Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

Crisis institucional,

análisis y

pronunciamientos Con el propósito de ofrecer a las y los lectores de la Revista Análisis de la Realidad Nacional una visión panorámica de cómo se está analizando la actual crisis nacional, a continuación se ofrece una selección de posicionamientos institucionales, editoriales y columnas de opinión, publicadas recientemente.

“ID Y ENSEÑAD A TODOS“

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Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

Pronunciamientos Representantes y autoridades estudiantiles de la USAC Ante el Clamor Popular Guatemala 29 de mayo de 2015 Sr. Otto Fernando Pérez Molina.

Presidente de la República de Guatemala.

Presidente.

Como representantes y autoridades estudiantiles de la Universidad de San Carlos de Guatemala, siguiendo nuestra obligación de ser portavoces del clamor del movimiento estudiantil le hacemos saber: Que considerando que Guatemala es un país que ha sufrido grandes tragedias en el transcurrir de la historia, las cuales han dañado profundamente a sus habitantes, quienes en su gran mayoría son trabajadores, personas pobres a quienes no es justo dañar con un gobierno corrupto y ladrón que les sigue despojando de sus recursos y oportunidades de progreso.

Por lo cual queremos hacer de su conocimiento la siguiente demanda: En vista de que una buena cantidad de las personas de su entera confianza a quienes usted llevó al ejecutivo como funcionarios, se han visto involucrados en actos de corrupción y saqueo a las arcas del Estado, nos unimos a la exigencia, a la petición ciudadana, y gremiales para pedir su renuncia.

Esperando que usted atienda nuestra demanda, de manera madura debe separarse del cargo ya que es evidente que no pudo desempeñar satisfactoriamente su labor

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Defensa del orden constitucional Consejo Superior Universitario CSU Universidad de San Carlos de Guatemala El Consejo Superior Universitario

1. Ratifica categóricamente su compromiso con la defensa del orden constitucional, la unidad nacional y la paz social.

2. Insta a todos los actores sociales a que sus acciones sean orientadas al fortalecimiento de la institucionalidad democrática y del sistema político.

3. Comparte todas aquellas manifestaciones ciudadanas que, en el marco de la ley, tengan

como fin la lucha contra la corrupción, la impunidad, la fiscalización de la gestión pública y el fomento de una cultura de transparencia en la sociedad guatemalteca.

4. Reitera el llamado a integrar la Plataforma Nacional para la Reforma del Estado, cuyo

objetivo fundamental es promover cambios profundos del sistema social, político y económico del país, mediante el diálogo y consensos.

5. Exhorta a la comunidad universitaria y a la población en general a que su participación

en la caminata de este sábado 16 de mayo sea de manera pacífica y con total respeto al Estado de Derecho. Rechaza cualquier acción de provocación, disturbio, incitación a la violencia, daño a los bienes públicos y privados o cualquier otra medida al margen de la ley, que tenga como propósito la instrumentalización y la deslegitimación de la lucha ciudadana.

6.

Exige al Gobierno de la República, que garantice el ejercicio de los derechos constitucionales de la ciudadanía y sus genuinas formas de expresión.

7. Informa a la comunidad universitaria que la caminata pacífica convocada por diversos sectores, tendrá como punto de reunión la calle frente al edificio de Rectoría a partir de las 12 horas.

En el actual momento de crisis político-institucional debe prevalecer la cordura, el civismo y la voluntad de todos los actores nacionales de aportar la solución de la misma, anteponiendo el bien común y el interés colectivo.

“ID Y ENSEÑAD A TODOS” Guatemala, mayo de 2015.

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Asociación de Periodistas de Guatemala exige al presidente Otto Pérez su renuncia Asociación de Periodistas de Guatemala

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a Asociación de Periodistas de Guatemala, APG -máxima entidad de Prensa del país- cumpliendo con el mandato de su Asamblea general, realizada el 28 de mayo de 2015, luego de los análisis de la dramática situación socio-política que vive nuestra población en menoscabo de su dignidad humana y ciudadana, exige:

1-

Al Sr. Otto Fernando Pérez Molina, su RENUNCIA ante el Organismo Legislativo, del cargo de Presidente de la República, por violar continuamente la Constitución Política de la República de Guatemala y por ser el responsable directo de la ingobernabilidad que estamos sufriendo.

2- Al Congreso de la república entrar a conocer y aprobar de inmediato las reformas de la Ley Electoral y de Partidos Políticos.

3-

Al Ministerio Público, Organismo Judicial, con el acompañamiento de la CICIG, para que continúe la lucha frontal contra la corrupción, agilizando persecución penal, el castigo y la devolución de lo robado, por funcionarios de estado y del sector privado, involucrados en las estructuras criminales de saqueo a los tributos del pueblo.

La Asociación de Periodistas de Guatemala, APG, reitera su compromiso con el gremio periodístico y el pueblo de Guatemala, de velar por el respeto a la libertad de expresión, los derechos humanos y la dignidad de todos los guatemaltecos y guatemaltecas, manteniéndose vigilante de que éstas y otras exigencias se cumplan a la brevedad y dentro del marco de la democracia.

Para el efecto, nos respaldamos en el principio del Derecho de Petición garantizado por la Constitución

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Política de la República de Guatemala y los convenios internacionales en materia de Derechos Humanos. *EN EL DÍA DE LA CONSTITUCIÓN POLITICA DE LA REPUBLICA. Junta Directiva. Guatemala, 30 de mayo de 2015.

Mesaje recibido Periodista, Blanca Rosa González (IPSP). Sinceras felicitaciones a la APG. Mi apoyo y solidaridad para un gremio que siempre ha sabido responder a las demandas sociales. Sí, OPM tiene que irse, todos estamos conscientes que el pueblo: YA NO LO QUIERE NI VER, MENOS ESCUCHAR SUS MENSAJES LLENOS DE MENTIRA Y FARSA. Periodista Arturo Soto Gómez, residente en México.

(APG, IPSP). Debo reconocer que nuestra singular Asociación de Periodistas de Guatemala, asume una digna posición.

Es evidente, evaluando todos los elementos que concurren para considerar los alcances de la petición de renuncia al Presidente Molina, que su gobierno, como tantos otros nunca fueron capaces de -siquiera– disminuir las desigualdades sociales de nuestra querida Guatemala, tampoco de reducir la explotación fiscal que sólo oprime a los sectores menos favorecidos, mientras la gran empresa, con el apoyo de los gobiernos, se enriqueció hasta todos los excesos.

Un mecanismo de lucha es la necesaria revuelta tributaria: NEGARSE A PAGAR IMPUESTO A UN GOBIERNO CORROMPIDO. Jesucristo que fue, bíblicamente, respetuoso de los tributos al César, pero un país empobrecido, saqueado por sus gobiernos, manejado por políticos que compran curules en el Congreso, respaldan sus campañas con

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dinero del gran capital que después, paga el Estado, tiene derecho a rebelarse como lo hace ahora.

Los impuestos han sido, históricamente, una expresión de la lucha de clases, y si se pagan, para el hurto por parte de funcionarios corruptos, hay que negarse a pagar.

La sociedad en su conjunto exige del Estado una considerable cantidad de servicios que no reciben aunque paguen, porque el tributo ha servido para el robo oficializado en diversos órdenes, como lo ha puesto el primer plano la CICIG; ese organismo merece nuestro respeto, como la digna lucha de un pueblo que justamente se revela contra quienes aparte de explotarlo, le roban, lo saquean, lo empobrecen.

Mis respetos, apegistas. enp.jtp. Actualización reciente: Sábado, 30 de mayo de 2015. 17:00 UTC -06:00.

Guatemala, 29 de mayo 2015. http://www.notasperiodisticas.com/?m=201505

El Grupo de los Cuatro ante la crisis de legitimidad del Estado El Grupo de los Cuatro

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as instituciones democráticas del Estado enfrentan una crisis integral de legitimidad, la más grave en tres décadas. Las reacciones de las más altas autoridades y líderes políticos indican que no ven la profundidad y la naturaleza de la crisis, ni asumen la cuota fundamental de responsabilidad que les corresponde en este estado de cosas.

Demasiados datos e indicios apuntan a que el Estado ha sido infectado en sus áreas vitales por redes de corrupción y crimen, y de ese mal no escapa la mayoría de partidos políticos, que vienen derrochando millones de quetzales en publicidad y programas clientelares, con el fin de atraer el voto de la población.

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Para importantes segmentos de la población las próximas elecciones en vez de ser percibidas como una esperanza de cambio y superación de la crisis, son vistas como una prolongación de la agonía de un régimen corrupto e ineficaz.

Muchos sectores sociales comparten ese diagnóstico y lo manifiestan con indignación en las calles y plazas, ejerciendo de forma cívica y ejemplar su derecho de manifestación.

Nosotros, como G4, vemos que la salida de la crisis de legitimidad del Estado pasa por la reforma política. Para el efecto es necesario crear una coalición ciudadana capaz de integrar a la Guatemala urbana que ahora está indignada por la corrupción galopante, y la Guatemala rural y marginada que siempre ha vivido en crisis.

Esa coalición debe integrar a la ciudadanía en torno a un solo objetivo: edificar un Estado capaz de cumplir su función básica de proteger a sus habitantes y alcanzar el bien común.

Creemos que los auténticos líderes de la reserva moral y política de la sociedad, tanto urbana como rural, ladina e indígena, hombres y mujeres, jóvenes, adultos y adultos mayores, deben ser capaces de construir la alternativa para promover el nuevo pacto social que nuestro querido país requiere.

Estamos convencidos que la sociedad guatemalteca tiene la capacidad de producir creativa y pacíficamente esos cambios, superando amenazas vitales como la disgregación del Estado, o fórmulas autoritarias y dictatoriales de gobierno, protectoras de la corrupción, que acarrearían más dolor al país.

Reiteramos el llamado a la ciudadanía a seguir ejerciendo con responsabilidad, prudencia y sensatez sus legítimos derechos de petición y manifestación. Es fundamental mantener el espíritu cívico, pacífico y libre, rechazando la violencia y las provocaciones.

Exhortamos, nuevamente, a las autoridades de todos los poderes del Estado y a los líderes políticos a enmendar el rumbo, creando condiciones para una transición democrática y pacífica a una situación política distinta, que dé respuesta a la indignación social por la corrupción y la crisis moral en que se encuentra el país.

Monseñor Oscar Julio Vian Arzobispo Metropolitano de Santiago de Guatemala

Reverendo César Vásquez Presidente de la Alianza Evangélica de Guatemala

M.A. Jorge Eduardo de León Procurador de los Derechos Humanos

Dr. Carlos Alvarado Cerezo Rector de la Universidad de San Carlos de Guatemala Guatemala, 13 de mayo de 2015

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Al Pueblo de Guatemala Rigoberta Menchú Tum Premio Nobel de la Paz 1992

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ajo las energías del día Joob’ Kan, desde mi condición de ciudadana guatemalteca, saludo respetuosamente la lucha cívica que se está expresando de múltiples maneras en toda Guatemala.

Saludo con admiración las manifestaciones pacíficas de repudio a la podredumbre que impide la construcción de la democracia participativa que tanto necesitamos.

Hago un reconocimiento a la actuación decidida del Ministerio Público y la CICIG por el cumplimiento de sus funciones y mandatos. Al denunciar y desmantelar algunas de las principales redes criminales enquistadas en el Estado, estas entidades contribuyen al rescate de la institucionalidad democrática que ha sido corroída por las propias autoridades.

Me adhiero al sentimiento generalizado de condena a la corrupción que atraviesa a las instituciones del Estado y a diversas expresiones de la actividad política, económica y social del país. La corrupción agrava y multiplica las condiciones de pobreza, e imposibilita el acceso ciudadano a la salud, la educación y la seguridad.

Me sumo al profundo rechazo que la sociedad está expresando en las calles frente a la descomposición del sistema electoral y de partidos políticos. Esa perversión de las actividades partidarias, ha convertido el clientelismo y la manipulación de la dignidad de las personas en una fuente de enriquecimiento ilícito y de acumulación de poder para los caciques de la política.

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Me solidarizo con las demandas ciudadanas para la depuración del sistema de justicia que ha sido secuestrado por los poderes paralelos. A lo largo de las últimas décadas se ha conformado un amplio y complejo aparato de impunidad que favorece a los poderosos y niega el acceso a la justicia a la mayoría de la población guatemalteca, especialmente a las mujeres y los pueblos indígenas.

Junto a la ciudadanía indignada, EXIJO: 1. La renuncia inmediata del General Otto Pérez

Molina de la Presidencia de la República, como máximo responsable de las redes de corrupción que saquean los recursos del Estado. El General Pérez Molina carece de toda legitimidad y es un derecho ciudadano revocar su mandato.

2. Juicio

y castigo a los autores intelectuales y materiales de los crímenes de corrupción que han causado muerte, dolor y privaciones dentro de la población más vulnerable. El Ministerio Público y los jueces encargados no deben permitir el uso abusivo de los recursos legales y de las medidas sustitutivas que favorezca la impunidad.

3.

La devolución de todos los bienes y recursos robados, mediante la aplicación de la ley de

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extinción de dominio, y destinar esos fondos al rescate de los sistemas de salud, educación, seguridad y justicia.

4. La depuración estructural del sistema de justicia que se encuentra cooptado por el crimen organizado y los poderes paralelos.

Sumándome al clamor de decenas de miles de jóvenes, mujeres, hombres, ancianos y niños de todos los sectores sociales, hago un LLAMADO A:

Conjuntar la inteligencia, la experiencia y las capacidades de una amplia representación de todos los sectores comprometidos en esta gesta cívica, para definir y unificar las agendas sobre la reforma a la Ley Electoral y de Partidos Políticos y de otras leyes obsoletas; la viabilidad constitucional de posponer el proceso electoral en curso; y la convocatoria de una eventual Asamblea Nacional Constituyente.

• A la Comisión Internacional contra la Impunidad,

respetuosamente solicito hacer pública la investigación sobre las fuentes de financiamiento de los partidos políticos. Ello permitirá evidenciar el control del crimen organizado sobre la mayoría de esas entidades electoreras.

• Construir los consensos urgentes y necesarios

para mantener y profundizar este histórico movimiento social para conseguir las transformaciones democráticas que hasta ahora le han sido negadas al pueblo de Guatemala.

Guatemala, 25 de mayo 2015.

El Centro para la Defensa de la Constitución -CEDECON-

Asociación apolítica que propugna por la efectividad del orden constitucional, declara: 1.

2.

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En aras de restablecer la credibilidad y confianza de los ciudadanos en la institución del Presidente de la República, evitar los riesgos de ingobernabilidad, alteración de la paz social y para lograr una revitalización de la legitimidad de la que debe gozar quien ejerce como Jefe de Estado y representa la unidad de la nación, el Presidente Otto Pérez Molina debe evaluar, dentro del marco constitucional, su separación definitiva del cargo.

En vista de la creciente desconfianza en el sistema de justicia debido primordialmente, a los señalamientos contra funcionarios, que abarcan a una magistrada de la Corte Suprema de Justicia,

es deber ineludible de las más altas autoridades del Organismo Judicial tomar todas las medidas necesarias para fortalecer y evitar un mayor deterioro del sector justicia, contemplando la separación de los funcionarios cuya permanencia afecta gravemente la institucionalidad, sin importar su alta investidura.

3.

Reitera que la Constitución establece vías por las cuales se pueden satisfacer la mayoría de las demandas de la población mediante reformas específicas al ordenamiento jurídico, sin quebrantar el orden constitucional, sin perjuicio de que el Estado Democrático Constitucional supone la estricta aplicación de la ley a todos los responsables de los actos de corrupción e impunidad que han generado esta crisis.

Guatemala, 25 de mayo de 2015.

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En la plaza pública puede nacer la transformación Por: Asociación para el Avance de las Ciencias Sociales AVANCSO

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n medio de este río revuelto, saber que puede salir. Posiblemente sea la conclusión a la que llegan algunas personas y sectores que también han acudido a la plaza para manifestar su repudio a los actos de corrupción. El miedo, que durante décadas se alojó en millones de guatemaltecos, ha cambiado de lugar y al parecer ha pedido hospedarse en esas personas y sectores.

La apatía, el miedo, la indiferencia, “el que me importa” se ha disipado y hoy alimenta una voluntad de transformación jamás vista en décadas. ¿A esto le temen esas voces? Quizá, el elemento más revolucionario que tienen las movilizaciones de abril y mayo y las que seguirán, seguramente, es que tal voluntad de transformación no nace en estructuras políticas o gremiales anquilosadas y espurias.

La clave de su vigor, de su creatividad de su inmensa fuerza – interior– es que hay un hastío total a que otros – militares, diputados, líderes empresariales, funcionarios públicos – tomen decisiones sobre nuestras vidas, nuestros bienes naturales y nuestros impuestos. El centro histórico se ha convertido en el ágora desde dónde se fragua el nuevo horizonte: la transformación total del país. ¿A esto le temen?

Nuestra corta trayectoria de vida democrática ha sido controlada desde su nacimiento. Y por lo mismo, las prácticas a la que estamos acostumbrados nos siguen como zombis: organizar mesas específicas dicen unos. Otros, quieren reunir a los notables de este país.

