Menos Lobos

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Menos Lobos la suerte estรก echada


Os conocisteis y todo era tan feliz, todo abrazos y caricias. Ahora el polvo nubla tus sentidos, cuantos años se han perdido. Hoy los segundos cuentan más que ayer, se te va acabando el tiempo. Y ahora temes que al volver, se escape tu último aliento. No dejes que el miedo eche a volar, que no sea tu dueño, disfruta del momento. No dejes que el miedo eche a volar… Ponte frente a frente no dejes que él sea tu dueño, saca tu coraje y tú valor. Y grita, que tuya es la libertad y que se entere todo el mundo. Y ríe, para nada sirve llorar, torna el lamento en ilusión. No dejes que el miedo eche a volar, que no sea tu dueño, disfruta del momento. No dejes que el miedo eche a volar…

Y otra vez vuelves a actuar, no hay nada más que hacer. Pierdes el tiempo intentas resolver, no sabes que está bien. Buscando alternativas, para poder caer al fin, y ver tu libertad atrapada en sueños. Si no vuelvo saldrás a buscarme, espero verte muy lejos de aquí. Para poder dejar de torturarme, Y desquiciarme hasta morir y desquiciarme… Viviré a mi manera, lo llevaré por bandera. Robé el freno al descontrol, me negué a decir que no. Un bombo suena al ritmo de mis latidos. Cuando las luces se ocultan en lo oscuro de la noche. Las sombras se hacen ver en el reflejo del día, pero todo es tan real que parece una mentira. Que te hace recordar quién eres en realidad, nada vuelve a ser igual. Nace la noche y muere el día. Ahora todo es tan real, jode ver la realidad, ya no vuelvo a despertar. Y no pretendas que tus días no estén contados.


os.

Nada verás cuando tus ojos no quieran ver. Márchate y no me busques más. Te estaré esperando, no ciegues la realidad.

Un día vienes y de pronto te vas, la gente sabe que tú sigues tus reglas. No tienes receta ni medicina. Algunos afirman que no eres mortal. Las calles conocen tus aficiones los ojos lascivos de quien te ve. La suerte está echada, juguemos un rato tal vez en mi coche lo pasemos bien. Otra vez caigo a tus pies. Quédate a dormir conmigo, te sacaré del camino. Déjame que te haga mía una vez más. Mucha gente piensa, que un buen día. Decidiste recostarte en tu esquina. Dejarlo todo atrás buscando salidas. Vendiendo tu amor, vendiste tu amor. Y vamos juntos paseando por las calles. No importa quien seas, que importa quien soy. Te sacaré de este infierno... Las calles conocen, tus aficiones, los ojos lascivos de quien te ve. La suerte está echada, juguemos un rato tal vez en mi coche lo pasemos bien. Otra vez caigo a tus pies. Quédate a dormir conmigo, te sacaré del camino Déjame que te haga mía una vez más.


Era una tarde cualquiera, otra más de esas en nuestra realidad. Nadie sabía que aquello, que eso que pasaba podía ser verdad. Fue todo tan de repente que no te dio tiempo a reaccionar. Ahora ya no queda nada los sueños, la vida, todo es polvo ya. Pero no olvidarás; Que tocando el mismo cielo, o bajando más allá, que cuando todo esto acabe, nos podrás encontrar. Que tocando el mismo cielo o bajando más allá, los momentos que vivimos no se van a escapar. Al quedar todo roto, ya sé sabe que es chungo de arreglar, la huella esa que dejaste, tu sello tan personal. Han pasado los años y nunca se esfumará. Y espero que todos estos versos, Algún día te puedan llegar. Que tocando el mismo cielo, o bajando más allá, que cuando todo esto acabe, nos podrás encontrar. Que tocando el mismo cielo o bajando más allá, los momentos que vivimos no se van a olvidar. Cayendo, subiendo, hasta tocar el cielo. Te juro, prometo, te echaremos de menos. Te levantas has caído en el suelo. ¿Qué es lo que me das? De ti yo nada quiero. Y vuelves y buscas, en ti no encuentras nada. Tan solo el odio de tu mirada. Y vuelves a caer en el suelo de la habitación. ¡Cuidado! muy pocos han llegado a sentirse libres con una canción. Pero cuando cantas sientes que no sientes nada, y algo hay detrás en tus gestos hay palabras Restos de resquemor por no llegar a triunfar. Ya no hay principios vendes lo que tu sientes. Las horas muertas pasan lentas, si no estas aquí despierta nada que hacer, nada que decir.

Pírate, no sabes que, ya no hay tiempo que perder, salte ya de este rincón, escucha con el corazón. Has jugado y has perdido todo lo que has conocido, lo has perdido, no has vencido. No hay otra opción, ya no existe una última vez. Esclavos de la noche. Solo surge hacer, lo que nos gustaría ser, otra vez. Llegar y permanecer, donde nadie llega. Ser cada parte de una misma canción. La noche nos convertirá, en bestias indomables. Abrir la puerta a la emoción, hoy no nos para nadie. Las fieras nos acechan ya, se escucha la llamada. Aullidos por las noches, el clamor de la manada. Y cada anochecer tal vez, nos posea otra vez. La luna llena nos cautivará enloqueciendo. La noche nos convertirá, en bestias indomables. Abrir la puerta a la emoción, hoy no nos para nadie.


