Montserrat Guia ilustrada [1909]

GUIA HISTÓRICO-DESCRIPTIVA DEL PEREGRINO EN

]VIONTSBRRAT

BUÍA HIST0RIC0- DESCRIPTIVA DELPEREGRINO EN

MONTSERRAT con dos planos en colores y gran número de grabados •

PORLA REDACCIÓN DELA

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"REVISTA MONTSERRATINA" '

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eoticenstra eclesiástia

BARCELONA IMPRENTA DE FRANCISCO ALTÉSY ALABART Calle de los Ángeles, 22 y 24

1909

ES PROPIEDAD DEL MONASTERIO DE MONTSERRAT

"...•••••-nnn•n••

Breve ittnerar!o del peregrinoeuMouteirt

Y

L llegar á la estación dirijase el peregrino por la puerta principal del Santuario (saliendo de la estación á mano izquierda) á la plaza del mismo. A pocos pasos de la entrada hay elRestaurant(v. pág. 33).

Si quierePERNOCTAR en el Monasterio preséntese inmediatamente al P. Aposentador en elDespacho de aposentos(frente al monumento de • la Inmaculada) y le señalará, después de recibidos los oportunos datos, el que mejor crea convenirle (v. pág 31 y sigs.)

Conviene que el devoto peregrino que permanece más de un dia en Montserrat, no deje pasar tan bella ocasión de recibir devotamente los Santos Sacramentos á fin de poder lucrar las muchas Indulgencias concedidas á los que visiten la Santa Basilica de Montserrat y la capilla de la Santa Cueva.

Visitase luego la Iglesia (v. pág. 39), y si es hora propia (v. el horario de misas y culto, p_ág. 66), la Sacristia y Camarín para besar la mano de Nuestra Señora (págs. 69y sigs.)

Para las excursiones alrededor del Monasterio se puede salir por la puerta principal y plazoleta de

VI

la fuente del portal á donde convergen los principales caminos de la montaña. Consúltese para ello el mapa general, el plano (pág. 33) y las figuras 1 á 6 en las págs. 29, 122, 130, 146, 157 y 164 respectivamente. Primero la Santa Cuevasjpágs. 101 y siguientes) y después los alrededores del Santuario (pág. 115 ), ó bien salir por la puerta lateral del claustro para visitar las capillas, etc., de la parte N. E. (pág. 121) y Santa Cecilia (pág. 131).

Si se puede disponer de otrodiacompleto puédense visitar las antiguas ermitas y cúspide de la montaña o San Jerónimo (1235'73 m.), para lo cual si no se quiere ir en caballería, puédese tomar cualquiera de los dos ó tres caminos en la fuente del portal (pág. 116); y en un tercerdiapuédese hacer la excursión á las magnificas y grandiosas cuevas deCollbató,de 320 metros de profundidad (pág. 171).

Los que quieran visitar el centro de la montaña y recorrer las antiguas ermitas en un solo dia, pueden subir por San Miguel ó por el torrente deis avellaners á San Juan (restaurant), y visitar las ermitas de Santa Catalina, Santiago, San Onofre y Santa Magdalena (TEBAS),bajando por la escala deJacobal torrente de SantaMaria,subir luego hasta la cima de San Jerónimo (restaurant), y después visitar las de San Antonio, San Salvador, Santisima Trinidad, Santa Cruz, San Dimas, San Beni to(TEBAIDA)y Santa Ana, bajando al Monasterio por el atajo junto á la casa de los pobres (v. páginas 121y sigs.)

Antes de partir deMontserratbueno es despedirse de la Virgen Santisima saludándola con la Visita (pág. 201).

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Serviciode gllís y cba11eríspara lasamnions •

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GUÍAS(1) A losDegotalls.

A la Cueva de Gari .. . . .

A San Miguel . . . . . . . -. .

A la Santa Cueva.

• • . . . .

A San Juan . .

• .. • • . .

A Santa Cecilia • • • • • . . . . • . .

A San Dimas .

A San Jerónimo . • • . • • . .

A San Jerónimo y bajar á Sta. Cecilia.

ACollbató (dedia). . . . . . .

ACollbató(de noche) . . . . . . .

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0`50 ptas.

0`50 » 1 » 1'50 » 2 » 2`50 » 2`50 » 2'50 » 4 » 3 » 5 »

CABALLERÍAS A San Juan . . . • • • • • A San Jerónimo • • • • • • • • . . . . . • • • • . .

ACollbató A las cuevas deCollbató. • • • . .

A San Juan y San Jerónimo • • . . .

5 ptas.

6» 5» 6» 7»

Asiento para señora, 0'50 ptas. de más.

Coche á Santa Cecilia . .

Ida yvuelta. . . • • • 1'25 ptas.

Ida óvuelta únicamente . . . . . 0`75 » (1)E1Guía ademásdesurespectivo distintivo en lagorra, vieneacreditado por. un. documento expedido á sufavorel primerdiáde cadamescoiì elsello del Monasterio, quedebe presentará todoviajeroquelosolicite. '

VISTA GENERAL DE LAMONTARA

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La montaña y vías de comunicación

remotostiempos secomplació la Majestaddivinaen escoger los montes para teatro de su magnificencia y desu misericordia;y entrelosmás privilegiados de la Leydegracia, lo ha sido sin duda nuestrasingularmontañade Montserrat. Sehalla éstasituadaen la provinciade Barcelona, distante delacapitaldelPrincipado unos 35kilómetros, á 41° 36' 19" grados lat. N., y 5° 29' 56" delmeridiano de Madrid.

Casicompletamenteaisladadelosmontes y colinas quela circundan,seyerguearrogante y esbelta sobre todoselloshastalos1235'73 metros, formando lasmás varias y caprichosas figurassegúnpor donde se lacontemple ; reESDElosmás

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presentándoseálaimáginación ora grandesy encantados gigantes, ora guerrerosquevelan inmobles el castillo cuya custodialesestá confiada, ora extáticos monjesóprocesiónde numerosos y devotos peregrinos, ya tambiénelevadoscapitelesde catedral gótica, yaflautado deórgano inmenso, yafinalmente una grande sierra,que parece serloque ha dadoel nombre ála montaña, llamándoselaMontserrat (Mons serratus,monteaserrado). Su perímetro ó circuito es de unos 26 kilómetros, formandoel conjuntodelmonte una como larga nave de unos 10kilómetrosyen suparte más ancha de unos 5kilómetros, la cual impelida y arrojada porlas olasde furiosatempestadhavenidoá encallar en la playa quedando desmantelada y hendidade proa á popa, casie_ ndirecciónde Norte áSud. No menos que por suforma es rarala montaña de Montserrat porla materiade que secompone, quesonenormespeñascos y rocas formadas de piedrasde diversostamaños,figuras y colores, unidas y conglutinadas entre sícomocon argamasade arena y cal queformanuna pasta durísimaymuydifícil detrabajar,como se ha visto .ypuede notarse tantoen el edificio del Monasterio,comoen las columnasdelafachada dela iglesia.

Estas grandes masasdepiedrasehallancolocadasenforma escalonada desde el piédela

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montañahastasucima,siendo muchomás duras lassuperiores quelasdeabajo,ycasisiempre terminan enfigura cónica, de modo que en la parte superior apenasdejan pasoómuyangostoy difícil.Cual sea lacausa de esta rara forma ycomposición, aunno está averiguado,ni parece cosa fácil,pues losmás competentes en la materianohanpodidoconvenirseacerca de este particular, concluyendo porconfesar la grandeza yomnipotencia deDios, cuyodedo descubren aquí.

Nosorprendemenosalperegrino y singularmentealnaturalista contemplar esta montaña de Montserrat convertida en un Hermosísimo jardín en todas las estaciones del año.Y causa realmente grande admiraciónveren mediode lasenormes moles quela formantantafertilidad del suelo, tantaabundancia yvariedaddeárboles,plantas y flores por todas partes hasta en las hendidurasdelas mismas peñas, creciendo consingularlozanía,máspropiadelospaíses tropicalesque de lugar donde todo parece conjurarsecontraella.Por estollenode religioso entusiasmo, cantaba uncélebre poeta montserratino,elP.Figueroa: «Queaquí,como esMaría la hortelana, Medran lasplantassin laindustria humana.»

Otra particularidad tiene también Montserrat sobre lãsotras montañas,y es nosentirse en

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GUiA HISTÓRICO- DESCRIPTIVA

ella aquelhorrorcon quésesueleembargar el ánimo yaporlofragoso y quebradodelsuelo,yaporla sombría espesuradelos árboles, ya también porla soledady silencio perpétuo quereinan en ellas.No sucedelo mismo aquí; porqueyaseladivise delejos, yase lacontemple de cerca, á medida que se va subiendoporella, siente el espíritu unacierta suavidad,descanso, yaun alegría notable, que por otraparte se aumenta contemplandoloshermososy dilatados panoramas que incesantemente se ofrecenálavistadelperegrino.

Todo esdebidoá que Montserrat es verdaderamente elmonte frondoso, elmontepingüey elmonte santo que Dios eligió para habitaren élyhacer beneficios álos hombres, asentando aquí eltrono deMaría,auxilio deloscristianos,refugio delospecadores,consuelodelos afligidos, saluddelosenfermos yesperanza ciertadecuantos enestevallede lágrimas gimenbajo elpeso delapena ó dela culpa: por esto Montserrat es atractivo y encantador más aúnque porsuformaextrañay.admirable.

Esto esloqueciertamente atraeáél tangrande multitudde gentes de todasclasesy hasta de losmás remotos países, y que no secansende subir una y milvecesque seles ofrezca ocasión parahaceruna visita álasoberanaEmperatriz decielosytierra,.áMaríaMadre deDiosy de los hombres. T .

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Varias son las vías de comunicación que se pueden aprovechar para venir á Montserrat.

Por el Oeste pasa la carretera de Barcelona á Igualada, Lérida y Zaragoza . En Collbatóse le junta otra nueva carretera que sigue hacia el Norte en dirección á Monistrol.En este pueblo se le cruza otra que se construyó en 1858 á 1859 debida á la empresa del ferrocarril de Barcelona á Zaragoza : ésta llega "á Montserratdespués de nueve kilómetros de subida y trece desde la estación del Norte. Tiene seis metros de ancha y es bastante cómoda, así para subir en carruaje como á pié, y en su parte más alta tiene un antepecho de un metro de altura, con lo cual se evitan posibles accidentes.

Entre los kilómetros nono y décimo, muy cerca del sitio que denominatsFont dels monjos (Fuente de los monjes) se le junta el antiguo camino deManresa,el cual se aprovechó desde aquí hasta el punto llamado serrade can franch,siendo ya la subida menos pendiente que el resto y mucho más agradable por el dilatado campo que ofrece á la vista del peregrino. Un kilómetro, ó poco más, antes de llegar al Santuario, se le une la carretera que partiendo de la de Igualada (que hemos dicho pasa porCollbató)viene desde Can Massanapor Santa Cecilia. Hízola construir el Rvmo. P. Abad José Ferrón, ayudándole er_ ello los municipios de Igualada, Manresay Bergapor los años de 1697 á 1700: y hoy acaba .

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de ser reconstruída, con lo cual se puede venir en carruaje con mayor rapidez y comodidad, por ser más llana y de menor extensión, pues sólo se cuentan 9 kilómetros y medio desde Casa Massana al Monasterio.

Además de estas carreteras que circunvalan la montaña, hay otros caminos, ó atajos, para subir al Santuario. El principal es el que parte deCollbatóy único que por aquella parte había en lo antiguo para comunicarse con las poblaciones de mediodía y poniente, si exceptuamos el llamado del Furat,al mediodía de la Santa Cueva, que enlaza con las carreteras de MonistroláCollbató,y deMonistrolá Esparraguera yOlesa,muy cerca del Cayrat,y que todavía hoy aprovechan no solamente los vecinos deCollbató, sino muchos otros que se hallan en aquella parte, desde el Bruch hasta Martorell y lugares limítrofes. El viaje ce ha de hacer á pié ó en cabalgadura que proveen los deCollbató. La subida es áspera en su mayor parte, aunque no faltan trechos bastan'te buenos á medida que se va acercando al término. En cambio recompensa la fatiga la hermosa vista que se ofrece al peregrino, presentándosele á simple mirada el Llobregat hasta su desembocadura en el Mediterráneo, muchos de los pueblos que riega, y varias otras importantes poblaciones como Tarrasa, Sabadell,Martorell, Vilafrancadel Panadés, etc.,

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finalmente la línea férrea del Norte, desde Olesa á Monistrol, la de Barcelona á Tarragona y gran parte de la de Martorell á Igualada.

Desde Monistrol hay un atajo que conduce también al Santuario que por él dista sólo unos 3'500 kilómetros, aunque de subida áspera y penosa. Aprovéchale la gente y alguna vez suben por él las acémilas, pero es algo peligroso.

Antes de llegar á la roca sobre la cual se levanta la ermita de los Apóstoles se bifurca : á la derecha sube por un sendero casi verticalmente y por gran número de peldaños abiertos en la roca, por lo que antiguamente le llamaron laescala nova de les Monjes que desde hace algunos años está algo deshecha : la otra senda de la izquierda va á encontrarse con el camino de la Santa Cueva de la Virgen y es mucho más cómoda,. y aunque se rodea un poco, es más concurrida.

Pero el principal medio de comunicación que hoy tiene Montserrat es el ferrocarril de cremallera, único en su clase hasta el presente en España, que se inauguró el día 6 de Octubre de 1892. Ya de muchos años atrás se había proyectado unir el Santuario con la estación del Norte por medio de la vía férrea, pero la dificultad no era de fácil solución. Mas venció, por fin, el ingenio humano y comenzaron los trabajos en Septiembre de 1891, siendo el más importante la perforación de la roca de los .

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Apóstoles en que, trabajando sin cesar día y noche dos brigadas de obreros, lograron abrirse paso después de seis meses, el día 5 de Mayo de 1892, sin otro percance que un descuido que ocasionó una muerte el día de año nuevo. La fiesta de la inauguración resultó muy brillante. Por la tarde del día 6 de Octubre de 1892, el Episcopado catalán, que se había reunido en Montserrat con motivo del IV centenario del descubrimiento de América, se dirigió á la nueva estación seguido de multitud de fieles. El Sr. Obispo de Barcelona, en cuya diócesis está Montserrat, bendijo la máquina que lleva el nombre de «San Jerónimo», la cual condujo después á los Comisionados de vuelta para Barcelona.

No cabe duda que este ha sido en parte un gran adelanto que puede contribuir muy mucho al aumento chela devoción á Nuestra Sefiora dè Montserrat, máxime que habiéndose disminuído tanto la fe, y necesitando muchos hacer un es.

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fuerzo casi. heróico paraemprender tan molesto y penoso viaje, comohacían nuestrosantepasados,hoy sería inútilexigirlode .1a mayor parte depersonas,sobre todo delicadas, enfer mas, achacosas ó decrépitas, que no podrían llegarseálospiés deMaría sin el menorpeligro ni molestia comolo hacen.

Hemosdichoqueenparte ha sidoun gran adelanto,porque no ignoramos que cierta clase de público queen otros tiempos apenas •habría soñadovisitar,niporcuriosidadesteSantuario y sagrada Montaña, yanotiene hoy esosreparoscon la facilidad del viaje. Mas esta es una delas miseriasdelavida quesuelen traerconsigo todaslascosas.Dios,•sin' embargo, que sabe sacar biénes delos-males, de vezencuandosesirve.(nòsotros somos.testigosdeello)de estosmismos mediospara atraer nopocos al camino-desalvación,de modo quelosquesubieronpor mera curiosidad, bajan arrepentidos yhumillados,óalmenos, por incrédulos ó indiferentes quesean, habráncambiado nopoco susopiniones en materia deReligión. Quiera el.

Señorabrirlos -ojosá todospoi intercesión'de su InmaculadaMadre. '

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MONTSERRAT.- -VISTA GENERAL DEL MONASTERIO.

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II

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celebridad y nombradía de que goza la montaña de Montserrat, la debe principalmente al Santuario en que se venera la prodigiosa imagen de María y al Monasterio de monjes . de San Benito, que hace ya nueve siglos tienen á su cargo el culto que aquí se tributa á Dios yásu Inmaculada Madre. De esto vamos á ocuparnos ahora, dejando para otro lugar el hallazgo de la prodigiosa Imagen de María que se venera en el Camarín de nuestra Basílica.

La primera mención que hallamos de la iglesia de Santa María, en la montaña de Montserrat, data del siglo x, es decir, del año 932, en que Sunyer, Conde de Barcelona, renueva y

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confirma la donación que en 888 hizo su padre Wifredo al monasterio deRipollde la montaña deMontserrat con -sus iglesias, que en el privi-. legio de éste no se citaron cuáles eran, mas Sunyerlas enumeró una por una. Lo mismo consta por otra confirmación del rey Lotaria de Francia 'en el año 982.

Cuatro años más tarde (986) hallamos ya la iglesia de Santa María deMontserrat con monasterio de monjes benedictinos y su Prior Raymundo dependiente de la abadía de Ripoll, de donde procedían él y sus súbditos. Esta dependencia duró cuatrO siglos, esto es, hasta el año 1410. Varias veces intentaron los monjes deMontserratsepararse de, la sujeción de los deRipoll,pero siempre sin resultado; hasta que visitandoMontserratelantipapaPedro de Luna, llamado Benito XIII, reconocido por legítimo en Francia, España y otras naciones, le suplicaron que, en vista de la importancia que iba adquiriendo este Santuario, lo desmembrase del monasterio de Ripoll.Accedió á ello Benito XIII, y expidió una bula en Perpilián el9 de Junio de 1410, por la cual elevó el Monasterio á la categoría abacial, lo que confirmaron después los legítimos Pontífices Martín V Eugenio IV. El primer Abad fué el P. Marcos de Villalba, no menos virtuoso que noble, que fué hallado digno de ser enviado por embajador al Papa

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DEMONT S ERRAT

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Martino V en 1417, y al Rey Alfonso V de Aragón, estando en Nápoles el año 1422. Vuelto á Montserrat, se dedicó al gobierno de sus monjes con particular eficacia, redactando unas constituciones para mantener mejor la disciplina regular, y consiguió por fin la absoluta independencia de Ripoll. A su muerte (cerca del año 1436) el Rey D. Alfonso trató de unir este Monasterio á la Congregación de Santa Justina déItalia, llamada también Casinense. Para elefecto trajo de allá varios monjes y nombró Abad de Montserrat al P. Antonio de. Aviñón, uno de ellos; pero al morir éste se deshizo todo, pues los italianos se volvieron á su país y los españoles nombraron por Abad al P. D. Pedro Antonio Ferrer, noble y docto, que mereció ser Canciller de Cataluña y Bibliotecario del Rey de Aragón. Sin embargo, su gobierno tuvo Más de lujoso que de útil á Montserrat, 'donde sin pensarlo abrió el camino á los Abades Comendatarios. Era esta una plaga de eclesiásticos y á veces hasta de seglares, á quienes se encomendaban los Monasterios para que de sus rentas vivieran más holgadamente, de lo cual resultó la ruína espiritúál y temporal de las órdenes monacales. Montserrat, por gran misericordia de Dios, sólo tuvo uno y bueno, cayendo en manos del Cardenal Julián de .la Rovère, que más tarde llegó á sentarse en el Solio Pontificio, y es bien conocido con el nombre de Ju-

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lio II. Este gobernóá Montserrat pormedio del P.Abadde Santa Cecilia, y empleó las rentas del mismo en la construcción del claustro gótico queaunse conservaenparte, y es donde hoy está instaladala tiendademedallas. Juliano

resignó la Abadía de Montserrat en manos del Sumo Pontífice, y en su lugar entró el P. Juan de Peralta, á quien los Reyes Católicos presentaron para Obispo de Vich en 1492. De este modo quedó abierta la puerta para introducir la nueva reforma de los benedictinos españoles, llamada de Valladolid, por haber comenzado en aquella ciudad, la que favorecían y procu-

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raban extender los dichos Reyes por todos sus estados.

Habiendo visitado los Reyes á Montserrat después de la toma de Granada, y viendo la escasez de personal para el culto, llamaron al Prior general de Valladolid, que vino con catorce monjes, los cuales tomaron solemne posesión el 28 de Junio de 1493, y luego el 3 de Julio, reunidos en Capítulo con los demás profesos del Monasterio, eligieron por Superior al V. P. García de Cisneros, que primero gobernó con sólo la dignidad de Prior, hasta que en 1497 Alejandro VI decretó que se devolviera á los Monasterios la dignidad abacial de que habían gozado antes de unirse á la Congregación Vallisoletana. Al punto que el V. P. García de Cisneros tomó las riendas del gobierno de Montserrat, se comenzaron á conocer los saludables efectos de tan acertada reforma, y este Monasterio, que en el último siglo había decaído algo de su fama, mereció ser tenido y considerado desde aquella fecha como uno de los principales de la Orden Benedictina por su santidad y observancia, por el numeroso y lucido personal que tuvo durante más de tres siglos, en los cuales descolló sobre otros muchos; yendo al frente el V. P. Cisneros y gran número de Abades, como Pedro de Burgos (1512-36), primer historiador de Montserrat; Diego de Lerma (1553), que fué también General de la Congregación;

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Benito de Tocco (1556-62), después Obispo de Vich y de Lérida; Bartolomé Garriga(1559), que levantó el grandioso templo actual; Lorenzo Nieto (1596-601), promovido en 1603 al Obispado deAlgeren Cerdeña, después Arzobispo deAlgery de Oristán; Alonso Gómez (1621), en cuyo tiempo llegó la Comunidad á cien monjes; Juan Manuel Espinosa (1637), que fundó el monasterio de Montserraten Madrid,y - después de haber sido General de la Congregación, fué Obispo de Urgel y Arzobispo de Tarragona; Benito Sala (1682), más tarde Obispo de Barcelona y finalmente Presbítero Cardenal de la S. I. R.; Plácido Cortada (1737), que en 1745 fué nombrado General de la Congregación de Valladolid; Benito Argerich (1753-61), que levantó el claustro actual y murió en olor de santidad en 25 de Marzo de 1764, después de predecir la ruína de Montserrat;Simón Guardiola (1814), que en 1828 fué consagrado Obispo de Urgel, y finalmente José Blanch(1824-32) último Abad y General de la Congregación Vallisoletana.

No fueron únicamente los Abades los que florecieron en santidad, letras y dignidades, pues que de Montserratsalió el P. Iñigo Royo, Abad de San Victorián y después Arzobispo de Caller, en Cerdeña; otro del mismo nombre, que gobernó la Congregación de Valladolid (169397), que ya en el siglo anterior había regido -el

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P. Antonio Sea (1574-77). De Montserrat salieron también los primeros reformadores y Generales de la Congregación Lusitana, que fueron los PP. Pedro Chaves y Plácido Villalobos; sin otros muchos que no es fácil reducirá pocas líneas, los cuales gobernaron los diferentes Monasterios de las tres Congregaciones de Benedictinos que había en la Península.

Entre las personas más. notables en santidad, mencionaremos al ermitaño Benito .de Aragón (1516); Cristóbal de Zamora, que predijo le seguirían otros treinta monjes en el mismo año en que falleció (1524); Mauro de Alfaro, maestro de novicios (1638) ; Francisco Laboroto, italiano, que oyó de boca del Crucifijo: «No te consolaré hasta que vayas á Montserrat», donde falleció en 1583; Pedro Alonso de Burgos, ermitaño célebre; . por su doctrina y santidad (1572); Juan Martínez, varón de singular humildad y caridad (1595) . En el siglo xvii ilustraron también este Monasterio con su santidad, entre otros, los PP. Francisco Rosell (1634) y Plácido Ferrer (1641), que merecieron ver la .

SantísimVrgeálhodamut,ysbre todo el P. Bonifacio Kemp, que vuelto á su patria, Inglaterra, para socorrer á los católicos, padeció martirio el'año 1644. Distinguióse también por la santidad de vida y fué muy conocido cl P. ermitaño Bernardo Márquez (t 26 FeUrero 1701), á quien alcanzó todavía el celebé,

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rriino Hermano José de San Benito, conocido comunmente por el Ven. Fray José de les Llanties (-1- 18 Noviembre 1723).

Finalmente, como muestra de lo mucho que florecieron también las ciencias desde la reforma del V. P. Cisneros en Montserrat,basta señalar los nombres de los PP.Juan Robles (1572), cuya traducción de los santos Evangelios acaba de darse á luz y de que hablan con sumo elogio los que la han leído; Mateo Lloret, que en 1570 imprimió en Barcelona el gran volumen intituladoSilva Allegoriarun Sacrce Scripturcc,reimpreso después en Venecia, París y Colonia; José Capellades(1688), cuyos infolios quedaron por desgracia sin ver la luz pública, no obstante lo mucho que prometían, lo mismo que los de Juan Garin, de nación francés, y los de otros que sería largo enumerar. Pero no pasaremos en silencio al P. GerardoJoana, doctor en farmacia (1841), ni al Hermano Antonio Castell, que también descolló en la misma ciencia y vivió más de cien años, ni finalmente al P. Andrés Ricci, célebre pintor, muerto en 1675.

La reducida Comunidad que halló el P. Cisneros, aumentada con los vendidos de Valladolid, creció tanto en la reforma, que solo este V. P. Abad dió el santo hábito á 76 religiosos, entre coristas y ermitaños. A fines del siglo xvi hallamos ya queMontserratmantenía para el ,

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culto dentro del Monasterio más de 70 monjes y 43 hermanos, además de los PP. ermitaños y de los otros religiosos que se hallaban fuera en los Prioratos y, Parroquias, que solían ser en igual número: «Las rentas que poco antes eran insuficientes para tanto como en Montserrat se gastaba en culto, ministros, edificios, huéspedes y pobres, fué suficiente, gracias á una metódica y fiel administración del V. P. Cisneros, para cuadruplicar el número de ministros, remontar los edificios y dar mayor y mejor provisión á los huéspedes y pobres. Visiblemente se sintieron la mano de Dios y la bendición de su' Santísima Madre.»

Veamos ahora cómo ordenó el P. Cisneros la Comunidad de Montserrat: «Distribuyó, desde luego, el personal en cuatro clases, y á cada una le señaló sus respectivas obediencias, dotándole de sabias leyes, y de su observancia resultó la armonía más perfecta, porque todo fué obra de la caridad y todo fué ordenado por ella.

«A los monjes Sacerdotes les señaló, sobre las observancias de la regla de San Benito, el estudio, la administración de los Sacramentos y la predicación de la divina palabra á los peregrinos y numerosos fieles que venían á recibir las bendiciones de la Santísima Virgen María. »A los hermanos legos les confió el desem, .

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peño de las varias artes que son indispensables á las necesidades de la vida, la hospedería, la enfermería y la policía exterior.

• »Había una tercera clase que vivía en la montaña, es decir, los anacoretas ó ermitaños, de que hablaremos en capítulo aparte. Les incorporó á la Comunidad, les convenció de la necesidad y utilidad de los votos perpetuos, les dió un método de vida peculiar y fijo, y logró colocarlos á la altura que tanto admiraron los devotos que visitaban á Montserrat. »Finalmente organizó la cuarta clase de los infantillos de Coro, conocida desde siglos atrás por el nombre de Escolanesó Escolares. A `éstos les señaló un local especial, les reglamentó en todo lo concerniente al estudio, diversión, horas de descanso, alimentos, vestidos y policía, sin olvidar el modo con que habían de presentarse en los actos públicos. »Así reglamentadas las cuatro clases, las separó enteramente del contacto y confabulación de los forasteros, ó de los que venían á visitar á la santa Imagen, y hasta para el mutuo trato interno fijó horas y lugares. De aquí resultó un casiLaus perennis,porque pocas eran las horas del día y de la noche en que, ó los monjes en la iglesia, ó los ermitaños en sus respectivas capillas ú oratorios, ó los niños Escolanes, ó los Hermanos legos no estuvieran cantando, rezando ó meditando, lo cual edificaba á los Beles" y convertía á muchospecadores.»

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Tal fué la obra del célebre P. García de Cisneros, que lleno de méritos pasó á mejor vida el 27 de Noviembre de 1510, dejando su espíri tu :en el Ejercitatorio espiritual que hizo imprimir diez años antes dentro de Montserrat, y del cual se sirvieron -adelante los monjes para su propio aprovechamiento y para la dirección de los peregrinos, entre los cuales se contó San Ignacio de Loyola.

Tres siglos justos desde la muerte del V. Padre Cisneros duró el orden de cosas establecido por él con tanto amor y solicitud para Montserrat. Por justos juicios de Dios vinieron á civilizará España los hijos de la Revolución francesa y del terror, quienes, dejando atrás á las hordas de Alarico y Atila, dispersaron las cuatro Comunidades, y por fin destruyeron el Monasterio é incendiaron el grandioso templo de María, cumpliéndose á la letra lo vaticinado por el V. P. Abad Benito Argerich, que «desde la corona de la Virgen al gallinero todo sería, destruido en Montserrat.» Testigos de esto f ueron los aciagos días 25 de Julio de 1811 y 31 de Octubre del mismo año.

Volvieron enseguida los monjes y emprendieron con ardor la restauración de lo más indispensable, y por fin lograron colocar otra vez la santa imagen en su propio trono y reanudar el culto, siquiera la suma pobreza no les permitiera hacerlo con la antigua solemnidad y

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esplendidez como deseaban; pero la tranquilidad no 'fué duradera. Nuestros compatriotas, no queriendo quedarse en zaga á sus maestros en materia de libertad y civilización, comenzaron á molestar y vejar á los monjes de mil-maneras, concluyendo por extinguir las Ordenes religiosas; y aunque al principio Montserrat quedó excluído de la común sentencia, por fin en 1837 tuvo que sufrir el rigor de tan draconianas legislaciones , y la orden benedictina quedó civilmente extinguida en España.

