Tuerto, Maldito y Enamorado

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Tuerto, maldito y enamorado De Rosa Huertas Personajes Protagonista: Novela escrita en primera persona. La narradora es Elisa. El chico que sale con ella la llama “Elisavé.” Su prima Marina es aficionada a las novelas de magos y de adolescentes vampiros. Pero ella las encuentra absurdas. Es una chica muy delgada que siempre tiene frio. No es ni muy simpática ni muy guapa. Pequeña y blanca como el papel. Le gusta ir vestida de negro lo que le da un aspecto de gótico involuntario. La madre de Ricardo, el chico que sale con ella, le ha teñido un mechón de color blanco. No le gustan las tareas domésticas. Vive en la calle Toledo con su padre, su abuela y su hermana Carmen. Padre: Tiene una cordelería. Fuma fuera de la tienda. No le gusta Ricardo porque tiene la tez oscura, le recuerda los extranjeros que se han instalado en el barrio y despotrica de ellos porque han venido a quitarle el trabajo a los de toda la vida. Odia a los chinos. Madre: Se ha separado de su marido porque no puede soportar la asfixie del barrio, tan viejo, donde nada cambia. Vive en Villalba, a 30 kilómetros de Madrid, cerca de su hermana y su cuñado. Estos tienen una hija que se llama Marina. Trabaja en una sucursal bancaria. Carmen: Hermana de la protagonista. Odia la literatura, pero terminará colaborando con su hermana en un trabajo de literatura que tiene que hacer para su profesor Jesús sobre Lope de Vega. Abuela: Se llama Milagros. Le hace de comer a su hijo y a sus nietas. Sus comidas son cocidos, callos y potajes. Está cansada de tener que ocuparse de su hijo y de sus nietas a su edad. Tiene ochenta años. Ricardo: = Rico-cardo. Sale con Elisa. Es alto y oscuro. Su madre es peluquera. Se llama Lupe. Es muy hermético. Dibuja y le dedica sus dibujos a Elisa que los coloca en su habitación. El padre de Elisa no lo quiere, porque es de piel oscura y le recuerda los extranjeros del barrio. Madre de Ricardo: Es peluquera. Le gusta peinar a Elisa. Padre de Ricardo: Está escondido porque ha visto que un hombre ha apuñalado a otro delante de una discoteca. Cómo es un testigo ocular se tiene que ocultar hasta que la policía detenga al delincuente. Julio: Es simpático y popular. Su padre tiene una relojería en el barrio. Es guapo. Está en la misma clase que Elisa y se ha enamorado de ella. La conoce desde que eran pequeños. Espectro: Vive en la biblioteca, detrás de la letra V. Tiene un ojo gris. El otro está tapado. Olor a incienso. Mano blanca. Se llama Lorenzo. Es uno de los negro de Lope de Vega. No recuerda ni su nombre ni el de su amada, ni porqué está maldito. Lorenza Sánchez : Madre de Lorenzo, el fantasma. Antonia- Clara: Hija pequeña y preferida de Lope. Es la amada de Lorenzo. Se ha escapado con un tunante. Su padre culpa a Lorenzo de la fuga de su hija. Está atrapada en el espejo de su casa que hoy es la casa-museo de Lope de Vega. Lina: Es la loca del barrio, vive atrapada por los fantasmas . Por la noche grita y no deja dormir ni a Elisa ni a su padre. Ella es la que va a ayudarle a la chica a deshacerse del fantasma. Internenes Pienso y Juego


El fantasma femenino del cruce:“No lo olvides, dile a todos que es muy peligroso cruzar por aquí, que miren bien antes. Díselo tú.” Cristóbal Tenorio: Hombre con el que se fuga Antonia – Clara. La abandona al poco tiempo. Morgana: Una vidente del barrio, a la que visita Elisa para desprenderse del fantasma. Hombre que persigue a Ricardo: Es alto y rubio. Es un delincuente. El padre de Ricardo le ha visto apuñalar a un hombre a la salida de una discoteca y lo ha denunciado a la policía. El fantasma-mujer del cruce hace que lo atropelle un autobús. El hombre ese día perseguía a Elisa y Ricardo. Instituto: Es una auténtica reliquia histórica. Han estudiado en él numerosos hombres ilustres. Lope de Vega ha sido alumno de él. Tiene un claustro barroco con gárgolas metálicas. Los días de lluvia es un espectáculo ver caer el agua de ellas. BREVE RESUMEN Elisa = Elisavé para Ricardo entra en contacto en la biblioteca de su centro con un fantasma que ha perdido la memoria, le pide que le ayude a recordar su nombre y el de su amada. Ha sido maldecido por Lope de Vega pero no sabe tampoco porqué. Tampoco recuerda porqué está tuerto y cómo murió. La chica lo reunirá con su amada para siempre. El espectro la llama Belisa, nombre con el que Lope de Vega nombraba a su amada Isabel. Capítulo 1 La narradora nos introduce el tema de la novela que vamos a leer: un espectro de un habitante del pasado ha irrumpido en su vida. Una noche de invierno su hermana Carmen, que está en tercero de la ESO está llorando porque no se sabe un tema de literatura. Se trata de Garcilaso de la Vega. Su padre intercede