Estásenmí Poemas de amor Luis Antonio Marín Burgos
Títuo original: Estás en mí © Luis Antonio Marín Editor: Luis Antonio Marín Primera Edición: Tiraje 500 ejemolares El contenido de este libro no puede ser reproducido todo o en parte por método alguno o sistema de almacenamiento ya sea químico, fotoóptico, magnético, electrónico sin el permiso previo y por escrito del propietario del copyright. ISBN: 978-958-44-5202-3
Impreso en Colombia por Panamericana Formas e impresos S.A.
A Dios, mi Padre!, y a los seres queridos que Él me dio
En mi corazón se agita un bello tema mientras recito mis versos ante el rey; mi lengua es como pluma de hábil escritor (Salmo 45:1)
Un mar de amar... En el profundo mar de ensoĂąaciones boga mi alma ilusionada rema jovial, feliz, alborotada por la piel de nuestros corazones La saetilla del amor marca su ruta del dulce viento se siente engalanada y con la luz que fulge una estrellita busca tu amor, mi alma extasiada Es su espadilla, tu voz y tu sonrisa y su aliento es tu ternura, amada mĂa boga mi alma... boga por ti, enamorada
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Amada mía... 8
Nunca será más grande y más bello que tú, la fuente en que me inspiro, el verbo con que te escribo, ni el sentimiento que con él te dejo
Linda Mujer… Qué hermoso es nacer en ti, con el dulce brillo de tu mirada, nacer en ti.. la ternura, el alba, nacer de tus besos, tus caricias, nacer, nacer... y solo en ti, querida mía Es más grande aún, verte nacer en mí, en mi regazo, en mis mimos, como la flor, del tierno viento que la toca Nacer en ti, en mí, nacer los dos, en nuestro mundo, universo... de cariñosos silencios
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Flor del Silencio… Tierno ahora de mis días dulce remanso de la vida ocurres en mí, suave... furtiva cual aura que roza mi mejilla 10
Grato tránsito de mi piel frugal ternura mía impregnaste en mí, de miel, tu frágil fragancia, alma mía Te desbordas en mí extasiada de dulzura en el mundo del silencio bajo nuestro manto mudo
Cuando me miras... Revives en mĂ la ternura erizas mi piel me llenas de miel y grata dulzura Feliz me dormito soĂąando en tu acento y desplazo mi pensamiento a un eterno momento Abres la luz a mi sentimiento baĂąas mi corazĂłn de contento segundo a segundo como un suave viento Cuando me miras... te siento en mi adentro
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Dulce Sonrojo… Piensas mal, al creer que en mi día una tibia melancolía, puede fraguar tu alegría
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Solo por hoy, te pido una sonrisa tibia, sutil, llena de ternura solo por hoy, por hoy, amada mía Cuando quiera volver a tu ser esa melancolía, recuerda me pidió por hoy, solo alegría Acaso es mucho pedirte en este día una ternura, una flor, un sonrojo y una alegría
Ven a mí... Frágil flor que me dormita en las duras estepas de la vida suave viento que cobija mi triste adiós de cada día Sé donde estás y nó cómo te encuentras sé que eres mía y no puedo tenerte Brillo infinito de mi aliento incansable resplandor de mi camino ven a mí como haces siempre con tierno acento y en silencio
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Al pensar en mí... Cuando en mí pienses hazlo en la luz en el viento en el blanco firmamento
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Mira a los niños sus dulces lágrimas sus tiernas manos sus delicados juegos Busca las flores el dulce aroma el tierno manto que las esconde Cuando pienses en mí piensa... en el amor y en el silencio
Poema de amor, para un amor en silencio... Con el tibio azul de la mañana y el rojo encendido de la tarde libo el amor que un día me diste en el fino cristal de tu alborada Amiga en mi amor, amante en mi silencio, cómo escribirte lo que por tí siento, ufano cada día tu casto sentimiento a la mirada perdida del testigo que encuentro Dile a la blanca flor cuánto te quiero, si mi sentimiento por tí es claro y sincero, insolente gritará que es puro, nacido del alma del hombre en tí prendado
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Quiero que sepas...
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Triste y perdido en un mundo lejano siento que mi alma desgarrada te clama Siento ausencia, soledad, vacío, y con agonía oculto este extraño sentir de mis entrañas
Estas en mí... Letárgicos instantes en mi soledad vividos mundo de hondos semblantes al pensar distantes tus mimos Acudo a ti, en nuestro lugar preferido, buscando ansioso tener tu sonrisa, encontré en él, tu aroma y en ti me sentí, perdido Dulce nostalgia de saberte a otro día de internarte en mi sien en mis adentros dormida de saberte en mi vena y sentirte...¡mía!
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Fiel, te espero...
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Fiel a nuestro amor a tu palabra de regreso confundido entre las flores deshojando tus caricias te espero... Dormitando en tu sonrisa en la alegrĂa de tenerte viviendo el aroma de tu amor la suavidad de tu sonrisa te espero...
