CINCO DE BOCACALLE

CINCO DE BOCACALLE

N.0

ANTOLOGÍA Esta muestra poética es el trabajo de cinco poetas noveles, antologados por editores jóvenes impulsados por el Taller de Edición de Textos de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la UABC. Cinco de Bocacalle, presentan estilos poéticos que consideramos, atienden a la contemporaneidad y a la historia de tiempos revueltos. pero que, éstas voces atrapan en la cotidianeidad del los sentimientos y vuelve el trabajo de los editores, esperanzador.

Agradecemos a la revista Escafandra de la Facultad de Artes de la UABC por todo su apoyo para difundir este trabajo.

EDICIÓN: VANESSA LEÓN ANA MONRAZ ÁNGEL NUÑO CARMEN RIVERA

POETAS DE BOCACALLE

JENIFER SOLÍS

orial: cuidado editarez Julio Álv

fotos: Feliciano Castro

Ricardo Guerrero s ifer Solí n e J : n ó i edic

NOSÉ Sé que la vida no es corta, solo pasa deprisa. Sé que mañana ella vendrá; con sus pasitos como sismos.

Camina y se quiebra la tierra.

Me mira a los ojos, y me da el aroma de sus palabras.

Arriba llueven cielos acariciados; se abre la piel del crepúsculo:alfabeto de relámpagos.

Cierras los ojos, apagas la luna, mi vida, ¡qué deprisa me pasaste!

¡Ey! Shh… escucha.

Cuando cierras los labios

el mundo grita.

HAY QUE APRENDER A SER UNA Y NO OTRA

No soy precisamente mi aspecto sino la grieta abierta entre las voces, un gesto dejado a la mitad, el minutero paralizado del reloj dando la hora, en otro idioma.

-RICARDO GUERRERO GARCÍA TIENE 20 AÑOS Y ESTUDIA LA LICENCIATURA EN LENGUA Y LITERATURA DE HISPANOAMÉRICA EN UABC. LE GUSTAN LOS HAIKUS Y ESCRIBIR CRÍTICAS DE PELÍCULAS.

foto: Feliciano Castro

La ciudad de los... ¿sueños?

Sergio Villa edición: Ana Monraz

Bailan con alegría y dolor un vital espiral las retuerce el místico aire las sumerge Y las aves son esclavas del amor.

Bendito sea el espléndido oleaje qué lejano me arrastra a tu orilla de arena, calor y maravilla e incinera mi piel cual tatuaje.

Así como las fotos y calles que imploran por el dulce recuerdo de aquellos días donde me pierdo y dejan que mi nombre estalle.

Retan al tiempo, los vidrios rotos, dispersos en gas, sueños lúcidos Benditos poetas y músicos con la edad del cielo y de tus ojos.

Dejo que sobre mi alma se acueste a sentir más de un millón de estrellas rebotando en mi pecho y cabeza nadar en el vacío y su corteza besar a la luna y a su doncella.

RECUERDO

Indiferente el tiempo de mi existencia exhala la melodía del vacío Estrella incandescente que se abisma en el cielo frío y no vuelve a ser verdad

EXISTIR

Nuestra imagen de la luna, en mi profundo desentendimiento, en tus mares inalcanzables yace la confusión de este sueño, que se mofa de mi certeza Los planetas que se alinean Y nunca chocan, las almas que rozan pero no se tocan, una complicidad en bruto Nace en mí el gusto de perderme en la razón y cantar de corazón que, aunque no existo, soy.

Nos conocimos acechados por nuestro pasado y por los milenios de edad de la Tierra. Enamorados del misterio y del místico cariño que resbala de la piel. Nos conocimos renacidos, transmutados, recogiendo los pedazos de alma que fueron repartidos por la noche. Los corazones que palpitan a oscuras y besos tan tiernos como el susurro de las estrellas-ríos. Vimos caer el día-noche sobre nuestros brazos.

Dejamos a la Luna llorar entrecortado y al Sol caer a trozos. Escuchamos al Cielo cantar silencios; las melodías ancestrales que unen a las fuerzas del Viento. Vi nacer Galaxias en tus ojos, vi Lluvia caer de tus senos. Vi caer lento el fuego vivo sobre el horizonte de tus hombros, cernirse sobre mi pecho. Recordé nuestras vidas pasadas. Cómo siempre ha sido incierto, predecir aquello que nos mueve. Aunque nuestra sombra se haya plantado para quedarse, seré yo, quien conduzca tus pasos para guiarte.

COINCIDIR

-SERGIO VILLA ES ESTUDIANTE DE FILOSOFÍA, MÚSICO, AFICIONADO DEL AJEDREZ Y AMANTE DE LA POESÍA DE TIEMPO COMPLETO.

foto: Feliciano Castro

la línea inperfecta del horizonte

Alan Salazar ED

ICI

ÓN

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SA

LE

ÓN

Rabia Vamos a matar juntos al ave de la que siempre hablas mientras apuestas la vida intentando descifrar su canto con las cuatrocientas voces que una sola ave pronuncia.