para que le ayude. Carmen tiene una memoria prodigiosa y con las explicaciones que le da su hermana, dos años mayor que ella, le basta para aprenderse el tema. Le pide ayuda para preparar una exposición oral sobre Lope de Vega. Éste fue el principio de su desazón, de su insomnio, de su viaje al otro lado sin salir del barrio. Aprendemos que la madre de la narradora se ha marchado de casa desde hace un año y que ha dejado el padre con sus dos hijas. Ellas no han querido cambiarse de casa, ni de barrio, ni de amigas, ni de instituto. Su padre vive amargado a pesar de tenerlas a las dos con él. Capítulo 2 Es la mañana siguiente, todavía es de noche. En el portal de la tienda de caramelos se encuentra Ricardo con su rostro oscuro escondido bajo la capucha. Lo conoce desde que entró en el insti. Es su único amigo. El resto son compañeros de clase. El año anterior estuvo cardo todo el año y repitió. Está en cuarto de la ESO. Pensó en que perdería a una amiga y le pidió que fuesen algo más que amigos. Casi nadie sabe que están saliendo. Se reencuentran en el recreo. Está lloviendo, Ricardo sigue ensimismado. La chica decide ir a refugiarse en la biblioteca para no amargarse el día, sabe que Ricardo tiene un problema pero que no se lo va a contar ahora. En la biblioteca hay mucha gente debido a la lluvia. Felipe, el bibliotecario está furibundo por las charlas. Internenes Pienso y Juego


Decide empezar a investigar sobre el trabajo de Lope. Descubre que tan sólo existe un libro de él: El caballero de Olmedo. Le ocurre un hecho insólito: primero una voz le dice: “ – ¡Ayúdame a recordar!” y luego un ojo gris la mira desde el fondo de la estantería. Sale despavorida para clase piensa que su hermana Carmen compinchada con Ricardo le han querido gastar una broma. Vuelve a su casa acompañada de Ricardo. La abuela Milagros ya tiene puesta la comida en la mesa y le regaña porque su hermana una vez más ha puesto la mesa. Se va a fregar los platos a la cocina con su hermana. Le recrimina la broma que le ha gastado. Ella no sabe de lo que le habla. Las dos dudan que la broma venga de parte de Ricardo, pues es muy soso. Está intrigada y decide volver a la biblioteca a buscar la letra V. Esa tarde se mete en la boca del lobo. Capítulo 3 La tarde está gris, llueve, parece de noche aunque son las cinco de la tarde, la chica acude de nuevo a la biblioteca a buscar el libro de Lope. Cuando se acerca al libro que busca se mueve la estantería y se caen otros cuatro o cinco. Un rostro humano joven la mira. Tiene un ojo tapado, la mira un solo ojo gris. Le habla: “No consentiré que huyas de nuevo.” El fantasma le pide ayuda. Le pide: “Ayúdame a recordar”. La chica le pide que la suelte. Él quiere romper una maldición. La chica se escapa corriendo hacia su casa. Se queda dormida, cuando se despierta no sabe si ha estado soñando. Su hermana sale con una amiga a comprar discos, ella se queda en casa, su primera intención es estudiar pero termina ayudando a su abuela en la cocina que la sermonea y le lanza reproches que van dirigidos a su madre: “¡Verme así a mi edad!- se lamentaba – Cuidando de dos niñas y de mi hijo, yo, que estoy para que me cuiden a mí. Y mientras tanto tu madre viviendo su vida.” Capítulo 4 Está dormida y la despiertan los gritos de una mujer que se convierten en un llanto. No es la primera vez que los oye. Se levanta temprano y se encuentra con su padre en la cocina. Comentan los gritos. Son los Adelina, una vecina de enfrente. Es una mujer que tiene una historia triste, que se ha dado a la bebida, vive con sus gatos y que se ha vuelto loca. Capítulo 5 Va al instituto con Ricardo. Éste ha estado esperándola la tarde anterior, se ha dedicado a dibujar y le quiere enseñar lo que ha hecho. Julio ve que se despide de él con un beso fugaz y ella se da cuenta que se pone celoso. Se extraña de que el chico más solicitado de la clase se fije en ella. Se acerca a la peluquería para hablar con la madre de Ricardo de su hijo pues lo nota ensimismado y raro. Le pide que le diga a su hijo que confíe en ellos. Le pregunta que qué le pasa. Él le confiesa que su padre se ha marchado de casa. No conoce los motivos. Sus padres no han reñido, se llevan bien. No tiene noticias de él desde que se fue, no contesta a sus mensajes. Ella le transmite lo que su madre le ha dicho: “que confíe en ellos”. Internenes

