Deslímite Paisaje Infinito

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Introducción / Introduction

Localmente, la genealogía del límite la estableció el Imperio del Tahuantinsuyo hasta el río Maule y como hito referencial el sistema volcánico “Descabezados”. Esta cosmovisión permitió la ocupación de este territorio a través del Camino del Inca, dejando vestigios arqueológicos y “mojones” como sistema de demarcación, además de una supuesta plataforma de aterrizaje ovni. El “amojonamiento” territorial no solo logró la delimitación política de un dominio socioproductivo, sino que además un importante interés místico y de culto. Llegada la administración española, valida esta demarcación, pero anula su ritualidad, desprendiendo esta cosmovisión en su ordenamiento territorial incorporando una jurisprudencia cartográfica, y con la independencia, la separación de los estados por “las más altas cumbres”, una zona históricamente en disputa. A pesar de esta división podemos encontrar fenómenos que desafían su jurisprudencia: rutas alternativas de contrabando; arrieros; estancias; ermitaños; migrantes; montañistas; guerrilleros políticos. Personajes que por una u otra razón desafían los límites y la percepción territorial de un paisaje infinito. Extracto Descabezados: (Des)Límite, Paisaje Infinito

Locally, the genealogy of the limit was established by the Tahuantinsuyo Empire, up to Rio Maule and as a landmark reference, the “Descabezados” volcanic system. The Inca’s cosmovision allowed the occupation of this territory through the Camino del Inca, leaving archaeological vestiges and “mojones” as a demarcation system, and also a supposed UFO landing platform. The territorial demarcation not only achieved the political delimitation of a socio-productive domain, but also an important mystical and cult interest. Upon the arrival of the Spanish administration, it validates this demarcation, but negate its rituality, releasing this cosmovision in its cartographic jurisprudence, and with the independence, the separation of the nations by the highest peaks, a historically disputed area. Despite this division we can find phenomena that challenge its jurisprudence: alternative smuggling routes; muletters, hermits, migrants, mountaineers, political guerrillas. Characters who for one reason or another defy the limits and territorial perception of an in nite landscape. Descabezados: (De)Limit, In nite L andscape. Extract

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Genealogía del límite / Genealogy of the limit

La primera organización territorial en Sudamérica la instaló el Imperio del Tahuantinsuyo, estableciendo un control político y económico en un constante intercambio de información y recursos de las relaciones entre el Estado Inca y los sectores conquistados. A pesar que el centro del Imperio se estableció en el Cuzco, no instaló dependencias de la misma magnitud y densidad en el extenso territorio dominado, o lo que actualmente conocemos como ocupaciones urbanas, sino que se dedicó a la creación de numerosos Estados Frontera, incorporando diferentes grupos étnicos que no necesariamente se sometieron al Imperio, gracias a una acomodación cultura e institucional que obedece a una serie de patrones de expansión físicos, sociales y económicos, como una forma de integrar las áreas conquistadas en diferentes esferas políticas del Tahuantinsuyo, posicionando una compleja organización interactiva de la sociedad Inca en todo el territorio.

Diferentes investigaciones científicas y textos históricos describen parcialmente el rol del Estado Incaico desde su centro, pero también resulta interesante poner atención en la relevancia de los “Estados Frontera”, entendiendo que la riqueza cultural y cosmovisión fue transmitida, aceptada o compartida por estas etnias y el Imperio. De esta manera, El Cuzco logró extenderse en un territorio inmensamente extenso: desde el Ancasmayo en el norte del Ecuador y sur de Colombia, las selvas amazónicas de Perú y Bolivia, las tierras áridas del centro-occidente de Argentina, hasta el Río Maule en la parte central de Chile.

Esta versatilidad geográfica, como también las dificultades de control de un Estado tan amplio, obligó al incanato imponer diferentes modalidades de intercambio y tributo, ya que no todos territorios podían satisfacer los intereses productivos del Imperio, involucrando una adaptación a las circunstancias encontradas en un hábitat específico, donde el Estado finalmente fue mantenido por mano de obra nativa y no por el tributo de bienes, donde esta fuerza de trabajo fue convertida en capitales y servicios para la prosperidad del Estado.

The first territorial organisation in South America was established by the Tawantinsuyu Empire which crafted political and economic control together with a constant exchange of information and resources between conqueror and conquered. Despite the centre of the Empire being located in Cuzco, there were across that vast dominion no other dependencies –currently known as urban emplacements– similar in size and density; numerous border-states were nonetheless created that combined diverse ethnic groups not necessarily subjected to it due to cultural and institutional arrangements. Physical, social and economic patterns of expansion integrated the conquered territories through different political spheres within the Tawantinsuyu resulting in an interactive organisation of the Inca society.

A number of scientific research and historical records describe to a certain extent the role of the conquering state from its core, but it is also worth attention the relevance of the border-states, conquered or not, in terms of cultural wealth and cosmovision that were transmitted from, accepted by, or shared with such ethnicities and the Empire. Thus, Cuzco only occupied a small portion of an immensely vast land: Ancasmayo in northern Ecuador and southern Colombia, the Amazon rainforest in Perú and Bolivia, the arid lands of central-western Argentina down to the Maule River in central Chile.

This geographical versatility, along with the challenges of control associated with such a large domain, forced the central administration to create adjustable modes of exchange and tribute since not all territories were able to satisfy its productive interests. Adaptation to the circumstances observed within a specific habitat was then a significant mechanism for the functioning of the state. In the end, the Inca Empire was sustained by native labour and not by property taxes, while the work force was transformed into capital and services for the purposes of general prosperity.

