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Edición: Alejandra Olay Coedición: Marreyna Arias Diseño: Argelia Juárez Fotografía: Juan Casanova
SERGIO GALINDO
EN EL TEATRO PUEDE OCURRIR TODO Por Samantha Leyva Al hablar de teatro sonorense, Sergio Galindo Sánchez es una referencia fundamental. Se ha desempeñado como gestor y promotor cultural, actor, director y dramaturgo con una sólida y reconocida trayectoria. Oriundo de Hermosillo, Sonora, Galindo es autor del montaje La fiebre del oro verde, que se presenta hoy en la Muestra Estatal de Teatro Sonora 2018 con la compañía Juílas Teatro, bajo la dirección de Miguel Ángel Canto. ¿De dónde surge la inquietud de explorar el teatro? ¿Cómo recuerda su primera experiencia escénica? De atestiguar, siendo adolescente, el entusiasmo y la pasión con los que un grupo de preparatorianos de la Universidad de Sonora entre los que se encontraba mi hermano Octavio Galindo: hablaban, discutían y ensayaban en la casa paterna. Nunca he olvidado el momento en el que, al entrar por primera vez a un teatro –el hoy Emiliana de Zubeldía de la UNISON, tras el telón a medio abrir, descubrí con asombro parte de la escenografía de una sala del Siglo XV y recuerdo haber pensado: aquí puede ocurrir todo. ¿Cuál es el proceso que realiza como dramaturgo al momento de escribir una nueva historia? ¿Cómo es que, desde la pluma, pretende acercarse al público? Comienzo a partir de una idea general y ciertos puntos de interés. Dejo que la obra se vaya construyendo durante el proceso de escritura. En este sentido, además de pensar, escribir es para mí descubrir. Además, el público ha sido siempre parte esencial en este proceso en el que, con la historia, voy construyendo a mi “espectador ideal”, como lo llama Sanchis Sinisterra. ¿Cómo es que nace esta idea por escribir La fiebre del oro verde, que se presenta hoy en la MET Sonora 2018? Esta es la segunda obra de la “Trilogía romancera” que he escrito como miembro del Sistema Nacional de Creadores, en la que me he propuesto abordar tres temas fundamentales: la política, el narcotráfico y la religión. Además de los dos personajes centrales, tienen en común al teatro dentro del teatro. Y claro, al verso y la rima como instrumentos para
explorar sonoridad y sentido, gracia y humor de un lenguaje que caracteriza a los pueblos de la sierra sonorense y alcanza su máximo poder expresivo en los llamados “mentideros”. ¿Qué propone la trama de este montaje? Creo que el contribuir a una discusión ya en curso, y hoy más actual y necesaria que nunca dada la violencia que vive nuestro país: la legalización de las drogas, y en el caso específico, de la mariguana. Entonces, ¿encuentra usted en el teatro una forma de denuncia? Otra vez como Sanchis, al revisar mi dramaturgia, encuentro que en general se trata de lo que él llama “teatro contra el olvido”. El término denuncia me remite más a lo panfletario del que siempre he huido. El año pasado, Juilas Teatro resultó la compañía seleccionada para representar a Sonora a nivel regional; en esta edición, regresan. ¿Qué significa para usted participar con sus montajes en esta plataforma como lo es la Muestra Estatal de Teatro? La Compañía Teatral del Norte, hoy Juilas –teatro- es parte de una comunidad que en lo personal, como creador y como funcionario cultural he visto crecer y multiplicarse a lo largo de 45 años. En esta nueva etapa de las Muestras Estatales y Regionales, ya en dos ocasiones, hemos representado al Noroeste en las Muestras Nacionales de Aguascalientes y de León, Guanajuato. Participar es, pues, pertenecer a una comunidad con la que siempre hemos estado dispuestos a interactuar como lo muestra, en los hechos, nuestra total disposición al apoyo y la colaboración con los diferentes grupos y compañías en Sonora. ¿Cuál es su percepción con respecto a la escena teatral y a las producciones que se realizan en Sonora? Que cada vez más el esfuerzo apunta a la necesidad de la profesionalización, lo que debe a todos congratularnos.
Por Samantha Leyva
CON EL PASADO HABLAMOS DEL PRESENTE CHARLA SOBRE TEATRO HISTÓRICO CON RENÉ CÓRDOVA
El teatro como reflexión, como esparcimiento y como representació que permiten hablar del presente refiriéndose a hechos del pasado: eso es lo que hace la dramaturgia histórica, explicó René Córdova Rascón durante el conversatorio celebrado como parte del programa de la Muestra Estatal de Teatro Sonora 2018. El antropólogo, académico y dramaturgo ofreció una charla titulada Dramaturgia ¿cómo escribir teatro histórico? En ésta, destacó algunos aspectos y puso sobre la mesa una diversidad de perspectivas y posturas que se han creado en torno al teatro histórico. Estas representaciones dramáticas abordan acontecimientos del pasado, ya sea reciente o lejano, que en ocasiones puede ser ficcionalizado en parte - o en todo-, propiedad que hace que la línea de la historia sea más o menos fiel a los hechos verdaderos. El autor del montaje Tiempo de pitayas y calabacitas tiernas mencionó que una marcada posición en la discusión académica sobre la dramaturgia histórica, es que realmente todo el teatro es histórico, por la misma forma del texto o la disciplina, pues se presentan las acciones de personajes situados en el tiempo, dentro de un determinado contexto. Sobre la disciplina teatral, René Córdova opinó: "Escribir es hacer política. Es participar en la discusión pública. Por eso elegimos presentar ciertas cosas, dependiendo desde nuestras posiciones, tratando de establecer un diálogo con el público. Presentando el pasado, hablamos del presente”. El dramaturgo agregó: "El teatro, además de hacerse en equipo, también esta hecho para verse en equipo. Es un teatro para compartir con tus iguales, además de disfrutar del espectáculo. Así, el teatro nos reconfigura como sociedad. Nos sentamos todos juntos a ver la misma obra y entonces, no importa qué boleto pagamos”. Antes de culminar, Córdova platicó sobre Proyecto corazones, texto sobre el cual trabaja actualmente basado en un hecho poco conocido de la historia sonorense, que relata las exploraciones y acciones de los españoles en el siglo XVI; sucesos que no han sido abordados por especialistas por su “escasa trascendencia histórica”, precisó el autor.