Antes de abandonar el Monasterio, procuraron los monjes ocultar y asegurar la santa Imagen, depositándola en casa de una persona de la mayor confianza, donde permaneció algunos años, hasta que, no pudiéndose contener el entusiasmo de los catalanes para con su tiernísima Protectora, aprovecharon la primera ocasión propicia, y pidieron y obtuvieron una Real Orden para que se abriera al culto el templo de Montserrat; así se hizo en 7 de Septiembre de 1844, asistiendo el dignísimo Sr. Obispo de Barcelona D. Pedro -Martínez Sanmartín y unas cuarenta mil almas. Con este motivo vino también el Rmo. P. D. José Blanch, último Abad de Montserrat, y á su invitación acudieron otros muchos monjes profesos de la casa, á los cuales se juntaron algunos otros de la misma Orden.

Estos, después de la muerte del Rmo. Padre Blanch, en 15 de Septiembre de 1851, siguieron

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gobernados por presidentes hasta que Pío IX restableció en 1862 la dignidad abacial en la persona del Rmo. P. D. Miguel Muntadas, que el mismo año unió este Monasterio á la naciente Congregación Casinense de la primitiva observancia. Este venerable Prelado, que se puede considerar como nuevo fundadór de Montserrat, para consolidar más su obra estableció en este Monasterio, de acuerdo con el célebre Obispo benedictino Mons. Rosendo Salvado, misionero de Australia, el Colegio de Misioneros de Ultramar, que autorizó el Gobierno y se inauguró en Febrero de 1885. En 8 de Marzo siguiente pasó á mejor vida el Rnio. P. Muntadas, teniendo por sucesor al Rmo. P. D. José Deás, que actualmente gobierna el Convento, y ha tenido la dicha de ver casi enteramente restaurado el templo y el Monasterio, y una Comunidad tan numerosa como en sus mejores tiempos , habiendo además contribuído á la restauración de la Orden benedictina en España, y fundado las Misiones de Filipinas y cooperado al sostenimiento de las de Australia.

MONTSERRA.T.—VISTA GENERAL DE LOS APOSENTOS.

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III

Hospitalidad

ECÍBASEá

cuantos huéspedes llegaren al Monasterio, como al mismo Cristo en persona, pues El ha de decir algún día: Huésped fui y me recibisteis .

Dése á todos el honor correspondiente, en especial á los que están unidos con nosotros por los lazos de una misma'fe y á los peregrinos.» Con palabras tan hermosas como estas, comienza el glorioso Patriarca de los monjes de Occidente, N. P. San Benito, el capítulo LIII, uno de los más preciosos de su Santa Regla, en el cual prescribe cómo se ha de ejercer la hospitalidad, que tan alto ha puesto el nombre de los Benedictinos en todos los tiempos.

Esta hospitalidad se practicó en Montserrat

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desdeantiguo ensumo grado, como nosloatestigua lahistoria. Porque no sólo dabaalbergue álos muchosperegrinos quevisitaban el Santuario,sino queacudíaá cada unocon lonecesarioconforme ála dignidady calidaddela persona.El estado á quele redujo lacivilizaciónmoderna noleha permitido proseguirobra tancaritativa,perono espoco loque hahecho yhace aún, ofreciendoá todoslosperegrinos lugar donde puedan recogerse decente y hasta cómodamentedurantelos díasque permanezcanen el Santuario.

Desdelos comienzosdela restauración de los edificios, después delosdestinados alculto divino,los necesariosparala hospitalidad han sidosiempre losque máshanpreocupado á los monjes,tanto, que por este motivo no hanconcluídotodavíade reedificar el Monasteriopara mejorála colocaciónycomodidad deatendr losperegrinos.

Paraéstos habilitópartedel Monasterio, es decir, los tres primeros pisos quedanálos claustros, yllevan los nombresde SanBenito, San Luis y San Millán respectivamente,los cualessehan arreglado contodala decencia posibleyhanquedadotan apreciablescomo antes delafunestadevastación. En 1854 se destinóparahospedería el edificio que antiguamente sirviódeenfermeríadelos Hermanos y hospital de losperegrinos, levantado en1552

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porel Abad Benito de Tocco, y que por especial providencia se libródela comúndestrucción.Conóceselepor «Aposentosdel venerable José delesLlanties ó de San Benito », por haber muerto allí estesiervodeDios, despuésde larga y penosa enfermedad, el. 18 de Noviembrede 1723.Aúnse conserva la celda enque entregóeste santovarón su espíritu al Criador, yel oratorio de iaenfermería,donde tantas veces Nuestro•Señor hizo elportentosomilagrode quelaSagrada Forma se dirigieraporsímisma álabocadel dichosoenfermo.

Pocos años después, seconvirtió también en aposentoslacasa que antiguamente había servido para elmédico, yotros oficiales del Monasterio,que esla conocida hoy con el nombre de Santa Escolástica,muycerca dela plaza principaldel Santuario;llamados hoy á desaparecer á causa de suvetustez.Además,se destinaron parael mismo fin otros locales que habíanservido para otrosusos, comolas habitaciones del farmacéutico, carnicero, albañiles, etc., y se.hallan juntoal Monasterio; son actualmenteconocidos con los nombresde San Plácido, San Mauro, San José de Calasanz y SanJ uande Mata.

La construccióndela carretera desdela estación del NorteenMonistrol hasta el mismo Santuario(1860)facilitó sobremanera la venida áéste,queal mismo tiempo se vióen la

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todoslosperegriimposibilidad de atender nos. Poreso en1865,haciendo un nuevo esfuerzo, yaprovechando un pequeño localllamado casa dels de Collbató, levantó los aposentos de San Alfonso, obra costosísima, parala- cual hubodearrancarse una roca que impedía la construcción desembarazada del edificio por laparte posterior. Este edificioconsta de cuatro pisos, yen. los bajossecolocó el «Despacho de Aposentos» yla «Tiendade comestibles». muchos años ha servido para colocar en élPor álas personas declasemás elevada, paralo cualmás tarde se le ensanchóhasta cerca de losaposentosdel venerableJosé de San Benito.

Alaparteopuestadeéstosseconstruyó, en1876,otro nuevoyespacioso edificio, destinado principalmente parafamiliasópersonas quedeseancomeren el Restaurantque sehalla inmediato.Sele.dióel nombrede «Aposentos de Santa Teresa», es decuatropisos y contiene unregular número de habitacionesbãstante cómodas.

Atendido.elnúmerosiempre creciente de peregrinos, yenespecial depersonasdelamayor distinción, echándose aún de menoshabitacionesproporcionadas, se levantójuntoal claustro gótico la nueva hospedería denominada de San José, que se inauguró el22 de Marzode 1892. Esteedificio presentainterior .

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y exteriormente más eleganciaque todoslos otros ya dichos,y reunetambién mejorescon-

1. A San Miguel.- 2. Carretera de Monistrol.- 3. Camino nuevo delVIACRUCIS.-4.- A Santa Ana, y atajo de San Jerónimo.- 5 A la cueva de Garí -0. Estación última del VIACRUCIS.- 7. A San Miguel y Collbató.- 8. Atajo á San Juan.-9. Camino del cementerio -10. A la Santa Cueva de Nuestra Señora.-11 Entrada al Santuario.-12. Fuente del Portal ó del Milagro.-13. Puerta principal del Santuario 14 Estación del ferrocarril de cremallera. -15. Cueva de Garí.-16 Cementerio.

diciones; casi todas sus habitaciones tienen, cocina, aneja, de modo quelas familias pueden comer independientemente.

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La construcción del ferrocarril de cremallera, llevada á término en el mismo año de 1892, atrajo ya, desde el verano siguiente, tantos peregrinos á Montserrat, que todos los edificios destinados á este fin no satisfacían ni con mucho las crecientes necesidades. Fué necesario pensar en nueva hospedería, cuyos cimientos se echaron en 1896, junto á la estación del ferrocarril, terminándose tan costosa obra en 1902.

Llámase «Hospedería de Nuestra Señora», y es quizá la mejor que hoy tiene Montserrat, que ha hecho cuanto estaba de su parte para satisfacer las continuas exigencias que reclamaba la hospitalidad de modo que si todavía muchos no quedan atendidos, sobre todo en cierta época del año en que la concurrencia dei público es incesante, no es por falta de voluntad, sino porque no ha sido dable hacer más hasta el presente. De esto se deben hacer cargo los peregrinos, especialmente cuando hay mucha aglomeración; porque, aun observando la ley antigua de no permitir en tiempo de verano que permanezcan más de siete días los visitantes, con todo muchos se verán contrariados sin que el Santuario pueda remediarlo, á pesar de los sacrificios que para el bien del público el Monasterio continuamente se impone.

Tampoco debieran olvidarlo aquellos otros peregrinos que al encontrar algunas cosas no muÿá su gusto, hacen odiosas comparaciones

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con lugares qùe quizás no han visitado, ni se hallan en las singularísimas circunstancias de Montserrat. Cuánto le cuesta la hospitalidad á este Santuario, lo podrá comprender cualquiera que atienda y considere el gasto que se necesita para tener dispuestas todos los días y á todas horas tantas habitaciones, el personal empleado en ellas, ya de criados que cuidan del aseo y otras necesidades, ya para la ropa y demás ajuar en que atienden fuera de las ocho Hermanas terciarias de Santo Domingo, no menos de una veintena de doncellas de los pueblos vecinos ocupadas exclusivamente en el lavado y arreglo de la ropa.

Durante la temporada de invierno en que la concurrencia de visitantes es exigua, se aprovecha la ocasión para reparar los edificios, blanqueando y limpiando las habitaciones.

Así, pues, si el peregrino, á pesar de este cuidado, no halla en ellas tanto aseo como deseara, ó fuera menester, atribúyalo á la aglomeración de gente, y sobre todo á la falta de edu-cación de muchos que parece disfrutan y se gozan en destrozarlo y malbaratarlo todo. Conviene, por lo tanto, que peregrino no olvide estas advertencias.

Lo primero que ha de hacer el que llega al Santuario y desea ser hospedado en él, es presentarse en el «Despacho de Aposentos», que se halla en los bajos de San Alfonso, como ya se

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ha dicho. Allí, después de haber expuesto sencillamente sus necesidades y deseos, se le designará la habitación que ha de ocupar, atendido su estado y condición, y se le entregará la llave del mismo con la ropa necesaria. Las personas ó familias que desean comer en la fonda, suelen ser destinados á los inmediatos aposentos de Santa Teresa, ó á otros que hay expresos en las restantes hospederías. Mas para los que desean ellos mismos condimentarse la comida, están destinados aposentos especiales que tienen su cocinilla, como los que se hallan debajo de los claustros, casi todos los de San José y de Nuestra Señora, los cuales, además, tienen su pequeño comedor y armarios con la vajilla indispensable. Para los aposentos en que no la hay, se puede proveer el peregrino en la «Tienda de comestibles», donde se le entregará gratis los utensilios que fuere menester, si bien se exige que deposite el importe, que luego se le entrega, cuando los devuelve; medida quehasido necesaria, por razón del poco cuidado, y hasta malicia en algunas ocasiones, de gente despreocupada y mal intencionada. En la «Tienda de comestibles», como su nombre indica, hallará también el viajero, á precio corriente, gran surtido de todo lo necesario para la alimentación; y, además, en la temporada de estío podrá proveerse en el pequeño mercado, al que los labradores de los pueblos vecinos

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cada día concurren en la plaza del Monasterio, llevando hortaliza, frutas, caza, volatería, etc.

Además, un criado del Monasterio baja diariamente á Monistrol por carne fresca y otras cosas de primera necesidad que no se hallan en el almacén, y lo expende en el kiosrko que hay junto al «Despacho de Aposentos». De este modo el peregrino puede tratarse, sino muy regalada y opíparamente, al menos con bastante comodidad, los días que pasa en el Santuario.

Mas para los que 'no puedán , ó no quieran condimentarse la comida, se ha estable cido, ya desde la restauración, un Res taurant á cargo de personas ajenas al Monasterio. Antiguamente no había necesidadde e 11 o, pero en nuestros tiempos se ha hecho indispensable. Comenzó hacia el año 1855, en que se aprovecharon las ruínas de la antigua Casa de los pobres, edificada por el P. Abad Agustín Novell, el año 1729, con limosnas que para ello le. había 4

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dad° el ReyFelipe V.Pocoápoco, -.según--la concurrencia de peregrinos, se ha ido agrandando, y actualmente pueden acomodarse ála vez más de 500personas. Eny el pisobajo tiene salones - delectura,de café refrescos;enel entresuelo elcomedor de raciones, segúntarifa fijadaen. cuadros en las paredesdellocal (cocinaespañola). En el primer pisotienevarias salas para mesas redondas y álalista(cocina francesa), y ademásdepartamentos especiales para banquetes, etc.; se sirveála española y álafrancesa de 3á5 pesetas, y sedespachan abonos para determinado número de días` Los días enquela Iglesia prohibe comer carne, sola-sesirven platos devigilia,variados y bien condimentados. Está vedado enabsoluto cualcl-ase dejuego; tampocose permiteallí, adentro delosmurosdel Monasterio,bailar, tocar,ni siquieracantar, sino cuandosehace en común, comósucede en las peregrinaciones enque secantan himnos religiosos y en alabanza deNuestra Señora.

Paralospobres que sepresentan en el Santuario, ha destinado éste un edificio particular fuera delrecinto delas hospederías,dondeson recogidosy atendidoscontodasolicitudy caridad:-porpersonaespecialmente destinada para esta obra de misericordia. Allí les suministran losalimentos el tiempoque selesconcede per manecer -enMontserrat, quesueleser _de .24 ho-

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ras, á no ser que las circunstancias aconsejen que se les alargue más. A los tales les está absolutamente prohibido ir por los aposentos á prestar servicios, ni pedir limosna, porque la experiencia así lo ha aconsejado, demostrando que no pocas veces los rateros han tomado capa de pobres, y con este nombre dado disgustos al Monasterio y á sus visitantes. Los que gusten dar limosna á los pobres del Santuario, diríjanse para ello al P. Aposentador, quien les prestará benévolamente las facilidades necesarias. Para atender á la salud de los innumerables peregrinos que visitan el Santuario, hay en Montserrat el correspondiente facultativo, que tiene su habitación junto al «Despacho de Aposentos». Allí, pues, han de acudir los que tuvieren necesidad de sus servicios, corriendo á su cargo los honorarios de las visitas y medicamentos. Además, en todos los accidentes y casos graves, el Monasterio no repara en gasto alguno para atender solícitamente al que se halle en peligro ó necesidad.

Si sucediere que algún peregrino se agravare en su dolencia, y la enfermedad lo pidiere, se le administrarán con puntualidad y diligencia los Santos Sacramentos con la solemnidad que el tiempo y las circunstancias lo permitan, y si, finalmente, el Señor tuviere á bien disponer de su vida y sacarle de este destierro, si él no ha ordenado préviamente otra cosa respecto á

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su entierro y sepultura, ésta le será dada cristianamente en el cementerio junto al torrente de Santa María, detrás de la Casa de los pobres.

De ello se encargarán los Padres Sacristán y Aposentador, que acompañados de otros monjes y de los niños Escolanes, cumplirán con la más exacta escrupulosidad todo lo concerniente á las últimas honras del difunto, de cualquier clase y condición que éste sea.

MONTSERRAT.-CLAUSTRO GÓTICO Y PUERTADELA ANTIGUA IGLESIA

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IV

La iglesia

s natural, ylo pide el orden y hastala buena crianza, queel:peregrino.,‘ una vez haya recibido -la hospitalidad, hagasu primeravisita álaSeñora delacasa, siel tiempo lo permite, máxime siendoeste èlfinporelque ha subidola montañayvenidoá Montserrat, como es de suponer.De otro modo no valía lapena de haberse tornado este trabajoy gastos que ha hecho.

Guiémosle,porlotanto, álaBasílica, donde podrá explayar su devoción. La actual fué edificadahace tres siglos . Anteshubo otra mucho máspequeña,que_ ocupaba parte deloque ':hoyes- plaza delante del Monasterio. La puerta principal,bellísimo ejemplar románico, sehalla

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(xUÌA I#ISTÓkICO-DtSCRIPTIitA

en el lienzo dela pared, unidoalclaustro gótico. Elábsidedela misma veníaácaerdentro delclaustro actual, donde sehallan losaposentos de SanFulgencioy San Leandro, como lo atestiguanvarias lápidas; pero enespecial dos, en latín launa yen castellano la otra. Ignórase, ápunto fijo, cuáles fueronsus dimensiones; (1) sólosabemos quesufrióvarias reformas, entre ellas la agregaciónde dos naveslaterales con suscorrespondientes puertas, sin que poreso llegaseá ser capaz de contener lamuchedumbrede peregrinos que visitaban la SantaImagen,sobre todo en lasgrandes festividades.

Como porotraparteardíantantaslámparas, sus paredes habíansidoennegrecidas porel humo;lo cual,juntocon la asistencia contínua delosperegrinos, ydeficienciasdelaventilación,era grave inconveniente para -permanecer en ellapormucho tiempo. Con todo sedicede Carlos V que aquellasparedesahumadasy ennegrecidas le producían taldevoción,que no sabía cómo explicarlo.

Despuésde levantadala nueva iglesia, de que vamos á ocuparnos, quedó la Santa Imagenporalgunos,años en la antigua hasta que, porfin, parecióconvenientetrasladarlaála (1)Lasaproximadas quefijó elP. Muntadas por relación detestigosoculares, eranunos 25 metros de largo por 17 de ancho y 12 deelevación.

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actual, y desde entonces perdió toda su importancia,siendovisitada únicamente por curiosidad hasta que, en 1755, el venerable P. Abad Benito Argerich, de acuerdo con la Comunidad, dispuso que se demoliera para levantar los claustros del a ctuai Monasterio, cuya primera piedra se colocó el 14 de Septiembre del mismo año.

Este grande edificio, que por la parte de la carreterá tiene ocho pisos, costó once años levantarlo; pero no quedó completo hasta 1792.

Apenas habían comenzado á habitarle, cuando sobrevino la calamidad espantosa que asoló el Santuario, como lo había predicho el venerable P. Argerich. Gracias á su solidez, pudo resistir la barbarie de los enemigos, quedando la mayor parte en pie y casi como hoy le vemos, sin poder aún predecir cuánto tiempo seguirá ostentando las huellas de la civilización napoleónica. La parte baja de los claustros sirve de hospederías exteriores. El primer piso, para hospedería interna de religiosos y sacerdotes y otras personas de respeto; el segundo piso contiene la Cámara de Obispos y de los Superiores de la Orden, y los restantes son ocupados por los monjes.

Cerrando los claustros y pegada al Monasterio se halla la actual iglesia, obra admirable en este lugar, y llevada á cabo por iniciativa del venerable P. Abad Bartolomé Garriga, cuya

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historia, si bien muy sabida, no dejáremos de indicar brevemente por su singularidad. Su padre, que era un pobre labrador de Pinós, perteneciente entonces á la diócesis de Vich y hoy á la de Solsona, se presentó cierto día en el Santuario, trayendo sobre el jumento unas angarillas con un niño en la una parte y pn cabrito en la otra. Presentóse al P. Sacristán, y le ofreció el niño y el cabrito. El monje aceptó el animal, pero devolvía la criatura al labrador, que insistía y porfiaba en que todo había de quedar para el Monasterio. Entonces el Padre Sacristán avisó del caso al P. Abad, que era á la sazón el P. Pedro Muñoz, el cual ordenó que se aceptara el niño y que se colocara en la Escolanía. Esto acaeció en 1511. Al cabo de nueve años, habiendo dado las mayores muestras de aplicación y virtud, el joven Garriga, con otros tres escolanes recibía el hábito de San Benito, de manos del Abad Pedro de Burgos, I de este nombre, teniendo á la sazón dieciséis años. Hecha la profesión, se distinguió tanto por su observancia, que en 1559 fué elegido Abad poi la Comunidad, confirmando desde luego su gobierno el acierto de la elección.

Dícese que siendo niño escolán se lamentaba Garriga de que la Virgen tuviera un templo tan pequeño, y prometía que cuando él fuera mayor le había de levantarotromás grande. Este magnánimo pensamiento, por tanl

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tos años alimentado en su interior, lo puso por obra el año siguiente de su Abadía, en que, utilizando los cimientos que los Reyes Católicos habían echado para un nuevo Monasterio y los materiales al efecto reunidos, los destinó para templo de la Santísima Virgen y colocó la primera piedra el 11 de Julio de 1560. Concluyóse tan gigantesca obra al cabo de 32 años, trabajando de contínuo de 100 á 120 hombres, doce acémilas y diez pares de bueyes. Fué consagrado el año 1592, siendo Abad el P. Plácido de Salinas, ex-general de la Congregación de Valladolid, el cual, aprovechando la circunstancia de hallarse reunido en Barcelona todo el Episcopado catalán, le invitó á que tomase parte activa en la ceremonia. No pudiendo venir el Arzobispo de Tarragona por estar enfermo, hizo la consagración el Ilmo. Sr. D. Pedro Jaime, Obispo de Vich, el día 2 de Febrero; mas por celebrarse en este día la fiesta de la Purificación, la del aniversario de la Dedicación ha sido fijada para el día siguiente.

El edificio es muy sólido, teniendo sus paredes colaterales un espesor promedio de 1'93 metros y 1'27 la de la fachada, todo de piedra de la montaña. Consta el templo de una sola, pero elegante y espaciosa nave de estilo románíco, cuya elevación es de 33'32 metros, teniendo de largo, sin incluir el camarín, 68'32 y de ancho 15'45. A cada lado hay doce capi-

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lias, seis altas y seis bajas, del mismo estilo, separadas entresípor unaparedde 1'30;las dimensiones de cada una forman casi un cua drado de unos 6 metros de ancho y otrostantos de largo, excepto lasdos máscercanas alPresbiterioquetienenalgo más de 7 metros;su altura es de 9'74. Estas últimas estándivididas delas otrasydel Presbiterio por dobles pilastras,hechas con el findesostener elmagnífico lucernario ócimborio, del quesólo quedan hoy vestigios en laparte interior dellugar que ocupó.Al exterior antesaparecía el templo como situviera tresnaves,lo cual, con el cimborio, le hacía bastantehermoso, aunquede aspecto severo.. Hoy,porhaberlevantadolos monjes, en la primeracalamitosa mitad del sigloxix,las habitacionessobrelas capillas laterales, obligados áelloporla necesidad, ha perdido toda lafigura deiglesiayproduce bastante mal efecto, lo cual durará hasta que con la ayuda delimosnasporel crecidogasto que exigesu demolición,yla construcciónde localnuevosuficiente,pueda remediarse.

Lafachada que da á losclaustros eshoy nuevay seinauguró el21 deOctubrede 1901, habiendosido costeada generosamente,en su mayorparte, por las señoras hermanas doña Emilia ydoña Elvirade Llagustera, vecinasde Barcelona. El plan esdebido alarquitectodon Francisco de P.Villar.Elprimer cuerpo con

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servaenpartesu antiguo carácter severo, desapareciendo losnichos quecontenían los cuatro apóstolesá cada lado de laportadaen losintercolumnios.Además, el bajo relieve de la Virgenque _ estabasobrela portada, ha sidosustituido porotroque representaal Sr. Obispo de doc-Barcelon tor Urquinaona,pidiendo derodillasá LeónXIIIla concesión del Patronde Nuestra Señorade Montserrat para toda Cataluña. Otra novedaddela nuevafachada son las dos puertas laterales que se abrieron con grande acierto , pues en tiempo de romerías y de mucha concurrencia eran de imperiosa necesidad para el fácil acceso y la cómoda salida del templó. Son algo menores que la central, aunque del mismo estilo; y sobre la una está esculpida la Anunciación de

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Nuestra Señora , que ' eraeltítulobajo el cualfué dedicada en unprincipiolaIglesia; sobreladela derechaestá esculpidoel Nacimiento de la Santísima Virgen, cuyo misterio es actualmente sutitular.

El Apostolado, que antes se hallabadistribuído áloslados dela puertaprincipal, y sobreella, teniendo en medio al divino Redentor, ahoraestáenfila todoélcolocado sobre larepisa formada por el cornisamientocentral. Es obradelcélebre escultor D. Agapito Vallmitjana (-j- en1905), costeada porlimosnasde familiasparticulares.

Alaaltura delascúpulas delos Apóstoles terminabaanteslafachada, queahora continúa subiendodivididaen otrosdoscuerpos,uno de los cuales lo formael gran rosetónque da luz alcoro.En los cuatro ángulos tiene elbusto de cada una de lasvirtudescardinales, cuyos símbolosllevanadjuntos. El otro,más pequeño, loformalaesferadel relojy rematacon una cruz entre dos florerosy doscapiteles.

Parallevará cabo esta reforma, y adaptar la nuevafachadaaltemplo, fué necesariolevantaralgunosmetros de pared, pues sobresale bastantedel tejadoá modo delastorres que se ven en algunas iglesias antiguas.

Entrandoen eltemplo, de una mirada se abarca todala hermosanave central.Hállase dividida por unaverjadehierro,que antes

MONTSERRAT.- INTERIOR DE LABASÍLICA

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estaba colocada junto á los púlpitos, formando con ello como un coro bajo, que utilizaban los monjes en determinadas solemnidades; mas habiendo dejado de servir para dicho fin, después de la catástrofe de 1811, la verja fué con mejor acuerdo trasladada en 1892 bajo del coro, que ocupa las dos primeras capillas de la entrada, quedando así más desembarazada la iglésiá, la cual puede á ciertas horas estar abierta, sin peligro, para satisfacer la devoción de los fieles.

Dicha reja es obra del arquitecto D. Antonio Cellés 'y fué trabajada , por D. Luis Marsáns, de Manresa, el año 1830, en sustitución de otra mucho mejor, que en 1609 mandó colocar el piadoso Felipe III. También las dos hermosas pilas contiguas sustituyeron en 1829 á otras no menos preciosas, que habían sido traídas de Génova y destruyó la bárbara soldadesca en1811; todo esto se debió á la munificencia del Rey Fernando VII. Pasada la verja, en los cuatro pilares inmediatos á derecha é izquierda, están colocadas cuatro grandes estatuas de los Profetas maÿores, Daniel é Isaías á la derecha, Ezequiel ÿ Jeremías á la izquierda, todos los cuales vaticinaron la maternidad virginal de María San d sima, Isaías diciendo expresamente que una Virgen concebiría y pariría un hijo que se llamaría Emmanuel, esto es, Dios con nosotros (VII, 14); Jeremías diciendo que sucedería la

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gran maravilla que unamujer rodease áun varón(XXXI, 22); EzequielllamandoálaVirgen «Puerta cerrada» (XLIV, 1) y Daniel señalando eltérmino ycumplimiento de todas estas profecias ensus famosas semanas (IX, 24).

En lospilaresinmediatos,quesondobles, se levantandossoberbiospúlpitos que se colocaronpara perpetuar la memoria delIVcentenario del descubrimiento de América por Cristóbal Colón y dehaber salido de Montserrat el P. Bernardo Boil,primer Vicario Apostólico deinuevomundo, dequiensehablará en otro lugar.La primera piedrafué colocadaelG de Octubrede 1892, y seestrenaron el 9 de Julio de 1893. Formaelzócalo,unareuniónde columnasdemármolquesostienen labasedel púlpito, ácuyo alrededor estánesculpidoslos símbolos de los cuatroevangelistas.Además, cada púlpito tiene tres láminas debronce, en que sehallan grabadas varias figuras alusivas al descubrimiento yevangelización del nuevo mundo. El escultor fué elSr. Bernadas, de Barcelona, yel fundidorD. PedroGonzález,dela misma ciudad.Eltornavoz,que completa estas hermosasobras, es unaelegantísimay elevada cúpula de puro estilo gótico.

Pasando adelantesellega al Presbiterio, separadodelresto dela iglesiapor unapequeña verjadehierro. El pavimento, que estáunmetro más elevado que eldelanave, 5

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es de mosaico hecho en 1901; tiene tres escudos: el central es el de Montserrat,y los laterales son de la familia Tolrá, que lo costeó, y del Rmo. P. Deás, Abad de Montserrat.En las grandes solemnidades queda todo cubierto con ricas alfombras. La forma del Presbiterio es poligonal,y ha sido enteraménte transformado al restaurarlo. Los dos primeros lados tienen cada uno su puerta que da acceso á las respectivas sacristías; sobre ellas se ven las celosías de las dos pequeñas tribunas, una de las cuales en otros tiempos servía para las personas reales y de alta alcurnia, por lo que la llaman la «tribuna de los Reyes». A cada lado de las celosías hay un cuadro de los evangelistas pintado por el Rdo. P. Lesmes López, monje de este Monasterio. En los entrepaños siguientes, adornados de columnitas doradas, hay también cuatro preciosos cuadros: dos en la parte de la epístola, que' son el Nacimiento y Presentación de Nuestra Señora, y otros dos en la del evangelio, á saber, la venida del Espíritu Santo y la Asunción de María Santísima. Los lienzos de pared correspondientes á éstos, desde la cornisa hasta la bóveda en ambos lados tienen pintados ángeles, escudos, la aparición de la Santa Imagen y su traslación respectivamente: son obra del distinguido pintor D. J. Llimona.

Las columnas, que hay en los ángulos, están adornadas con estatuas de Santos; las más-pró-

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ximas álanaveson lasde SantiagoApóstol deEspaña (alladodel evangelio) y San Jorge,patróndeCataluña (al lado delaepístola), costeadas por elIlmo. Sr. Catalá, Obispoque fué de Barcelona.Siguenrespectivamente al primeroSan Pedro Damiano,Cardenal,y San Anselmo,Arzobispode Cantorbery,yalsegundo San Bernardo, Abadde Claraval, y San Ildefonso,Arzobispo de Toledo, todos ellos célebresdoctoresdevotos deMaríay pertenecientesála ordende SanBenito.

