Benditos misterios cotidianos
por Desirée de Fez
Aún no le he preguntado a Borja, gran dibujante y mejor amigo, el nombre de la chica, o chicas, a la/s que va dirigido este precioso tebeo. Tampoco creo que lo haga nunca. De caer en la tentación de hacerlo, seguro que me quedaría con la sensación de haberle obligado a desvelar el misterio que hace inolvidables las viñetas de Devuélveme mi secreto. Si lo hiciera, me quedaría con la espinita de haberle exigido, precisamente, lo que pide con tanta convicción el chaval de la portada de este cómic: que nadie desvele ese enigma, tímido y cotidiano, que hace que hasta el episodio más trivial de su romance (o no romance) parezca la mayor de las historias de amor. De formas naïf y fondo afilado, Devuélveme mi secreto va de eso, de las múltiples lecturas que damos a los gestos más vagos, de las interpretaciones —casi sobrenaturales— que hacemos de la rutina para no aceptar el final de un romance o el principio de otro. Este cómic de Borja, autor con una prodigiosa capacidad de síntesis y de contención emocional, muestra la tendencia del más común de los mortales a idealizar (en silencio, claro está) los éxitos y los fracasos sentimentales. Devuélveme mi secreto encierra en un puñado de viñetas el secreto que explica por qué una vulgar discusión puede parecernos una tragedia griega y un beso despistado, una clarísima promesa de amor.
Devuélveme mi secreto. Abril 2008. Un cómic intenso eloborado con inusitada sensibilidad, y algo de tontería, por Borja Crespo, dedicado a la pizpireta Z. Un tebeo de Arsénico Cómics · www.arsenicoproducciones.com. Maquetación: Manuel Bartual · www.manuelbartual.com. www.borjacrespo.com
Las apariencias engañan
por Ricardo Mena
Sí, sí, dejad de poner cara de “alelaos”, este tebeo lo ha escrito y dibujado Borja Crespo, alias el “Infraser”, el tipo que empezó rodando cortos gore, que definió la línea tremenda, que ha dirigido y programado festivales de cine, alguno de terror, el mismo que ha dirigido el censurado Snuff 2000 y… sí, también el tipo que baila de forma espectacular en las discotecas. Los que le conozcáis sólo por estas facetas pensaréis: esto no puede ser. Pero así es, queridos amigos, el bueno de Crespo tiene su corazoncito: ama, se enamora, sufre, llora, y lleva ese poeta que, algunos dicen, todos llevamos dentro. Aquí podéis ver un ejemplo (lo cierto es que ya dio muestras de ello en su tebeo El Cielo más alto) de lo sensible que puede ser este tipo. Con un personalísimo estilo gráfico, y unas historias cortas es capaz de llegarnos directamente al corazón, sin zarandajas, si aderezos, sin necesidad de excusarse en traumas, inicios, nudos y desenlaces, etc. Es poesía en estado puro, que emociona, conmueve, a veces desgarra. Y para eso hay que tener mucho talento. Y Borja lo tiene a espuertas…
“Devuélveme mi secreto encierra en un puñado de viñetas el secreto que explica por qué una vulgar discusión puede parecernos una tragedia griega y un beso despistado, una clarísima promesa de amor”. — Desirée de Fez