Notables que seguramente, su mayoría serán hombres, blancos, urbanos, heterosexuales y adultos. En este esfuerzo de ejercicio democrático, todo camino debe ser respetado pero ninguno puede sustituir a la plaza pública. Ese es el lugar para que aprendamos a oírnos, exponer, discutir y aprobar las acciones en curso. Ya escucho voces descalificándolo.

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Entiendo que todo lo nuevo genera miedo e incertidumbre. Porque en río revuelto, ganancia de pescadores, dice por ahí una entre tantas voces.

Por otra parte, la transformación será real si toma en cuenta a los más sufrientes de las políticas públicas, a los que han llevado la peor parte a lo largo de más de 200 años. No se puede repetir la historia de construir un país para unos pocos privilegiados, cuya codicia ha contribuido con el estado de cosas que hoy queremos cambiar.

Por el momento el clamor ciudadano ha puesto sobre la plaza los siguientes temas:

- Reforma a la ley electoral y de partidos políticos - La ley de contrataciones del Estado - La ley de servicio civil - La ley de comisiones de postulación - El anteproyecto de ley de desarrollo rural integral

- Moratoria a los proyectos mineros extractivos - Rechazo de los salarios diferenciados y al anteproyecto de inversión y empleo

- Revitalizar los sistemas de salud, educación y protección social

- Reforma fiscal - Suspensión de

las elecciones y pasar directamente a la reforma política del Estado

- Reforma al sistema de justicia - Fortalecimiento de las entidades corrupción.

contra la

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- Instalar un gobierno de transición hasta que se inicie la reforma profunda del Estado

-

Instalación de una Asamblea Nacional Multisectorial y Plurinacional.

Esta es una época de aprendizajes. De nacimiento y esperanza. Construir una sociedad justa, inclusiva, que cuida la tierra, porque es parte de ella, y a sus habitantes demandará un esfuerzo extraordinario de disposición al verdadero dialogo, a la apertura, a la disposición de caminar y construir juntos. Esta voluntad transformadora hará posible superar cualquier escollo que se presente.

Guatemala, 26 de mayo del 2015.

Fuente: http://avancso.codigosur.net/article/en-la-plaza-publica-puede-nacer-la-transformacion/

Guatemala demanda decencia y exige justicia Tercer Manifiesto

Capítulos Departamentales: Alta Verapaz, Chimaltenango, Guatemala, Huehuetenango, Quetzaltenango, Quiché, Retalhuleu, San Marcos, Santa Rosa, Sololá, Suchitepéquez, Totonicapán

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as movilizaciones del 25 de abril y del 1, 2 y 3 mayo, así como las que están previstas en los próximos días en diferentes puntos de la República, son claras señales del agotamiento de la paciencia social ante la burla y el descaro de un gobierno corrupto, mentiroso e incapaz.

Más de 250 mil personas nos hemos manifestando pacífica y ordenadamente en la ciudad de Guatemala y en otras ciudades como Quetzaltenango, Mazatenango, Chiquimula, Antigua Guatemala, Huehuetenango, San Marcos, Salamá, Cobán y Jutiapa, y más recientemente en Totonicapán, además de guatemaltecos en el extranjero, para exigir saber la verdad y mostrar nuestra indignación.

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IPNUSAC Nos manifestamos haciendo uso de nuestro derecho constitucional, para exigir del presidente Otto Pérez y la vicepresidenta Roxana Baldetti que renuncien a sus cargos, para que sean investigados por los graves indicios de responsabilidad en la defraudación aduanera del grupo mafioso “La Línea”, descubierta por el MP y la CICIG. Este fue el inicio de una ola de indignación que continuará hasta que la investigación del caso llegue a fondo y sean conducidos a los tribunales todos los implicados, especialmente la señora Baldetti.

Quienes integramos Poder Ciudadano, una coalición plural nacida de la sociedad misma en el último mes, nos sentimos orgullosos de formar parte de ese gran movimiento nacional por la decencia, el decoro y la dignidad, y al mismo tiempo nos exhortamos a:

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Mantener y aumentar la movilización social para exigir que se investigue al Presidente y la Vicepresidenta de la República.

- Solicitar

a la Corte Suprema de Justicia que envíe y dé trámite las querellas presentadas al Congreso de la República.

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- Demandar atención a las maniobras de posible

prevaricato de jueces comprometidos con la corrupción y prestos a mantener la impunidad.

-

Demandar al Congreso de la República que proceda a retirar la inmunidad a ambos mandatarios, para que sean investigados.

Es necesario pasar de la justa indignación ciudadana a la acción organizada, sin caer en las maniobras de quienes quieran llevar agua a su molino y obtener ventaja política de esta crisis. La sociedad sabe que la podredumbre descubierta también alcanza a muchos de quienes hicieron campaña electoral anticipada y llegará el momento en que deberán ser investigados.

El camino de la regeneración política del país pasa por la recuperación del sentido de la decencia en el servicio público y el fin de la impunidad como moneda de cambio entre los poderosos.

3 de mayo 2015. https://www.facebook.com/edgargutierrezgiron/ posts/596164583819574?utm_content=buffer1e75a&utm_medium=social&utm_source=facebook. com&utm_campaign=buffer

La junta directiva del Colegio de abogados y notarios de Guatemala a la opinión pública nacional e internacional Manifiesta: 1. Que el estado de Guatemala se ha organizado para

proteger a la persona y a la familia; y su fin supremo es la realización del bien común y que es deber del Estado garantizarle a los habitantes-Hombres y Mujeres- de la Republica: La vida, la libertad, la justicia, la seguridad, la paz y el desarrollo integral de la persona. ( Artículos 1. Y 2. De la Constitución política de la república de Guatemala).

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2. Se

6. La Presidencia de la Republica posee dentro de sus

3.

El presidente de la Republica responsable del nombramiento de altos funcionarios que han sido señalados de actos de corrupción que han generado una crisis de gobernabilidad y pérdida de credibilidad, ha conllevado a la perdida de legitimidad de su mandato.

hace necesario e impostergable reestructurar y democratizar a profundidad el sistema político, ya que tal y como funciona actualmente es un obstáculo para la democracia; no siendo suficiente la remoción de algunos funcionarios públicos para resolver la actual crisis.

El Organismo Judicial debe demostrar su independencia de los demás Organismos del Estado.

4. A todos los agremiados del Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala, conocedores del Estado de Derecho, nos debemos mostrar como la avanzada de un proyecto ético que rescate al Estado de Guatemala y demostremos que nuestras profesiones serán los garantes del respeto a nuestra Constitución Política y al ordenamiento legal.

5.

Al Ministerio Publico con el acompañamiento de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala, se le exhorta a continuar las investigaciones tendientes a que no queden en la impunidad los actos de corrupción que se dan en la gran mayoría de las instituciones públicas del Estado de Guatemala.

deberes Constitucionales : a) La defensa y seguridad de la nación, así como la conservación del orden público; b) Administrar la hacienda pública con arreglo a la ley y c) Representa la unidad nacional y dignidad de la nación.

En atención a las masivas manifestaciones, se solicita al Señor Presidente Constitucional escuchar y obedecer el clamor del pueblo y renunciar al cargo.

7.

Valoramos la resolución unánime en apoyo a la Junta Directiva del Colegio de Abogados y Notarios de Guatemala en esta trascendental e histórica decisión, dado en la Reunión iberoamericana de Colegios de Abogados y agrupaciones de Abogados con la presencia de veintidós países que representan a 300 millones de habitantes: celebrada del veinte al veintitrés de mayo de dos mil quince en Santo Domingo, República Dominicana.

Guatemala mayo de 2015.

Lic. Marco Antonio Sagastume Gemmell Presidente Lic. Augusto Jordán Rodas Andrade Vicepresidente Licda. Damarys Nohemí Oliva García Vocal II Lic. Mario Salvador Rubio Pérez Prosecretario

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Lic. Jacobo Benjamín Reyes Ruiz Vocal I Lic. Jorge Augusto Menéndez Barahona Secretario Lic. German Oswaldo Pop Órenos Tesorero

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El Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras CACIF

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or el rechazo unánime a la corrupción, por la necesidad de que se haga justicia en los casos denunciados pero sobre todo por la indignación ante el mal uso del dinero de los contribuyentes y las grandes necesidades de la nación,

Manifiesta:

Al Presidente de la Republica, que antes de que deje el cargo tiene la responsabilidad de asegurar la restitución efectiva de los recursos públicos que en el organismo Ejecutivo no ingresaron o hayan sido y siguen siendo sustraídos de los fondos del Estado.

Al Ministerio Publico, Que haga uso inmediato de la figura legal de enriquecimiento ilícito y de extinción de dominio sobre cualquier funcionario-no importa su jerarquía-, así como cualquier particular que como consecuencia de las investigaciones no expliquen la procedencia legal de sus capitales y propiedades.

Es importante mencionar que la institucionalidad del país no está vinculada a la permanencia en su cargo de quien ejerce las funciones de la presidencia de la República, y que toda sanción sin restitución es también una forma de impunidad.

Guatemala, 28 de mayo de 2015.

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Carta de Solicitud de Renuncia al Presidente

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Columnas !La Ruta del Cambio!

Edgar Gutiérrez

1. Renuncia de Otto Pérez y un gobierno de transición 2. No a la reelección de diputados 3. Elecciones, pero bajo nuevas reglas Edgar Gutierrez

1. Renuncia de Otto Pérez y un gobierno de transición

Cuando renuncie Otto Pérez, el vicepresidente Alejandro Maldonado asume como presidente y debe poner a consideración de la sociedad tres nombres de personas honorables y capaces para designar al vicepresidente. El soberano, que es el pueblo, le indicará al Congreso a quien elegir. Los nuevos gobernantes nombran a un gabinete de funcionarios dignos que limpian las instituciones y comienzan a aplicar una Ley de Servicio Civil para profesionalizar las instituciones.

2. No a la reelección de diputados

El pueblo firma una petición de reforma a la Constitución mediante Consulta Popular con un solo objetivo: eliminar la reelección de diputados y alcaldes. Es la reforma de los artículos 157, 164 y 254 de la Constitución.

3. Elecciones, pero bajo nuevas reglas

Las elecciones solo se pueden realizar si se elimina el financiamiento anónimo y corrupto, si todos los candidatos tienen acceso equitativo a los medios de comunicación, cuyas frecuencias pertenecen al Estado, y si se permite que la ciudadanía participe a través de comités cívicos distritales que postulen candidatos al Congreso. Elecciones con las actuales reglas es perpetuar la dictadura de la corrupción. #JusticiaYa #BastaYa #PoderCiudadano

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La ciudadanía amplía su conquista Edgar Gutiérrez

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legría y diversidad, eso vi el sábado 30 en la Plaza. No es una manifestación. Son muchas, como pequeñas corrientes con vida propia en un inmenso océano. Un grupo de teatro desfilaba en perfecto orden portando carteles de #RenunciaYa y consignas en contra de los “dipucacos”. Una, qué digo, muchas familias en diferentes puntos saltaban, y con pitillos y sus brazos en alto lanzaban gritos furiosos de desdén en contra de los políticos. Frente al Palacio se concentraba el mayor ruido y energía, y la población era más densa. En algún momento hubo danza, música y representaciones.

En una carpa muy bien montada se recogían firmas en apoyo a la reforma política. En las expresiones hay una reivindicación profunda de la política como servicio público. Ante mis ojos desfilaban en carteles frases de José Mujica, el expresidente de Uruguay: “A los que les gusta mucho la plata hay que correrlos de la política.”

Y de Martin Luther King. “Lo preocupante no es la perversidad de los malvados sino la indiferencia de los buenos.”

Este sábado además de la concentración vespertina masiva hubo diversas actividades desde la mañana y hasta medianoche. A partir de las 6 a.m. una oración en la Plaza. Más tarde, a las 10 a.m. una asamblea de estudiantes en el campus de la Universidad Landivar y actividades en la San Carlos, donde se entremezclaban familias que asisten a los Cursos Libres, estudiantes, profesores y dirigentes campesinos. Mientras en el

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parque Morazán, al mediodía, convocados por HIJOS, confeccionaban creativas pancartas; en la tarde CEUG (la Coordinadora de Estudiantes Universitarios) y ProtestArte llamaban a una reforma a la Ley Electoral, y otras organizaciones, Lectores Chapines, Cambiemos Guatemala y Danza Contemporánea levantaban el grito de “¡Renuncia Otto Pérez!”. En la noche Ciudadanos concluyó una emotiva marcha frente a la Corte Suprema de Justicia.

La gente ha salido a reconquistar el espacio público que le pertenece y le fue arrebatado desde hace tres generaciones. El 25 de abril de 2015 quedará asentada la partida de nacimiento de esta ciudadanía que ha salido, durante cinco semanas ya, a reivindicar el buen ejercicio de la política. No quieren este sistema, por tanto, rechazan la reelección. Ansían una reforma que permita la sana regeneración del tejido político.

Hay que encontrar una fórmula constructiva que permita edificar un “país distinto”. Es claro que los partidos, los diputados, el Gobierno y todos los que se han beneficiado del sistema se mueven resbaladizos y hasta agresivos viendo como salvan su gallina de los huevos de oro. Enclaustrado, me dicen, el presidente Pérez pende de un delgado hilo. La señal anticipada de su caída, me indican, será la renuncia de Gustavo Martínez, su secretario más cercano.

Guatemala 31 de mayo de 2015 https://www.facebook.com/egutierrezgiron?fref=ts

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Es la hora de la sociedad

La clase política sin margen de maniobra Edgar Gutiérrez

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l presidente Otto Pérez insiste en que no renunciará, a pesar de las sonoras demandas ciudadanas, a las que esta semana se agregan el Colegio de Abogados y el Centro de Defensa de la Constitución. Mientras sostiene su negativa, Pérez ha invitado al Congreso y algunos sectores sociales a activar reformas que durante años permanecieron encajonadas. Los diputados han previsto abrir hoy unas mesas para tratar esas leyes, referidas al régimen electoral, el sistema de justicia, transparencia y las normas internas que rigen a ese organismo.

El problema es que ellos entran fuera de tiempo. Ni el presidente ni los diputados tienen credibilidad. La sociedad movilizada mantiene la sartén por el mango, y por eso cualquier iniciativa que aquellos muevan sin tocar el corazón del sistema corrupto y los mecanismos de secuestro de la democracia, será de plano rechazada en las calles. Les convendría ceder la iniciativa a las instancias civiles que procesan los cambios y que están en consultas amplias con la sociedad a fin de traducir el sentimiento ciudadano de la transformación.

El corazón del problema está en el financiamiento político que ha creado un inmenso hábitat de negocios corruptos en las instituciones públicas, que estimulan la multiplicación de la actual clase de mercaderes de la política, donde sea que estén: en el Ejecutivo, el Congreso, las municipalidades y, ahora se ve, entidades autónomas como el IGSS.

Las reformas no parten de cero, solo tienen que ir en sintonía con la demanda ciudadana de depuración de las instituciones y de cambios profundos, incluyendo la renovación y giro del signo de la clase política, así como la profesionalización del servicio público. Varias instancias civiles han trabajado desde hace casi una década reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos, que toca el financiamiento político y que los partidos en el Congreso han desoído. Conarep y el Consorcio tienen un conocimiento asentado en materia de régimen político, y ahora la Plataforma Nacional que convoca la Usac retoma ese aprendizaje para adaptarlo a esta coyuntura fluida, y ponerlo a debate nacional.

Otra instancia, liderada por empresarios, en la cual participa Acción Ciudadana, trata iniciativas contra la corrupción. Icefi concentra sin duda el conocimiento técnico más profundo sobre temas tributarios. El CUC y organizaciones indígenas trabajan otros ámbitos de reforma, igual que el Observatorio Maya, Poder Ciudadano, el Foro Guatemala e instancias juveniles, sobre todo universitarias, entre otras. La Fundación Esquipulas, de poderosa convocatoria, promueve el debate sobre asuntos sustantivos del régimen político.

Vivimos, como dice Jorge Mario Rodríguez, un proceso destituyente. Es la hora de la sociedad. El presidente y los diputados no tienen margen de maniobra. Si dan un paso en falso y tratan de escamotear el clamor de la gente, la protesta puede salir de curso.

28 de mayo 2015. http://www.elperiodico.com.gt/es/20150528/ opinion/13011/Es-la-hora-de-la-sociedad.htm

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¿De qué se trata esta primavera?

Esta no es una sociedad de zombis Edgar Gutiérrez

U

n movimiento social, o varios, pero que confluyen en las demandas en contra de la corrupción, los corruptos y los corruptores. Pero, sobre todo, en los anhelos no expresados enteramente, pero que se respiran en la calle y en las propias redes sociales, de librarse de la tiranía del mal vivir. Especialmente los jóvenes. Librarse de vivir con miedos y angustias, sin poder confiar, soportando inexplicablemente la humillación de otros, como si no perteneciéramos a la misma comunidad. Es una sacudida más profunda que solo política la que estamos experimentando como sociedad. Es una primavera de valores y solidaridad, cuya bendita explosión no podemos explicar cómo es que ocurre.

Es un movimiento social, o varios, sin formas organizativas ni programa, dicen algunos con preocupación. Y sin líderes notables, señalan otros con resignación. No me adhiero a la nostalgia o la costumbre de buscar organización donde la hay, ni líderes donde ya están. Son las formas de construir la comunicación y la movilización lo más relevante ahora. Los mensajes sociales son de una lógica contundente, porque salen de adentro de las personas. No son rebuscados ni con segundas intenciones.