Te extraño... Me acuesto en ti pensando y pensando en ti me despierto dejando caer el alba de tu alma sobre mi piel ajada de existencia En el tibio dulzor de tu recuerdo se estremece mi corazón enamorado de la luz que me brinda tu ternura en la fresca mañana de la vida Tu aroma como sombra me acompaña en el suave evocar de tu presencia me acompañan tu sombra y tu aliento en el frágil caminar de mi desvelo
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Mirar amando... Mis ojos se deslizan por la superficie de tu ser tiernamente se deslizan baĂąando de dulzura tu piel 20
Finamente te acarician como un artista al pincel dejando en ti la sonrisa entre sus labios de sed Beben de ti la ternura y el erizar de tu piel sedientos buscan amarte mĂĄs y mĂĄs... cada vez
Solo quiero... Si he sido todo en ti por amarte más quiero ser para más amarte! pues no concibo perdón a dejarte cuando en mi corazón existe sentimiento Quiero ser flor para que brille en tus ojos mis colores y dormitada en tu ser me comprendas que quiero y más quiero ser por ti, todo, mi amor secreto Ser tu regazo, para guardar tus sentimientos vivos de amar entregada en silencio, ser el portal que me abra tus caricias al más puro amor y sincero afecto Quiero y más quiero ser lo que quieras con tal de amarte más y engrandecer lo nuestro
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Nuestro hogar...
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Allá, donde confluyen nuestras miradas y el firmamento, donde se tocan nuestras caricias y besos, donde beben nuestros cuerpos el húmedo del alma, donde la ternura interpreta nuestros corazones, y el silencio descubre nuestra existencia... Allá, en el infinito, hogar de los que aman, estamos Tú y Yo viviendo embriagados nuestro sentimiento
Profundo Amor...
Dulce amor verano encuentro tierna canción hondo contento
En dónde estás mi amor secreto dame tu alma viaja conmigo
Fresco sentir célico néctar bebo tu amor liba del mío
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Mía... eternamente!
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Con suave pasión y blanca ternura mis labios beben del dulce amor que la fuente de tu ser deja en mi piel En la línea aguda de tu cuerpo... transito taciturno con mi alma, camino embriagado de tu vida, mía, desde un día, eternamente!
Te encontré... Caminando en atavismos tal vez solo, tal vez triste lleno el alma de desconsuelos del adiós que me trajiste Desbordando las penumbras amargas y frías de la noche cálidas un día en tu vientre letárgicas y solas en tus palabras ¡ Te encontré !... y serás para siempre, Mía
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Solo, te espero... Solo, pensando, busco descubrir si fue valor el que encerró mi palabra o quizá cobardía, nacida de la nada
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Cruel y absurdo verbo, nato, interfecto y ajeno a la razón, del sentimiento Cuándo vendrás, aroma de mi sien a cobijar el frío de mis labios en qué momento, a bañar estos anhelos Solo te espero, amor, mi amor eterno
En tu amor... Los labios de tu piel me han atrapado, no me dejan salir de la miel que en mi alma han dejado Me han atrapado, me han atrapado, y los versos de tus caricias han detenido mi tiempo en el extasiado infinito de tu encuentro Quiero volar... y las frágiles alas de mi amarte desvanecen su libertad en tu cuerpo tibio regazo de mis sueños Quiero caminar... y mi paso se pierde en tu silencio suave lenguaje que a mis oídos susurra la dulce sinfonía del amor que siento al sentirme en tí, en tu adentro Me han atrapado, me han atrapado en el mudo encanto de tus realidades y sueños
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T煤 y Yo
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En la madrugada de tus alturas se posa mi alba, mi ternura se suelta con pasi贸n, con locura En el hervor de mi existencia en ti se asienta chiflada, ind贸mita en tu mojada aroma ... viva!
Vuelo... Vuelo en ti, el universo entero, Vuelo en el por qué de mirarme un día, En el permitirme amarte y entregarte mi vida, Vuelo...vuelo en ti, en la ilusión, en el más bello verso, En la loca razón de saberte mía
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Bella flor... En la luna de mis sueños tiernamente te dormitas en el sol de mi esperanza resplandeces infinita en la luz que brilla en mi alma majestuosa te transitas 30
En el frío de la soledad arropas nuestras querencias en el tibio dulzor de nuestra vida dejas caer tus locuras a las mías Bella flor... ven a mí engalana mi existencia ronda mi intimidad toma mi vida
Aún en la distancia... Volaré taciturno a cada encuentro fiel seré a nuestro lugar y momento te sentiré como ayer, como hoy, presente en la marca del beso que dejaste en mi frente Renunciaré a vivir mis externos momentos a cambio del beso que me des al regreso lo haré a cada segundo por la tierna ilusión de nuestro encuentro Te esperaré con la frescura del alba con el aroma del hasta luego inmerso en tu suspiro, en tu aliento en la blanca razón de saberte mi amada
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Melancolía... (I) Veo pasar el tiempo lánguido, eterno siento correr sus horas como dardos, como espadas
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Melancolía... (II) Cruza de largo el viento y al hacerlo, las hojas, roza es extraño su cortejo y lejano el galanteo Nace el absurdo celo de no tener asida a mi cara tu caricia, tu mirada, tu dulce sonrisa
Melancolía... (III) Doloroso tiempo sigue de largo, sigue no te detengas en mi existencia pasa presuroso, vuela, y haz más cercanos sus besos Sé que me entregaste los más bellos instantes pero lo hiciste, junto a Ella, entonces, de dónde, lentamente recorres, si sabes que ávido estoy por tener sus abrazos y besos Siento su voz y su entregada mente también su mirada y ese tierno pudor de tenerme
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MelancolĂa... (IV)
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Su amor me llama a mis oĂdos me clama una caricia, una mirada mi alma a Ella entregada No desesperes ya son menores los segundos para entregarte un beso y decirte cuĂĄnto Te Amo!
