Semanas 69 y 70 Psicotidianidades Agosto, 1 y 7, 2014 Tema bastante manoseado el de esta entrada, por lo cual un nuevo (ni tan nuevo) intento de abordaje no le hará daño a nadie. Hablaremos de los celos, ese sentimiento que siempre aparece entre los amorosos, y que suele dar lugar a enfrentamientos sublimes y sinceros. ¿Qué son los celos? No podría definir claramente si son un sentimiento, una emoción o un estado de ánimo; de cualquier modo, es un estado psíquico de malestar producido por temores de exclusión frente a alguna situación deseada. Los celos siempre aparecen entre una pareja (paReja), pero no sólo en la pareja erótica, sino en cualquier pareja en que participe el ser humano: pareja laboral, pareja amistosa, pareja situacional, etc. Decíamos que los celos incluyen temores de exclusión: miedo a que alguien (o algo) más ocupe nuestro lugar en una pareja. A partir de estos temores surgen ideas y pensamientos, generalmente irracionales de abandono y de soledad. Un ejemplo ilustrativo de esto es el diálogo que se presente entre Antonio (personaje de la película Te doy mis ojos) y su terapeuta a propósito del malestar que le genera al primero el hecho de que su esposa no le conteste el teléfono: T. Qué pasa cuando llamas a Pilar y no te contesta. A. Pues que me pongo de muy mala hostia. T. Ya sé, pero no es eso lo que te cabrea; lo que te cabrea son los pensamientos que eso te provoca; y eso es lo que vamos a anotar. ¿Qué piensas? A. Pues que lo ha apagado porque no quiere que sepa dónde está. T. Y no quiere que lo sepas por… A. …No sé, no sé, no sé, prefiero no saberlo. T. ¿Porque te está engañando?... Antonio, si no lo dices no podemos desmontar esa idea. Cómo la desmontamos; nos preguntamos: “¿Está realmente con otro?”; respuesta racional: “que no responda al teléfono no significa, necesariamente, que esté con otro, sino que no puede contestar porque, pues porque está trabajando”. ¿Me sigues? A. Sí. T. Venga, ¿qué más piensas? A. …Que no se acuerda de mí, y que cualquier día conoce a alguien, se fija en otro. T. A ver, ahora nos preguntamos: “¿Una cosa lleva necesariamente a la otra?”, respuesta racional: “que trate todos los días con hombres no significa que se enamore de ellos”. Coño Antonio, tú en la tienda ves todos los días mujeres y no te vas con ellas. Si no lo haces tú por qué lo va a hacer Pilar. Juan José Ricárdez López juanjose.ricardez@live.com.mx Psicólogo clínico 044951-1009730