LOS EJERCICIOS DE PIEDAD Dentro de las acciones de la Iglesia podemos reconocer las acciones litúrgicas, que son actos sagrados que han sido instituidos por Cristo y la Iglesia, que son realizados por ministros de la Iglesia, y que cuentan con libros litúrgicos que ordenan la manera y el tiempo en que deben ser celebrados. Tienen como fin ofrecer el culto divino a nombre de toda la Iglesia como una acción continua. Pero dentro de la vida de los fieles se dan otros actos que tienen como fin promover el vínculo con Dios, la Santísima Virgen, los Santos y Beatos, etc. Estos actos buscan fomentar las virtudes cristianas y por sobretodo ser una ayuda a la oración de la comunidad de fieles que buscan acercarse a Dios. La Iglesia fomenta los actos piadosos de los fieles y los alienta, siempre y cuando estos no busquen sustituir la liturgia, ni se le atribuyan efectos o propiedades que pueden rayar en la idolatría. El Papa San Juan Pablo II nos recordaba que “Tanto los actos piadosos del pueblo cristiano, como otras formas de devoción, son acogidos y aconsejados mientras no suplanten y no se mezclen con las celebraciones litúrgicas”1. Son actos piadosos por ejemplo: 1.- El rezo del Santo Rosario 2.- El Vía Crucis 3.- Las procesiones públicas 4.- La adoración al Santísimo Sacramento 5.- La Coronilla de la Divina Misericordia 6.- Los novenarios
1 CARTA APOSTÓLICA VICESIMUS QUINTUS ANNUS DEL SUMO PONTÍFICE JUAN PABLO II EN EL XXV
ANIVERSARIO DE LA CONSTITUCIÓN SOBRE LA SAGRADA LITURGIA. N. 18.