En el firmamento... En el manto azul del firmamento tatué tu amor, mi sentimiento con el loco buril, suave y tierno pinté también, el amor que llevo dentro Entre la luz furtiva de un lucero deposité la pintura de nuestro enternecimiento el sol enmarca la hermosura de este cuadro y el farolito de la luna lo alumbra por completo Ahora, es el espejo en el que te miro en todo momento aferrada a mí, a mi mano, a mi pensamiento a la dulce ilusión de nuestro encuentro
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Tiempo, adiós...
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Si pretendiste darme dolor qué equivocado estabas pues más que eso haz aumentado mi amor déjame decirte la conclusión de todo esto, la amo... siempre y plenamente ¡La Amo!
Brindo por tí y por mí... por lo nuestro Se alimenta mi alma de tu recuerdo de nuestro amor y tiernos besos danza al son lejano, cadencioso reposado en mí, por tus abrazos La luz nocturna, oriente de los sueños me transporta como viento hasta tu lecho para colmar tu ser de nuestros mimos vertientes de un sincero sentimiento Sonríes desprevenida a mi coqueto galanteo al sentir mi presencia, en silencio deslizando el perfil de tus adormecidos ojos sobre el pétalo del tierno amor que nos tenemos Lentamente se escurre por mis adentros el sorbo de amor que por ti, brindo al firmamento por la tierna ilusión, de amarte en secreto de entregarte mi amor, de hacer tuyo mi afecto
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Te necesito... (I) Escudriño en el firmamento en su infinito y no te encuentro No estás aquí y estás en mí lo vivo y siento
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A dónde fuiste tierna flor blanca susurro del viento Aunque no estás te siento en mí tu dulce aroma y aliento Extraño adiós que nos separa y más aferra Te busco en silencio por dentro de mi piel en mi íntimo trecho Entre el tejido del grito taciturno de nuestras victorias secretas
Te necesito... (II) Repaso tus confines en la prolongación de mis sentimientos Déjame acompañarte y que los ojos de mi sonrisa acaricien la senda de tus sueños Piérdete en mi contemplación bajo el cenobio de nuestras almas y cuerpos Como dejaste perdido en mi respiración tu aroma y un beso Entonces florecerán entre la fértil luz de los luceros Nuestros mudos gritos llenos de amor y tiernos anhelos
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Tallito m铆o... 40
Naci贸 en la oscura noche una tierna y clara lucecita un loco lucerito, me cont贸, linda, dulce, suavecita
Me quedé perdido... En tu partida extraviado en tu voz en tu ausencia en el frío destello que dejaste con un adiós eterno Me quedé perdido ... errante en la afónica fronda de tu ausencia preso en la dulzura de tus encantos entre una loca sinfonía de ternura y besos Me quedé perdido ... en el desván del techo celeste de nuestros escondidos tiempos en el corazón ardiente en la piel reseca en la inagotable fuente de tus sentimientos Me quedé perdido ... en el ropaje de tu alma en el delirante talle de nuestra paz y silencio
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Si pudiera decirte... Que me marcan tus besos hoy, más que el primero Que susurra tierno a mi oído tu primer Te Amo tu agónico Te Quiero 42
Que mi sangre anhela... borbotear con tu alba como arde cuando te miro Que necesito de ti como la noche del lucero el alba del viento y mi corazón de tu beso Si pudiera decirte... Que me haces falta que Te Amo hoy, más que ayer ayer, menos que siempre
Amada mía... Una lágrima roja brota de mi alma, confundida en el mutis de esta frágil mirada inundando de congoja, de tristeza, el pálido sabor de tu ausencia Viajera ardiente en el recuerdo de tu dulce sonrisa y tierno beso prendados en este ser... agotado, de esperar tu eterno regreso Indómita se ensaña a mi rostro, a la afecta canción de amor a ese que un día fue ilusión y hoy...es verbo Cuándo terminarás amarga gota de recorrer la mejilla de mi vida cuándo volarás de mi sueño para caerte en el precipicio del olvido
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Entre tu piel... Tú, la flor yo ... tu ave En ti, yo el polen tú en mí, el aire Eres el cauce yo tu corriente
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Tú, mi fuente yo... delirante Eres remanso ... me has hecho estruendo Escondes tu esencia yo ... la sorprendo Ansías mis labios tu piel anhelo Entre tus cumbres viajando vuelo
Allá, los dos uno ... al tiempo Mía, por dentro tuyo, en tu cuerpo Entre tu piel tu néctar bebo Tú... ¡embriagada! yo, de ti sediento Tu vientre en flor en flor mi simiente Nuestras miradas nuestros silencios Enajenación... mutis eterno
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Cuando encuentres... Que mis labios no remojan el sonrojo de tu piel y mi fuente inagotable se ha secado para ti