En elcentrodel ábsidese destacael retablo delaltarmayor, hermoso arco de triunfo dedicado á lapatrona deCataluña. En el cuerpoinferior, quehacecomo de basamento,estáel órgano quesirveparalasfunciones delos niñosescolanes; sobreél hay cuatro ángelessosteniendocandelabros. A losladossobrecolumnas, semejantesálasquesirvende peanaparalosSantos arriba mencionados , descansan lasestatuas de SanBenitoy Santa Escolástica, ocupando preferente lugar como fundadores de la Orden, ácuya solicitudha sido encomendada lacustodiadel Santuario mariano.Los ladosdelarcolo forman columnas fasciculadas, en las cuales hay dosángeles y encima deellosuna . cúpula que remata en cruz;en elcentro, sobre elarco,hay otracúpulasemejante,y detrás,en loque restadel entrepaño,está pintadala tercera Personadela

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Santísima Trinidad, el Espíritu Santo, que descendiendo sobre María, obró en ella el gran misterio de la Encarnación del Hijo de Dios, Nuestro Señor Jesucristo.

El altar mayor, colocado en el centro del Presbiterio y un poco distante del retablo, es digno de atención. Las gradas para subir á él son de la piedra más dura que pudo hallarse en Cataluña. La mesa es toda de mármol oscuro jaspeado, y está sostenida por cinco pequeñas columnas de piedra pulimentada; en ella caben con desahogo todos los ministròs en las Misas pontificales. La gradería está compuesta de tres escalones de mármol blanco. El Sagrario es de una sola pieza, y su puerta también de mármol con incrustaciones de bronce dorado. El Tabernáculo es todo de maderá dorada en forma de castillo almenado, cubierto por elegante cúpula policromada, y dentro y fuera, riquísimamente labrado y dorado, de modo que sobre dicho fondo de oro se distingue perfectamente la Sagrada Forma cuando está expuesto el Santísimo, que puede ser visto por tres de sus lados.

Al reformarse el Presbiterio, para que todo el templo guardara uniformidad, se reformaron también las columnas de lo restante de la iglesia y las tribunas altas, cubriendo las tres primeras de cada lado, que estaban del todo abiertas, por medio de columnas. Las inmedia-

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tassiguientes las ocupan losdosórganos,uno delos cuales seestrenó en1896,colocándosele al otro un frontispicio semejante, áfinde que existiera uniformidad. Finalmentelasdos últimas tribunas de cada parte se hallandentro delcoro,cuya baranda, que era demadera, fuésustituidaporotradepiedra en1895. El atrilófacistol,que se destaca en medio,está comosostenido porlossímbolos de los cuatro evangelistas, y remata con:la imagende Cristo crucificado, que tieneá sus ladosla Virgen Santísimayla Magdalena. La sillería es de nogaly está distribuídaendos órdenes:elinferiortiene37sillasyelsuperior 49, todas bien labradas, representando caprichosamente animalesaladosensusbrazos;fué reconstruída durante el gobierno del P. Abad BenitoVaroja (1828 á 1832) con la limosna que dió Fernando VII por haberdesaparecidola antigua con el incendiodela iglesia; sólo pudieron conservarse algunasde sus partes, con lasque selevantó unaltaren lastribunas, digno de admiraciónparalosinteligentes.

En los pañosdeparedquehaysobrelagale= ríaquerodeatodoelcoro,penden cuatrograndescuadrosrepresentando otrastantasescenas delaVida de San Benito. En losdos de lá _ derechaseve alSanto Patriarca predicando álos pastoresen la cuevade Subiaco; y recibiendo ála noblezaromana, que le dejó en prendalos

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GUÍA HISTÓRICO-bESCRIPTIVA

niños Mauro y Plácido, sus discípulos predilectos; los de la izquierda representan al rey Totila postrado ante el Siervo de Dios y oyendo de sus labios enérgica reprensiól y profecía de los sucesos posteriores; y la preciosa Muerte de San Benito, que puesto en pie y orando, después de confortado con el Viático, entrega su espíritu al Criador. Los bocetos de todos cuatro cuadros son de nuestro P. LesivesLopez, que ha pintado por sí mismo los dos primeros; los otros dos son debidos al pincel de su maestro el Sr.Morell, deManresa.

Da luz al coro un grande rosetón, cuya vidriera regaló el Sr. D. Francisco Cabot yRovira,de Barcelona, en 1894; fué dibujada y pintada por el Sr. Moncerdá y ejecutada por los Sres. Amigó, también de Barcelona. Representa la Coronación de María Santísima por la beatísima Trinidad, que está rodeada de coros angélicos, teniendo el sol y la luna á sus plantas. En la orla del rosetón hay ocho divisiones: la superior ostenta el escudo de Montserrat,y la inferior las iniciales del donante. En las dos centrales las letras A. R. y J. D., cifra de los nombres del Rmo.P. Abad Visitador de los benedictinos de España y del Rmo. P. Abad de Montserrat. Dos de las restantes divisiones llevan una M. por el nombre de María. y las otras dos la cruz de San Jorge, patrón de Cataluña.

Toda esta belleza puede ser contemplada desde .

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la parte baja de la iglesia, pues por lo demãs, son muy contadas las personas que suben al Coro, que, por supuesto, está entredicho enteramente á las mujeres.

Digamos ahora dos palabras sobre las doce capillas y sus altares, comenzando por la parte del evangelio. La primera está dedicada al Sagrado Corazón de Jesús, cuya Imagen llama justamente la atención, destacándose de tal modo en el altar, que frecuentemente el devoto se olvida de fijarse en los adornos accesorios.

Estuvo este altar, antes y después del incen dio, dedicado á Santa Ana, y fué renovado por la devoción de varias familias, entrando también el Monasterio á parte del coste, siendo bendecido por el Rmo. P. Abad el 22 de Abril de 1887. Durante todo el siglo xix hasta 1904, se reservó en él la Sagrada Eucaristía; por eso se le designó como altar del Santísimo. A los pies de él se ve la sepultura del venérable hermano José de San Benito, que murió en olor de santidad el 18 de Noviembre de 1723. Después de varias traslaciones, fué colocado en esta capilla el 30 de Junio de 1750, siendo reconocido un siglo después, el 13 de Junio de 1855, por orden del Obispo de Vich, á petición del Gobierno, á quien habían denunciado que en esta sepultura se ocultaba un tesoro. Y á la verdad es un tesoro, mas no cual lo buscan 1.)s inundanos, que no saben apreciar sino los bienes pasajeros de la tierra, .

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GUIA ItISTÓFtICO-DESGF21PTIVA

El segundo altar, en la capilla inmediata, está dedicado á Santa Escolástica,hermana de nuestroP. SanBenito,áquien estuvodedicado hasta 1886,enque fué trasladado á laparte de laepístola. Esta de Santa Escolástica ha sido delas últimamente restauradas, y ha quedado delasmáshermosasy ricas,con serlo mucho todaslas otras. Sufragó los gastosla señora doña Magdalena Andreu, viuda de Muns. Hacencompañía en elaltar á Santa Escolástica, San Antonio de Padua (izquierda)y SantaMaría Magdalena (derecha).

La tercera capilla esla llamadadelosDolores,porhaberestadosiempre dedicada áNuestra Señora la Virgen Dolorosa.Yaantesdel incendio de 1811 era este elaltarpropio delSantísimo, yen 1625 se lediómayor capacidad para poder levantar aquí elMonumento el díade JuevesSanto. Duranteel siglo pasado, la Eucaristía secustodiaba en elaltar de Santa Ana (hoySagradoCorazón),hasta que en1902empezó en éstede quehablamos,una completa y entera transformación, habiendo ganado en ello muchísimo,puesantes, á más de ser una capilla oscurayhúmeda, estaba enteramente embarazada pormuchosobjetos quesin darla bellezaocupaban suinterior. Los trabajosde estariquísima capilla,costeada por D. Estanislao Planás, segúnencargo desu difunta hermana Sra. Viuda de Marcet,son debidos álosreputados artistas

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Sres. Sagnier, arquitecto,Llimona, escultor, y Llorens, pintor, que han dado buena prueba de su talento y gusto artístico. Fué bendecida

y trasladado á ella solemnemente el Santísimo Sacramento por el Ilmo. Sr. Benlloch, Obispo de Solsona, el 26 de Marzo de 1904.

La cuarta capilla estuvo antiguamente dedicada á San Antonio Abad; desde 1820 á 1882 á San Sebastián, á quien siempre habían ve-

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arÜÍAHIS1i Ó1tICO-Í1ESCftIPT1VA

neraclo como patrono especial los Hermanos legosde esteMonasterio,yen1882 fué dedicada á Santa Teresa, cuyoaltar serenovó en1901,habiendo'contribuído siempreá estas restauraciones las fervorosas Teresianas de Cataluña.Aloslados delacélebre reformadoradel Carmelo fueroncolocadasotrasdos insignes Santas dela Orden benedictina, Santa Hildegarda, abadesa,bastante parecida por sus empresas y escritos á lamonja,andariega española,y Santa Walburga, también abadesa y fundadora de muchos monasterios. El corazón de oro de Santa Teresa fué regalado por las mismasTeresianasen1905.

También laquintacapillaha estado dedicada á diferentes Santos.En lo antiguo tuvo. el altar dela Purísima Concepción de Maria, de quetandevotos se mostraron siempre losbene= dictinos, yenespecial aquí enMontserrat, entre ellos elP. Francisco Crespo, durante cuyogobierno vino D.JuandeAustria, hijo de Felipe IV, yjuró con los caballerosdesuséquito defender siempre dicho Misterio, lo cualdió motivo al referido Padre para escribir suTribúnal thomisticum de Immaculato Virginis Conceptu. Después dela destrucción de Montserrat, se.colocó un cuadrodelaSagradaFamilia(1) _ queen1891 (1) Este cuadroquehoysehalla enIas tribunas altas, es digno dememoria, pues anteél tuvo elSr. Bocabella laspri-

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fuésustituidoporotro con lossantosdoctores españoles Leandro, Isidoro yFulgencio, con el retablo perteneciente al antiguo altar de San Ignacio,queahorasehalla en latribuna ócapillasuperior. Por fin, enlugar deéstos,se ha colocado elaltar delasSantasReliquias ó Santos Mártires, completamente restaurado en1906.

Lasexta y última capilladelapartedel evangelio tuvo antiguamente laadvocación de Santa Gertrudis laMagna, de quiense dirá luego. Despuésdela Coronacióndela Virgen de Montserrat como patrona de Cataluña,se aprovechó el templete quesirvió en aquella solemnidad, y fué colocadoenestacapilla, poniendo entonces en él la imagen dela Inmaculada.Al presente ha desaparecido para concluirla restauración, yen sulugar se ha colocadoel correspondienterico altar yretablo, conservandol amismaadvocación. Ha sido generosamente costeado por la familia Soler y Vilabella, oriunda de Vich y residente en Barcelona. A loslados sehancolocado San RamónNonato,patrón del donante y San José Oriol,porposeer la familiadela señora la casa dondenació elreferido Santo. merasinspiracionesparala fundacióndela Asociación Josefinaen España, yla erección del temploexpiatoriodela SagradaFamilia,que se levanta actualmente enBarcelona.

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GUÍA f31STÓRICO-DESCftIPTIVA

También las capillas de la parte de la epístola están restauradas; la última lo fué en 1905 y está dedicada á Santa Gertrudis la Magna, insigne monja benedictina, á quien ha profesado siempre particular devoción toda la Orden.

Como acabamos de ver, ya tuvo altar en la iglesia montserratina desde los primeros tiempos, tocándole el que hoy ocupa la Inmaculada.

De allí pasó interinamente, y por algunos años, á la parte de la epístola en el que hoy tiene San Martín, y por fin ha vuelto á tener altar propio, cediéndola el lugar los Santos Mártires, que han pasado á la quinta de la parte del Evangelio, según se ha dicho. Ha sido costeado por la familia Müller de Tarragona, cuyo apellido indica bien á las claras su procedencia alemana, país de nuestra Santa.

En esta capilla se halla la pila bautismal necesaria, por lo que pudiera suceder que alguno naciera en Montserrat, ó que por devoción fuera traído aquí á bautizar, ó también que se convirtiera alguna persona, que tocada de la gracia, deseara ingresar en la Iglesia Católica; todo lo cual sucede con alguna frecuencia. En la parte opuesta al altar se ve colgado un hermoso cuadro de San Luis, Rey de Francia, á quien antes de 1811 estuvo dedicada esta capilla, en la cual los peregrinos de aquella nación cumplían sus devociones. Alguien le ha tomado por San Fernando III, Rey de España, y ála

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verdad su gallarda apostura parece cuadrar mejor al invencible caudillo español, que al vencido cruzado francés.

La capilla inmediata es la de San Ignacio de Loyola, fundador de la Compañía de Jesús, el cual, como es sabido, comenzó su grandiosa empresa enMontserratel 24 de Marzo de 1522, haciendo confesión general con. el venerable P. Juan de Xanones, más tarde uno de los reformadores benedictinos de Portugal, en donde murió en olor de santidad la víspera del Corpus de 1571, siendo Abad de Tibaes. San Ignacio se retiró á Manresa;pero subía muchas veces áMontserratá consultar con sus directores el dicho P. Xanones y el P. Miguel Forner,valenciano, que después fué Abad de esta Casa.

La ' devocióñ al Santo es ya muy antigua en Montserrat,como lo testifica la lápida que mandó colocar en la iglesia el P. Abad Lorenzo Nieto y que hoy se halla empotrada en los claustros. Después del incendio, unos devotos le costearon el sencillo altar, que desde 1891 ha servido para los . Santos Leandro, Isidoro y Fulgencio. El nuevo y riquísimo que hoy tiene ha corrido á cuenta de la familiaMirallesde Imperialde Barcelona, y por eso še ve en él la imagen de San Clemente Papa, que es el patrón del jefe de la misma. En el centro hay el cuadro de San Ignacio en rapto, en que se le aparece Jesucristo

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yleordenala fundacióndela Compañía. Alos ladostiene otros dos fundadores de Ordenes religiosas delasque más hancampeado en la Iglesia,esdecir,Santo Domingo de Guzmán, que dió principio á lade Predicadores, y San Francisco de AsísáladeFrailesmenores;algunos creen quetambién visitaron este SantuariG, mas no se halladocumentoalgunoque Io atestig'ie, si bien respecto de este último esprobable. También hay en estacapilla un grande cuádro que representa á San Ignaciode Loyolaen elacto de velar ante la imagen de Nuestra Señora de Montserrat,la memorable noche del24 deMarzode 1522. Fué pintado exprofeso para esta capillaporel Hermano Corróns, S. J.,en1891.

La tercera capillahasufrido varios cambios.

Al principioestuvodedicada á San Ildefonso, Arzobispode Toledo;después del incendio, pusieronaqui ála Inmaculada; más tarde á Santo Domingo de Silos conSanta Escolástica y Santa Gertrudis, queyahemos vistotienen cada una su propioaltar;elde Santo Domingo estáahora en las capillas superiores, desde que cedió ellugar á SanMartínde Tours . y á los dos predilectos discípulos desu ferviente d evotoelPatriarca delos monjesdeOccidente.Esta restauraciónsellevóá caboen1896, quedando la capillauna delasmáslujosamentedecoradas porla munificencia dela familia Bultó, queescogió en ella susepultura.

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La capilla inmediata (cuarta en el orden que seguimos) eslade San José de Calasanz, cuyo altar, delosmásoriginalesporsuforma, fué costeado porlas Escuelas Pías deEspaña,cuyosSuperioresasistieronála inauguración en 3 deSeptiembre de 1891. Sele debíaeste tributoalSanto, porhaberestadoenMontserrat el año1587 como Secretario delIlmo. Sr.Obispo de Vich, D.JuandeCardona, VisitadorApostólico de esteMonasterio. Además de San José de Calasanz, tieneeste altar las imágenesdeotros dos Santos fundadores, que también visitaron álapatrona de Cataluña en diversas ocasiones, talesson: San Pedro Nolasco,quevino en1218 (ála derecha)y SanJuande Mata (á la izquierda) en1209. Estacapilla estuvo muchos añosdedicada interinamente á San Bernardo, y antes de 1811 lo estaba á San Lorenzo,comolo atestiguauna lápida sepulcral que se conserva alpiedelaltar, dondeyacen don Juande Boxador,caballerodeAlcántara,ysu esposa D.' Teresa de Pinós y de Rocaberti, que falleció el 18 deNoviembre de 1672, parala cualfuéaquí abierta la sepultura porsu noble consorte.

Viene luego la capilla de SanBenito,Patriarca delos monjesdeOccidente,ácuyos hijosha cabidola suertede sercapellanes deMaría en esteSantuario porespacio ya de milaños.Antesdelinfaustoincendio estaba dedicada esta

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GUÍA HISTÓRICO-DESCRIPTIVA

capillaá San BernardoAbad,ydicenque era lamás rica dela iglesia. Después colocaron aquíá Santa Escolástica, que en1886cambió su lugar con el desuSantoHermano.Fué costeadala restauraciónporla familiaLlopart, de Barcelona; por eso alladodel cuadrode San Benito,quellamajustamentela atenciónpor lo bien ejecutado, están los de San Carlos Borromeo y San Roque, de especial devociónpara dicha familia.Detrás, ó sea en la paredde frentealaltar,hay otro cuadro debido,á nuestroP. LesmesLópez, en el cual se representa el recibimientoquehizo nuestro P. SanBenito ála nobleza romana, que fué á visitarle en Subiaco,dejando allí álos niñosPlácido y Mauro,los cualestantosdíasde gloriahabían de dar ála naciente Orden benedictina.

Laúltimacapilla,ósea lamás próxima al Presbiterio,eslade San José quecierra el cuadrodelosPatriarcas.Siemprehatenido la mismaadvocación;pero elactualretablodata sólode 1884,siendo el primerodelarestauración,quecomenzaron á costearlosdevotosdel Santo yacabó el Monasterio; tiene á sus lados las imágenes de SanJoaquínysuesposa Santa Ana.También hay enestacapilla un grandioso cuadroque representalahuída delaSagrada FamiliaáEgipto. Es obradelcélebre pintordon José Cusachs y regalo de una aristocrática familia españolaque resideen losEstados Unidos.

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En el pavimento se ven varias sepulturas sin ninguna inscripción. Una de ellas, la del centro, encierra los restos de los Abades de este Monasterio, entre los cuales hay los del venerable P. Abad García de Cisneros, reformador de Montserrat, y los del P. Bartolomé Garriga, que empezó esta iglesia `véase pág. 42), los cuales fueron trasladados aquí el año 1600.

También descansan aquí varios otros hijos de la Casa, que obtuvieron la dignidad Abacial en diversos monasterios de la Península. En las siete restantes se hallan los monjes que fallecieron desde aquella época hasta mediados del siglo pasado.

Cada una de estas capillas recibe abundante luz de su correspondiente ventanal, cuyas vidrieras forman un bello conjunto que adorna notablemente la iglesia, representando varios misterios y pasos de la vida de la Santísima Virgen María . La de la capilla de San José tiene los «Desposorios de María con el Santo Patriarca», sigue la «Anunciación», la «Visitación á SantaIsabel», el «Nacimientode Jesucrito»,la«AdónesRy»la «Presentación del Niño Dios en el templo» á la parte de la epístola. Luego en la capilla de los Mártires está «La huída á Egipto»; en la de Santa Teresa «La pérdida en el templo», y en la de Santa Escolástica «Las bodas de Caná», en que á ruegos de María hizo Jesús el primer 6

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milagro. Las capillas del Santísimo y de la Inmaculada tienen vidrieras especiales, y la del Sagrado Corazón «La Comunión de María» por mano del amado discípulo . San Juan Evangelista. En esta capilla está el confesonario donde todos los días por la mañana se sienta el Padre que está de semana; pero también hay confesonarios, y todos ellos artísticos, en las otras capillas (fuera de la del Santísimo ó de los Dolores), donde cuando hay necesidad, ó lo piden los fieles, acuden á servirles otros confesores de la Comunidad.

También para comodidad de los fieles hay distribución conveniente de Misas, en las cuales pueden cumplir su devoción y obligación juntamente. A las cuatro de la mafiana en tiempo de estío, y á las cuatro y media en el de invierno, comienzan las Misas en el altar del Sacramento, que se continúan sin interrupción hasta las siete; luego á las ocho sale otra, y á las nueve se celebra la conventual, siempre cantada, en el altar mayor. Además los domingos y días de fiesta de obligación, hay otra misa á las once y cuarto, quince minutos después de la llegada del último tren de la mañana, en el altar mayor, ó en otro, si éste se halla impedido. Fuera de éstas se celebran otras muchas en las demás capillas, en especial después de Laudes, cuando bajan los Padres. Asimismo cada día, á las seis, comienza la Misa ma-

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tutinal, quecantan siempre los niños escolanes enhonor deNuestra Señora de Montserrat con Gloria y Credo, por especial privilegio que confirmóyaun aumentó PíoVII, de gloriosa memoria, y que ha sido confirmado y favorecido porSu Santidad Pío X.Además deotrosprivilegios, elaltarmayorgozadelde altar gregoriano.Porlatarde, álasseisen inviernoy á las siete en estío, se reza ó canta elRosario, y después secantan siempre laSalve montserratina ylosGozos deNuestra Señorade Montserrat.

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IX

Santa Cecilia

IENpocas

serán las personas que vienen á Montserrat y pudiendo no vayan á gustar las aguas de la celebrada fuente de Santa Cecilia.

Hállase ésta junto á la carretera de Casa Massana á Montserrat,como á unos cuatro kilómetros del Monasterio. Se puede ir hoy en coche, para lo cual hay servicio especial desde el Monasterio. Los que prefieran ir á pié pueden tomar dos caminos; ó el de losDegotalls, que cerca de su término, junto á la piedra llamadaPedrís dels Bisbes,tiene un atajo que baja á la carretera de Casa Massana, ó también la carretera deMonistrol,con la que empalma la anterior un kilómetro antes de llegar

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á Montserrat.En tiempodeestío,siescasean algolas lluvias,noaconsejamosesta última ruta, puesmolestaexcesivamente el muchísimopolvocon elcontinuo ir yvenirde toda suertedevehículos.Eltrayectose puede recorreren pocomás de una hora, asíálaida como ála vuelta, esparciendo el ánimoporel dilatado panorama que se ofreceálavista por laparte de Oriente y Norte hasta los Pirineos, mientrasquealOeste secontemplan lascaprichosas figuras deloselevadísimos peñascosde Montserrat, entre los cuales descuella el renombrado «Caball Bernat», que celebró enversos exámetroselexcelente poeta latino montserratenseP. Antonio Brenach (1).

ElMonasterio de Santa Cecilia se hallacomo hemosdicho,á unoscuatro kilómetros de Montserrat, ála derecha del caminode Casa Massana. Sus vetustos edificios (la iglesia particularmente)declaran su antigüedad, ósea el siglo décimo,enque fué restaurada, como consta de laescritura original que vió en nuestro archivo elcélebre P. Villanueva.

Según dichaescritura,untal Rodolfo vendió en 871 álosconsortes Ainsulfo y Druda por cinco libras deóptimaplatael castillo«Marro» quele había venido pordonaciónde Carlosel (1) Desde Santa Cecilia pueden hacersenumerosasexcursiones,según-seve en lafigura anterior.

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Calvo (no de Carlo Magno, comoescribenalgunos,queni puso lospiésen Cataluña, según estáyaaveriguado por autores clásicos), y juntocon dicho castillo adquirió el lugar donde estála iglesiade Santa Cecilia. Los mencionados espososcedieron el castilloéiglesiaásu

primo el sacerdote Cesáreo, el cual con la ayuda de Jorge, obispo de Vich, y de los Condes de Barcelona, Suter y Riquilda, restauró el Monasterio y reedificó la iglesia en 945. Luego se le juntaron á Cesáreo algunos compañeros con los cuales instauró la vida monástica, según la Regla de San Benito, que les dió Waldimiro, sucesor de Jorge, el cual confirmó las posesiones del Monasterio y consagró la iglesia

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el año 957. Cesáreo, primer Abad de Santa Cecilia, fué más tarde consagrado Arzobispo de Tarragona por los obispos de Galicia, que antiguamente formaban parte de la Provincia eclesiástica tarraconense, la cual se extendía por el Norte de España. No fué reconocido por los Obispos de Cataluña, quèá la sazón obedecían al metropolitano francés de Narbona, así es que Cesáreo vivió siendo juntamente Abad y Arzobispo titular hasta los años de 981.

Al principio parece que este Monasterio debió estar sujeto al de Ripoll;mas cuando fué condecorado con la dignidad abacial, se hizo independiente. Así vivió hasta el año 1023 en que el grande obispo Oliva, que había sido monje y Abad deRipoll,obtuvo del CondeBerenguer Borrellque Santa Cecilia estuviera sujeto al Monasterio de Ripoll. No se sabe con qué' motivo, ni ocasión, durante el pontificado de Urbano II, O. S. B., pasó Santa Cecilia á la dependencia de San Cucufate del Vallés,también benedictino, pero consiguió su libertad con la ayuda del obispo Arnaldo de Vich y del conde RamónBerenguer, el año 1103. Habiendo reclamado los monjes de San Cucufate, se sometió la causa al sobredicho Arnaldo, á Raimundo, obispo de Barcelona, y á S. Olegario, á la sazón prior de San Adrián, (canónigos regulares), los cuales, examinando la causa, juzgaron que, según el privilegio de Urbano II, debía perma-

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necer Santa Cecilia bajo la jurisdicción de San Cucufate, salvos los derechos del diocesano Vicense. Esto sucedió en 1108: Ignórase el tiempo que duró esta sujeción; probablemente había cesado en el siglo xiv, en cuyo tiempo se hallaba un Abad de este Monasterio, (Bartolomé de Castelloli, 1327-43 ¡ III Kal. Maii), que era profeso de San Benito de Bages. El más conocido de las abades de Santa Cecilia durante el siglo xv fué el P. Lorenzo Marull, á quien el cardenal Julián de la Rovère, abad comendatario de Montserrat, encomendó el gobierno de este Monasterio, durante cuyo tiempo se levantó el claustro gótico, que aun en parte se conserva, convertido en «Tienda de medallas».

Cuando Montserrat se unió á la Congregación de Valladolid, quedóse independiente Santa Cecilia que sólo pudo dilatar su vida por algunos años, porque el gran vuelo que desde aquella época tomó el Santuario de Montserrat, la observancia de sus monjes y los milagros de la Santísima Virgen, obscurecieron completamente á Santa Cecilia por hallarse tan cercano. A esto se añadió la última y fatal desgracia de haber caído en manos de Abades comandatarios, la mayor calamidad que _ ha conocido la Orden monástica durante los largos siglos de su existencia. Uno de ellos, llamado Juan Cordelles, hizo pacto con el Monasterio de Montserrat de resignar la Abadía de Santa

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Cecilia, si le daban los frutos del Monasterio de San Ginés. Convínose en ello, y en efecto, en 1539 resignó la Abadía en manos del Papa, que la unió inmediatamente á Montserrat.

Trasladados, ó concluidos, que es lo más probable dadas las circunstancias, todos los monjes del Monasterio de Santa Cecilia, quedó el culto á cargo del de Montserrat, cuyo Abad nombrabaad nutum algún monje para ejercer las funciones parroquiales, que desde mediados del sigloxvii fueron desempeñadas por un Sacerdote secular, designado también por el mismo Abad.

Cuando á fines del siglo xviii pasó por aquí el P. Villanueva no quedaban sino algunos restos del edificio, entre ellos el ábside del altar mayor, donde, invertido el orden, se había colocado la entrada de la iglesia. Poco después pasaron las hordas napoleónicas que casi acabaron por completo con lo poco que se mantenía en pié, ya que destrozaron y asolaron los edificios. La iglesia quedó en tan mal estado que por fin en 1861 se juzgó necesario cerrarla al culto, como lo decretó el entonces Diocesano, Obispo de Vich.

No pudo menos el Monasterio de Montserrat de hacer un esfuerzo supremo en medio de sus angustiosas circunstancias, y con la ayuda de personas devotas y caritativas, que gracias á Dios nunca han faltado, bajo la dirección del arqui-

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tecto Sr.Villarseprocedió álarestauràción detanvenerando monumento de la antigüedad,y seconsiguió llevarlo á caboal año siguiente, abriéndose al cultoel22 de Noviembre,festividaddesupatrona Santa Cecilia, en cuyo díasevieneá celebrarlaSantaMisa.

Elábside sencillísimo es uno delos mejores ejemplaresde estilo bizantino que se conservan,porloque juntocon el campanario de espadaña, llamadignamente la atencióndelos arqueólogos.

Del antiguo Monasterio apenas subsiste una pequeña parte, queservíade Casa Rectoral despuésque seextinguió la Comunidad. Destruídaen1811, fué reparada por elP.Abad Muntadas, y finalmenteen1900quedócomo hoy lavemos.

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Locales -adherenfes á laiglesia

osprincipales son la Sacristía, laBiblioteca dpla Virgen,y sobre todo elCamarín, delos cualesdaremoscuenta ligeramente.Para penetrar en ellos hay la puerta que da ála sacristía, y se halla alladodelaltar dela capilla de San José.

La sacristíaes unapieza enforma decapilla, bastante espaciosa. En tiempos pasados estuvo muyrica;hoy, despuésdela catástrofe tantas veceslamentada y otras depredaciones posteriores, apenas ofrececosaalgunaparticular digna dela atención del visitante.

Al penetraren ellasevede frente, en el testero, elaltarconuna devota imagendeJesús crucificado y álosladossuMadreSantísimay

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elDiscípulo amado; alladodelaltarhaydos ángeles en pie.

Formandolabasedelaltar estála sencillísimacómoda, queluego, haciendo ángulo, se extiendeporla derechadela sacristía, donde pueden revestirse todoslos sacerdotes quedicen Misa deordinario en aquellado de la iglesia.Los cajonesestánbastantebienprovistos deropade altar y de ornamentos sagrados,algunos de mérito especial y de nopocovalor artístico , llamandoprincipalmentela atención elterno ycapa morados, que trabajaron con verdadero cariño é industrialasmonjasbenedictinasde Santa Clara de Barcelona, ytambién el terno negro quesólose usael ViernesSanto.

