Teología de la Liberación versus Teología de la Prosperidad

Teología de la Liberación versus

Teología de la Prosperidad

JULIO SEVERO El destronamiento de la Teología de la Misión Integral y la demonización del neopentecostalismo en Brasil

TeologíadelaLiberación versus TeologíadelaProsperidad

 Julio Severo 2013 www.julioseveroenespanol.blogspot.com juliosevero@outlook.com Traducido de portugués para español por Maria Valarini.

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Contenido Recomendaciones ............................................................................................. 2 Teología de la Liberación versus Teología de la Prosperidad ........................... 3 Introducción........................................................................................................ 3 El destronamiento de la Teología de la Misión Integral y la demonización del neopentecostalismo. .......................................................................................... 5 El neo-pentecostalismo destrona la Teología de la Misión Integral ................... 6 Los precursores de la Teología de la Liberación ............................................... 7 El “profeta” del “diálogo” de la Teología de la Misión Integral ............................ 9 La minoría pentecostal afectada por la Teología de la Misión Integral ............ 10 La frustración de los líderes de la Teología de la Misión Integral con los neopentecostales ............................................................................................. 11 La victoria de los pobres y la victoria del “diálogo” progresista ........................ 13 Teología de la Misión Integral y extremismo anticonservador ......................... 14 Teología de la Misión Integral demoniza neopentecostalismo......................... 15 Socialismo versus neopentecostalismo ........................................................... 18 Los seguidores del PT: oportunistas o ideólogos ............................................ 19 Brasil sin Elías .................................................................................................. 21 Complicidad y silencio versus complicidad y testimonio imperfecto de los cristianos de Brasil ........................................................................................... 22 ¡Impuestos, impuestos, impuestos! .................................................................. 24 ¿Un crítico anti neopentecostal merece el título de apologista? ...................... 25 Alianzas necias ................................................................................................ 26 El mayor obstáculo para el avance total del socialismo en Brasil .................... 28 Humildad para todos ........................................................................................ 29 Lectura adicional en internet: ........................................................................... 31 1

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Recomendaciones Es muy importante concienciarnos de la penetración que la ideología marxista ha hecho en algunas ramas del cristianismo. En América Latina, el concepto de hermosa apariencia llamado Misión integral (misión completa) se revela al final como una sutil plataforma para las políticas izquierdistas. Julio Severo entiende esto y hábilmente desenmascara estas ideas potencialmente dañinas en su libro Teología de la Liberación versus Teología de la Prosperidad. En ese libro él ayuda a mostrar la realidad que puede lograr verdaderamente el cambio social aún más profundo y más permanente de la pobreza hacia la prosperidad, proclamando y practicando la doctrina bíblica del Reino, abriendo la puerta para el poder transformador de Espíritu Santo. ¡Este es un libro que realmente recomiendo!

— Dr. C. Peter Wagner, vicepresidente de Global Spheres, Inc., autor de numerosos libros publicados en varios idiomas, incluyendo el español.

Julio Severo pone de manifiesto una realidad de los cristianos en Brasil que, igualmente se ve en otros países. Iglesias y teólogos liberales tratan de unir la fe cristiana al socialismo, una filosofía política secular. El resultado: en gran parte hablan unos con otros, mientras que la influencia y el número de miembros de sus iglesias disminuyen. Entre tanto, las iglesias pentecostales están llegando hasta los pobres y necesitados, y más recientemente, con la expansión del movimiento de renovación espiritual en muchas iglesias, a las personas de todos los niveles sociales y profesionales. El mensaje de estas iglesias es un simple mensaje bíblico sobre la salvación a través de Cristo y de la nueva vida en el poder del Espíritu Santo. Estas iglesias crecen y vidas están siendo transformadas. Espero que la verdad contenida en este pequeño libro impacte las vidas y comprensión de muchas personas en Brasil, y ¿por qué no?, ¡hasta afuera de Brasil!

— Larry Christenson, teólogo y escritor; líder de gran trayectoria en la renovación carismática entre luteranos de todo el mundo.

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Teología de la Liberación versus Teología de la Prosperidad Introducción

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Hay un intenso choque de mundos en Brasil, una de las naciones con más espiritualismo en el orbe. Individuos que participan en religiones afro-brasileras como el candomblé (similar a la santería y vudú) están experimentando encuentros de poder con el Evangelio gracias a las iglesias neo-pentecostales.

Ninguna otra iglesia cristiana en Brasil ha tenido tanto éxito en traer multitudes de adeptos de la brujería a Cristo como las iglesias pentecostales y neo-pentecostales.

No obstante, estas iglesias enfrentan oposición en masa de las iglesias protestantes tradicionales debido, principalmente, a la Teología de la Prosperidad. Esta oposición se da mayormente en el entorno de los blogs brasileros, donde la mayoría de los blogueros que se proclaman apologetas calvinistas incesantemente atacan a los neo-pentecostales.

A pesar de eso, ellos no atacan la infiltración en masa de las ideas liberales e izquierdistas en medio de las iglesias y líderes calvinistas de Brasil. A propósito, la mayoría de ellos adoptan tales ideas.

También atacan al capitalismo, aunque el economista político Max Weber haya señalado una relación entre el capitalismo y el calvinismo. Prefieren ser “progresistas” que, según el reconocido Dicionário Aurélio (Diccionario Aurelio), significa: “Se dice de quien, no perteneciendo a un partido socialista o comunista, acepta y/o apoya los principios socialistas o marxistas”.

La actitud de ellos hacia el capitalismo está lejos de ser la actitud de Calvino y sus sucesores inmediatos.

Gayraud Wilmore, en su libro “African American Religious Studies: An Interdisciplinary Anthology” (Estudios religiosos afroamericanos: una antología interdisciplinaria) (Duke University Press Books, 1989, página 12), dice: “La ética social del puritanismo estuvo dirigida a la adquisición y administración adecuados de la riqueza como símbolos externos del favor de Dios y de la consiguiente salvación del individuo”.

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El Diccionario Max Weber dice: “De acuerdo con el calvinismo (pero no de acuerdo con el mismo Calvino), la acumulación de riquezas es una de las señales de que el creyente estaba entre los elegidos — ‘una señal de la bendición de Dios’”.

El sitio “A Puritan’s Mind” (La mente de un puritano) dice: “La bendición del Señor enriquece… Y como las riquezas son en sí mismas una bendición de Dios, así mismo debemos desearlas para el desarrollo confortable de nuestras condiciones naturales y civiles”.

A estas alturas se podría decir que la Teología de la Prosperidad cuenta con un gran precedente calvinista.

Pero, los modernos calvinistas de tendencia izquierdista tienen ideas diferentes sobre sus antiguos predecesores y sus opiniones sobre las riquezas. Por eso se oponen ferozmente al capitalismo y al neo-pentecostalismo.

No hay equivalencia total entre los neo-pentecostales de Brasil y los antiguos puritanos de Estados Unidos. Aunque sus pensamientos sobre las riquezas parezcan iguales, sus actitudes hacia la brujería son completamente diferentes.

Los puritanos, calvinistas austeros, eran conocidos, especialmente al inicio de su historia en Estados Unidos, por su práctica de quemar las brujas, probablemente se aferrándose al Antiguo Testamento. Debido a la gran cantidad de seguidores de la brujería en Brasil, hubieran estado inmensamente sobrecargados en sus esfuerzos para quemar todos los brujos.

Por el contrario, los neo-pentecostales brasileiros, con sus osadas campañas evangelísticas y los choques con los poderes espirituales, echan fuera demonios de multitudes de adeptos de la brujería y los conducen a Cristo, quemando solamente sus libros, no sus cuerpos, tal y como se describe en el libro de los Hechos capítulo 19. El precio que pagan es recibir ataques de blogueros que se proclaman apologetas, que aún odiando el capitalismo, se etiquetan como descendientes legítimos de Calvino.

Mientras tanto, el choque de mundos en Brasil no se limita a la brujería, que abunda en la sociedad brasilera. El marxismo ha tenido una prevalencia igual o mayor, con importante penetración en seminarios e iglesias de las históricas denominaciones protestantes.

El neo-pentecostalismo y su Teología de la Prosperidad son en gran parte atacados por los blogueros calvinistas de línea izquierdista como si fueran los culpables de la devastadora apostasía y corrupción en la Iglesia Brasilera. Pero, ellos no mencionan que las iglesias calvinistas de Europa han sido destruidas sin ninguna ayuda de las iglesias neo-pentecostales. Y en Estados Unidos las principales denominaciones calvinistas están ordenando gais y lesbianas como pastores, apoyando el aborto, etc.

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El liberalismo y el izquierdismo, que están causando estragos en las iglesias calvinistas y otras iglesias protestantes tradicionales en Estados Unidos, se da predominantemente entre los blogueros brasileros que se proclaman apologetas calvinistas.

Sin embargo, ellos no están preocupados por el destino trágico de sus colegas liberales en Estados Unidos, porque están ocupados atacando a los neopentecostales.

Este e-book relata brevemente la naturaleza de tales ataques y su origen, y como todos los cristianos, neo-pentecostales y calvinistas, deben unirse contra el enemigo común y gran ladrón.

El destronamiento de la Teología de la Misión Integral y la demonización del neopentecostalismo.

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principios de 2012, dos altos dirigentes del Partido de los Trabajadores de Brasil sorprendieron al país al revelar que hoy el único obstáculo para el avance socialista en Brasil son los neopentecostales.