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Que el lejano horizonte ha perdido su ardor y el remanso de delirio duerme sólo en el ayer Que la cándida mañana de galerna se deshace y la noche llega sola alejada de la tarde y su color Cuando encuentres... que no he sido hoy como ayer mi sonrisa sabe a un sueño pignorado a la abstracción No me busques ... he marchado entre los dedos de tu piel en el fulgor de tu sonrisa distraída entre brillantes de ilusiones y desdén
Son mis promesas... Ahora entiendo la fragilidad de tus promesas, al parecer, se las llevó el viento olvidaste sentimientos, y hasta detalles de pronto todo terminó en ti, como un recuerdo Sé que fallé y tendré que llevar el fijo costo marcado está en mis adentros, en silencio ingrato buril que hoy se ensaña en mi desconsuelo y ayer tatuaba cada instante, cada beso Solo te pido, sepas perdonar cuando no tuve el valor para refrenar mis querencias y buscarte con anhelo tenme por débil, por loco, hasta por grosero, a cambio de mi verdad, la sed de amarte que llevo dentro Nunca te extrañes que siga vivo, por lo nuestro, son mis promesas que no se han roto o mi porfía de saberte a mi encuentro una mañana, una tarde, o en un desvelo Déjame gritarle al mudo viento que te necesito de pronto el me responda ... que los juramentos de un día, aún son nuestros
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No lo sabes... No sabes cuánta falta me hiciste, no sabes cuánto te he extrañado, no sabes cómo te he buscado, no sabes lo que te he anhelado
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No sabes la sed que he tenido de ti no sabes del hambre de mi cuerpo no sabes mi angustia de acariciarte no sabes mi clamor por tenerte No sabes... no lo sabes Tendrías que haberlo vivido en mí a lo mejor, solamente lo sabrás cuando desentrañes de mí la falta que me has hecho... con tus besos
Cuando pienso... En el bello matiz del arco iris, en el suave aroma de las flores, en el diálogo pícaro y secreto que entablo con un niño cuando atrapo su mirada, en la blanca inocencia de las aves cuando coquetean el aire con su vuelo, en la tierna caricia de una madre y en la dulce expresión que esquela su sonrisa, en la fina sinfonía que toca el viento en nuestras caras, en el final del universo donde solo tu amor y tus caricias me han llevado, en la luz y en la sal que eres de mi existencia, en el hoy y el mañana de mi vivir Cuando pienso... lo que había dejado de sentir y vivir, por no conocerte, descubro simplemente que no sabía qué era existir
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Adiós amor mío... 50
Mañana, cuando vuelvas, cuando encuentres nuestro lecho vacío, no te preguntes por qué me fui, si tú te fuiste primero
Soledad, te acompaño... A la vera del camino un triste canto, encontré entre su do, re, una afligida huella en mí dejó y al saber que en mi corazón la consigné el hombre tierno a mis brazos se aferró No fue difícil descubrir que en su agonía el nombre de ella, exclamaba con dolor fría su alma, fría, por mi ser se deslizaba hacía su llanto mío, mío su llanto, de amor Suaves cristales mi horizonte humedecían al ver su alma, empaparse de aflicción en dónde estás clamaba cual mendigo al más puro amor que en su vida conoció
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Perdido, quiero
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Perdido en la luz de tus ojos busco embriagarme de amor libar del azul de tu alma en tu luz, embriagado, perdido libar de tu amor... quiero
Sé que vienes… En esta noche, mi alegre desvelo marca la felicidad de nuestro encuentro siento venir a mí, el calor de tu cuerpo el ansiado aroma de tu aliento Mi alma llora de contento y mi ser salta alborozado al sentir cercano tu beso asida a mí por entero Ahora, puedo serte sincero confesarte sin recelo cuán grande fue tu vacío al dejarme sólo, con tu recuerdo Si me pidieras un regalo nunca vacilaría en decirlo de ti quiero tu sentimiento tu dulce amor, tu ser por completo
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Señora Mía... De la profundidad de mi alma una voz melancólica clama la amargura de no tenerla a mi lado entre mis brazos, si yo la amo tanto
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Sé que también usted siente lo mismo y que el segundo se le torna mas acerbo solo al pensar en dónde estará esa sonrisa sutil aliento de los días de su vida Dice en su letra... de pronto es egoísmo nunca lo piense, no es correcto, mi lucero pues si es dueña de mi aliento, de mi alma claro es que piense tenerme junto a la suya Espero entienda, soy el aire que respira el horizonte donde dirige su mirada soy el aliento que da vida a su vida soy noche y día que vigila su existencia
Cada instante de la dulce vida mía la debo a usted, a su amor tierno y sincero a las caricias que desborda sobre mi hálito hasta cubrir mi alma por entero No desespere, el mañana será nuestro nuestra su luz, su oscuridad, cada momento y brindaremos embriagados, al quinto viento todo el amor que construimos con fundamento Solo a su lado concibo mi mañana juntos, perdidos por la ruta del amor hoy somos los dos, testigo es el Señor mañana también lo será el universo
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Dulce vientre...