Amigos me preguntaban el 25 de abril y el 16 de mayo al caer la tarde y abandonar la plaza Central: ¿y ahora qué? Hay que seguir hasta lograr las metas,

porque esas metas simbólicamente expresan el camino de liberación. Después veremos en qué sistema las traducimos. Pero, de nuevo: esta no es una revolución política, es de recuperación de lo que da sentido a la vida en comunidad. Recuperar la alegría, la identidad de pertenencia. Dignidad y orgullo. Es un grito desesperado y profundo de supervivencia no solo material.

Por eso tiene su propio ritmo y velocidad, que no se atiene al calendario político ni electoral, tampoco a la planificación de los ideólogos. Es la rebelión en contra de un sistema que nos ha reducido a la vileza y pretende arrebatarnos humanidad.

Lo más importante de este último mes que hemos transcurrido entre la calle y conciliábulos (tratando de entender lo que pasa e incidir, aún sin entender), es que constatamos que esta no es una sociedad de zombis.

Estamos vivos, vibramos. Y algo nos dice que hasta que esa energía social no termine de explotar para desvelar humanidad y valores, no habrá paso a las instituciones ni a los planes políticos, que están ansiosos por “conducir” y “ordenar” el o los movimientos, que ya tienen su propia y natural conducción y orden. Cuando esta rebelión cultural termine de desvelarse, será mucho más fácil a los líderes sociales y políticos, y a los ideólogos, encajar los modelos. Pero no antes.

24 de mayo 2015. http://www.elperiodico.com.gt/es/20150525/opinion/12863/%C2%BFDe-qu%C3%A9-se-trata-esta-primavera.htm

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El Estado mafioso depredador La sociedad lo está enfrentando

Edgar Gutiérrez

H

ace unos meses fue una red criminal en presidios. Hace cuatro semanas fue una estructura mafiosa en las aduanas. Ayer, la corrupción al más alto nivel en el IGSS. Mañana será el financiamiento ilícito de campañas electorales. Después estructuras clandestinas en la PNC, en Migración. Una historia interminable. A ese paso, la Cicig se quedaría diez años más, multiplicando su personal 50 veces hasta ser un MP. ¿Ante qué estamos?

Judicialmente se está desvelando la naturaleza que ha ido adquiriendo el Estado en plena democracia. Este es un Estado mafioso depredador. No es solo corrupción, ni solo mafia. La corrupción se limpia con una crisis de gabinete, depuraciones y reformas administrativas.

La mafia no siempre es depredadora. Hasta ofrece paquetes tecnológicos a campesinos, abre hospitales de primer mundo de acceso gratuito a población pobre; crea empleo y establece orden, sometiendo a la delincuencia común. La mafia puede llenar el vacío de Estado con cierta eficacia.

El análisis que hemos empleado desde hace un par de décadas sobre instituciones públicas porosas a la corrupción y el crimen organizado y los poderes fácticos, aunque es aún aplicable en ciertas parcelas del Estado, resulta insuficiente para explicar esta crisis de estatalidad, o sea, de fracaso de Estado.

El Estado mafioso depredador es corrupto y criminal, y está conducido por autoridades electas y nombradas según la ley, que han gozado de legitimidad social. Es más, las elites conservadoras se resisten, a pesar del derrumbe y la evidencia, a despojar de su dignidad a las autoridades. En parte, por inercia; en parte porque algunas han estado (o estuvieron) seducidas por inversiones prometedoras, o de plano fueron coaccionadas. Hasta hace poco más de un mes la sospecha se reducía a chismes, enconos leyendas urbanas de un medio (elPeriódico).

Como lo dijo el programa radial de parodias El Chapus (Emisoras Unidas) el lunes 18: la sociedad se ha plantado, sin organizaciones estables ni liderazgos visibles, y, como los equipos de futbol, solo cuenta con un refuerzo internacional, la Cicig. Esa sociedad, integrada por clases medias y, tras la movilización de ayer, con campesinos, estudiantes de secundaria de barrios populares, está disputa a derrotar a ese Estado.

Las elites deben correrse hacia el lado de esa sociedad movilizada, y el cuerpo diplomático debe ver que la derrota de ese Estado mafioso es la mejor garantía de estabilidad geopolítica y de reconstrucción nacional. La sociedad movilizada, enfrentando al Estado mafioso, está evitando ahora mismo una intervención extranjera, tipo Cascos Azules, dentro de dos años, en caso las mafias se releven a través de elecciones nutridas por la corrupción y el crimen, que es como están previstas, según las reglas que se dieron así mismas.

20 de mayo 2015. ht t p : / /e l p e r i o d i c o . c o m . g t /e s / 2 0 1 5 . 0 5 2 1 / opinion/12707/El-Estado-mafioso-depredador.htm

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Crónica de la Plaza

“‪#‎RenunciaYAFase2‬” Edgar Gutiérrez

M

uy seria baja la niña del auto, acompañada de su mamá y una hermana mayor. Después de asomarse a una docena de parqueos, al fin lograron un lugar al lado del Teatro Abril, y desde ahí la chica y su familia se enfilan hacia la Plaza Constitución.

En las calles del Centro se sienten seguras, y animadas cuando encuentran mucha más gente, sobre todo jóvenes, con banderas de Guatemala y portando un sinfín de carteles “#RenunciaYAFase2”. La niña ya ha desplegado el suyo –escrito con su puño y letra- con total seguridad: “Gobierno rata, devuélvanos la plata”.

Sobre la Sexta Avenida, los sancarlistas, los más veteranos en estas lides, ponen la música, consignas, pelotones bien ordenados; saltan, bailan e invitan a los demás. Es difícil llegar a la Plaza. Está llenísima, aunque la gente sale y entra. Pasó la lluvia, que le dio un toque de estoicismo a la protesta. Veo gente feliz por doquier.

La entonación del himno puso la piel de gallina a unos, sacó lágrimas a otros y subió una pera a la garganta de otros más. El fervor se apodera de la Plaza. Priva un espíritu de fraternidad o de complicidad implícita, raro en nuestras calles. No hay empujones ni rebatiñas.

Muchos se saludan, se toman fotos. Los encuentros fortuitos entre amigos se celebran con algarabía.

Jóvenes voluntarios levantan cualquier basura en la Plaza y la guardan en bolsas. Hay seguridad y no policías, hay orden y no gobierno. A pesar de las nubes plomizas, esta es una luminosa tarde cívica de mayo.

Frente al Palacio, un joven canoso subido en una plataforma se quiere dirigir a quienes están cerca. Varios levantan la mano diciendo “¡no, no!”, pero él alcanza a decir:“unifiquemos la consigna y que sea: ¡Otto renuncia!”

La gente cambia de parecer y aplaude. “¡Que renuncie!

El orador sigue: “Queremos reforma política”. “Si, si.” Al fondo, recostada sobre el Palacio, hay una imponente valla. Pareciera que los manifestantes llevaron una de las miles de vallas de Baldizón sembradas en la ciudad.

Le han pintado unos pelos largos y crespos sobre las sienes y una tremenda nariz, también roja. Así, Baldizón es Brozo, el tenebroso payaso de la televisión cómica, cuyo nombre deriva del mexicanismo “broza”. Abajo de la foto se lee: “No le toca”.

Levanto la vista y desde los balcones del Palacio se asoman tímidamente, sostenidos por manos que apenas se ven, unos carteles solidarios con la protesta: “Fuera”, “Renuncia YA”. Son los signos de la soledad del poder ya ilegítimo, un poder que se derrumba.

17 de mayo 2015. h t t p : / / w w w. b u e n o s e a r c h . c o m / ? q = C r % C3%B3nica+de+la+Plaza+%E2%80%9C%E2%80%AA%23%E2%80%8ERenunciaYAFase2%E2%80%AC%E2%80%9D%2C+elperiodico+edgar+gutierrez&babsrc=NT_kms&s=web&rlz=0&sd=31&as=0&ac=0

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El tiempo se agota

¿Lo entenderán los políticos?

Edgar Gutiérrez

E

l presidente Otto Perez Molina no está tomando el pulso real de la sociedad. No está sintiendo el espíritu de las calles ni de las redes sociales, donde la ciudadanía está pidiendo ahora su renuncia.

Después de tres semanas de protestas se ha instalado en la ciudadanía el espíritu de desobediencia civil, el cual nace de una conciencia que Mahatma Gandhi definió en 1930, pero que nosotros podemos usar como nuestra ahora mismo: “Nadie está obligado a cooperar en su propia pérdida… La desobediencia civil es un derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella… La democracia no está hecha

para los que se portan como borregos… En un régimen democrático, cada individuo guarda celosamente su libertad de opinión y de acción. Cada ciudadano se hace a sí mismo responsable de todo lo que hace su gobierno; tienen que prestarle todo su apoyo mientras ese gobierno vaya tomando decisiones aceptables.

Pero el día en que el equipo que está en el poder haga daño a la nación, cada uno de los ciudadanos tienen la obligación de retirarle su apoyo.”

15 de mayo 2015. h t t p : / /e l p e r i o d i c o . c o m . g t /e s / 2 0 1 5 0 5 1 4 / opinion/12437/El-tiempo-se-agota.htm

Y luego de Baldetti, ¿qué?

Sigue el clamor de renuncia

Edgar Gutiérrez

R

oxana Baldetti ganó una semana. De no haber renunciado el viernes 8, la Cicig y el MP habrían logrado sin duda su captura inmediatamente después del retiro de la inmunidad en el Congreso. Por eso tiene sentido creer que ella salió de Guatemala, aunque no haya registro migratorio. Pero quién sabe si tiene sentido huir cuando los santuarios de corrupción en casos de alto perfil son ya escasísimos.

El mundo se le desmoronó a Baldetti en la última semana. La presión social se volvió irresistible y modificó las agendas de los actores. En la CSJ solo la magistrada Blanca Stalling se opuso inútilmente por un momento. Y una vez que la Comisión Pesquisidora quedó bajo control del partido Lider, siguió el vértigo.

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Salvador Baldizón, quien presidía la Pesquisidora, no quería dejar lugar a dudas. Estaba dispuesto a instalar pantallas gigantes con bocinas para que la gente viviera el juicio político en tiempo real.

La renuncia abrevió ese procedimiento, aunque el procedimiento de la renuncia haya sido heterodoxo. A última hora en el Pleno, el diputado Gudy Rivera sacó de entre sus papeles la auténtica del abogado de Baldetti.

Todos se hicieron de la vista gorda. Los diputados querían pasar el brasero a los fiscales. Y al aceptar la renuncia por unanimidad, el Gobierno respiró. Nadie preguntó por el paradero de Baldetti. Quién sabe si el arraigo no llegó a destiempo.

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Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

La prisa por salir de Baldetti, en la lógica del partido Lider y de los diputados, calma las calles para que, por fin, el clima electoral se instale. Pero no hay garantías. Manuel Baldizón lo sufrió en carne propia el mismo sábado 9 en Antigua, poco antes de que el Congreso sesionara.

No pudo celebrar su mitin. Un antigüeño de pura cepa me escribió esa noche: “Lo sacamos”, al tiempo que me enviaba un meme con la leyenda: “Cópiale a la Baldetti y renuncia a la candidatura”.

la renuncia de Baldetti esté rebasado. En tal caso solo una operación “milagrosa” podría guardar las formas: se elige a un Vicepresidente independiente, que luego asume la Presidencia. Se aprueba una reforma política y de transparencia de vigencia inmediata. Y la CC lo santifica todo. Claro, a Lider eso no le gustaría, quizá a la UNE tampoco.

La gente rechaza de plano a la clase política. En las calles sigue el clamor de renuncia, ahora dirigido al presidente Pérez y se oye más cerca “que renuncien los diputados”. Puede que el control de daños que suponía

http://elperiodico.com.gt/es/20150511/opinion/12300/Y-luego-de-Baldetti-%C2%BFqu%C3%A9.htm

10 de mayo 2015.

El triunfo de la sociedad sobre el abuso y la soberbia Edgar Gutiérrez

E

l 25 de abril es el día de la Dignidad. Ese día se cambió la historia. La avenida ancha y sin fin de la impunidad y el latrocinio, encontró un tope.

La sociedad levantó el callejón sin salida de Baldetti.

Lo entendió Cacif, lo comprendió la Corte Suprema de Justicia y, en mi vaticinio, hasta los diputados, que no tendrán de otra... ¿Lo entenderá Baldetti? Mi vaticinio es que no, pero no le queda de otra. A regañadientes y vociferando amenazas de arrastrar a otros con ella, tendrá que renunciar.

Ahora bien, ahí no termina el problema. Nos quitaron tantas cosas, pero como nos quitaron también el miedo, hemos recuperado el derecho de soñar, que es abrir el horizonte para nuestros niños. ¡Vamos por más!

8 de mayo 2015. https://www.facebook.com/egutierrezgiron?fref=ts

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El recurso de la microcirugía

Baldetti y algunos políticos estarán en la picota Edgar Gutiérrez

L

a vicepresidenta Roxana Baldetti se quedó en soledad. Al presidente Otto Pérez le están tendiendo los puentes. Él decidirá si se queda en el castillo, conectado a la nave norte, o sale solo antes de que corten esos puentes. No es que lo crean inocente.

Es un cálculo de gobernabilidad mínima. No quieren que Guatemala 2015 sea Honduras 2009.

Cacif venía dando señales de vida desde hace 2 semanas cuando dio la espalda al gobernante y obligó, por vacío, a que éste le siguiera los pasos prorrogando el mandato de la Cicig. Entretanto las clases medias no mitigaron la protesta y más bien esta se extendió en comunidades indígenas emblemáticas como los 48 cantones de Totonicapán el lunes, tras las marchas del viernes 1 y sábado 2. Baldetti lleva 17 días de encierro.

Pérez hizo un par de pruebas públicas –ante salubristas y en Quiché- y salió abucheado al nombrar a su segunda.

Cacif volvió a la carga ayer al pedir la renuncia de Baldetti y blandir el recurso de huelga nacional para que no quedase duda sobre la brecha con la nave norte de Casa Presidencial. Había que alcanzar a las clases medias y ponerse al frente. La encendida alocución de Dionisio Gutiérrez de 8 minutos en la TV una semana antes tuvo un efecto boomerang, pues en la marcha del 1º de Mayo él salió destacadamente señalado como parte del problema. Ya no es 1993.

Pero de todos modos Cacif, bajo otro liderazgo, el de Jorge Briz, está alcanzando a unas clases medias que él entiende mejor y, de paso, se pone al lado de Washington y de sus preocupaciones geopolíticas; además, sobra decir que después de la sentencia judicial contra Marllory Chacón, por narcotráfico y lavado, ayer en Miami, el Departamento de Justicia tiene en Guatemala la sartén por el mango. Es suficiente la información y fuerza que concentran como para sacudir el árbol y que caigan unas cuantas frutas podridas, aunque otras queden en el árbol pendiendo de miedo.

El martes Pérez pidió debido proceso para él y Baldetti, antes de exigirles la renuncia, y la Corte Suprema de Justicia (que ellos y Baldizón eligieron) respondió hoy. En pleno los magistrados, poco después del pronunciamiento de Cacif, calificaron la validez del antejuicio contra Baldetti. Ahora la prueba de ácido pasará al Congreso, al que le urge que se instale el clima electoral. Teme los sartenazos de la Cicig y de Washington, por el tema del financiamiento ilícito y otros vínculos indecibles, pero no tienen alternativa. Al igual que Baldetti muchos diputados se metieron en el callejón creyendo que la impunidad es la vía ancha y sempiterna donde cualquiera se pierde.

Si el plan de control de daños funciona, Baldetti y algunos políticos estarán en la picota dentro de poco.

Faltará ver si eso convence a las desconfiadas clases medias y si corta el virus de la desobediencia civil que comienza a instalarse extendidamente en la conciencia ciudadana.

6 de mayo 2015. http://www.elperiodico.com.gt/es/20150507/ opinion/12138/El-recurso-de-la-microcirug%C3%ADa.htm

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Decencia

El valor en una crisis de estatalidad Edgar Gutiérrez

N

o es solo crisis de Gobierno a la que asistimos.

Decirlo es mala noticia, pues si tuviese ese alcance habría más chances de atajarla.

Apostaríamos a que con el cambio de Gobierno se reacomodan las fuerzas y se abre otro horizonte.

Hubo crisis de Gobierno en 1990 cuando la DC, en el poder, y el Cacif se enfrentaron por los tributos y la huelga de pagos patronal puso a trabajar horas extras la maquinita emisora del Banguat; en el jaleo, la inflación se disparó al 60 por ciento. El golpe de Estado de Jorge Serrano en 1993 también fue crisis de Gobierno, pero que las fuerzas corporativas aprovecharon para modificar parte de la estructura de Estado diseñada en 1985. De allí en adelante los déficit presupuestarios se compensaron comprando dinero caro en el mercado; las comisiones de postulación se ampliaron a todos los órganos contralores con el mercado activo de universidades, y los partidos se volatilizaron como empresas familiares o corporativas, hasta que un Frankenstein naranja/rojo salió de la fábrica en 2014 y tomó el control de los fondos públicos y los órganos contralores.