Vamos a matar juntos al ave como en los viejos tiempos, donde matábamos por diversión, por la necesidad de comprendernos, por las partituras escritas para el universo y leídas en el nombre de alguno.

Un destino que silba como loco, señales que nos tocó vivir. vamos a matar juntos a esa ave como si tuviéramos una mínima idea, llena de pájaros voraces anónimos.

Vamos a matar juntos a esa ave para que no se reproduzcan sin nombre, sin misión, Y cuando la hayamos matado nos regocijaremos todos en paz, tendremos el tiempo suficiente para poder señalar al ave siguiente y la siguiente y la siguiente y la siguiente… hasta que no queden más de ellas o de nosotros.

Prosa

Aunque se diga lo que se escribe y se escriba lo que se dice, pienso que es todo lo contrario. La boca y la mano no tienen relación alguna, no se asemejan una con la otra. Por un lado, la boca busca el beso. Por el otro, la mano busca la caricia. En la boca no hay retorno, depende en gran medida del aire que la justifica y embalsama el tiempo. La mano es distinta, siempre vuelve al comienzo del renglón.

Atraviesa al aire para buscar el abrazo de la madre o a la madre misma. Además, no está encadenada a las palabras; ella vuela libre en el limbo. Solo basta ver la cantidad de palabras que se formulan hoy día y las tan pocas que se escriben. De cualquier modo, sean escritas o habladas, las palabras para mí no son creíbles. Salvo el te Amo. Pero esa es otra historia.

Y allá va lo que alguna vez fue la dama de la armadura oxidada con un destino que la arrastra.

ALLÁ VA...

¡Y allá va la dama!

Aquella que cobijó al cielo.

Aquella que maquilló a la noche con estrellas. ¡Allá va!

Cantando con los rayos del sol acumulando risas y verdades en bolsas de acero inoxidable. ¡La dama se va!

Y todo el pueblo canta su nombre Millones de estrellas te recordarán ¡Por favor, no des marcha atrás!

Allá va…

Lo que siempre será la dama, sin armadura, sin espada con destino al ojo del huracán.

-ALAN SALAZAR. NACIDO EN TIJUANA. ESTUDIA EN LA PODEROSÍSIMA UABC LA CARRERA DE ASESORÍA PSICOPEDAGÓGICA. LE HAN PUBLICADO POEMAS EN REVISTAS COMO EL MORADOR DEL UMBRAL E HIPÉRBOLE FRONTERA. NO SABE ANDAR EN BICICLETA.

foto: Feliciano Castro

sueño/dream

Valente Herrera

EDICIÓN: ANGEL NUÑO

Rostro de soledad es la deformación lineal Pena colérica que navega escurriendo Marca visceral a los dientes del amado

Coro las voces Eco en la catedral

Aroma de la plaza a perfumes caros

Se convierte mi coraje en inspiración…

Esfinge de dolor

Desear ser el aroma de tu cuello Vientre, vello, amor en crecimiento que hace honor a la naturaleza curiosa

a la sangre de tus venas.

en idioma Piel muerta Semillas de lirios en tus uñas largas A rasguños

me arrancas la espalda

El geranio rojo abrasa mayo, congela enero Su alma no respira, el tiempo no cesa

Reanimación

Humectaré los pétalos de esa flor Drenen mis venas, dono mi sangre, ¡sáquenme el corazón!

Los significantes del amor

Amare, amor adhesivo Diligere, amor reflexivo La unión de dos cuerpos, platónica y material, se convierte en amour Y compruebo que el lexema del amor es la supervivencia del amante

-Valente Herrera nació en Tijuana, es pintor y estudiante de cine.

foto: Feliciano Castro

la esquina

Aran Jerk edición: Carmen Rivera

Otra Noche

Una noche oscura y serena, ausente de grillos, ranas y luciérnagas, sólo tú, iluminando el camino en que vivía perdido, solo tu guiándome al olvido

Una noche callada, la luna escondida y las estrellas de espaldas, me besaste, sin testigos, solo mi pobre alma, apagaste mi luz para brillar tus ansias, ansias incandescentes de vivir y de tomar la luz ajena.

Una noche me dejé apagar y fui a la oscuridad, volaste lejos de mi buscando la inmensidad. Ya es otra noche, ahora iluminas nuevos senderos, oscuros espacios, y a viajantes perdidos

Para posteriormente abandonarlos en el olvido, una noche oscura y muda llegaste, y en una misma, sonriendo e iluminada partiste para dejarme aquí...solo en la oscuridad.

Tu presencia ausente Las huellas en el piso tu sudoren y tus manos

de tu cuerpo todavía están ahí de aquel jardín mis manos tu aliento el aire en mi ropa magulladas con desaire

también está tu boca caminando por ahí en mi cena que es muy poca tus ojos me observan en la ventana gris respiro tu aroma y hueles a mi yo huelo a ti sigues aquí no quieres irte dejarte ir aunque lejos dicen que estas nadie sabe que estás en mi

yo no quiero

fin del Vol. 0

@Coordinadoraei @Coordinadoraei

Tijuana, Baja California MX.