Los militantes socialistas están sumamente preocupados con los neopentecostales. Después de todo, mientras que los socialistas hablan del amor a los pobres y les hacen promesas (vivienda, salud, educación, empleo), esta poderosa mentira no está logrando el control total sobre los pobres. Y para pánico de la izquierda, las iglesias neopentecostales no solo cuentan con iglesias repletas de pobres, sino que también cuentan con programas de televisión con una gran audiencia de pobres.

En la “teología” socialista secular a los pobres se les enseña a ver el gobierno como la fuente suprema de provisión para todas sus necesidades. Bajo el socialismo el Estado es Dios. El neopentecostalismo llegó para provocar una desmitificación de gran alcance y sin precedentes de esta visión socialista, educando a la gente a ver a Dios como la fuente suprema de provisión para todas las necesidades humanas. En el neopentecostalismo, aun cuando haya deficiencias doctrinales, Dios es Dios.

Pese a que hay pastores neopentecostales que han experimentado gran enriquecimiento proveniente no de Dios, sino a expensas de sus ovejas, no se puede negar que el neopentecostalismo trajo de vuelta la centralidad de Dios en la provisión de empleo, techo, salud, educación y otras necesidades, con predicaciones motivadoras exhortando a las personas a esperar y buscar la provisión y la prosperidad de Dios.

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El socialismo secular está muy preocupado con el neopentecostalismo porque lo ve como un “competidor” en llegar a los pobres. El socialismo cristiano (Teología de la Liberación en la Iglesia Católica y Teología de la Misión Integral en la Iglesia Evangélica) también tiene una preocupación obsesiva con el neopentecostalismo.

El obispo anglicano Robinson Cavalcanti, probablemente el más grande estratega socialista evangélico del Brasil, fue el fundador del Movimiento Evangélico Progresista (MEP), que ayudó en la promoción del socialista Partido de los Trabajadores entre los protestantes por más de una década. Cavalcanti, que hasta recibió visitas de presidente socialista Lula en su residencia, identificaba — juntamente con otros pastores liberales — la Teología de la Prosperidad como expresión capitalista, en oposición a una expresión socialista. Además, Cavalcanti predicaba abiertamente que las políticas socialistas radicales eran expresiones del Reino de Dios, de modo que posiciones antisocialistas o a favor de la Teología de la Prosperidad eran para él, expresiones de las tinieblas en oposición a la “luz” socialista.

El neo-pentecostalismo destrona la Teología de la Misión Integral Varios importantes líderes evangélicos del pasado sembraron esta “luz” en la forma de la Teología de la Misión Integral. Uno de los sembradores fue Caio Fábio, otrora el más grande pastor de la Iglesia Presbiteriana de Brasil, con una influencia tan grande como si fuera un Papa evangélico en Brasil, hasta su caída a finales de 1990 por adulterio y escándalos financieros.

En una reciente entrevista a la revista Cristianismo Hoy, Caio Fábio dijo que el gran momento para unificar las iglesias evangélicas en Brasil se produjo en la década de 1980. En la entrevista llevada a cabo por Danilo Fernandes, del tabloide sensacionalista Genizah, Caio Fábio se desahogó: “La teología de la prosperidad no existía aquí, lo que prevalecía era la teología de la misión integral. Hubo una enorme cantidad de pastores [siguiendo esta teología]”. Esta prevalencia, según él, ocurría de una forma especial en el Congreso Brasilero de Evangelización donde hasta hoy la Teología de la Misión Integral se encuentra en un pedestal. Pero esa unidad evangélica colosal que casi ocurrió en la década de 1980 fue destruida por un instrumento impredecible: poco después vino el movimiento neopentecostal con su Teología de la Prosperidad, con una fuerza tal que rompió la columna vertebral del monopolio de la Teología de la Misión Integral, principalmente arruinando todos los planes socialistas que estaban siendo esbozados.

La ascensión del neopentecostalismo rompió el consenso que, de acuerdo con Caio Fábio, se estaba dando entre las iglesias en relación a la Teología de la Misión Integral.

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El destronamiento de la Teología de la Misión Integral por las iglesias neopentecostales ha sido visto como un golpe “imperdonable”. Las iglesias neopentecostales comenzaron a ser criticadas — no tienen discernimiento espiritual y verdadera devoción — por las iglesias que apoyaban la Teología de la Misión Integral. Caio Fábio y Robinson Cavalcanti, quienes jugaron un papel prominente en los esfuerzos para acercar los evangélicos del Partido de los Trabajadores, se volvieron “profetas” contra la Teología de la Prosperidad y a favor de la Teología de la Misión Integral, que utiliza el Evangelio solamente como palanca de la ideología socialista. Como Ariovaldo Ramos, prominente pastor bautista reformado de línea progresista, dijo: “La Teología de la Misión Integral es una variante protestante de la Teología de Liberación”.

Los precursores de la Teología de la Liberación Desde el punto de vista histórico las raíces de la Teología de la Liberación son protestantes. En 1952 después de un período de estudio en el Union Theological Seminary de Nueva York, donde se dedicó a estudiar la relación entre el marxismo y la fe cristiana, el misionero presbiteriano ecuménico Richard Shaull (1919-2002) fue enviado al Seminario Presbiteriano del Sur, en Campinas, Brasil, donde enseñó hasta 1959. Shaull era doctor en teología por el Seminario Teológico de Princeton.

Además de las clases y de los contactos con los seminaristas, Shaull sirvió como orador en congresos de jóvenes y estudiantes cristianos de todo el Brasil, dentro y fuera de la Iglesia Presbiteriana del Brasil (IPB).

Teniendo como equipaje el Evangelio Social, una teología izquierdista que venía afectando a las iglesias protestantes de Estados Unidos, por lo menos desde finales del siglo XIX, él inicia una estrecha relación con los pastores presbiterianos brasileros Rubem Alves y Jaime Wright.

De 1942 a 1950 el Rev. Shaull fue misionero en Colombia, que más tarde se volvería, juntamente con Brasil, el principal foco latinoamericano de la Teología de la Liberación.

Oficialmente, esta teología fue fundada por el sacerdote peruano Gustavo Gutiérrez, quien en 1971 publicó el libro “Teología de la Liberación”. Sin embargo, tres años antes, Rubem Alves ya había escrito un libro con el mismo título y espíritu. Alves, que fue discípulo de Shaull, denominaba a su maestro de profeta y patriarca, “el padre de una nación”, por haber ayudado en el nacimiento de una nueva iglesia, conforme a la imagen y semejanza de la Teología de la Liberación.

La influencia de Shaull fue decisiva. Irónicamente, la transformación del Evangelio en una palanca para el marxismo en América Latina no provino de un misionero de la Unión Soviética, sino de un misionero presbiteriano de Estados Unidos. Su inclinación era muy obvia. En su libro “Christian Faith and Marxism” (La fe 7

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cristiana y el marxismo), dijo: “Mi encuentro con el marxismo no estaba haciendo de mi un marxista, sino un mejor cristiano.”

Su inclinación produjo resistencia en algunos sectores de la Iglesia Presbiteriana del Brasil (IPB), resistencia que Caio nunca tuvo que enfrentar. Le faltó el “carisma” de Caio para hacer lo que hizo Caio: hacer avanzar la Teología de la Misión Integral dentro y fuera de la IPB sin causar antagonismos.

Shaull se jubiló como profesor de ecumenismo en el Seminario Teológico de Princeton, una de las más prominentes instituciones presbiterianas del mundo.

Antes de morir en 2002 Shaull visitó iglesias pentecostales y neopentecostales en las favelas de Río de Janeiro, viendo en ellas una vitalidad espiritual que nunca había visto en sus comunidades cristianas de base. Pero, en lugar de abrirse a esta vitalidad, él quería que estas iglesias llenas de pobres pudieran recibir ayuda al acercarse a la Teología de la Liberación.

Para él, las iglesias tradicionales (Presbiteriana, Luterana, Metodista, Bautista) tenían una buena relación con esta teología, pero no tenían mucho contacto con los pobres. Mientras, las iglesias pentecostales y neopentecostales tenían contacto cercano con los pobres, pero no tenían una buena relación con su teología.

En su opinión, si estas iglesias llenas de pobres siguieran creciendo de manera explosiva, el rostro de la iglesia evangélica en América Latina sería principalmente pentecostal y neopentecostal en el futuro. Su cuestionamiento era: ¿cómo hacer que estas iglesias fueran receptivas a la Teología de la Liberación, tan predominante en las iglesias tradicionales? Respuesta: El diálogo entre las iglesias tradicionales y neopentecostales. En este encuentro, los pentecostales vendrían con su experiencia de fácil convivencia con los pobres y los no pentecostales vendrían con la teología-ideología.

Este “diálogo”, en gran parte, se hizo realidad en la década de 1990 con los esfuerzos de Caio Fabio para acercarse a las iglesias neopentecostales, hasta fungiendo como orador principal en eventos importantes de la Comunidad Evangélica Sana Nuestra Tierra. Más tarde, esta aproximación fue fundamental para una unificación protestante, pentecostal y neopentecostal logrando el monumental apoyo evangélico a Lula da Silva en las elecciones de 2002.

Caio solo fue un hábil ejecutor del puente del “diálogo” visualizado por Shaull.

Shaull y su discípulo, Rubem Alves, son considerados (según documento de la Universidad Mackenzie) los padres del lado protestante de la Teología de la Liberación. En general, Shaull fue el precursor de la Teología de la Liberación.

