DESESPERANTE
Desesperante, en ocasiones, asistir a las redes para observar tanta inconsciencia, en especial de la juventud, de quienes, todos los colombianos que no tenemos otra forma de lucha que la palabra, y, ahora, solo la
palabra
escrita,
esperamos
sean
los
próximos
dirigentes y luchadores por el cambio de Modelo de Estado y no lo hacen.
Observar que no es la opinión, sino la ignorancia
del
acontecer
cotidiano
de
la
Patria,
contextualizado en la injusticia, la carencia de soberanía, la exclusión, la desigualdad, la carencia de salud y de educación y muchos más valores. Vivir a consciencia los mismos paradigmas del dominio de la oligarquía, secuaz, dependiente,
cómplice,
delincuente
y
servil
de
los
Imperios del Capital, de Gringolandia, por ejemplo.
No puedo entender la contradicción entre juventud consciente de las necesidades de un pueblo y la, con derecho de opinión, defensora de su Estado de Derecha, de extrema Derecha, pero sin la crueldad de lo humano contra lo humano.
¿Por qué vilipendiar a gobernantes capaces, honestos, quienes se formaron en la Universidad de la Vida y adelantan un Socialismo Democrático valioso, en
pro de los verdaderos intereses de sus pueblos, sin negarles nada a los derechistas, más que la explotación, la injusticia, el enriquecimiento ilícito. Que trabajen en cada País, pero con justicia, teniendo en cuenta que el recurso más grande y válido de un País es el RECURSO HUMANO,
no
el
CAPITAL,
menos
EL
CAPITALISMO
SALVAJE, filosofía incuestionable del NEO-LIBERALISMO, destruyente, maldito, degenerante aún de los viejos pueblos de Europa.
En
fin,
esperemos,
todavía
creo
en
la
juventud, como en aquellos quienes en las redes luchan incansablemente por la LIBERTAD. Para todos ellos mis parabienes, mi solidaridad, siempre mi voluntad de lucha.
El cervantino ecuatoriano, JUAN MONTALVO, con la muerte de Moreno, presidente cruel de Ecuador, decía: “Mi palabra lo mató”.
JUSAVÍ. Chachagüí, 26 de Enero del 2015.