This ethnic, geographical, economic and social

La diversidad étnica, geográfica, económica y social, de alguna manera el Imperio logra unificarla a través de una compleja instalación de hitos territoriales, tambos y sistemas de caminos estatales como herramientas de inclusión y expansión de sus límites, sin la necesidad específica de construir asentamientos sino ejercer control sobre los terrenos socio productivos, donde uno de los más importantes para el imperio fue la parte central de Chile por ser una fuente de recursos minerales, especialmente la extracción de oro.

Considerado como un límite no formal debido a su lejanía, la gran capacidad organizativa del Estado Inca para mantener su control se destacó más allá de la edificación de colonias o poblados con uniformidades arquitectónicas, trascendentales o no, sino con la instalación de artefactos que constituyen hito limítrofe con un carácter simbólico y de culto como es la construcción del Camino del Inca, una compleja red vial con tecnología de transporte, producción y redistribución de recursos para la expansión del Estado, constituyendo esta infraestructura como frontera geoeconómica inclusiva y desmilitarizada que llegó hasta El Maule, en un sistema de rutas que abarcaron una extensión de 500 kilómetros en formas de islas dispersas que no necesariamente estaban incluidas como un límite formal del Imperio pero si una frontera de dominio.

De esta manera podemos concluir que la definición del límite no es dibujado ni cartografiado como actualmente organizamos nuestro territorio, ya que este es “recorrido”, habitado y controlado a conveniencia del Imperio, donde los conceptos de límite superan la dimensión cartográfica que el “occidente” conoce o acepta, ya que involucra diferentes herramientas geografías y ritualidades, porque la red vial además de ser una infraestructura de demarcación, constituye una cosmovisión en el recorrido de una serie de acontecimientos simbólicos, transmitidos al Cuzco para identificar y administrar diferentes escenarios según la versatilidad de su dominio.

diversity was unified through an intricate network of territorial milestones, tambos and state roads, a system leveraged as a tool of inclusion and expansion without the need to build settlements but by exercising control over productive areas, central Chile being one of the most relevant due to abundant mineral resources such as gold and copper.

Considered a non-formal limit of the territory in so far as it was remote and inhospitable yet strategic, the remarkable organisational capability of the Incas to enforce rule went further than settling colonies or outposts with architectonic uniformity. The introduction of artefacts defined boundary landmarks that held a greater symbolic character, such as the construction of the Inca Trail to Machu Picchu. This system of paths was utilised for the transport, production and redistribution of resources aimed at the expansion of the Empire and constituted a truly inclusive geoeconomic frontier reaching as far as the Maule River without the need for military intervention and encompassing a line of 500 km by means of scattered islands that did not automatically establish a formal limit yet defined the shape of a wide-ranging domain border.

Summing up, the definition of imperial boundaries is neither drawn nor mapped but rather wandered, inhabited and controlled at the convenience of the Empire. The notion of border transcends the cartographic dimension as understood or accepted by the West today. An array of tools, geographies and ritualities is implicated to build an infrastructure of demarcation and, even more, a path of symbolic events transmitted to Cuzco for identifying and managing various scenarios according to their domain versatility.

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Un mojón en tu camino / A “Mojón” in your Path

La planificación territorial de Imperio del Tahuantinsuyo se organizaba estratégicamente a través del amojonamiento de los espacios socio-productivos, institucionalizando los dominios del Inca según criterios específicos de cada área conquistada en escalas regionales, provinciales y locales, constituyendo espacios políticos y de gran poder místico. De esta manera, el Estado lograba medir un espacio no solo con los recursos ecológicos disponibles, sino que además entregaba una distribución social en el territorio y las capacidades del trabajo comunitario, organizando equilibradamente la administración estatal, como la producción agrícola, la construcción de equipamiento público y la demarcación de la infraestructura vial. A través de un proceso de negociación entre el Cuzco y las comunidades pertenecientes al Imperio, la medición del territorio tenía directa relación con el tamaño de la comunidad, donde la instrumentalización a través del amojonamiento espacial siempre incorporaba una dimensión festiva y ritual.

Un mojón es una estructura de piedra de diferentes dimensiones y formas, agrupadas o en solitario, que en su mayoría no superan el metro de altura, distanciadas estratégicamente unas de otras según el ordenamiento territorial definido por el Estado Inca, y que actualmente suelen encontrarse en lo inhóspito de la región andina. Implementado por el incanato, estas intervenciones definieron un sistema de demarcación y medición a través de un carácter simbólico y de culto, pieza fundamental para la construcción del Qhapaq Ñan, o Gran Sistema Vial Andino (actualmente Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador y Perú).

Patrimonio Mundial de la Unesco, el sistema vial transfronterizo fue la columna vertebral del poder político y económico del Tahuantinsuyo, recorriendo 30.000 kilómetros desde las zonas más extremas de la Cordillera de los Andes hasta la Costa del Pacífico, alcanzando su mayor extensión en el siglo XV, una red que involucró diseño de ingeniería y arquitectura para la construcción de infraestructuras viales dedicadas a actividades comerciales con un gran significado religioso.

The territorial planning of the Tahuantinsuyo empire was strategically organized through the making of socio-productive spaces, institutionalizing the Inca domains according to specific criteria of each conquered region on regional, provincial and local scales, establishing political spaces with great mystical power. In this way, the “state” managed to measure a space not only with the ecological resources available, but also provided a social distribution in the territory and the capacities of community work, to organize state administration in a balanced way, such as agricultural production, the construction of public facilities and the demarcation of road infrastructure. Through a negotiation process between Cuzco and the communities belonging to the empire, the measurement of the territory was directly related to the size of the community, where instrumentalization through spatial marking always incorporated a festive and ritual dimension.