Alves, otro precursor, al final dejó el pastorado y se volvió un apóstata. El lado católico también tuvo sus padres y “profetas”: Dom Evaristo Arns, Dom Hélder Câmara (fundador de la CNBB), Frei Betto y Leonardo Boff.

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La CNBB (Conferencia Nacional de Obispos de Brasil), que es un sindicato de obispos que tuvieron un papel importante en la fundación del Partido de los Trabajadores (PT), es un ejemplo de cómo la Teología de la Liberación afectó a la Iglesia Católica de Brasil.

Pese a que el Evangelio Social de Estados Unidos ha ayudado a originar la teoría protestante de la Teología de la Liberación, fue solo con la implementación católica que esa teología se convirtió en teología práctica con resultados políticos (Teología de la Liberación + CNBB = PT).

La militancia católica a favor de esta teología fue abrumadora, dando un rostro católico a la teología de alma protestante, de modo que los protestantes tradicionales izquierdistas necesitaron reciclarla y devolverle la cara protestante.

Así nació la Teología de la Misión Integral en Brasil.

Entre los católicos, esta teología, decididamente, llevó a la fundación del PT. Entre los evangélicos, la versión “protestante” también ha conducido al socialismo en general y al PT en particular.

El “profeta” del “diálogo” de la Teología de la Misión Integral Ariovaldo Ramos, cuyo mentor fue Caio Fábio, apoyó a Lula en dos elecciones presidenciales (2002 y 2006). Su mentor ya había dado una pista: en su programa evangélico de televisión “Pare & Pense”, Caio personalmente presentó el candidato Lula da Silva al público evangélico durante las elecciones presidenciales de 1994. Esta fue la primera vez que un programa evangélico de televisión se involucra en una elección presidencial, en una importante iniciativa para desdemonizar a Lula, su partido y sus puntos de vista claramente izquierdistas. Sin embargo, en su autobiografía “Confesiones de un Pastor” (p. 214) Caio dice que ya en 1993 le había facilitado a Lula da Silva los nombres de los líderes evangélicos más estratégicos de Brasil.

Años más tarde, Caio confesó: “Yo acerqué Lula a los evangélicos que, durante años, lo denominaban ‘el diablo’.

Muchas fueron las oportunidades creadas por mí, para que él tuviera la ocasión de ser bien visto por la iglesia”.

El más grande pastor presbiteriano de Brasil estuvo promoviendo al más grande socialista de Brasil en la década de 1990, sin mayores impedimentos, dentro de su propia denominación presbiteriana. Las iglesias de la Teología de la Misión Integral, en su mayoría iglesias tradicionales como bautistas, luteranas, metodistas y presbiterianas, ya habían abrazado al liderazgo de Caio Fábio en sus esfuerzos por desdemonizar a Lula y su ideología.

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Después de su estrepitosa caída moral y financiera en la segunda mitad de la década de 1990, otros continuaron su batalla, incluyendo su discípulo Ariovaldo Ramos y su amigo Robinson Cavalcanti.

Con todo, antes de su caída, Caio logró importantes victorias: 1. Él casi logró la unificación de la mayoría de las iglesias tradicionales de Brasil bajo la bandera de la Teología de la Misión Integral en las décadas de 1980 y 1990. Lo que estorbó sus planes fue el explosivo crecimiento del neopentecostalismo.

2. Él logró, en gran parte, desdemonizar el PT y el socialismo frente al público evangélico, afianzando que “el socialismo no come bebés”, como si la obsesión socialista para legalizar el aborto no canibalizara y exterminara a bebés.

3. Él no logró introducir a la mayoría de las iglesias neopentecostales en la Teología de la Misión Integral, pero su puente del “diálogo” fue crucial para suavizar las actitudes de estas iglesias hacia Lula y el PT. Antes de caer, Caio tuvo tiempo para lanzar el puente del “diálogo” y obtener algunos resultados. No obstante, si Shaull hubiera tenido la lengua suave, persuasiva y astuta de Caio, el Brasil tendría hoy, en gran medida, la iglesia tradicional, pentecostal y neopentecostal a los pies de la Teología de la Misión Integral.

La minoría pentecostal afectada por la Teología de la Misión Integral Las iglesias pentecostales no terminaron hipnotizadas por Caio y su teología, pero algunas se vieron afectadas. Marina Silva, quien ahora es miembro de las Asambleas de Dios en Brasilia, se jacta de que conoció el “evangelio vivo” en la Teología de la Liberación que había aprendido de Leonardo Boff, uno de los mayores promotores de esta teología en Brasil. Boff y su teología fueron oficialmente condenados por el Vaticano durante el papado de Juan Pablo II, pero esto no ha impedido a Marina de seguir el hombre y su teología. Hoy en día, además de tener a Boff como consejero, Marina también tiene Caio Fábio.

Otro de las Asambleas de Dios, gravemente afectado por Teología de la Liberación ha sido Ricardo Gondim, que conoció el Evangelio en la iglesia presbiteriana, pero luego tuvo experiencias con el hablar en otras lenguas en las Asambleas de Dios. Seguidamente, quiso tener experiencia teológicas y codearse con doctores en teología. Al estudiar en la Universidad Metodista de São Paulo, Gondim se fue de cabeza al mundo de la Teología de la Liberación, pasando, como su compañero Robinson Cavalcanti, a demonizar a los evangélicos conservadores de Estados Unidos, como si hasta el Movimiento Pro-Familia y Pro-Vida fuera un producto imperialista importado de Estados Unidos.

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Lo que Gondim, Cavalcanti y otros nunca mencionan es que el precursor de la Teología de la Liberación no era brasilero. Era un profesor del Seminario Teológico Princeton en Estados Unidos, apasionado por un Evangelio Social y conducido por inclinaciones marxistas, por lo que su teología es, en todos los sentidos de la palabra, una teología del imperialismo. Por otra parte, si el foco de la oposición a la Teología de la Liberación era el conservadurismo evangélico que provenía de Estados Unidos, ¿por qué ellos no evitaban a la nación “imperialista”?

Cavalcanti todos los años viajaba a Estados Unidos, y envió a su hijo a vivir allá.

Pastores izquierdistas de la IPB y de otras iglesias tradicionales buscaron refugio en Estados Unidos durante el gobierno militar de Brasil. Más coherente parece haber sido el Rev. Walter Altmann, un ex presidente de la Iglesia Evangélica de Confesión Luterana en Brasil (IECLB), que mantuvo vínculos financieros con la Unión Soviética y, como Shaull, vínculos con el Consejo Mundial de Iglesias.

La IECLB, una denominación llena de teólogos y pastores progresistas, es propietaria de la Facultad de Teología de São Leopoldo, que en 2005 llevó a cabo una conferencia sobre “religión y género”, donde el orador principal fue Luiz Mott, el máximo líder del movimiento homosexual de Brasil.

La IECLB es el ejemplo de una denominación en gran medida dominada por la Teología de la Misión Integral y comprometida con el PT en la lucha contra los valores conservadores, que sus líderes progresistas identifican como “imperialismo”.

Sin embargo, siendo realistas, luchar contra el “imperialismo” es luchar contra la imposición de la agenda del aborto, del homosexualismo y del izquierdismo que viene del gobierno y de la cultura de Estados Unidos. El que ha hecho un excelente trabajo en esta lucha es el movimiento pro-vida y pro-familia.

El hecho es que la Teología de la Liberación, camuflada y luego endulzada como la Teología de la Misión Integral, mató el pentecostalismo de Gondim, dejándolo como cualquier izquierdista de las iglesias tradicionales.

La frustración de los líderes de la Teología de la Misión Integral con los neopentecostales En su ensayo “La Teología de la Misión Integral: Acercamientos e Impedimentos entre evangélicos y evangelicales” (2009), Gondim señala a Cavalcanti y a Caio Fábio como iconos de la Teología de la Misión Integral (p. 90), revela el compromiso de Visión Mundial y de la revista Ultimato con esta teología, y dice que el Segundo Congreso Brasilero de Evangelización (CBE2, 2003), un evento patrocinado por Visión Mundial para reunir a los líderes de la Teología de la Misión Integral, se quedó atónito y entristecido por el avance del neopentecostalismo y su teología de la prosperidad, que frustraban los proyectos de los progresistas hacia los pobres.

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El documento final del CBE2 esencialmente denuncia que “muchas iglesias evangélicas están experimentando un crecimiento acelerado en número” (p. 90), sin que se hayan despertado a la Teología de la Misión Integral. En lugar de esta teología, estas iglesias estaban predicando y practicando la teología de la prosperidad, que coloca a Dios, no el Estado socialista, como el proveedor de las necesidades humanas.

Las continuas quejas de Caio, Gondim, Cavalcanti y otros progresistas que “la Iglesia brasileña está enferma” o “decadente” se refieren a la falta de apertura a su teología.

Gondim también se queja repetidamente que la Teología de la Misión Integral tuvo su progreso detenido por los conservadores en el Congreso de Lausana para la Evangelización Mundial (Manila, 1989). Ed René Kivitz, compañero teológica de Gondim, ya había señalado a Peter Wagner como el líder de la oposición conservadora. El desempeño de Wagner, ahora líder del movimiento apostólico mundial, ejemplifica el potencial neopentecostal para detener el avance izquierdista en las iglesias. En la explanación de Gondim (pág. 53), el error de Wagner fue “proponer la guerra espiritual como solución a los problemas sociales” — una solución típicamente neopentecostal, en contraste con la solución izquierdista de revoluciones políticas.

