Llenar el tanque de gasolina de su auto tiene ahora un nuevo riesgo en Estados Unidos. Defraudadores están aprovechando la vulnerabilidad de muchas máquinas surtidoras del combustible para sustraer información bancaria de los consumidores. Los ‘hackers” no sólo clonan tarjetas, sino que acceden desde puntos remotos enviando mensajes de correo electrónico a sus víctimas con un programa engañoso que les permite acceso a contraseñas y otros datos. Página 8