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Capítulo 6 Le confiesa a su hermana por la noche: “He visto un fantasma en la biblioteca, justo detrás de los libros de Lope de Vega. Me aterra, no pienso volver a acercarme por allí, así que no pienso hacerte el trabajo. Me moriría de miedo.” Elisa es muy miedosa, desde pequeña, su hermana Carmen no lo es para nada y la anima a superar sus miedos. Por supuesto que lo que le cuenta su hermana es fruto de su imaginación. Decide ir ella misma el lunes a la biblioteca para comprobar lo del espectro. Se extraña que tan sólo haya un solo libro de Lope de Vega. Las dos chicas pasan el fin de semana en Villalba con la madre. Elisa duerme con su madre y aprovechan las dos para hacerse confidencias. Aprendemos que ha huido del barrio y de su casa porque se asfixiaba en ellos. Todo es demasiado viejo y no lo soporta. Conoció a su marido cuando llevaba tres días en la sucursal. Era un hombre muy guapo de ojos verdes. A ella la cordelería le pareció en aquél entonces muy auténtica. Elisa le cuenta a su madre que no puede dormir por los gritos de Avelina. Su madre le revela que ya de pequeña los gritos de la vecina no la dejaban descansar. Se duerme al calor del contacto de su madre. Capítulo 7 Su hermana le lleva dos libros de Lope de Vega. Le comenta que había dos estanterías llenas de las obras de Lope en la biblioteca. Estaban colocados por la letra L. Se extraña pues Lope es el nombre del autor, no su apellido. Averigua por medio de Felipe el bibliotecario que Jesús el profesor de literatura de su hermana le ordenó que los colocara de ese modo. Habla con el profesor e intuye un misterio en su contestación. Vuelve a la biblioteca e invoca al fantasma. Éste se sienta a su lado y le vuelve a decir que le ayude a recordar. No sabe su nombre ni el de su amada. El fantasma está atrapado por su pasión más allá de la vida. Elisa le pide que le cuente todo lo que debe saber para poder ayudarle pero opina que ha recurrido a la persona menos idónea de “este maldito instituto”. El espectro le pide que no pronuncie la palabra maldito pues él está maldito desde hace cuatrocientos años. No recuerda el porqué de la maldición pero sí quién lo maldijo: Félix Lope de Vega y Carpio. Capítulo 8 Conocemos la maldición del Fénix: “ Vagarás por el tiempo sin estar del todo muerto, sin recordar tu nombre ni el de la mujer que amas; condenado a una eternidad sin sosiego hasta que alguien se apiade de ti y te ayude a recuperar la memoria.” El fantasma conversa con la chica y le pregunta su nombre. Le dice que se llama Elisa pero él la bautiza Belisa. Era el nombre que usaba Lope para nombrar a su amada Isabel. El fantasma le cuenta que intuye que ha tenido que estar cerca de Lope y que otras personas han intentado ayudarle a recordar, sin éxito. El último ha sido el profesor de literatura: Jesús. El fantasma amenaza a la chica para que no averigüe nada. Elisa va deduciendo que el fantasma conoció a Lope cuando este era ya mayor. Acuerda con él de acudir a la casa de Lope para encontrar pistas. Ella le irá contándole todo lo que vea. ¡Aunque han pasado 4 siglos! Elisa sale corriendo y se dirige a la casa de Lope. La puerta está cerrada. Sobre el dintel hay una inscripción: “D.O.M: PARVA PROPIA MAGNA/MAGNA ALIENA PARVA” la anota en un papel para traducirla. Capítulo 9


Elisa acude a una visita guiada en la hora del recreo a la casa de Lope. Sólo ha podido rescatar un nombre: el de Alonso de Contreras. Vuelve por la tarde a la biblioteca para conversar con el fantasma. Éste empieza a recordar su estancia en la casa del autor. En concreto su infancia. Él no es Alonso de Contreras, pues el espectro, lo recuerda mayor jugando con él. El capítulo se acaba con la entrada de Julio que la rescata del suelo frío de la biblioteca, donde está sentada. La invita a tomar algo calentito. Capítulo 10 Elisa le cuenta a su hermana Carmen como van sus investigaciones con el fantasma y le pide ayuda. Su hermana cree que se trata de una estrategia de Elisa para interesarla por la literatura. Decide colaborar e ir al día siguiente a la hora del recreo a buscar información. Carmen le dice que Ricardo ha ido a buscarla. Se acuesta con muchos pensamientos dándole vueltas en la cabeza: el terror al fantasma, las palabras de Julio que medio se le ha declarado y la visita de Ricardo que no sabe a qué ha venido. Para colmo oye los gritos de la vecina Lina en la buhardilla. Sale para el instituto temprano. Ricardo no la está esperando. Julio sin embargo, sigue persiguiéndola. A la hora del recreo va a buscar a Ricardo a su clase está rodeado de chicas que admiran sus dibujos. Los dos se preguntan sin contestarse donde estuvieron, ella ayer tarde y él por la mañana. Los dos tienen secretos que confesarse. Ricardo le da un efusivo y largo beso delante de las compañeras. Ella está atontada toda la mañana. Su hermana le da una sorpresa a la hora de comer. Se está leyendo una biografía de Lope y está entusiasmada con la vida de amores tan intensa que ha vivido el autor. Ha averiguado con su último amor se llamó Marta de Nevares y que su historia es triste, muy triste. Capítulo 11 Elisa