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Traviesa, callada, serena y delicada en donde no est谩s, que no te encuentre... y con ello tu aroma, tu voz... tu faz sonriente, c贸mo agradecer al Paridor de 茅ste... por la bondad de parir que te ha dejado, y c贸mo hacerlo... a tu mirar, a tu dulce vientre, si nos honra con el fruto tierno de tu casto aliento
Estásenmí Cartas de amor
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Anoche, cuando eras mía mientras el mundo dormía... Me transportaban tus caricias, tus miradas y ese dulce beso que me diste al despedirte y que creía alimento para mi alma, hasta volver a tenerte. Coreaba nuestros sueños un suave trino con célicas tonadas y tocaba nuestras pieles un exquisito céfiro de amor profundo y tierno. Soñaba sentimientos grandes, puros y sinceros. Mi corazón te gritaba en mudo tono y refinado acento, al oscuro de la noche te llamaba, pues soñaba en ti, teniéndote en mi ser, en mi piel, por dentro. Soñaba en tu almohada, en el calor que te brindaba, en su privilegio de tomar tus sueños y hacer suyos tus desvelos. Soñaba en ti, en mí, y volaba en el conjugado verbo de nuestras almas y cuerpos. Visité el universo por entero, en él viajabas conmigo, alma con alma, piel con piel, momento a momento. La miel de nuestras sienes embriagó nuestros cuerpos, y el calor de nuestros corazones abrigó nuestro silencio. Majestuoso sueño, lleno de amor casto y tierno. Me transporté hasta tu lecho y te encontré dormida en mis sueños. Supe que también vivías en mí, cada instante, cada tiempo. Te bese con la brisa y te brindé calor con la ardentía de mi corazón y de mi sentimiento. Anoche, fuimos uno y el mudo mundo, nos arropó en silencio.
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Tierna Mujer
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Tengo que confesarte que no ha sido fácil para mí, comprender que otro día pueda volver a verte, porque éste, me trajo la ingratitud de no contar con tu adiós. En lo profundo del pensamiento he intentado comprender también, por qué la velocidad del tiempo que antes rodeaba mi vida, ahora es lenta. Busco explicaciones y no alcanzo a caminar el camino de sus respuestas; encuentro en mí, una inexplicable dulzura que tibia mi corazón y mi piel pone candente. Grata sensación de existires que creía lejanos y añejos. De pronto, de ese mar de interrogantes a mi alma y a mi ser, sobre el más hondo de mis querencias, fluyes como manantial de agua pura y fresca, que baña mis pesadillas y sobre las bases de mi existencia, haces aflorar del letargo de mi vida, agradables sentimientos que desde hace algún tiempo los creía ausentes. Cómo explicarte todo esto? Siento que siento, y también siento que has despertado mis sentimientos. Perdóname si soy irreverente, pero es la in-
temperancia del sentir serio y sincero el que me lleva a inclinar en el papel estas letras que son los más respetuosos enternecimientos nacidos por ti y para ti. Discúlpame si en lugar de agradarte te entristezco, pues nunca pretendería dejar en ti algún amargo momento. Comprendo que el blanco no es solo color, detrás de él se encuentran inalcanzables y delicadas realidades, que solo a trasluz del sentimiento, los que logran vivirlo, pueden descifrarlas. No sé lo que me sucede, mi verbo se acorta al querer escribirte. Quisiera transportarte lejos, donde una suave brisa acaricie tus mejillas y permita a tu corazón enterarte de mis adentros. Sin embargo, se me ahoga la palabra y por más que pienso, siempre vuelvo al punto donde comienzo, tu inteligencia, tu ternura, tu sonrisa, TU! Ojalá mañana, al verte, pueda entregarte esta letra o mi sentimiento, y no me quede como hasta ahora, ahogado en ti, sin palabras, lleno de miradas y en silencio.
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Cuando te sentía lejana ignorando que en mí estabas.... Siempre creí que tus miradas y sonrisas que habían logrado aflorar mis sentimientos permanecerían ocultas en mí, en el secreto mundo de mi vida, escondido en el loco y profundo universo de mis querencias. Pensé que por el respeto de saberte ajena en otro mundo, pues en el mío, mía eras, y por la cobardía de perderte, era mejor callar y conformarme, construyendo delicados e imborrables momentos de reservada dulzura.