Sobreelarco de entrada dela sacristía hayun cuadrode grandes dimensiones, que representael nacimientodeJesucristo. Ala derecha de este localhay lasdosventanasquedanluz

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al recinto, en la primera de las cuales se halla pintado San Gregorio Magno, O. S. B. y en la otra Nuestro Señor Jesucristo ligado á la columna. entre ambas pende un cuadro del apóstol San Pedro, y entre la segunda y el altar hay otro del Ecce-Homo, uno de los primeros trabajos de nuestro P. López.

En la parte opuesta, ó sea la izquierda, se ven tres cuadros, ocupando el centro el de San Jerónimo, que dicen ser de mucho mérito; tiene á sus lados retratos de los Sumos Pontífices Pío VI y Pio VII, tío y sobrino, ambos de gloriosa memoria en los anales de la Iglesia, cuya Suprema Sede ocuparon casi cincuenta años; el segundo especialmente grato á Montserrat, como benedictino, que f ué de la Congregación Casinense con el nombre de Gregorio Chiaramonti, y como bienhechor, por los especiales privilegios que concedió al Santuario.

Debajo de estos cuadros hay otros de menos valor; el de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro y el de San José Oriol, amén de _otros trabajos artísticos conmemorativos de beneficios recibidos de la Virgen de Montserrat.

En esta misma parte hay también un cuadro en que se señalan las limosnas por las Misas y Oficios que cantan los niños escolares y la Comunidad, por lo que se omiten aquí, pues podrá consultarlos el peregrino que desee que se apliquen á su intención. En cuanto á las

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Misasrezadas, se guarda la tasadiocesana.En estemismolado dela sacristía, segúnse entra, hay un armario empotrado en la pared, cerradocon cristales, porlosque sepuedeapreciar elvalor delos monumentales candeleros y cruz, todo debronce dorado,que seusan únicamente en lasgrandessolemnidades. Lo regaló don Francisco Maria Oliveras, Marquésde Quadras, en1869, y fué fabricadoen los talleresde Francisco Isaura, de Barcelona.

Laestancia más inmediataála sacristía pú blicacontiene ellavabo,que es demármol,y aunquealgo mutilado, se salvódelacatástrofe del año1811.Además,este departamento da paso al camaríny ála sacristía privada interior, ysirve también deantesalaála llamada Biblioteca de la Virgen,comolo indicanbastantemente los cuadrosydemásobjetos que cuelgan de sus paredes.

LaBiblioteca de la Virgenes una sala que vieneátenerunos 15 metros de larga por 6 de halladetrásdelaltarmayor.Selaanch,yse denomina de este modo, porque contiene los exvotosque,confrase muda, pero elocuente, como páginas . de unlibro, y hasta si se quiere comounlibroentero,nosdicen lo muchoque hahecho Nuestra Señora de Montserratenfavor de sus devòtos y decuantos lainvõcancon feyconfianza, corroborando las palabras del Doctormelífluo, San Bernardo, de que jamásse

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ha oído decir que ninguno de los que han acudido á María haya dejado de ser socorrido por esta Madre de misericordia. Así lo atestiguan esa multitud deexvotosy cada uno de ellos en particular, que, si bien carecen por lo común de valor artístico, y algunas veces son verdaderos ludibrios del arte, pero así y todo dicen mucho á quien los mira y considera con ojos cristianos. Esas tablillas no podrán menos de conmoverle, al ver los infinitos males de que son víctimas los individuos y las familias enteras. ¡Qué tristes y qué terribles episodios se ofrecen á nuestra consideración! ¿Qué sería de la humanidad sin la poderosa intercesión de la Madre de Dios? ¡Cuántas gracias obtenidas por María! Nada tiene, pues, de extraño que las personas sencillas y . devotas hayan querido demostrar y perpetuar su reconocimiento á la Madre de misericordia, consignando sus favores del mejor modo que les ha sido posible.

Consideremos su gratitud y buena voluntad, y sírvanos de lección para cuando nos hallemos (lo cual puede muy bien suceder) en idénticas necesidades y peligros, y aprendamos lo que debemos hacer en semejantes trances: acudir á María de Montserrat, y mostrarnos después agradecidos á sus favores.

Además de losexvotoshay en esta estancia, dentro de un escaparate, varios regalos que se han hecho á la Santísima Virgen de Montserrat,

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entreellos el bastónquele dejóS. M.el Rey Alfonso XIII, alvisitarlaSantaImagen en Abril de 1904, dosatrilesyun facistoldemucho trabajoartístico,uncofre de metaldorado yotrosobjetos queseríalargo enumerar.

En laestancia siguiente, que da á manoizquierday riotiene otra luz quelaquerecibe delaprecedente (1),vancontinuandolosexvotos;yun pocomásadelante,dentro deun armariocerradocon cristales,seencuentra la blancoregalada á laSan- credniamtl tísima Virgenporfamiliasilustres de Madrid, en1860. Ala derecha de este lugar,enelhuecoquedeja la gran escaleraquesube al interior del Monasterio, están expuestos varios vestidos dela Santísima Virgen yalgunosestandartestambiénregalados á esta Señora.

Sigue después la sacristíaprivada, que sirveparalosPadresdel Monasterio,y- tiene comunicación con el Presbiterio porla puerta paralela á la sacristíapública, ycon lascapillasporotra semejanteáladelaantesacristía.

Nadahay en ella quellame la atención, .si no esla sencillez y pobreza monástica que allí reinan.Tiene la ropa suficiente paraelnúmero de Padres quesuelencelebrar áun tiempotranqui(1) Este local ha perdido muchísimo enluz yventilación, desde que seagregó el nuevo cuerpo deedificioque constituye elmagníficoCamarín.

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la y desahogadamente en los altares del lado del Evangelio.

Visto ya cuanto hay en la planta baja tratemos ahora del Camarín,preciosa concha que guarda la Perla de Cataluña, Nuestra Señora de Montserrat.

Dos planos se presentaron al levantarse la actual iglesia en el siglo xvr: tino con Cámara, ó Camarín como hoy lo llaman, y otro sin ella.

Como había prohibición de tocar la santa Imagen del templo antiguo, no pudiendo trasladar la, se optó por el segundo, y así se construyó la iglesia sin este aditamento. Mas apenas se había levantado este soberbio edificio, se encendieron los más vivos deseos de que la Santísima Virgen tomara posesión del nuevo templo, y así con la protección del piadoso Felipe III se obtuvo del Sumo Pontífice que se revocara semejante prohibición. Mas ya era demasiado tarde para construir una Cámara digna de la Reina del cielo, y por eso se levantó deprisa y como buenamente se pudo, un pequeño y reducido local en que hubo de permanecer la santa Imagen casi tres siglos (1599-1885).

La empresa del Camarín estaba reservada para el siglo xrx en que, al restaurarse el templo, el celoso P. Abad Miguel Muntadas pensó llevar á cabo tan importante obra, y lo consiguió, poniendo la primera piedra el 18 de Abril de 1876 el por entonces obispo de Barcelona

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Ilmo. Sr. Fr. Joaquín Lluch, más tarde cardenal arzobispo de Sevilla, logrando ver terminado exteriormente el edificio al cabo de ocho años, pues f ué cubierto el día 18 de Septiembre de 1884.

Este nuevo edificio consta de tres cuerpos: el inferior ó entresuelo se ha destinado para, sacristíadela Comunidad y sirve los días de Pontifical para revestirse los ministros y en otras ocasiones en que interviene el Rdmo. P. Abad.

El superior no tiene por ahora destinoparticular alguno. El intermedio es el destinado propiamente para la santa Imagen, que tomó posesión de él á 4 de Abril de 1887, después de haber permanecido provisionalmente en el altar de Nuestra Señora de los Dolores, desde el 5 de Julio de 1885 para poder dar mayor empuje á la obra.

Para subir á este local hay dos escaleras que dan á las estancias de losexvotos: la primera, questámanodrch,gúsepal sacristía á la Biblioteca de la Virgen, sirve para la subida, y se desciende por la que da al extremo de dicha estancia, providencia necesaria en tiempo de mucha concurrencia, como en las grandes festividades, y cuando hay peregrinaciones ó romerías. Ambas escaleras son de piedra arenisca, teniendo de ancho 1'80 metros. La baranda es de hierro batido y bronce, y fué trabajada en el mismo .Monasterio.

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Al pié de la escalera, por donde se acostumbra á subir, hay un angel que indica la entrada diciendo:Anèu á María(Id á María). Dan luz tres ventanas del pequeño ábside lateral que ocupa la escalera, en las cuales se han pintado l a s imágenes de Santos que visitaron á Nuestra Señora de Montserrat; es decir, San Vicente Ferrer, de la Ordende Predicadores (1410) , y San Pedro Claver, de la Compañía de Jesús, y separadamente San Francisco de Borja, que vino siendo aún Duque de Gandía yVirey de Cataluña (1533). Otras tres ventanas dan luz á la parte superior, en las cuales están pintados San Ignacio de Loyola (1522) y San José de Calasanz (1586), que tienen en medio á Santa Escolástica, virgen, por ser ella la capitana de las monjas benedictinas.

A la puerta del Camarín un grande marisco de ,

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Filipinas sirvede pila para elagua bendita: es regalo deunsacerdote, catedrático delSeminariode Barcelona, áquienselo habíanenviado ciertos jóvenes catalanes residentesenManila.

Tomadapues elagua bendita, convieneentrar silenciosamente en el' Camarín, ver y contemplar esta preciosamaravillaquesirvedecámaraála Emperatriz decielosytierra, María Santísima. Según testimonio decuantos lo han visto, yhanvisitadootros tambiéndestinados al mismoobjeto, este _ de Montserrat no tiene rival porlariqueza ymagnificencia queen él se hadesplegado.El pavimentodel Camarín es de mosaicoconunacenefa alrededor,yen elcentroelescudo de Montserrat. Aunqueexteriormente aparece el Camaríncomoun ábsidedela iglesia, en elinterior es completamente circular,lo cualse ha conseguido por mediode arcossostenidospor esbeltas columnasde jaspe, guardandoen ellos elestilodelaltarmayor.Entre arco y arcohay unangelconprecioso ropajesobrecubierto condalmática yllevando cuatroalas debronce bruñido,dos delas cuales seextiendensobrelosarcos,teniendo las otras dosrecogidas.

ElCamarín recibeluz por cinco ventanales del mismoestilo quelosarcos interiores. En todoshaypreciosasvidrierasde colores,pero tresdeellas merecen atención especial.En la delcentro se representa la coronacióndeMaría

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santísima:coros deángeles parecen extasiados alcontemplar esta privilegiada criatura, lo cual les hace exclamarcon aquellas palabras deloscantares: «eQuién es éstaquesube del »desierto, rebosando de delicias y reclinada SobresuAmado?» Mientr`ás, otros están de pie sosteniendo el cetro yla coronadela gran Reina yllevando un lirio,símbolo dela virginidad.

La ventana dela derecha tiene doshermosos ángeles, unotañendoyotrocantando, y á sus pieshaydos emblemas de María,tomados de la LetaníaLauretana, esdecir, unArca y una Puerta,que como nosdicendos rótulos sostenidospor dosangelitos en laparte superior de la ventana, quieren significarFaederis Arca y JanuaCoeli,que sepredicandeMaríaporhaber sidomedianeraentreDiosylos hombresporla Encarnación del Verboensuspurísimasentrañas,yademásesPuerta del cielo, puesporella entramos,alcanzando la gracia ylamisericordiaque nossalvan.

La ventana opuesta, ó dela izquierda, es semejante: tiene tambiéndosángelescantando eluno ytañendo el arpael otro,ydebajo los emblemas de laTorre yelVaso, que corresponden á MaríaTurris Davídica, jamás con el enemigoyen la cual hallan-quistadpor refugio seguro justos y pecadores, y Vasspirituale,porquecontuvo el divino maná, que des-

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cendiódel cielo para apagar nuestra hambrey saciarnuestrasalmas.

Ala salida delsol es delicioso ver losdiferentes cambiantes de luz que forman los diversos colores delas sobredichas vidrieras. En aquellahora, ytambiéndurante la mañana,es el tiempomás á propósito para contemplar y admirareldecorado del Camarín, y sobre todo sucomplemento, la bóveda,que es obra de muchoarte y singularingenio,dondecon gran pacienciaytrabajoha conseguido elSr. Llimonadejarunapruebamás desu bien asentadareputacióny fama. Representa el cielo lleno de coros de ángeles:uno deellos desciende del empíreo y aparece entrelas nubes con un ramo deolivo en lamano,señaldelapaz que nosvinoporJesucristoysubendita Madre.

Vieneácaer enMontserrat sobre eltorrente llamadode SantaMaría,que divide lamontaña.Ala derecha delespectador está pintada la parte dela montaña en que sehalla elMonasterio,y vése una procesiónde ilustres personajes en santidad, casi todosnacidos en territorios pertenecientesála Corona deAragón,que visitaron,ó se presume quepudieron hacerlo, á Nuestra Señorade Montserrat. Al frente de esta procesiónestáel obispoGotmaro, queintervino en la invención delasantaImagen, como se diráen sulugar.Luego siguenvariasotras personas,monjas ymonjes, cuyos nombresno

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es fáciladivinar: despuésaparece San Bernardo Calvó,benedictinocisterciense,Obispo dé Vich, San Bernardo de Alcira, tambiéncisterciense y mártir, San Juande Mata, • fundadòr delosTrinitarios y San Miguel delosSantos, tambiéndela misma Orden(estábesando la tierra), los dominicosSan Raimundo de Peñafort y San VicenteFerrer;San PedroNolasco,fundador delosMercedarios,con tresde estos, que son, San Pedro Armengol, SantaMaríadeCervelló y SanRamónNonato,cardenal; el franciscano Beato Salvador de Horta;elfundador de la Compañía deJesús,SanIgnaciode Loyolacon San Pedro Claver; San José de Calasanz, fundador delas Escuelas Pías; San José Oriol, la Venerable sorFilomenaF errer y finalmente, cerrandola procesión,élvenerable Arzobispo de Trajanópolis, celebérrimo P. Claret, que por lomenosestuvodosveces enMontserra t .

El ladoopuesto tienepintadala montaña por laparte dela capillade San Miguel,en quéestá el antiguo camino por dondesubían los pueblos en procesión, yen ellasehallan ,primerolos pastores áquienesfué manifestadoellugar de lasantaImagen; luego elConde Wifredo I,- el ReyJaime Iel Conquistador' s, suesposaeón otra personareal,elcélebremallorquín B.RamónLlull,losConcelleres de Barcelona y finalmentemultitud del pueblo vestidoscontípicos trajesdelpaís.

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En el espacio que media entre estos dos lala montaña, estáelgloriosoArcángel dose

San Miguel, Príncipe de las milicias celestiales ydebeladorde Satanás y sus malditos secua-

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ces: desde muy antiguo es tenido el Santo Arcángel como Patrón de la Montaña.

A los lados del Camarín hay dos pequeñas capillas: en la de la izquierda, junto á la entrada, hay un cuadro de Nuestra Señora de Montserrat, de regulares dimensiones que se colocó en la fachada de la iglesia cuando las fiestas del Milenario y después en el presbiterio hasta que se hizo el actual retablo: El altar de esta capilla es privilegiado para decir Misa propia de la Virgen, al igual que el altar mayor en muchos días del año. La otra capilla, á la derecha del Camarín, tiene otro grande cuadro de la Sagrada Familia, que estuvo en el altar que ahora es de San José. Aunque éste no goza de los privilegios del anterior, sirve para celebrar en días de mucha concurrencia de sacerdotes, ó cuando éstos en gran número desean hacerlo en el Camarín.

Enterado ya el peregrino de cuanto hay de notable, si bien accesorio, en el Camarín, justo es que se fije en el objeto principal, en la santa Imagen. Esta se halla en el departamento central que comunica con la iglesia. Aparece sentada en trono de mármol, en actitud magestuosa é imponente que causa suma reverencia y respeto ên el alma fiel, siendo bien rara la persona que no tenga que bajar la vista si se atreve á fijarla en ella cuando se acerca.

Mide 1'06 metros de altura, y de ordinario

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está vestida de rico manto blanco,que sele cambia en las principales festividades.Ciñe sucabeza coronaimperial, como Soberana que esdel Universo. Tiene en sa regazo aldivino Infante Jesús, sonrienteyafable,de colortambién oscuro, perono tanto como la VirgenMadre, á la quepueden muy bien aplicarse estaspalabrasde laEsposaen losCantares:«Nigrasum, sedfor»mosa, filiae Jerusalem.Negrasoy, perohermosa, hijasde Jerusalén». La Virgen sostiene al Niño con la siniestra, ycon la derecha le presenta elglobo, figura delmundo, para que lo bendiga,lo cual hace Jesús con sumano derecha quetienelevantada,mientras con la izquierda sostiene unapiña.

Paraacercarse álasantaImagensesubepor unaescalerilla hastasutrono, queen1894 fuéembellecido con el templete quele cobija.

Luegodebesar su benéfica mano, sebaja porla otra escalerilla,ácuyopiehayuna estátua deunescolán que presentauna bandeja pararecoger las limosnas quetengan ábien darle los fieles. Está retratado tan al vivo que no pocos bajandodebesar lamano deMaría,emocionados y embargados por devotos afectos, handirigidoalgunapregunta alescolán, hasta que por su inquebrantable silencio,han conocido en ello su engaño.

Para descenderdel Camarín sehacecomúnmenteporelladoopuestodelaentrada, sobre

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todo en los días de mayor concurrencia. La escalera es enteramente semejante á la otra: en la parte superior tiene también su concha que sirve de pila para el agua bendita: recibe luz asimismo por tres ventanas, de las cuales, la del centro tiene pintado á San Benito, Patriarca y fundador de los Monjes de Occidente y á sus lados San Pedro Nolasco (á la derecha) y San Juan de Mata (izquierda). Más abajo en las otras tres ventanas están los Beatos Salvador de Horta, que vino á mediados del siglo xvi, Benito Labre, francés, á fines del siglo xviü y Beato Diego de Cádiz, capuchino, que estuvo en Montserrat, 26 y 27 de Enero de 1787.

Un angel que se halla al pié de la escalera avisa al peregrino diciéndole: «Guarda la gracia», suponiendo justamente que la ha demandado y obtenido por intercesión de María, Madre de gracia y de misericordia.

Otra vez el peregrino en la Biblioteca de la Virgen, le llamará la atención á la mano derecha la puerta cerrada con verja y más adentro otra que tiene sobre el dintel una imagen de María que dice: «Dejad á los niños venir á Mi».

Por allí se entra en la Escolanía, que merece especial mención y capítulo aparte,

MONTSERRAT.-EXTERIOR DEL CAMARÍNYESCOLANÍA

VI

La Escolanía

Esíc4NASE conestenombre

el Colegiode música, que viene á serelcomplemento de Montserrat, y que tanto contribuye alculto dela SantísimaVirgen, para el cualha sido principalmente instituído. El edificiodela Escolaníaestá pegado á la iglesia porlapartedel Evangelio, ysuentrada principal, como se hadicho,sehallajunto álaBiblioteca dela Virgen. Comenzóse el23 deJunio de 1741siendoMaestroelP.BenitoEsteve, maspuestos losfundamentos queda parada la obra hasta 1859, enque selevantó la mitad, acabándose lo restanteen1908: Consta de dos pisos, yademás el entresuelo,queles sirvepara susjuegosyfiestasinternas,teniendo también

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su capillita ú oratorio particular. El primer piso sirve para las diversas clases de música y estudios literarios, y el superior para dormitorio, que está dividido en pequeñas celdas, según el número de niños.

Mucho se ha escrito y fantaseado sobre el origen de este célebre Colegio y conservatorio de música, pero nada se ha probado aún. Se sabe positivamente que ya existía en la mitad del siglo xv, se conjetura que debió existir á principios del siglo xiii, en que comenzó á extenderse notablemente la devoción á Nuestra Señora de Montserrat; pero no hay documento que lo acredite, y mucho menos la opinión de los que quieren que se remonte su antigüedad hasta los tiempos de la invención de la Santa Imagen, ni que precisamente se instituyera en memoria de los coros de ángeles que cantaban en la Cueva las alabanzas de María. Sabido es de todos que desde los principios de la Orden Benedictina, fué costumbre criarse los niños en sus monasterios; y si bien eran entonces para la vida religiosa, más tarde era sólo para atender á su sólida instrucción, volviendo al seno de sus familias, como Santo Tomás de Aquino y otros. Esto, sin duda, fué lo que dió origen 11,nuestro Colegio de música de Montserrat.

Cuando fué reformado este Monasterio á fines del siglo xv por los monjes vallisoletanos, una de las cosas que más particularmente llamaron

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la atención del venerable P.Garcíade Cisnerosfuéla Escolanía, parala cual compusouna discretísima reglaque consta de doce capítulos, álaqueañadió un pequeño ceremonial en ochocapítulos, todolo cualse ha conservado sustancialmentehastanuestros tiempos.

Entonces sólo constaba el Colegio de doce niños,más tarde fueronadmitidos de 18 á 22 y nuncapasaronde 24.En el sigloxviiillegaron á seryade 28 á 30, y finalmente se hafijado su númeroen elde 33, todos niñosdepoca edad, esdecir,de 8 á 16añosordinariamente, Algunos.son ofrecidospor sus padres por voto espedial ó por devoción ála Santísima Virgen;mas generalmente entran ya desdeelprincipio como músicos, porloque serequierequesepan.algo delarte ó quepuedan fácilmente aprenderlo, ytenganvoz apta paraello,sinoson devueltos á susfamilias, lo cual muy rara vezhoyacontece, por ser más que suficiente elnúmero de postulantes.

Exceptolos niñosquehansidoofrecidos á la Santísima Virgenporalgúnvoto y para tiempodeterminado, todos los demás hande permanecer eÏiel Colegiohasta quecumplan la edad reglamentaria, á no ser que por su conducta merezcan ser expulsados, loque sucedemuyrara vez, óbien tengaquesalirpor alguna otra causa grave.

Laentradadel niño en la Escolanía seHace .

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con una pequeña y tierna ceremonia. Se reunen todos en el camarín de la Santísima Virgen, y el Padre encargado de la Escolanía bendice el' traje para el nueva candidato, consistente en saya ólobade color negro, correa y roquete, que luego le impone. Enseguida el niño, arro dillado .á los pies de la Santísima Virgen, se consagra á su servicio, diciendo en alta voz la oración:«Oh Virgen y Madre de Dios, yo me entrego por hijo vuestro, etc.»,dicho lo cual besa la :mano de - la Santísima Virgen, las de sus padres y maestros, y luego abraza á, todos sus nuevos compañeros, quedando desde este momento contado como uno de los pajecitos de la Virgen Santísima. Fuera de los :actos del culto visten solamente la saya, que llevan si empre. sujeta con la correa, como los monjes. De este Modo salen también 'cuando van de paseo,, ya juntos, ya cuando les visitan los de su familia, con la cual se les permite ir también á los aposentos en que se hospeda, imas no con ninguna persona extraña.

Desde que los niños son incorporados á la Escolanía, son tratados como miembros integrantes de la Comunidad montsèrratina. Pará el gobierno de ellos están destinados un Padre y un Hermano, que .día y noche los asisten contínuamente; velando sobre -su. conducta y - -cuidando que nada necesario les falte.

- Si enferman sólo levemente, -son cuidados en -

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la misma Escolanía; pero . si se agravan se les conduce á la enfermería del Monasterio, donde se les trata con el mismo agasajo que á los monjes, según lo prescribe San Benito, que dice que «ante todo y sobre todo se debe cui»dar de los enfermos, sirviéndoles como si fuera

»eimismoCristoen persona» (cap. 36). Silaenfermedad continúa, se avisa á la familiaporlo queconvenga disponer, y si se agrava, sele administraelViático, guardandolasolemnidadque se observa con los demás miembros dela Comunidadque,cuando lo permitela hora,asistetodaellaordinariamente.

Si, finalmente, el niño fallece, sele hacesolemnefuneral,llevándole amortajado con el

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vestido de Escolán, conduciendo otros cuatro niños el cadáver en procesión al coro, presidiendo el acto el P. Maestro con ministros que hayan sido escolanes, si los hay entre los miembros del Convento. Concluidos los oficios de rúbrica, se le da sepultura en el panteón de la Comunidad para que descanse entre los siervos de María el que estuvo dedicado á ella y murió en su servicio.

Cuando el niño escolán ha terminado laudablemente el curso de sus estudios y cumplido la edad reglamentaria, se avisa á la familia para que en día oportuno vengan á recogerle, ó envíen persona de toda satisfacción. Ordinariamente la salida se efectúa en la primera quincena de Septiembre, después de la fiesta de la Natividad de Nuestra Señora, que es la más solemne de Montserrat, y por tanto no conviene que falten los niños que, naturalmente, pueden servir mejor y tributar á María en día tan señalado el último servicio y obsequio.

Designado, pues, el día en que el niño escolán ha de salir del Colegio, reune el P: Maestro á todos los niños, y el que ha de salir les pide perdón, arrodillado en medio de ellos, de las faltas cometidas y de los malos ejemplos que les haya dado, rogándoles que le encomienden todos los días en sus oraciones á la. Santísima Virgen. En esta ocasión el P. Maestro les hace

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una plática relativa á las circunstancias, encargándoles sobre todo la guarda de los mandamientos y la perseverancia en la devoción á Nuestra Señora. Luego les lleva al camarín para besar la bondadosa mano de la Virgen y darle gracias por los beneficios recibidos durante los años que los ha tenido bajo su manto, y, finalmente, para pedirla que les ayude en lo restante de la vida y que jamás los desampare, y habiendo rezado el Sub tuum praesidium,se despiden de Ella y vuelven á la Escolanía, donde se quitan el vestido de escolán y toman el seglar, con el cual son devueltos á la familia, á no ser que hayan obtenido pasar á la Comunidad, como ha sucedido varias veces.

Entre los ministerios principales en que se ocupan los niños durante los años que están en la Escolanía, uno es la Misa matutinal de Nuestra Señora de Montserrat que cantan todos los días del año (excepto sólo el jueves, viernes y sábado Santos, que no se celebra, y el día de Navidad que cantan la segunda Misa). Es una cosa que encanta y conmueve sobre manera á los peregrinos el ver á estas tiernas criaturas, como sencillas . y blancas palomas, á los pies del trono de María, entonar al romper el alba el hermosísimoIntroitocon que tiernamente saludan -á la Madre de Dios. Verdaderamente ha de tener un corazón más duro

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que el diamante, quien no se conmueva al oir aquellas voces argentinas alabando tan de mañana al divino Hacedor.

También es de mucha edificación ver á los más pequeñitos en aquella hora discurriendo por la iglesia y ayudando las Misas de los Padres y demás sacerdotes que vienen al Santuario. En este ministerio gastan dos ó tres horas diarias en tiempo de verano.

Por la tarde todos los días rezan el Rosario, ó le cantan en las fiestas principales, ó bien si algún devoto da limosna para ello, después cantan la Salve alternando con los monjes, y finalmente concluyen con los Gozos ó Letrillas á la Santísima Virgen. Algunas veces, pero extraordinariamente por la mañana ó por la tarde, cantan también alguna Salve. Todos los domingos y fiestas, y siempre que alguna persona da limosna correspondiente, cantan en el coro la Misa mayor ó Conventual; y en la Semana Santa, Corpus Christi, fiestas de la Invención de la Santa Imagen y Natividad de Nuestra Señora intervienen también para el canto de las tinieblas, vísperas solemnes respectivamente, etc.

Otra de las obligaciones de los niños escolanes es el rezo del Oficio parvo de la Santísima Virgen, que introdujo el P. Maestro Bernardo Barecha en tiempo del P. Abad Alonso Gómez (1623), así como la Letanía lauretana, que re-

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zan ó cantan después de la. Misa matutinal, s egún el rito del día. Es otra de las cosas que más edifica á los peregrinos, al ver la gravedad con que estos diminutos cantores desempeñan su cometido.

También causa notable edificación verlos acercarse á la Sagrada Mesa para recibir la Comunión en las principales fiestas del año, cuando lo hacen7 todos juntos en la Misa matutinal. Fuera de estas ocasiones, comulgan ellos en particular otras muchas veces, ya en el altar del Santísimo, ya de mano del Padre sacerdote á quien ayudan la Misa.

Entre las .fiestas que celebran los es_colares, la más típica es la de San Nicolás de Bari, patrón - de los niños, y data de tiempo antiguo.

Algunos días antes eligen de .entre ellos uno que designan Obispo de la Escolanía, lo cual hacen con toda gravedad por votos secretos de entre una terna propuesta por el P. Maestro , que con -muy buen acuerdo, de algunos años á esta parte escoge los que durante el año han tenido mejor conducta. El que obtiene la mayoría de votos es .aclamado Obispo, y los otros dos Vicario general y Secretario, más otro Maestro de ceremonias, y finalmente dos de los más chiquitines son designados pajes. Hecha la elección, toman sus instrumentos músicos y formando la banda, saludan y pasean al nuevo Obispo al son de alegres. marchas . Llegado el _

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día de San Nicolás, por la mañana, revisten al pequeño obispo con los ornamentos de su dignidad y hace la ceremonia de la toma de posesión de la misma Escolanía, á la que suele asistir la Comunidad. Para el efecto el Padre Maestro escribe una pastoral, entre alegre y seria, donde el Secretario, en nombre de su prelado, señala y advierte á los escolares de las principales travesuras que suelen hacer y todos conocen, y después les exhorta á la reforma de costumbres , á la virtud y aplicación. Desde la Escolanía van por los corredores del Monasterio á salir por la puerta principal y se dirigen á la iglesia, atravesando los claustros y entrando en el templo á los acordes de la música, hasta llegar al Presbiterio, donde hay preparada una silla de respeto con su reclinatorio para el nuevo Obispo que asiste con sus familiares á la Misa mayor, cantada por losescolanes en honor de San Nicolás.