Haciéndose eco de una queja del Rev. Luis Longuini de la IPB, Gondim afirma que Peter Wagner venía frustrando a los progresistas desde hacía varios años. En 1969, al participar del CLADE (Congreso Latinoamericano de Evangelización), Wagner distribuye su libro donde recalcaba que la misión de la iglesia es dar prioridad a la salvación personal y destacaba como perniciosa la teología izquierdista (p. 105).

La salvación, en su término original, incluye el rescate espiritual, emocional y físico del ser humano. Los progresistas interpretan esta amplitud de la salvación como un pretexto para las intervenciones políticas, como si el Reino de Dios fuera solamente “comida y bebida” (Romanos 14:17) y asistencia social del gobierno. En cambio, Wagner interpretaba que la iglesia debe predicar y demostrar el Evangelio del Reino de Dios, incluso utilizando la autoridad de Jesús para sanar enfermos y echar fuera demonios. Es una declaración en conformidad con los milagros que siguen a los que creen (Marcos 16:16). Pero, la demostración del evangelio para los progresistas se limita únicamente a la acción social, a menudo, en asociación con políticas y gobiernos socialistas. Nada más.

Cualquier rechazo a este tipo de acción social como intrínsecamente ligada al Evangelio está etiquetada como “fundamentalismo”. En la explanación de Gondim, ni Billy Graham se escapa de esta etiqueta, debido a que, el más famoso evangelista del mundo se negó a dar apoyo y dinero para los grupos evangélicos progresistas en América Latina. La negativa de Graham le dio una imagen negativa entre los adeptos de la Teología de la Misión Integral. Y por el contrario, Gondim no escatima elogios a la Teología de la Liberación y al Evangelio Social de Estados 12

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Unidos y reconoce que el mayor obstáculo para el avance de la Teología de la Misión Integral ha sido “un fenómeno religioso, con un gran alcance popular, el neopentecostalismo” (pág. 135).

La victoria de los pobres y la victoria del “diálogo” progresista Gondim no oculta la amargura que siente al ver la Teología de la Liberación, que ha afectado a América Latina en general y a Brasil en particular, socavada por un movimiento espiritual muy aceptado entre los pobres, y en gran parte, dirigido por líderes que salieron de la pobreza. Su amargura es compartida por Caio Fábio y teólogos brasileros progresistas graduados en universidades y seminarios estadounidenses y europeos, incapaces de hacer frente a un movimiento donde la mayoría de los pastores se graduó en el “seminario” de la vida y de la pobreza.

Son pobres, apenas capaz de hablar el portugués, pero prefirieron la Teología de la Prosperidad, en lugar de la Teología de la Liberación, para superar la pobreza.

Los pobres prefieren la Teología de la Prosperidad, pero los ricos (teólogos y pastores profesionales) prefieren la Teología de la Liberación, haciéndola tan elitista como el marxismo que la ayudó a crear.

Esto no significa, que ninguna iglesia neopentecostal haya aceptado la teología de los progresistas.

Las iglesias neopentecostales más afectadas por la Teología de la Misión Integral fueron, coincidentemente, las iglesias que más se aproximaron a Caio Fábio. En la primera mitad de la década de 1990, el pastor presbiteriano fue el orador destacado en importantes conferencias pentecostales, incluyendo la Comunidad Evangélica Sana Nuestra Tierra (Sara), fundada por el obispo Robson Rodovalho, que tiene raíces presbiterianas. Al inicio de la década de 1990, Sara vio el socialismo y el PT como diabólicos. En 2002, Sara ya estaba suficientemente engañada para subirse al tranvía que uniría protestantes, pentecostales y neopentecostales en el apoyo a Lula da Silva.

El programa “Pare & Pense” de 1994 trajo a la engañada Valnice Milhomens, para presentar juntamente con Cayo, al candidato Lula; y esto fue así, no porque la líder neopentecostal representara los sentimientos políticos neopentecostales, sino porque su presencia era fundamental para la estrategia del “diálogo” a fin de romper la barrera antisocialismo presente en los neopentecostales.

Caio representó a las iglesias protestantes tradicionales, que ya habían sido seducidas por la Teología de la Misión Integral y en gran parte, dispuestas a apoyar a Lula, el mayor mesías socialista de Brasil. Caio, con su Teología de la Misión Integral y que no se atrevía a decir su nombre, era una figura que ningún líder de la IPB y de otras iglesias tradicionales cuestionaba. Valnice representó a las iglesias 13

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neopentecostales, que necesitaban ser engañadas tal como ella lo había sido. Fue el puente del “diálogo” previsto por Shaull desde nos atrás.

Los dos eran de diferentes generaciones. Mientras Shaull estaba enseñando teología en el Seminario Presbiteriano del Sur en Campinas, S.P. (1952-1959), Caio fue ordenado pastor de la IPB en 1977 a los 22 años y tenía, según sus propias palabras, muchos amigos pastores que habían sido alumnos de Shaull. Caio también leyó los libros del padre espiritual de la Teología de la Liberación. Si Shaull era el “profeta” de las ideas y visiones de esta teología, Caio era el “profeta” del diálogo, encargado de producir una apertura hacia esta teología (que estaba en poder de las iglesias tradicionales) entre los pentecostales y neopentecostales.

Los frutos del cardenal Richelieu brasilero duraron décadas.

Teología de la Misión Integral y extremismo anticonservador Ariovaldo Ramos, uno de los sucesores espirituales de Shaull, y Marina Silva se quejaron de la “ola de conservadurismo” que casi derrota a Dilma Rousseff en las elecciones presidenciales de 2010. La ola conservadora fue una expresión de fuertes sentimientos cristianos en contra del aborto y del homosexualismo. En lugar de oponerse abiertamente al historial y a las posiciones claramente abortistas y pro homosexualismo de Dilma y del PT, Ariovaldo divulgó su manifiesto, declarando: “Queremos expresar nuestro rechazo ante la ola de conservadurismo que sufrió el país durante el proceso electoral”. Y Marina, en su “Carta abierta a los candidatos a la Presidencia de la República Dilma y Serra”, critica abiertamente lo que ella ve como “ese conservadurismo obstinado que coloniza la política y sacrifica cualquier utopía en nombre de un pragmatismo sin límites”.

Por primera vez en la historia de Brasil, el tema del aborto y de homosexualismo influye directamente en una elección presidencial. Yo, que nunca he sido partidario de Dilma ni de Serra, estaba celebrando. LifeSiteNews, sitio para el cual yo hacía traducciones del inglés al portugués, estaba celebrando y escribiendo artículos internacionales para mostrar al mundo el avance conservador de Brasil. Líderes católicos y evangélicos pro-vida del mundo, incluyendo el Vaticano, estaban igualmente celebrando. Sin embargo, Ariovaldo y Marina, junto con toda la izquierda mundial, estaban descontentos y enojados. La actitud de inconformidad de ambos, es la demostración de cómo el movimiento de la Misión Integral y el movimiento pro-vida no andan en el mismo camino.

En los 25 años en que he trabajado con líderes pro-vida en Brasil nunca he visto tanto sentimiento antiaborto y anti sodomía en una elección presidencial. ¡Fue un milagro! El duro trabajo pro-vida no había sido en vano. Después de todo, aunque el gobierno socialista de Brasil esté a favor de estos males, los sentimientos de la mayoría de la población brasilera, demostrados en las encuestas de opinión 14

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pública, están en contra de las aberraciones homosexuales y del asesinato de bebés no nacidos.

El Vaticano intentó intervenir positivamente en favor de la ola conservadora, alineando a los obispos brasileiros a orientar a los católicos a no votar por candidatos pro-aborto. No sirvió de nada, porque la CNBB y Frei Betto son para el Vaticano, lo que Ariovaldo y Marina son para el movimiento pro-vida y profamilia: una completa discordancia de valores.

A diferencia del Vaticano, que se ha destacado en posturas conservadoras — enérgicas condenas públicas al aborto, al homosexualismo y a la Teología de la Liberación —, la CNBB se resiste a condenar la Teología de la Liberación y su cachorro más importante, el PT. Del mismo modo, los líderes evangélicos brasileros afectados por Shaull y Caio, se resisten a expresar su enérgica condena pública al aborto, al homosexualismo y, especialmente, a la Teología de la Misión Integral.

Teología de la Misión Integral demoniza neopentecostalismo Robinson Cavalcanti, uno de los mayores promotores de esta teología, ha sido exaltado por Ariovaldo como “profeta”, después de haber sido asesinado por su propio hijo a principios del 2012. Dicha exaltación se dio por medio de un artículo firmado por Ariovaldo y publicado en el Genizah, que tiene estrechos vínculos con los cerebros de la Teología de la Misión Integral, sobre todo Caio Fabio, y es el más grande tabloide anti-neopentecostal del Brasil.

El ejemplo del Genizah creó una ola y línea comercial de tabloides “apologéticos” que utilizan la demonización del neopentecostalismo como una cortina de humo para proteger y promover la Teología de la Liberación. Condenan al neopentecostalismo como “herejía”, pero alaban la Teología de la Misión Integral y sus “profetas”, incluyendo Caio y Cavalcanti. En Púlpito Cristão, uno de los tabloides que imitan al Genizah, encontré, en más de 400 menciones hechas a Caio, sólo unas pocas negativas. Las demás eran elogios al hombre que, como Ricardo Gondim mencionó, es un icono de la Teología de la Misión Integral.