acude a la biblioteca y se sienta en el suelo en el mismo sitio que el día anterior. El fantasma se le acerca y le pregunta si conoce lo que es el amor. Él si sabe lo que es y pena por él. Elisa le pide que le hable del último amor de Lope: Marta de Nevares, una mujer bella, culta e inteligente, veinte años menor que Lope. Al enviudar se fue con el escritor, que se había ordenado sacerdote unos años antes. El fantasma empieza a recordar. Los recuerdos son tristes. Lope es su amo y Marta Nevares es su ama. Parece que está ciega y ha enloquecido. Tan sólo encuentra la paz en su lecho de muerte. El fantasma siente que su amada está detrás de ella. Escucha la voz de Felipe, el bibliotecario, que le dice que va cerrar y que por poco la deja encerrada sola toda la noche en la biblioteca. Está tan absorta que casi la atropella un autobús. Una mano invisible, con voz femenina le ha advertido del peligro. Le suena el móvil y vuelve a la realidad, es su hermana que está preocupada porque no ha vuelto a su hora a casa le dice que su abuela se ha puesto enferma. Comprueba que tiene siete llamadas perdidas de Ricardo. No las ha oído y no sabe como explicárselo al muchacho. Capítulo 12 La abuela tan sólo tiene un resfriado pero está asustada. Carmen ha preparado la cena sola y está también enfadada. Ella le cuenta que ha estado con el fantasma. Se echa a llorar y dice que casi la ha atropellado un autobús. Su padre le comenta que es el cruce más peligroso de todo Madrid y que en él han muerto muchas personas. Al día siguiente no aparece Ricardo y al


cruzar por donde mismo, otra vez la voz fantasmal de la mujer de la noche anterior le advierte: “- No lo olvides, dile a todos que es muy peligroso cruzar por aquí, que miren bien antes. Díselo tu.”Esa mañana no puede ver a Ricardo a la hora del recreo. El profesor de Física, el Terrible los ha castigado. Se acerca a la casa de Lope, que está abierta. Oye un grito en el patio. Elisa sabe que se trata de Marta de Nevares, en su locura. Capítulo 13 Elisa conversa con el fantasma. Le comenta que ha estado en el patio de la casa de Lope. Le cuenta sus sensaciones, los olores a comida y a leña, los sonidos de las gallinas. El fantasma recuerda que su madre era la cocinera y que ella cuidó de Marta de Nevares. No recuerda el nombre de su madre pero sí que él tenía el mismo nombre que ella. Le pide a Belisa que averigüe el nombre de la criada de Lope porque así le devolverá la mitad de la paz. Elisa se va corriendo en busca de Ricardo temiendo que pueda ocurrir una catástrofe entre ellos si no se ven hoy. Al cruzar por el paso de cebra, una vez más oye la voz femenina que le dice: “díselo a todos” Ricardo le reprocha no estar a la altura de las circunstancias. Tiene miedo pues se ha dado cuenta que un hombre lo persigue desde hace dos días. No sabe que quiere de él. Cree que quizás tenga que ver con la desaparición de su padre. Ella tiene miedo de los fantasmas que la persiguen y él de los vivos. Elisa piensa ayudarle e informar a la policía de lo está pasando. Se abrazan, escuchan música, ven sus dibujos y estudian Física juntos. Se dan cita para ir al insti al día siguiente. Van en volandas para que el hombre no los pueda perseguir. Capítulo 14 Su hermana la espera para que le cuente cosas del fantasma. Ella se siente sola sin su madre y tiene también miedo. Al día siguiente queda con Ricardo para ir al insti y ve al hombre alto y rubio que lo persigue, también ha podido ver con nitidez a la mujer del cruce, tiene una enorme brecha en la frente. Acude a la biblioteca y le pregunta al fantasma porqué le persiguen los espectros. Él le explica que si ayuda a un espectro en pena otros también solicitan su ayuda. Él le pide que no lo abandone a una eternidad de dolor que tan solo queda un libro en la estantería de Lope. Que no lo abandone como han hecho otros. Le pide que reflexione y escuche a su corazón. La chica sale huyendo de la biblioteca con las lágrimas en los ojos. Capítulo 15 Elisa está en un mar de dudas. Se sienta en las escaleras de la Colegiata para pensar, oye dos disparos, se gira hacia la puerta de la iglesia. Hay olor a incienso, siente frío. Un hombre alto vestido de obispo avanza hacia ella, despacio. Le pide que averigüe quién lo mató y por qué. Sale despavorida y le promete a la mujer del paso de cebra que va a poner cárteles por todo el instituto para avisar del peligro del cruce. La noche se le hace imposible. Escucha los gritos de Lina. Se levanta muy temprano, es sábado y se encuentra a su padre en la cocina. Le dice que lo que no la deja dormir son los fantasmas. Su padre se interesa por el tema y le informa que ha habido muchos asesinados en el barrio. Averigua que uno de ello fue el obispo Martínez Izquierdo en el siglo XIX.