Después de misa, va el pequeño Prelado con todos los Escolanes á visitar al Rdmo. P. Abad, que acostumbra darles licencia para que también visiten á los monjes, lo que hacen ellos con la algazara propia de su edad: todo este día es de vacaciones para ellos, terminando la fiesta con el santo Rosario, al que asiste el Obispillo y su séquito en la misma forma que á la Misa mayor.

Además del Padre y Hermano, que velan de

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contínuo por los niños, hay los correspondientes profesores asíparalamúsica como para lasletras, de modo que selesprocura dar una educación lo más completaposible,áfinde que al salirdela Escolanía puedan fácilmente aprenderalguna carrera. De esto ha resultadogran nombradía ya desdelos tiempos antiguosparael Santuariode Montserrat, porlos muchosé ilustressujetosquehan salidodela Escolanía, cuyo catálogo,aunqueharto incompleto, sepuedeveren losPP. Yepes y Argaiz, benedictinos, y entrelosescritores modernos en don Baltasar Saldoni que fué uno de los jóvenesmásaprovechados dela Escolanía (1818-22), tanto en su «Reseñahistórica de la Escolanía de Montserrat», como en las«Efemérides de músicos españoles». Entreellosse cuentannopocosdela primera nobleza deCataluña, enespecial delosCardonas y Moncadas, Eriles, Rocaberti y otrosqueocuparon los primeros cargosdelEstadoespañol. Muchos otrosescolanes se hicieronilustresen la carrera eclesiástica como Tomás Gargal, que llegóá serObispode Malta, Francisco Juncá, Maestro deCapillade Toledo y después Canónigode Gerona(1833), José Roura, organista de Segoviay Granada, dondemurió siendo canónigo el año1855, JaimeNadal,maestro deCapilla en PalenciayAstorga,fecundo y excelente compositor, (t 28 Diciembre1844), etc., etc. Mu8

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GUIA HISTÓRICO-DESCRIPTJVA

chísimosotros han abrazado el estado eclesiásticoendiversasórdenes. Sólo enMontserrat hallamosdesde 1500 á 1835 hasta 190 esco= lanes que se hicieron monjes, ydespués acá hanentrado unosdiezyocho.Delosdela épocaantiguaunollegóá ser General de los Benedictinos en España, el Rdmo. Padre J osé Blanch-(1835);diez fueronAbades de Montserrat, yveinteytres gobernaron variasAbadías, asídela Congregación benedictina de Valladolid,como dela Tarraconense, ymuchosde ellos desempeñaron otros importantes cargos en la Orden.

Para cerrar este capítulo nombraremos los principalesmaestros de música que hatenido la Escolanía, ya quecasitodosellosseformaron en ella.Los másconocidos son los PP.Juan-Marquez (1658),Juan BautistaRocabert (1701), Juan Cererols (1676), Juan García(1707), JoséMartí (1763), este erayaSacerdotecuando tomó el Santo Hábito,Benito Julia (1787), Anselmo Viola (1798), Narciso Casanovas, elmáscelebrado de todos por susadmirables composiciones(1799), Mauro Ametller (1833), BenitoBrell (1850) y Jacinto Boada (1859); estos dos últimosfueron losrestauradores dela Escolanía despuésdelafunestainvasiónnapoleónica.

También contribuyeronásu restauración el P. Rafael Palau (1890), de los monjes antiguos, yelP. Francisco Sobrón,monjede Valvanera,

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donde murió siendo Superior en 1892; y después de ellos los PP. Millán Agustino (1902) y Manuel M. Guzmán (1909), el cual vino en 1888 siendo Maestro de Capilla de la Catedral de Valencia, y en los diez y nueve años que estuvo alfrente de este Colegio, logróque recobrara su antiguo esplendor.

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VII

La santaCueva

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s detanta importancia este p lugaren Montserrat queno

debe quedar ningún grinosinvisitarle,ycreemos queordinariamente así sucede.

Paradirigirse alláse saleporlaFuentedel Portal y se tomalacarreterade Monistrol. Pocospasos más abajodelaestacióndeltreny frentealedificiodelMonasterio, hay á mano derechaun mojón que dice: cAlaCuevade la Virgen.» Allí comienza 6,bajarel camino, atraviesalavía f6rreay no tarda en divisarse á lo lejoslasanta Cueva.Estecaminoesdistinto del primitivo, que llamanescalanova de les monjesypasajuntoálaermitade los ApóstoMonis‘4 4 .

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trol, dei que se habló ya en el capítulo I.Atravesando éste, da la vueltaal peñasco llamado la trona(el púlpito) y pasa junto á les coves ronyoseshasta hallar el tercer Misterio de Dolor.

El actual se abrió en el siglo xvii á expensas de la piadosa Marquesa de Tamarit D.aGertrudis de Camporrell y Montserrat, que gastó en ello sesenta mil ducados. Para construirlo hubo que romper enormes rocas y otras veces levantar gruesas paredes con antepecho á cal y canto, lo cual explica fácilmente que en aquellos tiempos costara tanto _que la buena señora llegó á preguntar si lo habían hecho de plata, por lo que fué conocido durante mucho tiempo porlo camí de plata.

Tiene dicho camino algo más de kilómetro y medio de extensión, y su anchura ordinaria es de tres metros próximamente. Hoy se -ha mejorado mucho y se trabaja por mejorarlo todavía para hacerlo más cómodo y seguro, rodeándole de antepecho sobre todo en los lugares peligrosos para evitar cualquier desgracia, que pudiera ocurrir, especialmente cuando hay mucha aglomeración de personas, como sucede en tiempo de peregrinaciones. También ha motivado esto la construcción de los Misterios del Rosario monumental que comenzaron á inaugurarse en 1895, á fin de facilitar á las personas piadosas el que sin cansancio puedan rezar el santo Rosario durante el trayecto, como

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muchos acostumbran. Iremos dando cuenta de ellos, dejando á cada cual que juzgue de su valor artístico. Comienzan desde la bifurcación de este camino con el sendero que va á Monistrol, conocido coi el nombre de dressera,y caen, excepto el quinto de Dolor, á mano derecha.

El primero que se halla es el de Gozo, ó sea laAnunciación y Encarnación dei Hijo de Dios,el cual fué inaugurado el 9 de Septiembre de 1896, costeándolo la familia Llopart de Sivatte, de Barcelona. Antes se hallaba un poco más arriba, pero por ser lugar desacomodado se bajó . donde ahora está, y fué objeto de una pequeña restauración que lo ha dejado más embellecido. El primer trabajo fué del Sr. García, .y .el segundo del Sr. Pujol, ambos escultores de Barcelona.

A pocos pasos está el segundo Misterio de Gozo, laVisita de María Santísimaásu prima Santa Isabel, la cual aparece hincada ante la Madre de Dios, que llega á felicitarla por ser Madre del Precursor del Redentor del mundo.

Fué costeado por señoras que llevan el nombre de María de Montserrat. Dirigió dicha obra el arquitecto D. Enrique Sagnier yla ejecutó el escultor Sr. Vallmitjana y Abarca. La inauguración se hizo el 12 de Mayo de 1902, con asistencia de gran número de las señoras donantes.

El tercer Misterio de Gozo, esto es, el Nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo en Belén,

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está pegado á la roca y es un cuadro de mosaico encerrado en rico estuche de piedra labrada, con artística reja de hierro. Lo costearon varias familias devotas de la Virgen, y fué dirigido por D. José Puig y Cadafalch y D. José Llimona, é inaugurado en la fiesta de Pentecostés, 27 de Mayo, de 1901.

Pasado el torrente de Santa María y junto á él se halla el cuarto Misterio de Gozo, ó sea la Purificación de Nuestra Señora y laPresentación de su divino Hijo en el templo.Fué .costeado por el gremio de Carpinteros de Barcelona, siendo construído bajo la dirección del Sr. Martorell por D. José M. a Bernadas, é inaugurado el 23 de Octubre de 1904, con asistencia de la Junta y buen número de socios de dicho Gremio.

Muy semejante al precedente es el quinto Misterio de Gozo, esto es, elhallazgo del Niño Jesús en el Templo.Es obra de los sobredichos Martorell y Bernadas á expensas de una piadosa familia de Tarrasa.

Siguen luego los Misterios de Dolor, de los cuales el primero, laOración de Nuestro Señor Jesucristo en el huerto de los Olivos,fué inaugurado el 25 de Junio de 1897, asistiendo numerosa peregrinación de jóvenes Teresianas, que lo costearon, presidida por el devoto de la mística Doctora del Carmelo Ilmo. P. Fr. Tomás Cámara, obispo de Salamanca, de la Orden de San Agustín. Consiste en la imagen de

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Nuestro Señor Jesucristo de rodillas y el ángel que le presenta el cáliz amargo de la Pasión, obra de D. José Campeny y D. Joaquín Codina.

El segundo Misterio de Dolor, ó sea la Flagelación de Nuestro Señor Jesucristo,fué levantado á expensas de dos devotas de Nuestra Señora deMontserrat,D.a Emilia y D. a Elvira Llagustera, de Barcelona. Intervinieron en su construcción el arquitecto D. Francisco de P. Villar y el escultor D. Agapito Vallmitjana.

Fué bendecido por el Rdmo. P. Abad, el 9 de Septiembre de 1898.

Lacoronación de Espinas, que es el tercer Misterio de Dolor, es obra muy bien ejecutada por el arquitecto Sr. Nougués. Lo costearon los Terciarios de San Francisco de Asís, que en devota romería vinieron para inaugurarle el 22 de Septiembre de 1901, y en 1907 colocaron la magnífica reja que lo circunda.

Las Asociaciones católicas de Barcelona levantaron el cuarto Misterio de Dolor, que representa áNuestro Señor Jesucristo llevando la pesada Cruz camino del Calvario; obra de los Sres.Martorell y Vallmitjana (Venancio).

También los donantes asistieron en romería el día de su inauguración, que fué el 23 de Abril de 1899.

Cierra hermosamente los Misterios de Dolor una Cruz monumental que representa el quinto, ó sea laCrucifixión,ideada por D. José Puig y

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

Cadafalch y ejecutada perfectísimamente por el Sr.Llimona.El pedestal es de piedra, lo demás de hierro y bronce, todo admirable y grandioso. Levantaron este Misterio los socios del Apostolado de la Oración de Cataluña, que presididos por el fundador de ella en España, el entonces Ilmo. Sr. obispo de Vich, D. José Morgades, asistieron á la inauguración el 11 de Octubrede 1896.

De los Misterios de Gloria falta el primero que ha tomado por su cuenta la «Lliga Espiri tuai deNostra Senyora deMontserrat», estando encargados de la obra el arquitecto D. Antonio Gaudí y el escultor D. José Llimona,siendo de esperar que corresponda á los demás de esta tercera parte, que todos son verdaderamente monumentales.

Débese el segundo de Gloria, la Ascensión de Nuestro Señor Jesucristo alcielo,á la generosa munificencia de D. Pedro G. Maristany, de Barcelona. Fué dirigido por D. Buenaventura Bassegoda y ejecutado por el escultor Sr. Reynés, siendo bendecido el veintisiete de Julio de 1903.

El tercero, laVenida del Espiritu Santo sobre el sagrado Colegio Apostólico,que preside María Santísima, ha sido levantado por el clero de Cataluña, como lo indican los emblemas é inscripciones, en que "se hallan los nombres de todas las diócesis que forman la provincia ecle-

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siástica tarraconense. Lo han dirigido y ejecutado los Sres. Martorell y Bernadas.

El cuarto Misterio de Gloria, laAsunción de María Santísima á los cielos, está empotrado en la roca. Es de blanquísimo mármol, sobresaliendo en la parte superior la figura de Nuestro Señor Jesucristo, que recibe á su benditísima é inmaculada Madre, elevada por los ángeles. Fué construido por los Sres. D. José Codina y D. Venancio Vallmitjana, é inaugurado el 8 de Julio de 1900, asistiendo en devota y numerosa peregrinación las Hijas de María de Cataluña, que lo costearon.

Finalmente se halla el quinto Misterio de Gloria, la Coronación de María Santísima por la beatísima Trinidad,que la constituye Reina de cielos y tierra, Madre y Abogada de los pecadores. Lo han levantado los Terciarios Carmelitas de España, de los cuales asistió una comisión el día que se inauguró (10 de Junio de 1906).

Hénos aquí sin darnos cuenta, y agradablemente distraídos, en el término de nuestro viaje á las puertas de laCÚEVA DE LA VIRGEN,ó lugar donde fué hallada la Imagen de Nuestra Señora, que se venera en el Santuario de Montserrat, de cuya invención vamos á dar cuenta, por venir á propósito, en este lugar.

Aunque desgraciadamente hoy ya no quedan documentos con que satisfacer la incrédula cu-

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riosidad delacrítica moderna, diremos que la tradiciónconstante, consignada ya en losprimeroshistoriadores de Montserrat, -es que, á finesdel sigloix, fuéhalladamilagrosamente entre estas rocas la- ImagendeMaría, cuya procedenciase ignora, sibien ciertos falsos croniconesla han hecho venirdeJerusaléná Barcelona y deallíá esta santa Montaña conmotivo dela invasión sarracena. (1)Biencreible es queenestaocasión, seade dondequiera,fué ocultada lasantaImagen, perdiéndose más tardesu memoria hasta que, reconquistandolos naturales lo perdido,plugo al Señor descubrirla pormediohartomaravilloso, cual fueron las lucesqueaparecieron varios sábadosal caer delatarde,oyéndose además voces angélicas quecantaban loores álaMadre deDios. Tan extraordinariosfenómenos fueronobservados porciertospastores, queapacentabansus rebaños al pié del monte.Dieronaviso á sus amos, quelo pusieron en conocimiento del Sacerdote-

a)Uno de los peores males de los cronicones elaborados en su mayor parte en el siglo XVI por el célebre Román de la Higuera, fué aprovechar todos los datos históricos y tradicionales conservados en los pueblos, á fin de revestir mejor con ellos sus elucubraciones iczílneas.Púdose hacer con la mejor buena fe (démosle este nombre); mas el perjuicio que con ello se irrogó á nuestra historia es incalculable, máxime cuando con la desaparición de las bibliotecas, museos y archivos por los vándalos liberales, ha resultado imposible distinguir hasta dónde llega la verdadera tradición y dónde empieza lapiadosamentira.

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del lugar, quien á su vez dió cuenta de todo al Obispo diocesano, que á la sazón se hallaba en Manresa. Dirigióse, pues, el Prelado acompañado del Sacerdote y otros eclesiásticos y seglares al lugar del suceso, y subiendo allá, encontró la devotísima Imagen de María. Reverencióla y tomóla en sus manos, y formando devota procesión se encaminó por el sendero, que, mejorado, aun se conserva y sube á San Miguel por detrás de la Santa Cueva, con intención de llevar la Sagrada Imagen á su iglesia Catedral. Gozosos y devotos marchaban todos con tan precioso tesoro, cuando, al pasar por el lugar donde hoy está fundado el monasterio, señalado por ana cruz de piedra, se hizo tan pesada la santa Imagen que ni el Obispo ni los acompañantes .pudieron moverla. Conociendo por esta señal que la Santísima Virgen no quería salir de la montaña, se conformaron con ella y la depositaron en una de las capillas próximas quee se dice fué la de San Acisclo y Santa Victoria, no muy distante del lugar del suceso. En ella permaneció hasta que la levantaron iglesia propia, de la cual hallamos expresa mención en el primer tercio del siglo x.

No quedó- en olvido el lugar donde tantos años había estado escondido este precioso tesoro. Siendo visitado con frecuencia por los fieles, se levantó aquí una capilla, en la cual los monjes celebraban el Santo Sacrificio de la ,

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Misa lossábados ylasfestividades de la Virgen María.De este modopasaron varios siglos,hasta quela piadosaMarquesa de Tamaritmandólevantarotrasuntuosa,dotándola demisacotidianaen1634, yseñalandotambiénestipendio para elReligioso quehabíade moraren ella. Asísehizomás tarde, y nunca faltó la misa diaria,desde 1705 hastael25 de Julio de 1811, enque,despuésde celebrado el SantoSacrificio, lastropas napoleónicas, que habían yainvadido y causado inmenso daño en lasantamontaña, bajaron también ála Cuevapara continuar sushazañas,ylasaquearon, completandosuobrael año siguiente, el30 de igualmes enquela incendiaron.

La destrucción del Monastério yladispersióndela Comunidad fueron causa de que este bendito lugarquedaseámerceddelanaturaleza, viniéndose al suelo cuanto nohabíacaído eonlainvasión'delosfranceses. Mas no poreso quedó en olvido,pues aun así, los fieles Rae subíaná Montserratcontinuaron haciendo la indispensable visita á sus venerables ruínas.

Entre tantos visitantes, se hallaron el25 de Octubrede 1857los SerenísimosInfantes de España,Duques de Montpensier, que, movidos ádevoción, iniciaron la empresa de restaurar laSantaCueva, lo cualsellevóá cabo felizmenteen el espacio desiete años, siendo por fin bendecidayabierta alcultoel11 de Sep J

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tiembre de 1864, diaenquecayó la fiesta del Dulcísimo Nombre deMaría.

La actualcapilla,de estilo bizantino y que ha conservadoen lo posible la misma disposicióny estilo que laedificadaen el siglo xvii, sedebe alarquitecto D. Francisco de Paula

Villar.Exteriormente parece cobijada bajouna enorme roca. En elinteriortieneforma de cruz, cuyobrazosuperiorloformala misma peña que se hacreídoconveniente no decorar con adornospostizos,sinodejarlacomoestaba cuandosehalló laSantaImagen, sibiense hadispuestode modo que dieralugar para poner allíunapequeñamesa de altar donde se celebraelSantoSacrificio. Enlugardelretablo hay un bajo relieve deblanquísimo már-

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mol ‘fijado en la pared, el cualrepresentael hallazgodelaSantaImagen. Sobreél. hayuna pequeña imagen deNuestra Señora con un ángel á cada trado.En lasdos paredeslaterales hay otrosdosbajos relieves demármol,que representan la aparición de Iaslucesálospastores yla procesiónqueconducía la Santa Imagen haciaManresa. Unapequeña verja de hierrosepara estebrazodelorestante dela capilla,que estálujosamente pintada con emblemas deMaríay versículos de la Letanía Lauretana, tododebido al artista manresano D.BenitoCabanas.La iglesiaesun poco oscura, pues sólo recibe luz por unos pequeños ojosy porla pequeñay graciosa cúpula, cuyos cristales sonde colores;sinembargo, esto mismo la hace más devota y convidamejorá la oración.

Adyacente ála iglesia hay un pequeño edificio, monasterio enminiatura, convariashabitaciones,dondepodría vivirunareducida Comunidad. Tiene bonito claustro gótico y cisternaen sucentro para recoger lasaguaspluviales; hay además otracisterna interior para el riego,ylaexterior,cuyaagua es excelente y convidacon elloáreposar al fatigado peregrino.También hay huerto quepuedeservir de solaz y de excelente mirador al mismo tiempo,para contemplar desde allí eldilatado panorama que sepresentaálavistadelespec-.a

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ta.dor: el ríoLlobregatque pasa lamiendo el pie de la montaña, las fábricas que se aliment an de su s aguas, las carreteras que serpentean junto á él, y más allá, á la otra ,parte de los montes, la línea del ferrocarril del Norte y no pocas veces los trenes que la recorren, en fin, el pueblo de Vacarisas recostado en la falda de los montes de San Lorenzo, y en último término la sierra de la Maresmay la delTibidabo junto á Barcelona.

La iglesia de la Santa Cueva suele abrirse desde Pascua de Resurrección hasta 1.° de Noviembre, que es la temporada de concurso, y durante ella, siempre que lo requiere la devoción de los fieles, baja á celebrar la santa Misa alguno de los Padres del Monasterio. También hay muchos Sacerdotes que tienen la devoción de bajar á ofrecer allí el incruento Sacrificio, lo cual pueden hacer con permiso escrito del Padre Sacristán del Monasterio, el cual sólo exige para ello que lleven alguna persona que se la ayude.

Hay facultad para tener el Santísimo Sacramento, si bien sólo se usa cuando habita allí algún Padre de la Comunidad. Los Sumos Pontífices han concedido que se pueda rezar Misa propia de Nuestra Señora de Montserrat,al igual que en el altar mayor del Santuario, y cantar solemnemente una cada día, y además que el altar sea privilegiado. Finalmente han 9

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enriquecido con muchas indulgencias esta capilla, sobre todo Pío IX, que en 31 de Marzo de 1864 concedió indulgencia plenaria aplicable á las almas del purgatorio á los que, debidamente confesados y comulgados, visiten la Santa Cueva y oren allí por las intenciones del Sumo Pontífice.

Para regresar al Monasterio pueden tomarse dos vías. Subiendo por el mismo camino, pueden contemplarse de nuevo los Misterios, y si no se detienen mucho, tres cuartos de hora bastarán para llegar al término de la excursión.

Si, empero, se quiere seguir la ruta tomada por la devota procesión que halló la Santa Imagen y la condujo hasta el lugar del Santuario, entonces se debe tomar el camino que hay junto al cuarto Misterio de Gloria, y por detrás de la SantaCueva, en hora y media y con calma, se da la vuelta y se sube hasta San Miguel por camino bastante bueno, que ha sido muy mejorado en estos últimos años por ser en parte el mismo que se utiliza para dirigirse á las célebres cuevas del Salitre ó de Collbató. Antes de llegar á San Miguel, empalma con el que viene deCollbatóá Montserrat,rpor el cual puede continuar el peregrino hasta el Santuario.

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V I II

Alrededoresde Montserrat.

Aexcursión

que hemos descrito, no todas las personas pueden hacerla, pero con tó do los alrededores del Monasterio les proporcionarán hermosos panoramas, con lo que el tiempo transcurre variáda y hasta devotamente; trataremos de ellos con brevedad y primeró de la

Fuente del Portal conocida vulgarmente por la Fuente del Milagro.Hánla denominado así, porque se dice que brotó en tiempos antiguos al secarse otra que había en el camino de Collbató, de la cual abusaba el dueño del terreno, imponiendo fuerte

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GUÍA HISTÓRICO - DESCRIPTIVA

contribución á los fatigados peregrinos que deseaban apagar en ellasused. Aun hoy se ven en dicho camino las ruínas junto al torrente que baja de San Juan, y se apellida la .

Fontseca.

La Fuente del Portal, de que tratamosahora, sehalla fuera delrecinto delosmurosdelMonasterio,ála otrapartedeltorrente de Santa María,que no aparece á lavista,puesse construyó hace pocos años un gran viaducto subterráneo,resultando una pequeña plaza, que ha sido convertidaendelicioso jardíny es tal vez ellugar másconcurridopara solazdelpúblico.

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Dicha fuente, como las demás de la montaña, es resultado de 'la infiltración de las aguas pluviales, ãsí que su caudal es variable, según la mayor ó menor abundancia de éstas, y aunque mana constantemente, lla llegado á cesar en tiempode extraordinaria sequía, si bien ha sucedido rara vez. El agua está recogida en el gran depósito construído al efecto y su temperatura, por término medio, es de 9'07 grados centígrados. Aconséjase al viajero que sea cauto en beberla cuando llega fatigado, pues, como ha sucedido algunas veces, podría acarrear fatales consecuencias. Hace algunos años se levantó un kiosko junto á dicha fuente, y en él se expenden variedad de licores, con lo que es más fácil evitar percances desagradables.

Junto á la Fuente del Portal comienza el

Via- Crucis que en 1904 se instaló en esta santa montaña, y por cierto con mucha oportunidad.

En efecto; algunas de las peregrinaciones, que anualmente visitan á Nuestra Señora de Montserrat, suelen tener entre sus ejercicios este tan piadoso del Vía-Crucis; "en él " tomaban -parte de ordinario las personas más delicadas y que no podían seguir al resto de los peregrinos, que bajan á visitar la santa Cueva. Así pues, formando procesión aparte, presidida por

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elCrucifijo,quèacostumbran traer estas devotas romerías, seencaminaban, ya por la carretera ycaminode losApóstolesy San Acisclo;

yaporel caminodelos«Degotalls»,,haciendo este santoejercicioentreoraciones ycánticos sagrados.

Hoynotienen necesidadde incòmodar. á.los demásperegrinos, ni muchomenos á elos. 'que,

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no siendo tan piadosos, gustan pasearse y pasar el rato sin que nadie les moleste en aquellos parajes. A este objeto se abrió en 1904 el espacioso camino, que desde la Fuente del Portal va á terminar en el que sube á la cueva de Garí. El 24 de Junio de dicho año se inauguró el Vía-Crucis con motivo de erigirse la primera Estación monumental. que costeó la Asociación óCofradía del Vía-Crucis Perpetuo y viviente, establecido en la parroquia de la Purísima Concepción de Barcelona, asistiendo al acto como 150 socios. Forma esta primera Estación una esbelta Cruz de piedra, en cuya peana está grabado el primer paso de la Vía dolorosa. Dirigió la obra el arquitecto D. Enrique Sagnier, y la ejecutó D. Eusebio Arnau. En 1905 se levantó la última Estación del mismo estilo que la primera. En 1907 se colocó la tercera, y las restantes están designadas por rústicas cruces de madera, que van desapareciendo á medida que se colocan las estaciones definitivas de piedra.

Al terminar el camino del Vía-Crucis se halla, según dijimos, el que sube á la cueva de Garí, que está sobre las próximas rocas, en el lugar indicado por una cruz de madera. El camino es mediano y bastante pronunciado; no obstante, puédese ganar la cima poco á poco y sin mucho cansancio, y contemplar desde allí á ojo de pájaro todos los edificios de Montserrat.

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GUÍAIIISTÕRICO-DESCRIPTIVA

Ha dadoel nombreá este lugarunermitaño,áquien elvulgo, contando de él ciertos hechos incompatibles con la crítica histórica, hahechonopococélebre, amalgamando una historia que parece ladeotro ermitaño de Oriente,con la cual tiene tantospuntosde contacto que no seríadifícilfuera la misma, yaqueen losmanuscritosantiguosno se hallanlos nombresquehanaparecidoenhistorias posteriores. Como quieraqueseacosa demasiado sabida, nos abstenemos detrasladarla aquí.

Sólodiremos que tal comola cuentan losautores, nadatieneque verdichoGarícon la familia, ni con lahistoriabenedictinas,sibienno ha faltadoquien,parasalir del paso, haya pretendidohacerlesúbditodel monasterio de Santa Cecilia,del cualse trataráen elcapítulo siguiente, pues entonces noexistía.

La cuevadondesuponenquehizopenitencia, esellugar de que nos ocupamos. Apenaspuede estaren ella un hombre echado, y no es de extrañar este género demortificación de quehay hartosejemplos en las Vidas delosSantos.

Han puesto allí una estatua yacente,que representa ádicho ermitaño haciendopenitencia, y junto áélunaimagendeMaría,que es de piedraydicensermuy antigua: hay quien afirma que procededel antiguo monasteriolum (Monistrol); allá juzguen los inteligentes.Cierra estacuevaunaverjadehierropara preservar

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aquellos objetos, del pésimo gusto y falta de educación de ciertas personas, que difícilmente dejan salvo cuanto puede llegar al alcance de sus manos.

Descendiendo de la Cueva de Garí, se baja al camino deCollbató áMontserrat,por el cual se.vaála

Capillade San Miguel, que dista del Santuario pocomás deunkilómetro. La capilla de San Miguel Arcángeldata porlomenosdel sigloxi, como consta de antiguasescrituras dedonación hechaporlaVizcondesa Riquilda, de Barcelona, conmotivo de serbendecida porel Obispodeaquella ciudad (áquien pertenecíaesta parte de la montaña) en14 deJuniode 1044. Por otraescritura de 15 deSeptiembrede 1069, consta que habitabanjunto áellaycuidaban delculto dos ermitaños llamadosTransuario y Guarino, que parece ser elGarí,dequienacabamos de tratar,cuyo nombre con el dela sobredicha condesaseintrodujoposteriormenteen lafantásticaleyendadeaquel supuesto ermitaño, ya que,segúnarriba se dijo, en la narración más antigua,que seconservaba en el Archivo, nohabíatalesnombres.Finalmente, en1090

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GUÍAHISTÓRICO-DESCRIPTIVA

fuó cedida esta capilla al Monasterio, y desde entonces corrió el culto á cargo de losmonjes; hastae l consabidotiempodela invasión napoleónica,enque fué destruída por lastro.

1. Capilla de San Miguel,-2. A los miradores.-3. Mirado-' res de San Miguel. —4. Balsa.-5. Primer camino á la Santa Cueva y á las cuevas de Collbató. -6. A las ermitas (camino de herradura). 7. ACollbató. -8. Al Santuario.

pasespañolas para que no se hicieran fuertes en ella las francesas. Lo peor es que,, sin saberse cómo, ni cuándo, la Imagen del invicto caudillo de los ejércitos celestiales fué destrozada y echada entre las malezas, donde la hallaron en 1861, con motivode un incendio '

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bE MdN7's E Rtiiti

dela montaña. La actualcapillafué construída pôr diligencia delRdmo.P.Miguel Muntadas, ' quelabendijo el 29 deSeptiembrede 187. 0, desdecuyafecha todos.losañosse - :celebraen dicho díaunaMisasolemne,cantada-Poila Escolanía.

Junto á la capillasealzauna cruz de piëdra con su graderíapoligonal, donde muchos des ensusexcursiones. ¡Lás--cansdeliomt tima - grande que tanto éstacomolasparedes de iacapilla e tén tanmalparadas. porelpésimo' gûsto que á'tantos ha invádidò, de querer eternizar sú nombre destrozándolo tódo!