Genizah y Púlpito Cristão, que ferozmente combaten la llamada Teología de la Prosperidad, ferozmente promueven la Teología de la Misión Integral. El perfil común de los mayores enemigos de los neopentecostales es la adulación al progresismo y a sus líderes.

Mientras Caio Fábio y Cavalcanti trabajaban para desdemonizar el PT, ellos y sus compañeros evangélicos izquierdistas estaban trabajando para demonizar el neopentecostalismo por su resistencia a la Teología de la Misión Integral. (Iglesias pentecostales, especialmente neopentecostales, ven al socialismo como demoníaco.) Con el fin de vacunar sus congregaciones en contra de lo que ellos 15

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llamaban la contaminación de las iglesias neopentecostales, pastores presbiterianos y de otras denominaciones persuadían a sus fieles, especialmente a los líderes, a la suscripción colectiva de la revista Ultimato, en las décadas de 1980 y 1990. Así, bebían directamente de las páginas de la revista los textos izquierdistas de Robinson Cavalcanti, Ricardo Gondim y Paul Freston, los cuales eran miembros del PT y columnistas importantes en la revista presbiteriana. Caio Fábio, un ex columnista de Ultimato, no era un miembro oficial del partido de Lula, pero mantenía encuentros con él.

Rev. Caio Fábio dando la bienvenida al candidato presidencial Lula em sua programa cristiano de televisión em 1994: el presbiteriano más importante de Brasil haciendo propaganda del socialista más importante de Brasil

Entre los libros publicados por la Editora Ultimato está “La Nueva Cara de la Misión”, escrito por el Rev. Luiz Longuini de la Iglesia Presbiteriana de Brasil, un pastor casado cuatro veces. El libro, que ha sido una importante referencia en la obras de la Teología de la Misión Integral, no es el único libro que promueve la teología izquierdista publicado por Ultimato, fundada por un líder presbiteriano.

Fue con los anticuerpos de la Teología de la Misión Integral que Ultimato vacunaba a líderes y congregaciones en contra del neopentecostalismo dando renombre a sus articulistas notoriamente izquierdistas al atacar doctrinas neopentecostales y defender doctrinas de izquierda.

Hoy, al atacar a la Teología de la Prosperidad, los “maestros” de la Teología de la Misión Integral garantizan la aceptación de un gran número de pastores adeptos de la teología izquierdista, librándose así de toda crítica. Después de todo, Brasil está viviendo una temporada de caza a las iglesias neopentecostales. Por determinación de una minoría de pastores liberales y por el silencio de la mayoría, está prohibido incluir la Teología de la Misión Integral en esta temporada.

Genizah es un tabloide religioso fundado por Danilo Fernandes, calvinista radical y amigo íntimo de Caio Fábio. La misión principal del Genizah es vacunar contra el neopentecostalismo mediante burlas y escándalos muchas veces fabricados o inflados, en un caso muy interesante donde el propietario del diario sensacionalista, que tiene problemas con la justicia debido a algunos asuntos 16

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financieros, utiliza métodos empresariales para ganar mucho dinero acusando a Silas Malafaia y a líderes neopentecostales de ganar mucho dinero.

El carácter diabólico y burlador de la izquierda evangélica brasilera ha oscilado entre Ultimato (con diplomáticos ataques al conservadurismo evangélico) y Genizah (con violentos ataques), que “desdemonizan” a la izquierda y, en cambio, colocan a los neopentecostales para que sean demonizados. Este carácter izquierdista mayormente calvinista no ha recibido críticas de calvinistas no liberales, quienes a menudo prefieren el silencio debido a la afinidad doctrinal con el cesacionismo — doctrina que rechaza que el Espíritu Santo otorgue dones sobrenaturales en el presente.

Calvinista Danilo Fernandes, dueño de lo tabloide sensacionalista pro-Teología de Misión Integral Genizah, con sua amigo Caio Fábio

Aparentemente, por amor a esta doctrina, los calvinistas no liberales que abren la boca con fuertes críticas a Silas Malafaia y otros líderes neopentecostales jamás han denunciado, ni siquiera suavemente, a los calvinistas Genizah y Ultimato. ¿Es el neopentecostalismo un “pecado” mucho más grande que el flagrante izquierdismo de las iglesias calvinistas e históricas?

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Socialismo versus neopentecostalismo Mientras el socialismo secular, católico y evangélico apunta para un Estado supuestamente laico como un dios en un mayor o menor grado por encima de todo y de todos, con el derecho exclusivo de suplir todas las necesidades humanas (lo quieran o no los ciudadanos), cobrando impuestos cada vez más exorbitantes (lo quieran o no los ciudadanos) para sus políticas de provisión, las iglesias neopentecostales apuntan sí a Jesucristo como Dios por encima de todo y de todos, con el derecho y el poder supremo de satisfacer todas las necesidades humanas.

Suplir todas las necesidades humanas es una promesa que socialistas seculares y cristianos vinculan al Estado socialista y que los predicadores neopentecostales vinculan a Dios. Y es fácil ver los mentirosos en esta historia, porque solo Dios tiene el poder exclusivo de suplir para todas las necesidades humanas.

Yo discrepo totalmente de la forma como muchas iglesias neopentecostales recaudan dinero. Pero, aun con toda su exageración, hay una gran diferencia: por grande que sea la presión psicológica para que usted ofrende, usted no es obligado a hacerlo. Si usted no da nada, el pastor no podrá multarlo, acusarlo o arrestarlo.

Por el contrario, cuando el gobierno le “pide” por medio de impuestos, usted no tiene otra opción. Si no lo hace, termina en serios problemas legales. Usted está obligado a dar hoy casi el 40% de su salario en impuestos en Brasil, y esta cobranza abusiva es justificada por los socialistas seculares, protestantes y católicos como necesaria para que el gobierno supla todas las necesidades humanas — obviamente, una promesa imposible de ser cumplida por cualquier mortal.

Estos socialistas se quejan constantemente del “atraco” de las iglesias neopentecostales, pero nunca se detienen a evaluar o condenar la voracidad estatal, y no dicen nada cuando los izquierdistas promueven el homosexualismo, el aborto, el feminismo, la brujería bajo el pretexto estatal de cultura afro-brasilera, etc. ¿Y toda esta agenda anticristiana es sostenida con el dinero de quién? Del dinero que es robado por fuerza de ley a todas sus víctimas-ciudadanos, incluidos los cristianos.

La persecución a cristianos y la iniquidad están siendo institucionalizadas con el apoyo de las iglesias y con el dinero de los impuestos abusivamente cobrados a sus miembros. La sacralización de la homosexualidad y del asesinato de bebés mediante el aborto está siendo promovida a menudo con la “bendición” de la iglesia a través de líderes que se callan o unen sus manos con los propios promotores del mal.

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Los seguidores del PT: oportunistas o ideólogos El Partido de los Trabajadores y otros partidos socialistas están decididos a imponer el aborto y el homosexualismo en Brasil. El único impedimento son las osadas denuncias de los telepastores neopentecostales — por supuesto que esto no incluye al Obispo Edir Macedo y a la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD), quienes embarcaron en el apoyo al PT y al aborto años pasados.

A excepción de la Iglesia Universal, cuyo fundador y jefe sigue la ideología del aborto, todas las otras iglesias neopentecostales se oponen al aborto y al homosexualismo. R. R. Soares, por ejemplo, habla claramente contra el aborto y el homosexualismo en sus programas. Silas Malafaia, a su vez, es mucho más enérgico.

Pero ¿por qué el PT vería a estas mediáticas iglesias neopentecostales como las únicas amenazas para el control absoluto del PT en la sociedad?

El PT se ha dado cuenta de que cuando estas iglesias lo apoyan, lo hacen exclusivamente por interés, no por ideología.

El PT no ha podido ver a las iglesias neopentecostales adoctrinando a sus congregaciones en el socialismo. El PT no ha podido verlas utilizando sus revistas y sitios web que enseñan que el socialismo es la salvación de la sociedad.

Los líderes de estas iglesias solo se acercan al PT en tiempos de elecciones por oportunismo. Su actitud es impulsada por puro interés, sobre todo porque el gobernante electo tendrá el poder de decidir concesiones de radio y televisión, temas importantes para las iglesias neopentecostales.

Por el contrario, otros grupos evangélicos, que en su mayoría no pertenecen a los neopentecostales, tienen mucho más interés, utilizando sus revistas y otras publicaciones para promover el socialismo con toda su carga de aborto y homosexualismo que inevitablemente viene agregada. Grandes revistas evangélicas de Brasil regularmente adoctrinan al público para que vea en el socialismo la solución a los problemas de la sociedad. El gobierno socialista del PT, con toda su frenética carrera para institucionalizar la iniquidad, es adornado e incluso alabado por ellos. Estos evangélicos son impulsados por la ideología.

El PT no se inquieta con los líderes evangélicos que son impulsados por la ideología, pues, sean ateos o evangélicos, el que sigue al PT por convicción es un fiel y devoto siervo. Su apoyo está garantizado — o al partido o la ideología socialista, que en última instancia es lo mismo.

Sin embargo, el apoyo que viene por interés nunca está garantizado. Es por eso que el PT tiene mucha desconfianza de los líderes neopentecostales: debido a que no se mueven por la ideología socialista, estos líderes pueden criticar abiertamente 19

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las políticas a favor del aborto y del homosexualismo del PT, o incluso abandonar el barco del partido en cualquier momento.

