Shilpa Shastras

Page 1

Shilpa Shastras Figura shil_01. Láminas del Shilpa Prakasa. Tomado de Boner, A. 2005, lam. 00.

Shilpa Shastras. Los Shilpa Shastras, manuales sagrados sobre arte y arquitectura, resumen la especial mezcla de técnica y magia que caracteriza la arquitectura India. El estudio de estos manuales permite comprender técnicas y sistemas de construcción, así como procedimientos de organización de la producción. En adelante se estudian estos sistemas de organización de la producción en la industria de la construcción India y su relación con las raíces tradicionales que representan los Shastras. Las antiguas tradiciones artísticas de la India Central [01] fueron transmitidas oralmente desde tiempos védicos, y sólo comenzaron a manuscribirse con la llegada del hinduismo. Los registros escritos que conservamos se agrupan bajo el nombre de Shilpa Shastras, un conocido corpus de textos sobre arte y arquitectura Hindú. Los Shastras están lejos de ser un conjunto coherente de manuales; se trata, en realidad, de un grupo poco homogéneo de textos sagrados en los que se establecen las diversas reglas (las más de ellas relativas a cuestiones iconográficas y de actitud frente al objeto) necesarias para crear de acuerdo con los ideales divinos. Los Shastras eran manuales de carácter sagrado, dictados de la divinidad, accesibles sólo para los sthapatis o sacerdotes. Existe consenso entre los estudiosos actuales en considerar que habrían sido fijados colectivamente en los siglos X-XI por copistas y adaptadores sobre la base de la tradición oral transmitida durante siglos por los sthapatis. Su lectura permite comprender la especial mezcla de técnica y magia, muy difíciles de desligar todavía hoy en ciertas regiones, que caracteriza la arquitectura India. La historia del arte ha estudiado con detalle estos Shilpa Shastras, y ha recurrido a ellos para apoyar determinados modelos de justificación teórica del arte hindú. Hoy día es posible encontrar un buen número de ensayos que estudian iconografías y estilos pictóricos o escultóricos de raíz hindú desde las claves que proporcionan los Shastras. [01] Esta es una nota sobre algunas tradiciones de construcción en la India Central. Muchas de las consideraciones que siguen son generales, y por lo tanto no pueden aplicarse a determinados contextos históricos, sociales, etc. Discúlpese esta generalidad en favor de una más fácil comprensión de los argumentos expuestos. Donde sea necesario se hará referencia a la especificidad de determinados datos o planteamientos.


Shilpa Shastras La dimensión mágica de los Shastras también ha sido estudiada en profundidad desde la antropología. De modo similar a como sucede en cierta tradición europea, los Shastras asocian magia y arte a través de reglas relacionales. En el caso de la arquitectura, por ejemplo, establecen un sistema de proporciones entre partes del edificio; el respeto de este sistema relacional técnico-mágico garantizaría a usuarios y constructores la bondad de proceso y resultado. Los detalles técnicos descritos en los Shastras también han sido objeto de algunos estudios. En lo que se refiere a la construcción arquitectónica, los Shastras establecen criterios para diseñar y construir templos y otros edificios. El conocido capítulo del Manasara dedicado a las columnas es buen ejemplo de ello: las reglas relacionales antes mencionadas se aplican en este caso al estudio de la altura de una columna y su base. Algunos preceptos contenidos en los Shilpa Shastras, sin embargo, no parecen demasiado razonables desde un punto de vista técnico. En este punto existe, en general, cierto consenso en torno a la lectura que hacía George Michell en 1977: “From the language in which these works are written and the fragmentary nature of much of the information they contain, it appears that the known Shastras are much more likely to be theoretical writings of the theologians […] than the manuals of architectural and artistic practice compiled by builders and craftsmen. […] The lack of technical information in the Shastras reveals their true function as a collection of rules which attempt to facilitate the translation of theological concepts into architectural forms.” (Michell 1977, p. 78) [02]