Bajandodé'lac apilla, á, poçospasos, A. mano derecha hay-unexcelentemirador.en el ángulo saliente _Cdelamontaña,sobreunprecipicio de 200 mete os y álaaltura. de 781 ycae sobrela `capilladelaSanta Cueva • de la- Virgen. Pocos hay que .dejende ir -disfrúta.r del extenso yhermosopanorama quésepresenta álavista desdelos Pirineosaragoneseshasta el Mediterráneo.

Vueltos al Monasterio y tomando lacarretera_queparte dela Fuente del Portal para Monistrol-,despuésdepasados los edificios yhuertos,sehallaá manoderecha,sobrelaroca-que atraviesa el túneldel ferrocarril, la - - -

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GUÍA EISTÓRICO-DESCRIPTIVA

Capilla de los Santos Apóstoles (1) La primitiva fundación data del siglo xvi, en que cierto devoto Sacerdote quiso levantar este piadoso monumento en honor del Sagrado Colegio Apostólico. En 1811 sufrió la suerte común de los edificios de Montserrat, y estuvo destruída hasta el año 1858, en que fué restaurada con las limosnas de personas devotas, siendo bendecida el 21 de Diciembre de dicho año. Púsose en ella un pequeño retablo, que se conservaba de la antigua iglesia derruída en 1755. Con las últimas obras llevadas á cabo en Montserrat habían ido amontonando allí cerca tanta tierra, que apenas se descubría la capilla, por otra parte bastante mezquina, por lo cual fué derribada en 1906 y se levantó la actual, aprovechando las mismas paredes laterales de la anterior, siendo bendecida en 28 de Octubre de 1907.

El altar y el retablo fueron construídos en este Monasterio, el cuadro central es debido al pincel del Rdo. P. Lesmes López, monje del mismo, y el decorado corrió á cargo del señor Morell, de Manresa.

(1) Paradirigirseálaparte NE.del Santuario, no esnecesaria salirporla puertaprincipal,puédese tomarelcaminoque,pasandoporellado interior delaBasílica, se toma en elclaustro á manoizquierda,junto ála puerta deltemplo.

MONTSERRAT. --CAPILLAS DE LOS SANTOS ACISCLO Y VICTORIA Y DE LOS SANTOS APÓSTOLES

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GUÍA HISTÓRICO-DESCRIPTIVA

Alrededor de la capilla se ha arreglado un ''pequeño jardín, que embellece el lugar y es otro ,, de tantos lugares de que puede aprovecharse el público para su esparcimiento y recreación.

A la parte opuesta de la ermita de los Apóstoles, atravesando la carretera y tomando el camino de la izquierda, que sube hacia el Monasterio, se halla la

Capillade San Acisclo y Santa Victoria insignesmártires cordobeses, deltiempodel impíoDiocleciano. Es lamás antiguade la montaña,ydicenqueen ellafué depositada • provisionalmente la SantaImagen, loque no • -tienenada deextraño, hallándose tanpróxima allugar donde se hizo inmóvil, significando :María el deseodequedarse enMontserrat.Con eltiempo quedó dicha capilla bastante mal pa,rada, hasta que por los años1274la restauró la piedaddeciertos caballerosporsobrenombre Olivares,quela dotaron al mismo tiempo con mil librasbarcelonesaspara que se celebrara perpétuamente una Misa el día dela fiestade losSantos titulares; hubo aquí en algún tiempo elhospital paralosperegrinos(siglosxv y xvi) y posteriormente el cementeriopúblico.

En lafunesta época, que forzosamentehemos de repetir, fué mirada esta capillacomopunto estratégico, y por tanto fué profanada sincom-

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DEMONTSERRAT

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pasión y destinada para depósito de municiones. En 1.° de Diciembre de 1858 fué devuelta al cuto, cantándose Misa solemne con ministros por la Escolanía, costumbre que se ha venido guardando hasta la fecha, habiéndose trasladado la fiesta de los titulares' á ese día, por razón de coincidir en 17 de Noviembre la de "Santa Gertrudis la Magna, insigne Santa de la Orden benedictina. Sin embargo, en este día, desde las dos de la tarde del anterior, se puede visitar para ganar indulgencia plenaria, rezando en ella por las intenciones del Sumo Pontífice y cumpliendo las demás condiciones acostumbradas.

El altar de esta capilla es otro de los objetos pertenecientes á la antigua iglesia de Nuestra Señora, restaurado por D. Benito Cabanes, de Manresa.El cuadro de los santos mártires fué pintado por D. José Texidor, de Barcelona. Al lado de la capilla hay un pequeño paseo, de cipreses y boj, que termina en una plazoleta semicircular, cerrada con una baranda y rodeada de asientos: es el célebre lugar conocido de `muy antiguo con el nombre de balcón de los monjes,por ser éste y el camino de los Degotalls,antes de la invasión francesa, el lugar de esparcimiento de los religiosos durante la recreación, pues entonces el Monasterio carecía de huerto interior. Es uno de los puntos más agradables de Montserrat,y, por tanto, rara '

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

vez falta gente durante latemporada de con currencia. Colocadoenestebalcón,parece que uno está dominandola tierra, pues ve á sus pies todo cuanto puede alcanzar la vista más perspicaz, desde elnortealoriente ymediodía, esdecir, casitodoslos Pirineos, lacúspidedel Montseny, San Lorenzoygrannúmero de po blaciones, sobre todo en las riberas del Llobregat hasta que éstedesembocaen elmar.

No es menos graciosoloque sucedeeninvierno, con hartafrecuencia. Echada la niebla porlos bajos,aparece todala tierra cubierta como porinmensomar de espuma,sobresaliendo saloMontserratcon algúnqueotromonte lejano, cual pequeños islotes en medio del Océano.

Espectáculo grandioso,del cualesimposible formarse idea sin haberlo presenciado.

En laparteopuestadela capillade San Aciscloestán lasgrandes cisternas, que en elpaís llamansafreig.Lasdosmayores caen dentro delaclausura,lamenor está á laparte defue puedeversubiendoporla escalera que-rayse hay al efecto,y estambién unexcelente balcóndondeespaciar lavista ácuanto alcanzar sepuede.Este depósito fué construído á fines del sigloxvir, yle decoran variasimágenesde santos,alguna yadeteriorada, y parecenser lasde SanBenito,Santa Gertrudis, San Plácido y SanPablo,construídas porel Hermano Fr. José de San Benito,másconocidovulgar-

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DE MONTSERRAT

mente con el nombre de venerable Fr. Joseph de les Llanties. En 1749 se hizo el acueducto de piedra por la parte de los Degotalls,que conduce las aguas >..1! que promanan, según se cree, desde el llano de la ermita de la Trinidad.

Al pie de esta cisterna comienza el camino de los Degotalls,el paseo más cómodo y encantador que tiene Montse r r a t; por eso durante el verano, al caer de la tarde, es muy frecuentado. Tiene algo más de un kilómetro de largo, con magnífica perspectivahacia elnorte y oriente; termina en una pequeña f plazoleta, donde hay cavadas en la • roca unas diminutas cuevas por las que se filtra riquísima aguapotable: de ahíle viene el nombré de Degotalls. :..

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1. Capilla de Santa Cecilia.-2. Fuente de Santa Cecilia (restaurant).- 3. Fuente de la Teula(sus aguas son conducidas al Monasterio).-4. Fuente del Moro.-5. Fuente delesCoves. 6. Castillo Marro.-7. Fuente dels Monjos. -8.Fuentedel Dent - 9, 9. Carretera de Santa Cecilia y casa Massana -10. Alfarería.-il. Carretera de la Calsinayá San Cristófol.-12. Camino de explotación del bosque de la Calsina.-13. Camino á Marganell. -14 A casaMartorell. -15. Cruce de los caminos deMarganelly de la fuentedel Moro.-16. Unión de los caminos deMarganellyde casaMartorell. -17. Camino á la fuente delesCovesen su empalme con el deMarganell. -18, 18 Carretera de Monistrol áMontserrat. -19.LaCerdanya:caminos que bajan de la carretera de Santa Cecilia á la Fuente dels Monjos yá la carretera de la Calsina.-20. Camino de las fuentesdel Moro, delesCoves,Marganell,etc.-21. Canal de San Jerónimo.-22. A la fuente delLlum. - 23. Vuelta de la Fuentedel Moro á la carretera de Santa Cecilia.-24. Mirador de Santa Cecilia.- 25. Camino á la Santísima Trinidad y Santa Ana(Tebaida).

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Lasermitas

OCASde

las personas, á las cuales no les impide la edad, la salud, ú otro in_ conveniente, dejan de subir á alguno de los lugares de la montaña de Montserrat, en otro tiempo consagrados al culto divino y morada de santos religiosos que, bien probados en el Monasterio, sintiéndose capaces de luchar á solas con el enemigo común, se retiraban á la soledad, según lo permite la Santa Regla del Patriarca de los monjes de Occidente. Aunque ya pasaron aquellos tiempos dichosos con trazas de no volver jamás, su recuerdo será siempre grato y edificante; por eso les dedicaremos un capitulo aparte, para satisfacer al mismo tiempo la justa curiosidad

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GUÍAHISTÓRICO-DESCRIPTIVA

del peregrino, cuando visite las ruinas que dejó á su paso la mal llamada civilización moderna.

La institución de los ermitaños de Montserrat se pierde. en la oscuridad de los tiempos y pudo dar ocasión á ello la ruina de algún Monasterio en la invasión árabe, como quieren algunos, ó bien la razón apuntada de permitirlo la Regla de San Benito y ser tan á propósito para esta clase de vida esta montaña. En este último caso pudieron pertenecer á uno de los dos monasterios enclavados en ella, Santa Cecilia, ó Ntra. Sra. de Montserrat, teniendo más probabilidad este segundo , pues hallamos que en 1330 ya prestaron obediencia al Prior administrador, que lo era el Infante de Aragón, D. Juan, Arzobispo de Tarragona. Desde esta fecha la institución eremítica fué progresando hasta recibir su complemento con la reforma del V. P. García de Cisneros, que les dió nuevo Reglamento fijo y estable sobre la Regla de San Benito, la cual ya profesaban, haciendo desde entonces voto especial de estabilidad é inclusión perpétua en la montaña, á diferencia de los cenobitas, que sólo la hacían para el monasterio. Eran, pues, verdaderos monjes benedictinos, generalmente no Sacerdotes, á lo menos por la profesión, pero á veces no faltaron entre ellos hombres eminentes y hasta Abades del Monasterio y Generales de la Congregación .

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de Valladolid, y aun Obispos, que deseando reposo y quietud, ó bien prepararse santamente para la muerte y lo que después de ella sigue, el severo juicio de Dios, se entregaban á la oración y penitencia en alguna de las ermitas.

Aunque los ermitaños eran miembros de la Comunidad de Montserrat, no tenían voz, ni voto, en los asuntos del Monasterio y ocupaban lugar inferior á los cenobitas, pero antes que los Hermanos legos; éstos no podían ascender á ermitaños sin el consentimiento de la Comunidad y licencia del Capítulo general ó Abad general, y dispensa pontificia. Por eso apenas hallamos ejemplares: sólo conocemos uno en el siglo xvilr, el Hermano Diego de Montsera,qulbvcondiftaypr gracia especial, como ya se lo había predicho el Vble. H. José de San Benito.

Antes de ser enviados á las ermitas eran estos religiosos bien probados en el Monasterio, no sólo con un noviciado más riguroso y prolongado que los Cenobitas, y durante el cual se les enseñaban los deberes de la vida que habían abrazado, y deseaban emprender, sano también después de hecha la profesión, porque á veces por no haber todavía ermita desocupada, ó por otras razones particulares, eran detenidos en el Monasterio, donde se les ejercitaba en la oración y mortificación y también en obras de humildad y caridad. .

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GUI). IiISTÓRICQ •DESCRIPTIVA

Cuando, pues, sucedía la vacante de alguna ermita y el Abad juzgaba que los pretendientes eran aptos para emprender este género de _vida, les señalaba la que habían de ocupar, dando generalmente las más apartadas á los jóvenes y trasladando los ancianos á las cercanas al Monasterio. Colocado en su ermita, tenía distribuídas todas las horas del día y de la noche entre la oración, lección, penitencia y labor de manos para evitar la ociosidad, enemiga del alma é impedimento grandísimo de la perfección.

Todo el año se levantaban á Maitines á las dos después de media noche, y cada uno tocaba la campana del oratorio, pero por orden, de modo que se respondían unos á otros; así que, si alguno no respondía á la señal, el más cercano, en amaneciendo, debía llegarse á su ermita para saber la causa y avisar al P. Vicario. Las demás horas las tenían también repartidas de modo que con la Comunidad de Cenobitas y los niños Escolanes resultaba en Montserrat una no interrumpida serie de alabanzas, ó sea elLaus perennis, tan celebrado en los monasterios de Oriente y algunos de Occidente en los tiempos antiguos.

Mientras estaban en las ermitas estos religiosos guardaban en la comida exactamente la Regla de San Benito, y estábales tan rigurosamente prohibido el uso de la carne, que no era

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permitido áninguna persona, ni siquiera aderezarla en lasermitas,ni comerla allí. Ayunabancomolos monjes,desdela fiestadela Santa Cruz deSeptiembrehastaPascuatodoslos días;desdePascuadeResurrección hasta Pentecostés,todoslos viernes, y desdePentecostés hastael14 deSeptiembre, los miércoles y viernes. Ellos mismos seaderezaban la . comida;las provisionesquepudieran faltarlesselas subían una ó dosvecespor semana desde el Monasterio.

Conguardarungénero de vidatanáspero y penitente, por loregularllegabaná una respetableancianidad,noescaseandoentreellos muchosdeochenta años, pasando mayor parte delossetenta, y gozando siemprede saludrobustaconesta vida metódica y tranquila., Estaban siempresolos,sin permitírseles hablar, ni juntarse entresí, ni con los peregrinos, ni tampococriaranimalesporutilidadó recreación.EncambiolaProvidenciales proporcionaba decompañerosá los pajarillos queanidaban en los bosques y á veces en la misma ermita, yconsusdulcestrinosles convidaban álevantarel corazónáDiosy cantarlasdivinasalabanzas.Losdíasde oirMisay todoslos juevesse- reunían en la ermita principal, que eralade Santa Ana, donde se confesabany recibían lasagradaComuniónyademássalu-

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•GUIA HISTÓRICO- DESCRIPTIVA

dables consejos del Padre Vicario para continuar y progresar en la vida espiritual. En ciertos días cantaban las vigilias y Misas de difuntos por los miembros de la Comunidad que habían fallecido, y hacían también sus procesiones, llegando hasta la vista del Monasterio en una lengua de peñas que sobresale en el camino que va á la ermita:de San Benito (Fig. pag. 157 n.° 10), donde cantaban la Salve á la Virgen de Montserrat, y luego se volvían á la iglesia de donde habían salido y después á su respecti v a ermita siempre en silencio y recogimiento. También se les permitía bajar todos juntoial Monasterio en los días más solemnes de la Iglesia, como las Pascuas, las fiestas principales de Nuestra Señora y de San Benito. Para esto salían de las ermitas antes de amanecer, en llegando al Monasterio se incorporaban con la Comunidad en los actos conventuales, y terminados los divinos Oficios, por la tarde, se volvían en silencio á sus ermitas.

Varios caminos hay para subir á visitar estos santos lugares, hoy completamente destruídos y desiertos. El más cómodo es el de San Miguel, que comienza á pocos minutos de dicha ermita, y es el que comúnmente se sigue hoy día. Mas los ermitaños tomaban el que sube desde la fuente del Portal por el torrente de Santa María, el cual es muy fragoso y de difícil subida, en especial para personas delica-

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das. Los ancianos y achacosos no _tienen que probarlo, porque se exponen á queda_rse ámedio camino. A grandes trechos los escalones están abiertos en la piedra viva, y antiguamente, á. juzgar por los agujeros, había baranda que ayudaría no poco, evitando el peligro de caer ó rodar peñas abajo. Hoy ha sido restituida en algunos puntos, si bien la falta de educación en gran parte del público es la causa principal de 'que resulten inútiles los sacrificios hechos para la comodidad del peregrino.

Así requiere algún cuidado, siendo imposible de todo punto ir por él con caballería, que en ciertos parajes, por más que lo hayan probado, no puede pasar de ningún modo, como sucede en lo que denominan «Estrecho de Gibraltar» que apenas deja paso para una persona, además de estar muy pendiente.

Poco después del sobredicho estrecho se hallan las ruínas de la que fué

Ermita de Santa Ana que distaba del Monasterio como un cuarto de legua. Antiguamente ocupó otro lugar no muy distante de las ruínas que hoy se ven, y fué trasladada y edificada en 1498 á expensas de la Infanta Doña Juana de Aragón, hija del Rey católico y esposa del Condestable de Castilla D. Bernardino de Velasco. h1

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

1. Santa Ana.-2. San Benito.-3. San Salvador. 4. Santísima Trinidad.-5 Santa Cruz.-6. San Dimas (capilla).-7. Ermita del Diablo (paso peligrosísimo).-8 Antigua escaladreta (cerrada y peligrosísima) —ii. Estretde Gibraltar. -10. A la Fuente del Portal.-11. De Santa Ana á Santa Cruz.-12. A San Benito, Santísima Trinidad y Santa Cecilia.-13 Continuación del anterior, y á Santa Cecilia.-14 De San Salvador á San Antonio (paso delsftautats).-15. Pla delsaucells y camino deles artigues áCollbató. -16.Pia delsescorsóns.-17. CaminodelPont(desdeCollbató á San Jerónimo).-18. Camino del Pla delsaucellsalsjlautats.---19. Camino de herradura á San Jerónimo —20 San Antonio.-21. Cavall Bernat. -22.A las ermitas deTebas.

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Enesta ermita, que era como elcentro de todaslas demásdela montaña, yparroquiade los ermitaños, vivía el PadreVicario, monje del Monasterio, el cualcomo delegado delPadreAbad, cuidabadela observanciadelavida eremítica, socorríaálosPadresermitaños en loquehubieran menesteryles administraba losSacramentos, etc. Por estas razones laermita de Santa Ana era un pocomás acomodada quelas otras,ysu capillaalgo másespaciosa con sucoro detrece sillasparalos ermitaños, yademássereservaba el SantísimoSacramentoen ella.De este modo semantuvocomoiglesia parroquial delasermitas hastalainfausta invasiónfrancesa que el25 de Julio de 1811 arruinó las ermitas ydispersóálos ermitaños, algunosdelos cuales fueron bárbaramente asesinadosporaquellasvalientes tropas.

Hechas las pacesentreespañolesy franceses,loscinco Padresermitaños, quesobrevivieronálacatástrofe,fueroncolocadosen otras tantas ermitas, tocando á uno de ellosesta de Santa Ana, ála cual venía del Monasterio el Vicario en días determinados, ó cuandoera menester,y de este modo prosiguió hasta 1822 enque definitivamente seabandonó lavida eremítica porrazonesqueapuntaremos en su lugar. Esta fué laruína final de esossantos lugares.

Desdelaermita de Santa Ana se dirigían los

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GUfA HISTÓRICO- DESCRIPTIVA

peregrinos á visitar los tresgrupos de ermitas designados con los nombres de «Tebaida», «Tebas» y «Tabor», querecuerdan losdelos antiguos solitarios de Egipto y Palestina. Al primergrupollamado«Tebaida», que eran las dela derecha del torrente de Santa María,pertenecieron las ermitas deSanBenito,San Salvador, la Santísima Trinidad, SantaCruzy San Dimas. Al segundo, Ó sea «Tebas »,pertenecían lasdela izquierda, esto es,Santiago, SantaMagdalena, SanOnofre,SanJuan Bautista y SantaCatalinay finalmente al tercero lasdos más altas,San Antonio y SamaJerónimo.Iremos dandocuentadeellas, haciendo una corta resefia,aunque yanoexistensino sus ruínas, excepto algunaqueotra capilla levantada cerca delos antiguossolares quehoy tienenharto diverso destino.

Para visitarelgrupo deloque denominamos laTebaidase ha de tomarun sendero,que se hallaá manoderecha, poco antes de llegarálas ruínas de Santa Ana (Fig. pág. 146, n.° 12). A ciento sesentametros de distancia de éstasse halla ellugar desde donde se divisa elMonasterioy sereunían los ermitaños para cantar la Salve áNuestra Señorade Montserrat. Siguiendoestecamino(quehoyno es deaconsejar portener algunos resbaladeros ypasos peligrosos)seiríaálasermitas de SantaCruz y San Dimas, peroespreferibletomarelea-

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mino que sehallaá manoizquierday comienza ásubir la

Ermita de San Benito que dista 288 metros delsitio indicado y por estar situada enlugar elevado, se divisanperfectamentesus ruínas, y es fácil darcon ellas.

Esta ermita era delasmás modernas y acomodadas por estarenlugarapacible al Mediodía y preservada delos vientos fríos delNorte por losenormespeñascosá que sehallabaadherida.Fué construídaen1536 porel Abad Pedro de Burgos,primerode estenombre,para comodidaddelosperegrinos que, deseandoganar lasindulgencias delasestaciones que estabanconcedidas visitando cinco ermitas, no sehallaban con fuerzaspara subir álade San Salvador.Teníaesta ermita una capilladedicada á Santa Escolástica, en cuyo día (10 de Febrero) sereunían aquí los Padresermitaños porrazónde que nopodían hacerlo el día del titular (SanBenito)por ser solemnísimo, en quebajabaná celebrar la fiesta del Santo Patriarcaconsushermanos los Cenobitas de Montserrat.

Entrelosilustresvaronesquesantificaron esta ermita, secuenta el venerable P.BartoloméGarriga, que en1562mandó hacer el retablodela capilla, en el cual (según dicen)esta-

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GUÍA HISTÕRICO-DESCRIPT1VA

ba retratado en la persona de San Benito. Murió en lade San Dimas, llenode méritos,el16 de Agosto de 1578. Asimismoseretiróá esta ermitaelP. Antonio Jutge,otrodelosAbades de Montserrat (1610-13). Destruídaen1811, fué denuevohabitada hasta 1822.

Siguiendo el camino ála derecha,ósealiaciaelOriente, se bifurca álos pocos pasos, y eldela izquierda sube ála

Ermita de San Salvador Estaba en mediode unas gigantescas moles, comonidodeáguilas,ócastilloroquero, para lo cual con dificultad sehallaría otro más á propósitoentodala montaña. Antiguamente se podíasubir ácaballohastala puertadela ermita, mas hoysesube fatigosamente entre las zarzas ymatorralesquehanbrotado por todas partes y obstruyen con frecuencia, aunqueno absolutamente,el camino, el cual en algunaspartes conserva el antiguo empedrado.

Ademásdela Capilla propiadedicada á la Transfiguración del Señor, porloque se denominaba laermita de San Salvador, tenía otrajunto álaroca quele servíade cúpula, de más de 80 metros de elevación, y estaba dedicadaalSantoNacimiento, porloque enrelacionesantiguashemos visto que esta ermita fuéconocida, entreel pueblo, , bajo el

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título de San José.Databaporlomenos del_ sigloxüi,puesse sabe quemurió en ella despuésde 45añosde vidaanacorética, el ermitañoBertrando (1272); después,áprincipios del siglo siguiente, la ocupó 27años elermitañoDurando Mayol, quefalleció en 1338.

Fué habitadapacíficamentehasta que las tropas francesas hicieron huir álos ermitaños, matandobárbaramenteá dos quealcanzaron aquícerca.Pasada tanfunesta época,volvióá restaurarse yduró lavidaeremíticahastael año1822,enque seretirarondefinitivamente los ermitaños, ydespués el tiempo ylasmanos desoladoras, que secomplacían en hacer rodar las piedras, hanacabado hasta consus paredes.

A espaldas delaermita, entrelasrocas,llamadaslosflautats,pasa el caminoqueconduce álade San Antonio,la cualdista más de un kilómetro; pero hay otro camino mejor queéste paravisitarla. Así, pues, bajando de San Salvador porel caminoque se ha subido, encinco minutos se halla con elque, desde San Benito, conduceála

Santísima Trinidad.

Se hallaba esta ermita situada en una especie de llanura con hermosa vista y resguardada de los vientos del Norte por enormes peñascos, junto á los cuales la fundó en 1625

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el Abad Beda Pí, pues anteriormente estaba cien pasos más lejos. La capilla la hizo el Abad Jaime Martí (1645-49). Abandonada esta ermita en 1811, volvieron á ella los PP. Ermitaños que vivieron pacíficamente hasta el mes de Abril de 1822, en que el P.' Gaspar Soler (alias P. Jordi) fué bárbaramente asesinado y arrojado en la cisterna, donde le hallaron después de tres días el 27 de dicho mes. Nunca se pudo averiguar el móvil de tan horroroso crimen; los presuntos reos fueron condenados á presidio por los tribunales de Manresa, de donde era natural el dicho Padre. Después de este triste acaecimiento, no viendo seguridad en la vida eremítica de la montaña, se juzgó prudente retirar de ella á los demás ermitaños, y de este modo terminó tan santo género de vida, después de tantos siglos que, al decir de las gentes, no disfrutaron de tanta libertad ni civilización.

La ermita de la Santísima Trinidad fué muy antigua y tuvo insignes sujetos; el que más la dió á conocer fué el P. Bernardo Boil, el cual, habiendo estado en ella diez años, salió para llevar el Evangelio á las Indias en el segundo viaje de Cristóbal Colón (1493). Estuvo allá poco tiempo, pues la falta de salud y sobre todo los disgustos que tuvo con el Almirante, de lo que tratan largamente los historiadores, le movieron á volverse, á España. El Rey Cató•

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lico le dió la Abadía de San Miguel de Cuál:, en el Rosellón, cuya dignidad tenía en 1505 cuando acompañó al Archiduque Felipe el Hermoso, al pasar éste por la corte de Francia. Murió el P. Boil en dicho Monasterio el 13 de Febrero de 1520.

Bajando de la Santísima Trinidad, hacia el valle que tiene al mediodía, se da con el sendero que conduce á la ermita de la Santa Cruz, distante de elle unos 350 metros. Llamóse Cambien esta ermita de Santa Elena, y estaba junto á una roca que se halla á mano derecha, dejando paso estrecho parair la de San Dimas. Era la más cercana al Monasterio, desde el cual subían por laescala dreta, llamada así por estar casi perpendicular en el rincón que hay junto á la gran mole, sobre la cual está lo que el vulgo ignorante ha dado en bautizar con el nombre de ermitaócastillo del diablo, que no es otra cosa sino restos de atalaya, ó castillo del siglo XIII. Cuatrocientos años posterior á la mal pergeñada historia de Garín!

La ermita de la Santa Cruz estaba resguardada de los vientos y en sitio el más apacible: por eso se reservaba para las ermitaños más ancianos, aunque hubo alguna excepción, pues hallamos pasó en ella 63 años el venerable P. Benito de Aragón, que murió en olorde santidad el 17 de Febrero de 1516.

Fué destruída á mediados de Mayo de 1811

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GUIA HISTÓI$ICO-DtSCRIPTIVA

porlastropasespañolas,para evitar quelas francesas seapoderasen deellay desde aqui molestasenála guarniciónqueenmala hora sesituó en el Monasterio, nohabiendoconseguido nadacon plan tan descabellado. Novolvióálevantarseesta ermita, quedando sólode ella, aligual queen casitodaslasrestantes, la cisterna dondeaunserecoge elagua que baja dela peña cuando llueve, por estarlos conductos labrados en la roca viva.

A distancia .depocomás decienmetros, siguiendohacia elOriente, sehalla la antigua ermita de

San Dimas.

En tiempos antiguosfuécastillo,ydespués guarida de gentefacinerosa,porloque,aldestinarlamás tarde para ermita, se ladiócon propiedad laadvocación de San Dimas. Gozabadehermosavistacasi entodasdirecciones ásu alrededor, pero sobre todo por Este y Sur desdelos Pirineoshastaelmar.En la invasión de 1811 fué convertida- otravezen castillo, sentando enmala hora susreales elgeneral inglésGreen,quienpronto se vió atacado por losfranceses,teniendoqueentregarseá discreción, mientras sugente seescapaba, arrojándosetemerariamente por aquellos derrumbaderosquecaensobre San AciscloŸ el caminodelosDegotails.

DR M ONTSERRAT

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Restablecióse otra vez" la vida eremítica, que duró hasta 1822, en que fué abandonada definitivamente por razón del suceso de la Santísima Trinidad. Cuando ya no quedaban más que algunas paredes casi desmoronadas, una señora francesa costeó la pequeña capilla bizantina que hay actualmente, yfuébendecidaen 4 Nbre. de 1893.

Junto al muro de esta ermita, en uno de los huertecitos de la parte opuesta, o c u r r i en 1811 un triste y trágico suceso.

Habían depositado los monjes en aquellas espesuras la imagen de Nuestra Señora de Montserrat. Andaban los soldados franceses en sus correrías por la montaña, cuando toparon casualmente con la Santa Imagen dos de ellos. Concibieron los nuevos iconoclastas el sacrílego proyecto de ahorcarla, y al efecto le echaron la soga al cuello. Uno de ellos subió á una de las encinas que habían escogido á propósito de su malha-

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

dado intento, para tirar delasoga,mientras el otro ayudaba ásostener laSanta Imagen. Apenascomenzó lamalditamaniobra, cuando el de arribacayó exánime. Aterradoel otro, vol la imagenásulugar y se fué á Tarragona,-vió donderefirió elcaso, dando facultadparapublicarlo.

Entrelasermitas de San Dimas y Santa Cruz, en el estrecho desde - elcualsedivisan los edificiosde Montserrat, está la llamadaescala dreta(escal-eraderecha)queyahemos mencionado; fué hecha con grandetrabajo en1499 porel Abad Cisneros,yconstabade 900 escalonesabiertos en su mayor parteen la piedra; losrestantessondeladrillo. Tenía paramayor comodidad unabarandaáloslados, de modo quepodíansubirsin peligro aun los ancianos ypersonasdelicadas; y consta que lo hizouna Reina,en memoriadelo cualhasta estos últimosañosseconservaba en el recodojuntoal caminode San Dimas el asientode adobe donde sedecía descansó S. M. Católica.Hoyes difícil este paso, que,además, está cerrado con reja yllaveámedio camino; como porotra partecaedentro delaclausuradel Monasterio, solamente losreligiososalgunavezal año pasanporél.