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Con solo mirarte conjugaba en fino acento los vértices mas profundos de mi alma; me inspirabas respeto, ternura, amor, amor de amor y también locura. Bebía en silencio cada paso, todo momento. Miraba a través de los cristales del viento, sentía el exquisito hilván de tu corazón y me embriagaba con disimulo del suave aroma de tu ser. Por ti tomé la letra buscando ser poeta del amor, pintor de la alborada, infante a tu gesto, jornalero a tu encuentro, escultor de tu ternura y arquitecto del sentimiento que llevo por dentro. Fui tantas cosas por ti, y en silencio, pues circundabas mi mente, como me cubre el viento. Viví prudente tu alegre gesto y aprendí a descubrir en tu rostro tu sufrimiento, leí de tu mirada tu corazón tierno y descifré también de ella un alma plétora de amor, de enternecimiento. Tantos y tan agradables sentires y sentimientos que sé, solo con un beso, podrán determinar su verdadero afecto. Ahora, no solo siento, también se que es tuyo y lo llevas dentro.
Ahora eres mía y en sagrado sacramento... El viento es el notario de nuestro amor y silencio. Ante él tú y yo firmamos la alegría de tenernos. Se llevó en su protocolo el ansia tierna de nuestro sentimiento y firmaron como testigos el mundo, el azul del cielo y uno que otro pajarito que con su suave vuelo supo cortejar lo que llevamos por dentro. Secretario la ternura y la sinceridad fue el papel donde impregnamos nuestras huellas. Dios nos brindó la licencia, aposentó en nuestros seres como granja, una vida, y cargó en nuestras alforjas sus mejores semillas y secretos, para que jornaleros cosechemos en los verdes campos del amor que nos tenemos. Por ser toda una dama es que salí a tu encuentro, por tu seriedad y ternura, tu inteligencia y prudencia. Por todo eso...¡ TE QUIERO !
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Mujer...
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Déjeme escribirle con mi burdo verbo, el mundo que mirándola construí por Usted, en silencio. Fueron muchos los momentos que con disimulo miré sonrojado, su dulce presencia. Al principio eran mis ojos y mi alma los que corrían a la tierna coincidencia de saberla cerca a mí, aunque no mía; después, fue todo mi ser el que pronto estaba a la dulce ilusión de vivir tan solo con mirarla pasar fugazmente. No era fácil racionar al cercano instante, la luz de sus luceros y su dama presencia, plétoras de delicada gracia y exquisita fragancia de sentimiento puro, tierno. Sus labios fueron míos y mía fue su alma en mi silencio, la cortejé en el callado universo de mi ser y dancé más de una vez con su lejanía. Amante fui de su distancia y bordeando con delicado amor, hice míos sus sueños. También bebí taciturno del fino cristal que salvaguarda su señorial intimidad. Fui delicado amanecer de sus días y luna vigilante de su descanso, aire que acarició sus mejillas y luz que galanteó su cuerpo. Fui por Usted, todo, y en secreto.
Por un humilde y sincero sentimiento... El cincel del segundo marcó anoche mi desvelo. Debo ser sincero contigo, como siempre lo he sido...la noche, la profunda noche se hace amiga de mi pensamiento y le sirve de corcel que lo transporta por un mundo infinito de preguntas. No puedo dejar de escribirte estas cortas líneas, pues considero que también hacen parte del sentimiento que fina o torpemente he intentado describirte con el uso de mi quizá insolente palabra. Sabes bien cuánto y de qué forma ¡Te Amo!, he buscado desnudar mi alma ante ti, haciéndola tuya hasta siempre, tal vez poco pueda ser lo que ella vale, pero ese poco es tuyo. Nací en ti nuevamente a la escritura faltando a mi palabra de no intentar jamás volver a ella. He volado junto al viento buscando presuroso tu sonrisa, y hasta quise un día convertirme en el mendigo más tierno de una caricia tuya. Has hecho de mí tantas cosas y tan bellas que la vena del pobre poeta que en mi existe, siempre se quedó corta frente a la belleza de tu sentimiento. Eres en mí lo mejor de lo mejor, el mejor rinconcito donde dormito mi verdad de amarte, la mas tierna caricia, la pura sonrisa y la mas bella sensación de estar en tu piel cada milímetro. Has sido todo en mí y en mi toda eres. Por ese sentimiento que te tengo, quiero pedirte hoy, que perdones si la torpeza de mi letra ha llegado a causarte amargura, si mi sonrisa ofendió tu fina calidad de dama, si mi caricia socavó la tierna intimidad de tu ser y de tu alma....por favor, entiéndeme que nunca he pretendido tenerte mas allá de la verdad del sentimiento que me profesas. Te amo, con la pulcritud con que te he escrito. Te amo, con las mas bellas calidades de tu ser. Te amo, con el sentimiento del hombre al que la crianza y la vida, le enseñaron a ser a cada paso de su existencia...humilde, noble y sincero. Te amo, simple y grandemente, ¡TE AMO!