Estudios recientes han revisado, confirmándola en lo esencial, esta lectura. V.S. Pramar afirmaba recientemente: “G. Michell has made a small mistake here. It was not the Brahman who wrote the treatise on architecture but a learned craftsman who raised himself to Brahmanhood by incorporating theological material into his text” (Pramar 2005, p. 05) [03]. El hecho es que es difícil encontrar correspondencias entre lo descrito en los Shastras y los templos que conservamos: “One would expect that it would be easy to discover at least one medieval temple built according to these Shilpa prescriptions. But it is not the case. Stella Kramrisch, reputed scholar of ancient Indian texts and temples, has, despite a serious quest, been unable to furnish a single example where text and temple match each other in their actual dimensions and proportions” (Pramar 2005, p. 03) [04]

Así, los estudios sobre la historia de las construcciones Indias se han centrado, por lo general, en el análisis histórico y arqueológico de los numerosísimos restos de templos de todo tipo. Solo las fastuosas construcciones de origen Mughal han sido objeto de estudios rigurosos en lo que se refiere a procedimientos de construcción, organización, funcionamiento y diseño estructural. No así las construcciones Hindúes, cuyos códigos son, en lo esencial, ajenos a las tradiciones de raíz árabe. [02] A partir de la lengua en que están escritas estas obras y la naturaleza fragmentaria de la mayor parte de la información que contienen, parece que los Shastras conocidos tienen muchas más probabilidades de ser escritos teóricos de los teólogos [...] que manuales de arquitectura y práctica artística compilados por constructores y artesanos. [...] La falta de información técnica de los Shastras revela su verdadera función como conjunto de normas que tratan de facilitar la traducción de conceptos teológicos en formas arquitectónicas. [03] G. Michell ha cometido aquí un pequeño error. No eran los Brahmanes los que escribían los tratados de arquitectura, sino artesanos autodidactas que accedían a la condición de Brahmanes incorporando material teológico a sus textos. [04] Puede pensarse que sería fácil de descubrir, al menos, un templo medieval construido de acuerdo con estas recetas Shilpa. Pero no es el caso. Stella Kramrisch, reputada estudiosa de los antiguos textos y templos de la India, ha sido, a pesar de su rigurosa investigación, incapaz de proporcionar un solo ejemplo en el que texto y templo coincidan en dimensiones y proporciones.


Shilpa Shastras Shastras, ciencia y técnica. La realidad es, como se ha dicho, que pocos Shastras contienen indicaciones exactas sobre detalles o procedimientos técnicos o científicos. Muchas veces estas indicaciones son simples descripciones de ritos religiosos, de los que es preciso extractar un trasfondo técnico que no siempre es evidente. En lo que se refiere a la construcción de edificios, los Shilpa Shastras no proporcionan demasiada información sobre procedimientos de cálculo, si es que se empleaba alguno, o sobre sistemas de ejecución. Las escasas notas existentes sobre el diseño de elementos estructurales, por ejemplo, son poco elaboradas. El capítulo del Manasara dedicado a las columnas afirma que la relación entre la altura de una columna y su base puede ser del doble, una vez y tres cuartos, una vez y media y una vez y cuarto, a la vez que contempla la posibilidad de columnas de sección cuadrada, octogonal, de dieciséis lados o circular (y detalla minuciosamente los nombres y atributos de cada una de ellas), pero en ningún momento relaciona estas posibilidades formales con el material con el que se construyen las columnas, con las cargas previstas, las luces que cubren las vigas que descargan sobre él, etc. Tampoco las descripciones de los procesos de construcción que proporcionan los Shastras ofrecen detalles completos. El Shilpa Prakasha [05] dedica algunas slokas –líneas- a la descripción del proceso de ejecución de las bóvedas de aproximación de hiladas. La mayor parte de las indicaciones son razonables, pero resulta poco menos que imposible construir una estructura exclusivamente con ellas. “The first corbel layer should be made with great care. The next upper layer above that wall should be in the same form, increased by one half part of its depth. […] Inside the hall the entire part is in the shape of a rounded moulding. On the opposite side (on the front part) the stone remains as it is (uncut, flat)” (Boner 2005, p. 175) “Having taken the (interior) width of the hall, it should be divided into five. Leaving aside the two middle parts, the remaining parts are determined for the corbel” (Boner 2005, p. 179) “The roof part is constructed with bonded stones oversailing one another. Above one stone half of the next is joined. These stones of equal shape are oversailing one another by one half part. On the side of every stone holes are made according to rules” (Boner 2005, p. 337) “In those holes copper cramps with two points are fixed. Thus the whole temple becomes extremely solid. […] Only by joining this roof the temple becomes strong. The top part consists of strong bondings. […] On the outer part it should be carved deep” (Boner 2005, p. 339) [06]