A “mojón” is a stone structure of different dimensions and shapes, grouped or alone, most of which do not exceed one meter high, strategically distanced from each other according to the territorial planning defined by the Inca state, and which are currently usually found in the inhospitable Andean region. Implemented by the Inca Empire, these interventions defined a system of demarcation and measurement through a symbolic and cult character, a fundamental piece for the construction of the Qhapaq Ñan, or the Great Andean Road System (currently Argentina, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador and Peru).

Unesco World Heritage, the cross-border road system was backbone of the political and economic power of the Tahuantinsuyo, traveling 30.000 kilometers from the most extreme areas of the Andes Mountains to the Pacific Coast, reaching its greatest extension in the 15th century, a network that involved engineering and architectural design for the construction of road infrastructure dedicated to commercial activities with great religious significance.

Con su base en el Cuzco, el Qhapaq Ñan fue el resultado de un proyecto político implementado por el Tahuantinsuyo que vinculaba pueblos y centros de producción y culto con un programa económico, social y cultural para el Estado Inca, integrando una población de aproximadamente 10 millones de habitantes (conquistados o no), en una extensión de 2.500.000 km2. Con una estimación de 40.000 usuarios de esta gran red vial unificada, podemos encontrar diferentes personajes en una categorización definida y controlada por el imperio: comerciantes, mensajeros, militares, guardias y custodios, religiosos y transmisores culturales, caravanas y viajeros se desplazaron por esta ruta, configurando un paisaje humano en la cotidiana peregrinación trashumante. El diseño y construcción de esta red vial constituye un modelo ritualizado de dominio, donde el mojón es simbólicamente concebido como pieza esencial de organización sacralizada del espacio geográfico, una infraestructura logística que no solo mide una longitud, sino una verdadera demarcación cultural de gran valor religioso.

El “tupu”, término de origen cuzqueño que traducido del quechua y aymara se define como “medida”, no necesariamente tuvo una significancia de mensura y organización territorial como la europea (el conquistador español basó la medición de distancias según varas caminadas en una hora), sino que involucró dimensiones sociales y productivas, condiciones geográficas y políticas, y más específicamente, el tiempo y energía humana disponible para transitar por el territorio dominado, donde el “amojonar” representó estrategias místicas del Tahuantinsuyo para caracterizar los recorridos del Imperio bajo criterios asociados a los rituales de viaje.

En los escritos de Cristóbal de Molina, que acompañó a Diego de Almagro en su expedición a Chile, describe los mojones como unidades de medición que superan las leguas españolas, desprendiéndolas del tiempo y delegándole interpretación de sus mapas al cosmógrafo de La Casa de Contratación de Sevilla, un relato que aportó una nueva dimensión a la nomenclatura de medida, donde el rito es parte esencial en la unidad de recorrido y el mojón, el dispositivo que logra transmitir el complejo sistema de demarcación incaica.

With its base in Cuzco, the Qhapaq Ñan was the result of a political project implemented by the Tahuantinsuyo that linked towns and centers of production and cult with an economic, social and cultural program for the Inca state, integrating a population of approximately 10 million of inhabitants (conquered or not), in an area of 2.500.000 square kilometers. With an estimate of 40.000 users of this large unified road network, we can find different characters in a categorization defined and controlled by the empire: merchants, messengers, soldiers, guards and custodians, religious and cultural transmitters, caravans and travelers moved along this route, configuring a human landscape in the daily nomadic pilgrimage. The design and construction of this road network constitutes a ritualized model of domain, where the landmark is symbolically conceived as an essential piece of sacred organization of the geographical space, a logistical infrastructure that not only measures a length, but a true cultural demarcation of great religious value.

The ”tupu”, a Cusco term whose translation in Quechua and Aymara is defined as “measure” does not necessarily have a significance of European territorial measurement and organization (the Spanish conquistador based the measurement of distances on yards walked in an hour), but involves social and productive dimensions, geographical and political conditions, and more specifically, the time and human energy available to travel through the dominated territory, where the “amojonar” represents mystical strategies of the Tahuantinsuyo to characterize the routes of the empire under criteria associated with travel rituals.

In the writings of Cristóbal de Molina, who accompanied Diego de Almagro on his expedition to Chile, describes the “mojones” as units of measurement that exceed Spanish leagues, detaching himself from time and delegating interpretation of his maps to the cosmographer of La Casa de Contratación de Sevilla, a story that brings a new dimension to the nomenclature of measurement, where the rite is an essential part of the unit of travel and the “mojón”, the device that manages to transmit the complex system of Inca demarcation.

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A una coca de distancia / One Coca Away

Cuenta la leyenda, que el dios sol “Inti” regaló una planta de coca a los incas, quienes la masticaban para combatir el hambre y el cansancio, ofrendándola a los dioses por considerarla sagrada, hasta el día de hoy es utilizada en numerosas ceremonias religiosas como pago a la tierra en un ritual estricto donde es sostenida con las manos elevándolas en altura, acompañado de un soplo como señal de respeto a los dioses de la naturaleza, para finalmente introducirla a sus bocas en un acto de solemnidad y respeto en esta ceremonia sagrada.