Así, pues,para volver á Santa Ana es necesariotomar uno de doscaminos:óelqueva costeandocasiá vistadel Monasterio (el cual

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1. San Dimas (capilla).-2. Santa Cruz.-3. Escaladreta.-4. Desde Santa Cruz á Santa Ana.-5. De Santa Ana á Santa Cecilia.— 6. Santísima Trinidad.—'7. De Santa Cruz áSanSalvador.— 8. A la Santísima Trinidad.— 9. A San Benito. — 10. Lugar á donde acudían desde Santa Ana procesionalmente los ermitaños en determinados días, para cantar la Salve.11. Atajo desde el Monasterio á Santa Ana.-12. Estretde Qibraltar.-13.San Benito.-14. Santa Ana.-15. San Salvador.16. Los Flautats y camino de San Salvador á San Jerónimo.17. CaballBernat-18:Pla delsescursons.19. DelPla delsAucellsálos Flautats —20.Pla delsAucells.-21.Camino deles Artigues. -22. De San Benito alPla delsAucells.-23. De Santa Ana alPla delsAucells.-24.De Santa Ana al camino de herradura.-25. Camino de herradura áSan Jerónimo.-26. Trencabarrals.27. Escala de Jacob. -28. San Jaime.-29. A San Juan.

—30. Atajo de San Jaime.-31. Camino de San Jaime.-32.Pla de les tarantules.-33. Torrent. dels avellaners.

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noaconsejamos porhaber algunos trechos algo peligrosos),óelquesube hacia la Trinidad.

Ambos sedividencerca delas ruinasdela ermita de Santa Cruz; eldela derecha va subiendo pocoápocohasta darcon eldela Trinidad á SanBenito,ysin llegarálasruínas de esta últimaconduceá Santa Ana. Si se continúaporel caminoque nos ha conducido ála.

Norte, se da la SantísimTrd,hcel vueltaálos peñascos dels Flautats,ypasando pordebajo del Caball Bernat, llegaseálabatería delHospitalet(ruínas), yen pocomás de una hora sebajacómoda y deliciosamente á la carreterade Casa Massana,muycerca de Santa Cecilia: es un camino lleno de deliciosos panoramas y nada pesado.

Lasegundaexcursión, que sepuede hacer desdelasruínas delaermita de Santa Ana, es lavisitaalgrupo deloquellamaron elTabor, por serlaparte más alta dela montaña, y comprende lasermitas de San Antonio y San Jerónimo. Generalmente hoy la hacen partiendodel Monasterio, en caballería, dandola vueltapor San Miguel, y subiendoporel llano delesbruixesó delestarántules, sellegaála serra llarga que, sibienesel caminobastante largo,sinembargo esmuchomás cómodo. Con éstese juntael atajode Santa Ana, como á un kilómetrode distancia,en el valleque forma eltorrente de Santa María, en el punto llamado

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pládelsaucells .Otro kilómetro más adelante se halla primero el plddelsescorçons,y después las balsas de San Antonio, y á la derecha, el camino que conduce á la que fué

Ermita de San Antonio, dela cual sólo quedan porrecuerdo las ruínas y una cisterna. Apocomás dela mitadde este caminosehalla,á manoderecha, otro que se dirige directamente por encima de este cerro á lospiesdelCaball Bernat (izquierda) y álas ermitas de San Salvador, Trinidadydemásde laTebaida(derecha).

Laermita de San Antonio fué de lasmás antiguasde Montserrat y habíasido reconstruída en1498.Su posicióneramuy agradableaunque enlugar azotado por . los vientos, pero al abrigo delos delnorte, queson losmás fríos.

En lomás alto tieneunamirandadeliciosísima, ála cualsesubepor escalones abiertosá picoen la peña: hoy apenas seconocen,por esosehace muy dificultosa yaun peligrosa la subida, máxime si unofija lavistaenel horrible precipicioque se abreallí mismo,y es de losmás espantosos de la montaña., de modo queeriza los cabellos del másvaliente con sólo acercarseáél.

Delos muchos santosermitañosque habitaron esta ermita, mereceu especial mención el

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Desdeentonces tuvo siempremoradores, colocandoen ella almásjovendelosermitafios, el cualásuvez erareemplazadoá medida que otros abrazaban la vidaeremítica, siendotrasladado áotrasmás próximas á Santa Ana. De los muchos quepasaronporellaconservamos el nombre del P. José Miret, de Barcelona, el cualanteshabíasido escolán y obtuvo la graciadelsanto hábito el24 deMayode 1648, y la ocupaba ya en 1650.

Esta ermita eralaquetenía mejor vista de todas,puesnosólose domina desde ellatoda Cataluña, sinotambiénparte deAragóny Valencia y hasta elas Baleares, por supuesto en díasclaros, que á tanta altura no abundan, pues con frecuenciasehallarodeada delas nieblas,yotras muchas veces seveelevada sobreellas cuando seextiendenporlos bajos foi mando como un inmenso mar.

Noestaba, sinembargo, elsolar delaermitaen lomás alto de la montaña;era y es preciso subir por uncortotrayectode 280 metros hastallegarálacima, donde más recientementesehabíaedificadoun oratorio,quedenominaban«SantaMaría lamés alta» óel«Tabor»,en memoria delmonte donde se transfiguróelDivino Redentor, por la semejanzaque ofrece con aquel.Manosdestructorasarruinaronestacapillita, que sehabíasalvado de la devastación general de Montserrat, y todo esto 12

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sóloporel gustode oir comocaían las piedras en losabismos que la circundan.Desde entoncesfué peligrosísimo este lugar, de modo que ha sido preciso colocarallí un pequeño mirador,rodeado defuerte baranda dehierroá modo debalcón,desdeel cual puede el viajero, en díasserenos contemplar elmundo á sus pies, formando las poblaciones ycaseríosdelos alrededores un cuadro indescriptible.

Enlugar de la antiguaermita destruída en1811,hayuna fonda dondepuedentomaralguna refección los viajeros.

La capillade SanJerónimose ha trasladado alcentrodel valle, en el mismo punto donde empieza eltorrente de SantaMaría,y fué bendecida el10 deMarzode 1891.

A mano derechadelaactualcapilla hay otro torrente, por el cualsepuede bajar enmedia hora hastala fuentede Santa Cecilia. Sinembargo,laempresa no es para todos, pues elcamino presenta algún malpaso. Así, pues, lo me-

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jor y más seguro es volverseporel mismo camino ybajarporelde Santa Ana, si se quiere,ó esnecesario ganar tiempo, deotromodo es más cómodo volver al Monasterioporla hartede San Miguel, queenhora y mediacreemosse puede hacer sin grávemolestia ni cansancio.

Estemismo camino sepuedetomar para visitarelgrupo de ermitas que denominanTebas,ycomprendía lasde SantaMagdalena, Santiago, San Onofre,SanJuany Santa Catalina.Si se parte de Santa Ana, como se hacía' en los tiempos antiguos,sepuedevisitar primeramente laermita de

Santa Magdalena.

El camino que conduce á ella ha sido restaurado y se sube por la escala de Jacob, á cuyos pies hay un rico manantial, el más elevado de la montaña. Si se va por el de San Miguel, ha de seguirse por el de San Jerónimo hasta hallar el que pasa de Santa Ana á Santiago, es decir, ocho ó diez minutos después de haber dejado el que va á San Juan. (Figura página 164). Al cruce de estos caminos se sube á mano derecha yendo á buscar el estrecho que hay entre la roca de Santiago y las inmediatas.

Enseguida se hallará un sendero que sube muy perpendicularmente con 91 peldaños, llamado «Escala de Jacob». Poco después, en la cima,

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>2 1. Santa Ana —2. San Jaime.-3. San Onofre.-4. San Juan (restaurant). —5. Santa Catalina. —6. San Juan (capilla).7. Santa Magdalena.-8. Mirador de Santa Magdalena (ermita antigua'.-9. Mirador de San Juan. -10. Paso de trencabarrt ls, en el camino de herradura á San Jerónimo.-11, 12. Camino de herradura á San Jerónimo —13. Camino dels avellanersal Monasterio.-14. Nuevo camino desde el Santuario á San Juan.5. Camino de San Juan á la Fontseca y Collbató.-16. Escala, y fuente deJacob. -17. A Santa Anayermitas de Tabaida y al Monasterio.-18. Atajo de San Jaime.-19. Camino de herraldura de San Jaime.-20. Camino de exploración.-2l. Al Monasterio. .

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á manoderecha,sehallanlas.ruinas de Santa Magdalenaquealprincipioestuvoedificada algo máslejos. En1498elP.Cisneros latrasladó adondeseven hoy lasruínas, que, sibien estaba muycombatida delos vientosquesoplan allí terribley espantosamente, era lugar mássaludable. Habitó enesta ermitaelPadre Bernardo Marquez,andorrano,quevistióel santo hábito el1668, célebre porla santidad de vida,la cual estaba escritaen el archivoy desapareció con todaslas demáspreciosidades de Montserrat. Murió el26 deFebrerode 1701.

Junto ádichaermitahay unextenso yhermoso mirador el cualdesquitacon creces el trabajoque ha costado elsubirallá: debajode estepeñascoenorme sehallan lasermitas de SanOnofrey SanJuan,álas cualessepuede bajarporel estrechoquecontinúadesde ia escala de Jacob. Peroantesharemos lavisita ála

Ermita de Santiago.

Para ello puede seguirse el camino indicado, que es el más corto con unos 70 peldafios abiertos en la roca viva, ó volver á bajar por la escala deJacoby tomar el sendero que sube de Santa Ana. Dicha ermita era de las que tenían peor acceso, por hallarse pegada y como encerrada en mitad del enorme cono, que se halla subiendo por el camino de San Miguel. Anti-

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GUÍAHISTÓR,TCO-DESCRIPTIVA

guamente fué necesario hacer escalera á cal y canto, y otras veces abrirla en la misma roca: todo ha desaparecido, resultando difícil actualmente el ascenso. Por esto, sólo se puede tener el gusto de fatigarse para gozar del hermoso panorama que se disfruta en aquellas alturas en los días despejados. Vése desde allí el Monasterio y la plaza con la gente que anda por ella, oyéndose á veces claramente lo que dicen, aunque no esfuercen mucho la voz.El ermitaño oía también el canto de los monjes en el coro, de modo que podía unirse á ellos en espíritu durante las horas canónicas; ni necesitaba reloj, pues le servía el del Monasterio.

Se ignoran los principios de esta ermita que ya existía antes de la reforma de Montserrat.

Desde 1811 quedó enteramente destruída.

Descendiendo de Santiago, puede visitarse enseguida el lugar donde existió la

Ermita de SanOnofre, que, como dijimos, cae debajo del mirador de SantaMagdalena,dela cual sólodista 96 metros.Tambiénera de difícilaccesopor estar comoempotrada en lagrande mole, que leservíadetecho,álaaltura de 25 metros, porlo cualfuénecesario hacer escalera parallegarse áella. Gozaba demuy pocas comodidades,ni teníahuertecito comolas otras,por falta de

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lugar, por esto elP. Ermitaño teníaque dedicarseáotraslabores domésticaslosratos que ordenaba trabajar el reglamento. Tampoco teníavista más que porlaparte demediodía, sibien con la ventaja de estar resguardada de los vientos, en especial delosnortes, por la gran peñaquela cobijaba. DicenqueelPadre Cisneros la prefirió para sus retiros espirituales. Sólo la separaba dela

Ermita de SanJuan Bautista un pequeño precipicio,que serespetó con el fin de que no se juntaran los ermitañospor no ser propio delestadoanacorético.

Laermita de San Juan, cuya posiciónera semejanteálaanterior, fué construída unsiglo más tarde porel AbadPlácido de Salinas, que antes habíasido Generaldela CongregacióndeValladolidy Superior demuchos otros Monasterios, dignidades que dejóparaocultarse en las breñas de Montserrat. Empleáronse paralaobravarios moros cautivos quele envió su hermano el Virrey deCataluña, lo cúalsucedió en1591,segúnconsta dela piedra que estátodavía en eldintel de la puerta,resto precioso que ha quedado dela devastaciónde 1811.Lo apacible dellugar fué causa de que nopocosAbadesimitasen el ejemplo del Reverendísimo P. Salinas, queprobablemente fué

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GUÍAHISTÓRICO-DESCRIPTIVA

quien recibió en 10 de Julio de 1599lavisita de S. M. Católica Felipe III,el cual, habiendo' hecho la excursión porla montaña,sedetuvo á coineren laermita de San Juan.

En tiempodelarevoluciónfrancesa estuvo tambiénretirado enesta ermitael Ilustrísimo Sr. Obispode Tarbes, Mons. Francisco Gain de 11-I o n tagn ac . Más tarde (1855)vivióentre sus ruínas D.JuanJosé Espinosa,piloto deun buque mercante que naufragó en las costascantábricas, el cualluchandocon las olas hizovoto de consagrarelresto de sus díasála VirgenMaríaen esta montañade Montserrat, como lo cumplió,sibiense ignoracuálfué finalmentesu paradero, pues las vicisitudes contemporáneas le obligaron áalejarsede este lugar.

Delosrestos y ruínas delasermitas de San Juany de SanOnofresehan aprovechado más tarde paraunmodesto restaurant,y posterior-

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mente, algo másabajose ha levantado una capilla en honordelSanto Precursor, la cual fuébendecida en 28 deNoviembrede 1899.

Adoscientos sesentametros de distancia de San Juan, en el próximo valle- á mano derecha,sehallaba la

Ermita de Santa Catalina, casisepultad a, entrelos árbolesjunto á una roca donde apenas queda hoy vestigio ni de sus restos.Casinoteníavistaalguna;masen cambiocompensaba su soledad elcanto delas muchas avecillas que secriaban en elbosque, porloquela llamaban la pajarerade Montserrat.Habíanse familiarizado de tal modocon losPadresermitañosque,obedeciendo ásu voz,veníany seles posabansobrelos hombros yles tomaban lacomida delaboca, delo cual dan fe,nosolamente los monjes de Montserrat, sinomuchos otros testigos de vista y casitodos losescritores de aquellos tiempos.

Uno delosmás célebres ermitañosquevivieron enSantaCatalina,fuéelP. Pedro Foquet, llamadovulgarmenteFr. Pierres,por serfrancés.Fué ilustreenvirtudes y maravillosos hechosquele hicieron muycelebradoen sutiempo. Murió en el Monasterio el 19 deFebrero de 1670,enolor desantidad.

Desde SantaCatalina puede irse hacia abajo

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GULA HISTÓRICO-DESCRIPTIVA

hasta dar con el camino de Collbatóá Montserrat,que es lo más cómodo. Junto á la capilla de San Juan hacia el Mediodía hay un camino, muy bien conservado, por el que se baja en media hora á laFontseca,algo más allá de las Baterías en el camino de MontserratáCollbató.Lo recomendamos á las personas robustas que quieran admirar nuevos y variados panoramas del monte. Si se quiere volver atrás, puede también ahorrarse tiempo bajando por el torrentedels avellaners,que comienza en la unión del camino de San Juan con el de . San Jerónimo en el Plá de lesBruixesy sale cerca de la Fuente del Portal en la estación VII del Via- Crucis. De lo contrario puede bajarse hasta San Miguel, y luego en poco tiempo se hallará el viajero de regreso en el Monasterio.

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XI z•

[ascuevas

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las grandes maravillas de Montserrat muy digna de visitarse, son las celebradas cuevas que tiene la montaña á la parte del Sudoeste cerca del pueblo de Collbató. El Señor, que preparó esta montaña con tanta hermosura y riqueza en lo exterior, quiso también dar á conocer al hombre la omnipotencia de su brazo en las admirables grutas del interior de Montserrat, majestuosas, ricas é imponentes sobre toda comparación.

Estas cuevas habían sido conocidas de los antiguos , como lo demuestran inscripciones que se conservan de los monjes de Montserrat, principalmente de los siglos xvi al xix; no obs-

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tante, sólo en la mitad de este siglo comenzaron á ser visitadas, debido á una exploración seria que se hizo de ellas por algunos entusiastas excursionistas, á los cuales se agregaron varios monjes de este Santuario y algunos vecinos del pueblo de Collbató.

El resultado de esta exploración lo publicó el bien conocido escritor D. Víctor Balaguer, en elDiario de Barcelona, y luegoen suGuia de Montserrat.En el mismo año D. Manuel Solá daba á luz su Monserrate subterránea, y años después el Rdo. D. Juan Martí y Cantó, hechas dos diligentes exploraciones (1866), daba también á conocer las famosas cuevas en su Historia de Montserrat. Otros se han. ocupado asimismo de la parte descriptiva de las cuevas; pero sólo mencionaremos á' D. Cayetano Cornet y Mas, todos los cuales nos servirán de pauta para el presente capítulo.

La excursión á las cuevas hoy puede hacerse desde Montserrat, sin necesidad de bajar al pueblo de Collbató, gracias al servicio establecido al efecto en la Fuente del Portal.

Los Caminos, que conducen allá, se van mejorando de día en día para que la expedición se pueda hacer con seguridad y sin grave molestia. Antes era muy difícil acercarse á las cuevas, y hasta peligroso en algunas partes, y despuétorabj,híquepsl trechode lasestacasy subir agarrados á una

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cuerda. Hoy todos los caminos son accesibles para las caballerías, y desde Montserrat puede irse cómodamente por San Miguel, y á unos 300 metros se halla á mano izquierda el sendero de 5 kilómetros de largo que conduce á la puerta de las grutas; los que prefieran ir á pie, pueden pasar por la Santa Cueva, de la cual distan cómo unos 3 1/2 kilómetros.

Para esta excursión hay guías, todos del pueblo de Collbató, dispuestos á acompañar á los viajeros mediante la debida retribución, para lo cual tienen tarifa fija, así como para las luces necesarias y fuegos de bengala con que iluminan las principales grutas. Está prohibido encender cualquier fuego que produzca detonación, por el grave peligro que podria ocurrir en los subterráneos, causando quizás 'algún derrumbamiento con consecuencias lamentables. Tampoco se permite arrancar ninguna de las admirables obras que han producido la naturaleza y el tiempo en el interior de las cuevas. Su entrada, que se divisa desde Collbató, es de forma ovalada y tiene una verja de hierro de 2'25 metros de alta por 80 centímetros de ancha, la cual ha sido necesaria por la imprudencia de muchos que, penetrando libremente en las cuevas, destrozaban y tomaban cuanto les parecía conveniente, con grave detrimento de la belleza que en algunas partes se admira.

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Atravesando la verja, se halla la primera cueva,ó vestíbulo,como la denominan comúnmente, que recibe un poco de luz por otra abertura que hay á la mano izquierda junto á la bóveda: tiene aspecto tétrico y feroz, de las bóvedas penden y como que amenazan desplomarse masas cristalizadas, y en el pavimento yacen con el mayor desorden rocas desprendidas, en las que ha de poner atención el viajero para no dar un mal paso, advertencia que ha de tener muy en cuenta durante la excursión para evitar cualquier desgracia ó lance desagradable.

Una grande roca suspendida del techo separa esta cueva de la segunda (la mayor) -ó de la Esperanza, á la cual se entra por bajo de la sobredicha roca á mano izquierda. Es imposible formarse adecuada idea de esta gruta, de su grandeza y majestad sin haberla visto, y ni aun dentro, son capaces las luces para darla á conocer de un golpe de vista. Parece como si se hubiera desgajado y hundido un trozo de montaña; así es que ha quedado formando como enormes pirámides salientes en el pavimento, y en la bóveda varios arcos sin nivel ni apoyo visible, dando al conjunto el aspecto de un espacioso templo, tanto ó más alto y ancho que nuestra basílica de Montserrat. A mano derecha de esta cueva hay una especie de galería, en donde comienzan á verse las llama-

CUEVA « LA ESPERANZA » (Dibujo antiguo.)

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dasestalactitas,óconos,quehanformadolas aguasal desprenderse goteando desdelabóveda,y que seconoce sucedió en siglos remotos " porlograndes y duras que sonestas cristalizaciones;hay allí mismo indicios de queen algún tiempo corrieron las aguasen abundancia, pues las piedrassehallandesgastadas como en Los canalones ó caídas de las cascadas.

Hállase tambiénála derechade esta gruta laquellamanlaCocina,que estáen un recodo dela cueva, cuyasparedesaparecenennegrecidasporelhumo,sospechándose queaquíse habíanservidodel fuegopara condimentar los alimentoslos guerrilleros delos tiemposdela Independencia.

En efecto,álaparte opuestay á unos seis metrosdelpavimento, seve un boquerónque parecelaabertura de una cueva,y fuélaestancia que se conoce con el nombre de

Cuevadel Mansueto.

Harecibido el nombre deciertocélebreguerrillerodelaguerra dela Independencia, á quienunoshacen natural de Esparraguera y otrosde Collbató, donde almenos parece que vivía en aquella sazón. Al saber quelosfrancesespasabandesde Barcelona talándolotodo, seretiró con lagentedel pueblo á estas grutas y seescondió en la cueva quelleva su nombre.

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Siguiéronle los soldados, y no habrían dado con él si la voz de una criatura no le hubiera descubierto. Con todo conservó su serenidad y se atrevió á retar los contrarios, poniéndose á la puerta de la cueva trabucó en mano. Detuviéronse los soldados ante hombre tan resuelto, y él, aprovechando la ocasión, dícese que dejó caer desde lo alto un gran caldero que produjo tan horrísono ruído que los soldados huyeron amedrentados creyendo que se venían las bóvedas sobre ellos, sin que jamás osaran volver penetrar en las cuevas. Este célebre guerrillero capitaneó más tai de una partida de paisanos al. servicio de Carlos V, hasta que, perseguidoy acorralado por los isabelinos y después de heróica resistencia en una finca del término de Vacarisas, fné cogido prisionero y luego fusilado con sus compañeros.

La gruta de que nos ocupamos, y que lleva su nombre, tiene dos estancias: la primera sirve como de recibidor, desde el cual se pasa á la inmediata por un agujero de casi un metro de diámetro. Cuando se hicieron las primeras exploraciones, hallaron en ésta el maderamen de la cama donde se cree que dormía, un cántaro, un cajón vacío, una escala de cuerda ya rota y destrozada, .y los clavos donde la amarra4ba en la boca de la gruta para subir y bajar de su inexpugnable asilo; posteriormente se hallaron también armas ya enmohecidas.

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Eneste lado de la grangruta sehallatambiénloquellamanElCamarín, al cualconduce un pasadizoquedenominó elRdo.Martíy Cantó,Galeríadelasmariposas, porel gran número queencontraron ásu pasoylamultitud innumerable de alitas que cubría el pavimento. Sehallaestatercera cueva alextremo dedicha galería, ysuentrada es unaespecie deescaleranatural de 1'20 metros de elevación.Es unapieza bellísimaque secreería labradaporlamanodel hombre.Porsufigura la denominó el Sr.Martí, yacitado,Templo gótico,puessehalladivididaen trespartes comootrastantas naves de estilo ojival,yen el fondo delacentral, que tendráunos '20 pies de larga por 8 de ancha y 15 de alta, se vé el nicho para colocar la imagen deunsanto. Está adornada esta cueva con muchas ymuyvariadasestalactitasy estalacmitas quele dan un aspectosorprendente.

No sepuede pasar adelante en esta gruta, sino que_se ha de volver porel mismo camino y á unosveinte pasossehalla la cuarta cueva óCavernaenminiatura, comola llama el autor de «Montserrat subterránea», ó Catedralen miniatura,comoladesignaelRdo. Sr.Martí, óTocador de las sílfides,según la bautizó el

Sr. Balaguer.Laentrada está á flor detierra porunarco que notienemás de dos pies de altura, porlo cualesnecesario penetrar g

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tas yconsumo cuidado de no herirse con las estalactitas, lo que se ha de tenermás presente alretroceder. El interior delagruta será de unmetro yva disminuyendoálosextremos dondesólo tendrá20 centímetros. Por lo demás en tan reducido espacio hay admirables cristalizaciones, asícomoenunacavidadpróxima, dondeaparecenrarosdibujosderacimosy frutos, yen el fondo unaespeciede teatro minuciosamentedetallado.

Retrocediendoporel caminoygaleríapor losque se ha ido á estas grutas, y en elfondodela gran cueva, sehallaentrepeñas— unagranabertura ó boquerónque espanta á primeravista,y dapasoáotros subterráneos inferiores. Antes sehacía eldescenso por mediodecuerdas, ahora hay escalera parabajar con seguridad. Denominan á estepasoelPozo simplemente, otros elPozo del diablo,porloespantoso que esel verlo, que juntocon las tinieblasyelsilencio sepulcral, que allí reinan, causaemoción indescriptible.

Descendiendo, pues,por estepozo,unos 15 metros, seatraviesa luego porun pasadizo estrecho,ypasandosobre una roca se hallandos galerías. Laprincipal, que cae alEste, apareceadornada devariedaddeestalactitasque unidascon lasestalacmitas correspondientes,,for. hermosas columnas yelconjunto una- _espe man cie de claustro gótico, por cuya,&azou :y poiha-

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

liarse allívariasinscripciones demonjesparticulares yotraquedice «los monjesde Montserrat 1654», (1)handenominado á este sitio Claustro

CUEVA« ELCAMARÍN »

(Fotog. del natural.)

de los monjes. Pasada esta galería, que termina hacia el N. O. y subiendo por una escalera, se llega á la quinta cueva, que unos denominan el (1) Fray Francisco Roca 1511; B. de Cortada en 1551. No hallamos este nombre enel catálogo; tal vez era monje de otro monasterio. Fray Diego (Brú? García? Iglesias?) en 1691; José Padre (?) de San Benito 1692. (Luís) Camps,rii i; Fray Sebastián Anxa, 1761.

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CamarínyotrosGrutadelasestalactitas, que abundan sobremanera,yhacenesta estancia hermosayadmirable sobre todacomparación.

Hállanseaún en formación, pues todavía sigue filtrándose elagua, por lo cualestáel suelo húmedo, yasí requiere que se andecon algún cuidado para noresbalar.Balaguer y elreverendo Sr.Martí la tienenporlamásbellade todaslas cuevas.

Desde esta gruta, siguiendoporla derecha en dirección SO. á NE., sevaálasextacueva, óGrutadel elefante, ála cual handado este nombrepor unagranroca quehay en elcentro,semejanteá este animal, quesostienesobre sus robustos lomoscomo dos torres á maneradelasqueen la antigüedad llevaban en lasguerras especialmentelosasiáticos. Hasta lasparedes delagruta caprichosamente labradas parecenrecordar todoel lujooriental.

Retrocediendo,porel caminoandado, ála gruta delas estalactitas,se dacon unpequeüo agujeroqueaunque con la oscuridad parece profundísimo, sólo tieneunostresmetros. Muchossedetienen aquí por no andar tanto tiempometidosen dichos calabozos, no obstante, si el tiempo lopermite,aunsepuedepasaradelante, pues quedan todavíacosas dignas de verse.

Pasandopordicho agujerose entraenuna galeríaquellamandelosfantasmas .porlas

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GUÍAHISTÓRICO- DESCRIPTIVA

rarezas que hay en los lados, formadas por multitud de estalactitas y estalacmitas á cual más caprichosas. Siguen luego laCueva de la Virgen,elPasode las barricadas. eldel cazador yla llamada de los murciélagos, que recibió este nombre porque, en la primera exploración, una nube de estos feos seres comenzó á revolotear sobre las cabezas de los excursionistas.

Después de pasar las mencionadas cuevas, escalando sin dificultad un montón de peñas, se llega á la octava cueva, ó Salón de las columnas, como la llaman todos los que se ocupan de esta gruta, que es rival de la que anteriormente hemos mencionadode las estalactitas.En ella las columnas están de tal modo unidas que no dejan pasar un rayo de luz. El pavimento es de piedra muy lisa é igual, pero húmedo por el agua que aun destila por el techo, que parece sostenido por aquellas hermosas columnas.

Subiendo á la derecha y después de corto trecho, que se atraviesa por una galería de innumerables y muy delicadas estalactitas hundiéndose los piés en lodo pegajoso, se llega por fin á la novena y última cueva que se puede visitar hasta el presente, y fué denominada elSalón del ábside gótico por el señor Balaguer. Aunque es la postrera, no por eso deja de causar novedad al excursionista, pues rivaliza en belleza con todas las descritas anteriormente. Su forma es casi circular, siendo

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su diámetro de unosveintepies. El pavimento ylasparedes sehallan cubiertos dearcillade color rojo claro quecon laluz delas antorchas presenta unaspectodorado. La techumbre es ámanerade doselete que se estrecha gradualmente,siendo elvértice de una altura extraordinaria.Delcentropartenhermosísimas cristalizacionesformando comoun pabellón porlo cual elRdo.señor Martí denominó á esta grutaEl pabellóndela Virgen,que es el nombrequehoyconserva.Alrededor de la cuevaseven muchas columnas formando parecen sostener lacú- pilarestdoqu pula,dejando paso entrelasparedes de modo que sepuededarla vueltaentreellas.A mano izquierda dela cueva muestran los guíasuna gran piedra semejanteá unamuela, cuyas raíces aparecenálaparte superior. En el fondo seve un boquerón tan estrecho que no es posible pasar adelante.