El padre no sabe quien lo mató ni porqué, pero si le dice a su hija que Galdós escribió sobre ello. Aparece su hermana Carmen ha quedado con su amiga Lidia en visitar la casa de Lope de Vega. Su padre no sale de su asombro. Capítulo 16 Se queda ese sábado en casa buscando información en Internet. Descubre que Cayetano Galeoto, un sacerdote perturbado mató al obispo. Encuentra también los motivos de su muerte. Con esto pretende ya librarse el lunes de su sombra. Se dedica a hacer carteles de advertencia sobre el cruce. Todo el mundo está asombrado de que no quiera salir. Su madre la primera. Cree que está enferma. Su hermana viene con datos de la casa de Lope. Ella no quiere oírlo. Al parecer Lope tuvo una hija con Marta y esta puede ser la amada del espectro. Capítulo 17 El lunes Belisa arrastra a Ricardo a la hora del recreo hacia la escaleras de la colegiata y le lee el asesinato que sufrió el obispo. El fantasma al conocer los motivos de muerte y el nombre de su asesino se esfuma dándole las gracias. Luego lo conduce al cruce y le cuenta al espectro femenino lo que va hacer con los carteles. El muchacho no entiende nada solo siente que está muy rara. Al final parece divertirse con lo absurdo de la situación. Se despiden con un beso y él dándole las gracias por el buen momento que han pasado juntos. Por la tarde va al encuentro del fantasma. Le dice que no lo va abandonar. Ella empieza a narrarle hechos que ha leído de la biografía de Lope se para en el año en que Lope conoció a Marta, a su vez le pide al fantasma que le recuerde cosas. Aprende que fue antiguo alumno del centro, porque Lope descubrió que era un zagal despierto y hablador y le ayudó para que aprendiera a leer y escribir. Fue un alumno concienzudo y dotado de talento. Trabajó para Lope escribiendo obras suyas. Fue como se dice actualmente negro de Lope. El fantasma recuerda las horas que pasaba en su infancia cerca de su madre que lo adoraba y como la hija de Lope venía a la cocina a bordar al lado de su madre cuando su padre la castigaba. Elisa parece haber encontrado el nombre de la amada pero se lo reserva. Por el momento siente celos del fantasma. Se despide de él. Él sabe que va a volver. Se ha creado un vínculo entre ellos. Le pregunta por qué Jesús, el profesor abandonó la investigación. Al parecer los espectros en llamas en su propia casa no lo dejaban. Capítulo 18 Elisa recibe una llamada de Ricardo. Está asustado porque el hombre alto y rubio lo ha asaltado. Quería saber dónde estaba su padre. Ha conseguido escapar. Elisa quiere que avise a la policía pero él prefiere comentárselo a su madre primero, si lo asalta de nuevo. Se siente sólo pero la muchacha le dice que la tiene a ella. Para él su cabaña de Robinson. Es una historia que le contaba su padre: “… cuando Robinson estaba solo en la isla, al menos tenía una cabaña donde cobijarse por las noches y los días de lluvia. “Siempre tendrás una cabaña donde refugiarte” le soltaba cuando estaba cardo. Esa noche vuelve a dormir mal y madruga de nuevo. Conversa con su padre. Intenta que le de datos acerca de la mujer del cruce. No sabe de ello pero le cuenta que en esa esquina hubo un teatro que se incendió: el teatro Novedades. En él murieron muchas personas debido a que el bastón de un cojo se atravesó en la puerta de salida.