Esta es una excelente señal. Lo que no es una buena señal es que perdemos la prioridad en las críticas.

Muchos pastores que critican a Silas Malafaia por la Teología de la Prosperidad — no por su oportunismo político — pasan por alto a otros pecados graves. Lo critican mientras están abrazados a la Teología de la Misión Integral y otras teologías que facilitan la aceptación del socialismo como la salvación social.

Lo que no es de sorprender es que para el PT, el Genizah y los medios de comunicación evangélicos similares no representan ninguna amenaza para el avance de la institucionalización socialista de la iniquidad. La amenaza son las iglesias neopentecostales, que también son blancos habituales de las burlas de Genizah.

Malafaia no es perfecto, pero ha hecho un trabajo maravilloso al movilizar a la población contra el PLC 122, la más gran ley anti-“homofobia” en Brasil. Por el contrario, el Genizah nunca ha hecho tal movilización y todavía insinúa que los que lo hacen son “extremistas”. Los activistas gais aplauden el liberalismo del tabloide calvinista.

Hace un tiempo, un pastor de las asambleas de Dios que hizo un comentario en mi blog se presentó diciendo: “Yo soy petista (miembro del PT) por convicción ideológica”. Al ser refutado por mí y por otros lectores del blog el pastor que dirige una iglesia de las Asambleas de Dios en Brasilia prontamente se defendió con el pretexto de que su presencia en el PT era para “evangelizar” y que cualquier oposición a él como petista equivaldría a la oposición a una santa obra de evangelización. ¿Para evangelizar a brujos es necesario decir “yo soy brujo por convicción ideológica”? ¿Para evangelizar a homosexuales es necesario decir “yo soy gay por convicción ideológica”?

Por lo tanto, hay dos tipos de evangélicos (y por extensión, otros cristianos) que apoyan al PT. 1. Hay evangélicos que siguen al PT por interés, para no perder sus concesiones de radios y televisoras. La mayoría de ellos son líderes neopentecostales.

2. Hay evangélicos que siguen al PT porque, ya sea abiertamente o no, son socialistas por convicción ideológica. La mayoría de ellos no son neopentecostales, y el PT no se inquieta con ningún de ellos.

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Brasil sin Elías Es dentro de esta realidad de liderazgo espiritualmente enfermo que los evangélicos de Brasil deben actuar.

En respuesta a los esfuerzos del PT para contrarrestar los telepastores neopentecostales, Silas Malafaia se ha pronunciado diciendo: “No demonizo ningún partido político. Como todos saben, he votado a favor de los socialistas Fernando Henrique Cardoso, Lula y Serra”. ¿Puede una declaración como esa reflejar el espíritu de un profeta? Elías nunca tuvo su nombre inscrito en un cartel de apoyo político al rey Acab. Por el contrario, Malafaia no solo votó en políticos pro-aborto y pro-homosexualismo.

Eso por sí solo hubiera sido un error suficientemente preocupante para un líder cristiano. Él hizo mucho más que eso: le dio su nombre para folletos de apoyo a estos políticos. Llevó con su mal ejemplo a una multitud de personas a votar por los políticos más pro-aborto y pro- homosexualismo de Brasil y de Río de Janeiro.

Fue, por ejemplo, lo que ocurrió en 2002 donde él, junto con muchos otros líderes evangélicos, firmó un documento público de apoyo a Lula, con todas las consecuencias que hoy conocemos muy bien y que un profeta genuino hubiera visto desde lejos.

En aquella época denuncié la alianza evangélica a favor de Lula que implicaba la unión de iglesias tradicionales (Nilson Fanini [bautista], Guilhermino Cunha [presbiteriano], Robinson Cavalcanti [anglicano], etc.), pentecostales (Jabes Alencar, Silas Malafaia, etc.) y neopentecostales (Marcelo Crivella, Estevan Hernandes, Robson Rodovalho, etc).

Mientras los líderes evangélicos más poderosos de Brasil estaban apoyando a Lula y el futuro gobierno petista, yo estaba clamando en el desierto. (En 2002 el presidente de una denominación evangélica llegó a pedir que ya no le enviase correos electrónicos “criticando” a Lula y su historial ideológico, dejando en claro que él, como miembro inscrito del PT, estaba muy ofendido por mis advertencias).

Incluso después de ver todos los ataques a la familia brasilera en el primer mandato de Lula, Malafaia apoyó su reelección, mostrando el lado obstinado y ciego de su carácter evangélico. En ese momento, en 2006, la obsesión prohomosexualismo de Lula era muy evidente, nacional e internacionalmente. Si él estaba tratando de ser un Acab moderno, lo logró. Sin embargo, en lugar de llevar un mensaje de reprensión a Lula, Malafaia eligió de manera consciente y muy bien informada llevar apoyo político. Si él estaba tratando de ser un profeta, no lo logró.

Por eso, lo correcto no era que Malafaia dijera limitadamente en su declaración pública: “Yo voté por los socialistas Cardoso, Lula y Serra” — olvidando mencionar a Sergio Cabral el gobernador más pro-aborto y pro-homosexualismo en la historia de Río de Janeiro.

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La declaración de Malafaia debería incluir lo que realmente hizo él: “He votado, apoyado y promovido, firmado con mi nombre todas estas criaturas, incluyendo a Lula, el presidente más pro-aborto y pro-homosexualismo en la historia de Brasil”.

También debería haber dicho: “Animé a multitudes de personas a votar por los políticos más pro-aborto y pro-homosexualismo de la historia de Brasil y Río de Janeiro”. Sería difícil aceptar esta verdad, así como sería desagradable que Elías dijera: “Yo, como profeta del Señor, he votado, apoyado y promovido, firmado con mi nombre, Acab, el rey más pro-aborto y pro-homosexualismo de la historia de Israel, y animé a todo el pueblo de Israel a votar por él”.

Malafaia también dijo: “Voto en personas y no en partidos”. ¿Esto justifica el votar, apoyar y promover sistemáticamente a personas que tienen un historial ideológico contra la familia y contra el cristianismo? ¿Esto justifica alentar a una multitud de evangélicos a votar por personas que tienen un historial ideológico contra la familia y contra el cristianismo?

Es locura luchar contra el aborto y el homosexualismo y votar, apoyar y promover los políticos que promueven estos males. Es igualmente locura luchar contra el aborto y el homosexualismo y animar iglesias a votar por estos políticos. Es como alguien que lucha contra un gran incendio, pero de vez en cuando arroja leña al fuego. Es como ver a un perro corriendo en círculos intentando agarrar su propia cola.

Elías era un hombre que luchaba contra los incendios de la iniquidad social sin echar leña al fuego. Sin embargo, Brasil no tiene ese tipo de hombre.

Complicidad y silencio versus complicidad y testimonio imperfecto de los cristianos de Brasil Lo que mayormente hay en Brasil: 1) cristianos que votan y promueven el PT u otros partidos socialistas (PSDB, el PSOL, etc.) y se callan, y 2) cristianos que votan y promueven el PT u otros partidos socialistas (PSDB , el PSOL, etc.) y no se callan. ¡Permanecer en silencio ante la institucionalización del pecado es pecado! Abrir la boca en contra de la institucionalización del pecado y promover su autor es mejor que el silencio, pero también es pecado.

Mientras tanto, como Brasil no tiene un Elías o un Juan el Bautista nos quedamos con la imperfecta opción de apoyar líderes cristianos que por lo menos abren la boca. Este es el caso de Silas Malafaia. Aunque él haya echado mucha leña en el fuego que está combatiendo, por lo menos no es como muchos otros que igualmente echaron mucha leña en el fuego y ahora silencian o mitigan los peligros del fuego.

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Claro que Brasil necesita de un hombre que abra la boca sin echar leña al fuego.

Ese sería el ideal de Dios. Un hombre que denuncia el pecado y le dice a los “reyes” de Brasil: “Así dice el Señor”. Un hombre que, incluso perdiendo sus concesiones de radio y televisión, proclamaría sus mensajes en las esquinas de las calles o en los rincones de Internet.

En la ausencia de un profeta Elías o de un Juan el Bautista en Brasil, hagamos lo que Jesús nos enseñó: “Así que ustedes deben obedecerlos y hacer todo lo que les digan.

Pero no hagan lo que hacen ellos, porque no practican lo que predican”. (Mateo 23:3 NVI) Estas palabras de Jesús también pueden ser parafraseadas: “Así que ustedes deben obedecer y seguir todo lo que ellos dicen en defensa de la familia. Pero no imiten sus acciones para votar, apoyar y promover políticos anti-familia porque ellos no hacen lo que enseñan”.

Unos consienten solo con acciones; otros, con palabras y acciones. Por lo tanto, sepamos discernir lo que se debe hacer ante las omisiones totales o parciales.

Cuando ellos enseñaren contra el aborto y el homosexualismo, escuchemos y pongámoslo en práctica.

Pero no imitemos sus acciones. Cuando votaren en políticos anti-familia no los imitemos.

Cuando apoyen y promuevan políticos anti-familia no los imitemos.

Recordemos sus palabras y mensajes en defensa de la familia, pero no imitemos lo que hacen en tiempos de elecciones echando leña al fuego. Ignoremos por completo sus irresponsables indicaciones políticas cuando no practican lo que predican. Después de todo, este fue el mandato de Jesús: seguir lo que enseñan bien y no imitar lo que un hipócrita hace.

Por lo tanto, en obediencia a las palabras de Jesús, sigamos todo lo que Malafaia y otros enseñan sobre aborto y homosexualismo, pero no imitemos sus acciones.