Latemperatura de esta gruta es de 20°, la delas estalactitas15° yladelaentrada de las cuevas9°. Apesar deladistancia que lesepara delaluz, y dela estrechezytortuosidaddelos lugares por donde se hapasado,se respiraen ella cómodamenteylas hachas lucen con todo suesplendor. NotaelRdo.señor Martí, que durantesusegundaexcursión, llovió espantosamenteen la montaña ylos truenos retumbaron ensus sinuosidades comoacostumbran los

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GUÍA HISTÓRICO-DESCRIPTIVA

díasde tormenta que aterroriza almás valiente:contodo,ellosnopercibieronnada absolutamente,ni lo habríansabido, si no se les hubiera referido.

Para recorrercómodamente los mencionados subterráneosserequiereporlomenos dos horas, que se pasanporcierto sin darse casi cuentadeello.Para volver atrás,hayquerepasar casi los mismos lugares, sobre todo el claustro delos monjes yelpozo del diablo, hallándose luego elexcursionistaen lagrande cueva,donde no tarda en percibir losprimeros rayosdelaluz,la cual leparecerá más agradableque nunca, cuandodelleno la goce al llegarálaboca delas cueyas,y mejor cuando pueda contemplar de nuevo la tierra bailada por elsol demediodía.

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XII

Cato, cofradía yperegrinación

NCOMPLETA quedaría

la presente obra si no dedicáramos en ella un capítulo para dar á conocer la propaga ción del culto de Nuestra Señora de Montserrat y su antigua Cofradía, enriquecida de abundantísimas gracias por los Sumos Pontífices, de lo cual no hemos tenido ocasión propósito de hablar en los capítulos anterio- á res, así como tampoco de las peregrinaciones que ya de antiguo se han venido haciendo á este Santuario.

Apenas se mostró la Santa Imagen de María del modo extraordinario, referido ya al tratar de la cueva, dando á conocer su voluntad de quedarse en la montaña que había escogido

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para trono, desde donde quería derramar sobre los fieles, torrentes de gracia y de misericordia; su culto, a.limentádo primero por los' pueblos circunvecinos, fué propagándose rápidamente por el Principado catalán, cuyos Condes se pusieron bajo su protección y amparo; logrando de esta manera, con el poderoso auxilio de María, libertar sus pueblos del opresor yugo de los fanáticos hijos del Islam.

Unidos el Principado de Cataluña y el Reino de Aragón por el enlace del conde Berenguer IV con la reinaD.'Petronila, pasó también la devoción á la familia real aragonesa, y no mucho después vemos á la reina D. ' Leonor, esposa de Pedro el Católico, subir la montaña de Montserrat acompañada del Arzobispo de Tarragona, D. Raimundo de Rocaberti, y del Abad de Ripoll, D. Raimundo de Berga.

Con este motivo se fundó (si bien algunos creen que la fundación es anterior) la Cofradía de Ntra. Sra. de Montserrat, siendo los primeros en inscribirse los tres personajes sobredichos. Esta institución contribuyó poderosamente á cimentar y extender la devoción de Ntra. Sra. di_. Montserrat que, no sólo fué venerada en su Santuario, sino además tuvo altares, capillas y también iglesias en varios pueblos del Principado y del Reino de Aragón, y en las provincias por ellos de nuevo adquiridas, como Valencia y Mallorca.

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No tardó en propagarse esta devoción á los vecinos reinos de Navarra y Castilla, cuyo Rey Alfonso X cedió en Murcia rugar y hacienda para que se levantara una iglesia bajo la advocación de Nuestra Señora de Montserrat. Más tarde pasaba con los catalanes y aragoneses á las islas de Cerdeña y Sicilia, y al reino de Nápoles por ellos conquistado. Y descubierto el Nuevo Mundo, se fundaron en Méjico y el Perú dos Prioratos, bajo el título de Nuestra Señora de Montserrat, servidos ambos por hijos de nuestro Santuario, los cuales también llevaron la devoción de Nuestra Señora al Reino de Portugal, y de allí la propagaron en el Brasil, donde aun existen dos Monasterios con dicha advocación.

Los Reyes de la dinastía de la casa de Austria heredaron también de sus mayores la devoción á Nuestra Señora, de lo cual dieron pruebas elocuentes Carlos V, de gloriosa memoria, el cual estuvo por lo menos nueve veces en Montserrat, y murió sosteniendo una candela bendita (1) que le dieron en este Santuario, cuyo ejemplo siguió su digno hijo el Rey prudente Felipe II (2), que también subió varias veces á (1) Devoción que aun hoy día persevera, y por cuyo medio Dios ha obrado muchos milagros.

(2) En el catálogo de la librería particular de este Rey se ven el libro de los milagros de Nuestra Señora de Montserrat, historia del mismo Santuario y algún otro referente áeste Monasterio.

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visitar á Nuestra Señora, lo mismo que sus descendientes y sucesores con las respectivas familias. Por ellos se propagó asimismo la devoción de la Virgen de Montserrat á la imperial casa de Austria, muchos de cuyos individuos subieron esta montaña, y uno de ellos, Fernando II, levantó después dos insignes templos á María de Montserrat, uno en Viena, capital del Archiducado y otro en Praga , el cual aun existe y pertenece á la Congregación Beuronense. Carlos VI, durante la guerra de sucesión, visitó dos veces á la Patrona de los catalanes que defendían su causa, y no se contentó con dejar ricos dones, sino que además quiso inscribirse, junto con su esposa Isabel de Brunswich, en el album de los Cofrades: esta devoción le alentó durante toda su vida, pues al subir al imperio contribuyó también'con sus ejemplos y limosnas á la propagación del culto de Nuestra Señora de Montserrat en Viena y en Praga.

También penetró y se propagó en el vecino reino (hoy república) de Francia la devoción de Nuestra Señora, ya por la hermandad de las provincias limítrofes, ya por el enlace entre las dos familias reales. Así, Nuestra Señora de Montserrat, no sólo tuvo altares dedicados á su nombre en el Rosellón y comarcas vecinas, sino también en Tolosa, Lyon, Ruan, París y en otros diversos lugares, conserván-

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dose aun hoy día en algunos de ellos, después de tres siglos, la Cofradía de Montserrat.

Tampoco ha faltado la devoción á nuestra excelsa Morenita, en Nápoles, Palermo, Catania y muchas ciudades de Italia que tienen templos dedicados á Nuestra Señora de Montserrat, y sobre todo en la Capital del mundo cristiano, donde hoy es bien conocida la iglesia de este título, cuyo origen se remonta á la mitad del siglo xv en que una devota catalana, dedicada al servicio de los peregrinos, fundó un hospital para atenderlos: hoy dicha iglesia es la nacional española.

En fin, doquiera han puesto el pié los hijos del Santuario y los buenos catalanes, allí han dado testimonio de su amor y devoción á su Madre, Reina y Patrona, como se ha visto en nuestros tiempos, especialmente en el archipiélago magallánico, donde cada año se le tributan los más solemnes cultos en los mismos días en que acostumbran hacerse en nuestro Santuario de Montserrat.

Las principales causas de esta casi universal propagación del culto y Cofradía de . Nuestra Señora de Montserrat, han sido principalmente los beneficios innumerables que la Santísima Virgen ha dispensado siempre á sus devotos hijos, y las singulares y abundantes gracias con que los Romanos Pontífices han enriquecido la Cofradía.

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De lo primero da elocuente testimonio la Biblioteca de la Virgen,de la cual hablamos á

su tiempo; y los libros que se han impreso de sus milagros, los cuales sin embargo sólo contienen un pequeñísimo número de los favores obtenidos por intercesión de esta Madre de Misericordia. Ellos, empero, nos dan cuenta de varios muertos que resucitaron; de otros que colgados en la horca fueron librados de la muerte ; gran número de enfermos, muchos de ellos deshauciados, que obtuvieron la salud, así como varios ciegos la vista y sordos el oído. Asimismo los cautivos encerrados en dura prisión ó mazmorra son libertados por intercesión de María, y algunos conducidos hasta el seno de sus familias; y por no alargarnos más, no pocas veces los marinos sorprendidos por furiosa borrasca y arrastrados por las olas, deshecha otras veces la nave en medio del mar y próximos áperecer por momentos en los abismos, son librados de segura muerte por la Santísima Virgen que los devuelve á la nave y los conduce á la playa, desde donde parten para darle gracias en su Santuario por tan señaladas mercedes. ***

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Hemos dicho que las gracias que los SoberanosPontífices concedieroná laCofradíade

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Nuestra Señora de Montserrat fueron también causa del desarrollo de la devoción y culto de la Patrona de Cataluña. Pocas Cofradías podrán contar con tanta antigüedad, ni con tan señaladas gracias, debidas principalmente á Bonifacio IX, Benedicto XIII (creído legítimo en España), Nicolás V, Inocencio VIII y Alejandro VI, las cuales confirmó León X el 13 de Julio de 1519 y después Benito XIII el 21 de Marzo de 1729, á instancias de los Reyes Felipe V y su esposa Isabel, que también quisieron inscribirse entre los Cofrades, siguiendo el ejemplo de sus predecesores y dándole á todos los de la dinastía borbónica.

Largo sería enumerar todas las gracias que contiene el sumario de la Bula de León X la cual hallará el devoto lector en libros especiales que se ocupan de la Cofradía, y modo de inscribirse así como las devociones que pueden practicarse; no obstante, indicaremos algunas como de paso. Aprobó la concedida por el Papa Bonifacio IX á todos los fieles que confesaren y comulgaren durante la fiesta y octava de la Natividad de Nuestra Señora (8 y 15 de Septiembre), en la cual podrán ganar la indulgencia de la Porciúncula: item, que los cofrades en tiempo de Cuaresma y en otros que hay estaciones, puedan lucrar las indulgencias que están concedidas visitando las iglesias de Roma, haciendo la visita á cualquiera iglesia y

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rezando tres Padre nuestros y otras tantas Ave-Marías en tres altares, si los hay, y si no en dos, ó en uno sólo: y asimismo que el Padre Abad por sí, ó por otros, les pueda conmutar los votos que hayan hecho, en otras obras plas, excepto el de peregrinación á Roma, Jerusalén ó Santiago, y los de Castidad y Religión. Benedicto XIII concedió muchas indulgencias plenarias á los objetos religiosos que se bendicen en Montserrat, como puede verse largamente en los libritos que tratan de ello.

Extendidode este modoelculto, y propagadaen los pueblos la Cofradía de Montserrat, nopodíamenos deatraer innumerablemultitudde gente á lospies delaSoberana Emperatrizdecielosytierra. Cuál fuera estaconcurrencia lo describe con estaspalabras elprimerhistoriador de Montserrat, elPadreAbad Pedro de Burgos: «Es cosa de mucha maravilla, dice, veraquí »tantas diversidades de gente de todas lasprovinciasá donde se extiende el nombre cristiano;porque nosolamente delPrincipado de »Cataluña, donde está situado el Monasterio, »acudegente, másaún,de toda España, Francia, ItaliayAlemania,y deotras muchas »provinciaséislas delmundo cadadía llegan

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» aquí tantos y de tan diversas generaciones y »lenguajes, que ni ellos unos con otros se en»tienden, ni los que tienen cargo de darles recado los pueden entender. Aquí vienen Reyes, »Príncipes, duques y otros grandes señores; »ricos y pobres, letrados é ignorantes, y de »todos tanta multitud que sería imposible po»derla aquí esplicar. Y allende que todos los »días llega aquí gran muchedumbre de gente »de todas las partes del mundo, en mucho »tiempo del año, como son las fiestas de Nuestra Señora y otras muchas festividades, y en »la Cuaresma es tanta la multitud de las gen»tes, que muchas veces no caben en la casa, ni »aún en la plaza que está delante de la puerta; »mas estanse muchos por la montaña entre los »riscos y en algunas cuevas, debajo de algunos árboles, como mejor pueden. Y allende de »esto vienen las procesiones, que son más de »cuarenta, de manera que hay días que se hallan juntas más de cinco mil personas, y mu» chosdías más de mil, dos mil y tres mil».

Cien años después el P. Oliver (Mateo) aseguraba que en un solo año había confesado él mil quinientas cincuenta y dos personas entre franceses, flamencos y otros extranjeros, y un libro de gastos dé la Casa añadía que asimismo durante el año habían visitado á Nuestra Señora mil cuatro cientos once religiosos de diversas Ordenes y dos mil trecientos cuarenta y 14

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nueve sacerdotes seculares, y que había habido día en que, sin contar los de casa, se habían hallado enMontserrathasta 9.700 personas.

Para evitar el desorden y demasiada aglomeración por lo que toca á las peregrinaciones en que venían á veces pueblos enteros, ó parte de ellos, ya de antiguo se fijó el día ó época del año; en que habían de subir á visitar á la Santísima Virgen. Los de Pieray La Granada venían en procesión el segundo día de Pascua, y el pueblo de Artésal día siguiente. La Dominicain Albisestaba designada para los de Granollers,y la siguiente para los de Vacarisas. El día 22 de Abril debían venir los pueblos deCastellbell, San Vicente y Granera,y el 30 los de Castellar y Grabalosa. En Mayo tocaba el turno á los de Igualada, Pierola, Masquefa, Rubió y San Julián de Vallés.En Agosto á los labradores de Tarrasa,Martorell, Molinsde Rey, y á los de los pueblos de Valldoreix,San Vicente de Llobregat,San Juan Despí, Papioly Santa Cruz de Olorde. En Septiembre á las villas y pueblos de Sabadell, Castelltersol,Rocafort, Talamanca, San Boy, Taus,Caldes,Vilasar, Cabrera, Premiá (estos tres últimos juntos); San Clemente, San Andrés de Palomar, San Benito deBages, Mura, Tarrasa, Rubí y San Justo Desvern. Monistrol algún tiempo subió el día de Jueves Santo; después lo trasladó á otro día, por no ser aquel

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tan acomodado. Los de Montbuy no tenían tiempo fijo: los de Sitjes venían cada siete años.

Todos estos pueblos entraban en el Santuario en procesión, presididos y acompañados de sus curas Párrocos, Vicarios y concejos, llevando cruz y pendones y antorchas ó cirios, cantando juntamente las letanías de la Virgen ú otras cosas devotas. Además cada pueblo solía llevar su gran exvoto de cera, ó sea grandes cirios de diez, quince y hasta veinticinco quintales, para que ardiese todo el año delante del altar de la Santísima . Virgen, en lo cual fué necesario poner tasa cuando Juan de Austria, hijo de Felipe IV, mandó que se dorase toda la iglesia, pues habría quedado pronto ennegrecida con tanto humo. .

* ** Mucho hay que restar de todo lo dicho en nuestros tiempos, tanto en las confesiones como en las procesiones, á pesar de que hoy se han acortado las distancias y allanado las dificultades que tuvieron que superar aquellos fervorosos amantes de María de Montserrat. Difícilmente entre los muchos Padres habrá quien durante el año llegue á confesar más de cinco mil,no digo extranjeros, pero ni aun españoles: y las peregrinaciones, por doloroso que

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sea decirlo,apenasquedanmás quetresó cuatro anuales,dos de Barcelona, una de Sabadellyotraque hacomenzadodenuevo de Tarrasa. Lospueblos delarciprestazgo de Martorellsubencada cinco años. y porcierto en procesiónharto devota y edificante.

Esverdad que siempre hay alguna queotra peregrinación extraordinaria, yadeotraspoblacionescomo Tguálada, Manresa, etcétera, yageneral de alguna diócesisdeCataluñaó de todoelPrincipado,yadeotrasdiversas partes deEspaña,especialmente delas,que vanóvuelvende Roma,pero eneste particular se ha perdidomuchoterrenocon grandetrimento dela piedadysaluddelasalmas; porquemuchísimasdeellas- solían aprovechar semejantesocasiones para volver seriamente sobresí mismasy pensaren el importantísimo negocio desu salvación.

El ritual quehoyse observatratándosede peregrinacionesnumerosas esel siguiente: En lahora determinada para entrar la`peregrinación, se formaésta enfilasllevandoestandartesde trechoentrecho dela procesión, que muchas veces cierra el cleroacompañandoála Imagende 'Cristo Crucificado.La Comunidad, avisada de antemano, sale al encuentro hasla plaza del Monasterio, poniéndose allí ta endos filas, entrelas cuales pasan - losperegrinos cantando, ó rezando elsanto Rosa-

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rio, óla letanía, ú otras cosas devótas. En llegando á la iglesia el Reverendísimo Padre Abad, revestido de Pontifical, da á los peregrinos la solemne bendición. Antes ó después, según las circunstancias, uno de los sacerdotes

queacompañan la. Romería, presenta los fieles á la Santísima Virgen y luego anuncia los cultos que se la tributarán durante la permanencia en su santa Casa. La , peregrinación suele durar tres días; llegan en el primero por la tarde (aún se conserva la costumbre desubir y bajar el santo monte procesionalmente á pie) ylo gastan en alojamiento, preparación para la

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comunión del día siguiente y asistencia al culto cotidiano del Rosario, Salve, etc. Al siguiente, Rosario de la aurora, confesión y comunión, que tiene lugar en una Misa especial, á la que asisten los peregrinos y en la cual los sacerdotes les dirigen la divina palabra y les preparáis á fin de que reciban lo más dignamenfe posible á Nuestro Señor Jesucristo y le den las debidas gracias por tan señalada merced; después se celebra el Oficio solemne con sermón alusivo al acto. Por la tarde, á hora conveniente, bajan en procesión á la Santa Cueva, rezando ó cantando el Rosario entero, y los que no se sienten con ánimo para ello, hacen arriba el VíaCrucis ó se ocupan en otras devociones: al reunirse todos de vuelta en la Basílica suele haber sermón, asisten al santo Rosario, etc. y culto cotidiano, á no ser que por razón especial celebren á última hora alguna otra función religiosa. Al tercer día se acostumbra celebrar Misa de comunión en alguna de las ermitas (generalmente San Miguel), asisten á la Misa conventual, y para despedir á la peregrinación se hacen las ceremonias parecidas al recibimiento . Reunidos los peregrinos á la hora determinada (antes ó después del mediodía, según la localidad de donde proceden) en la iglesia por el toque de campanas, sale la Comunidad al Presbiterio con el Rmo. P. Abad revestido de Pontifical. Entre

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tanto uno dolossacerdoteshace ladespedida de losperegrinos ála Santísima Virgen,yenacabando,la Comunidad salehastafuera delclaustro y detrás deella la peregrinación. Habiendo pasadotodos, sedetienenyarrodillanpara recibir la bendición del Rmo. P.Abad. Este acto estiernoy devoto sobremanera. Aquellos fieles llegados con tantaalegríay entusiasmo, salenderramando copiosas lágrimas que conmueven almásdescreído.Es quevuelven almundo; seapartan, aunque nocon el corazón, de s_ù querida Madre, ála cual quizásnovolveráná visitaryamásen su Santuario en la tierra ¡ Oh si secomprendiese el bien que resulta á lasalmas y á la sociedad conestaclasede peregrinaciones, cómo sèmoveríantodos áfomentarlasy tomar parteen ellas! ymucho máscuando losperegrinosvienen,no atraídos porelruído de charangas y elfulgor de castillos defuegode artificio, sino animados de verdaderoespíritude penitencia, y por manifestar suamor yagradecimientoáNuestra Sefiora.

Ténganlo muypresente sobre todoaquellosá quienes el Espíritu Santopusoparagobernar la IglesiadeDiosy sus dignos Coadjutores: propaguen esta piadosa devoción yverán losfrutos debendiciónquerecogerán pormediode ella.Eselmásfructuosoapostolado: por esto el demonio trabaja con tantoahincópara desVir= tuarlo yhacerleperdersugenuíno y sagrado carácter. ^ii

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XIII VISITA ESPIRITUAL Á ' LA

SANTÍSIMA VIRGEN DE MONTSERRAT

Arrodillado el devoto peregrino ante la Imagen de María Santísima, y hecha la señal de la cruz, puede comenzar con el siguiente ACTO DECONTRICIÓN:

Señor mío Jesucristo, que porvuestrasingularmisericordiaytiernoamor álospobres pecadoreshabéisqueridodarlespor madre suyaávuestra propiaMadre, y que para hacernos más propiciasu intercesión habeis queridotuvieseEl:aen la tierra tantos tronos desde donde amorosamente nos escuche comoson los santuarios en que es veneradasudevota Imagen: yo, aunquevil peca-

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dor,hijoamante de estadulcísima Señora, mepresento hoy antesuglorioso trono de Montserrat paravisitarlaypresentarleconfiado mis súplicas. Por lo cual,y para no ser rechazadocomo indigno de comparecer ante sureal presencia,reconozcoanteslos muchos pecadosconqueheofendido á vuestra bondad infinita y manchado mi alma, y os digo que de todocorazónme pesa dehaberloscometido, por ser Vosquiensois, y porloquedeboávuestra generosidadinfinita. Resuelvo, pues,ohJesús mío, con vuestra gracia de nunca más pecar, y deseoque meayudeparaconseguirlo lapoderosísima mediacióndevuestraMadre ymía la Virgende Montserrat, álaque me propongo servir y honrar con lapresente visita.Amén.

ORACIÓN Á MARÍA SANTÍSIMA

Emperatrizdecielosytierra,Madre y Señora mía,Reina excelsa de Montserrat, que en este trono de rocas y nubes habéis queridoestablecerdesdelejanos siglos vuestra hermosa y predilecta habitación, ¿quiénno se sentirá movido á amor yconfianza alcontemplar vuestrosoberanorostroyla dulcey serèna majestad con que osmostráis en esasanta Imagen? Suave es vuestromirar como de madretiernísima,quesólo deseaser suplicada para dispensar toda clasedebeneficios; majes-

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tuosa esvuestrafrente, como de reina magnánima quetiene en su poderla llavedelos tesoros del mismo Dios.Benévolaextendéis vuestramanoconamorosoademánpara llamarávuestrospiés á justos y pecadores que osaclaman su abogada. Sentada os presentáis, comoquien,no decualquiermodo,nideprisa,sinomuydeasiento desea enterarsede nuestras necesidades. Mostráis sobrevuestro senoal HijoDivino devuestras entrañas virginales,noterribleyamenazador, sinosonriente ycariñoso en figura deamable niño, del cual sois á todas horasconindecib_e amor escuchada. ¡Ay tierna madre mía! ¿ qué mayores estímulosnecesito yoparaacercarmeávuestros pies soberanos? ¿Quéprendas más seguras de no verme desairado en mis peticiones? ¿A dónde y áquién conmásaliento acudirésino á Vos?¡Ea, pues, Reina y Patrona mía,Madre de mihermanitoJesús!mostradme con vuestras obras que sois paramítal como os gozais en' ser aclamada. Heaquímisnecesidadesymiserias, he aquímis títulos para serescuchado .

Soypobre, yvengoá Vos que sois Princesa; soy hijodesvalido, y vengoá Vos que sois Madre.Del vallede lágrimas de lavida subo á este monte sagrado para que me las enjuguéis, del fondode mi desventura clamo á Vos para que me déisconsuelo. Tocadle dulcementeel

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corazón á ese vuestro Niño que en el seno os sonríe, para que me mire piadoso, y por vuestra recomendación me otorgue lo que os pido. Hacedlo así, vida y esperanza mía; hacedlo así, oh clementísima, oh piadosa, oh dulce siempre Virgen María, Madre de Dios y d e mí, pobre pecador. Amén.

Luego en silencio y con mucha devoción y confianza expondrá á la Virgen sus necesidades así espirituales como temporales, y después le podrá rezar la

CORONILLAQLAVIRGENDEMONTSERRAT Madre y Señora mía, Reina de Montserrat, á vuestros augustos piés oso presentarme para ofreceros mis pobres alabanzas. Recibidlas, Madre mía, para mayor gloria de vuestro Hijo Jesús, honra vuestra y provecho de mi alma.

Amén.—Padre nuestro.

Os alabo y os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, en unión de los primeros fieles que veneraron en Cataluña vuestra santa Imagen, y os pido para mi alma su fidelidad y constancia en el divino servicio. Amén.—Ave María.

Os alabo y os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, en unión de aquellos angelicales coros que os cantaban en vuestra '

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solitaria Cueva en la tarde feliz devuestra invención en.lasantamontaña. Dadmeque seancomo Iassuyasgratas á Vos y á vuestro hijomis sencillas alabanzas. Amén.—Ave Maria.

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con aquellos dichosos pastores y buen Obispoque por vezprimera vieron en Montserratvuestroagraciado rostro.

Concededme la dicha de quecon ellos pueda gozar devuestravista, noya en imagen,sino en realidad, en el cielopor eternidades.Amén.

Ave Maria.

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con los primerosanacoretas que os rindieron cariñosocultoenesta santamontañay Santuario. Hacedque como ellosos sirvaconobras deverdadera virtud, únicas que os son gratas.Amén.—Ave Maria, GloriaPatri.

Osalaboy os. bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat,con los piadosos monjes que durante tantossiglos habitan vuestro excelsopalacioyforman vuestraCorte privilegiada.Dadmeque con igualessentimientosde vivacompuncióny afecto os acompañe yo en espíritutodoslos díasde mi vida. Amén.—Ave Maria.

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de, Montserrat, con losinocentes ,; escola: ,

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nes que, comonidodeavecillas alpie de vtiestr°o altar, oscantancadadía armoniosas alabanzas. Dadme, oh Madre, que como el suyo seapuro micorazónysin mancillamislabios, para que dignamente puedan emplearse en vuestros loores. Amén.—AveMaría.

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con lospenitentes ermitañosque durante tantos siglos poblaron esta vuestra soledad hermosísima. Haced quecorno ellos practique yo la virtud del recogimiento interior y elevadaoración. Amén. —Ave

María.

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con losSantos innumerables, Nolasco, Ignacio, Calasanz y otros,que tantasvecessepostraronantevuestroaltar,y pidieron aquí la bendición para sus cristia- os nás empresas.Dadmequelesimiteenfrutos deverdadera santidad, y que comoellos tenga por único norte de mis trabajos la gloria de Diosy- vuestra. Amén.—AveMaría,Gloria Patri..

Osalaboy os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con los innumerables Prelados,Reyesypueblosquehansubidola cuestadevuestramontafia, y oshan ofrecido consingulardevociónpreciosos regalos. Como ellososofrezco,Madremía,en-humilde dádiva mi pobrecorazón. Amén.— AveMaría.

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Os alabo y os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con las cien y cien devotas procesiones y romerías que os han visitado y os veneran aún con rezos, cánticos y penosas mortificaciones. Como ellas, hacedme despreciar, oh Madre, los vanos respetos del mundo, y profesar libremente la fe vuestra sin desmayar jamás. Amén.—AveMaría.

Os alabo y os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con las aves mil que os dan música día y noche en este monte singular, y con las variadas flores y retamas que lo adornan y embalsaman. Como éstas florezca siempre mi vida en obras de piedad perfecta, y como aquéllas os canten sin cesar mi lengua y mi corazón. Amén.— Ave María.

Os alabo y os bendigo y glorifico, soberana Reina de Montserrat, con todas las voces de ángeles y hombres ; con todos los latidos de amor de todos los corazones; con todas las armonías del cielo y de la tierra. Dadme, oh Madre piadosísima, que con todos os bendiga y glorifique este vuestro siervo en vida, en muerte y por toda la eternidad. Amén. — Ave María, Gloria Patri.

ORACIÓNFINAL

Gloriosísima Reina de estas montañas, Patrona nuestra y Madrenuestra, Virgen de

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Montserrat !Yaque paciente y amable habéis escuchado las preces yalabanzasde este vuestro devoto, oidbondadosa los últimos suspiros desuamor antes de que por esta vez se aparte devuestrapresencia. No me apartaréde Vos sinque me concedaisvuestramaternal bendición. Pormí, pues, osla pidoy por mi familia y amigos,trabajoséintereses.Porla Iglesia deDios hoy tancombatida y por suafligido Pastor universal. Pornuestra patria tandichosaun día, cuando era toda de Vos, y hoy des alejar, tanprofun--dequVosharid damente desventurada. PornuestroClero y pueblofiel,tansolícitossiempre enamaros, serviros y festejaron.Por estevuestroSantuarioy devotaComunidadque formaloscoros de estevuestro cielo en la tierra. Porlosjustos para que se conserven fieles hastala muerte en graciadevuestrodivinoHijo.Porlos infelices pecadores y malos cristianosque tanto necesitande Vos' para volveral camino del bien. Por los enemigos delCatolicismo, para que con vuestro brazopoderosolosconfundais y convirtais en Apóstoles dela verdad. Vospodéis hacerlo, Madrenuestra,Vospodéis lograrlo devuestro DivinoHijo,y no noslo negaréis.¡ Oh Madre celestial!concedednos .finalmente,enpago de esta visita, ser visitados por Vos en lahora de nuestra muerte, y reinardespuésdeella en la patriafe li zcon elPadre,el Hijoy.el Espíritu

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Santo y con Vos por los siglos de los siglos.

Amén.

DEVOTÍSIMAORACIÓNDE SAN BERNARDO

Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido á vuestra protección, implorado vuestra asistencia y demandado vuestro socorro, haya sido abandonado de Vos. Animado con esta confianza, á Vos también acudo, ¡ oh Virgen, Reina de las vírgenes!, y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo á parecer ante vuestra presencia soberana. ¡Oh Madre de Dios!, no desechéis mis súplicas, antes bien escuchadlas y acogedlas benignamente. Así sea.

Pio IXconcedió300díasde indulgencia cada vez que se rece;yplenaria al mes,si se reza cadadía, confesando ademásycomulgando,y rogando por las intencionesdeSu Santidad.

FIN

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AND/CE Páginas _

BreveItinerario delperegrino enMontserrat V I. —Montañayvias decomunicación .

1 11 IL—ElSantuario 25 III.—Hospitalidad .

39 IV. —La iglesia..

69 V. —Locales adherentesála iglesia.

87 VI. —LaEscolania ..

VII. —LaSantaCueva. . .

101 115 VIII.—Alrededoresde Montserrat . .

IX.—Santa Cecilia.

131 139 X. —Lasermitas .

171 XI. —Las cuevas 185 XII.—Culto,Cofradía, peregrinaciones.

XIII.—Visita espiritual á laSantisima Vir201 gende Montserrat

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