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Pensando en mi dulce alegría...
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Camino por la vida, intentando inscribir en el viento y en ti, las huellas claras de un humilde afecto impregnado de verdad y sentimiento. El aire esquela la blanca sombra que te entrego al mirarte, y a trasluz de tu mirada me interno en el enternecimiento profundo de tu alma y de tu cuerpo. Aflora mi piel cuando en ti pienso y al tenerte cerca fragua en perpetuo aroma mi corazón, y mi desnuda pasión de amar nace al mismo tiempo. Con los viejos y cómodos zapatos de mi alma marcho presuroso a tu hoy y a tu mañana, al hoy de saberte mía y al mañana de tenerte en mí, infinita. Los intolerantes pasos, dardos de mi existencia, parecen marchar al son del viento; ésos, que desgarraban de la esencia de mi vida, la flor de la ilusión y de mi talle, ahora siguen de largo, indiferentes. Ansioso busco la razón de ésta, mi agradable realidad, la busco en la pureza del sonrojo de un niño, en la tierna mano del anciano, en el brillo de los enamorados ojos, en la suavidad de una caricia y en la profundidad de una palabra, la busco... hasta llegar a su encuentro... ¡Tú!
Me desperté soñando... Mi pensamiento caminaba, y junto a él los más sencillos y hermosos detalles acompasaban con refinada locura, tu sonrisa. La luz de tus ojos festejante ceñía la travesía que emprendía por ese innegable y dulce sentimiento, germinado de la verdad de amarnos. Galanteaba mi sendero la flor de tu inocencia y la limpia esquela de tu alma daba abrigo a mis querencias. Con seráficas tonadas susurrantes al oído, menudas avecillas vitoreaban la más bella melodía de amor y entrega. Caminaba por el aire y animaba mi calzada la realidad de percibirte mía. En la luz que me alumbraba y al mismo tiempo cobijaba, agraciada, bella, tierna, encantadora, a mi dermis te aferrabas. Hacidos uno al otro, cortejados por las aves, por la luz y tu sonrisa, comenzábamos una vida hasta siempre amada mía. Conjugábamos las almas y uniendo nuestros seres irradiábamos ternura, amor, pasión, locura, ante todo, verdadero sentimiento. Eras mía y yo, tuyo era, conciliábamos los cuerpos de tal forma que no sé.... era perfecto, extasiados uno en el otro desfogábamos sin recelo hasta el último rincón, hasta el último momento. Era el sol nuestra frazada y su luz nuestro techo. Eras mía y yo, tuyo era frente a Dios, al sol y a los cuatro vientos. Desperté y me di cuenta que soñaba, ¡la realidad de lo nuestro!
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Déjame amarte más...
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Deja que mi alma acaricie tu alma; que mi corazón sea oasis fecundo de puros sentimientos, estrellados bajo el limpio éxtasis de amor; que mis ojos dibujen lo grande de tu ser y lo estampen en mi mente para que imborrable permanezca en mí, por siempre; que mis labios beban del elíxir de vivir que cada día desprevenida me transmites; que mis manos finos y castos pinceles de nuestras querencias rocen tu faz y tu piel toda, alejados del banal pensamiento y sumergidos sí en el sencillo y sincero afecto que nos tenemos; que tu imaginación vuele aferrada a la mía por los mas bellos paraísos, templos de sacros sentimientos como el nuestro; que embriagado de la vida, refresque con tu miel tu fuego que mi piel quema; que acompañe al viento, a la luz, al sol, a la noche, a la luna, a todo lo que con desapego acompaña nuestro amor en silencio. Déjame amarte mas que te prometo, hacer por ti, mas suave el pétalo de la flor que algún día te entregue, mas tierno el trinar del ave testigo de nuestro sentimiento, mas claro el manantial que riega nuestro amado silencio. Déjame amarte mas que te prometo, amarte mas, cada momento.
Jardinerito de Amor... Esta es la historia de un jardinero, no cualquiera, que amando su oficio, cada día ha cuidado en silencio la más tierna rosa hasta hacer brotar de ella, su infinita hermosura. No un día cualquiera con la mirada perdida lleno de amor y sentimiento tomó entre sus manos una diminuta semilla, por encima de todo egoísmo, decidió depositarla en el mundo, consciente que un día ella crecería y que los ciegos de la vida solo cuando fuera grande la mirarían, y sin mayores reparos dirían, ¡ esa semilla es mía!. La contactó con la mejor tierra y de amor la abonó, la regó con dulzura y con sus manos la podó. Fue al comienzo una ramita, después una ramita y una hojita, hasta que tanto regarla un botoncito salió. Fiel a su ilusión de un día, la atendía en silencio, la cortejaba, le hablaba, para embellecer su aumento. Y de tanto atenderla un gran día floreció......majestuosa toda ella, de inigualable belleza, tan pero tan dulce y tierna, que ni él mismo imaginó. Se preguntaba aquel hombre de dónde tanta belleza, si era solo una semilla y por qué así floreció. Y continuaba regando de amor a su delicada rosita, mientras por dentro se preguntaba...qué hice yo?. Cavilando perdido en su sentimiento de amor, un día encontró la respuesta a su interrogante....clara y sencilla la rosita creció, por que la abonó con amor, la regó con dulzura y con sus manos la podó.