Defendamos todo lo que Malafaia enseña en defensa de la familia, pero no lo imitemos cuando echa leña al fuego. Por lo contrario, echemos agua al fuego, repudiando irresponsables indicaciones políticas.

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¡Impuestos, impuestos, impuestos!

Sea por ideología u oportunismo, la participación irresponsable de los evangélicos en la política está contribuyendo al incremento de un Estado que recauda impuestos cada vez más elevados. Y la abusiva recaudación de impuestos provoca dos efectos: 1) En el bolsillo del ciudadano trabajador queda menos de sus propios recursos para cuidar de su familia.

2) Estos recursos terminan a menudo en los bolsillos de los políticos pirañas.

Solo asiste a una iglesia neopentecostal el que quiere. Y después de que haya entrado en la iglesia, solo ofrenda quien quiere. Nadie está obligado a dar nada.

Pero con el gobierno es muy diferente. Nadie tiene la opción de la exención.

Todos son blancos y víctimas del voraz Estado y su insaciable recaudación de impuestos. Pero los socialistas encubren, justifican y disculpan este mega robo cometido por un gobierno auto nombrado asistencial. Lo que ellos no perdonan son a las iglesias neopentecostales que recogen diezmos y ofrendas sin el uso de la ley y del Estado.

Sin embargo, los socialistas seculares, evangélicos y católicos no se preocupan con los políticos estatales milagreros que no dan libertad ni derechos a los ciudadanos.

Ellos se preocupan por lo que ellos denominan “milagreros” cristianos que piden demasiadas ofrendas a ciudadanos que voluntariamente van a sus iglesias. Ellos están molestos con lo que ellos llaman “milagreros” cristianos que apuntan hacia Dios, no al Estado, como una solución a todas las necesidades de la sociedad.

Desde sus cómodas sillas y oficinas bien equipadas, los líderes socialistas movidos por la envidia observan las iglesias neopentecostales. La “concurrencia” les molesta sobremanera. Ellos pretenden ser los únicos milagreros en el centro de la admiración de los pobres y de la sociedad, no solo de las universidades y de los medios de comunicación, donde ellos y su ideología son absolutamente idolatrados.

Si hay un mandamiento que las universidades y los medios de comunicación obedecen sin dudar es: “No tendrás otros dioses delante de mí.” De hecho, ellos no han dado ningún espacio a nadie más. Sólo reina el izquierdismo como un dios en medio de ellos.

Incluso con todo este poder los líderes socialistas seculares todavía se sienten molestos con los neopentecostales.

La molestia afecta por igual a los izquierdistas religiosos; pero, debido a una común teología rancia hasta religiosos no socialistas aceptan, de buena gana o no, una dudosa alianza, vociferando contra los “pecados” neopentecostales y al mismo 24

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tiempo pasando por alto las terribles contaminaciones progresistas dentro de las iglesias.

El evangélico progresista con su visión de reino socialista de este mundo como una manifestación del Reino de Dios ve solamente la concurrencia ideológica. De forma distinta, el protestante tradicional ve no solo la concurrencia religiosa, sino también las cuestiones espirituales. Aun si todas las iglesias neopentecostales descartaran la Teología de la Prosperidad, los protestantes tradicionales no las aceptarían, porque ellos no pueden ver como manifestaciones de Dios las experiencias actuales de dones de sanidad, profecía, lenguas, etc.

Por lo tanto, la hostilidad común hacia el neopentecostalismo crea una rara alianza entre religiosos progresistas y tradicionales.

Desde sus cómodos sillones y oficinas pastorales bien equipadas, pastores y teólogos de corte tradicional y progresista se unen para criticar a los pastores de la Teología de la Prosperidad. Esta unión “informal” se hace a través de un pacto de no agresión no declarado: mientras atacan a la Teología de la Prosperidad criticando a sus pastores por nombre (Silas Malafaia, RR Soares y otros que están en la lista negra), los tradicionales y los progresistas no se atacan nominalmente.

Los progresistas solo dejarán de criticar a los neopentecostales después que éstos abracen la Teología de la Misión Integral.

Los tradicionalistas solo dejarán de criticar a los neopentecostales después que éstos abandonen la Teología de la Prosperidad, y luego que abandonen el hablar en lenguas, profecías, echar fuera demonios, etc. Sin embargo, las exigencias teológicas, por supuesto, no se detendrán ahí.

¿Un crítico anti neopentecostal merece el título de apologista?

Sí, se lo merecería si también hubiera denunciado a la Teología de la Misión Integral y el cesacionismo — que atribuye al diablo las profecías, revelaciones y otros dones del Espíritu Santo de hoy. El principal problema es que muchos de los que critican los neopentecostales son partidarios tradicionalistas o seguidores de la Teología de la Misión Integral o del cesacionismo.

Aun así, son colocados en la lista de oradores para conferencias cristianas, como si sus ideas fueran honestas o correctas.

Los responsables de las conferencias, al parecer encubridores, nunca les dijeron: “Ustedes han pasado años atacando a Silas Malafaia, R.R. Soares y otros telepastores neopentecostales, pero nunca criticaron a Ariovaldo Ramos y otros promotores de la Teología de la Misión Integral, incluyendo al Genizah. Ustedes 25

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tampoco nunca atacaron el cesacionismo. ¿Cómo pretenden que yo los vea como defensores honestos del Evangelio?”.

Prominentes partidarios de una apología cristiana selecta atacan, al menor indicio, cualquier desliz de líderes pentecostales, pero se hacen los desentendidos frente a las descaradas herejías de intocables sacerdotes de la Teología de la Misión Integral. Por ejemplo, ¿qué ocurriría si Malafaia o R. R. Soares hubieran hecho la siguiente declaración?

“Para mi, este universo es sagrado… Lo sagrado está presente en todo el mundo… Si no tengo una visión que sacraliza el cosmos y toda la creación, yo necesito, por lo menos, hacer una segunda meditación..

Esta declaración, claramente panteísta, hubiera arruinado a Malafaia y Soares, caso ellos la hubiesen hecho. Sin embargo, el verdadero autor nunca tuvo problemas.

Esta declaración fue hecha el 12 de agosto de 2004 en el seminario “La Iglesia y los Programas Sociales del Gobierno Federal y la Iglesia y la Bioética”. El seminario se realizó en el Congreso Nacional de Brasil con el patrocinio del Movimiento Evangélico Progresista y de la bancada evangélica del PT. Desde 2004 cuando se hicieron las declaraciones panteístas, nunca se le hizo al autor — Caio Fabio — ninguna acusación, denuncia o molestia por parte de los eternamente rabiosos apologistas del mundo gossip — palabra en inglés que significa chisme y la costumbre de propagar informaciones escandalosas, sensacionalistas y a menudo, inexactas de la vida privada de otros. Por este grave problema, se ve que su objetivo no es defender la sana doctrina ni combatir las herejías, sino enfilar sus armas hacia los neopentecostales. Caio Fabio, y su herejía panteísta de casi una década, solo escapó de los apologistas del mundo gossip porque no es neopentecostal. Si fuera neopentecostal hubiera sido denunciado por mucho menos.

Alianzas necias Los tradicionalistas no atacan a la Teología de la Misión Integral mencionando a Ariovaldo Ramos, Robinson Cavalcanti y otros peces gordos progresistas. A su vez, los progresistas les devuelven el favor nunca condenando por nombre a los tradicionalistas.

Desde sus grandes casas y sus grandes coches, muchos tradicionalistas y progresistas condenan las grandes mansiones y los grandes coches de los líderes neopentecostales.

Condenan la Teología de la Prosperidad, pero viven en un lujo eclesiástico que daría a Jesús y a los apóstoles la apariencia de meros mendigos analfabetos.

Un pastor presbiteriano (estoy usando este ejemplo porque Ultimato y otros críticos progresistas se consideran calvinistas, incluyendo el Genizah) de una 26

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iglesia pequeña en una ciudad del estado de São Paulo o del estado de Minas Gerais recibe al mes un promedio de 10 salarios mínimos. (¡Si yo tuviera esa cantidad me consideraría rico!) Ahora bien, un pastor presbiteriano de una iglesia grande en una gran ciudad recibe un salario mucho más alto que eso.

Aunque Silas Malafaia, R. R. Soares y otros prominentes pastores neopentecostales reciben salarios que son súpersalarios, por lo general, pastores neopentecostales de pequeñas iglesias en pueblos pequeños, reciben mucho, mucho menos que 10 salarios mínimo, y por encima realizan cultos casi todos los días, mientras que los pastores de las iglesias calvinistas reciben mucho para realizar, muy a menudo, sólo uno o dos cultos por semana.

En un caso específico, según lo que me ha sido relatado por un ministro presbiteriano, un pastor presbiteriano de una iglesia muy pequeña recibía cerca de 10 mil reales (casi cinco mil dólares) por mes. Además recibía vivienda, coche, combustible, etc. Su trabajo consistía en realizar un culto por semana y un día de consejería semanal.

Así que, cuando vemos un gran calvinista que condena la prosperidad de una minoría de líderes neopentecostales, también tenemos la libertad para preguntar cuánto gana el crítico.

Condenan la Teología de la Prosperidad, pero nunca renuncian a su propia prosperidad. ¿La prosperidad de ambos grupos refleja la humildad de Jesús?

