron publicando distintas valoraciones, aunque la perspectiva general fue de respeto y emoción ante lo que está ocurriendo en la universidad, de doctrina metodista. Como comenta Daniel Slavich en Twitter, que se ha acercado hasta allí este miércoles, «hay una gozosa y ansiosa devoción a Jesús aquí. Jesús es la ´estrella´, y esa es una marca de un mover genuino del Espíritu».

Nota: Otras noticias posteriores reportaron que llegó gente de muchos estados y aun de otros países para participar en esta bendición, y que otros campus universitarios empezaron a experimentar avivamientos también.

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