Ni siquiera es crisis de Estado la que sufrimos, pues el rasgo de esa crisis es que al menos dos modelos compiten. Uno quiere modificar el status quo, y el otro preservarlo en medio del estallido de la pérdida de legitimidad estatal, contrapuesta a la aspiración plausible de mejorar la vida de la población. En la crisis de Estado el control del poder político es capital pues desde ahí se administra el alcance y ritmo de las inevitables reformas. Crisis de Estado se atravesó en 1954 y en 1980, cuando compitieron dos modelos de Estado y de sociedad. No fue un pulso de formas democráticas, que ahora aceptamos como buenas, sino de conspiraciones de enorme alcance, levantamientos y revueltas armadas con altísimo costo social.

Ahora asistimos a una crisis de estatalidad. Es una dimensión desconocida: el Estado se agota y fragmenta en una relación simbiótica con poderes criminales que lo capturan, canibalizan y diluyen. Esos poderes no necesitan un contrato de responsabilidad de Estado, pues florecen en el caos e imponen sus propias reglas de “crimen y castigo”. En una crisis de estatalidad carece absolutamente de sentido la identidad “derecha” e “izquierda”. El asunto giran, como lo expresaron las clases medias el 25 de abril en la Plaza Central, en torno a un valor: decencia.

4 de mayo 2015. http://www.elperiodico.com.gt/es/20150504/ opinion/12004/Decencia.htm

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La decisión del presidente Edgar Gutiérrez

El manejo de la crisis no ha sido bueno, pero el trato mediático ha sido peor. Un verdadero boomerang gubernamental. La conferencia de prensa del viernes 17 dejó azorado al presidente Otto Pérez, pero la comparecencia ante los medios, el domingo 19, de la vicepresidenta Roxana Baldetti, dejó en claro hacia dónde apunta el dedo acusador de la sociedad. Ella exacerbó los ánimos, y las redes sociales dan fe.

No es que el presidente Otto Pérez haya sido mal asesorado. Es que no comprende la naturaleza de la crisis en que está. Un poco a destiempo, pero sus asesores le dieron el menú en orden de importancia: 1. Pida la renuncia de la vicepresidenta Baldetti, 2.

Prorrogue el mandato de la Cicig y 3. Lance una campaña publicitaria que lo ponga del lado de los “buenos”.

Desde luego, el gobernante dijo “sí” a la tercera recomendación, que no fue bien ejecutada, porque contiene información falsa e increíble para la gente.

Y tras rechazar la segunda, terminó aceptándola a regañadientes creyendo que así aplacaba la crisis. Al día siguiente de anunciar la prórroga de la Cicig, el viernes 24, fue a explicar a comandantes del Ejército porqué había tomado la decisión contraria a la que les había anticipado. Según él, estaba haciendo control de daños.

Pero, otra vez, se equivocó. No era ahí donde debía concentrarse, pues los militares no van a dar un golpe de Estado, por ahora, ni el malestar principal en las filas del Ejército es la Cicig, sino lo que el resto de la gente ve: corrupción y “malas juntas”. La evidencia de dónde está el problema fue la masiva concentración en la Plaza Central el sábado 25. Y la respuesta del presidente Pérez, el lunes 27 en la noche, a través de un mensaje pre-grabado, mostró que “no hay peor ciego que el que no quiere ver”. En ese mensaje, entre líneas, ofreció la cabeza de Juan Carlos Monzón, el ex secretario Privado de Baldetti. Y las críticas arreciaron por no tomar al toro por los cuernos.

Las señales públicas le han llegado a Pérez desde la visita del vicepresidente Biden a inicios de marzo, cuando Baldetti tuvo que salir del país ante el desdén del representante de Washington. Y han continuado: el Cacif le propuso que encabezara una limpia de corrupción en su Gobierno. O sea, lo tratan como parte de la solución, todavía. Ayer el presidente se reunió con el G-40 (grupo de economistas) y recibió el mismo mensaje: el arreglo de la Sat no es técnico y tiene un pre-requisito político: separe a la vicepresidenta. Si el presidente Pérez no suelta a Baldetti, la corriente se lo llevará a él (como ya está ocurriendo). Es cierto que puede aguantar, y Baldetti tiene aún recursos políticos a la mano, pero más temprano que tarde ambos pagarán el costo y su futuro capital político en el Congreso será a todas luces deficitario.

29 de abril 2015. https://www.facebook.com/egutierrezgiron?fref=ts

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El presidente oyó, pero no escuchó Edgar Gutiérrez

A

yer, Lunes 27, a las 10pm, el presidente Otto Pérez envió un mensaje a la nación en el que se refirió a la mafia en la Sat y en particular al ex secretario Privado de la vicepresidencia, Juan Carlos Monzón, sobre quien recargó enfáticamente toda la responsabilidad; además repitió lo que dice la propaganda oficial sobre que Pérez impulsó, hace un año, a la Cicig a realizar la investigación sobre las aduanas. Y retransmitió, en diferido, la prórroga del mandato de la Cicig, que se conoció el jueves pasado, y anunció que ha convocado a un grupo de especialistas para reestructurar la Sat y volverla más eficiente.

de antejuicio a la vicepresidenta. Entre más se tarde la Corte en responder, mayores serán los reflectores de la opinión pública sobre ella. Y si desecha la querella, como lo hizo hace unos meses, inexplicablemente, con el diputado del PP, Gudy Rivera, los magistrados no escaparán del juicio social y de la Historia.

En una palabra, el presidente se fue por las ramas. No escuchó lo que dijo la sociedad en la Plaza Central el sábado. El clamor unánime es justicia, y justicia significa investigar las responsabilidades de la vicepresidenta y del propio presidente dentro de la estructura de la mafia de la Sat, que se filtran en las escuchas telefónicas que presentó en tribunales la Cicig el viernes antepasado.

El próximo sábado viene la convocatoria a elecciones generales a celebrarse en septiembre, pero no debemos quitar el dedo del punto ni distraernos con capturas de otros casos del pasado, convenientemente sacadas a luz ahora, llámese MDF o casos de fraudes bancarios, como banco del Comercio o banco Uno. Debemos seguir con el tema de la Sat hasta que se haga justicia, verdadera justicia.

La sociedad ya se cansó de que le vean la cara... Por eso salió a protestar el sábado. El presidente, no lo entiende, y persistió en vernos la cara. Él apeló al debido proceso, y eso es lo que corresponde: ya se presentaron querellas antes jueces y estas pasaron a la Corte Suprema de Justicia; la Corte debe, ex oficio, trasladar al Congreso las solicitudes de levantamiento

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El caso de la mafia de la Sat es, en definitiva, la prueba de ácido para los tres poderes del Estado. El presidente no está pasando la prueba. Veremos qué dice la Corte y esperaremos, si acaso le llega, la reacción de los diputados.

De lo contrario estaremos avalando que venga al que "le toca", ¿qué le toca? ¿seguir con la feria de corrupción y ruina de la nación?

28 de abril 2015. https://www.facebook.com/egutierrezgiron?fref=ts

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Protesta de nuevo tipo Edgar Gutiérrez

L

a concentración del sábado 25 fue multitudinaria y ejemplar. Ordenada, educada, sin incidentes y con un objetivo claro: que el presidente Pérez y la vicepresidenta Baldetti renuncien, sea a su inmunidad o al cargo para el cual fueron electos, y que han deshonrado. Fue una verdadera demostración de civismo. Del tipo de protesta del siglo XXI, convocada a través de redes sociales, espontánea, sin líderes visibles ni bases organizativas consistentes, menos partidos políticos.

Núcleos familiares, grupos de amigos de oficina, vecinos y aulas comenzaron a confluir hacia la Plaza Central antes de la hora prevista, desde los cuatro puntos cardinales. Enormes contingentes de jóvenes manifestaban por primera vez; han tomado confianza y perdido el miedo. Alrededor de 10 mil estudiantes de la Usac caminaron desde la Ciudad Universitaria y se les unió mucha gente en el camino.

La gente portaba sus cartulinas escritas a mano y vestían casualmente bajo un sol escondido, pero abrazador. Sonaban pitos, bocinas, trompetillas, sartenes y cacerolas. Alzaban orgullosos y con coraje banderas de Guatemala. En más de una ocasión se cantó, con emoción, el Himno Nacional. Y la consigna que nos encendió era “¡fuera! ¡fuera! ¡fuera!”, al tiempo que cada quien alzaba la frente ante el Palacio, símbolo del poder político, y flexionaba su brazo imperativamente.

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La única respuesta planificada del régimen fue bloquear las señales electrónicas, de celulares y comunicaciones de los periodistas, como que si “encapsulando” a la población concentrada en la Plaza de la Constitución iba a controlar daños de imagen o evitar contagios.

Fue vano y otro uso inútil de los recursos públicos.

Simultáneamente en casi todo el país la gente se pronunció con similares consignas e ímpetu. El mensaje de la sociedad a Pérez y Baldetti es claro: respondan por sus acciones, renuncien a su inmunidad o renuncien a los cargos que se les confió. Si desoyen, el siguiente paso tendría que ser que el Congreso, con 105 votos, les retire la inmunidad. Y si los diputados tampoco responden serán vistos como cómplices.

La sociedad quiere respuestas aquí y ahora. La campaña electoral que se abrirá oficialmente el próximo sábado podría ser un fracaso si antes los gobernantes y los candidatos que se quieren postular a sucederles no responden al clamor social. Los gobernantes, los diputados y el sistema judicial tienen a la mano salidas institucionales. Las elecciones ya dejaron de ser la válvula de escape de las crisis, pues solo cada gobernante llega corregido y aumentado. Por algo cada gobierno que estrenamos de inmediato se gana el título de “el más corrupto de la historia”.

27 de abril 2015. http://www.elperiodico.com.gt/es/20150427/ opinion/11738/Protesta-de-nuevo-tipo.htm

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El pueblo quiere un cambio ¡pero radical!

Francisco Cáceres Barrios

A

manera de introducción de este comentario quise extractar en unas cuantas líneas las expresiones de guatemaltecos que asistieron a la manifestación del pasado sábado 16 de mayo:–Yo no solo pido la renuncia del Presidente, yo exijo un cambio radical; –ya se fue la Baldetti, ahora que se vaya Pérez, todo el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial; –yo pido que el Contralor General se vaya a su casa, porque nadie lo quiere ni confía en él; –ya no más compras, contratos y licitaciones amañadas para tapar su corrupción; –la CICIG también debe investigar al IGSS, para acabar con los robos y la pésima administración de la seguridad social; –todos los políticos son iguales: la UNE, el PP y Lider son ¡la misma cosa!

Aunque lo dijimos antes, vale la pena repetir que el hastío demostrado por la población no se iba a calmar con la renuncia de Roxana Baldetti, pues hastiada de tantos robos y mentiras, sigue dispuesta a demostrar su rechazo y exigencias que, si bien empezaron tímidamente a pedir el retiro de la Vicepresidenta no se iba a quedar del todo satisfecha. Y es que hasta el más ignorante se percata que así como se nos quiso engañar con el agüita mágica para limpiar el Lago de Amatitlán, que por fin se demostró que era agua con sal, también cientos de funcionarios, miles de empleados

públicos y cientos de miles de guatemaltecos se han prestado para que a cambio de un quintal de fertilizante o de una “Bolsa Segura” se mantuvieran sin decir “ni esta boca es mía”.

También es cierto que los politiqueros en general andaban perdidos en cuanto al real y verdadero sentimiento de la población. Digo esto, porque aunque la campaña electoral apenas se inició y no han salido a luz todos los oportunistas, ya es notorio que siguen con la misma tónica, desde acarreadas manifestaciones ofreciendo el oro y el moro pero, sin decir sus planes de cómo llevarlos a cabo y con qué recursos, como qué van a hacer para lograr un verdadero cambio en nuestro país. Además, es más que evidente la demagogia en sus discursos, la pobreza formativa y trayectoria de sus colaboradores pero, sobre todo, su poca honorabilidad y transparencia. ¿No estaríamos con otro problema más si el nuevo Vicepresidente no hubiera anunciado con anticipación el nombre de quien iba a ser su secretario privado? De ahí que, conforme a las circunstancias, ahora es cuando resulta imprescindible que las fuerzas vivas del país se pongan a discutir ¡desde ya! El trazo, la planificación y la organización de la hoja de ruta a seguir.

Diario La Hora, 19 de mayo, 2015.

Si no va a renunciar, ¿qué actitud asumirá?

Pedro Pablo Marroquín Pérez

A

lo largo y ancho del país, la gente está asqueada, harta y a la vez preocupada por el futuro. La mayoría de políticos minimizan esta “primavera guatemalteca”, este despertar de la indiferencia para pasar a la conciencia de que somos parte de un sistema que está carcomido por la corrupción, sostenido en la impunidad y hasta hace poco, blindado por la indiferencia.

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Poco a poco la gente ha ido entendiendo que este es un problema que va más allá de los nombres y que la única diferencia ha sido si nos roban con mente empresarial o si nos roban con mente de delincuentes rasos; de si quien nos roba tiene más pedigrí que otro, pero al final del día, la gente realiza que en Guatemala solo cambia quién y cómo se hacen los negocios, pero la cultura del robo perdura y se fortalece.

La gente se mostró harta del cinismo, de la desfachatez y encontró en Baldetti aquella capaz de aglutinar los elementos necesarios para que la población dijera ya basta. Tal ha sido el furor que causó la exvicepresidenta y que inexplicablemente recogió Otto Pérez al decir que la “2” era valiente, que había luchado contra la corrupción y al no defender a la Primera Dama, que ha opacado otros vicios del sistema.

El Presidente ha tenido la capacidad de ser la nueva cara de un sistema colapsado, de un Estado fallido que tiene una justicia pronta y cumplida pero para las mafias y los usuarios de los poderes ocultos, un Congreso que se mueve en torno al listado geográfico de obras, los negocios y los megapagos que hacen quienes han obtenido legislación que les favorece y unos partidos políticos que son cacicazgos que hacen negocios como una sociedad anónima.

Pérez ha centrado todo en él, y por ello hoy no se oye tanto de los jueces, magistrados y abogados que operan las cortes, de los diputados que pactaron para elegirlas, ni de los magistrados que aseguraron el pacto de la impunidad consagrando la elección de cortes, incluido el hoy Vicepresidente de la República.

No hay ningún partido político que no juegue bajo las mismas reglas que han jugado todos los que han

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alcanzado el poder y así es fácil predecir que el futuro de quien gane en esta pistrocracia será el mismo de todos aquellos partidos que han ganado la elección desde 1986.

Pérez ya dijo que no va a renunciar y reconoció que el sistema está colapsado, tesis de La Hora desde hace muchos años. ¿Entonces qué hará? Solo le queda convertirse en un colaborador eficaz para depurar el sistema.

Si Otto Pérez tiene alguna reserva patriota, nos puede contar cómo opera y afecta el financiamiento de los partidos políticos, la forma en la que se eligen a los candidatos y a cambio de qué, la manera en que se estructuran las compras y los negocios del Estado en general, cómo operan los fideicomisos, cómo se pagan los favores con la contratación del personal de campaña, cómo se aceita al Congreso, cómo se pacta para elegir a las cortes, qué condiciones se le imponen al Contralor de Cuentas, por qué no debe existir la reelección, cuánto se paga por las licencias estatales para la explotación de recursos y un largo etcétera.

Desnudando el sistema, el Presidente tendría que presionar a LIDER, PP y UNE que juntos suman 116 votos en el Congreso para que se hagan las reformas y debería aprovechar que los menos interesados en que Pérez renuncie son ellos porque estiman que eso daría paso a un gobierno de transición y cancelar las elecciones y los tres, líderes en las encuestas, quieren elecciones sí o sí.

Pérez tiene en sus manos el problema, pero a la vez parte de la solución y de él depende seguir con esa opacidad o tomar la delantera para pasar de ser un vicio del sistema perverso, a un elemento que puede ayudar a depurarlo.

Diario La Hora, 19 de mayo 2015.

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Guatemala: ¿Corrupción o injusticia estructural?

Por Marcelo Colussi

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uatemala está movilizada al día de hoy. La población –en principio parte de la clase media urbana de la ciudad capital, luego otros sectores como campesinos, pueblos mayas, trabajadores en general, estudiantes universitarios, etc.– se fueron sumando al clima de protesta cívica, de rebeldía. No es la revolución socialista (¿quién pretendería eso hoy día?, o más aún: ¿quién sabría cómo hacerlo?), pero es un sano ejercicio de protesta ciudadana, no visto aquí en décadas. O, quizá, nunca visto en toda la historia. Todo eso, obviamente, abre esperanzas. La gente protestando en la calle es siempre una buena noticia para el espíritu de transformación. Como se dijo por ahí: “mientras la calle no calle, hay esperanzas”. ¿Dónde llevará toda esta agitación social? Nadie lo sabe. Sin dudas, se presentifican ahí proyectos políticos disímiles: la derecha (oligarquía tradicional, ejército, embajada de Estados Unidos) pretende afanosamente detener el estado de movilización, buscando una salida “pacífica”, sin saltarse los marcos constitucionales (entiéndase: sin tocar ningún resorte del poder, algo así como “cambiar todo para que no cambie nada”).

