cada día hay más rincones en BOGOTÁ [Instituto Distrital del Patrimonio Cultural]
hipódromo de techo
El Director del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural, Gabriel Pardo GarcĂa-PeĂąa recomienda conocer:
“Preservar lo que tienes, es preservar lo que eres”
Estadio Metropolitano de Techo
Ubicación: Transversal 71D No. 2A-26
E
n el estadio de Techo, Bien de Interés Cultural del Distrito Capital, diseñado por el arquitecto Álvaro Hermida, ya no se oyen galopes ni relinches, después de que hasta hace poco menos de treinta años, y durante décadas, fueron estos sus sonidos característicos.
Fotografías: Carlos Hernandez Llamas Investigación: Camilo Escobar
Ya es difícil encontrar allí caballos, a excepción de los que se ven en un terreno aledaño que pertenece al Parque Mundo Aventura, o de los relieves con formas equinas que en el hall de la edificación principal informan que el sitio fue el escenario central –del país, incluso– de una afición venida a menos, la hípica.
Pero, así ya no se los vea en su potente correr, ni se conserven en el terreno –que llegaba hasta la avenida 68– las caballerizas que en el pasado sirvieron para que los animales aguardaran y fueran entrenados con miras a la competencia, lo hípico sigue gozando de predominio en la vida del estadio de Techo.
Las tribunas, hoy acondicionadas –y reforzadas– por el IDRD para recibir al público que asiste a los eventos recreo-deportivos que se realizan en el estadio (llamado ahora Rodrigo Lara Bonilla), casi en su totalidad partidos de fútbol, son los vestigios, los testigos en pie de aquel espacio que hace medio siglo gozó de reputación con alcance internacional. Prestigio que el estadio conserva por dos factores. De un lado, su fisonomía, la arquitectura moderna de sus constitutivos, como la edificación principal, con los ordenados ventanales del contorno, el piso en granito, las imponentes columnas y las escaleras que, en el hall, parten hacia ambos lados para llegar a una segunda planta, hoy zona de comidas, otra área de apuestas; más los salones de la planta baja, uno, antes club de hípica, otro, hoy Museo del Deporte, sin olvidar el tercer y último piso, desde cuyos palcos se dimensionan los techos largos y con concavidades regulares que cubren las tribunas de este módulo y del ubicado a su derecha, su hermano menor. Ambos, hechos realidad gracias al ingenio de Guillermo González Zuleta.
eventos recreo-deportivos > IDRD
}
Rodrigo Lara Bonilla > político y abogado colombiano. Ministro de Justicia. arquitecto > Álvaro Hermida
segunda planta > zona de comidas área de apuestas salones planta baja > (antes) club de hípica, (hoy) museo del deporte
ingeniero > Guillermo González Zuleta
Simetría, amplitud, luz,
también evidentes en el resto de componentes: la piscina-fuente, rodeada de sobrios jardines; la cubierta en voladizo del acceso de la edificación, que sostiene unas elevadas astas, y una tercer tribuna –a un costado de la entrada del predio–, que a diferencia de las dos mayores no mira al centro del estadio, sino a las espaldas de este, donde antes, lo que hoy es una cancha de baloncesto, era un reducido circuito donde los caballos desfilaban ante el examen de los ávidos apostantes.
De otro lado, la relevancia del estadio también la soporta su historia, que, en pro de ser cabal, traspasa la fecha de nacimiento del hipódromo mismo, pues viaja al final de los años 20, cuando ya la zona era un referente urbano de Bogotá, por estar ubicado allí el Aeropuerto de Techo, terminal aérea de tal influencia en el desarrollo de la ciudad, que de su existencia surgió la necesidad de conectar, por medio de lo que
después sería la avenida de Las Américas, la avenida Caracas con el Puente de Aranda, punto desde donde los viajeros tenían a un paso la casona que servía como antesala al abordaje de los aviones.
Así, el terreno –ocupado en gran porción por la hacienda San Isidro–, con su cuota previa de historia, despertó en Jenaro Rico, médico destacado de la ciudad y amante de los caballos, la idea – que desde el principio compartió con su hijo Mario Rico– de construir allí un escenario que sirviera a la masiva pasión social que el juego hípico
tenía en los ámbitos local y nacional, iniciativa finalmente cristalizada gracias al apoyo que brindaron otras personalidades de la ciudad, como Ernesto Cubillos, Honorato Espinosa, Ponce de León y Carlos Sáenz de Santamaría.
El 12 de mayo de 1952 se firmaron las escrituras que dieron nacimiento formal al que para entonces era un “nuevo escenario destinado al desarrollo recreativo y deportivo de la ciudad” con la constitución de la sociedad Hipódromo de Techo, que se encargó del funcionamiento del recinto. Mas cabe considerar a su vez el día 16 de mayo de 1954, cuando se disputó la primera carrera, como la alterna y tal vez más consentida fecha de nacimiento del estadio de Techo, que, desde entonces, gracias a su fina construcción especializada para la realización de carreras planas –con medidas ajustadas a los estándares, como rectas de 500 m y 120 m de radio–, sus dos pistas básicas en arena y grama para hacer galopes, así como el lago que decoraba y servía como desagüe, se vistió para siempre de institución de la cultura, el entretenimiento, el deporte y el desarrollo urbano de Bogotá.
“nuevo escenario destinado al desarrollo recreativo y deportivo de la ciudad”
Hoy, el estadio, tras más de cinco lustros de haber dejado de albergar la práctica hípica por tres razones: disolución de la sociedad por la dimisión de uno de los accionistas más fuertes, cierre del escenario por la moratoria tributaria que sumó el grupo a su mando, y crisis de las entidades aficionadas que lo apoyaban, se destina como lugar “para el beneficio de la actividad recreativa y cultural de los habitantes de Kennedy”, propósito cuyas riendas asume, a través del IDRD, y desde que en el 2006 retomó la administración del escenario, la Alcaldía Mayor de la Bogotá Positiva.
Ilona Murcia Ijjazs Subdirectora de Divulgación de los Valores del Patrimonio Cultural Fotografías Carlos Hernandez Llamas Investigación Camilo Escobar Periodista Instituto Distrital de Patrimonio Cultural Dirección Gráfica Yessica Acosta Diseño Gráfico Joulie Rojas Diaz Pasante Universidad Jorge Tadeo Lozano
CULTURA, RECREACIÓN Y DEPORTE - Instituto Distrial de Patrimonio Cultural
www.patrimoniocultural.gov.co
Gabriel Pardo García-Peña Director