Otra leyenda Inca habla del origen de la constelación Kuka Manka, una mujer de belleza tan extraordinaria que los hombres eran seducidos por el matiz de su tez verde. Como nunca volvía al mismo sitio, los hombres debían iniciar una peregrinación hasta encontrarla. La historia llegó hasta los oídos del Inca, quien ordenó a sus sacerdotes sacrificarla y repartir sus partes en la tierra, sembrando su cuerpo donde nació una planta que otorgaba fuerza y vigor en los hombres, mitigando además sus penas. De nombre le pusieron coca, en honor a Kuka.

Una cocada consistía en el periodo que un caminante disponía para recorrer la distancia entre mojón y mojón, masticando hojas de coca, organizando trayectos y lugares de descanso. Al llegar a un mojón, escupía la coca ofrendándola a la tierra para cambiarla por una nueva carga en una ceremonia en espacios destinados al ritual. Esta frecuencia fue denominada por los españoles como “una legua de Inka”, un criterio de medición que definía además de tiempos y distancias, una dimensión mística como nomenclatura de recorrido, contabilizando el consumo de coca entre un punto y otro.

A diferencia del sistema de medición europeo, que se basaba principalmente en la distancia recorrida en una caminata durante una hora, la legua inca lograba abarcar extensiones mucho mayores y que difícilmente podían ser estandarizadas por el español, ya que incluía además de los factores de tiempo y distancia, criterios políticos y místicos que superaban al conquistador, obligándolo a demonizar la utilización de coca en el mundo andino,

Legend has it that the sun god “Inti” gave a coca plant to the Incas, who chewed it to combat the hunger and fatigue, offering it to the gods because they considered it sacred, and to this day it is used in numerous religious ceremonies as payment to the earth in a strict ritual where it is held with hands, raising them in height, accompanied by a blow as a sign of respect to the gods of nature, to finally introduce it to their mouths in an act of solemnity and respect in this sacred ceremony.

Another Inca legend speaks of the origin of the Kuka Manka constellation, a woman of such extraordinary beauty that men were seduced by the shade of her green complexion. Since she never returned to the same place, the men had to begin a pilgrimage until they found her. The story reached to the ears on the Inka, who ordered his priests to sacrifice her and distribute its part on the ground, sowing his body where a plant was born that gave strength and vigor to men, also mitigating their sorrows. They named it Coca, in honor of Kuka.

A “cocada” consisted of a period that a walker had to travel the distance from “mojón to mojón”, chewing coca leaves, organizing routes and resting places. Upon reaching a “mojón”, spit out the coca, offering it to the earth to exchange it for a new load in a ceremony in spaces designated for the ritual. This frequency was recognized by the Spanish as “Una Legua de Inka”, a measurement criterion that defined, in addition to times and distances, a mystical dimension as a nomenclature of travel, counting the consumption of coca between one point and another.

Unlike the european measurement system, which was mainly based on the distance covered by walking for one hour, the inca yard managed to cover much larger areas that could hardly be standardized by the Spanish, since it included, in addition to the factors of time and distance, political and mystical criteria that surpassed the conqueror, forcing him to demonize the use of coca in the Andean World, added to the christianity conversion of the native peoples, the inquisition tribunal considered

sumado a la conversión cristiana de los pueblos originarios, el tribunal de la inquisición consideró a la coca un artilugio diabólico reprobando su consumo y particularmente el uso ceremonial y la capacidad del Inca para ejercer su poder político y místico en sus dominios.

A tal extremo llegó la demonización de la coca, que Felipe II ordenó implementar en el Virreinato del Perú, las normas dictadas por el Concilio de Trento, extirpando las idolatrías precolombinas para arrancar de raíz cualquier elemento de religión andina, especialmente los rituales de la hoja de coca a través de herramientas doctrinales demonológicas y el uso de violencia física.

A pesar de la censura impuesta por el español que intentó desprender todo poder místico y de culto en el consumo de coca, conservó y aprobó el sistema referencial de los mojones, adoptándolo a su propia cartografía, imponiendo su sistema métrico en función de la infraestructura incaica existente, pero sobrepasando su geografía en líneas abstractas, dividiendo los territorios amojonados y estableciendo una nueva frontera. Es el fin de la Cosmovisión Inca.

coca a demonic device, condemning its consumption and particularly its ceremonial use and the inca’s ability to exercise its political and mystical power in its domains.

The demonization of coca reached such an extreme that Felipe II ordered the implementation in the Virreinato del Perú of the rules dictated by the Council of Trent, extirpating pre-columbian idolatries to uproot any element of Andean religion, especially the coca’s leaf rituals through demonological doctrinal tools and the use of physical violence.

Despite the censorship imposed by the Spanish, who tried to release all mystical and cult power in the consumption of coca, preserved and approved the reference system of the “mojones”, adopting it to their own cartography, imposing its metric system based on the existing inca infrastructure, but crossing its geography in abstract lines, dividing the “amojonados” territories and establishing a new frontier. It is the end of the Inca Cosmovision.

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El Virreinato del Perú fue creado por la corona española durante el periodo de conquista el año 1.542 hasta la independencia de los países e instalación de estados americanos en 1.824, abarcando 1.34 millones de kilómetros cuadrados, incorporando en esta extensión toda la costa del Imperio Inca pero descartando parte de su dominio en el mundo andino.

El ordenamiento territorial de las tierras tuvo su origen en el Tratado de Tordesillas, la primera gran división que partió el mundo en dos. Basado originalmente en una cartografía terraplanista, donde España y Portugal se repartieron las zonas de navegación y la conquista del nuevo mundo, un convenio por una nueva línea de demarcación de polo a polo en donde a 370 leguas al oeste de las islas de Cabo Verde, todos los terrenos por descubrirse al oriente quedarían bajo domino portugués, y la soberanía española dominaría los ubicados al occidente.