Por otro lado, para el campo popular puede ser una interesante opción de abrir brechas, de profundizar luchas, de darse fuerza. Es una manera de mostrar que el pueblo (aunque sea algo impreciso el término, por demasiado genérico), cuando se moviliza, representa un verdadero poder. Este espíritu contestatario que ahora se ha desatado puede llevar a situaciones novedosas.

Por lo pronto, se está hablando de “refundar el Estado”.

Aunque ello pueda ser un tarea titánica, no hay peor lucha que la que no se hace…

En estos días, la consigna aglutinante de las movilizaciones ha sido “lucha contra la corrupción”.

Ello, en sí mismo, es maravilloso. La población en su conjunto, sin mayor distinción de diferencias sociales, se está alzando contra una práctica ya “normalizada” por la abominable casta política: la corrupción como norma,

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el Estado como botín. Reaccionar ante esa lacra es un síntoma de buena salud cívica. En estos momentos, si bien ya se abrió la campaña electoral para las elecciones de septiembre, debido a la desobediencia cívica despertada, los partidos políticos se las están viendo bastante mal, porque su descrédito es mayúsculo. ¡Más buena noticia aún!

Ahora bien: la corrupción es un síntoma de un sistema en sí mismo corrupto, injusto, macabro, basado en la explotación de una gran mayoría por una pequeña élite. La historia del país lleva hoy a la situación actual; y esa historia es una suma infinita de injusticias, de explotación, de exclusión de la gran mayoría, de asimetrías obscenas, de represión. La corrupción que hoy se manifiesta impúdica y contra la cual la población reacciona airada es la punta del iceberg de una situación de infamia crónica y estructural.

Para verlo en detalle nos pareció oportuno presentar aquí un documento que tiene ya 16 años de vida, donde puede apreciarse con claridad meridiana que lo mismo que se denuncia hoy se podría haber denunciado una década y media atrás (y, seguramente, varias décadas, o medio sigo, ¡o un siglo!). La injusticia estructural (la gran mayoría de la población sobrevive con escasas migajas, mientras que un pequeño puñado de familias tiene 200 veces más patrimonio que los más excluidos), la corrupción y la impunidad de los grupos de poder, el sometimiento de las grandes masas, todo eso es vieja historia en Guatemala. De ahí que abre esperanzadores optimismos esta reacción que hoy se vive.

En concreto: presentamos aquí una investigación (va completa en el PDF adjunto) realizada desde una organización no gubernamental que intentaba ver las consecuencias de la contaminación con plomo del que era víctima la población de una barriada pobre de la ciudad de Guatemala, específicamente los niños, producto de la impunidad reinante que permitió por

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años que una planta de fabricación de baterías para vehículos violara toda norma medioambiental con la más absoluta frialdad, con el beneplácito de las autoridades de turno.

Como acertadamente dijera una maestra de un establecimiento educativo del sector refiriéndose a la población infantil afectada con las emanaciones de plomo: “Lo increíble de estos niños no es su bajo rendimiento escolar. Lo increíble es que, pese a todo, aprendan.” Para ejemplificar lo que queremos evidenciar, nos permitimos citar en específicos tres capítulos de todo el trabajo.

De todo ello pueden deducirse, al menos, tres puntos importantes:

1. La

situación de exclusión de grandes mayorías de guatemaltecas y guatemaltecos no se debe SÓLO a la corrupción que campea impune. Es una combinación de causas estructurales e históricas.

El robo al erario público por parte de autoridades venales contribuye al estado de postración de esas mayorías, pero no es su única causa. El Estado es raquítico y casi inservible porque los factores de poder así lo deciden.

2.

La corrupción y la impunidad son constantes en la historia nacional, enquistadas ya como parte del paisaje normalizado. Obtener un cargo político de elección popular es un pasaporte para el rápido enriquecimiento. Todo ello generó una cultura de normalización de la corrupción que hace que la misma se encuentre en cada rincón de la vida diaria como práctica cotidiana (desde el pequeño soborno al agente de policía hasta el robo descarado que está cometiendo hoy el Poder Ejecutivo).

3. El Estado ha sido históricamente deficiente, puesto

exclusiva –y sanguinariamente– al servicio de la clase dirigente, de espalda a las necesidades de la población, todo lo cual se agravó exponencialmente con la entrada en vigencia de las políticas neoliberales que se impusieron desde hace algunas décadas. En ese sentido, las Organizaciones No Gubernamentales –ONG’s– hacen las veces de colchón que socorre esa ausencia de Estado.

Otto, el invitado de piedra Juan Luis Font / Revista Contrapoder, 16 de mayo de 2015.

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l presidente es como un fantasma que recorre de su despacho al Salón de los Espejos, pálido y sin materializar su presencia.

De no ser por el caso de Jorge Serrano Elías y su precipitada salida del poder, el presidente Pérez Molina llegaría al final de su período de gobierno sin competidor para el título del más fallido de los mandatarios desde el inicio del proceso democratizador. Su administración generó la crisis que se esperaba de su sucesor: un ramalazo de indignación en la ciudadanía que inspira un movimiento para reformar este fallido sistema político y modelo

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electoral nuestro. Porque a pesar de la tranquila convivencia del poder económico —en sus vertientes de capital tradicional y capital emergente— cada vez se vuelve más caro, incluso para ellos, operar en un modelo en donde privan la codicia de los gobernantes y la discrecionalidad de los funcionarios. Nadie puede vivir tranquilo en esas condiciones por mucho tiempo. Menos aún en la medida en la que los políticos cobran autonomía con respecto a los empresarios, y su voracidad les reta a competir con los grandes capitales e igualarse en símbolos de estatus.

A Pérez Molina le corresponde ahora, por mérito propio y sin pretenderlo, haber azuzado la demanda ciudadana de reformas al sistema, pero está inhabilitado para hacerles frente. Su credibilidad vuela a ras del suelo y su capacidad de convocatoria no rebasa más allá del cuerpo diplomático, atenido siempre a las formas.

Por no darle margen, ni los diputados ni el Gran Poder de Washington le permiten siquiera nominar con libertad al vicepresidente que habrá de acompañarle (y a lo mejor sustituirle) en los últimos siete meses de gestión.

Pero de igual forma, por ahora, a él le corresponde oficiar de cuerpo presente mientras se plantean las demandas de cambio.

Y quizá sea lo mejor. Afrontar de una buena vez las exigencias de transformación de un sistema que no da más de sí y que, sin prejuzgar demasiado sobre los contendientes, no resiste un proceso eleccionario más.

Véalo de esta manera: El más probable ganador de las elecciones, el partido Libertad Democrática Renovada (Lider), habrá invertido alrededor de Q450 millones antes de llegar al poder. Es razonable pensar que Baldizón y sus financistas buscarán un retorno —de ¿10 a

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1?— sobre cada quetzal invertido. Si usted observa con ligero detenimiento el conglomerado de empresas e intereses comerciales del candidato presidencial y de su hermano, si presta atención al tipo de cuadros que le rodean (como el millonario beneficiado ya por dos Gobiernos consecutivos con el subsidio al transporte urbano), no puede esperarse sino que se reproduzca el expolio del gobierno del Patriota y el de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE). Eso solo por mencionar los ejemplos más a mano.

“En Guatemala, hasta hoy, el Gobierno más corrupto es siempre el próximo, gracias al sistema político pervertido para lograrlo”.

Note por ejemplo, cómo la televisión abierta, orientadora en buena medida del voto popular, mantiene por décadas el negocio de promover las candidaturas de los aspirantes solapadas como noticias a cambio de pagos por publicidad oficial durante la administración. A los propios políticos les conviene, como parte de su botín, preservar ese monopolio.

Al corrupto sistema político guatemalteco le sostienen cuatro patas chuecas: drogas, pago excesivo en medicamentos (se lucra con los más vulnerables), obra pública (concursos simulados, constructoras que entregan fondos a los partidos que facilitan la asignación de contratos para ellas en el presupuesto, supervisión no independiente, etcétera) y aduanas.

Pero existen muchísimas otras fuentes de riqueza grandes y pequeñas.

A Otto Pérez no le queda más latitud que asistir, como el invitado de piedra, a las reformas que hacen falta para ponerle coto a esta crisis. Ahora que ya no tiene nada más que perder, puede sentarse en platea a ver cómo pasa delante suyo la batalla por la reforma. Nada, excepto su abultado patrimonio.

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Otto Pérez Molina: ¡#RenunciaYA! Beatriz Colmenares / Soy502.com 20 de mayo de 2015.

O

tto Pérez Molina debería de estar ahora mismo haciendo un inventario de pendientes y conversando con Alejandro Maldonado Aguirre para que la transición de un mandatario a otro sea lo menos traumática posible. Esto, por el bien del país. Ya no lo queda otra salida después de la captura de Juan de Dios Rodríguez, hombre de su confianza, y quien fungiera como su Secretario Privado (puesto idéntico al que ocupaba el aún prófugo Juan Carlos Monzón en la vicepresendencia de Roxana Baldetti).

Su legitimidad no puede caer más. Hoy está ubicada en el sótano de la carceleta del Organismo Judicial, lugar a donde se trasladó este miércoles 20 de mayo a la Junta Directiva del IGSS. Más de 10 personas han muerto desde que Droguería Pisa se hizo cargo de atender a los pacientes renales de la entidad, y las investigaciones de la CICIG y del Ministerio Público hacen responsables de las anomalías en su contratación a, entre otros, el Presidente del Banco de Guatemala y Otto Fernando Molina Stalling.

Con estas capturas, a Pérez Molina se le acabó el oxígeno. Ya no puede pedir más “respiros políticos” como lo hizo durante la inauguración del “Apparel Sourcing Show”, el martes 19. Rodríguez era tan cercano a él como Monzón lo fue de Baldetti, si no más. Y si la segunda de a bordo, bajo presiones populares no tuvo más salida que presentar su renuncia, idéntica suerte tiene que correr el mandatario. Ya no es el momento

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de estar convocando a mesas de diálogo o de pedirle a la ciudadanía propuestas concretas para combatir la corrupción.

Esta semana la Procuraduría General de la Nación presentó denuncias penales por el caso de la “agüita con sal” para limpiar el Lago de Amatitlán, y se declararon lesivos un contrato de arrendamiento para estacionamientos y otro para proveer combustible en la Terminal Aérea La Aurora. Si se abren más gavetas, con seguridad se encontrarán otras joyitas similares.

Pero que sea Maldonado y su equipo de trabajo quienes abran y somaten esas gavetas. Y también que sean ellos quienes impulsen una agenda, la cual aún es viable si prevalece la voluntad política que exige la población. El fin de semana estuve en una actividad donde expertos y analistas de todos los lados ideológicos y con diferentes maneras de visualizar la política coincidían en lo que debía de hacerse. El tiempo apremia, y lo primero, decían, es cambiar las reglas. Necesitamos, como paso inicial, reformar la Ley Electoral y de Partidos Políticos, por una que nos convenga a nosotros los ciudadanos, que somos quienes pagamos el sueldo de los diputados.

Y eso se puede con un Ejecutivo con voluntad y con un Congreso haciendo lo que le corresponde. No tienen otra opción. Eso es lo que nos merecemos los guatemaltecos. Nada menos que eso.

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Una salida a la crisis Gustavo Berganza / Revista Contrapoder, 21 de mayo de 2015.

E

xijamos al Congreso que antes de irse a hacer campaña deje aprobadas las reformas a la Ley Electoral y de Partidos Políticos.

Supongamos que no se logra que Otto Pérez Molina renuncie al cargo. O supongamos que se va y asciende Alejandro Maldonado Aguirre. Ninguna de las dos opciones es garantía de un cambio ni de que las causas que nos llevaron a manifestar –corrupción de funcionarios, corrupción de políticos– van a desaparecer.

Con la salida de Otto Pérez, o su permanencia, igual se mantiene incólume un sistema que facilita y podríamos decir que hasta estimula ser corrupto.

Lo facilita y lo estimula porque no hay controles, porque no hay una fuerza legal suficiente para inhibir a los funcionarios y a los políticos partidistas a refrenarse. Y si lo hay, carecemos todavía de un sistema judicial que los enjuicie y los castigue por sus abusos de la confianza ciudadana.

Este sistema judicial tiene su origen en dos causas: un mecanismo de postulación sujeto a las manipulaciones de grupos de poder y un Congreso de la República integrado por diputados corruptos, que llegaron al cargo por mecanismos no democráticos dentro de partidos que no rinden cuentas sobre sus financistas. El mecanismo de postulación selecciona a los candidatos a magistrados de la Corte Suprema y Salas de Apelaciones que luego serán elegidos por el Congreso. Y es un caldo de cultivo para el tráfico de influencias, amén de un obstáculo para establecer una verdadera carrera judicial.

El mecanismo de postulación no podemos eliminarlo y tampoco la elección de magistrados por parte del Congreso, porque para hacerlo tenemos que reformar la Constitución. Pero sí puede pensarse en cambios que limiten al máximo este mercado en el que se ha convertido el seleccionar candidatos para las cortes. Esto puede y debe ser reformado por el Congreso actual antes de que finalice su mandato.

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Al Congreso no lo podemos cambiar ni en su constitución ni en las posibilidades de reelección ilimitada que tienen los diputados, porque eso implica modificar la Constitución. En el ambiente también flota la idea de cambiar el sistema de representación y de elección, para que cada diputado represente a un distrito específico que sea el que le exija cuentas. Y también se desea que no votemos por las planillas tal cual las inscriben los partidos, sino que elijamos dentro de esos listados a las personas que consideramos más convenientes. Esto, aclaro, no puede lograrse sin reformar la Constitución.

Lo que podemos hacer para que entre en vigencia este mismo año es modificar en la Ley Electoral y de Partidos Políticos lo relativo al financiamiento electoral. Dejar establecido en esta normativa de rango especial que los partidos tienen la obligación de detallar, con nombres y apellidos, quiénes son sus financistas, cuánto dinero recibieron de ellos y ordenarles que esta información sea puesta a disposición del público semanalmente en los portales de Internet. También puede agregarse un artículo que obligue a la Intendencia de Verificación Especial (IVE) y a la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) a enviar al (TSE) Tribunal Supremo Electoral la información que necesita para saber cuánto dinero manejan los partidos políticos, de dónde viene y si su origen es legal.

Una ley electoral modificada puede especificar la prohibición de pautar propaganda en tiempo no electoral y hacer responsables solidaria y mancomunadamente a los medios que, fuera del período permitido, aceptan pautas de partidos políticos promoviendo candidatos. Si la Corte de Constitucionalidad no se opuso a una limitación a la libertad de emisión del pensamiento como lo es la Ley contra el Pánico Financiero, no debiera objetar esta restricción que intenta sanear al sistema político por la vía de limitar el gasto en propaganda.

Luego, para ser aplicada en las próximas asambleas partidarias que se realizarán en dos años, puede dejarse establecido que la elección de los comités

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ejecutivos debe ser democrática y que en los cargos que se ocupen no debe haber parientes dentro de los grados reconocidos por la ley. Además, puede establecerse un sistema de representación de minorías, para que en los comités ejecutivos haya representación de todos los sectores y corrientes.

Por último, para que se aplique en las próximas elecciones, ampliar el número de ciudadanos que representa cada diputado y, tal como hace el Congreso de Estados Unidos, establecer un tope en el número de diputados para que las legislaturas no aumenten en proporción directa al crecimiento demográfico.

Estos cambios podemos exigírselos a la actual legislatura y creo que podrían marcar un cambio notable dentro de los partidos y en el sistema político en su conjunto.

Análisis “El Presidente debería dimitir” Edgar Gutiérrez Director del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos IPNUSAC

E

l analista político evalúa la crisis que ha paralizado al gobierno de Otto Pérez Molina por un mes, desde que la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) develó una estructura de defraudación aduanera, dirigida por Juan Carlos Monzón, el exsecretario privado de la ex vicepresidenta Roxana Baldetti.

¿Cómo evalúa la crisis?

– Estamos en un quiebre de coyuntura. Con lo que ha

expuesto la CICIG con La Línea, y lo que descubrió en Presidios, y que podría seguir exponiendo más adelante con las mafias en el IGSS, en Migración, en la Policía; hablamos de que se ha configurado en Guatemala un Estado mafioso depredador. Por donde se voltee a ver, es decir, esta develación es lo que despertó a la ciudadanía porque ya no se trata solo de una crisis de gobierno o un caso aislado de corrupción, se trata de un riesgo de disgregación del Estado.

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Es por eso que clases medias se están movilizando y no se está haciendo mayor diferenciación ideológica, porque todo el mundo entiende que la amenaza del Estado depredador es contra toda la ciudadanía.

¿Cómo analiza estas manifestaciones?

– Hay un espíritu de desobediencia civil, de resistencia

y de poner un hasta aquí al Estado depredador.

Esto nadie lo previó, sorprendió a todos porque se trató de una movilización espontánea y autónoma, hasta ahora. La diferencia con las crisis de mayo de 2009, por ejemplo, fue que aquella fue organizada y orientada. O como la de mayo de 1993, que fue un Golpe de Estado pero algunos grupos lo dirigieron.

Esta vez, los grupos organizados están siguiendo a la gente en la calle, y sus consignas, no las imponen.

Y la demanda que es elemental es “renuncien”. Ante este mensaje, la primera reacción fue de control de daños que llevó a la renuncia de la ex vicepresidenta Baldetti.