[05] Muchos de estos textos todavía están siendo estudiados y contrastados. Al corpus principal de los Shastras más conocidos se han añadido otros textos, generalmente menores, cuya autenticidad todavía se estudia y debate. Es el caso del Shilpa Prakasha; las ilustraciones que acompañan a la reciente reedición de la traducción de Alice Boner han sido puestas en duda por algunos estudios (Donaldson, 1981). [06] La primera capa en ménsula debe hacerse con sumo cuidado. La siguiente capa superior por encima de la pared que debe hacerse en la misma forma, aumentando en la mitad de su profundidad. [...] En el interior, la sala debe tener forma de moldura redondeada. En el lado opuesto (en la parte delantera) la piedra se mantiene sin tratar (no cortada, plana). (Boner 2005, p. 175). Una vez tomado el ancho (interior) de la sala, éste debe ser dividido en cinco. Dejando de lado las dos partes centrales, las restantes se determinan para la ménsula. (Boner 2005, p. 179). El techo se construye con piedras en ménsula, depositadas unas sobre otras. Sobre una piedra se solapa la mitad de la siguiente. Estas piedras, todas de igual forma, sobresalen unas sobre otras en su mitad. En el lateral de cada piedra se practican agujeros de acuerdo a las normas (Boner 2005, p. 337). En estos agujeros se insertan grapas de cobre fijas a dos puntos. Así, el templo se convierte en un conjunto muy sólido. [...] Sólo por unirse a este techo el templo se hace fuerte. En la parte superior se sitúan fuertes uniones. [...] En la parte exterior debe ser tallada profundamente (Boner 2005, p. 339).


Shilpa Shastras

Figura shil_02. Notas del autor sobre algunas láminas del Shilpa Prakasa.

Los Shastras ofrecen también escasa información sobre la organización del trabajo en la construcción. El segundo capítulo del Manasara, por ejemplo, está dedicado a las habilidades del arquitecto y de los oficios que intervienen en el proceso: responsables de medición y replanteo, carpinteros, albañiles, etc. Se ofrecen en él detalles acerca del trabajo que debe desempeñar cada uno, así como sobre su importancia. No se dan, en cambio, datos acerca de sus relaciones: los detalles de la organización del trabajo artesanal son ajenos a la vocación religiosa de los Shastras, objetos sagrados que en ningún caso podrían describir de manera explícita un esquema de producción: It is impossible to build houses without the aid of these four descriptions of artisans: therefore, let the enlightened twice-born (the Brahmins) gratify them in every respect. Woe to those who dwell in a house not built according to the proportions of symmetry.” (P. 15) [07]

Los textos sagrados y la organización del trabajo. La organización del trabajo en la India rural hunde sus raíces en el conocido y muy rígido sistema de castas. Abolido desde hace décadas, este sistema pervive en muchas zonas rurales; su análisis, sumamente complejo, excede los límites de este trabajo. Un gran número de ensayos estudian y documentan las particularidades del sistema de castas (Pavlov 1975), que es siempre un capítulo fundamental en cualquier Historia de la India (Metcalf 2003). En la provincia de Anantapur, el sistema de castas (que está desapareciendo de muchos aspectos de la organización social, sobre todo lo relativo al acceso a los servicios públicos) sigue estando fuertemente arraigado en lo tocante a la organización del trabajo. [07] Es imposible construir casas sin la ayuda de estas cuatro descripciones de los artesanos: por lo tanto, dejad que el ilustrado dos veces nacido (el brahmán) los satisfaga en todos los aspectos. ¡Ay de los que moran en una casa no construida de acuerdo con las proporciones de simetría!


