Boletín del FRENTE DE TRABAJADORES DE LA ENERGIA de MEXICO Organización obrera afiliada a la FEDERACION SINDICAL MUNDIAL www.fte-energia.org | prensa@fte-energia.org | http://twitter.com/ftenergia | http://ftemexico.blogspot.com | Volumen 10, Número 308, octubre 28 de 2010
Privados siguen tras la CFE y Pemex El capital privado nacional, aliado del extranjero, mantienen la ofensiva contra las industrias eléctrica y petrolera nacionalizadas. El proceso de desnacionalización está muy avanzado pero quieren más, quieren todo, quieren la privatización total.
Privatizar totalmente a CFE y Pemex Como lo hicieron el primer día de la ocupación policíaca de Luz y Fuerza del Centro (LFC), aquel 11 de octubre de 2009, un año después repitieron el discurso. Para los organismos empresariales no basta eliminar a LFC, su objetivo es apoderarse de la CFE y de Pemex. “El sector privado solicitó que se abran la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) al capital privado para que existan un servicio más eficiente y mejores tarifas” (Gascón V., en Reforma; Becerril I., en El Financiero, 12 oct 2010). Otra vez el vulgar discurso plagado de mentiras. La iniciativa privada no es sinónimo de un servicio más eficiente y menos para mejorar las tarifas. Es, exactamente, al revés. “Mario Sánchez Ruiz, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) señaló que la iniciativa privada podría intervenir en la generación de energía alternativa, como la nuclear que llevaría a abaratar el servicio”. “Hemos tenido conocimiento que la generación de energía más barata es la nuclear, la cual es muy costosa por la
tecnología y tendría que entrar la IP para que sea una realidad en el mediano plazo”, dijo. Sánchez Ruiz declara sin sustento, su voracidad le impide razonar. Primero, la energía nuclear de potencia no representa ninguna alternativa energética conveniente ni para México ni para el mundo. Los problemas tecnológicos de esta fuente de energía, simplemente, NO están resueltos. Además, las poblaciones NO quieren energía nuclear. Respecto a que es la más barata, el declarante desconoce los datos y, se contradice de inmediato, al señalar que la tecnología es muy costosa. Con falacias concluye que debe entrar la iniciativa privada. Es evidente el pensamiento dependiente de este individuo. La energía nuclear es un atractivo negocio para las transnacionales. A la burguesía nacional le tocarían, si acaso, las dádivas de las corporaciones a través de contratos relativamente menores. Sin embargo, no se quedan allí, también quieren la privatización total de Pemex. “Afirmó que una demanda del sector empresarial es que se permita que el capital privado participe en la exploración, explotación y refinación” de los hidrocarburos, es decir, en las actividades constitucionalmente estratégicas.