La motivación de las críticas, por supuesto, implica mucho más que simplemente la “apologética”. Involucra la envidia y otros sentimientos nada cristianos, disfrazados de preocupaciones teológicas.

Otros, como el tabloide sensacionalista Genizah, se enriquecen burlándose de los neopentecostales e incluso, se presentan como “defensores de la fe” y “apologistas”. El propietario del Genizah es un empresario con mala reputación en materia financiera. Y a pesar de eso continúa con negocios sombríos, en términos de la ética cristiana, haciendo mucho dinero con burlas y mal carácter.

Estos “apologetas”, con su ambición oculta, promueven ampliamente los peces gordos progresistas y liberales como Caio Fabio, Ariovaldo Ramos y Robinson Cavalcanti. Sin embargo, no son etiquetados nominalmente de progresistas por los peces gordos tradicionalistas.

Esto demuestra que un discreto o secreto pacto de no agresión mantiene a los progresistas en silencio con respecto a las diferencias con los tradicionalistas, y viceversa. Por amor al “enemigo” común, han dispuesto poner las diferencias a un lado. No es de extrañar que el Genizah, cuyo dueño se jacta de ser calvinista, siempre tenga espacio en su tabloide para textos de dinosaurios progresistas como Robinson Cavalcanti y Caio Fábio, junto con textos de los pastores no progresistas como Augustus Nicodemus (tradicionalista que cree que profecías, visiones y otros dones espirituales cesaron hace dos mil años, por lo que es inaceptable las 27

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actuales experiencias espirituales de pentecostales y neopentecostales), pero nunca un solo texto positivo de Silas Malafaia, quien cree que profecías, visiones y otros dones espirituales nunca cesaron. La hostilidad común une a tradicionalistas y a progresistas.

De otra manera, el progresismo de Genizah siempre apunta con burlas, a mi blog.

Yo no condeno los neopentecostales por lo que ellos están haciendo a favor de la vida y de la familia, lo que hace imposible para mí hacer un pacto de no agresión con Genizah y criaturas similares sólo por el bien de los prejuicios teológicos e ideológicos y envidias financieras. Yo apoyo a Silas Malafaia con restricciones. Yo apoyo todo lo que él hace para defender la vida y la familia. Lo apoyo también en la creencia de que los dones espirituales son para hoy. Pero, desapruebo todas las alianzas y conveniencias de él con políticos anti-familia y anti-vida.

No es solo de los progresistas y tradicionalistas que los neopentecostales sufren ataques. Algunos pentecostales, ávidos de ganarse el favor de todo y de todos se hacen los ciegos a las aberraciones progresistas y a la posición tradicionalista de rechazar profecías y visiones como manifestaciones actuales de Dios, pero se unen a los progresistas y tradicionalistas para condenar a los neopentecostales. Cada uno de ellos, siguiendo ambiciones carnales disfrazadas de preocupaciones teológicas.

El mayor obstáculo para el avance total del socialismo en Brasil ¿Por qué no colocar los intereses de Dios por encima de los intereses humanos? ¿Por qué ayudar, directa o indirectamente, a fortalecer la izquierda secular irritada con los neopentecostales? En primer lugar fue Gilberto Carvalho, figura siniestra del PT, afirmando que la única oposición al socialismo en Brasil son las posiciones conservadoras de telepastores como Silas Malafaia y R.R. Soares que, cuando se enfrentan a temas como el aborto y la homosexualidad, hablan públicamente de lo que el PT no quiere oír, hablan de lo que está en la Biblia y educan a sus grandes audiencias en la defensa de la familia, dificultando así la inmoral hegemonía de la revolución marxista en Brasil.

José Dirceu, otra figura siniestra del PT, mostró la misma molestia. Después de todo, el PT y otros partidos socialistas están decididos a imponer el aborto y el homosexualismo en Brasil. El único impedimento son los telepastores neopentecostales.

Mientras que Jean Wyllys, el más importante diputado federal homosexual de Brasil, declara que los calvinistas son sus aliados, el PT dice que su principal enemigo es el neopentecostalismo. Y los calvinistas tradicionales, queriendo o no, acaban confirmando la declaración del diputado homosexual, uniéndose a los teólogos progresistas de Genizah y sus socios — que exaltan la ideología de izquierda — para difamar de forma sistemática al neopentecostalismo, que se 28

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muestra hoy como la única fuerza cristiana capaz de expulsar, o al menos enfrentarse a los demonios del mesianismo socialista que se han posesionado del gobierno brasileiro.

Por desgracia, usan muy mal el vasto conocimiento “bíblico” que poseen. Los líderes tradicionalistas y progresistas — que en gran medida tienen formación teológica — son expertos en afrentar a Dios en griego, hebreo y arameo, mostrando plenamente estos dones cuando apoyan a la Teología de la Liberación y atacan a pastores pentecostales, muchos de los cuales son pueblerinos, que apenas entienden el portugués, pero que ¡son muy audaces en su testimonio público! En parte, esta situación me hace recordar a los enojados teólogos judíos después que dos apóstoles de Jesús habían obrado un milagro de sanidad: “Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con Jesús (Hechos 4:13 RV60).

Sin lugar a dudas, las iglesias neopentecostales hoy en día tienen más fuerza para destronar el papel negativo del Estado como controlador y determinante de las cuestiones morales como aborto y homosexualismo. Como bien reconoció el filosofo secular brasileiro Olavo de Carvalho, el Desfile para Jesús del 2011, donde Silas Malafaia denunció ante más de 5 millones de personas al PLC 122 (un proyeto de ley anti-“homofobia”) y la tiranía del STF (Supremo Tribunal Federal) a favor de la agenda gay, ha sido la mayor manifestación en Brasil contra los inmorales mandos y desmanes del PT. Pese a ello, críticos progresistas y tradicionalistas del mundo evangélico se unieron para condenar la manifestación del Desfile para Jesús.

Las iglesias neopentecostales destronaron a la Teología de la Misión Integral desde su posición de poder en la década de 1980, impidiendo la unificación — bajo Caio Fábio, Robinson Cavalcanti, la revista Ultimato y otros — de las iglesias evangélicas de Brasil alrededor de una ideología izquierdista disfrazada de “puro evangelio”.

Con el debido apoyo (no hostilidad movida por la envidia y rancia teología) las iglesias neopentecostales podrían hacer mucho más para destronar el socialismo en otras esferas de la sociedad, ayudando a rescatar familias, niños e iglesias de las salvajes intrusiones estatales. Sin apoyo, existe el peligro de que estas iglesias entren también, al igual que la IURD, en la órbita socialista dejando el camino abierto para la Teología de la Misión Integral recuperar su trono.

Humildad para todos Ojalá las iglesias neopentecostales sigan predicando a Dios como la fuente suprema de provisión para todas las necesidades de las personas y de la sociedad, y continúen desafiando a los pobres a buscar a Dios como la fuente suprema de provisión para todas las necesidades humanas. Me gustaría también que sus líderes 29

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se enriquecieran solamente por la bendición de Dios, no a expensas de las ovejas.

Me gustaría que ellos optaran por una vida más humilde.

Del mismo modo, pastores y teólogos tradicionalistas y progresistas también deberían renunciar a su estilo de vida lujoso, grandes coches y mansiones para vivir una vida humilde.

Viviendo con humildad todos ellos tendrían más pasión por predicar a Dios como la fuente suprema de provisión para todas las necesidades de todas las personas.

Y, viviendo humildemente, todos ellos tendrían más pasión por hacer la voluntad profética de Dios condenando públicamente, como lo hizo Juan el Bautista, los políticos inmorales y los atracos del Estado “milagrero” que todo lo promete y que todo roba. ¿Por cuánto tiempo toleraremos abusivas cargas de impuestos a cambio de “milagrosas” promesas harapientas de vivienda, salud, educación y empleo? ¿Por cuánto tiempo toleraremos la mentira de que las invasivas políticas socialistas que esclavizan el bolsillo, el alma, la moral y los corazones de los ciudadanos reflejan el Reino de Dios?

Si hasta Tiradentes, que no era profeta, se rebeló contra un abusivo cargo del 20% de impuestos, ¿por qué los líderes cristianos no pueden imitar a Juan el Bautista y condenar la actual cobranza abusiva superior al 40% de impuestos, una flagrante violación del gobierno brasilero contra el pueblo y contra el mandamiento divino que prohíbe a todos, incluido el Estado, robar?

Para los lectores internacionales: Tiradentes, apodo de Joaquim José da Silva Xavier (16/08/1746 - 21/04/1792), fue uno de los líderes del movimiento revolucionario brasilero, cuyo objetivo era la total independencia de Portugal y crear una república brasilera. Tiradentes y sus compañeros fueron inspirados por la independencia de Estados Unidos. Al igual que algunos de los revolucionarios americanos, ellos eran masónicos, pero carecían de la sólida base cristiana que hizo posible la extraordinaria victoria de George Washington y otros estadounidenses. ¡La trágica ironía es que Tiradentes luchó contra un impuesto del 20%, y hoy el gobierno de Brasil cobra un impuesto del 40% al pueblo brasilero!

Versión en inglés de este e-booklet: Theology of Liberation versus Theology of Prosperity Versión en portugués de este e-booklet: Teologia da Libertação versus Teologia da Prosperidade Traducido de portugués para español por Maria Valarini.

Fuente: www.julioseveroenespanol.blogspot.com 30

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Lectura adicional en internet: Teología de la Misión Integral Nerón y sus amigos están entre nosotros Ellos están entre nosotros: activistas gays “cristianos”

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