2016
Editorial Ante la implantación de la Junta de Control Fiscal avalada por la Ley federal PROMESA, los economistas en Puerto Rico hemos tenido que enfrentar el trago. Desde la posición pesimista hasta la optimista hay un acuerdo: la Junta de Control Fiscal es una imposición que limita la autonomía política y económica en la Isla. Como hecho consumado podemos aceptarlo con pesimismo o aplacar el golpe con optimismo. Aceptar una realidad no significa que estemos pasivos. Desde la Asociación de Economistas se han promovido foros y conversaciones sobre los posibles impactos de las políticas económicas enunciadas en la Ley PROMESA. Por eso la 33va. Conferencia y Asamblea Anual ofrece una discusión sobre el tema con posibles alternativas. Muchos de estos impactos son negativos y se circunscriben a tratar el problema de la deuda pública. Aplacar este golpe conlleva entender, explicar y llevar a la opinión publica los efectos de las políticas a ser administradas. Queda clara la confusión entre crisis de la deuda y estancamiento económico ampliamente difundida en los medios de comunicación. De aquí que muchas personas entiendan a la Junta de Control Fiscal como el mecanismo que reduciendo el gasto del gobierno y la deuda publica salvaran la situación. Nos corresponde explicar que la crisis tiene raíces en la economía: en la escasa creación de empleos de calidad y de riqueza que aporte al bienestar colectivo. Mensaje Junta Editora El estancamiento económico que experimenta la economía puertorriqueña domina las participaciones o expresiones en casi todos los ámbitos del saber. Ahora, que el estancamiento ha desembocado en la crisis de la deuda pública, las apreciaciones de los economistas deben adquirir mayor relevancia. Boletín Informativo de la Asociación de Economistas de Puerto Rico
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