Shilpa Shastras En lo que afecta a las relaciones entre industria y tradición, conviene tener en cuenta que la casta de un individuo viene determinada por su nacimiento. No es posible cambiar de casta en vida, sean cuales sean los méritos conseguidos. La casta a la que pertenece un individuo condiciona su posición en la sociedad a todos los niveles, incluyendo el rango de trabajos que puede desarrollar. Como consecuencia, el individuo que desempeña una tarea (o, en el sector de la construcción, el que ejecuta una unidad concreta) no es quien tiene más capacidad para ello, sino quien pertenece a la casta facultada para desempeñarla. No es la habilidad de un trabajador lo que le capacita para desempeñar una función; es sólo su posición social la que le permite acceder a ello. Los pasajes contenidos en los Shastras dibujan un esquema de organización del trabajo muy particular, íntimamente relacionado con el sistema de castas. En su History of Architecture and Ancient Building Materials in India (Tech Books International. New Delhi, 2003), Satish Chandra analiza los conocimientos técnicos que poseían estos oficios y el modo en el que los transmitían de unas generaciones a otras. “[…] There was a gap between the theory and practice amongst the artisans. This deficiency was very distinct and has attracted the attention of many people. Thomas Williamson […] wrote in 1810: ‘Some of the Rauz, or bricklayers, in India, are very clever, so far as relates to mere practical operations; but they have not the smallest idea of planning from paper, or in paper’ […] This being the living bread there was no documentation of the material and technique. The science passed through the hereditary. This is the reason why the knowledge about the materials and their application technique […] is successively disappearing” (Chandra 2003, p.176) [08]

En A Social History of Indian Architecture (Pramar 2005) el autor estudia el modo en que los oficios tradicionales conseguían y gestionaban sus encargos: “Carpenters, blacksmiths, potters, are throughout India itinerant workers who have to wander to find clients or be near to them to await their call […] A carpenter always worked to order […] He never produced articles in advance and stocked them in his dwelling or shop in the expectation that clients would come to buy.” (Pramar 2005, p.14) [09]

Ambos describen un esquema de funcionamiento en el que los trabajadores en oficios relacionados con la construcción, casi siempre itinerantes, no disponían de talleres o almacenes propios; contaban apenas con su habilidad, adquirida generalmente en el entorno familiar, y con la herramienta, que formaba parte de su atuendo. No trabajaban si no era para un encargo concreto. El cliente se acercaba a la plaza pública a solicitarlos, y contrataba su trabajo. El material corría siempre por cuenta del cliente. El trabajador no acopiaba materiales elaborados; producía ladrillos o carpinterías sólo cuando eran estrictamente necesarios. Cuando dejaban de serlo, la producción paraba. [08] [...] Existía una brecha entre teoría y práctica entre los artesanos. Esta deficiencia era muy notable, y ha atraído la atención de muchas personas. Thomas Williamson [...] escribió en 1810: «Algunos de los Rauz, o albañiles, en la India, son muy inteligentes en lo que se refiere a la mera práctica de operaciones, pero que no tienen la menor idea de cómo trabajar sobre y desde planos o escritos. [...] Por ello, no existe documentación sobre materiales o técnicas. La ciencia pasa a través de la herencia. Esta es la razón por la que el conocimiento sobre los materiales y su aplicación técnica [...] está en vías de desaparición. [09] Carpinteros, herreros, alfareros, son en toda la India son trabajadores itinerantes que tienen que recorrer grandes distancias para encontrar clientes o para estar cerca de ellos a la espera de su llamada. [...] Un carpintero siempre trabaja por encargo. [...] Nunca produce artículos por adelantado y los almacena en su vivienda o negocio a la espera de que los clientes vengan a comprarlos.