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Fue en aquella esquina, al final de tus labios me pierdo. Tus sentidos, siento. Y otra vez a empezar, ya no puedo parar de escucharte gemir, de volverte a sentir. Quiero que te desnudes, quiero que seas lo que un día fuimos y perder los estribos. Jugar al juego y perder, dejarlo todo y volver, a compartir nuestros vicios. Y fuimos reyes de la habitación. Juegos obscenos. Piel contra piel. Y ahora estamos juntos. Desde esa noche. Siente el placer. Y sentir tú fuego, frecuentarte en sueños. Y te daré lo que nunca te dí. Y siento que no estoy, late mi corazón. Siente el ritmo, sube el ritmo. Y ya no estás y enloquezco cada noche. Esa verdad a mi me machaca a golpes. Puñales, se clavan, me joden las mañanas. Y fuimos reyes de la habitación. Juegos obscenos. Piel contra piel. Y ahora estamos juntos. Desde esa noche. Siente el placer.

Fue allí en aquel lugar, fue allí donde yo empecé a trajinar. Que aquello iba a funcionar. Tanto exceso de alcohol, tanta vida en el rock&roll. Chicas guapas, no podían faltar. La fiesta acaba de empezar, colegas con los vasos llenos de descontrol. Andar pegando tumbos, no es una buena opción. Derroche de litros de alcohol. A mí me pareció genial. Que la casa estuviese a reventar. Que en la calle siempre buscas lo que encuentras. Todo preparado para reventar. Que bien lo pasamos esa noche. En aquella fiesta, que no terminó. Y a beber esa última cerveza, un último trago, para desfallecer. Y otra vez me da vueltas la cabeza. Hoy presiento, que no pararé. Vuelvo a ser ese barco a la deriva, sigo la corriente y me dejo llevar.


Vivo aquí en un lugar, cansado de tus normas, no aguanto más. Otra mentira, no nos podrás callar, ya harto de tus clases de moralidad. Quiero escapar ¡no puedo!, trato de ser sincero. No quiero guerras sin sentido por dinero. Viene un bala ¡has muerto!, tendrás que estar contento . Te colgarán una medalla en tú entierro. Siento que me mientes, siento queme engañas, te digo una cosa ¡por qué no te callas! Guerras absurdas, niños hambrientos, ¿Y ahora quién paga el sufrimiento? Que cara está la vida, que barata está la muerte. Mil vidas arruinadas y otros se divierten. Yo robo, se siente ahora soy presidente. Me seguiréis votando y no sois conscientes.

Algunos dicen que se puede acabar, que la tierra está muerta y se acerca el final. Nota del infierno me acaba de llegar, salta siempre en marcha ya no debes parar. De oír, de hablar no importa la cosa es empezar. Deja tus problemas, ven roza tus labios, nena. Sorpréndeme… Deja que este tema te pueda atrapar, salta siempre en marcha ya no debes parar. En mi cama o en cualquier callejón, ella baila al ritmo que marca esta canción. Sube y baja, sube y baja. Siempre dispuesta a dejarse atrapar, por cualquier sustancia que resulte ilegal. No hay retorno, no hay mañana. Es sorprendente, lo vivido. Todas las mañanas despiertas a tiros. Es fascinante, muy elegante. Unos van detrás y tú siempre delante. En mi cama o en cualquier callejón, ella baila al ritmo que marca esta canción. Sube y baja, sube y baja. Siempre dispuesta a dejarse atrapar, por cualquier sustancia que resulte ilegal. No hay retorno, no hay mañana.


No voy a salir a la calle, me voy a quedar en los bares. Quedarme extasiado, sentir que estas a lado. Tenerte siempre aquí. Te busco, te encuentro, ahora te llevo dentro. Te pierdes, me pierdo, ahora ya estoy contento. Alas pa’ volar, alas pa’ volar. Pero que nada pase, quiero que todo siga, yo no quiero perderte tú eres quien me inspira. No quiero verte lejos, tenerte a la deriva, me siento como un loco, de quien nadie se fía. Te busco, te encuentro, ahora te llevo dentro. Te pierdes, me pierdo, ahora ya estoy contento. Alas pa’ volar, alas pa’ volar ¡Listo para despegar!, ¡Listo para volar! En el fondo del vaso, no vi otra solución. Quiero que nunca anochezca, ocultarme bajo el sol. Perderme en los bares ¡quiero que estés aquí!

Que contar fue una rara noche, se torció fue todo de golpe, no se que pasó estaba tirado sin un duro y un solo cigarro. Y llegaste mi vida animaste, pensamientos quedaron aparte. Rompiendo normas. ¡Por ti!, ¡por mí! Cansados de lo correcto, de lo perfecto. De hacer lo que nos dictan. Ven aquí, te estoy esperando. Las mañanas se tiñen de blanco. Te estaré esperando por esta prisión. Mucho tiempo esperando a que llegue el subidón. Días de locura entre paredes de una habitación. Harto cada mañana, de ver la vida por una ventana. El barrio espera, distintas caras y misma moneda. Huyendo, deprisa para ver la luz. Y quieres fuego, es lo que pide el cuerpo. Y quieres más, corre pisa sin mirar. Vamos, lleguemos al infierno hay que pecar. Suelta el freno y echa a andar. Te estoy esperando. Las mañanas se tiñen de blanco. Te estaré esperando por esta prisión.


Grabado por Guillermo “Kama” en Burning Sr. Mezclado por Raúl Serrano en Cubex. Masterizado por Iker Piedrafita en Sótano. Letra y música por Menos Lobos. Componentes; Eloy Campillo (Batería), Ruben Bilbao “Lobo” (Bajo), Pablo Domper (Guitarra), Pablo Gómez (voz y Guitarra). Diseño y fotografía por Javier Lerena.


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