Por la mañana Ricardo la espera y el hombre que anda buscando a su padre lo ataca y lo amenaza con pegarle si no le dice donde se encuentra. Elisa le da una patada sin que él se lo espere y los chicos salen huyendo. La mujer del cruce se le aparece y le dice a Elisa que crucen en ese momento. El hombre sin embargo es atropellado por una furgoneta. El espectro de la mujer le sonríe y desaparece para siempre. Capítulo 19 Entran en el instituto. Ricardo le está muy agradecido a Elisa de haberle salvado la vida. La llama Valiente. A ella le enorgullece el calificativo porque siempre le habían dicho que era una cobarde. Se sienta con el fantasma a conversar. Descubren que quién lo asesinó fue Alonso Pérez de Montalbán, el hijo del editor De Lope. Le tenía mucha inquina porque Lope se fijó en él. Lope le ayudó a estrenar algunas obras con su nombre. Él se preciaba de estar escribiendo una biografía del autor. En ella vertía muchas exageraciones sobre el escritor. Quevedo le dedicó una sátira. Él fue el que lo dejó tuerto. Aparece inoportunamente Julio. El fantasma mantiene una conversación burlona con ella acerca del muchacho, ella se ríe a carcajadas. El chico no entiende nada. Consigue arrancarla de allí. Ella no entiende como desea conquistarla. Capítulo 20 La vida de Elisa se desarrolla sin rumbo fijo. “La paz y la cordura desaparecieron de mi vida” nos dice. Deja de ir a clases para sentarse en el suelo al lado del fantasma. En su casa parece una sonámbula. Ricardo se le borra de la mente. Como una nebulosa recuerda que su padre le comenta lo del atropello del hombre en el cruce. Se trataba de un peligroso delincuente. Se le aparecen fantasmas por cada rincón de las calle. Se pone enferma, entra en un estado febril, con delirios. La madre la vela cada día. Esto supone un dolor para todos. En cuanto puede ponerse en pie acude a la biblioteca y le revela al fantasma el nombre de la amada. Se trata de Antonia Clara, la hija menor de Lope. El fantasma se desgarra. “Los sentimientos le salían a borbotones. Convertidos en frases enhebradas con una pasión desmedida”. Elisa se siente celosa. Él se sume en sus recuerdos, como el del beso que ella le dio en el patio tras del pozo, una noche de mayo. Le pide que lo deje solo con sus recuerdos y la chica se marcha. Capítulo 21 Elisa está confundida con el sentimiento de amor. Cree que se ha enamorado del fantasma. Vuelve a caer en un fuerte languidecimiento. Su padre le prohíbe salir mientras no se recupere. Su hermana Carmen y su habitación se convierten en su cabaña de Robinson. Ricardo pregunta todos los días por ella. No puede venir a verla porque su padre no lo deja. Su hermana le confiesa que Ricardo fue a buscarla una tarde a la biblioteca y que estaba muy serio desde ese día. Le dice que el profesor Jesús y que Julio, el hijo del relojero también han preguntado por ella. Carmen le quiere ayudar pero no sabe cómo. Le pide a su hermana que averigüe el nombre del fantasma de la biblioteca. Decide volver a conversar con el fantasma y por el camino, se encuentra con Lina, la loca que se dirige a ella diciéndole: “¡Tú también los ve! Ellos te buscan. Por eso gritas por las noches, como yo. No te librarás de su acoso.” Llega a la biblioteca, se sienta en el suelo y se echa a llorar.


Capítulo 22 El fantasma le cuenta como Antonia Clara acude al teatro para ver la última obra de su padre. Nunca había acudido a una representación y era su mayor deseo. Aventura que su acompañante es Montalbán y él los divisa desde el patio. Un hombre alto acerca su boca al oído de su amada. El fantasma está celoso. No puede averiguar quién es pero a partir de ese día Antonia Clara no acude a sus citas al pozo. Lope de Vega no se da cuenta de los devaneos de su hija. Está sumido en una gran tristeza desde la ceguera y la locura de Marta. No sale a la calle. No obstante sigue escribiendo. El fantasma le entrega a su hija su última obra escrita con su padre cuya protagonista se parece a ella. Ella se siente muy alagada. Él recobra esperanzas sobre su amor al citarlo de nuevo en el pozo. Antonia Clara le pide un favor, que saque a su padre esa tarde. Desde ese día no la volvió a ver más. Se escapó con el otro hombre. Elisa lo compadece pues estaba “enamorado de una mujer traidora a la que no pude olvidar, eso sí que era una maldición” . Encuentra un papel en su cama, de su madre, donde le decía que la perdonase por el daño que le infligía pero que tenía que cuidar de la indefensa e ignorante niña. Lope lo echa de su casa. Pasa los días a la sombra de los árboles. Un día fue a buscar el frescor de la biblioteca del Colegio Imperial en la que se encuentra. Los jesuitas lo conocen de cuando era alumno. Le ofrecen un plato de comida de vez en cuando. Un año pasa y Lope se está muriendo, él quiere solicitar su perdón. Lope sin embargo lo maldice: “Vagarás por el tiempo sin estar del todo muerto, sin recordar tu nombre ni el de la mujer que amas; condenado