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¿Su renuncia se le puede atribuir a las protestas o a la presión de la Embajada de Estados Unidos y el CACIF? – En primer lugar, el CACIF y la embajada siguieron las

protestas. Por eso digo que los grupos organizados o institucionalizados o los poderes tradicionales son los que siguen a las movilizaciones. Hasta ahora la calle no ha sido rebasada por nadie, ni contenida, ni encausada.

¿Alejandro Maldonado es una buena figura para reemplazar a Baldetti?

– Él ofrece una garantía de contención de crisis. Los

manifestantes piden la renuncia de Otto Pérez, pero con él hay una garantía de estabilidad y de manejo de crisis. Es un hombre que genera confianza al CACIF, a la embajada, y a una parte de la sociedad, porque hay otro sector al que no le gusta tener ahí a un personaje tan conservador y que tuvo ejecutorias controversiales en los últimos dos años.

¿Cómo cuáles?

–

Las interpelaciones en el Congreso, el caso por genocidio, la salida de Claudia Paz y Paz y el avalar las Cortes impuestas por el PP y Lider. Lo que él demostró con esos fallos, si no se analiza desde posiciones, sino desde perspectiva de Estado, fueron medidas que favorecían la estabilidad. Aunque favorecieron a unos, y que desfavorecieron a otros.

Si las protestas arrecian contra Otto Pérez, Alejandro Maldonado podría convertirse en Presidente, y el Congreso estaría llamado a elegir a un nuevo Vicepresidente. En este caso, debería ser un perfil complementario, es decir, una persona que dé estabilidad, pero que dé confianza a los sectores progresistas que no se sienten incluidos.

¿Cómo ve al Presidente en esta c risis?

– Es un Presidente debilitado, sin credibilidad. Antes de

la crisis, tenía 11 por ciento de credibilidad, ahora ha de tener cero por ciento. Eso es muy grave porque va a decir algo y nadie le va a creer. Él va a reinar como Presidente, pero no va a gobernar, quien va a pasar a gobernar es Maldonado.

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¿Debería dimitir el Presidente?

– Sí, debería dimitir. Hay que escuchar el mensaje de ayer. Si él entiende, debería dimitir.

Si se le comprueba a Roxana Baldetti haber participado en negocios dentro del Estado, ¿cuál es la responsabilidad de Pérez Molina?

– El Presidente la seleccionó para que lo acompañara, por ética política él es responsable. Era su más cercana colaboradora, no se la impusieron, no fue compromiso político. Es una decisión soberana de él, es una responsabilidad política suya el que ella haya llegado a ese cargo, y por tanto, de lo que hizo. Porque la Constitución dice que la Presidencia es una.

¿Cuál es el escenario que se prevé si renunciara el Presidente?

– Reforma

de Ley Electoral, donde lo central es el financiamiento político. La reforma a la Ley de Contrataciones del Estado para eliminar estos mecanismos opacos y corruptos, y en tercer lugar, un servicio profesional en el Estado. Estos temas se pueden aprobar este año, y se deben aprobar.

¿Y las elecciones?

– El tema más delicado es el proceso electoral, si la

percepción de la gente sobre los candidatos que están en la palestra es la continuidad del Estado mafioso o es algo que pueda sanarlo. Porque si la percepción es la primera, ya hay un rechazo a las elecciones, a los candidatos. Ya la gente está diciendo que quiten la basura frente a sus casas, refiriéndose a la publicidad política. Tenemos dos semanas de que se convocaron las elecciones y no hay clima electoral, la gente está en la crisis, no está oyendo a los candidatos, es más, los están sacando, como ocurrió en Antigua y en Quetzaltenango.

17 de mayo 2015.

http://www.elperiodico.com.gt/es/20150517/ pais/12567/%E2%80%9CEl-Presidente-deber%C3%ADa-dimitir%E2%80%9D.htm

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“SE LEVANTÓ LA AUTOESTIMA DE LOS GUATEMALTECOS” Marcio Palacios director de la Escuela de Ciencias Políticas de la USAC

El pueblo, a través de las movilizaciones, perdió el miedo y la indiferencia, ahora toma conciencia y participa. Ya no hay capuchas, pintas, ni daño al patrimonio cultural.

Ante las cámaras y los drones, la gente se manifiesta con gestos. Es pasar de un estado de represión a un estado de liberación. Se levantó la autoestima de los guatemaltecos, que quieren un mejor país, opina el sociólogo.

¿Qué debió pasar para que los guatemaltecos llegaran al despertar social?

Históricamente, la sociedad guatemalteca fue caldo de cultivo para la colonia, para la educación; caldo de cultivo para el autoritarismo (a través del Estado), para el conflicto armado, para el narcotráfico y la violencia; pero, a pesar de esto, el despertar viene desde hace muchos años, aun cuando hubo un factor determinante que lo frenó: el miedo. Es a partir del colapso del sistema político, la impunidad y la corrupción que el pueblo rebalsa. En esta administración se le permite al presidente la masacre de Alaska, la crisis del sistema penitenciario, hospitalario y de educación; pero el líquido al lago de Amatitlán fue el detonante. Hoy la población, por primera vez, está quitando y despintando propaganda, está cuestionando los mítines y los discursos de los partidos políticos. El tiempo es nuestro peor enemigo, para lograr cambios estructurales, consensuar propuestas; independientemente que haya consulta popular o Asamblea Nacional Constituyente, esos son los puntos torales, pero se debe aprovechar que hay condiciones para lograr cambios de fondo.

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¿Cómo termina la pasividad de un pueblo?

En Guatemala estamos viviendo una coyuntura atípica y trascendente, ya que el pueblo, a través de las movilizaciones sociales, perdió el miedo, la indiferencia, toma conciencia y participa. El gran enemigo de este despertar, de esta conciencia, es la desinformación sustantiva, no solo de la coyuntura electoral, sino de lo toral, de las reformas para un cambio estructural. Por un lado es positivo lo que se está viviendo, después de las jornadas de marzo y abril. Estas últimas manifestaciones han sido un despertar, un clamor de repudio, de indignación de un sistema agotado, de una clase política desgastada, deslegitimada, de la ingobernabilidad. El gran desafío es cómo canalizar, cómo liderar a esa masa social, porque del repudio e indignación, a la ira, hay una frontera muy tenue. Eso ya se ha visto con anterioridad, hay actores, intereses que quieren provocar violencia y satanizar la acción social colectiva, que desde el 25 de abril al 16 de mayo ha sido cívica y pacífica.

¿Cómo se puede encausar el movimiento y evitar la violencia?

Hay un llamado de la configuración y articulación a los actores sociales; por un lado, el Consejo Económico Social (CES); por otro, el de la USAC, para integrar una plataforma nacional para la reforma del Estado, que buscan canalizar una serie de propuestas para lograr cambios estructurales de entrada. Primero, a la Ley Electoral y de Partidos Políticos y garantizar gestión transparente pública. Por otro lado, hacer profundas

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reformas a la Constitución, que deben implementarse para garantizar espacios de equidad, de participación, inclusión y de ejercicio de derechos. En Guatemala hay un déficit en los liderazgos emergentes, no hemos sido capaces, después de 18 años de la firma de los Acuerdos de paz, de formar cuadros políticos al margen del interés político partidarios. Los partidos políticos siguen siendo clientelares, electoreros y, ahora, narcofinanciados.

Allí están los retos, hay una esperanza en los jóvenes que ahora están activos en las últimas movilizaciones, con lo que se rompe el estigma de que la generación es alienada, enajenada. Hay un millón de jóvenes que van a ejercer su voto informados y con conciencia, a diferencia de otras coyunturas electorales.

¿Sociológicamente, qué faltó años atrás para que esta chispa prendiera?

Es primera vez que en las manifestaciones hay familias completas, hay gays, lesbianas, anónimos, clase media, oligarcas, estudiantes, campesinos, gente del mercado, etc. La chispa está en tomar conciencia colectiva y romper, después de muchos años, la represión y la historia negativa. La población perdió el miedo, lo cual no es casual. Ahora ya no hay capuchas, ya no hay pintas, ya no hay daño al patrimonio cultural. Las cámaras, los drones salen, pero la gente se manifiesta con gestos. Es pasar de un estado de represión a un estado de liberación, de desligarse del miedo, del temor.

Se levantó la autoestima de los guatemaltecos, pues se quiere un mejor país para las próximas generaciones, es conciencia social articulada, la oportunidad de expresarse, de participación más proactiva y colectiva. Eso nunca se había dado. Ojo, que hay una gran intencionalidad de incitar a la población y a los universitarios para generar violencia, lo cual sería fatal.

Solo espero que se diluya con la dimisión del ministro de Gobernación.

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¿Se gana más manifestando pacíficamente? ¿Cuáles son los logros?

El pueblo está empezando a ganar una batalla con la no violencia activa. Yo manifiesto pacíficamente, pero te denuncio; te grito, te protesto, pero en interés de mis derechos articulados. Es un hecho histórico único y trascendente, estamos a las puertas de escribir una nueva historia. Es inevitable la renuncia del presidente, y ahora se suma el caso del IGSS y la renuncia del ministro de Gobernación, entre otros. Se está quedando solo.

Hay varios escenarios ahora: el primero, que haya una ruptura institucional por violencia; segundo, que haya un estado de transición y las elecciones se pospongan; y tercero, ir a elecciones con reglas nuevas. La USAC se va a poner la camisa social para que esto sea una realidad. Si hay propuesta e incidencia a través de la movilización social, al Congreso de la República no le queda otra que hacer los cambios.

¿Guatemala está en una revolución pacífica?

La revolución pacífica ya empezó con la denuncia que se hizo desde la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacia, con el tema de Amatitlán. Allí se dio el chispazo, pero el 25 de abril empezó de manera articulada, con la manifestación. El éxito de esta revolución pacífica, es lograr de manera inmediata y en corto plazo los cambios estructurales, empezando por la Ley Electoral y de Partidos Políticos. Allí va a ser un punto de inflexión, en temas como la representatividad, los listados abiertos, el número de diputados, las reelecciones. Si todo eso se bota, abre la puerta para un cambio estructural.

Después, seguir con leyes ordinarias y la corrupción.

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¿Hay posibilidades que este despertar de la población se revierta?

Debemos ser optimistas. Hay intereses de que se revierta, y los primeros interesados en esto son los mismos partidos políticos, que han violado la ley. Otro y de mayor peligro, es si hay una Asamblea Nacional Constituyente, si hay un cambio institucional, porque el narcotráfico tiene copados los espacios del poder formal. El 30 de mayo va a ser significativo, ya que habrá propuestas sustantivas para hacer cambios a la Ley Electoral, que no se han logrado por muchos años; allí va a haber un jaque mate, un quiebre coyuntural, va a ser una génesis, pues va a haber incidencia y propuesta, allí va a ser el primer logro histórico de esta coyuntura.

¿Este despertar de la población llegó a las áreas rurales o es más urbana?

Siempre ha estado en las áreas rurales, lo que pasa es que se ha invisibilizado por el racismo y la discriminación. Toda la protesta, la manifestación, que está en los campesinos e indígenas del área rural, aflora ahora en lo urbano; pero, a partir de la última manifestación, se articula lo urbano de clase media y de estudiantes, con lo rural de las organizaciones campesinas, sindicales y populares.

¿Guatemala entró a una madurez política?

La madurez política presupone, en el caso guatemalteco, una profunda crisis política.

Sin esa crisis de ingobernabilidad, no se puede llegar a un estadio de madurez política.

Aquí falta un elemento importante: hasta ahora el foco de atención ha sido lo público, pero tenemos que llegar a otro foco, que es lo privado, la gran evasión atrás de la línea es el sector empresarial. Pero hay otro elemento, la narcooligarquía del país, que genera nuevas clases sociales, se reconfigura el mapa del estatus quo y se entra, a partir de allí, a una dinámica de economía del delito. Hay nuevos actores y movimientos sociales, nuevas demandas sociales que serán el gran desafió, la gran responsabilidad de la conducción política, técnica, estratégica, académica y moral.

29 de mayo 2015. https://www.cronica.com.gt/conversatorio/se-levanto-la-autoestima-de-los-guatemaltecos_88df24/

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¡Renuncia ya!, por todo el mundo, Tuits llegaron a 110 millones Revista Crónica https://www.cronica.com.gt/actualidad/renuncia-ya-por-todo-elmundo-tuits-llegaron-a-110-millones_10487e

L

as redes sociales en el país no solo han servido para convocar a los guatemaltecos a las diversas manifestaciones pacíficas realizadas en la Plaza de la Constitución, sino que han sido el perfecto canal multiplicador de ese mensaje contra la corrupción.

Por ejemplo, los tuits enviados durante todas las concentraciones, bajo el hashtag #Renuncia Ya, llegó a 110 millones alrededor del mundo, y les interesó a 22.5 millones de personas.

Maricel Diéguez Así de infalibles han sido estas herramientas electrónicas del internet, principalmente twitter y facebook, a través de las cuales se ha informado de los distintos movimientos sociales que iniciaron el pasado 25 de abril.

Aunque existía el temor de que las redes sociales fueran bloqueadas por el Gobierno durante las protestas masivas en contra de la corrupción en la Plaza de la Constitución, el 25 de abril y 16 de mayo pasados, las empresas operadoras de teléfonos celulares precisaron que más bien se trató de una saturación por el uso masivo de los servicios de telefonía desde un mismo lugar.

Lo que sí quedó claro, es que el Gobierno le temió a la capacidad de los manifestantes al compartir esos momentos históricos dentro y fuera de las fronteras, por lo que trató de intimidar con el uso de drones y la instalación de cámaras en el Palacio Nacional de la Cultura, aparatos que fueron desafiados por la población al gritar con más fuerza consignas: ¡fuera, fuera... no tenemos miedo!, así como con los gestos que simbolizan la corrupción y la indignación que movió a la

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población a este despertar social que ahora se vive. Pero además, se estima que cada manifestante multiplicaba su malestar a través de chats como whatsApp, twitter o facebook.

De siete mil tuits, a casi seis millones

El 16 de mayo pasado,bajo el hashtag #RenunciaYaFase2, 60 mil guatemaltecos que marcharon generaron siete mil 590 tuits, 38 envíos por minuto en promedio, lo que tuvo una audiencia en tiempo real -personas que lo vieron- de 5 millones 954 mil 685 en todo el mundo, indicó José Kont, director de la empresa iLifebelt, la que efectuó una medición de redes sociales.

De acuerdo con Kont, entre el 25 de abril y el 16 de mayo, fechas en que se realizaron las concentraciones, la penetración a través de las redes sociales, de lo que hoy se vive en Guatemala, bajo el hashtag #RenunciaYa se logró enviar el mensaje a 110 millones en el planeta por cualquier razón. Sin embargo, este tuvo una audiencia, es decir, personas que se interesaron en saber de qué se trata, de 22.5 millones de personas en el mundo.

La saturación de las redes En este caso específico -25 de abril y 16 de mayo-, no hay certeza de qué pudo haber interferido con la señal móvil de los usuarios afectados, aseguró Raúl Alas, gerente de Comunicación de Telefónica Móvil de Guatemala, S.A., al explicar que las celdas del servicio tienen una capacidad limitada de gestionar el tráfico y las conexiones de los usuarios, por lo que es muy factible que, cuando se congregan miles de personas en un mismo lugar, el servicio se degrade y no sea posible brindarlo.

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Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

En casos donde existen aglomeraciones, como el de una manifestación, las redes no tienen la capacidad para poder atender a tantos usuarios simultáneamente. En un día normal en el Parque Central, el número de usuarios conectados simultáneamente es de unos mil en horas pico, comentó Francis Barrillas, director de operaciones de Tigo Guatemala, al agregar que al haber 50 mil personas tratando de usar el servicio al mismo tiempo, los equipos no soportan este tráfico inusual.

Litza del Cid de Escobar, de la empresa Claro, dijo que debido a la alta demanda simultánea para llamadas, mensajes y navegación, en ocasiones como estas se registra congestión en la red.

Las crisis de mayo Editorial Revista Crónica

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n muchos países, mayo es considerado el mes de las flores. Para los católicos, es de la Virgen María. En Guatemala, es el mes en que inician las primeras lluvias de invierno, pero también hay algo más: es tiempo de agitación política, manifestaciones populares, y hasta de cambios trascendentales en la vida nacional. Es un mes en el que afloran las crisis, con sus problemas y oportunidades.

Por supuesto que no se trata de algo sobrenatural, pero sí es significativo que en este mes han brotado las crisis más severas que ha enfrentado nuestra democracia, hasta ahora con resultados positivos, que han permitido superar cada una de las que se han producido desde 1988.

Dos veces –1988 y 1989–, grupos de militares oscurantistas intentaron volver al pasado por medio de golpes de Estado, pero a ambas intentonas sobrevivió el entonces presidente Vinicio Cerezo Arévalo. La comunidad internacional y la sociedad guatemalteca reaccionaron en respaldo al Gobierno constitucional, por lo que la situación no llegó a más.

A lo interno del Ejército se dieron diversas corrientes, pero prevaleció la línea democrática. En ambos movimientos estuvieron involucrados también civiles, e incluso, en una de las intentonas, se utilizó a un telenoticiero de aquel entonces como vocero de los rebeldes.