Shilpa Shastras Este esquema de producción pervive en muchas zonas rurales de estados como Karnataka o Andrha Pradesh. En edificios autoconstruidos, todavía muy comunes, el usuario fabrica su propio ladrillo y busca, tal como se ha indicado, los oficios especializados que necesita puntualmente (fontaneros, carpinteros, etc.). Es cierto que, debido a la industrialización creciente de las grandes ciudades cercanas, ciertas pautas del sistema de gestión de obras mayores ha cambiado (existen constructoras que reciben el encargo del cliente y gestionan la construcción, evitando el trato directo de éste y el trabajador) pero, en la mayor parte de las zonas rurales a las que nos referimos, las fábricas casi nunca acopian material: lo habitual es fabricar en obra sólo los ladrillos necesarios, construir in situ las carpinterías de madera, despiezar y escuadrar en el tajo las baldosas de piedra. Equilibrio y producción. A través de la observación directa del trabajo en las construcciones tradicionales de las zonas rurales de la India central es sencillo percibir que varias de las ideas principales de los Shastras están presentes en los esquemas de organización del trabajo: se trata, entre otras, de ideas como equilibrio, entendido como respeto a las esencias de la naturaleza, o no acción. Ambos son conceptos, como es sabido, centrales en toda la literatura tradicional de raíz Hindú, heredados tanto de las tradiciones budistas como de las raíces védicas. El tantra, una tradición ancestral que se remonta a las civilizaciones neolíticas en el valle del Indo, es en esencia un método para alcanzar la verdad a través de estas vías. La relación entre estos conceptos y la tradición arquitectónica hindú ha sido estudiada casi siempre en clave estructural. En muchas ocasiones se ha puesto en relación la idea hindú de equilibrio/respeto a la naturaleza con el sistema de construcción abovedada mediante aproximación de hiladas, ya que éste es un sistema que permite colocar nuevas piezas respetando el estado de las piezas previas. Un sistema que no altera, en lo esencial, el orden sobre el que se asienta. A. K. Coomraswamy estudió estos y otros detalles en The Transformation of Nature in Art (Coomaraswamy 1934): “The shikhara of the northern Indian temple has a tapering curvilinear form which is traditionally constructed according to a system known as corbelling, in which each layer of stones projects slightly inwards beyond the layer below it, the successive layers gradually tapering upwards to be closed off by a single large […] capstone.” (Coomaraswamy, A. K. 1934, p.05) [10]

No es habitual, sin embargo, relacionar estos conceptos (respeto, equilibrio) con la organización tradicional de la producción en las construcciones Indias. Pero resulta evidente, a través, como se ha dicho, de la observación directa de la construcción tradicional en las zonas rurales, que los procesos de ejecución están fuertemente condicionados por estas ideas. Veamos como. [10] El shikhara de los templos del norte de la India está rematado con una forma curvilínea que se construye tradicionalmente en ménsula, en la que cada capa de piedras se proyecta ligeramente hacia el interior, sobre la capa situada bajo él, con las sucesivas capas disminuyendo gradualmente hasta cerrarse con una sola gran pieza de culminación.


Shilpa Shastras

Figuras shil_03 y shil_04. Carpinteros en el siglo XIX y en la actualidad. Anand, M.R. 1981, p. 12 y fotografía del autor.

En cualquier construcción levantada al modo tradicional, el orden de ejecución de una unidad en obra es lo único que marca su prioridad en el esquema de producción. La pieza que se coloca en primer lugar condiciona la posición y el tamaño de la siguiente, que a la vez condiciona a la siguiente, etc. Por lo general no se tiene en cuenta una partida hasta que está terminada la partida anterior, de manera que un constructor que siga el modo de funcionamiento tradicional sólo pensará en una unidad cuando esté lista la unidad previa. Por ejemplo: no se construye un hueco en un muro para una ventana de cierta medida; es la ventana la que debe adaptarse al hueco existente. No modificar un hueco en un muro, instalando una carpintería que se adapte a él, es respetarlo. Este mismo respeto por lo ya construido es lo que da lugar a otras muchas soluciones tradicionales, la más conocida de las cuales es, sin duda, la ya citada estructura de cubierta mediante aproximación de hiladas. Las raíces de esta actitud ante el objeto artístico están en los Shastras, y también en otros textos antiguos [11]. Esta regla tiene algunas implicaciones importantes también en lo que se refiere a la producción. La principal es que la mayor parte de los trabajos se hacen en obra, incluyendo aquellos que, siguiendo una lógica industrial, sería más razonable llevar a cabo en un taller. Esto justifica el esquema de producción descrito en el segundo apartado de la presente comunicación, según el cual los oficios relacionados con la construcción trabajaban a demanda, y eran por ello casi siempre itinerantes, no disponiendo de talleres o almacenes propios. También condiciona la planificación de los trabajos: continuando con el ejemplo de la carpintería, normalmente un carpintero se negará a empezar una obra (ni tan siquiera para preparar el taller improvisado, o los materiales) hasta que no estén rematados los huecos en que debe trabajar. Esta actitud responde a un razonamiento arraigado en las tradiciones antes mencionadas. La idea de planificación de la producción al modo occidental resulta, por todo ello, extraña a la cultura de la construcción tradicional India. Lo cual no quiere decir que no haya una cultura de la planificación; la hay, por supuesto, pero responde a problemas diferentes.