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Caminemos...
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Tomo mi cuerpo y me dispongo a caminar por el sendero que me traza el amor que un elegido día me entregaste. El ruido de la noche me acompaña mientras el viento golpea suavemente mis mejillas y al mundo encuentro en contravía. Lo arropo como a mi alma, para evitar que el frío intente acompañar mis pensamientos, pues busco alejarlos de este cosmos, como ausentes de él han estado cuando consentidos los dos hemos volado extasiándonos de amor puro y tierno. Rompo el hielo de la noche y después de tres pasos descubro que nuestro sentimiento me transporta por el aire en la ruta de tu ser. Te invito a caminar el universo que otra noche conoció nuestros cuerpos y danzó la melodía de nuestro mutuo ofrecimiento. Increíble repetir esos momentos que con gritos de alegría recibimos ante el mudo testigo del sosiego. Te prometo que esta vez, la sorpresa del primer vuelo no podrá impedirme el vivir de aquella, cuando principiante desgajaba mi ternura sobre tu cuerpo, pues ahora llevo grabado hasta tu último rincón y secreto, y los haré enajenarse en mí, por completo. Roza tu alma con la mía y humedecidas de amarse sin recelo, nos desgajamos uno en el otro hasta palparnos totalmente nuestra piel. Bebes de mi y de ti bebo, enamorados del amor, hasta impregnar de frágil aroma nuestros cuerpos. Como dos locos reímos, jugamos, y sin recelo, fundimos nuestros seres con la amalgama del puro amor que nos tenemos, para que nada ni nadie se atreva a penetrar en el universo que con respeto, sinceridad y pureza construimos. Somos los dos, uno solo... algo perfecto.
Ausencia... Veo que el desierto de amor vivido en su ausencia de estos días, que el atrapado sueño de amor por su lejanía, que la melancolía de su recuerdo y distancia, que la dormida flor de esperanza en su regreso, que el vacío de no estar a su lado, que el dolor del alma al tener que sonreir sólo, que el viajar por los sinfines del firmamento, que la apartada mirada de la realidad, que la ausencia del momento dando paso a lo añorado, que todo... todo cuanto has vivido por hacer grande un sentimiento, se queda allá, en el lenguaje mudo con que tuviste que vivir cada letárgico segundo de la infinidad de segundos vividos. Será entonces testigo silente de esos sueños y besos robados al relámpago de la luz, ese lugar a donde dirigías la mirada rompiendo el viento y el destello de la realidad. Tú, soledad. Sientes entonces que el calor del amor que dejaste reposar en el aire para que la cubriera cuando la encontraras, se va a tibiar con el viento, de no haber podido hacerle vivir lo que sentiste y sientes. La rota ilusión de haber querido decirle cuánto la has amado más, en su ausencia. Sabor de sin sabores, razón de sin razones, sentir de vacíos y ausencias, fríos y lejanos. En últimas, no importa, lo hiciste con sentimiento sencillo y limpio. Da la vuelta y llévate en el saco de tus vivencias, todo lo que le traías y que para ella no fue nada, siempre nada, de pronto un día, la noche amanezca, y no se muera el día como hoy, en su amanecer.
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INDICE Poemas de amor Un mar de amar... Amada mía... Linda Mujer… Flor del Silencio… Cuando me miras... Dulce Sonrojo… Ven a mí... Al pensar en mí... Poema de amor, para un amor en silencio... Quiero que sepas... Estas en mí... Fiel, te espero... Te extraño... Mirar amando... Solo quiero... Nuestro hogar... Profundo Amor... Mía... eternamente! Te encontré... Solo, te espero... En tu amor... Tú y Yo Vuelo...
7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29
Bella flor... Aún en la distancia... Melancolía... (I) Melancolía... (II) Melancolía... (III) Melancolía... (IV) En el firmamento... Tiempo, adiós... Brindo por tí y por mí... por lo nuestro Te necesito... (I) Te necesito... (II) Tallito mío... Me quedé perdido... Si pudiera decirte... Amada mía... Entre tu piel... Cuando encuentres... Son mis promesas... No lo sabes... Cuando pienso... Adiós amor mío... Soledad, te acompaño... Perdido, quiero Sé que vienes… Señora Mía... Dulce vientre...
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Cartas de amor Anoche, cuando eras mía mientras el mundo dormía... Tierna Mujer... Cuando te sentía lejana ignorando que en mí estabas.... Ahora eres mía y en sagrado sacramento... Mujer... Por un humilde y sincero sentimiento... Pensando en mi dulce alegría... Me desperté soñando... Déjame amarte más... Jardinerito de Amor... Caminemos... Ausencia...
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