Claves del éxito de una historia de cooperación entre competidores. Este caso presenta la colaboración entre un grupo de cocineros vascos que, unidos por unos ideales vinculados con la transmisión de la cultura y gastronomía vasca, han conseguido unos objetivos que hace 35 años eran del todo impensables: colocar a Donostialdea y, en general, al País Vasco como referente internacional de la alta cocina. Todos ellos tienen y han tenido siempre presente que mucho más importante que el beneficio personal es el del grupo, incluyendo dentro del grupo no sólo al resto de cocineros, sino también a todos los colaboradores de su entorno. Uno de los frutos que será una realidad a partir de Septiembre de 2011 es el Basque Culinary Center en el que todos ellos tienen puestas muchas esperanzas, no sólo para formar a grandes cocineros sino de forma más amplia, a grandes profesionales con valores.