Ágata Orzeszek

Page 1

| entrevista

La mejor obra de Kapuscinski es la que nunca escribió Agata Orzeszek, traductora de Ryszard Kapuscinski, otorga detalles acerca de los textos y los pensamientos del llamado reportero del siglo POR JOSÉ JUAN ZAPATA PACHECO / MONTERREY

Ryszard Kapuscinski 8 | SEMANARIOCOAHUILA.COM

U

NO. Como si fuera pura coincidencia, cuatro meses después del fallecimiento del periodista Ryszard Kapuscinski, la revista polaca Newsweek publicó que el reportero fue colaborador de los servicios de inteligencia: un espía del régimen comunista. Factor que le permitió viajar por África y así legar sus memorables volúmenes de reportajes. Para Agata Orzeszek, quien tradujo la totalidad de la obra de Kapuscinski al español, el asunto no tiene otra respuesta que la falsedad. No es necesario, incluso, preguntarle. La traductora abordó el tema de inmediato, luego de que saliera a cuento en las mesas del XII Encuentro Internacional de Escritores, para el cual dictó la conferencia de clausura el sábado 8 de octubre en el Museo de Historia Mexicana de Monterrey. “No hay tema”, dice amable, pero firme. “Esa revista es una publicación sensacionalista, no tiene nada que ver con el Newsweek de Estados Unidos. La polaca es una revista sensacionalista”. Ágata criticó las “ganas de llenar de mierda a una autoridad moral”, para obtener sólo un momento de gloria. “Pero esto se va a acabar, y Kapuscinski permanecerá, así que de qué vamos a hablar. No hay tema”. - Además es evidente el oportunismo, aprovechando el reciente fallecimiento de Ryszard. - “Lo que pasa es que esto en Polonia es

constante. En el extranjero ha trascendido sólo lo de Kapuscinski, porque su obra tiene reconocimiento en el exterior, pero los están machacando a todos”, comentó refiriéndose a los intelectuales: “Así que ya ve, no hay tema”. - ¿Y cómo ves el estado de la prensa polaca actualmente? - Para empezar, yo vivo en Barcelona. Leo prensa polaca, pero la que yo elijo. No leo la prensa gubernamental, porque lamentablemente es mucha. Demasiada gente que se ha amoldado perfectamente y ha adoptado el discurso nacional-católico, que es el que se lleva en Polonia. Pero esta también la otra prensa que leo, que no ha adoptado ese discurso y tampoco es lo contrario, pero por lo menos es más abierta. Por comparar, diría que hay tres publicaciones que leo en Polonia contra trescientas que son ilegibles. Esperemos que pase esta especie de epidemia y ya volveremos a leer más adelante. DOS. Agata es una mujer dinámica y alegre. Se muestra sumamente abierta y gustosa de hablar de Kapuscinski, quien fuera homenajeado en esta edición del Encuentro Internacional de Escritores. En una entrevista de José Garza, que publicara recientemente la revista Armas y letras, Agata confesó que traducir a Kapuscinski es traducir a un amigo. Ella misma fue la que promovió en la editorial Anagrama la publicación de sus textos. Actualmente, según me explica, está preparando una nueva edición de La guerra


Él era tremendamente modesto, cuando decía que no lo lograba entender algo es que inmediatamente hacía todo por hacerse de la información necesaria para comprenderlo. | AGATA ORZESZEK

Agata Orzeszek del futbol, colección de reportajes en América Latina, África y Chipre. Originalmente, detalló, Ryszard propuso dos versiones del texto, así que hay reportajes que no se incluyeron en la versión publicada. La nueva edición los incluirá todos. “Me ha estado gustando mucho este encuentro”, confiesa Ágata. “Kapuscinski es una excusa; hay algunos ponentes que han hecho sus intervenciones alrededor de la obra, y hay otros que sólo han cogido una frase o algo así y han desarrollado a partir de esa cita una intervención dentro de su campo de trabajo”. “Sobre todo he descubierto una importante vitalidad. Kapuscinski me lo dijo en una de las conversaciones que tuvimos alrededor de sus libros de América Latina: ‘Es un lugar maravilloso porque aquello hierve, hay un montón de ideas, impulsos nuevos. En Europa estamos prácticamente muertos…’. Y eso es lo que he comprobado, hay un bullicio de ideas, de teatro, de poesía, de compromiso, mucha gente comprometida consigo mismo, con su quehacer”. - ¿Logró entender Kapuscinski la realidad latinoamericana? Recuerdo un fragmento de La guerra del futbol donde confiesa que cometía error tras error tratando de descifrar la política en estos países. - Él era tremendamente modesto, cuando decía que no lograba entender algo es que inmediatamente hacía todo por ha-

cerse de la información necesaria para comprenderlo. Cuando estuvo participando en los talleres de la Fundación Nuevo Periodismo y García Márquez lo presentaba como el gran maestro, Kapuscinski se sorprendía del ímpetu de los periodistas jóvenes, de los que decía aprender mucho. Mencionaba: ‘Ojalá yo en mis tiempos hubiera tenido esta clase de talleres’. Incluso cuando la gente conversaba con él, más que entrevistarlo él los entrevistaba. - Kapuscinski estudió historia, luego se dedicó al periodismo. “El periodista es un historiador”, explica en “Los cínicos no sirven para este oficio”. ¿Hubo alguna contribución por medio de su obra a las técnicas de la historia? - Sin duda alguna el historiador se encontraba en él, y bien afianzado. Él era un historiador en el momento mismo de su surgimiento, in statu nascendi. Al terminar la universidad se le abrían sólo tres posibilidades: Trabajar de archivista, quedarse de docente, o estudiar la historia in statu nascendi. Y este tercero fue el camino que siguió. TRES. A la salida de una mesa de trabajo abordo a Agata Orzeszek. Su presencia es misteriosa. Delgada, elegante en el vestir, su cabello es lacio y corto. Tiene una mirada intrigante, europea, ojos azul grisáceo. Un aire de complicidad y una sonrisa que no se evapora.

Al ver la grabadora digital abre más sus ojos: “Qué cosa más impresionante, ¿no será usted un espía?”, pregunta entre risas. De ahí parte para negar las acusaciones sobre Ryszard. Pero, gajes del oficio, la batería se agota a media entrevista y debo continuar con los recursos ancestrales de la memoria y las notas. Las últimas preguntas tienen más un aire de charla informal en el pasillo del museo, que de una verdadera entrevista. - Eres una de las personas que mejor conocen la obra de Kapuscinski - Así es, la he visto por arriba, por abajo, por la izquierda, la derecha, la desmantelé y volví a montarla en otro idioma. Me atrevo a decir: “Entonces, dejando de lado la labor de traductora, ¿cuál es tu libro favorito de Ryszard?” - Aquél que no pude leer, todos esos textos que no había escrito. También Un día más con vida, su obra más personal, más poética. En la que narra la soledad y el cómo la vida siempre pende de un hilo. De hecho, al traducirlo quería titularlo “Un día más arrancado a la muerte”, porque así se acercaba más a la expresividad del título original en polaco. Sin embargo decidí dejarlo como está, porque Kapuscinski usa la palabra “vida” y quise respetar ese aspecto. Pero el título en polaco es sumamente expresivo. OCTUBRE 15.2007 | 9


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.