[11] La filosofía india clásica consideraba que el objetivo ideal es la reintegración del ser en la totalidad, en la divinidad en suma, a través del nirvana (literalmente, el acto de apagar la llama). Esa búsqueda del ideal ha de ser necesariamente equilibrada en tanto que es diferente para cada ser: “El propio señor creador estableció la variedad y diferenciación de todos los objetos de los sentidos, propiedades y formas. Por la autoridad de los vedas formó en el mismo principio el nombre y la forma de las criaturas […] De esta manera hizo las criaturas con las cualidades adecuadas a su propósito” (Doniger 1975, p.47).


Shilpa Shastras Figura shil_05. Láminas del Shilpa Prakasa. Tomado de Poner, A. 2005, lam. XXXV.

Es importante resaltar que son las ideas antes mencionadas las que generan estos esquemas de organización de trabajo, y no al contrario. En las construcciones industrializadas de hoy es posible encontrar todo tipo de elementos prefabricados, perfectamente asimilados desde hace mucho tiempo por los estupendos constructores locales. En estos casos son estos elementos prefabricados los que, sencillamente, deciden el orden en el proceso de producción. El cerco de un hueco de ventana, por seguir con el ejemplo anterior, forzará la ejecución de la fábrica, como sucede, por otra parte, en otros modelos de construcción.


Shilpa Shastras

Algunas conclusiones. Figura shil_06. Láminas del Shilpa Prakasa. Tomado de Poner, A. 2005, lam. I.

La India es un país de contrastes. El rápido desarrollo de las grandes ciudades industriales, al calor de la actual estabilidad política, convive con los antiguos modos de vida de las zonas rurales. Los cambios que origina el desarrollo industrial se están extendiendo con rapidez, y afectan ya, en diferente medida, a mucha de la superficie del país. El sector de la construcción Indio es, como en otros países desarrollados, motor de la economía nacional. En las grandes ciudades se percibe una evidente tecnificación de la construcción. Los ingenieros Indios, altamente cualificados, manejan personal capacitado y materiales muy sofisticados. En las zonas rurales, sin embargo, se mantienen vigentes todavía antiguos esquemas sociales, antiguos procedimientos de trabajo. En muchas localidades se construye aún empleando adobes, madera y paja, los mismos materiales que empleaban los constructores siglos atrás. A. K. Coomaraswamy afirmaba: “The problem of the ‘spiritual East’ versus the ‘material West’ is very easily mistaken […]. The real clash is of traditional with antitraditional concepts and cultures” (Moore 1988, p.03) [12]. No hay nada superfluo en los objetos artísticos indios, ni en los procesos necesarios para su consecución. Todo: detalle, decoración, forma, procesos, es esencial y funcional. En el caso de la organización de los procesos descrita antes debe tenerse en cuenta que el objetivo final de la producción no coincide con los habituales en contextos occidentales. Jan Brouwer realiza una serie de observaciones sobre el enfoque de la producción alfarera de los Visvakarmas que pueden extrapolarse a la construcción tradicional:

[12] El problema del “oriente espiritual oriental” frente al “occidente material” es fácilmente mal interpretado [...]. El verdadero enfrentamiento es el de conceptos y culturas tradicionales y antitradicionales.


