Mistagogia: "Jesús nos envía en Misión"

Mistagogia: Jesús nos envía en Misión.

¿Qué es la Mistagogia? 

La palabra Mistagogia se puede traducir por “Introducción a los Misterios”.



Después de conocer a Jesús que anuncia e inaugura el Reino, en su persona, y después de contemplar y participar de su Misterio Pascual, por la celebración de los sacramentos de Iniciación Cristiana, los neófitos (recién bautizados) profundizan en el Misterio del Señor, de la Iglesia y de los Sacramentos, por medio de la catequesis, tomando mayor conciencia de las implicancias que tienen estos Misterios en su nueva vida de redimidos.

La función mistagógica del Espíritu Santo.  En

su idioma original, el griego, el pedagogo tenía la función de educar a los niños o “conducirlos”, a su vez el mistagogo educa en el Misterio de Jesús, enseña la progresiva inserción misionera en el Cuerpo de Cristo que es la Iglesia.

 El

Mistagogo por excelencia de la experiencia cristiana es el Espíritu Santo, en torno a quien se desarrolla está última etapa.

Énfasis en la comunidad  E n

esta etapa del Itinerario de Introducción a la Vida Cristiana, la CICA se esforzará por afianzar los lazos comunitarios y fortalecer las condiciones para que las comunidades sigan caminando juntos, en este nuevo camino de vida cristiana, aún al terminar el itinerario de catequesis.

Profundización en los sacramentos:  Profundizar

en los sacramentos que han celebrado o renovado y reconocer que Dios los ha hecho un pueblo de sacerdotes, profetas y reyes (servidores) por el Bautismo, y los sacramentos, con una disposición total al Reino (Enc.38 “El Señor nos ha hecho un pueblo de sacerdotes, profetas y reyes”)

 Esta

etapa también los hará ver con mayor claridad los diversos lugares donde Jesús se presenta, como el Señor, Maestro y amigo que alimenta el peregrinar de los fieles como sus discípulos y misioneros (Enc. 39 “Jesús camina con nosotros”)

 El

último encuentro es una gran acción de gracias y de alabanza al Señor por todo lo vivido junto a Él y a los hermanos, acogiendo su llamado a vivir como discípulos misioneros , integrándose plenamente en la vida y misión de la Iglesia, al servicio del Reino de Dios (Enc. 40 “Discípulos misioneros de Jesús al servicio del Reino”)