TRASHUMANCIA
Trashumante por las dehesas del destino, caminando por los territorios imaginarios, huyo desde las cárceles de mi existencia, conminado por la sangre de mi propia sangre.
Preso no entre cuatro paredes solitarias, sino en la mansión de mi propia naturaleza, sufro los senderos recorridos conductuales, y me embriago en la poesía que me acoge.
Los nuevos horizontes del objetivo símbolo, orientan las esperanzas de sumar la libertad, que desde el infinito espacio de las estrellas, riegan con ilusiones la cuna final de mi vivir.
El sarcófago viajero a múltiples instancias, espera pronto el viaje, decisión definitiva,
y mediante el fuego desintegrador corpóreo, permitirá el eterno vuelo espiritual al infinito.
JUSAVÍ. Chachagüí, 25 de Octubre del 2014.