Shilpa Shastras “Thus, the artisans, particularly the Visvakarmas, perceive A) production and consumption as belonging to a single discourse, B) division of labours as metaphysical aspect of the ritual domain, C) cash not as a means of connection, but as a means of disconnection, thus strengthening the ritual domain, D) profit being made during production and thus a leftover of ritual, E) investments and decisions as cultural abstractions”. (Brouwer 1999, p. 29) Thus, for the artisans A) money terminates a relationship, B) a loan needs not always be repaired, C) profit is made during the manufacturing process or at the time of purchasing new materials, D) the eye for detail […] is placed outside the world and E) the survival strategy is linked with the unfinished product. […] Not so long ago […] Bloch and Parry wrote that ‘anthropologists, historians and sociologists have commonly fallen into the trap of attributing to money in general what is in fact an specific set of meanings which derive from our own European culture’.” (Brouwer 1999, p. 35) [13].

En este contexto, los textos sagrados siguen teniendo una vigencia especial. Es evidente que muchos rituales se practican de una forma inercial, tal vez sin ser completamente comprendidos [14]. Pero no es menos cierto que los rituales originales, empleados en exclusiva por los sacerdotes, nunca han sido de dominio público. Las prácticas rituales que sobreviven (pujas, etc.), las técnicas que se emplean o la organización del trabajo en que éstas se apoyan pueden no tener en cuenta el detalle de ciertos Shastras, pueden no comprender correctamente sus indicaciones, pero respetan en lo esencial lo explicitado en los textos sagrados. Lo hacen, eso sí, en temas que son fundamentales para el arte Hindú pero que por lo general escapan, como se ha dicho, a un acercamiento académico habitual, al acercamiento canónico occidental. (Este capítulo se presentó bajo el título “Modern Shastras” en el III International Congress of Construction History, Mayo 2009 – Cottbus, Alemania, y se publicó en las actas de dicho congreso.) [13] Así, los artesanos, en particular la Visvakarmas, perciben A) la producción y el consumo como pertenecientes a un único discurso, B) la división del trabajo como metafísica aspecto del ritual de dominio, C) en efectivo y no como un medio de conexión, sino como un medio de desconexión, fortaleciendo así el ritual de dominio, D) los beneficios que se están realizando durante la producción y, por tanto, los restos de un ritual, E) las inversiones y las decisiones culturales abstracciones. Por lo tanto, para los artesanos A) termina una relación de dinero, B) un préstamo no siempre necesita ser reparado, C) de beneficio se realiza durante el proceso de fabricación o en el momento de la compra de nuevos materiales, D), el ojo para el detalle [...] se coloca fuera del mundo y E) la estrategia de supervivencia está vinculada con el producto inacabado. [...] No hace mucho tiempo [...] Bloch y Parry escribió que "los antropólogos, historiadores y sociólogos han caído frecuentemente en la trampa de atribuir al dinero, en general, lo que es en realidad un conjunto de significados que se derivan de nuestra propia cultura europea. [14] “It is important to note that the kind of Dhyana mantra advocated by the shilpa shastras […] had by the end of the eighteen century become an empty ideal, seldom practised even in the ritualistic manner by the workmen. The faiths from which the intrincate woodwork […] arose were the result of willed practice, from which the vibrations of the nerves become skill in the hands. The fusion of will and action, in the surrender to sustained effort of the hands […] was the process which itself brought awareness by awakening dormant energies” (Singh 1980, P. 10). (Es importante resaltar que el tipo de mantra Dhyana propugnado por los Shilpa shastras [...] se había convertido a finales del siglo XVIII en un ideal vacío, rara vez puesto en práctica incluso en los rituales de los trabajadores. Las creencias que afloraban en los elaborados trabajos de madera [...] eran el resultado de la práctica voluntariosa, desde la cual la vibración de los nervios se convierte en habilidad en las manos. La fusión de la voluntad y la acción, en la entrega de un esfuerzo sostenido de la mano [...] es el proceso que a su vez trajo la conciencia de despertar las energías latentes.


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.