Como inicialmente se pensaba que la tierra era plana, el formato de medición consistía en la relación entre la velocidad de recorrido marítimo y la latitud determinada por la posición de la estrella polar, dibujando una línea imaginaria de polo a polo. Lo conocido o descubierto se incluían como límite, mientras que el abismo, la frontera de lo desconocido.

Con los viajes de Colón y el encuentro de los mundos, se determinó que la tierra era esférica y por lo tanto los límites de la repartición actualizados (y también manipulados). Portugal conquistó los terrenos en Brasil transgrediendo la demarcación, avanzando hacia el oeste y sur hasta anular el tratado.

Resueltos los problemas entre los reinos, el Virreinato del Perú evolucionó la organización territorial en nuevos virreinatos, y por lo tanto la instalación de nuevas fronteras establecidas por límites cartográficos, donde la constante subdivisión de las tierras obedecía al extractivismo y especulación económica en la capacidad productiva de una superficie determinada. A diferencia del Tahuantinsuyo, el dibujo de los límites traspasó las condiciones

Frontera / Frontier

The Virreinato of Peru was installed by the Spanish crown from the Conquest in 1542 until the independence of the countries and installation of American states in 1824, covering 1.34 million square kilometers, incorporating in this extension the entire coast of the Inca empire but discarding part of its dominance in the Andean World.

The territorial organization of the lands had its initial axis with the Treaty of Tordesillas, where the navigation zones and the conquest of the new world were divided between Portugal and Spain, an agreement of a new demarcation line from pole to pole where 370 leagues west of the Cape Verde Islands, dividing the world in two in a flat-earth cartography, where all the lands to be discovered to the east of this line would remain under Portuguese rule, and Spanish sovereignty would dominate those located to the west.

As the earth was thought to be flat, the measurement format consisted of the relationship between sea travel speed and latitude determined by the position of the North Star, drawing an imaginary line from pole to pole. The known or discovered was included as a limit, while the abyss, the frontier of the unknown.

With the voyages of Columbus and the meeting of the worlds, it was determined that the Earth was spherical and therefore the limits of the distribution were updated. Portugal conquered land in Brazil, transgressing the demarcation, advancing west and south until annulling the treaty.

Once the problems between the kingdoms were resolved, the Virreinato of Peru evolved the territorial organization into new virreinatos, and therefore the installation of new borders established by cartographic limits, where the constant subdivision of the lands was due to extractivism and economic speculation in the productive capacity. of a given surface. Unlike the Tahuantinsuyo, the drawing of the limits crossed the geographical conditions in southern lines, releasing all mythologi-

geográficas en líneas meridionales, desprendiendo toda dimensión mitológica del ordenamiento territorial Inca. A pesar de esto, validó las demarcaciones o “mojones” instalados por el Imperio incorporándolas como hitos referenciales para su mapeo cartográfico y su respectivo valor jurisdiccional. Estos mapas establecían la manera de ver el nuevo mundo, donde trazar una línea, escribir o nombrar un lindero, equivalía al ordenamiento territorial bajo ciertos criterios que permitían su adjudicación, administración, extracción y herencia.

La constante subdivisión de macro territorios y la urgencia en el aumento de la extracción de sus riquezas, para solucionar conflictos europeos y la mantención de su propio reinado, obligó a España entregar mayores privilegios a los peninsulares, adquiriendo las colonias mayor autonomía. Ya con las invasiones napoleónicas y la abdicación de Carlos IV, se desarrolla el proceso de independencia de los países y la fragmentación de los virreinatos, y con esto, la superposición de las jurisdicciones, entendiendo que en épocas coloniales, el concepto de frontera era distinto al de los estados modernos, y comparado con el ordenamiento territorial del Tahuantinsuyo donde el límite era recorrido místicamente, la frontera colonial era abandonada por lo inhóspito de su posición geográfica, un territorio al que no valía la pena explotar.

A pesar de esto, la vorágine independentista, como también las contradicciones y disputas de sus líderes, tardaron en consolidarse (incluso hasta el día de hoy) en constantes conflictos territoriales, donde uno de los casos en actual controversia corresponde a la triple frontera de Chile, Perú y Bolivia, con percepciones contrarías en demandas históricas, cosmovisión altiplánica, superposición de límites cartográficos, hitos arqueológicos y la constante ironía diplomática que incluso ha puesto en tela de juicio leyes como la gravedad y el recorrido hidrográfico de los territorios.

La mayor disputa por la triple frontera se llevó a cabo en la Guerra del Pacífico, iniciada por motivaciones extractivistas en el desierto de atacama, la presión de la elite política y empresarial, y el interés inglés en la producción de terrenos ricos

cal dimension of the Inca territorial organization. However, it validated the demarcations or “mojones” installed by the empire, incorporating them as referential landmarks for their cartographic mapping and their respective jurisdictional value. These maps established the way of seeing the new world, where drawing a line, writing or naming a boundary was equivalent to territorial planning under certain criteria that allowed its allocation, administration, extraction and inheritance.