a una eternidad sin sosiego hasta que alguien se apiade de ti y te ayude a recuperar la memoria”. Le llega la muerte de manos de Montalbán que le da un puñetazo en el ojo y lo deja rodar por las escaleras. Está malherido en la calle, nadie se apiada de él. A rastras llega a la biblioteca donde muere. Capítulo 23 La hermana de Elisa ha seguido con sus investigaciones en una librería de Madrid y por fin ha encontrado en el libro: La vida cotidiana del Madrid del XVII, de José Corral, el nombre de la criada que ayudo a fugarse a Antonia Clara con Cristóbal Tenorio. Se llamaba Lorenza Sánchez. Elisa exclama: “¡Lorenzo, te llamas Lorenzo!” . Aprende también que el hombre con el que se fugó la abandonó al poco tiempo pero que luego se casó e enviudó. Terminó sus días en la casa de su padre con su hermana y sus sobrinos. Elisa se lleva toda la noche pensando que el fantasma de Antonia Clara sigue en la casa del padre y que ella sigue enamorada de él y no tiene descanso. Al día siguiente, coge un taxi y se dirige a la casa de Lope de Vega. En la habitación de Antonia Clara había visto en su anterior visita en el espejo una sombra en el azogue. Consigue entrar y le dice al espejo que le va a traer a su amado. Capítulo 24 Elisa, de momento, no le pronuncia su nombre al espectro para que no desaparezca para siempre, quiere antes trasladarlo a la casa de Lope con su amada. Le cuenta lo que ha descubierto pero ni uno ni otro saben cómo deben hacerlo. La chica por recomendación del fantasma va a visitar a una vidente, se llama Morgana, no lleva dinero, sin embargo la médium decide atenderla porque la conoce y conoce a su padre y sabe cómo cobrarle si ella no le trae el dinero de la consulta. Elisa viene a pedirle la unión de dos fantasmas, que la tienen atrapada. La vidente considera que se trata de una pesadilla.


La mujer le echa las cartas y le comenta que tiene dos amores y que está en una encrucijada. Le dice que uno de los dos amores va a morir. Le pregunta los lugares de los fantasmas. Ella le dice que es ella la que tiene que transportarlos en un carro. Le vende unas velas, una blanca y una negra a 20 euros cada una. Le da unas instrucciones: “tienes que ponerlas en el lugar en el que hayas visto a uno de los fantasmas en tu sueño, en el sitio que hayas reconocido con más claridad. Antes de encenderlas colócalas exactamente a trece centímetros una de otra, el trece es el número de la muerte. Primero encienda la blanca y luego, con su mecha la negra. Cierra los ojos e invoca a los dos fantasmas. Debes desear con todas tus fuerzas que se reúnan y que desaparezcan de tus pesadillas. No le cobra la visita porque es del barrio. Le advierte que venga por las velas porque sino ya sabe ella a lo que se expone. Capítulo 25 Elisa acude a la consulta inmediatamente. 40 euros era todo su capital. Adiós al cómic de Batman y a una caja de lápices de colores que le iba a regalar a Ricardo para su cumple. No puede ir a la biblioteca por la mañana porque su padre se lo impide, considera que está todavía enferma. Acude a ella por la tarde. Habla con el fantasma, enciende las velas y se despide de él. Él le pide que la guarde en su corazón. Ella le dice que lo tiene casi todo escrito e inmortalizado a través de las palabras. Permanece tiempo en la biblioteca, con los ojos cerrados. El fantasma sigue allí. Se da cuenta que la médium la ha engañado. Al fantasma se le ocurre que ella traiga el espejo a la biblioteca. Ella le dice que no puede robar el espejo de la casa museo pero una idea le viene al cabeza: ha descubierto una persona en el barrio que si habla con los fantasmas. Capítulo 26 Elisa se presenta en casa de Lina: “Un intenso hedor como a pis de gato, marcaba el camino a casa de Lina”. Mantiene esta conversación con ella: “ – Te dan miedo los muertos? Preguntó únicamente. - Sólo los que me acosan a mí; los suyos, no.” La hace sentarse en una silla pues en el sofá estaba el contorno de un fantasma y alrededor de la mecedora donde está ella sentada se encontraba otro. Lina le dice que ahuyentar el primer fantasma es lo más difícil, porque se crean lazos con él. Reconoce que es duro entregarlo a alguien que no es ella. La chica le dice que tiene que hacerlo aunque le duela. Lina le reconoce que es más valiente que ella. Le explica cómo tiene que hacerlo: “Necesitarás a alguien que te crea. El fantasma tendrá que ocupar tu cuerpo y tú tendrás que guiarlo hasta el lugar donde está ella. Deberá llevar los ojos cerrados todo el tiempo, él no es de esta época y desaparecería engullido por el presente si ve en lo que se ha convertido Madrid. (…)- Alguien que crea en ti y que no abra los ojos hasta encontrarse delante del espejo –insistió - Luego, no olvides hacer el rito necesario para que él y los demás fantasmas desaparezcan de tu vida y de tu memoria. Supongo que él te lo habrá dicho.” Elisa atrevida, le pregunta a Lina quiénes son los fantasmas de esa casa y porqué no los ahuyenta.