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Debieron transcurrir cuatro mayos más, para que en 1993 se diera una crisis aún más profunda, cuando el presidente Jorge Serrano Elías intentó disolver el Congreso y nombrar una nueva Corte Suprema, sin tener atribuciones para ello. Fue un golpe de Estado del Ejecutivo para los otros dos poderes del Estado.

Todo tuvo lugar en medio de fuertes señalamientos de corrupción, tanto en el Gobierno como en el Legislativo.

La crisis fue severa, y finalmente se forzó a renunciar a Serrano, posteriormente a su vicepresidente, Gustavo Espina, para preservar la vía constitucional. El Congreso nombró a Ramiro de León Carpio como presidente, y a Arturo Herbruger como vicepresidente. La democracia sobrevivió una vez más.

En aquella ocasión también hubo la famosa depuración del Congreso de la República, pero también una reforma constitucional, todo eso producto de la crisis que estalló el 25 de mayo. Serrano salió del país, y desde entonces vive en Panamá, en donde es reconocido como un hombre de gran fortuna.

Pero este mes siempre sorprende con grandes sucesos y acontecimientos. El 10 de mayo del 2010, muere asesinado el abogado Rodrigo Rosemberg, un profesional con poca connotación más allá de su gremio.

Sin embargo, deja grabado un video –que dio la vuelta al mundo por la red–, el cual se conoce dos días después.

IPNUSAC En él, responsabiliza de su muerte al presidente Álvaro Colom, pero también a otras personalidades.

La reacción popular no se hizo esperar, ya que una gran manifestación de camisas blancas pidió la renuncia del gobernante, creando una crisis que tardó semanas en ser superada. Finalmente, se comprobó que el mismo Rosemberg fue quien organizó el atentado que le costó la vida.

Y ahora estamos en medio de otra crisis de mayo. La corrupción del Gobierno del presidente Otto Pérez Molina ya cobró la renuncia de su vicepresidenta Roxana Baldetti, señalada como responsable de múltiples negocios realizados con opacidad. La gota que rebalsó el vaso fue el escándalo por defraudación aduanera en la SAT, en el que se implica a varios funcionarios, entre ellos su secretario privado, Juan Carlos Monzón, hoy prófugo de la justicia.

Crisis institucional, análisis y pronunciamientos Baldetti aún no ha sido acusada, pero las dudas sobre un acelerado enriquecimiento ilícito la rodean, ya que apuntan a la compra de propiedades, estilo extravagante de vida –de ella y su familia– y negocios gigantescos.

Hay otros eventos relevantes, como lo fue la extradición, en mayo del 2013, hacia Estados Unidos, del expresidente Alfonso Portillo, acusado de actos de corrupción, siendo enviado a prisión por esto.

Lo interesante es que las crisis han servido para fortalecer la democracia. No se debe temer a las crisis, hay que verlas como una oportunidad de cambio positivo, aunque para ello, el pueblo debe presionar en la dirección correcta: contra la corrupción y los políticos corruptos.

22 de mayo 2015. h t t p s : / / w w w. c ro n i c a . c o m . g t /c o l u m n i s t a s / las-crisis-de-mayo_c7b666/

Otto Pérez se queda manco: primero cae Baldetti y ahora su más cercano exmilitar Rodrigo Véliz Y Martín Rodríguez Pellecer / nomada.gt 21 de mayo de 2015.

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a crisis del gobierno del Partido Patriota lleva cinco semanas consecutivas y no parece tocar fondo. El MP y la CICIG continúan desarticulando lo que parece una compleja estructura paralela dentro del Estado conformada por los más cercanos colaboradores de Otto Pérez Molina. Empezó por el mayor caso de corrupción e impunidad de la historia, el desfalco a las aduanas desde la oficina de la Vicepresidencia, que después de manifestaciones multitudinarias, provocó la renuncia del puesto de Roxana Baldetti. Y ahora siguió con una de las instituciones más poderosas del país, el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), que el Presidente había arrebatado en 2012 con uñas y dientes a su contrapeso y aliado: el sector privado.

A inicios del año 2012 el Partido Patriota estaba estrenándose en el gobierno. Y las evidencias de las últimas semanas muestran que tenía en mente un plan bien estructurado:

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IPNUSAC crear una estructura detrás de varias instituciones del Estado para saquear el Estado y que el desfalco quedara impune. Desviar recursos hacia empresas de cartón o sin respaldo y blindarse al corromper los procesos para elección de los jueces más importantes.

Reyes Mayén y fueron publicados en YouTube videos de acosos sexuales por parte del presidente del IGSS que defendían los empresarios. En ese momento, el 8 de abril, Mayén renunció a la vida pública y Rodríguez pudo tomar posesión del IGSS.

Cuando el plan empezó a gestarse, en enero de 2012, en el puesto con más poder después de la Vicepresidencia se encontraba Juan de Dios Rodríguez, primer secretario privado de la Presidencia. Su contraparte como secretario privado de la vicepresidente Baldetti era Juan Carlos Monzón, ahora prófugo, que fue uno de los jefes de la estructura de La Línea, la que desfalcó a las aduanas.

El operador para colocar jueces (y lograr impunidad)

El proyecto gubernamental de la corrupción y la impunidad Pero Juan de Dios Rodríguez sólo podría haber dejado ese puesto clave en el Gobierno por uno que el proyecto del Partido Patriota vislumbraba como uno con mayor poder político y económico.

El 7 de enero de 2013 Pérez Molina anunció la destitución del entonces presidente de la Junta Directiva del IGSS, Luis Reyes Mayén, expresidente del Cacif, el sector privado organizado. Pérez Molina adujo problemas de corrupción. La Junta Directiva se partió en dos: una parte dijo que el nombramiento era ilegal porque no respetó procedimientos legales y violaba la autonomía del Seguro Social.

Mayén, con 9 años en el cargo, se negó a abandonar. El Cacif protestó. Funcionarios presentaron amparos, pero la Corte de Constitucionalidad, con los votos de Roberto Molina y el recién nombrado vicepresidente, Alejandro Maldonado, les dijo que no provisionalmente el 14 de enero de ese 2013.

A inicios de abril, Juan de Dios Rodríguez tomó posesión de una Junta Directiva que se negaba a aceptarlo.

Pero poco a poco los fue convenciendo. Primero a los representantes de la USAC y del Colegio de Médicos (hoy ambos están presos) y tomó posesión por la fuerza con agentes de la Secretaría de Asuntos Administrativos y de Seguridad de la Presidencia (SAAS).

Para terminar la batalla con el sector empresarial, los amigos del Partido Patriota bajaron aún más el nivel de la política nacional: fue intervenido el celular de

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Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

Desde el IGSS, el gobierno del Partido Patriota construyó una estructura de corrupción. Por el caso que detuvieron hoy a 20 directivos –incluido Rodríguez– fue uno de Q116 millones ($15 millones) por el que cobraron un soborno de Q18 millones ($2.3 millones).

Un negocio que costó la vida a 13 pacientes renales. A 13 afiliados a la Seguridad Social que pagaron su cuota (y sus patronos también) durante toda una vida laboral.

Un negocio fraudulento que Nómada fue el primero en denunciar en febrero de este año.

Pero el dinero per se no es el negocio de esta estructura que rodea al presidente Pérez Molina. El principal trabajo de Juan de Dios Rodríguez en la estructura gubernamental era incidir, interferir, en los procesos de elección de jueces para colocar a jueces afines en las 13 sillas de la Corte Suprema de Justicia y en las 120 salas de Apelaciones. Un negocio de corrupción e impunidad.

Un negocio en el que tuvieron éxito en septiembre del año pasado cuando eligieron a todos estos jueces en una votación entre el PP y Líder en el Congreso.

Este detalle del negocio también funcionó para la elección de la actual Fiscal del Ministerio Público, Thelma Aldana. Un audaz periodista lo recordó en la conferencia de prensa de ayer sobre este caso en una pregunta al jefe de la CICIG, Iván Velásquez. Preguntó: “¿Podía pensarse que los rumores que han corrido en los últimos años sobre el uso de los fondos del IGSS para pagar a electores de jueces son ciertos? De ser así, ¿se podría pensar que ese dinero fue usado para poner de Fiscal a Thelma Aldana?”

Aldana, que estaba presente en conferencia, no movió ni una pestaña. Inerte, apenas esbozando una sonrisa de sorna, esperó la respuesta de Velásquez, que no perdió tiempo en contestar: “No descartamos a nadie, ningún funcionario público quedará fuera de investigaciones si se cuenta con pruebas”.

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Aquí podría estar la explicación sobre por qué la CICIG apoya al MP en la investigación de un caso de corrupción.

El mandato de la CICIG no son casos de corrupción sino es desmantelar cuerpos paralelos enquistados en el Estados que promueven la impunidad. Pero todo indica que las estructuras de corrupción son utilizadas para financiar estructuras de impunidad.

El círculo se cierra sobre la estructura de impunidad de Otto Pérez El círculo parece cerrarse alrededor de los actores clave de Otto Pérez en esta estructura de corrupción e impunidad. Caída la exvicepresidente Roxana Baldetti a la espera de una investigación y juicio, está capturado hoy Juan de Dios Rodríguez, mano derecha del presidente y principal operador para la intervención en la elección de jueces, según denuncias de diputados y activistas sociales.

Producto del cabildeo (y quizás soborno) de Juan de Dios Rodríguez, los diputados del Partido Patriota y de Líder eligieron a 13 magistrados de la Corte Suprema.

La estrella del proyecto del PP fue colocada en la posición más importante de la Corte: la presidencia de la Cámara Penal. Se llama Blanca Stalling.

Blanca Stalling fue la magistrada que aparece también en las escuchas telefónicas de la CICIG y el MP para garantizar la impunidad de los jefes de la estructura La Línea, del desfalco de la SAT. Y su cuñada, la jueza Marta Sierra de Stalling, en efecto, les dio libertad bajo fianza a los jefes de la estructura de La Línea.

Ayer se cerró otro círculo. El hijo de Blanca Stalling, Otto Fernando Molina Stalling, exasesor de Juan de Dios Rodríguez en el IGSS, era el encargado de arreglar los negocios corruptos y cobrar las comisiones. Desde ayer está preso.

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Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

El agujero en el guión: el CACIF también tiene a corruptos La nueva investigación de la CICIG, que delínea más trazos del sistema de impunidad y corrupción podría haber sido una munición más para que el sector privado organizado en el Cacif presionara más al presidente Otto Pérez Molina. Los grandes empresarios, que han sido socios del gobierno de Otto Pérez por medio de financiamiento para sus campañas electorales, de varios ministros del gabinete y de políticas públicas para favorecer sus visiones e intereses, llevan un mes intentando desligarse de esta administración.

Envalentonados, habían convocado a la #Marcha16M y su mismo presidente Jorge Briz y sus vicepresidentes participaron personalmente de la protesta que pedía la renuncia de Otto Pérez.

De caer o renunciar el presidente, asumiría Alejandro Maldonado, el recién estrenado magistrado, que es el juez del establishment, un hombre que favorece al sector privado.

Pero les salió el tiro por la culata. Para el MP y la CICIG, el IGSS no podría haber permitido tanta corrupción sin el aval de su Junta Directiva, de la que son parte Julio Suárez, presidente del Banco de Guatemala y pieza de los empresarios en la institución –como se excusó Pérez Molina–, sino también Max Quirín, histórico líder empresarial con orígenes cafetaleros.

Uno de los vicepresidentes de Cacif, Pelayo Llarena, dijo que no defenderán a ningún sindicado, mientras que el presidente de la Cámara de Industria, Antonio López, dijo que conoce y respeta la trayectoria de Quirín, duda que sea una persona corrupta, y espera que el proceso judicial no tenga fallos.

El equilibrio que buscaba el Cacif –de ir hasta el fondo de la corrupción del Gobierno pero sin verse salpicado– empieza a romperse. Por suerte para ellos, cada día

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hay sorpresas en esta caída libre en la que está la administración de Otto Pérez Molina y el sistema de corrupción e impunidad. Si perdió las dos manos políticas con las salidas de Baldetti y Rodríguez, acaba de perder una pierna: hoy renunció –sabiendo que hay investigaciones en su contra– el exmilitar y ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla.

La posibilidad de que Otto Pérez Molina renuncie a la Presidencia es tan real que CNN en Español transmitió en vivo su conferencia de prensa de esta mañana en la que dio a conocer la renuncia de López Bonilla. Nómada le preguntó si se sentía con fuerzas suficientes para

Crisis institucional, análisis y pronunciamientos

seguir con su gobierno ahora que todo su círculo está siendo investigado por casos de corrupción y han salido del gobierno. Respondió que sí. Pero es difícil.

Con la salida de Baldetti, el presidente del IGSS y el ministro de Gobernación, a Otto Pérez Molina le queda sólo una pierna para detenerse. Esa pierna tiene nombre y apellido. Se llama Sergio de la Torre y es el ministro de Economía, puesto en el cargo por el sector privado organizado. Y permanece en el gabinete porque el Cacif no quiere que el gobierno caiga. Es el último sostén del mandatario. Si De la Torre renuncia, sabremos que el fin de la presidencia de Otto Pérez Molina está muy cerca.

La embajada y CACIF contra la ciudadanía Gustavo Berganza / Revista Contrapoder, 25 de mayo de 2015.

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a embajada exigió la prórroga de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG). Una parte significativa de la ciudadanía –a excepción, de los exmilitares y sus familias y de sectores de Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (CACIF) pidió a Otto Pérez solicitar extender el mandato de la CICIG. El resultado: la CICIG se quedará dos años más.

La embajada exigió la renuncia de Roxana Baldetti.

La mayoría de quienes nos manifestamos en la Plaza de la Constitución exigimos lo mismo. Al final, Baldetti se fue.

Hasta ahí los intereses de Estados Unidos convergieron con las expectativas ciudadanas.

Hasta ahí pareció que lo que la embajada buscaba para su Gobierno era similar a lo que los guatemaltecos queremos para nuestro país.

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Los hechos que se sucedieron muestran el rumbo distinto que sigue ahora Estados Unidos.

La embajada pidió la renuncia del ministro de Gobernación, teniente coronel en situación de retiro Mauricio López Bonilla, Michelle Martínez, ministra de Medio Ambiente; Edwin Rodas, Ministro de Energía Minas, y el general de División en situación de retiro Ulises Anzueto, secretario de Inteligencia Estratégica.

Los que nos manifestamos en la Plaza Central exigimos la renuncia de Otto Pérez. López Bonilla, Martínez, Rodas y Anzueto se fueron, pero Otto Pérez Molina se mantuvo en su cargo.

La embajada se reúne periódicamente con el CACIF, como si esta fuera la entidad que encarna y representa el sentir de la ciudadanía. En el encuentro del viernes pasado el embajador de Estados Unidos y sus consejeros reiteraron la conveniencia de que Otto Pérez Molina conserve su cargo hasta culminar su período presidencial. El CACIF coincide con la posición de la embajada y la acuerpa. Una nueva manifestación en la Plaza de la Constitución exigió el sábado, 24 horas después del cónclave entre diplomáticos de Estados Unidos y CACIF, la renuncia de Otto Pérez Molina. Otto Pérez Molina sigue todavía en su cargo.

La embajada considera que con lo obtenido hasta el momento logra sus finalidades y poco o nada le importa que la ciudadanía piensa y sienta que Otto Pérez Molina, como representante de una casta de políticos corruptos, deba salir del Gobierno.

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En términos de manejo del Gobierno, la renuncia de Otto Pérez Molina resulta irrelevante a estas alturas de la crisis. Es cierto que no avanza ningún proceso ni facilita solución alguna, porque el presidente es hoy una marioneta de Estados Unidos, la CICIG y el CACIF. No es él quién gobierna, porque estos tres actores son los que le marcan las líneas de lo que debe hacer.

Obviamente, el mayor peso es el de la embajada, a quien Iván Velázquez le debe su prolongación de contrato, y el CACIF, que ahora no da un paso sin consultarlo con Todd Robinson, el embajador.

Pero por otra parte, hay una vindicta pública pendiente de ser satisfecha y esto es algo que la embajada y el CACIF impiden al mantener en el poder a Otto Pérez.

Cuando Roxana Baldetti todavía no había renunciado, era comprensible que se negaran a apoyar esta medida. Pero ahora que ya se cuenta con un nuevo vicepresidente, no existe el riesgo de que esto dé pábulo a vacíos de poder o para un golpe de Estado.

Los guatemaltecos estamos decepcionados y hartos de Otto Pérez y somos capaces de enumerar decenas de afrentas que ameritan su renuncia. La embajada y CACIF no deben obstaculizar esto. La renuncia de Otto Pérez es una petición ciudadana que debe ser atendida.

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Las crisis de mayo Editorial Revista Crónica

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n muchos países, mayo es considerado el mes de las flores. Para los católicos, es de la Virgen María. En Guatemala, es el mes en que inician las primeras lluvias de invierno, pero también hay algo más: es tiempo de agitación política, manifestaciones populares, y hasta de cambios trascendentales en la vida nacional. Es un mes en el que afloran las crisis, con sus problemas y oportunidades.