The constant subdivision of macro-territories and the urgency in increasing the extraction of wealth to solve european conflicts and the maintenance of its own empire, forced España to deliver greater privileges to the peninsular people, where the colonies slowly acquired autonomy. Already with the Napoleonic invasions and the abdication of Carlos IV, the process of independence of the countries and the fragmentation of the virreinatos developed, and with this, the overlapping of jurisdictions, understanding that in colonial times, the concept of border was different to that of modern states, and compared to the territorial organization of Tahuantinsuyo, where the limit was crossed mystically, the colonial border was abandoned due to the inhospitability of its geographical position, a territory that was not worth exploiting.

Despite this, the independence maelstrom, as well as the contradictions and disputes of its leaders, took time to consolidate (even to this day) in constant territorial disputes, where one of the cases in current controversy corresponds to the triple border of Chile, Peru and Bolivia, with contrary perceptions in historical demands, highland worldview, overlapping cartographic limits, archaeological landmarks and the constant diplomatic irony that has even called into question laws such as the gravity and hydrographic route of the territories.

The largest dispute over the triple border took place in the Pacific War, initiated by extractivist motivations in the Atacama Desert, pressure from the political and business elite, and english interest in the production of land rich in saltpeter for the gunpowder manufacturing. The war once again

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en salitre para la fabricación pólvora. La guerra nuevamente generó la evolución de los límites transfronterizos hasta el día de hoy, donde no existe una convención determinante entre los pueblos que ponga un cierre definitivo en el ordenamiento territorial, un lugar supuestamente controlado, pero con una profunda segregación espacial, desigualdad social y escases de agenda para la extracción sustentable de sus recursos.

generated the evolution of cross-border limits to this day, where there is no determining convention between peoples that puts a definitive closure on territorial planning, a supposedly controlled place but with profound spatial segregation, social inequality and shortages of agenda for the sustainable extraction of its resources.

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Un 17 de septiembre de 1884, en plena celebración de la independencia de Chile, y a solo cinco meses del fin de la Guerra del Pacífico, donde el estado vencedor se apoderó de extensos territorios en Bolivia y Perú, se fundó el Banco de Talca. Treinta y dos hombres y nueve mujeres lograron reunir el inédito capital de un millón de pesos, en un país enormemente endeudado producto del reciente conflicto bélico. Para tener una referencia de la magnitud del capital aportado por los talquinos, el presupuesto nacional era similar al patrimonio del banco, y la deuda externa del Chile de la post guerra, ascendía a seis millones de pesos de la época. Es decir, el banco tenía suficiente capital para pagar la sexta parte del financiamiento de la guerra.

Con 32 sucursales de Arica a Osorno, su impacto económico permitió financiar iniciativas en Talca y la Región del Maule en sectores como industria, comercio, vivienda, infraestructura, universidades y museos. Emitidos por la compañía Americana de Billetes del Banco de Nueva York, Banco de Talca hizo circulación de sus propios billetes con denominaciones de 5, 10, 20 y 100 pesos, que incluían retratos de generales de la Guerra del Pacífico, personajes pertenecientes a la elite política del país y a Tomás Martín de Poveda, fundador de la ciudad. Uno de los elementos que destaca en el diseño y que repite en todas sus denominaciones, es la presencia del Volcán Descabezado Grande indicando una altura de 3.888 metros.

Referencia geográfica de la frontera sur del Imperio del Tahuantinsuyo, la repetición del volcán en todas las emisiones realizadas por el Banco de Talca, lo distingue otros billetes impresos por los bancos de la época, en el interés de posicionar a Talca en el contexto de apropiación territorial como discurso de propaganda política y económica del momento, entregándole un carácter simbólico a un referente geográfico lleno de misticismo.

Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, el banco inició un proceso expansionista en la mayoría de las capitales provinciales del país, como también la construcción de obras de adelanto para la ciudad

Banco de Talca / Bank of Talca

On September 17, 1984, one day before the celebration of Chile’s independence, and just five months after the end of the Pacific War, where the winning state seized extensive territories in Bolivia and Peru, the Bank of Talca. Thirty-two men and nine women managed to raise the unprecedented capital of one million pesos, in a country enormously indebted as a result of the recent war. To have a reference to the magnitude of the capital contributed by the talquinos, the national budget was similar to the bank’s assets, and the external debt of post-war Chile amounted to six million pesos at the time. That is, the bank had enough capital to pay one-sixth of the financing of the war.

With 32 branches offices from Arica to Osorno, its economic impact allowed it to finance initiatives in Talca and the Maule Region in sectors such as industry, commerce, housing, infrastructure, universities and museums. Printed by the American Banknote Company of the Bank of New York, Banco de Talca circulated its own banknotes with denominations of 5, 10, 20 and 100 pesos, which included portraits of generals from the Pacific War, characters belonging to the elite. politics of the country and Tomás Martín de Poveda, founder of the city. One of the elements that stands out in the design, and that is repeated in all its bills, is the presence of the Descabezado Grande Volcano indicating a height of 3,888 meters.

Geographic reference of the southern border of the Tahuantinsuyo Empire, the repetition of the volcano in all the bills made by the Bank of Talca, distinguishes it from other banknotes printed by the banks of the time, in the interest of positioning Talca in the context of appropriation territorial as a political and economic propaganda discourse of the moment, giving a symbolic character to a geographical reference full of mysticism.

After the end of the Second World War, the bank began an expansionist process in most of the country’s provincial capitals, as well as the creation of development works for the city and the creation of one of the largest art galleries in Chile, with nota-

y la creación de una de las mayores pinacotecas de Chile, con destacados artistas como Juan Francisco González, Pedro Lira, Onofre Jarpa, Alfredo Valenzuela Puelma, Alberto Orrego Luco, solo por mencionar algunos.