Lina con un hilo de voz le confiesa: “Son mis padres. (…) los encontré cuando regresé, me esperaban. No quiero que se vayan y me dejen sola. Tú sabes bien lo que esto supone”. Capítulo 27 Elisa se escabulle sigilosamente de casa de Lina. La deja con sus fantasmas. Le dice a su hermana que esta noche va a ir a su cuarto a contarle algo. Está decidida a encontrar a alguien que crea en ella. Su hermana está loca de contenta porque ha expuesto con éxito el trabajo de Lope de Vega delante de Jesús el profesor, y de sus compañeros, el profesor se ha emocionado. Elisa le dice que el trabajo no ha terminado que ahora hay que llevar al fantasma a la casa de Lope para que se reúna con su amada. Carmen le dice que ya está bien que ella ya tiene su sobresaliente y que qué más quiere. Su hermana no la sigue y le dice que tiene que volver al insti pues allí la esperan Ricardo y Julio. Vuelve al insti a la hora del recreo y va en busca de Ricardo que está dibujando. Él se emociona al verla y le dice que la echado mucho de menos. Le dice que su padre ha vuelto a casa. Había desaparecido porque el hombre que atropellaron en el paso de cebra lo amenazó cuando volvía del trabajo, pues vio cómo apuñalaba a un hombre delante de una discoteca. Su padre acudió a la policía y se había convertido en testigo protegido, debía permanecer oculto una temporada hasta que detuviesen al criminal. El muchacho le dice que gracias a ella han detenido al delincuente y que sus padres están deseando que se recupere para celebrarlo. Le confiesa que la había visto con Julio en la biblioteca reírse a carcajadas. Se cree que lo que le estaba pasando era debido al otro chico. Ella le dice que Julio no tiene nada que ver en esto. Él pronuncia las palabras mágicas: te creo. La chica se ríe a carcajadas. Capítulo 28 Elisa le pide ayuda a Ricardo. Le dice que lo siga y que no le haga preguntas. Llega a la biblioteca acompañada de Ricardo, habla con Lorenzo. Ella está confundida no sabe a quién ama. El fantasma se dirige a Elisa: “Belisa (…), los vivos solo deben amar a los vivos y yo sería un espíritu malvado si me empeñase en conservar tu compañía. Mi corazón te guardará siempre, por toda la eternidad”. Elisa le pide a Ricardo que vaya, guiado por ella, hasta la casa de Lope con los ojos vendados y con las gafas de sol encima. Él piensa que la muchacha le está pidiendo una prueba de confianza. El fantasma también lleva los ojos cerrados. Le pide a Belisa que le vaya describiendo el recorrido. Él a su vez le va contando cómo era el barrio en su época, sus olores. Ricardo se pone nervioso, no entiende nada. Elisa se había olvidado que Ricardo podía oírle y decide callarse. Cuando entran en la casa de Lope, el fantasma le pide que lo acerque al pozo donde recibió el único beso de su vida. Ella le da un beso a Ricardo y a él al mismo tiempo. Llegan a la habitación de Antonia Clara. Elisa le pide a Ricardo que abra los ojos. Aparece la imagen borrosa de Antonia Clara. Ella exclama: “¡Lo has traído! Ahora podrá perdonarme y descansaré en paz. Ven conmigo, mi amor. ” Elisa se despide de Lorenzo sollozando y se desmaya. La recogen la guía y Ricardo. Ésta quiere llamar a una ambulancia. Elisa y Ricardo se niegan. Se sientan en el banco del patio, por más que quiere recordar los sonidos y olores de la época, no puede. Se rinde diciendo que está en el S.XXI. Ricardo le expresa su ternura, su lealtad y su entrega. Elisa le dice que todavía tienen que ir a la biblioteca a cambiar un libro de sitio pero que será otro día. Él le contesta: “Cuando


tú quieras Elisavé” Ella le pide que repita su nombre muchas veces, él termina diciéndole Belisa y ella le pide que no deje de llamarla así. La novela acaba de este modo: “- ¿Me explicarás alguna vez todo esto? – preguntó mirándome a los ojos, más parecía un ruego que una pregunta. - Es una larga e increíble historia – suspiré. - Si tú quieres, tenemos toda la vida para qué me la cuentes. Y si me la cuentas tú, la creeré.” Internenes

Pienso y Juego


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