Por supuesto que no se trata de algo sobrenatural, pero sí es significativo que en este mes han brotado las crisis más severas que ha enfrentado nuestra democracia, hasta ahora con resultados positivos, que han permitido superar cada una de las que se han producido desde 1988.

Dos veces –1988 y 1989–, grupos de militares oscurantistas intentaron volver al pasado por medio de golpes de Estado, pero a ambas intentonas sobrevivió el entonces presidente Vinicio Cerezo Arévalo. La comunidad internacional y la sociedad guatemalteca reaccionaron en respaldo al Gobierno constitucional, por lo que la situación no llegó a más.

A lo interno del Ejército se dieron diversas corrientes, pero prevaleció la línea democrática. En ambos movimientos estuvieron involucrados también civiles, e incluso, en una de las intentonas, se utilizó a un telenoticiero de aquel entonces como vocero de los rebeldes.

Debieron transcurrir cuatro mayos más, para que en 1993 se diera una crisis aún más profunda, cuando el presidente Jorge Serrano Elías intentó disolver el Congreso y nombrar una nueva Corte Suprema, sin tener atribuciones para ello. Fue un golpe de Estado del Ejecutivo para los otros dos poderes del Estado.

Todo tuvo lugar en medio de fuertes señalamientos de corrupción, tanto en el Gobierno como en el Legislativo.

La crisis fue severa, y finalmente se forzó a renunciar a Serrano, posteriormente a su vicepresidente, Gustavo Espina, para preservar la vía constitucional. El Congreso

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nombró a Ramiro de León Carpio como presidente, y a Arturo Herbruger como vicepresidente. La democracia sobrevivió una vez más.

En aquella ocasión también hubo la famosa depuración del Congreso de la República, pero también una reforma constitucional, todo eso producto de la crisis que estalló el 25 de mayo. Serrano salió del país, y desde entonces vive en Panamá, en donde es reconocido como un hombre de gran fortuna.

Pero este mes siempre sorprende con grandes sucesos y acontecimientos. El 10 de mayo del 2010, muere asesinado el abogado Rodrigo Rosemberg, un profesional con poca connotación más allá de su gremio.

Sin embargo, deja grabado un video –que dio la vuelta al mundo por la red–, el cual se conoce dos días después.

En él, responsabiliza de su muerte al presidente Álvaro Colom, pero también a otras personalidades.

La reacción popular no se hizo esperar, ya que una gran manifestación de camisas blancas pidió la renuncia del gobernante, creando una crisis que tardó semanas en ser superada. Finalmente, se comprobó que el mismo Rosemberg fue quien organizó el atentado que le costó la vida.

Y ahora estamos en medio de otra crisis de mayo. La corrupción del Gobierno del presidente Otto Pérez Molina ya cobró la renuncia de su vicepresidenta Roxana Baldetti, señalada como responsable de múltiples negocios realizados con opacidad. La gota que rebalsó el vaso fue el escándalo por defraudación aduanera en la SAT, en el que se implica a varios funcionarios, entre ellos su secretario privado, Juan Carlos Monzón, hoy prófugo de la justicia.

Baldetti aún no ha sido acusada, pero las dudas sobre un acelerado enriquecimiento ilícito la rodean, ya que apuntan a la compra de propiedades, estilo extravagante de vida –de ella y su familia– y negocios gigantescos.

Hay otros eventos relevantes, como lo fue la extradición, en mayo del 2013, hacia Estados Unidos,

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del expresidente Alfonso Portillo, acusado de actos de corrupción, siendo enviado a prisión por esto.

Lo interesante es que las crisis han servido para fortalecer la democracia. No se debe temer a las crisis, hay que verlas como una oportunidad de cambio positivo, aunque para ello, el pueblo debe presionar en la dirección correcta: contra la corrupción y los políticos corruptos.

22 de mayo 2015. h t t p s : / / w w w. c ro n i c a . c o m . g t /c o l u m n i s t a s / las-crisis-de-mayo_c7b666/

El general no tiene quien le escriba Siglo21 Jaime Barrios Carrillo jbarrios@siglo21.com.gt /Guatemala, 17 de mayo de 2015.

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esde diferentes perspectivas, el general Otto Pérez Molina recibe innumerables diatribas.

Hay convergencia de una crítica general al general. Ha desembocado un río tumultuoso en el mar de la inconformidad. Un caudal turbulento que se fue formando de diversos afluentes: clase media, campesinos, estudiantes de todas las universidades, amas de casa, obreros. Todos cansados, hartos del régimen corrupto. La gente no se contenta con la “cabeza de turco” de la Baldetti. Muchos, demasiados, quieren que el general también se vaya, que renuncie.

Se le culpa de corrupción, ineficiencia y de no haber cumplido.

La democracia en Guatemala está en peligro porque no se han generado los resultados esperados. Las expectativas se derrumban cada cuatro años y con paciencia ilimitada la gente levantaba nuevas. Pero ahora se agotó la paciencia. El país viene sufriendo desde hace décadas un desmejoramiento social que ha alcanzado niveles graves: mortalidad infantil, muerte por enfermedades curables, morbilidad, falta de escuelas, emigración forzada, corrupción, violencia, femicidio, narcotráfico, impunidad.

Cuando el general asumió la Presidencia de la República expresé que había que darle el beneficio de la duda.

Escribí en enero de 2012: “Si el nuevo gobierno y el

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nuevo Congreso logran una unidad nacional más allá de los intereses mezquinos o sectarios, estaremos dando un paso en la construcción de una nueva nación, moderna, justa y democrática. Lo contrario sería la peor de las tragedias sociales de nuestra historia. De ahí que el mencionado beneficio de la duda implique clamar también porque este no sea un gobierno de derecha, sino de todos los guatemaltecos”.

Pero, lamentablemente, los hechos han demostrado con creces otra cosa. Y no me cabe la menor duda ahora de que lo mejor para el país sería una inmediata renuncia del presidente. No es posible creer que se descubra una estructura criminal que estuvo saqueando las aduanas del país y enquistada en las narices del presidente, sin que este no se diera cuenta. Era su deber. No puede venir ahora que lo que la Cicig descubrió es gracias precisamente a él, Otto Pérez Molina. En todo caso, si se le da un nuevo beneficio de la duda en cuanto a su

inocencia, debería asumir la responsabilidad y renunciar para que se demuestre que no está implicado.

Recordemos que alguna vez se puso militares en las aduanas para combatir la corrupción (Acuerdo Gubernativo 427-2013). Resulta hoy indignante constatar que la SAT no ha llegado a las metas de recaudación cuando se ha descubierto que las aduanas estuvieron siendo saqueadas por una banda que tuvo como supuesto cabecilla al secretario privado de la vicepresidencia.

Pero Otto parece no haber entendido el mensaje claro y contundente del pueblo. Es ingenuo, o cara dura (otra forma de la mano dura), pretender en este momento del gobierno que se va a combatir la corrupción y se harán cambios de Gabinete que “…son ajustes por diferentes razones, con el objetivo de darle un empuje a este gobierno”.

El renacer de la participación ciudadana Esta coyuntura demanda prudencia con audacia.

elPeriódico RICHARD AITKENHEAD CASTILLO / 18 de Mayo 2015.

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ue hermoso observar la actitud ordenada, civilizada, de camaradería, que prevalecía el sábado por la tarde en la Plaza de la Constitución.

Era la muestra de un pueblo unido en gritos comunes: ¡Qué renuncien! ¡Fuera! ¡No más corrupción! Gritos y consignas que en el fondo claman por un relevo político de forma y fondo, que se traduzcan en cambios al sistema democrático. Las manifestaciones y los gritos de cambio no fueron expresiones aisladas de la Ciudad Capital, se produjeron al unísono en un número importante de ciudades en toda la República. Con civismo y sin violencia. Ha sido un ejemplo ciudadano de orden con convicción, de pluralismo con objetivos comunes, de diversidad con un solo interés: cambiar la dirección de la política.

Un error de apreciación sería considerar que estas manifestaciones se centran solo en el Presidente y la ex Vicepresidenta. Es una manifestación clara contra todo el sistema. El Congreso y las Cortes no escapan a las demandas de cambio. Los partidos políticos tampoco.

Estas expresiones populares son un claro grito contra

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la corrupción y contra la politiquería. Se pretende volver a los conceptos de servicio público y no de servirse de lo público, de honestidad y no deshonestidad, de trabajo de cara al pueblo y no a espaldas del pueblo. De nuevo, cambios de forma y de fondo.

Otro error es buscar hacer cambios marginales para paliar la crisis. Las demostraciones pacíficas pero firmes demandan mayor profundidad. No es una aspirina lo que requiere el paciente, es intervención quirúrgica. Por tanto, lo mínimo que se requiere es un programa de transformaciones legales y políticas en materias tales como el funcionamiento y financiamiento de los partidos políticos, el número y forma de elección de diputados, el uso de los recursos públicos y la transparencia del presupuesto, la función profesional e independiente de la SAT, la calidad de los programas de asistencia social y el abastecimiento de hospitales, la investigación de las constantes denuncias de corrupción y enriquecimiento ilícito, la necesidad de mejoras en la aplicación de

la justicia y la independencia de poderes, entre las principales.

Esta coyuntura demanda prudencia con audacia. Esto significa actuar dentro de la ley pero con visión de país.

Significa que no se trata de una crisis de gobierno que se resuelve tan solo con las elecciones de septiembre.

Es claro que se equivoca, el que dice: “Me Toca”. El clamor ciudadano es por cambios, de fondo y de forma. La discusión de Estado, se debe centrar en los procedimientos para alcanzar estos cambios y en su magnitud. Debemos evitar caer en la trampa de los extremos: la de nada se puede cambiar o la de borrón y cuenta nueva. En Guatemala hemos afrontado crisis profundas cada treinta o cuarenta años, y esta es la que toca a la generación nacida en la segunda mitad del siglo pasado. No puede ser desaprovechada. Para empezar, ya se ha logrado el renacer de la participación ciudadana.

Los ciudadanos contra los políticos

Percibo que está emergiendo una comunidad de ciudadanos. elPeriódico MARIO FUENTES DESTARAC / 18 de Mayo 2015.

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l pasado sábado, más de 60 mil guatemaltecos indignados por los actos de corrupción, el abuso de poder, el enriquecimiento ilícito y la descarada burla de la ley en el sector público, se reunieron en una magna e histórica concentración pacífica en la Plaza de la Constitución en la Capital, al igual que otros miles se congregaron en distintos lugares del interior del país y en el extranjero.

Estas demostraciones representan un valeroso desafío ciudadano contra los gobernantes, funcionarios y políticos en general que han venido usufructuando el poder público durante los últimos 30 años, sin importarles el interés general y el bien común. Los manifestantes exaltados y empoderados no se limitaron a pedir la renuncia del presidente Otto Pérez, sino que expresaron con vehemencia su rechazo a la clase política, especialmente a aquellos de sus representantes

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más relevantes que pretenden ser ungidos como gobernantes y autoridades a través del voto clientelar, basado en el intercambio de favores, ventajas y beneficios a cambio de votos y apoyo político-electoral.

El votante clientelar no es un verdadero ciudadano, porque su voluntad ha sido cooptada, no tiene conciencia política, carece de autonomía personal y no es dueño de su destino. Es un individuo que se ve a sí mismo como necesitado, en una dimensión de deficiencias, carencias y marginalidad, que espera que los demás velen y actúen por él; que no tiene confianza en sí mismo y permite a otros adueñarse de su vida; en fin, un individuo que no tiene iniciativa propia y no asume responsabilidades ni riesgos.

Los indignos clientes creen que el Estado es un ente paternalista que les debe pagar y regalar todo lo que necesitan para subsistir, y no un conjunto de instituciones que generan las condiciones necesarias para que todos los habitantes del territorio nacional puedan convivir pacíficamente en un ambiente de libertad,

igualdad, respeto, justicia y seguridad jurídica, trabajar y emprender, así como desarrollarse integralmente y alcanzar la felicidad por sí mismos.

Son ciudadanos quienes no delegan la responsabilidad de su bienestar en otros, sino que la asumen con confianza en ellos; son aquellos que se imponen de los problemas y los solucionan con entereza y carácter, comprenden que no hay nada gratis y que deben esforzarse y sacrificarse para conseguir algo; y, sobre todo, que entienden que la construcción del bien común es tarea de todos y que esta no debe entregarse a mercenarios o mercaderes de la política.

En todo caso, percibo que en Guatemala está emergiendo una genuina comunidad de ciudadanos que ha perdido el miedo a los usurpadores del poder y a sus instrumentos represivos; una comunidad de ciudadanos que está dispuesta a ejercer el autogobierno y participar activamente en el manejo de la cosa pública. Sin duda, esta nueva actitud puede ser detonante de un mejor futuro.

El despertar de la juventud Prensa Libre/ 18 de mayo de 2015.

MARIO ANTONIO SANDOVAL

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A CRISIS POLÍTICA ACTUAL tiene varias sorpresas tanto inesperadas como esperanzadoras. Entre ellas se encuentra el despertar de los jóvenes del país, o sea aquellos ciudadanos de edades entre 18 y 40 años. Mucho se ha escrito acerca del desinterés de este grupo poblacional en las actividades inherentes a la política, y en efecto así ha sido por varias décadas.

El cambio del siglo, suceso ocurrido hace 15 años, fue el escenario de una serie de cambios, sobre todo tecnológicas, cuyo efecto sigue siendo el de una comunicación instantánea, ya sea entre redes sociales o también con la lectura de las ediciones electrónicas de periódicos, radios y canales de televisión. El efecto es evidente y explicable: comenzaron a interesarse en los hechos políticos.

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DOS HAN SIDO LAS convocatorias a manifestaciones por estos medios. La primera fue con motivo de la misteriosa muerte del licenciado Rodrigo Rosenberg, por lo cual miles de jóvenes vistiendo camisas blancas se dieron cita en la Plaza Italia para protestar. Eso ocurrió hace cinco años. El dormido accionar juvenil despertó con motivo de la crisis actual del Gobierno y a mi juicio es una de las causas para provocar la masiva presencia ciudadana en dos ocasiones frente al Palacio Nacional. A la exigencia por la renuncia del presidente seguirá la de investigar los casos de corrupción, en especial, pero también de toda la gama de abusos y de acciones güizachescas para afectar al sistema judicial, colocado también en la mira ciudadana.

LA HISTORIA GUATEMALTECA, tan ignorada y vilipendiada, recoge en sus páginas acciones similares.

La más notoria fue durante la Revolución de Octubre de 1944. Los líderes llevados al poder político eran todos hombres cuya edad promedio era de 25/26 años. El mayor era el doctor Juan José Arévalo, de 40 . Y entre todos hicieron un gobierno cuyos inicios fueron una real primavera democrática, posteriormente truncada debido a factores externos, como el inicio de la Guerra Fría, e internos como el nacimiento de ambiciones personales y de entregas a ideologías tendientes al totalitarismo. Pero para efectos de este comentario, se convirtió en el mejor gobierno, al compararlo con los subsiguientes, en especial cuando en 1986 comenzó la etapa democrática electoral, hoy tambaleante y en total descrédito.

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ESTAS ACCIONES JUVENILES tienen un mensaje de esperanza, porque desde el punto de vista generacional, fallamos quienes nacimos entre 1945 y 1960 —más o menos—. Y lo hicimos porque no pudimos obtener dentro de nuestras filas a la suficiente cantidad de personas deseosas de servir al país desinteresadamente. El régimen de Ydígoras fue el nido donde se empollaron los primeros buitres de la corrupción, entonces mínima. Se mantuvo durante el régimen militar de Peralta Azurdia, hasta comenzar a afianzarse en los gobiernos entre 1966-70, 1970-74 y 1978-82, lo cual coincide con la etapa de gobiernos militares. Abusos, violaciones a derechos humanos, corrupción, fue en Guatemala un resultado indirecto de la Guerra Fría.

A QUIENES NO TIENEN 40 AÑOS les está vedado ser presidentes, con lo cual ese cargo solo puede desempeñarlo una minoría poblacional. Los avances actuales en todos los campos permiten a los ciudadanos estar al tanto de cualquier abuso, robo, corrupción, etcétera. Son personas mejor preparadas, superiores a nosotros los de más de 40 años. Hablo de generaciones, no de personas, porque tampoco se puede eliminar a tajo la capacidad y la experiencia como factores indispensables para llevar bien un país.

Con independencia de cómo se resuelva la actual crisis política, cuyo primer pero no único capítulo está en plena efervescencia, los efectos de la participación juvenil representada en exigir transparencia sin duda han comenzado.

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Director de la Revista

Edgar Gutiérrez, Coordinador General IPNUSAC

Compilación:

Rina Monroy, Editora Revista Análisis de la Realidad Nacional y Comunicadora IPNUSAC Edgar Celada Quezada, Co-editor Revista Análisis de la Realidad Nacional IPNUSAC Brenda Mejia y Sergio Saldaña, Estudiantes de la Escuela de Ciencias de la Comunicación USAC

Diseño gráfico: Rosario González

El Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos de Guatemala (IPNUSAC) es un centro académico de carácter multidisciplinario que asesora al Consejo Superior Universitario (CSU) y al Rector en el tratamiento de los asuntos relevantes de la vida democrática del país. Fortalece el aporte técnico científico en el estudio y la solución a los problemas nacionales.

Fue creado por el CSU el 24 de septiembre de 2008.

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