Sin embargo, a pesar de obtener utilidades líquidas ascendentes durante el inicio del gobierno del presidente Salvador Allende Gossens, sus inversiones y capitales cayeron estrepitosamente durante el segundo año de esta administración, debido a los conocidos procesos sociales, el impacto económico desarrollado por Estados Unidos en nuestro país y la decisión de la Unidad Popular de nacionalizar la banca, siendo finalmente expropiado por CORFO.

Ya con la dictadura y el desarrollo del modelo neoliberal, teóricamente iniciado por la Sociedad de Mont Pelèrin en Suiza, articulado políticamente en la Escuela de Chicago, e implementado en Chile como laboratorio económico occidental, el banco fue nuevamente privatizado en este violento experimento social. En 1979 el grupo Calaf-Danioni adquirió el 65% de la propiedad del Banco de Talca, siendo presidido por Carlos Massad y gerenciado por Sebastián Piñera, instalaron un esquema de defraudación a través de la creación de decenas de empresas ficticias que se endeudaban con el mismo banco, en préstamos a base de especulación pura sin un capital que lograra sostener el “auto-endeudamiento”.

Finalmente, el Ministerio de Hacienda anunció su intervención siendo los principales deudores de Banco de Talca sus propios dueños, el grupo Calaf-Danioni. La liquidación la realizó la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras el 15 de Abril de 1982, adquirida primero por Banco O’Higgins y luego por Santander Chile por un total de 17 mil millones de pesos.

Cientos de cuentacorrentistas locales perdieron sus ahorros, los cerca de 115 cuadros de la pinacoteca apropiados por el Banco Central, su edificio abandonado en plena esquina de la plaza fundacional de la ciudad, mientras que el descabezado volcán que circuló en cientos de miles de billetes, se impone en el paisaje con sus 3.888 metros de altura.

ble artists such as Juan Francisco González, Pedro Lira, Onofre Jarpa, Alfredo Valenzuela Puelma, Alberto Orrego Luco, just to mention a few.

However, despite obtaining increasing liquid profits during the beginning of the government of President Salvador Allende Gossens, its investments and capital fell sharply during the second year of this administration, due to the well-known social processes, the economic impact developed by the United States in our country and the decision of the Popular Unity to nationalize the banks, finally being expropriated by CORFO.

Already with the dictatorship and the development of the neoliberal model, theoretically initiated by the Mont Pelèrin Society in Switzerland, politically articulated in the Chicago School, and implemented in Chile as a Western economic laboratory, the bank was once again privatized in this violent social experiment. In 1979, the Calaf-Danioni group acquired 65% of the ownership of Banco de Talca, chaired by Carlos Massad and managed by Sebastian Piñera, a fraud scheme was established through the creation of dozens of fictitious companies that were indebted to the same bank, in loans based on pure speculation without capital that could sustain the “self-indebtedness.”

Finally, the Ministry of Finance announced its intervention, with the main debtors of Banco de Talca being its own owners, the Calaf-Danioni group. The liquidation was finally carried out by the Superintendence of Banks and Financial Institutions on April 15, 1982, acquired first by Banco O’Higgins and then by Santander Chile for a total of 17 billion pesos.

Hundreds of local account holders lost their savings, the nearly 115 works of the art gallery appropriated by the Central Bank, and its building, currently abandoned on the corner of the city’s founding square, while the headless volcano that circulated in hundreds of thousands of bills, imposes itself on the landscape with its 3,888 meters high.

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Asesinato en la cancha de afuera / Murder on the outdoor field

El término Kancha de origen quechua, se traduce como un recinto, cerrado, como espacio destinado a ciertos deportes y espectáculos. Su uso cotidiano tuvo una amplia connotación social, política y religiosa según contextos asociados, teniendo siempre un concepto de organización andina del espacio. En la configuración más urbana del Tawantinsuyo, la Kancha jugó un importante rol articulador del espacio público, como un lugar de desarrollo cultural y social, que permitió la organización doméstica de los barrios, destinados principalmente a los juegos.

En 1991, el pintor y arquitecto Oscar Bustamante Urcelay, oriundo de la localidad de Santa Rosa de Lavaderos, en el borde del río Maule, escribió “Asesinato en la Cancha de Afuera”. La novela cuenta el homicidio de un joven campesino durante una fiesta popular. Diez diferentes personajes entregan sus propias versiones de los hechos, en un relato deconstructivo de interpretaciones campesinas que de alguna manera se transforman en mito de tradiciones costumbristas.

El relato de Oscar Bustamante logra explicar la construcción de contextos locales a través de la descripción de las relaciones sociales y la configuración de identidades de sus personajes, específicamente la vida de pequeñas comunidades en las orillas del Maule, donde los diez diferentes relatos que componen la novela, establecen diferentes jerarquías y estratificaciones sociales en base a los discursos de sus propios protagonistas, sobre un hecho puntual que solo hace referencia a la temporalidad en un lugar específico. El protagonista por lo tanto no es el asesinato sino las diferentes versiones del crimen.

La novela da cuenta del desarrollo de una identidad cultural en el borde del Río Maule, que, frente a la validez de sus interlocutores en el relato de una sociedad representada, las diferentes versiones van tomando dinamismo al interior de la comunidad, refugiados en el misticismo que permite modificar sus discursos, categorías y percepciones socioculturales. Es la construcción de una cosmovisión cultural local, donde la “Kancha” es el espacio “frontera” de los “límites” del mito.

The term Kancha, of Quechua origin, translates as an enclosure, closed, as a space intended for certain sports and shows. Its daily use has a broad social, political and religious connotation according to associated contexts, always having a concept of Andean organization of space. In the more urban configuration of Tawantinsuyo, the Kancha played an important articulating role in public space, as a space for spatial and social construction, which allowed the domestic organization of neighborhoods, intended mainly for games.

In 1991, the architect, painter and novelist Oscar Bustamante Urcelay, a native of the town of Santa Rosa de Lavaderos, on the edge of the Maule River, wrote “Asesinato en la Cancha de Afuera.” The novel tells of the murder of a young peasant during a popular festival, where ten different characters give their own versions of the events, as a deconstructive story of peasant interpretations that somehow become a myth of traditional manners.

Oscar Bustamante’s story explains, in some way, the configuration of the identity of the local characters, the description of social relations and the construction of identities, specifically the life of small communities on the riverside of the Maule, where the ten different stories that make up the novel, establish different hierarchies and social stratifications based on the speeches of their own protagonists, on a specific event that only refers to temporality in a specific place. The protagonist therefore is not the murder but the different versions of the crime.

In this way, the novel gives an account of the construction of a cultural identity, which, faced with the validity of its interlocutors in the story of a represented society, the different versions take on dynamism within the community, taking refuge in the mysticism that allows you to modify your discourses, categories and sociocultural perceptions.

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Índice / Index

pag. 03 Introducción / Introduction

pag. 05 Genealogía del límite / Genealogy of the limit

pag. 09 Un mojón en tu camino / A “Mojón” in your Path

pag. 19 A una coca de distancia / One Coca Away

pag. 25 Frontera / Frontier

pag. 35 Banco de Talca / Bank of Talca

pag. 43 Asesinato en la cancha de afuera / Murder on the outdoor field

0bras / Artworks

pag. 04 / Patricio Court / Sin titulo (2007) / técnica mixta, 280x160 cms.

pag. 07 / Constanza Albornoz / Ultrajes (2022) / óleo sobre lienzo, 150x90 cms.

pag. 11 / Constanza Albornoz / Permanencia (2022) / resina, madera, hueso, 13x13x6 cms.

pag. 11 / Simón Fuentes / Profundidad de campo (2005) / adobe, 60x60x30 cms.

pag. 12 / Simón Fuentes / Vacío vaciado (2018) / adobes, dimensiones variables.

pag. 14 / Constanza Albornoz / Desprendimiento (2022) / dibujo sobre papel, 20x30 cms.

pag. 14 / Constanza Albornoz / Cuerpo calloso (2022) / dibujo sobre papel, 20x30 cms.

pag. 15 / Simón Fuentes / Ojo de buey (2018) / adobe, latas zinc quemadas, 120x60 cms.

pag. 16 / Simón Fuentes / Un mojón en tu camino (2024) / adobe, 100x15x15 cms.

pag. 18 / Gonzalo Morales Leiva / Ukhuchay (2023) / carboncillo sobre papel, 180x150 cms.

pag. 20 / Patricio Court / Sin titulo (2007) / técnica mixta, 160x280 cms.

pag. 21 / Andrés Bustamante / Tríptico cactus / técnica mixta, 160x160 cmas

pag. 22 / Patricio Court / Sin título (2003) / técnica mixta, 199x231 cms.

pag. 23 / Patricio Court / Sin título (2007) / técnica mixta, 190x160 cms.

pag. 27 / Juan Carlos Bustamante / Serie vírgenes (2018) / técnica mixta, 130x70 cms.

pag. 28 / Juan Carlos Bustamante / Serie vírgenes (2018) / técnica mixta, 200x140 cms.

pag. 29 / Patricio Court / Sin título (1997) / técnica mixta, 147x130 cms.

pag. 30/ Patricio Court / Sin título (2009) / técnica mixta, 165x135 cms.

pag. 31/ Patricio Court / Sin título (2009) / técnica mixta, 135x165 cms.

pag. 32 / Simón Fuentes / Instalación vacío vaciado (2018) / adobes, dimensiones variables.

pag. 33 / Simón Fuentes / Instalación vacío vaciado (2018) / adobes, dimensiones variables.

pag. 34 / José Miguel Mardones / Billetes del Banco de Talca.

pag. 37 / José Miguel Mardones / Topobillete Banco de Talca (2004) / técnica mixta.

pag. 38 / Simón Fuentes / Instalación muros (2001) / fotografía, 180x230 cms.

pag. 40 / Simón Fuentes / Instalación muros (2001) / fotografía, 180x230 cms.

pag. 42 / Juan Carlos Bustamante / s.n. (2018) / técnica mixta, 160x90 cms.

pag. 44 / Juan Carlos Bustamante / s.n. (2018) / técnica mixta, 140x60 cms.

pag. 45 / Juan Carlos Bustamante / autorretrato (2018) / técnica mixta, 190x80 cms.

pag. 46 / Juan Carlos Bustamante / serie autorretratos (1989) / técnica mixta.

Proyecto financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes FONDAT Regional 2023

(DES)LíMITE:

PAISAJE INFINITO

edición y texto / José Miguel Mardones diseño / Estudio Simbiotika

artistas expositores / PATRICIO COURT

JUAN CARLOS BUSTAMANTE SIMÓN FUENTES

ANDRÉS BUSTAMANTE

JOSÉ MIGUEL MARDONES GONZALO MORALES LEIVA CONSTANZA ALBORNOZ

impresión / Rojas y Rojas Ltda.

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